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Fracturas

Introducción
Una fractura es una ruptura, generalmente en un hueso. Si el hueso roto rompe la piel,
se denomina fractura abierta o compuesta.

Las fracturas en general ocurren debido a accidentes


automovilísticos, caídas o lesiones deportivas. Otras causas son la pérdida de masa
ósea y la osteoporosis, que causa debilitamiento de los huesos. El exceso de uso puede
provocar fracturas por estrés, que son fisuras muy pequeñas en los huesos.
Los síntomas de una fractura son

 Dolor intenso
 Deformidad: La extremidad se ve fuera de lugar
 Hinchazón, hematomas o dolor alrededor de la herida
 Problemas al mover la extremidad
Debe obtener ayuda médica de inmediato ante una fractura. Tal vez tenga que usar un
yeso o una férula. Algunas veces es necesario usar cirugía para colocarles placas,
clavos o tornillos y así mantener el hueso en su lugar.

Qué es una fractura

El sistema esquelético, está compuesto por 206 huesos, los cuales,


proporcionan soporte, permiten el movimiento y protegen los órganos
internos del cuerpo.

Cómo se produce una fractura:

En ocasiones, se aplica demasiada presión sobre un hueso y éste se


rompe. Caídas, golpes con un objeto, torcerse o doblarse el hueso son
algunas de las causas más normales de fracturas.

Terminología:

Fractura incompleta o fisura: se emplea cuando el hueso sólo está


agrietado o parcialmente fracturado, en ella el hueso no se quiebra
completamente. Suele ser el resultado de una lesión relativamente
menor.

Fractura en tallo verde: es una fractura incompleta, que semeja el


quiebre de una rama de un árbol joven. Sólo uno de los lados del hueso
se fractura y el hueso se dobla.

Fractura completa: el hueso se fractura en partes.


Fractura simple: es una fractura completa en la que el hueso se
quiebra en dos fragmentos. Esta fractura puede ser transversal (en
línea recta a través del hueso), oblicua (en ángulo) y espiral (debido a
un movimiento de torsión). Este tipo de fractura generalmente es el
resultado de una lesión grave.

Fractura conminuta o multifragmentaria: es una fractura


completa en la que el hueso se quiebra en varios fragmentos.

Tratamientos

Para una fractura de tallo verde o una fisura, generalmente, es


necesario inmovilizar el hueso con yeso y esperar hasta que se
consolide.

Las fracturas simples y las conminutas, normalmente, se inmovilizar el


hueso con un yeso o a veces con clavos, tornillos y placas.

Todas las fracturas deben considerarse seriamente. Si cree que


se ha fracturado un hueso, debe buscar atención médica
inmediatamente.

ntroducción
Las fracturas son soluciones de continuidad que se originan en los huesos, a consecuencia
de golpes, fuerzas o tracciones cuyas intensidades superen la elasticidad del hueso.
En una persona sana, siempre son provocadas por algún tipo de traumatismo, pero existen
otras fracturas, denominadas patológicas, que se presentan en personas con alguna
enfermedad de base sin que se produzca un traumatismo fuerte.
Es el caso de algunas enfermedades orgánicas y del debilitamiento óseo propio de la vejez.
2. Clasificación
Existen varios tipos de fractura, que se pueden clasificar atendiendo a los siguientes
factores: estado de la piel, localización de la fractura en el propio hueso, trazo de la fractura,
tipo de desviación de los fragmentos y mecanismo de acción del agente traumático.
Según el estado de la piel
 Fracturas cerradas. Son aquellas en las que la fractura no comunica con el exterior, ya
que la piel no ha sido dañada.
 Fracturas abiertas. Son aquellas en las que se puede observar el hueso fracturado a
simple vista, es decir, existe una herida que deja los fragmentos óseos al descubierto.
Unas veces, el propio traumatismo lesiona la piel y los tejidos subyacentes antes de
llegar al hueso; otras, el hueso fracturado actúa desde dentro, desgarrando los tejidos y
la piel de modo que la fractura queda en contacto con el exterior.

