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Mandala como relajacion

Dentro de las múltiples técnicas de relajación orientales, se encuentra la de pintar mándalas, los cuales son
publicados en libros parecidos a los de los libros de colorear de los niños, donde viene el mándala sólo dibujado
con líneas y el resto en blanco dispuesto para colorear. Esta técnica de relajación no requiere ninguna disciplina
expresa, como puede serlo en otras, ya que quien está haciéndolo lo colorea según sus gustos estéticos e
imaginativos. La pueden realizar personas de cualquier edad, siendo además que fortalece la creatividad.

La palabra Mandala significa círculo en sánscrito, y podemos definirla como “círculo encantado” o “círculo
mágico”.

Si observamos, vemos que el Universo está organizado de forma circular y alrededor de un centro que se encuentra
en interrelación permanente. Es así como, análogamente con la Naturaleza e inspirados en ella, los Mandalas
acompañan al hombre desde tiempos inmemoriales y están presentes en las diferentes culturas.

Al observarlos, pintarlos o meditar con ellos, podemos entrar en un camino mágico y de sabiduría, que nos lleva
de regreso a quienes somos realmente y también nos ayuda a conectarnos con el Universo del cual formamos
parte.

En momentos de crisis o peligro, la Humanidad ha vuelto, de diferentes formas -como se observa en producciones
de pueblos originarios- a lo circular. Esta búsqueda natural de auto regulación se ve acrecentada cuando en lo
externo las personas no encontramos respuestas a las necesidades más profundas del ser.

Su diseño geométrico nos transmite estabilidad y equilibrio. De esta manera, podemos recuperar nuestra armonía
innata y creatividad.

El Mandala puede ser una guía para ubicarnos en nuestro centro más profundo y así integrar los diferentes
aspectos de nuestra vida. Puede ayudarnos también a superar la sensación de desintegración que tan
frecuentemente se experimenta hoy en día.

A medida que profundizamos nuestro conocimiento en el Mandala, el potencial guardado en nuestro interior
comienza a manifestarse cada vez con mayor intensidad.

El pájaro dispone su nido y la araña teje su tela. Los planetas giran en torno al sol y las partículas bailotean
alrededor del núcleo del átomo. Una sabiduría remota parece haber trazado cada rincón de la naturaleza a partir
de un planteo circular. Sólo algunos hombres –también sabios- supieron que si creaban formas similares, el
espíritu humano estaría acompasado con el ritmo del universo; así nacieron los mandalas, diseños sagrados
inspirados en los secretos de la Naturaleza. A los mandalas tradicionales los artistas contemporáneos han sumado
nuevas y variadas combinaciones, este interés por una forma arcaica y profunda es un murmullo de salvación, un
indicio de que somos muchos los que aspiramos a encontrar la armonía invisible dispuesta por un gran Geómetra.
Julio Sánchez

Desde el punto de vista espiritual es un centro energético de equilibrio y purificación que ayuda a transformar el
entorno y la mente.

También se le define como un sistema ideográfico contenedor de un espacio sagrado.

Los mandalas son utilizados desde tiempos remotos. Tienen su origen en la India y se propagaron en las culturas
orientales, en las indígenas de América y en los aborígenes de Australia.

En la cultura occidental, fue Carl G. Jung, quien los utilizó en terapias con el objetivo de alcanzar la búsqueda de
individualidad en los seres humanos.

Jung solía interpretar sus sueños dibujando un mandala diariamente, en esta actividad descubrió la relación que
éstos tenían con su centro y a partir de allí elaboró una teoría sobre la estructura de la psique humana.

Según la Psicología, el mandala representa al ser humano. Interactuar con ellos te ayuda a curar la fragmentación
psíquica y espiritual, a manifestar tu creatividad y a reconectarte con tu ser esencial.

Es como comenzar un viaje hacia tu esencia, te abre puertas hasta ahora desconocidas y hace que brote tu sabiduría
interior. Integrarlas a tu vida te dará centro y la sensación de calma en medio de las tormentas.

El trabajo de meditación con mandalas puede consistir en la observación del mismo o el dibujo de éstos.

