Impreso por Francisco Rincón Durán. Prohibida su reproducción.

90 Martes. 27 de mayo de 2014 • LA RAZÓN

aniversario

Te leo Los entrevistados

hablan de LA RAZÓN
«Suelo leer más LA RAZÓN en internet que en papel. Como soy un hombre formado e interesado
en la Historia Contemporánea, lo que más me interesa de vuestro diario es el comentario político
y la política internacional».

J. Beltrán- Madrid
Pablo Pérez / Catedrático de Historia –¿Los santos fuman?
–Los santos también fuman. Don Álvaro
Contemporánea de la Universidad de Navarra
Á
lvaro del Portillo será beatificado el fumaba Kent rubio. Lo más divertido es
27 de septiembre en Madrid. «Un que de joven no era fumador. Se convir-
santo en datos», es el título de la ex- tió en fumador por obediencia. Cuando
posición que la Universidad de Navarra
ha preparado sobre quien fue primer su-
cesor de San Josemaría y gran Canciller de
la Universidad de Navarra entre los años
«Los santos se ordenaron los primeros sacerdotes
del Opus Dei y San Josemaría se dio
cuenta de que ninguno de ellos, inclui-
do él mismo, fumaban para evitar que
1975 y 1994. Se trata de una muestra itine-
rante que estuvo en Pamplona hasta el 19
de mayo y recorrerá otras siete ciudades
de España. Pablo Pérez, catedrático de
Historia Contemporánea, es el comisa-
también fuman» los que simpatizaban con la Obra pen-
saran que estaba mal fumar, le invitó a
Don Álvaro a fumar. Y cogió con tanto
entusiasmo esta «orden», que le costó
dejarlo cuando tuvo que hacerlo. Dicho
rio de esta exposición que combina ar- Es el comisario de la exposición «Un santo en ahora, puede ser considerado como una
quitectura, fotografía, infografía y diseño blasfemia en tanto que atenta contra la
gráfico: «Hay mucha gente agradecida a datos», sobre Álvaro del Portillo, que estará autonomía individual de hacer lo que
Álvaro del Portillo y esta exposición nace
de este agradecimiento».
presente en ocho ciudades de nuestro país te da la gana y contra la salud, pero él,
sin embargo, lo vivió como un gesto de
–Quizá para la opi- Alberto R, Roldán
obediencia con el que
nión pública es un podía mostrar a los
hombre desconoci- demás que era algo
do, en tanto que tra- cercano.
bajó a la sombra de –¿Qué más ha des-
San Josemaría. ¿Se cubierto del nuevo
podría decir que Es- beato al preparar la
crivá de Balaguer fue exposición?
un poco más santo –He redescubierto lo
por la labor callada extraordinariamente
de Del Portillo? trabajador que era.
–Se puede decir Fue un hombre que
exactamente. Fue confió en el trabajo
un gran apoyo para para resolver los pro-
la santidad de San blemas y se dedicó a
Josemaría. Él mismo ello con una intensi-
lo reconocía y así lo dad tremenda.
recoge en la biografía –Otro azote a la ac-
de Don Álvaro. Lo tualidad, con la gene-
cierto es que en su ración «ni-ni».
vida buscó siempre –Toca verlos, pero
desaparecer, dedi- como profesor te diré
cado a servir a los que también veo a
demás. Estaba con- estudiantes que son
vencido de un valor unos grandes traba-
que ahora cuesta jadores.
encontrar: borrarse –¿Cree en la juven-
a uno mismo puede tud?
hacer muy feliz. –Como ente abstracto
–Eso en una sociedad no, pero en los jóvenes
donde prima el reco- que conozco, sí. En los
nocimiento del «yo» años 30, cuando Don
y figurar implica ir Álvaro es joven, la
contracorriente. gente tiene una sen-
–Representa lo contrario del indivi- y nunca tuvo un mal gesto. Cuando uno –Puede haber alguno que lo sea y, en sación de que el mundo está agonizan-
dualismo y del narcisismo que busca es joven en sus tareas no cae en este tipo ese caso, llevará sobre sí mismo la cruz do y justo en ese momento empezaba a
ser aplaudido. de cosas, pero cuando llevas muchos de soportar su propio aburrimiento. forjarse una generación de santos. No
–¿Le resultaría difícil vivir junto a años haciendo un mismo trabajo, des- Álvaro del Portillo no era un hombre estamos ahora en una situación más
alguien con un carisma tan marcado cubres esta heroicidad cotidiana. aburrido. Ciertamente no era dichara- crítica y seguramente hay personas tan
con San Josemaría? –Don Álvaro, ejemplo de lealtad. Otro chero ni explosivo como San Josemaría. santas como Don Álvaro viviendo ahora
–Eso habría que habérselo preguntado valor que cotiza a la baja... La gente que lo trataba asegura que era mismo.
a él directamente. Pero si uno bucea –Espero que no, por la cuenta que nos extraordinariamente bueno, próximo y –¿Somos más de ver las luces que las
cuando se abordan cuestiones de este trae. Siempre ha habido traidores, atento. sombras de nuestro entorno?
estilo, él siempre contesta que no, lo como podemos ver en la propia historia –¿Quizá somos nosotros quienes po- –Es muy probable. Tendemos a exa-
vivía como una suerte y una gran feli- evangélica, pero también de fidelidad nemos a los santos en la peana y les gerar las sombras y, a veces, es muy
cidad trabajar codo con codo toda su delicada y extrema. Prefiero mirar con hacemos lejanos, poco humanos? bueno saber ver lo que hay de positivo
vida para ayudarle. Pero, ciertamente, cierto optimismo la realidad, aunque la –Ésa es una tentación que tenemos siem- entre tanta gente que tenemos a nuestro
su papel no era fácil porque requiere situación actual no muestra, al menos pre: considerar que viven en un mundo alrededor.
una virtud clave: la humildad. en el ámbito de la opinión pública, distinto del nuestro. Realmente son unos –¿Es díficil ser santo en el año 2014?
–Y algo de paciencia, seguro. grandes ejemplos de lealtad. Pero estoy de los nuestros. Por eso en la exposición – Siempre es difícil, el Evangelio nos re-
–El fundador de la Obra dijo en una seguro de que los hay. buscamos presentar su vida cotidiana, por cuerda que es una puerta estrecha que
ocasión que Don Álvaro habría tenido –Del Portillo sube a los altares. ¿Los ejemplo, sus gustos a la hora de comer, el hay que pasar, pero está al alcance de
muchos motivos para enfadarse con él santos son unos tipos aburridos? tipo de tabaco que fumaba... cualquier bolsillo.