Según su localización
Los huesos largos se pueden dividir anatómicamente en tres partes principales: la diáfisis,
las epífisis y las metáfisis.
La diáfisis es la parte más extensa del hueso, que corresponde a su zona media.
Las epífisis son los dos extremos, más gruesos, en los que se encuentran las superficies
articulares del hueso. En ellas se insertan gran cantidad de ligamentos y tendones, que
refuerzan la articulación.
Las metáfisis son unas pequeñas zonas rectangulares comprendidas entre las epífisis y la
diáfisis. Sobre ellas se encuentra el cartílago de crecimiento de los niños.
Así, las fracturas pueden ser, según su localización:
 Epifisarias (localizadas en las epífisis). Si afectan a la superficie articular, se denominan
fracturas articulares y, si aquélla no se ve afectada por el trazo de fractura, se denominan
extraarticulares.

Cuando la fractura epifisaria se produce en un niño e involucra al cartílago de crecimiento,


recibe el nombre de epifisiólisis.
 Diafisarias (localizadas en la diáfisis). Pueden afectar a los tercios superior, medio o
inferior.
 Metafisarias (localizadas en la metáfisis). Pueden afectar a las metáfisis superior o
inferior del hueso.

Según el trazo de la fractura


 Transversales: la línea de fractura es perpendicular al eje longitudinal del hueso.
 Oblicuas: la línea de fractura forma un ángulo mayor o menor de 90 grados con el eje
longitudinal del hueso.
 Longitudinales: la línea de fractura sigue el eje longitudinal del hueso.
 En «ala de mariposa»: existen dos líneas de fractura oblicuas, que forman ángulo entre
si y delimitan un fragmento de forma triangular.
 Conminutas: hay múltiples líneas de fractura, con formación de numerosos fragmentos
óseos.

En los niños, debido a la gran elasticidad de sus huesos, se producen dos tipos especiales de
fractura:
 Incurvación diafisaria: no se evidencia ninguna fractura lineal, ya que lo que se ha
producido es un aplastamiento de las pequeñas trabéculas óseas que conforman el
hueso, dando como resultado una incurvación de la diálisis del mismo.
 En «tallo verde»: el hueso está incurvado y en su parte convexa se observa una línea de
fractura que no llega a afectar todo el espesor del hueso.

Según la desviación de los fragmentos


 Anguladas: los dos fragmentos en que ha quedado dividido el hueso a causa de la
fractura forman un ángulo.
 Con desplazamiento lateral: las dos superficies correspondientes a la línea de fractura no
quedan confrontadas entre si, por haberse desplazado lateralmente uno o los dos
fragmentos.
 Acabalgadas: uno de los fragmentos queda situado sobre el otro, con lo cual se produce
un acortamiento del hueso afectado.
 Engranadas; uno de los fragmentos ha quedado empotrado en el otro.

Según el mecanismo de producción


 Traumatismo directo. La fractura se produce en el punto sobre el cual ha actuado el
agente traumático. Por ejemplo: fractura de cúbito por un golpe fuerte en el brazo.
 Traumatismo indirecto. La fractura se produce a distancia del lugar donde ha actuado el
agente traumático. Por ejemplo: fractura del codo por una caída sobre las palmas de las
manos.
 Contracción muscular brusca. En deportistas y personas con un
gran desarrollo muscular se pueden producir fracturas por arrancamiento óseo al
contraerse brusca y fuertemente un músculo determinado. También se han observado
fracturas de este tipo en pacientes sometidos a electroshok.
3. Síntomas
Aunque cada fractura tiene unas características especiales, que dependen del mecanismo
de producción, la localización y el estado general previo del paciente, existe un conjunto de
síntomas común a todas las fracturas, que conviene conocer para advertirlas cuando se
producen y acudir a un centro hospitalario con prontitud. Estos síntomas generales son:
 Dolor. Es el síntoma capital. Suele localizarse sobre el punto de fractura. Aumenta de
forma notable al menor intento de movilizar el miembro afectado y al ejercer presión,
aunque sea muy leve, sobre la zona.
 Impotencia funcional. Es la incapacidad de llevar a cabo las actividades en las que
normalmente interviene el hueso, a consecuencia tanto de la propia fractura como del
dolor que ésta origina.
 Deformidad. La deformación del miembro afectado depende del tipo de fractura.
Algunas fracturas producen deformidades características cuya observación basta a los
expertos para saber qué hueso está fracturado y por dónde.
 Hematoma. Se produce por la lesión de los vasos que irrigan el hueso y de los tejidos
adyacentes.
 Fiebre. En muchas ocasiones, sobre todo en fracturas importantes y en personas
jóvenes, aparece fiebre después de una fractura sin que exista infección alguna. También
puede aparecer fiebre pasados unos días, pero ésta es debida, si no hay infección, a la
reabsorción normal del hematoma.