En el primer caso, con sólo sentarte en un lugar cómodo, lograr una respiración rítmica y profunda, y disponerte
a observar algún mandala de tu elección, puede llevarte a un estado de relajación y te sentirás más alerta ante los
hechos que suceden a tu alrededor. El proceso de observación puede durar entre tres y cinco minutos.

En segundo es pintar tus propios mandalas. Escoge un modelo que te llame la atención, selecciona los
instrumentos (colores, marcadores, acuarelas, por ejemplo), y luego instálate en un sitio tranquilo y también
puedes colocar música si lo deseas -algún mantra sería ideal- y comienza tu trabajo. No existe una un Mandala
bien o mal pintado. Dejate llevar por los colores que tu corazón sienta. Si ves, un parte del mandala que
automáticamente se te ocurrió pintarla de verde, hazlo. No lo racionalices mucho.

Si lo que hay es 2 técnicas para pintarlos, todo dependerá del tu estado de ánimo y de lo que el mandala que
desees pintar te transmita. Si crees o que necesitas ayuda para exteriorizar tus emociones, puedes colorearlas de
adentro hacia fuera; si por el contrario, quieres buscar tu centro, y conectarte con tu interior, píntalos de afuera
hacia adentro.

Este es un trabajo que puede hacer cualquier persona, sin importar su edad o religión. Es una práctica sencilla que
redundará en beneficios personales y en la consecución del equilibrio interno.

Aparte, otra función de los mandalas, es bloquear energías negativas. Colocar Mandalas de adorno en tu pieza,
lugar de meditación o cualquier parte de tu casa; evita que energías negativas entren el ambiente. Colocados en
tu habitación de descanso, va a generar en ti un mejor sueño.

Creando tus propios Mandalas

Existen talleres y cursos para la creación de Mandalas, pero en éste caso no hay mejor mentor que tu mismo. Para
quien nociones básicas de dibujo de figuras geométricas lo mejor es experimentar. Si por el contrario, realmente
no tienes idea de cómo empezar lo mejor sería que hicieras un curso con los conceptos muy básicos para luego tu
experimentar. Dejarse llevar y escuchar al corazón es la llave.

Todo en el Universo es geometría. Somos Mandalas en Movimiento interactuando unos con otros en el océano
mandálico de la existencia.

El Sonido es el origen de la existencia. La música y la Armonía se expanden a través del Universo creando
maravillosas formas y geometrías. A esas formas y geometrías corresponden nuestros cuerpos de Luz y nuestra
forma Multidimensional. Es por ello, que pongo a tu disposición la creación de los Mandalas personalizados.
Un Mandala personalizado es creado en base a tu frecuencia. El sonido emitido por tu propia geometría de Luz.
Sonido que se traduce en forma y color, dando origen a la creación de estos bellos Mandalas Cósmicos, creados
especialmente para Ti!

Cada Mandala es único e irrepetible y lleva impresa tu propia impronta energética Cósmica y Divina.

Guiados por tu fecha de nacimiento obtenemos la Nota Musical que resuena con tu firma galáctica, la cual nos
ayudara a realizar el Mandala.

Todo el proceso se realiza mediante la Conexión con tu Ser Superior.

Si no te animas todavía a crear tus propios mandalas, en Internet hay un montón de Mandalas para
pintar/colorear. Basta con poner en google “Mandalas para pintar” para encontrar imágenes de Mandas para
colorear. Los hay desde los más fáciles a los más difíciles. Repito algo que ya comenté arriba, dejensé llevar para
pintarlos. Eviten racionalizarlo, lo que no quiere decir que estaría mal racionalizarlo. Pero digamos eviten decir
“ah! le puse verde claro aqui… y aqui le pongo verde oscuro para que combine…”. Escuchen el color que les dice
su interior, y pintarlos sin prejuicios. Ya que no hay una forma correcta o incorrecta de pintarlos. Si alguien les
dice “que feucho que te quedó…” la mejor respuesta sería “a mi me gusta, y es como sentí pintarlo…”.

. Cómo interpretar un Mandala

Aquí encontrarás una explicación de la simbología de los elementos que componen un mandala. Es una
interpretación del mandala que has escogido y los colores que has utilizado.

