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Sentencia No.

T-195/95

OBRA PUBLICA-Improcedencia de ejecución

La acción de tutela entendida como un procedimiento preferente y sumario,


cuya protección en caso de prosperar implica el pronunciamiento de
órdenes judiciales de inmediato cumplimiento, es improcedente en todos
aquellos casos en que se busca obtener la ejecución de una determinada
obra pública, como en el presente asunto, ya que estaría el juez a través de
su decisión, entrometiéndose en materias de política administrativa y
llevando a un co-gobierno de la rama judicial, contrario al principio de
separación de funciones que consagra la Carta Política.

PARTIDA PRESUPUESTAL-Inclusión para construcción de puente

La sola inclusión de una partida en el presupuesto no conduce a la


exigibilidad inmediata de su ejecución, pues ésta depende también, de la
disponibilidad efectiva de los recursos de tesorería que se encuentren
destinados a satisfacer la necesidad de que se trata, y de las prioridades que
señalen la Constitución y la ley, o las que en uso de sus atribuciones fije la
Administración en los acuerdos de gastos. A pesar de lo anterior, la Sala
considera pertinente referirse a un punto concreto de la alegación del actor,
en el sentido de que se está amenazando su vida y la de su familia, como
también sus bienes, con el desbordamiento de la quebrada, lo que, podría
solucionarse con la construcción de un puente. Sobre el particular, no
encuentra la Corte claridad en cuanto a que sea la construcción del puente
la solución a la amenaza que dice correr el demandante y su familia con el
desbordamiento de la quebrada, más aún, cuando está demostrado que en
el lugar existía ya un puente, el mismo cuya construcción solicita, y que éste
fue arrasado por la quebrada hace algunos años.

FENOMENOS NATURALES

Las manifestaciones propias de la naturaleza como son las lluvias y


temporales, o las erupciones volcánicas, los movimientos telúricos, entre
otras, generan riesgo o amenaza en forma general para todos los habitantes
del país, lo que no implica que se esté negando la protección de derecho
fundamental alguno por parte de la autoridad a los millones de compatriotas
que habitan el territorio desde tiempos inmemorables, por el sólo hecho de
vivir bajo la posible ocurrencia de fenómenos naturales.

DEBER DEL ESTADO DE PROCURAR MANTENER Y


MEJORAR CONDICIONES DE VIDA

Corresponde sí al Estado procurar el mantenimiento y mejoramiento de las


condiciones de vida de la población, pero con sujeción a ciertos parámetros
y prioridades, y supeditado por las posibilidades presupuestales y de
cobertura, disponibles, pero es también obligación de la población
colaborar abiertamente en su supervivencia y bienestar. En el caso
particular, dado que el accionante considera que en época de invierno el
desbordamiento de la quebrada San Miguel puede eventualmente generar
algún riesgo a su salud, debe éste adoptar todas las medidas conducentes
para asegurar su bienestar y el de su familia y estar atento a los cambios
que las lluvias puedan ocasionar a la mencionada quebrada, ya que como
se dijo, el juez de tutela no puede ordenar la construcción de obras, y además
porque no está probado técnicamente que la construcción del puente
disminuya o acabe con el riesgo alegado.

ZONAS DE ALTO RIESGO-Desbordamiento de quebrada

De acuerdo con las pruebas que obran en el expediente, el actor se hizo


propietario del predio que colinda con la quebrada hace aproximadamente
cuatro años, es decir en una fecha posterior a la caída del puente, a la
destrucción de la vivienda del antiguo propietario y por ende a la existencia
de la variante de la carretera (hechos ocurridos hace más o menos 10 años).
Así, entonces, adquirió el bien con pleno conocimiento de causa sobre los
posibles riesgos y los perjuicios a que se podrían verse expuesto él, su
familia y sus bienes, frente a la variante de la vía y al posible
desbordamiento de la quebrada, más aún, conociendo que la misma es
borrascosa y caudalosa en época de invierno.

