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Analisis Veronica

El YO debe responder ante las exigencias de tres amos: el ello, el superyó y el mundo exterior. Por
medio de este presupuesto básico, que sólo fue posible después de haber reformulado el aparato
psíquico, Freud logra dar cuenta de los padecimientos psíquicos como resultados de la
alteración de los lazos del Yo con cualquiera de sus tres vasallajes.

Ello: Aquí se encuentran todos los impulsos inconscientes, básicos y primarios.

YO: Esta es la parte de la personalidad que debe hacer frente a las exigencias de la realidad. Ayuda
a controlar los impulsos del Ello y nos hace comportarnos de manera realista y aceptable en la
sociedad. En lugar realizar comportamientos simplemente dirigidos a satisfacer nuestros deseos y
necesidades, el Ego nos obliga a satisfacer dichas necesidades de una forma socialmente
aceptable. Además de controlar las demandas del Ello, el Yo también ayuda a lograr un equilibrio
entre nuestros impulsos básicos, nuestros ideales y la realidad.

El superyó o Súperego es el último aspecto de la personalidad y contiene nuestros ideales y


valores. Los valores y creencias que nuestros padres y la sociedad infundan en nosotros, son la
fuerza motriz del superyó, y se esfuerza por hacer que nos comportamos de acuerdo con esta
moral.

1. Dentro del psicoanálisis existen patologías mentales que se agrupan en histeria, psicosis y
perversión. En este trhiller piscologico podemos darnos cuenta que Veronica presenta
estas patologías.
2. La neurosis es según Freud, el conflicto psíquico que presenta una persona sucitado por
una representación inconciliable con el YO. Surge también un mecanismo de defensa
llamado REPRESESIÓN (Que aparta dicha representación del consiente).
3. compulsion a la repeticion
tendemos a repetir actos que en algún momento nos parecieron traumáticas,
es un proceso que no puede ser reprimido y se da en el inconsciente, sin recordar que
siempre termina suceciendo lo mismo.
Para Sigmund Freud, únicamente intervendría la interacción del principio del placer y el
principio de realidad. Lo que se reitera son experiencias displacenteras, pero resulta difícil
comprender en qué instancias la persona que pasa por esta situación encuentra placer,
cuando en verdad se produce todo lo contrario.

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