Elementos que forman la estructura de un Mandala

- El círculo hace referencia a las cosas que no tienen nombre y que no se pueden unificar, mientras que el punto
central representa el núcleo divino o el yo.

- La línea horizontal separa la parte superior del mundo de la inferior. Es símbolo de la energía de origen materno.

- La línea vertical conecta el mundo terrenal con el sagrado y simboliza la energía.

- La cruz del mundo conecta la sustancia de origen materno con la energía, formando un punto central.

- La espiral significa desarrollo y dinámica del proceso interior.

Símbolos de las formas de un Mandala y su Significado

Ojo: clarividencia, ojo de Dios y el Yo.

Árbol: vida que se renueva por sí misma, conexión con el subconsciente, conciencia, crecimiento, sentimientos
maternales, arraigo pero también estancamiento, personalidad.

Rayo: iluminación, sabiduría, energías espirituales, curación.


Flor: belleza, fugacidad, alma, matriz.

Triangulo (vértice hacia arriba): fuerza de vida, cambios, masculinidad, creatividad.

Triangulo (vértice hacia abajo): agresiones contra uno mismo.

Corazón: amor y felicidad, sol, valor, sentimientos, reconocimiento y voluntad.

Hexágono: unión, finalización de trabajos, armonía y satisfacción.

Círculo: movimiento, lo absoluto, Dios, el Yo.

Cruz: unión cielo y tierra, subconsciente y consciencia, vida y muerte, dificultades, reconocimiento aspectos
oscuros, superación de la propia estructura instintiva.

Laberinto: búsqueda del propio centro.

Cuadrado: equilibrio, razonamiento, perfección, transformación del espíritu en materia.

Cuadratura del círculo: unión cielo y tierra, opuestos equilibrados, energía del yo, purificación.

Rueda: empuje y dinámica.

Arco iris: unión Dios-Hombre, principio masculino y femenino, fertilidad, renacimiento.

Mariposa: auto-renovación del alma, cambios, muerte y renacimiento.

Telaraña: feminidad, estado fetal, niñez, nuevo comienzo.

Espiral: fuerza de vida, energías curativas, afán de unidad.

Estrella: persona realista, sentido identidad, autoconciencia, superación, individualidad.

Animal: aspectos instintivos, símbolo para estados del subconsciente.

Gotas: masculinidad, fertilidad, purificación interior.

Pájaro: alma humana, símbolo del espíritu, fantasía.

Los números en los Mandalas y si significado

Las formas no son otra cosa que números cambiados por imágenes y siempre son factores que ordenan el cosmos.
No solo determinan la esencia de todas las cosas existentes en la naturaleza, sino que también las dominan, ya que
son las causas de su orden.

Uno: Postura erguida del ser humano, símbolo del origen, unidad y totalidad, Dios e individualidad, centro como
unión de fuerzas, integridad, vivencias infantiles.

Dos: gemelos, el oponente, su pareja, creación y procreación pero también separación, contradicciones y
diferencias, dudas y conflictos, materia, Yin.

Tres: movimiento, vitalidad, estímulo, proceso, símbolo para el hombre, la mujer y el niño, lo nuevo y las
realizaciones, independencia, lo divino, auto-reconocimiento, Yan.

Cuatro: totalidad, alejamiento y tranquilidad, unifica opuestos, racionalidad, desarrollo de la conciencia,


búsqueda del propio lugar en la vida y del auto-reconocimiento.

Cinco: unidad, símbolo del centro y del amor, conexión armónica del Yin y Yan, rechazo del mal, salud,
sexualidad, sensualidad, conexión con la realidad, sueños.

Seis: femenino y masculino, unidad y penetración, unión de contradicciones, creatividad, perfección, final de un
proceso creativo, satisfacción y realización.

Siete: cielo y tierra, vía hacia desarrollo personal, final de una etapa en la vida, trabajo interior.
Ocho: orden y equilibrio cósmico, felicidad, armonía, simetría, infinito, constante cambio y renacimiento,
totalidad, el propio Yo.

Nueve: mente creativa, símbolo del cielo, enigma existencia humana, energías espirituales positivas.

Diez: círculo cerrado, unidad y totalidad, perfección y principio de Dios, virtud y moral, matrimonio, visión real
de la vida.

