El plagio violenta los derechos del autor

Desde el inicio los seres humanos hemos sentido la necesidad de comunicarnos, expresar
nuestras ideas y dar a conocer nuestras invenciones, este deseo que nace de la capacidad
que poseemos de socializar ha permitido transmitir lo que pensamos, sabemos y hacemos.
Hoy existe un gran volumen de información que llega a nosotros desde diferentes medios,
información que en muchas ocasiones nos instruye, enseña, retroalimenta, informa y hasta
nos daña, es tarea de todos nosotros como consumidores de ésta revisarla
minuciosamente, extraer lo que nos beneficia y darle siempre el uso correcto. En la
actualidad existen diferentes posturas sobre el trato que debemos darle a la información,
algunos autores piensan que debe ser un bien público mientras otros argumentan que debe
expandirse como producto comercial.

Así como la luz, el calor y el aire, no pueden ser confinados o poseídos de manera
exclusiva, sino que se expanden por el espacio permitiendo a todas las personas
vivir y desarrollar su ser físico, las ideas producto del pensamiento, lo mismo que la
información, el conocimiento, las invenciones, los descubrimientos científicos y la
creación artística, se deberían poder difundir libremente, sin estar sujetos a la
propiedad exclusiva, permitiendo a todas las personas desarrollar su ser cultural
como partícipes activos de la sociedad.
Zapata Martha (s.f) p.1

Comprendiendo lo expuesto por la autora anterior, creemos que es importante que exista
flujo e intercambio de información para que el conocimiento y el saber puedan expandirse,
pero, también pensamos que es necesario que todo hallazgo producto del esfuerzo y la
dedicación de otros sea recompensado, valorado y respetado, ya que muchas personas
son capaces de apropiarse de ideas, documentos, proyectos, inventos e investigaciones
sin llevar a cabo un mínimo esfuerzo.

Steinmuelle (s.f) menciona que:

La información tiene importantes propiedades económicas que no comparte con
otros productos, a saber: carácter de no excluible; es decir, la posesión de
información por parte de un individuo no impide a otro utilizarla.
La no rivalidad en el uso: proporcionar una copia de información no disminuye la
propiedad de la información.
Bajos costos marginales de reproducción: una vez que se ha producido una primera
copia de información, las copias siguientes son mucho más baratas de reproducir.
Zapata Martha (s.f) p.1

Esto nos enseña que todos podemos producir cualquier tipo de información, ponerla a
disposición de otros para ser intercambiada y usada, pero para que pueda ser un bien
público y comercial se le deben asignar derechos de autor, esto con el fin de limitar su
reproducción. Así lo propone: Steinmuller (2002) citado por Zapata Martha (s.f) p.2
“propietarios legítimos” de la información, se establecen las condiciones iniciales para el
funcionamiento de un mercado. Con estas medidas se está haciendo un esfuerzo por
garantizar que los derechos que tiene un autor sobre la información que posee sean
respetados y difundidos dando mérito a quien lo creó.

Los derechos de autor según la Ley 23 de 1982 en el capítulo I, artículo 2

es:
Toda producción del dominio científico, literario o artístico que pueda
reproducirse por cualquier forma de impresión o de reproducción, por
fonografía, radiotelefonía o cualquier otro medio conocido o por conocer. Los
derechos de autor reconocen a los autores, por un lado, derechos
personales sobre sus obras, y por el otro, derechos exclusivos para explotar
económicamente su producción intelectual.
Congreso de la república de Colombia (1982).

