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eS ee Les evnevene ecane demas aceseconjunto de postras purists que no arin sino clau~ shrat todo arte en el lborstorio de una experimencacin tmodevnisa ain mds intsineads, 0 recwsar de manera intcans- fence cunlguierintento de creat unre contemporineo jen 1 las eensanes ence el madernismo y la cultura de mass Despues de codo, quign querria ser el Luckies de to potmoderno, 3 La cultura de masas como mujer o otro del modernismo ‘Uno deloscestas fundadores del modernism ~sexisidlgin texto fundador- es Madame Bier de Fauber. Emma Borary, {ayo emperament en palabras del narador, er "mnsentimen- tal que artsicn' adoctba leer novels, Consu estilo suo eird- ico, Floubert dscrielas ler de Emons. as novels este thn colmadas deamory de amantes, de donee persequidas que se desvanecian en pabelloaes soars, de postllones a os que maaan en rods laspardas de caballosezbalgadoshasa a mest creat pga, de bosques eenebrosos,ntigas romantics, mentor, ellos, bras y gris, barguls ale de a an, Je rseiores, de cahaleos valenes como leone, des como ‘orders, vimuosos como rade sempre bien vestidos,y que loca tnunaimares", Sesabequed propio Faubersucumbid dunes 5 égocade estudanseen el Collage de Roven al furor dels noveas ‘omintca,y bs lecturat de Emi Bowary debenrecorarse sobre Clerasfondo biogriio de Flaubert algo quelsertiosraramente Sessten de hace: Hay sin embaago dives zones para pegun- tase sie Floubertadolsceneleia eta novelasde la misra ma Guseve Raber, Haan Boar cad. Metiond Lanenet, Bot, Fiouguon aie (909929. Raabe p30 Lao even len de mt SS eee es eee eases ae ee eae ee noe ere een eae See aaa eee cece ‘que inrensS tun lusorio romancearisrocriico sensual y naar © sien labavalidad dela vida burgues otdian. Flauberse hizo Fos come uno de os padres del modernsmo, como una de * las voces paradigmticas de una stxcabasadaen el epodiin- cransigentede ln que Emir Bovary adoraba eet, En cuana a la céebye afiemaciéa de Flaubert, Madame Bounry, cet mot, podemes presumie que sabia lo que estaba diciendo,y que asextcos fueron demasiado lejos en su tencae tiva por demortarlo que Flaubect tenia en comin con Emma Bovary, sobre todo para demostar cbmo trascendiéexéici= ment edie que laaniquilé en la"vida rel". Enesasdiscu- sons, I cuestion de génerocircula de manera soerrada,y 56 hace sentirenconces mucho mis fuertemente, Con todo, Sarre analigden su monumental Lidior de a famillelas condiciones ‘socials y fimiliares de la neuosis obsesva” de Flauber que Sulyacea su fants deconeebire como mujer Sin dda, Sarre hha logrado demostrac el modo en que Flaubert ferchizé su Feoninidad imaginaéa,al mismo tiempo que compart a bos tilda! general de a época hacia ks mujeres reales, putcipando ddeun patcén dela imaginaci y el comportamiento comin tambign en a historia del modernise” CE Gea K, Zaine: Scheu: Welch ad Frei oe Sean ong an Ser ap bem ng Rowe ene 8p 439. oo 3 Lacuna de mans come mur Esevident que talidentificacén masclina coma mujer feminidad imaginasiaenelescecor masclino esl suetaa una determinacisnhistérica Aparte de as condiciones ubjetas de la neurosis en el eao de Flsuber el feémeno noes ajen0 als sioscidn cccentemente marginal delalitecturay delasaresen tuna sociedad enla cual masculnided aparece idenificadacon laccidn la iniciaiva yl progreso; con el rerreno de los nego- ‘log, industria ciency ey. Al mismo tempo,no menos tvdenrees que feminidad imaginara delor autores hombres “auesustenta su sci de rebel enteal sociedad burgue- ‘5+ poede sin mayores inconvenient estar acompaiada por 2 ‘alsin dear mujeres reales de toda actividad itera y parla ‘misoginia del propio pasando burguss. Conuael parcigmé- tien Mademe Bovary cit moi deberos iss entonees en que txise un diferencia, Chrisa Wolf en sus rellesones eras y Fecionsessobrelspreguaca "qui ca Casandra antes de que alguien esrbirs sobreell”, lo expees de siguiente manera Hemosadmindoesaobseraciin [Madame Bow cat ‘moi durante mis de cien aor. Admiramos