Once: conflictos indisolubles, pecados, caos, transición.

Doce: unidad y totalidad, felicidad, cumplimiento en el tiempo y espacio, perfección, redención, ciclo vital de la
naturaleza, acabado, eterna espiral del desarrollo.

Trece: engaño e infidelidad, final infeliz, culminación del proceso interior.

El Simbolismo en los colores

AMARILLO

Por excelencia es el color del sol, de la intuición y de la iluminación. Atributo del Dios Apolo, de la generosidad y
del intelecto. Tradicionalmente, corresponde al elemento aire.

Positivo: alegría, confianza, intuición, constancia, crecimiento, sabiduría, liberación, espíritu emprendedor y
fantasía.

Negativo: superficialidad, envidia, presunción y miedo a las dificultades económicas.

AZUL

Tradicionalmente, es el color del cielo, del espacio y del mar, profundidad y pensamiento. Relacionado con el
elemento aire y con los signos de piscis y sagitario.

Positivo: paz, tranquilidad, relajación, serenidad, seguridad, bondad y lealtad.

Negativo: aburrimiento, paralización, vacío e ingenuidad.

BLANCO

Surgido de la combinación o visión simultánea de todos los colores. Es el símbolo por excelencia de la pureza y la
alegría. En la cosmología hindú representa el ascenso hacia la luz originaria.

MARRÓN

Elemento de la tierra, de la arcilla pero también de las hojas muertas, del otoño y de la tristeza. Para los romanos
y cristianos es símbolo de humildad y pobreza.

Positivo: calidez, tranquilidad, proximidad a los hechos sencillos, humildad, materno.

Negativo: tristeza, pobreza, materialidad, dureza y frialdad.

NARANJA

Color de las llamas y del fuego. Simboliza el orgullo y la ambición.

Positivo: optimismo, juventud, salud, alegría, sociabilidad, ambición, ternura, cordialidad, valor, vigor, franqueza
y confianza en uno mismo.

Negativo: Afán de prestigio y frivolidad.

NEGRO Y GRIS

El negro, es en realidad, la carencia de color, el caos primigenio. Representa la tierra, el luto o la tristeza. Se
relaciona con los signos de Acuario y Capricornio, con los planetas Saturno y Plutón y con el hierro.

Positivo: renovación, invencibilidad y dignidad.


Negativo: obligación, desesperación, desamparo, muerte, destrucción, paralización, tristeza, pérdida, miedo,
amenaza y oscuridad.

ROJO

Color por excelencia del amor y la pasión, de la sangre, el fuego y los sentidos, que corresponde a las cualidades
de la valentía y osadía. Atributo del Dios Marte, de la Diosa madre de la India, del planeta Júpiter (rojo oscuro) o
del planeta Marte (rojo claro), y en general, del principio vivificador.

Positivo: amor, sensualidad, pasión, confianza en sí mismo, fuerza, resistencia, conquista, independencia y alegría
de vivir.

ROSA

Color de la carne y de la sensualidad, asociado con el romanticismo y el amor.

Positivo: romanticismo, elegancia, cariño, dominio de la agresividad, abnegación, altruismo, suavidad, discreción
y feminidad.

Negativo: necesidad de protección, inhibición y sentimentalismo.

VERDE

Situado entre el negro y el rojo, entre la vida y la muerte. Para los egipcios era el atributo de Osiris (Dios de la vida
y de los muertos).Tradicionalmente, representa al agua. Según la interpretación cromática, este color se atribuye
a la naturaleza y a la fertilidad.

Positivo: esperanza, naturaleza, equilibrio, crecimiento, juventud, constancia, vida, voluntad, curación, belleza,
simpatía, integridad, bienestar, prestigio, purificación y regeneración.

Negativo: falta de sinceridad, ambición y porder

VIOLETA

Suma del azul (devoción) con el rojo (pasión).Simboliza nostalgia y recuerdo y posee las cualidades de prudencia,
modestia, amor a la verdad y arrepentimiento.

Positivo: magia, espiritualidad, inspiración, sentimentalismo, individualismo y superación de las contradicciones.

Negativo: melancolía, pena, abandono y renuncia.

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