Con todo esto debemos tener claro que la información tiene un autor que debe ser
reconocido por su labor, nunca debemos tomar ideas, pensamientos, proyectos y atribuirlos
como propios, porque existen leyes creadas para proteger los derechos de quien los
produjo y al violentarlos cometemos un delito llamado plagio.
El plagio según (Girón, 2008, p6) ocurre cuando se toman ideas o palabras escritas por
otros sin reconocer de forma directa el haberlo hecho.
E-Ciencias de la información, (2012).
Son diferentes los tipos de plagio, pero en esta ocasión mencionaremos los más comunes:
auto-plagio, falsa autoría, envío doble, robo de material, copias sin autorización de código
de fuente, copiar y pegar, parafraseo inapropiado, referencia perdida, referencia falsa,
fabricación de datos, robo de ideas, plagio intencional, accidental o sin intención. En nuestro
rol como maestrantes investigativos nos hemos propuesto ser cuidadosas y cautelosas para
no cometer este grave error, por ello; estamos dispuestas a no publicar nada bajo una falsa
autoría, la cual se presenta según:
(Imran, 2010, p.29):
Cuando se incluye el nombre de una persona como el autor de un artículo
sin que esa persona haya hecho contribución alguna en la realización del
mismo. Incluye por ejemplo pagar o contratar alguien para que escriba un
artículo y luego incluya su nombre como el autor de éste.
E-Ciencias de la información, ( 2012.p4)

Siendo conscientes de esto, y entendiendo claramente sus implicaciones podemos afirmar

que desde nuestra investigación no pretendemos robar ningún material, toda la información
que utilizaremos lo haremos respetando los derechos de autor y dando el crédito a quien le
corresponde. Conviene subrayar que, el robo de material está considerado por (Imran,
2010, p.29) citado por E-Ciencias de la información, (2012.p6) como copiar sin autorización
material perteneciente a otra persona. Por lo tanto, no copiaremos y pegaremos ningún tipo
de texto sin la debida referencia, pues para (Imran, 2010, p.29) se comete plagio cuando
se copia un texto de una fuente y luego se pega en un trabajo sin citarlo adecuadamente”.
E-Ciencias de la información, ( 2012.p6). Nos esforzaremos por no utilizar el parafraseo
inapropiado, porque nuestra intención es utilizar todo nuestro vocablo para plasmar
nuestras ideas, sin necesidad de “intercambiar palabras de una oración o un párrafo” como
lo plantea la revista E-Ciencias de la información, (2012.p6), al citar a (Imran, 2010, p.30).
Evitaremos en todo el proyecto de grado de hacer referencias falsas, nuestra misión va
encaminada a buscar todas las fuentes posibles que respalden nuestra investigación, no es
opción para nosotras inventar ninguna cita para rellenar los espacios, ya que esto también
es plagio según la revista E-Ciencias de la información, (2012.p6), al citar a (Imran, 2010,
p.30) “Algunos estudiantes a veces ponen muchas referencias solo para tratar de llenar el
artículo, sin asegurarse que las referencias estén incluidas en su apropiado contexto”.
Indudablemente no fabricaremos ningún dato, no estamos dispuestas a inventar cifras para
alterar el resultado de nuestra investigación estamos comprometidas a respetar los
resultados que arroje esta.

Para (Imran, 2010, p.31):

La manipulación y falsificación de los resultados de una investigación refleja
una falta muy seria de ética por parte del investigador involucrado en dicho
acto. Una posible causa de la falsificación de los datos es una falta de
competencia por parte del investigador en el campo de la investigación.
E-Ciencias de la información, (2012.p6)

No robaremos las ideas de otros autores, creemos que tenemos todas las capacidades para
producir nuestras ideas y cuando nos apoyemos en las ideas de otros no olvidaremos
citarlas porque como dice: (Imran, 2010, p.31)” Se le debe dar el crédito respectivo a la
fuente original de la idea y a la vez aclarar en el texto cuál es la contribución que se está
realizando con base a esa idea. (E-Ciencias de la información, 2012.p6).

Según (McCuen,2008) citado por E-Ciencias de la información, (2012.p7)

El acto de cometer plagio, no es una simple decisión de un solo paso, más
bien es un proceso de varias etapas. Primero la persona que comete plagio
recibe cierto estímulo en forma de retroalimentación de su pobre desempeño
o rendimiento, luego esta persona ve que alternativas tiene a la mano para
compensar ese rendimiento y posteriormente buscar información relevante
a estas alternativas que posee, finalmente evalúa las alternativas que tiene
y toma la decisión de si llevar a cabo el plagio o no.