4. Complicaciones de las fracturas


 Formación de un callo óseo (proceso normal de consolidación de una fractura)
excesivamente grande, que puede comprimir las estructurasvecinas, causando molestias
más o menos importantes.
 Lesiones de los vasos sanguíneos, que pueden dar lugar a trombosis arteriales, espasmos
vasculares y a la rotura del vaso, con la consiguiente hemorragia. Este tipo de lesiones
puede provocar también gangrena seca, debida a la falta de irrigación del miembro
afectado.
 Estiramientos, compresiones y roturas nerviosas, que se pondrán de manifiesto con
trastornos de la sensibilidad y alteraciones de la motilidad y la fuerza musculares.
 Cuando la fractura ha sido articular, puede dejar como secuelas: artritis, artrosis y
rigidez posterior de la articulación.
 Las fracturas que afectan al cartílago de crecimiento en los niños pueden ocasionar la
detención del crecimiento del hueso fracturado.
 Infección de la zona fracturada, cuando en ella se ha producido herida.

5. Cómo actuar en casa


 Antes de actuar sobre la propia fractura, hay que atender a la respiración y al ritmo
cardiaco. Si el accidentado no respira, es inútil intentar solucionar la fractura.
 Si es preciso, se realizará masaje cardiaco y respiración artificial boca a boca.
 Si el accidentado respira pero está inconsciente, hay que procurar mantener libres sus
vías respiratorias- Para ello se pondrá de lado la cabeza del paciente, con el fin de que no
pueda aspirar ninguna secreción o vómito, en caso de que se produzca. Luego se debe
tirar de la lengua hacia fuera, para evitar que se obstruya la glotis.
 Una vez controlada la respiración, puede prestarse atención a la fractura. Ante todo, no
se debe movilizar el foco de fractura, porque podrían desplazarse los fragmentos óseos y
hacer más difíciles la reducción y la consolidación. Además, la movilización produce un
intenso dolor.
 No se debe intentar quitar la ropa al accidentado. Esta maniobra debe ser llevada a cabo
por personal especializado.
 La inmovilización se puede realizar de distintos modos, según la zona que se haya
fracturado y el material de que se disponga.
 Una vez inmovilizada la fractura, se trasladará al accidentado al centro hospitalario más
cercano.
 Cuando se sospeche que puede haber fractura de la columna vertebral, la conducta más
prudente es no tocar al paciente, cubrirle con alguna prenda de abrigo para que no se
enfríe y llamar a una ambulancia para que sea trasladado con rapidez a algún centro
hospitalario.

6. Sistemas de inmovilización
Los sistemas más comunes son el cabestrillo y el entablillado, ambos de fácil ejecución.
Cabestrillo
Se puede utilizar para inmovilizar cualquier tipo de fractura de los miembros superiores.
 Mover la mano del miembro afectado hacia el hombro contrario, doblando el codo y
procurando que el brazo quede pegado al cuerpo.
 Doblar en triángulo un pañuelo grande y pasarlo con mucho cuidado por debajo del
antebrazo del paciente.
 Llevar la punta del pañuelo que se encuentra más próxima al cuerpo del accidentado
hasta la nuca.
 Llevar el otro extremo del pañuelo también hasta la nuca, para anudarlo con el anterior,
pasándolo por delante del cuello.

Cuando no se dispone de un pañuelo cuadrado, se puede improvisar un cabestrillo con un


cinturón, una venda corriente o cualquier trapo alargado, del siguiente modo:
 Rodear con el útil que se haya elegido la muñeca del brazo herido, con una sola vuelta. Si
es una venda o similar, se puede doblar en dos, rodear la muñeca y pasar los dos
extremos a la vez por dentro del doblez. Luego se hace correr la venda o el paño hasta
que quede ajustado a la muñeca, sin producir compresión.
 Atar los dos extremos largos pasándolos por detrás del cuello.
 Es conveniente que la mano quede lo más elevada posible, para reducir las posibilidades
de movilización.