ambien las lagrimas que Fltberederamé.ciando hiso moiea Madame Borary ye cial siguroso de ea marsvilos novela que consiguié ecsbira pesrde ss igimas.y nunca dearemes se admicalo, Peo Faubect meer Madame Bovary. Mis all de todas nuestras buenas neenconesy de lo que ep mos sobre la serearelacin entre el autor yu persovaje cada por el are, no podemos pasar poral este echo" Unaspecto de ia diferencia que results importante pars mi andlisis sobre ls inscripciones del géneroen el debate dela 1 inl ema ry Nae ok ara St Lao rameente eure demas ceultuca de masit esque lt mujer (Madame Bovary) aparece Gefnida como lectra de una lneracurn inferior —subjeva, mocional y pasa en tanto el hombre (Flaubert) emerge Como esricor de unalieraturagenuinay atdeica, ober, irbnicay eon plena conta esos meds esis. Natural mente ota definicin de la mujer que considero paradig- triieacen canta consumdor fda de lens fear ign ala mujer esrvors que compare cone “gran (macho) rmodecnisa’ el mismo spo deambicion, Wolf cial logit Eetomuradas novels delngeborg Bachmann, Tadeo For sas de mor, como cantijemplo de Flaubert: "Ingeborg Bachmann ees8 mer sin nombre en Malina, ela jee Frama en el ogmeneo dela novela The Franz Case ve simplemente no puede domina sa vda, no pucde dre for tna que no puede conver su experiencia en una hiscoria prema art pre pods pr deo ina Tuna de sus novelas, Nacldenken ker Chita T. la mit- sna Wolfcolocéen primer plano esta 'difiultad de deci yo" Tntelaque se encuena la ener qu carb La problematica Gusstign de deseo" en an ret iterario~considerada por io general como kia 0 como un lpso en a subjetvidsc~ constraye una de Ine difculades cenales del escrtor pesromintce y modernist. Habiendo creado primero lat Fondicone detrminaotes pis un tipo desubjecvidad dota olde espocficdad hic (cog carcesiana ye so tpistemlogicaen Kan, a como elempresato bus yel temfco modernc), la moderideseha vai de xs Jesvidad yh vac altamente problematic sarticuacén, (ayota de los ast moderos, hombres o nue, lo saben Peo bast con pensar en el asombroso contrast que se ‘Chie Well, Canad 9.301 3.ta cara dea como mujer advierteenieels confesidn personal yprecenciosa de Flaubere ‘Madame Bovary, Cet mi, yl farness impasibilt del estilo dela novela para camprender que existe, s, una diferencia. “Tommando en cuents la consticuica y valid social y psivolS- ice fundamentaleentedistinras de a subjtividad mascult fay dela femenina en la sociedad barguesa moderna, Ik dificult de decir "yo" dehe ser forzosamente diferente en tuna mujer escrtora, para quien sin duda la impasblitéy In coacomitante eeifiscin de I subjecividad en el produc ‘esctico no cesulea un ideal can azeacivo ¢ imperioso como pra el ectitor hombee. Después de toda, el hombre puede fegarFiclmente su propia subjetvidad a cambio del bene {Go de una meta erica mis importante, mientras pueda ase- sgerata a nivel experiencial en la vida cociiana. Concluye ear fonces Christa Wolf, perplejay enérgica "La estétca, digo, como la flasofia y Is ciencia, se ha inventado no canto para petmitirnos estar as cerca de la realidad sino, al contraria, puta alejaros de ell, para proregermos de ela™ Alejar algo, protege algo contra otra cosa, parecen ser gestosbisicos de lx {stetica modernsta desde Flaubere a Roland Barthes y otos posestructuraistas. Lo que Cheista Wolf llama realidad ten- {ria que inclu tambien los romances de Emma Bovary (es tec loslibios las inriga amorosas), puesto que Ia impug- tcidn dela Trigaliteraerliceracura pasatisa ha sido tem- preuno de los rasgos consticucivos dela cencativa modernista Sescinada a romar distancia de las crivialdades ybanalidades ela vida cotidiana. En oposicién a las pretensiones de los Gefensores dela auronomia artistic, yer'epasicié también ‘los adedlogor de la rexwualidad, ls realidades dela vida moderna y ln expansin ominosa de fa cultura de masis en todos los tineons dela efera socal escin iscriptasinvaia~ a Gea. 300 »

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