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Angel Latorre Introduccié6n al Derecho. Las ramas del Derecho Ramas del Derecho y disciplinas juridicas Dentro del Derecho, en general, se distinguen grupos o juntos de normas que, por referirse a sectores i izados de la vida social y por apoyarse en unos principios comunes que les dan trabaz6n y una coherencia interna, y los diferencian de otros grupos de normas, se consideran ramas auténomas del Derecho, como el Derecho interna- al o el Derecho penal. También las partes de la ciencia idica consagradas al estudio de cada una de esas ramas forman las correspondientes auténomas, como por volver a los ejemp dicos se contemplan linas juridicas, cuya autonomia se funda en la peculiaridad de sus métodos o en el Angulo bajo el que contemplan el Derecho. Tal es el caso, entre otros, de la Filosoffa o de la Historia juridicas. de una rama del Derecho El objeto y los métodos jurfdicos son sustancialmente uniformes, y tan- to en la doctrina como en la préctica, la mutua influencia y continua relaci6n entre las diversas ramas es habitual ¢ insoslayable. Si un proceso de especializacién es nece: rio, no es quizés aconsejable la tendencia, hoy bastar 166 INTRODUCCION AL, DERECHO extendida, a crear nuevas parcelas independientes en el campo del Derecho, porque tiende a acortar la perspecti dencia a exagerar y hasta jones que justifiquen aquella tos sectores del Derecho ofrezcan al- ides 0 sea conveniente su estudio o su ensefianza independiente, no basta para clevarlos al campo de rama auténoma cuando no presenten la acusada indi dualidad que sélo justifica esa autonomia. Derecho piblico y Derecho privado Las distintas ramas del Derecho se agrupan tradicio- nalmente segtin diversas distinciones, de las cuales quizé la més famosa por su importancia histérica y porque atin conserva una parte de su interés, y es objete de animadas polémicas doctrinales, es la distincién entre el Derecho pti- blico y el Derecho privado. En términos generales, puede que el Derecho puiblico se caracteriza porque en él existe un ejercicio del poder del Estado. Sus normas son las que van dirigidas a regular la organizac Estado y demas entes ptiblicos y sus relaciones como tales entes pablicos con los particulares. El Derecho privado aquel que regula las relaciones entre particulates, es de aquellas en que ninguna de las partes acttia revestida de po der estatal. Hay que advertir, en efecto, que en la actualidad un ente piiblico entabla con particulares relaciones de De- recho privado cuando no actiia en su condicién de érgano revestido de poder. Las relaciones de Derecho piiblico con particulares se caracterizan porque en ellas e: cidn de desigualdad entre las partes: de un la piiblico revestido de imperium; por otra, que ocupa una posicién inferior y sut te una situa- una relacién de subordinaci6n, sino de coordinacién. LAS RAMAS DEL DERECHO 167 ios hoy imperantes respecto a la dis- ‘Tales son los crite tincién entre Derecho paiblico y privado, que han sustituido iano," a la vieja opinién, basada en un célebre texto de que veia en el Derecho piiblico el dirigido a servir los inte- reses colectivos y en el privado el dedicado a atender los, intereses particulares. Es dificil, en efecto, sefialar con cla- ridad si un interés es colectivo © individual, ya que ambas categorias estén {ntimamente unidas. Evidentemente, las normas de Derecho piiblico se entiende que estan consagra- das especialmente al interés de la comunidad considerada en su conjunto, mientras que las del Derecho privado con- templan en primera linea conveniencias de los individuos. No se trata de una tajante distincién, sino de una tendencia que no proporciona, como bien ha visto la doctrina moder- na, un criterio para distinguir entre lo que es el Derecho ivado. in ha sido bastante combatida en estos jiendo de las posiciones més ra- es que le niegan todo valor o s6lo se lo conceden muy secundario, hoy domina en general la opinién de que ambos tipos de Derecho no son campos tajantemente diferenciados y aun opuestos, sino principios y criterios que se encuentran combinadlos, aunque en diversas proporciones, en cada una de las ramas de] Derecho. En realidad, para llegar al tiltimo sentido de esta distincién, hay que tener en cuenta su sig- y su trascendencia social y politica. El I siglo xix trajo como consecuen- itar lo més claramente posible el campo de actividad de los particulares del campo de zeci6n del Estado, la vida piblica del hombre como miembro del Estado de su vida privada como particular, y todo ello tanto en el terreno estrictamente politico como en el econémico. De acuerdo con el individualismo de la época, es el Derecho privado el que ha de tener la primacia, mientras que el Dere-

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