REF: Expediente No. T - 54.991

Peticionario: Humberto Antonio


Macías Carvajal
Procedencia: Juzgado Promiscuo
Municipal de Ituango, Antioquia.

Magistrado Ponente:
Dr. VLADIMIRO NARANJO
MESA

Tema: Improcedencia de la acción


de tutela frente a la ejecución de
obras públicas.

Santafé de Bogotá, D.C., cinco (5) de mayo de mil novecientos noventa y


cinco (1995).

La Sala Novena de Revisión de la Corte Constitucional, conformada por los


Magistrados Vladimiro Naranjo Mesa -Presidente de la Sala-, Jorge Arango
Mejía y Antonio Barrera Carbonell,

EN NOMBRE DEL PUEBLO


Y
POR MANDATO DE LA CONSTITUCION

ha pronunciado la siguiente

SENTENCIA

En el proceso de tutela radicado bajo el número T-54.991 adelantado por


Humberto Antonio Macías Carvajal, contra el Secretario de Obras Públicas
Departamentales de Antioquía.

I. ANTECEDENTES

Con base en los artículos 86 de la Constitución Política y 33 del Decreto


2591 de 1991, la Sala de Selección correspondiente de la Corte
Constitucional escogió, para efecto de su revisión, la acción de tutela de la
referencia.
De conformidad con el artículo 34 del Decreto 2591 de 1991, esta Sala de
Revisión de la Corte entra a dictar sentencia de revisión.

1. Solicitud

El ciudadano Humberto Antonio Macías Carvajal, se presentó ante el


Juzgado Promiscuo Municipal de Ituango, Antioquia, e interpuso, en forma
verbal, acción de tutela con el fin de amparar el derecho fundamental a su
vida y la de su familia, como también su derecho a la propiedad consagrados
en los artículos 11 y 58 de la Constitución Política respectivamente.

2. Hechos

Afirma el actor, que habita en la vereda "El Río" municipio de Ituango cerca
a la quebrada San Miguel. Que dicha quebrada se encontraba atravesada por
un puente el cual unía la carretera que de Ituango conduce a la Granja, pero
hace aproximadamente diez años dicho puente se cayó, razón por la cual una
cuadrilla de trabajadores departamentales de sostenimiento de carreteras
hizo una variante a unos 20 metros del puente, dentro de su propiedad.

Señaló, que después de construida la variante, cuando la quebrada se crece


no sigue por su cauce normal sino que se desvía por la misma, entra a su
finca y ocasiona daños a todos los sembrados, como también amenaza con
llevarse su casa, y por lo tanto pone en peligro su vida y la de su familia.

Igualmente sostiene el actor, que hace varios años (de 8 a 10) la creciente de
la quebrada se llevó la casa del señor Gustavo Salinas, quien era en ese
entonces propietario del predio que desde hace cuatro años le pertenece, sin
que afortunadamente hubiera ocasionado la perdida de vidas humanas.
Asegura que si se construye el puente se soluciona el problema, ya que
llegado el invierno se crece la quebrada pero ésta seguiría su cauce normal,
sin causar daños ni tragedias que lamentar.

Afirma, que desde hace cuatro años está buscando que las autoridades
solucionen el problema de la construcción del puente, "pero todo se ha
quedado en simples promesas". Inclusive sostiene, que inició hace algún
tiempo una acción policiva, pero esta no prosperó, pues la Inspección decretó
la caducidad de la acción, por haberse interpuesto después de transcurrido
seis meses de ocurrida la primera perturbación.
3. Pretensiones

Solicita el actor que, como consecuencia del amparo de los derechos


conculcados, se ordene al Secretario de Obras Públicas de Antioquia,
disponga lo conducente para la construcción de un puente sobre la quebrada
San Miguel, en la Vereda "El Río", municipio de Ituango.