Entablillado o férula
Se utiliza para inmovilizar cualquier fractura producida en un hueso largo, ya sea de las
extremidades superiores o inferiores.
 Proveerse de tablas o pequeños troncos lisos. Pueden ser útiles otros materiales, como
telas gruesas enrolladas, periódicos, etcétera.
 Si se dispone de tablas, colocarlas a los lados de las zonas fracturadas; si se utilizan
periódicos, formar una especie de canal, dentro del cual debe quedar el miembro
afectado.
 Luego, con vendas, pañuelos, corbatas o cualquier pedazo de tela, se va sujetando el
entablillado o la férula, de modo que el individuo no pueda mover la zona fracturada.
 Si la fractura es en la pierna, deben inmovilizarse la rodilla y el tobillo.
 Si es en el antebrazo, se inmovilizarán la muñeca y el codo.
 Si es en el brazo, se deben inmovilizar el hombro y el codo. El hombro puede
inmovilizarse vendando el brazo contra el cuerpo del sujeto, con cuidado de no causar
compresión sobre la fractura.
 Si no se puede obtener ningún material más o menos rígido, la inmovilización de las
piernas se puede efectuar vendándolas juntas. Las ataduras se colocarán en los tobillos,
las rodillas, los muslos y por encima y debajo de la zona de fractura, siempre que ésta no
se localice en uno de estos puntos.

7. Rehabilitación
Se debe lograr que las articulaciones no incluidas en la inmovilización sigan funcionando
para evitar una rigidez posterior. Ello se consigue con movilizaciones activas, nunca pasivas
ni con masajes. Una vez retirada la inmovilización, se debe procurar la recuperación
funcional de los músculos, que generalmente, debido al tiempo de inactividad, estarán
hipotróficos. Se indicarán ejercicios propios en cada caso.
INTRODUCCIÓN
Las fracturas sonsoluciones de continuidad que se originan en
loshuesos, aconsecuencia de golpes, fuerzas o tracciones cuyas intensidades superen laelastici
daddel hueso.En unapersonasana, siempre son provocadas por algún tipo de
traumatismo,pero existen otras fracturas, denominadas patológicas, que se presentan enperso
nas con alguna enfermedad de base sin que se produzca un traumatismofuerte.Es el caso de
algunasenfermedadesorgánicas y del debilitamiento óseo propio delavejez.

2. FACTORES DE ESTUDIO EN UN FRACTURADO

Todo fracturado, cualquiera que sea el hueso comprometido, debe ser objeto deun estudio
muy complejo, que comprende los siguientes aspectos:

I.Etiología:

1.Causas predisponentes

2.Causas determinantes

I I .Edad

III.Clasificación según:

1.Grado de compromiso óseo y partes blandas

2.Dirección del rasgo de fractura

3.Desviación de los fragmentos

4.Ubicación del rasgo de fractura

IV.Síntomas y signos

V.Estudio radiográfico

VI.Pronóstico

VII.Tratamiento:

1.De suma urgencia

2.De simple urgencia3.Definitivo

VIII.Complicaciones

3. ETIOLOGÍA

1. Causas predisponentes
7. DIAGNÓSTICO

En la inmensa mayoría de los casos, es posible un diagnóstico certero o por


lomenos con un alto porcentaje de exactitud, con una buena anamnesis y uncorrecto examen
físico; ni siquiera requiere el mover al enfermo, ni al segmentolesionado.
Laobservacióncuidadosa, la valoración de los detalles morfológicos, laposición de los
segmentos: angulación, acortamiento o rotación del segmento,etc., en general son más que
suficientes para que el diagnóstico sea hecho
conseguridado con gran aproximación, suficiente como para
permitir tomar unaconductaconsecuente.En estas circunstancias se debe actuar con
prudencia:a. No mueva al enfermo en forma brusca.b. No mueva el miembro lesionado; si ello
es imprescindible, proceda
consumo cuidado. No olvide que puede ser usted el culpable de provocar desplazamientos de l
os segmentos óseos: lesiones vasculares,neurológicas (medulares en fractura de columna), lesi
ones de lossegmentos cutáneos (fractura expuesta) con frecuencia han sidoprovocados por
olvidar estas recomendaciones.El estudio radiográfico, que debe ser realizado lo antes posible,
en la mayoría
delos casos no hace sino que confirmar un diagnóstico clínico evidente o unasospecha
razonable.

8. COMPLICACIONES DE LAS FRACTURAS

Formación de un callo óseo (procesonormal de consolidación de unafractura) excesivamente


grande, que puede comprimir lasestructurasvecinas,causando molestias más o menos
importantes.

