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Anestesia general.

El objetivo es dejar a la persona completamente inconsciente (o


"dormida") y mantenerla en este estado durante la cirugía, sin sensaciones, sentimientos de
dolor, conciencia, movimiento o memoria de la cirugía. La anestesia general se puede
administrar a través de una vía intravenosa (que requiere la inserción de una aguja en una
vena, generalmente del brazo) o mediante la inhalación de gases o vapores.
Anestesia regional. El medicamento anestésico se inyecta cerca de un grupo de nervios, y
adormece una extensa área del cuerpo (como desde la cintura hacia abajo). Una persona que
recibe anestesia regional, en general, se encuentra dormida antes de que se realice el
procedimiento. Sin embargo, los niños mayores o aquellos que se encontrarían en un riesgo
anestético no aceptable, pueden estar despiertos o sólo sedados durante el procedimiento.
Por ejemplo, si una persona tiene sobrepeso, es posible que le resulte difícil al anestesista
palpar los huesos que lo guían a la ubicación correcta de la aguja. Este tipo de anestesia
incluye epidurales, bloqueos caudales (que son similares a los epidurales, pero se colocan en
el coxis) y bloqueos espinales (que adormecen aún más la parte inferior del cuerpo).
Anestesia local. Un medicamento anestésico local adormece solo una pequeña parte del
cuerpo (por ejemplo, una mano o un área de la piel). Según el tamaño del área, la anestesia
local se puede administrar como inyección, aerosol o ungüento. Con la anestesia local, la
persona puede estar despierta, sedada o dormida. La anestesia local suele usarse para
intervenciones quirúrgicas menores y procedimientos en pacientes ambulatorios (pacientes
que llegan para someterse a una operación y se pueden ir a sus hogares el mismo día).
Probablemente, este es el tipo de anestesia que se usará si te realizan una intervención
quirúrgica en una clínica o en el consultorio médico (como el dentista o el dermatólogo).

El tipo y la cantidad de anestesia se adaptarán específicamente a tus necesidades y


dependerá de varios factores, incluidos tu edad, tu peso, el tipo y el área de la cirugía,
cualquier alergia que puedas tener y tu cuadro clínico al momento de la cirugía.

¿Cuáles son los efectos secundarios comunes?

Cuando te despiertes de la cirugía, muy probablemente te sentirás desorientado, atontado y


un poco confundido. Algunos otros efectos secundarios comunes que deben desaparecer con
bastante rapidez son los siguientes:

 náuseas o vómitos, que se pueden aliviar generalmente con un medicamento para


las náuseas
 escalofríos o temblores
 dolor de garganta (si se usó un tubo para ayudar con la respiración)

¿Cuáles son los riesgos?


Hoy en día, la anestesia es muy segura. En muy pocos casos, la anestesia puede causar
complicaciones (como ritmos cardíacos extraños, problemas respiratorios, reacciones
alérgicas a los medicamentos e incluso la muerte). Los riesgos dependen del tipo de
procedimiento, el estado del paciente y el tipo de anestesia usado. Asegúrate de hablar con el
médico, el cirujano o el anestesista sobre las inquietudes que tengas.

La mayoría de las complicaciones, en general, se pueden prevenir simplemente al


proporcionarle al anestesista, antes de la cirugía, información completa sobre:

 tu salud actual o pasada (incluidas enfermedades o afecciones como resfriados


recientes o actuales, u otros problemas como ronquidos o depresión)
 cualquier medicamento (con receta o de venta libre), suplemento o remedio a base
de hierbas que tomes
 cualquier alergia (especialmente a alimentos, medicamentos o al látex) que
puedas tener
 si fumas, bebes alcohol o tomas cualquier droga recreativa
 cualquier reacción previa que tú o algún miembro de tu familia haya tenido a la
anestesia

Para garantizar tu seguridad durante la cirugía, es extremadamente importante responder


todas las preguntas del anestesista de la forma más sincera y minuciosa posible. Lo que
puede parecer inofensivo podría incidir en la forma en que reaccionas a la anestesia.

También es importante que sigas las recomendaciones del médico sobre qué no hacer antes
de la cirugía. Probablemente no podrás comer ni beber (generalmente nada después de la
medianoche del día anterior) y es posible que debas interrumpir la administración de
suplementos a base de hierbas o de otros medicamentos durante un período de tiempo
determinado antes de la intervención quirúrgica.

Puedes estar tranquilo de que la seguridad de los procedimientos anestésicos ha mejorado


muchísimo en los últimos 25 años, gracias a los avances de la tecnología y la capacitación
extensiva que reciben los anestesistas. Cuanto más informado, tranquilo y confiado estés con
respecto a la intervención quirúrgica y la seguridad de la anestesia, probablemente más fácil
te resultará la experiencia.
 Anestesia local. Un medicamento anestésico (que se puede aplicar como una inyección, un aerosol o
un ungüento) adormece solo una pequeña zona específica del cuerpo (por ejemplo, un pie, una mano o un
área de la piel). Con anestesia local, la persona está despierta o sedada, dependiendo de lo que se necesite.
La anestesia local dura poco tiempo y suele usarse para procedimientos menores en pacientes
ambulatorios.
 Anestesia regional. El medicamento anestésico se inyecta cerca de un grupo de nervios y adormece
una extensa área del cuerpo (por ejemplo, de la cintura hacia abajo, como las epidurales que se administran
a las mujeres que están en trabajo de parto).
 Anestesia general. El objetivo es dejar a la persona completamente inconsciente (o "dormida") y
mantenerla en este estado durante la operación, sin conciencia ni recuerdo de la intervención quirúrgica.

CONCLUSION

Es un acto médico controlado en el que se usan fármacos para bloquear la sensibilidad táctil y
dolorosa de un paciente, sea en todo o parte de su cuerpo y sea con o sin compromiso de
conciencia.

2. ¿Quién Y CUÁNDO lo inventó ? El descubrimiento llegó un dentista estadounidense llamado


William Thomas Morton , que en 1846 demostró en público el poder anestésico de dicho éter en
dos operaciones diferentes, donde a ambos pacientes se le durmieron para evitar que sufrieran
ningún dolor.

 Local: Entumece una pequeña área del cuerpo. Usted permanece despierto y alerta
 Regional: Bloquea el dolor en un área del cuerpo, como un brazo o pierna. Un tipo común es la anestesia
epidural, que se usa en forma frecuente en partos
 General: Lo vuelve inconsciente. Usted no siente ningún dolor, y después no recuerda la intervención
quirúrgica

Cuáles son los efectos secundarios comunes? • Cuando te despiertes de la cirugía, muy
probablemente te sentirás desorientado, atontado y un poco confundido. Algunos otros efectos
secundarios comunes que deben desaparecer con bastante rapidez son los siguientes: • náuseas o
vómitos, que se pueden aliviar generalmente con un medicamento para las náuseas • escalofríos o
temblores • dolor de garganta (si se usó un tubo para ayudar con la respiración)

8. ¿Cuáles son los riesgos? • Hoy en día, la anestesia es muy segura. En muy pocos casos, la
anestesia puede causar complicaciones (como ritmos cardíacos extraños, problemas respiratorios,
reacciones alérgicas a los medicamentos e incluso la muerte). Los riesgos dependen del tipo de
procedimiento, el estado del paciente y el tipo de anestesia usado. Asegúrate de hablar con el
médico, el cirujano o el anestesista sobre las inquietudes que tengas.

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