II. ACTUACION PROCESAL

1. Primera instancia

Mediante auto de fecha 2 de noviembre de 1994, el Juzgado Promiscuo


Municipal de Ituango, asumió el conocimiento de la presente acción de
tutela, y decretó y recolectó las pruebas que a continuación se relacionan:

1.1. Declaración del señor Jesús María Gómez Peña.

El señor Gómez Peña jefe de obras del Municipio de Ituango, afirmó en la


declaración que conoce la quebrada San Miguel en el punto donde se
comunica la carretera Ituango la Granja, concretamente en la finca del
demandante, señor Humberto Macías. Sostiene que conoce del problema que
ocasiona la quebrada cuando se crece, pues es muy caudalosa y borrascosa
en el invierno, lo que puede ocasionar un desastre.

Afirmó igualmente, que al construir nuevamente el puente que un día existió


sobre la quebrada, ésta se canalizaría y se entrarían a solucionar en buena
parte los problemas que ocasiona en invierno, aun cuando no sabe
exactamente en qué punto debe construirse el puente.

1.2. Diligencia de inspección ocular.

Esta se llevó a cabo el día 5 de noviembre de 1994, por el Juez Promiscuo


Municipal de Ituango y en la misma señaló:

"Acorde con lo observado, se consta, que la quebrada corre por su cauce


normal, al atravezar la vía, cae a un cauce profundo, siguiendo por detrás
de la vivienda del accionante, a una distancia de sesenta metros de la misma.
En conclusión, como la vía es inclinada, es natural, que si la quebrada crece
y es obstaculizada, como lo afirma el accionante en la parte superior de la
vía, para evitar el daño de la carretera y por ende, lograr el paso de
vehículos, ésta, busque la salida por la vía carreteable hacia abajo,
poniendo en peligro la vivienda y bienes de propiedad del señor Macías
Carvajal, que está ubicada en la parte inferior de la misma. (...)"

2. Fallo de primera instancia

El Juzgado Promiscuo Municipal de Ituango, mediante providencia de fecha


nueve (9) de noviembre de mil novecientos noventa y cuatro (1994), resolvió
conceder la acción de tutela impetrada por el señor Humberto Antonio
Macías Carvajal, contra el Secretario de Obras Públicas de Antioquia.

Sostuvo el despacho, que después de practicadas las pruebas descritas, es


claro el peligro inminente que representa la quebrada San Miguel para la vida
y bienes, no sólo del señor Humberto Macías sino también para los
moradores que habitan los alrededores de la quebrada.

Sostuvo igualmente, que la acción de tutela consagrada en el artículo 86 de


la C.P., puede ser utilizada cuando se amenaza o se vulnera un derecho
constitucional fundamental. Así, en el presente caso no se encuentra probada
la vulneración de ningún derecho, pero sí la amenaza del derecho a la vida
del actor y el de la propiedad, pues cada vez que llueve en la región, la
quebrada se desborda siguiendo la variante de la carretera, lo que puede
ocasionar un desastre que tenga como consecuencia la pérdida de vidas
humanas.

Finalmente el a quo consideró:

"que la conducta o comportamiento que ha motivado la petición, no goza


de otro medio de defensa, el único con el que se contaba fue el instaurado
ante la Inspección de Policía de Ituango; el cual no prosperó por haber
transcurrido más de seis meses desde el momento del primer acto
perturbatorio."

La decisión no fue impugnada por ninguna de las partes.

III- CONSIDERACIONES DE LA SALA

1. Competencia
De conformidad con lo establecido en los artículos 86 y 241, numeral 9o. de
la Constitución Política y 31 a 36 del Decreto 2591 de 1991, la Sala Novena
de revisión de la Corte Constitucional es competente para revisar el fallo de
tutela de la referencia.

2. El caso concreto

2.1 Improcedencia de la acción de tutela cuando se trate de obtener la


ejecución de una obra pública.

Pretende el actor a través de la presente acción de tutela, que se construya un


puente sobre la quebrada San Miguel, en la vereda el Río del municipio de
Ituango, ya que la quebrada, por falta de ese puente, se está entrando a
terrenos de su propiedad.