Lesiones de los vasos sanguíneos, que pueden dar lugar a trombosisarteriales, espasmos
vasculares y a la rotura del vaso, con la
consiguientehemorragia. Este tipo de lesiones puede provocar también gangrena seca,debida
a la falta de irrigación del miembro afectado.

Estiramientos, compresiones y roturas nerviosas, que se pondrán demanifiesto con trastornos


de la sensibilidad y alteraciones de la motilidad y lafuerzamusculares.

Cuando la fractura ha sido articular, puede dejar como secuelas: artritis,artrosis y rigidez
posterior de la articulación.

Las fracturas que afectan al cartílago de crecimiento en los niños puedenocasionar la detención
del crecimiento del hueso fracturado.


Infección de la zona fracturada, cuando en ella se ha producido herida.
9. TRATAMIENTO

El médico puede ser requerido para atender a un fracturado en tres circunstanciasdiferentes:

1.

Tratamiento de suma urgencia

: se realiza en el sitio mismo


delaccidente, sea en la carretera, campos deportivos, en el hogar, etc.Allí tiene la obligación de
practicar un tratamiento inmediato, empleandoen ello los elementos simples que pueda tener
a su disposición; en
esemomento le será necesario recordar los principios elementales en elmanejo de un
fracturado, y más que nunca suactituddeberá ser decidida,rápida, inteligente y astuta. Con no
poca frecuencia, del manejo
adecuadoque haga del enfermo en esas circunstancias, siempre dramáticas,dependerá el
evitarle sufrimientos inútiles, prevenir complicaciones
quepueden ser muy graves, y que pueden derivar en la pérdida de unmiembro, en la
instalación de una paraplejía o incluso en la pérdida de lavida.Por lo tanto, laresponsabilidadque
el médico asume en estos momentospuede ser trascendente en el destino del enfermo y debe
estar preparadopara ello.

2.

Tratamiento de simple urgencia

: se realiza generalmente en uncentro asistencial, no necesariamente especializado, pero que


permite uncorrecto examen clínico, cambio del sistema de inmovilización si ello
fueranecesario, practicar determinados tratamientos indispensables:hidratación, transfusión,
etc., o algún examen ya más especializado:hemograma, hematocrito, radiografía, etc. Todo ello
dependerá del niveltécnico-profesional del centro médico en el cual el enfermo fuera
recibido.En esta segunda etapa en el tratamiento de un fracturado, se consideraque el médico
puede cumplir con los siguientesobjetivos:a. Evaluar el estadovital.b.
Correctaevaluacióndiagnóstica de la lesión y de sus posiblescomplicaciones: vasculares,
neurológicas, viscerales, cutáneas,
etc.c. Determinación de conducta a seguir: hospitalización, trasladourgente, etc., según sea la
situación del enfermo.d. Realización de ciertas medidas terapéuticas que se requierencon
urgencia, de acuerdo a la valoración del estado del paciente.

Tratamiento definitivo

: se realiza en un hospital base o en unservicio especializado, donde pueda ser cumplido el


último y tercer objetivo, cual es eltratamiento definitivo.Mientras que en la primera y segunda
circunstancia el tratamiento es realizado
por médicos no especialistas y por ello con frecuencia los tratamientos no son
definitivos, en la tercera y última etapa el manejo del enfermo queda a cargo de
unespecialista.Cada etapa, de las tres descritas, posee una importancia trascendente, y
todomédico debe poseer los conocimientos y criterio suficientes para actuar en formaadecuada,
por lo menos en las dos primeramente señaladas.Tratamiento de Suma UrgenciaTratamiento de
Simple UrgenciaTratamiento DefinitivoTratamiento OrtopédicoTratamiento QuirúrgicoTracción
Continua TransesqueléticaMétodos Extraordinarios de Tratamiento de las Fracturas

11. REHABILITACIÓN

Se debe lograr que lasarticulacionesno incluidas en la inmovilización siganfuncionando


para evitar una rigidez posterior. Ello se consigue con movilizacionesactivas, nunca pasivas ni
con masajes. Una vez retirada la inmovilización, se debeprocurar la recuperación funcional de
losmúsculos, que generalmente, debido altiempode inactividad, estarán hipotróficos. Se
indicarán ejercicios propios en cadacaso.

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