Retomando lo dicho por el autor también pensamos que estos actos indebidos son
maquinados en la mente y luego llevados a la práctica, por tal razón no consentiremos, ni
alimentaremos ese tipo de pensamientos para no dar origen a este tipo de plagio.
Imran, (2010, p.32) quien es citado por E-Ciencias de la información, (2012.p7) expresa:
 Estos son algunos ejemplos de plagio intencional se dan al pagarle a otra
persona para que realice un trabajo y luego hacerlo pasar como propio, robar
un trabajo o parte de este, copiar ideas o palabras de otra persona a
sabiendas que no son propias.

Es necesario aclarar que también se puede cometer plagio accidental o sin intención, por
eso se requiere estar muy atentas cuando produzcamos y referenciamos información para
que no se nos pase ningún dato trascendental por alto que dañe nuestra investigación.

Para (Núñez, s.f, p.5) E-Ciencias de la información, (2012.p7)

Se puede cometer plagio de forma accidental al olvidar hacer referencia de
dónde se obtuvo cierta información, cuando existe confusión de la fuente
original de la información, se parafrasea sin alejarse realmente del texto
original de manera que queda muy similar y no se referencia
apropiadamente, entre otros.
E-Ciencias de la información, (2012.p7).

Finalmente, así como existen diferentes formas de cometer plagio, también existen distintos
métodos para rastrearlos, pues en el mundo de la globalización la incorporación de
herramientas tecnológicas es una ventaja que facilita la detección del fraude. Debido a esta
oportunidad que ofrece la implementación de las tecnologías en el proceso educativo, las
universidades han aprovechado este recurso para utilizar software anti plagios para verificar
que las producciones de los estudiantes sean auténticas. Hoy tomaremos como ejemplo el
software Dupli Checker el cual es según la revista Universia, la cual cita:
“6 Herramientas para detectar el plagio”… (2017)
Esta herramienta detecta de forma rápida y efectiva la existencia de plagio
copiando y pegando un fragmento de texto de una extensión máxima de
hasta 1000 palabras por búsqueda. También ofrece la opción de subir
archivos en formato Word. El servicio es totalmente gratuito y para hacer una
búsqueda rápida no necesita registro previo. Si deseas utilizarlo de manera
frecuente puedes registrarte, también de manera gratuita, y tendrás permiso
para realizar hasta 50 búsquedas diarias.

Hemos decidido probar este texto producto de nuestra autoría con el software anteriormente
mencionado, con el fin de dar a conocer sus bondades y para aprender a utilizarlo, ya que
es una herramienta fundamental en nuestras futuras producciones. Seguido del texto les
dejamos unos pantallazos de los resultados arrojados por el software, para que puedan
juzgar su funcionalidad.
Luego de observar la información arrojada por el software, podemos ver en las imágenes
que no fue detectado plagio en la producción de nuestro texto, hoy ratificamos que la
implementación de este tipo de herramientas es necesaria en la construcción de nuestro
proyecto investigativo y el conocimiento adquirido se constituye en un gran fundamento
para no violentar la ley. Estamos decididas y motivadas a esforzarnos para proponer una
investigación respetuosa con el derecho de autor.
 Referencia Bibliográficas

Congreso de la República de Colombia. (1982) capítulo I, Disposiciones generales.

Artículo 2, Ley sobre derechos de Autor.

E-Ciencias de la información, Revista electrónica publicada por la escuela de

Bibliotecología y Ciencias de la información, Universidad de Costa Rica, 2060 San
José de, Costa Rica, recuperado de http://ebci.ucr.ac.cr.

6 Herramientas para detectar el plagio en trabajos escritos, revista Universia, recuperado

de http://noticias.universia.com.ar/

Zapata Rendón Martha Cecilia, Derechos de autor y licencia Creative Commons (s.f)
recuperado de
http://aprendeenlinea.udea.edu.co/lms/men/docsoac1/0104_licenciamiento.pdf