Sobre la materia ha sostenido la jurisprudencia de esta Corporación, que la


acción de tutela entendida como un procedimiento preferente y sumario,
cuya protección en caso de prosperar implica el pronunciamiento de órdenes
judiciales de inmediato cumplimiento, es improcedente en todos aquellos
casos en que se busca obtener la ejecución de una determinada obra pública,
como en el presente asunto, ya que estaría el juez a través de su decisión,
entrometiéndose en materias de política administrativa y llevando a un co-
gobierno de la rama judicial, contrario al principio de separación de
funciones que consagra la Carta Política (art.
113).

Sobre el particular ha señalado esta Corporación:

"En consecuencia, la acción de tutela, entendida como procedimiento


preferente y sumario que, en el caso de prosperar, implica el
pronunciamiento de órdenes judiciales de inmediato cumplimiento (art. 86
C.N.), viene a ser improcedente cuando se trata de obtener que se lleve a
cabo determinada obra pública por el solo hecho de estar prevista en el
Presupuesto una partida que la autoriza. Aceptar que el juez de tutela -sin
tener certeza sobre la existencia y disponibilidad actuales del recurso-
pudiera exigir de la administración la ejecución de todo rubro presupuestal
en un término tan perentorio como el previsto en el artículo 29, numeral 5,
del Decreto 2591 de 1991, bajo el apremio de las sanciones contempladas
en los artículos 52 y 53 eiusdem, llevaría a un co-gobierno de la rama
judicial en abierta violación del artículo 113 de la Carta Política,
desnaturalizaría el concepto de gestión administrativa y haría irresponsable
al gobierno por la ejecución del Presupuesto, en cuanto ella pasaría a
depender de las determinaciones judiciales." (Sentencia No. T-185 de 1993,
Magistrado Ponente, doctor José Gregorio Hernández Galindo).

Así entonces, para llevar a cabo obras específicas, se requiere que éstas se
encuentren previstas en el correspondiente presupuesto, cuya conformación
y ejecución hace parte de una función específicamente administrativa, que
por naturaleza propia implica la apreciación y evaluación por parte del
Ejecutivo de las prioridades de gastos e inversiones y el momento oportuno
para realizar dichas obras, dentro de una determinada vigencia fiscal.

Además, la sola inclusión de una partida en el presupuesto no conduce a la


exigibilidad inmediata de su ejecución, pues ésta depende también, de la
disponibilidad efectiva de los recursos de tesorería que se encuentren
destinados a satisfacer la necesidad de que se trata, y de las prioridades que
señalen la Constitución y la ley, o las que en uso de sus atribuciones fije la
Administración en los acuerdos de gastos.

A pesar de lo anterior, la Sala considera pertinente referirse a un punto


concreto de la alegación del actor, en el sentido de que se está amenazando
su vida y la de su familia, como también sus bienes, con el desbordamiento
de la quebrada, lo que, podría solucionarse con la construcción de un puente.
Sobre el particular, no encuentra la Corte claridad en cuanto a que sea la
construcción del puente la solución a la amenaza que dice correr el
demandante y su familia con el desbordamiento de la quebrada San Miguel,
más aún, cuando está demostrado que en el lugar existía ya un puente, el
mismo cuya construcción solicita, y que éste fue arrasado por la quebrada
hace algunos años.

Sin embargo, lo que sí resulta obvio es que el desbordamiento de la quebrada


se origina por la intensidad de las lluvias que en época de invierno caen sobre
la región, y que eventualmente puede generar una amenaza para quienes
habitan los lugares próximos a ella. Esto obedece a un fenómeno natural al
cual se encuentran expuestos no solo el actor y su familia, sino todas aquellas
personas que conviven en zonas aledañas a las riberas de los ríos, el mar, las
quebradas, las laderas de volcanes u otros accidentes geográficos
susceptibles de alteraciones de orígen natural, sin que esto implique
violación de derecho fundamental alguno por parte de la autoridad pública o
de otros particulares, que traiga como consecuencia su protección a través de
la acción de tutela.

Y es que las manifestaciones propias de la naturaleza como son las lluvias y


temporales, o las erupciones volcánicas, los movimientos telúricos, entre
otras, generan riesgo o amenaza en forma general para todos los habitantes
del país, lo que no implica que se esté negando la protección de derecho
fundamental alguno por parte de la autoridad a los millones de compatriotas
que habitan el territorio desde tiempos inmemorables, por el sólo hecho de
vivir bajo la posible ocurrencia de fenómenos naturales.

Corresponde sí al Estado procurar el mantenimiento y mejoramiento de las


condiciones de vida de la población, pero con sujeción a ciertos parámetros
y prioridades, y supeditado por las posibilidades presupuestales y de
cobertura, disponibles, pero es también obligación de la población colaborar
abiertamente en su supervivencia y bienestar, tal como lo expresa la
Constitución Política en el artículo 49 inciso final, el cual señala:

"Toda persona tiene el deber de procurar el cuidado integral de su salud y


la de su comunidad". (negrillas fuera de texto).

En el caso particular, dado que el accionante considera que en época de


invierno el desbordamiento de la quebrada San Miguel puede eventualmente
generar algún riesgo a su salud, debe éste adoptar todas las medidas
conducentes para asegurar su bienestar y el de su familia y estar atento a los
cambios que las lluvias puedan ocasionar a la mencionada quebrada, ya que
como se dijo, el juez de tutela no puede ordenar la construcción de obras, y
además porque no está probado técnicamente que la construcción del puente
disminuya o acabe con el riesgo alegado.

Cabe señalar igualmente que, de acuerdo con las pruebas que obran en el
expediente, el actor se hizo propietario del predio que colinda con la
quebrada hace aproximadamente cuatro años, es decir en una fecha posterior
a la caída del puente, a la destrucción de la vivienda del antiguo propietario
y por ende a la existencia de la variante de la carretera (hechos ocurridos
hace más o menos 10 años). Así, entonces, adquirió el bien con pleno
conocimiento de causa sobre los posibles riesgos y los perjuicios a que se
podrían verse expuesto él, su familia y sus bienes, frente a la variante de la
vía y al posible desbordamiento de la quebrada, más aún, conociendo que la
misma es borrascosa y caudalosa en época de invierno.

Finalmente, si la variante de la carretera afecta su predio y le genera algunos


perjuicios, ello no es asunto que le competa dirimir al juez de tutela, pues
para eso existen las vías ordinarias a las que debe acudir el actor (jurisdicción
contencioso administrativa), para reclamar al Estado los daños que éste le
haya podido causar, sin olvidar que la acción de tutela no está diseñada para
ser utilizada al arbitrio de las personas, como medio alternativo de los
procedimientos judiciales ordinarios, o ser utilizada cuando en forma
negligente se pretermiten los términos de las acciones ordinarias.

En virtud de lo anterior, la Sala habrá de revocar el fallo de fecha 9 de


noviembre de 1994, proferido por el Juzgado Promiscuo Municipal de
Ituango, por las consideraciones consignadas en esta providencia.

DECISION

En mérito de lo expuesto, la Sala Novena de Revisión de la Corte


Constitucional, en nombre del pueblo y por mandato de la Constitución,

RESUELVE:

PRIMERO: REVOCAR el fallo de fecha 9 de noviembre de 1994,


proferido por el Juzgado Promiscuo Municipal de Ituango, mediante el cual
se concedió la acción de tutela interpuesta por Humberto Antonio Macías
Carvajal, contra el Secretario de Obras Públicas Departamentales de
Antioquia por las razones expuestas en esta providencia.

SEGUNDO: ORDENAR que por la Secretaría General de esta


Corporación, se comunique esta providencia al Juzgado Promiscuo
Municipal de Ituango, en la forma y para los efectos previstos en el artículo
36 del decreto 2591 de 1991.
Cópiese, notifíquese, publíquese en la Gaceta de la Corte
Constitucional y cúmplase.

VLADIMIRO NARANJO MESA


Magistrado

JORGE ARANGO MEJIA


Magistrado

ANTONIO BARRERA CARBONELL


Magistrado

MARTHA VICTORIA SACHICA DE MONCALEANO


Secretaria General
DECRETO 3930 DE 2010

(Octubre 25)

Por el cual se reglamenta parcialmente el Título I de la Ley 9ª de 1979,


así como el Capítulo II del Título VI -Parte III- Libro II del Decreto-ley 2811
de 1974 en cuanto a usos del agua y residuos líquidos y se dictan otras
disposiciones.

EL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA DE COLOMBIA,

en ejercicio de sus atribuciones constitucionales y legales, en especial


las conferidas en el numeral 11 del artículo 189 de la Constitución
Política, el artículo 134 del Decreto-ley 2811 de 1974, el artículo 2°, los
numerales 2, 10, 11 y 24 del artículo 5° y el parágrafo 3° del artículo 33
de la Ley 99 de 1993, y

CONSIDERANDO:

Que la Constitución Política de Colombia en sus artículos 79 y 80 establece


que es deber del Estado proteger la diversidad e integridad del ambiente,
conservar las áreas de especial importancia ecológica y fomentar la
educación ambiental para garantizar el derecho de todas las personas a
gozar de un ambiente sano y planificar el manejo y aprovechamiento de los
recursos naturales, para garantizar su desarrollo sostenible, su conservación,
restauración o sustitución; debiendo prevenir y controlar los factores de
deterioro ambiental, imponer las sanciones legales y exigir la reparación de
los daños causados.

Que corresponde al Estado garantizar la calidad del agua para consumo


humano y, en general, para las demás actividades en que su uso es
necesario. Así mismo, regular entre otros aspectos, la clasificación de las
aguas, señalar las que deben ser objeto de protección y control especial, fijar
su destinación y posibilidades de aprovechamiento, estableciendo la calidad
de las mismas y ejerciendo control sobre los vertimientos que se introduzcan
en las aguas superficiales o subterráneas, interiores o marinas, a fin de que
estas no se conviertan en focos de contaminación que pongan en riesgo los
ciclos biológicos, el normal desarrollo de las especies y la capacidad
oxigenante y reguladora de los cuerpos de agua.

Que el Decreto 1594 de 1984 en su momento reglamentó la prevención y


control de la contaminación, no obstante mediante sentencia del Consejo de
Estado de agosto 14 de 1992, se declararon nulos varios de sus artículos en
función de los conflictos de competencias previstas en los mismos,
fraccionando, desarticulando y limitando su aplicación, en la medida en que
por la simple referencia de estos artículos a la sigla EMAR, los mismos fueron
sacados del ordenamiento jurídico restando eficiencia y efectividad en la
aplicación de este decreto.

Que posteriormente se expidió la Ley 99 de 1993 por la cual se creó el


Ministerio del Medio Ambiente (hoy Ministerio de Ambiente, Vivienda y
Desarrollo Territorial), se reordena el Sector Público encargado de la gestión
y conservación del medio ambiente y los recursos naturales renovables, se
organiza el Sistema Nacional Ambiental (SINA) y se dictan otras
disposiciones.

Que el artículo 2° de la citada ley, establece que el Ministerio es el organismo


rector de la gestión del medio ambiente y de los recursos naturales
renovables, encargado de definir las políticas y regulaciones a las que se
sujetarán la recuperación, conservación, protección, ordenamiento, manejo,
uso y aprovechamiento de los recursos naturales renovables y el medio
ambiente de la Nación, a fin de asegurar el desarrollo sostenible.

Que el parágrafo 2° del artículo 5° de la citada ley, establece que le


corresponde al Ministerio ejercer las demás funciones que en materia de
protección del medio ambiente y los recursos naturales renovables, venían
desempeñando el Instituto Nacional de los Recursos Naturales Renovables y
del Ambiente (INDERENA), el Ministerio de Agricultura (hoy ministerio de
Agricultura y Desarrollo Rural), el Ministerio de Salud (hoy Ministerio de la
Protección Social), el Ministerio de Minas y Energía y el Departamento
Nacional de Planeación.

Que de acuerdo al artículo 30 de la citada ley, las Corporaciones Autónomas


Regionales tendrán por objeto la ejecución de las políticas, planes, programas
y proyectos sobre medio ambiente y recursos naturales renovables, así como
dar cumplida y oportuna aplicación a las disposiciones legales vigentes sobre
su disposición, administración, manejo y aprovechamiento, conforme a las
regulaciones, pautas y directrices expedidas por el Ministerio.

Que según lo dispuesto en los numerales 10 y 12 del artículo 31 de la citada


ley, le compete a las corporaciones autónomas regionales, fijar en el área de
su jurisdicción, los límites permisibles de descarga, transporte o depósito de
sustancias, productos, compuestos o cualquier otra materia que puedan
afectar el ambiente o los recursos naturales renovables y prohibir, restringir o
regular la fabricación, distribución, uso, disposición o vertimiento de
sustancias causantes de degradación ambiental. Estos límites, restricciones y
regulaciones en ningún caso podrán ser menos estrictos que los definidos por
el Ministerio del Medio Ambiente (hoy Ministerio de Ambiente, Vivienda y
Desarrollo Territorial); y ejercer las funciones de evaluación, control y
seguimiento ambiental de los usos del agua y el suelo, lo cual comprenderá el
vertimiento o incorporación de sustancias o residuos líquidos, sólidos y
gaseosos, a las aguas en cualquiera de sus formas o a los suelos. Estas
funciones comprenden la expedición de las respectivas licencias ambientales,
permisos y concesiones.

Que las autoridades ambientales de los grandes centros urbanos de que trata
el artículo 66 de la Ley 99 de 1993 y los establecimientos públicos a los que
se refiere el artículo 13 de la Ley 768 de 2002, cumplen las mismas funciones
que las corporaciones autónomas regionales en el área de su jurisdicción.

Que la Política Nacional para la Gestión Integral del Recurso Hídrico prevé la
necesidad de ajustar y actualizar el marco jurídico vigente.

Que se requiere desarrollar integralmente la figura del Ordenamiento de


Recurso Hídrico como instrumento de planificación por excelencia, ajustar el
procedimiento de otorgamiento de los permisos de vertimiento y los planes de
cumplimiento, establecer el procedimiento para la reglamentación de los
vertimientos y reorganizar el registro de vertimientos, previstos en el Decreto
1594 de 1984.

Que así mismo, es necesaria la revisión de los actuales usos del agua y
ampliar, si es el caso, los parámetros y valores para fijar la destinación del
recurso hídrico facilitando la gestión de las autoridades ambientales, con el fin
de actualizar por parte del Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo
Territorial, los criterios de calidad que debe cumplir el recurso hídrico para los
diferentes usos del mismo y las normas de vertimiento para garantizar dichos
criterios de calidad.

Que así mismo se prevé que los criterios de calidad y normas de vertimiento
pueden ser ajustados por la autoridad ambiental competente, en ejercicio del
principio de rigor subsidiario de que tratan los artículos 31-10 y 63 de la Ley
99 de 1993, de acuerdo con las condiciones regionales y locales respectivas.

Que en consideración a los cambios normativos y a la nueva institucionalidad


se requiere actualizar y armonizar el marco jurídico en materia de prevención
y control de la contaminación.

Que en mérito de lo expuesto,

Ver el Decreto Nacional 4728 de 2010

DECRETA:

CAPÍTULO I

Disposiciones Generales
Artículo 1°. Objeto. El presente decreto establece las disposiciones
relacionadas con los usos del recurso hídrico, el Ordenamiento del Recurso
Hídrico y los vertimientos al recurso hídrico, al suelo y a los alcantarillados.

Parágrafo. Cuando quiera que en este decreto se haga referencia al suelo,


se entenderá que este debe estar asociado a un acuífero.

Artículo 2°. Ámbito de aplicación. El presente decreto aplica a las


autoridades ambientales competentes definidas en el artículo 3° del presente
decreto, a los generadores de vertimientos y a los prestadores del servicio
público domiciliario de alcantarillado.

CAPÍTULO II

Definiciones

Artículo 3°. Definiciones. Para todos los efectos de aplicación e


interpretación del presente decreto, se tendrán en cuenta las siguientes
definiciones:

1. Acuífero. Unidad de roca o sedimento, capaz de almacenar y transmitir


agua.

2. Aguas continentales. Cuerpos de agua que se encuentran en tierra firme,


sin influencia marina. Se localizan en las tierras emergidas, ya sea en forma
de aguas superficiales o aguas subterráneas.

3. Aguas costeras o interiores. Son las aguas superficiales situadas entre


las líneas de base recta de conformidad con el Decreto 1436 de 1984 que
sirve para medir la anchura del mar territorial y la línea de la más baja marea
promedio. Comprende las contenidas en las lagunas costeras, humedales
costeros, estuarios, ciénagas y las zonas húmedas próximas a la costa que,
verificando los criterios de tamaño y profundidad presenten una influencia
marina que determine las características de las comunidades biológicas
presentes en ella, debido a su carácter salino o hipersalino. Esta influencia
dependerá del grado de conexión con el mar, que podrá variar desde una
influencia mareal a una comunicación ocasional.

4. Aguas marinas. Las contenidas en la zona económica exclusiva, mar


territorial y aguas interiores con su lecho y subsuelo de acuerdo con la
normatividad vigente en la materia. Para los efectos de este decreto las
aguas marinas se subdividen en aguas costeras y oceánicas.

5. Aguas meteóricas. Aguas que están en la atmósfera.


6. Aguas oceánicas. Las comprendidas entre las líneas de base recta y los
límites de la zona económica exclusiva, de conformidad con el derecho
internacional.

7. Aguas servidas. Residuos líquidos provenientes del uso doméstico,


comercial e industrial.

8. Autoridades Ambientales Competentes. Se entiende por autoridad


ambiental competente, de acuerdo a sus respectivas competencias las
siguientes:

a) Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial.

b) Las Corporaciones Autónomas Regionales y las de Desarrollo Sostenible.

c) Los municipios, distritos y áreas metropolitanas cuya población dentro de


su perímetro urbano sea igual o superior a un millón de habitantes.

d) Las autoridades ambientales de que trata el artículo 13 de la Ley 768 de


2002.

9. Bioensayo acuático. Procedimiento por el cual las respuestas de


organismos acuáticos se usan para detectar o medir la presencia o efectos de
una o más sustancias, elementos, compuestos, desechos o factores
ambientales solos o en combinación.

10. Capacidad de asimilación y dilución. Capacidad de un cuerpo de agua


para aceptar y degradar sustancias, elementos o formas de energía, a través
de procesos naturales, físicos químicos o biológicos sin que se afecten los
criterios de calidad e impidan los usos asignados.

11. Carga contaminante. Es el producto de la concentración másica


promedio de una sustancia por el caudal volumétrico promedio del líquido que
la contiene determinado en el mismo sitio; en un vertimiento se expresa en
kilogramos por día (kg/d).

12. Cauce natural. Faja de terreno que ocupan las aguas de una corriente al
alcanzar sus niveles máximos por efecto de las crecientes ordinarias.

13. Cauces artificiales. Conductos descubiertos, construidos por el ser


humano para diversos fines, en los cuales discurre agua de forma
permanente o intermitente.

14. Caudal ambiental. Volumen de agua necesario en términos de calidad,


cantidad, duración y estacionalidad para el sostenimiento de los ecosistemas
acuáticos y para el desarrollo de las actividades socioeconómicas de los
usuarios aguas abajo de la fuente de la cual dependen tales ecosistemas.

15. Concentración de una sustancia, elemento o compuesto en un


líquido. La relación existente entre su masa y el volumen del líquido que lo
contiene.

16. Cuerpo de agua. Sistema de origen natural o artificial localizado, sobre la


superficie terrestre, conformado por elementos físicos-bióticos y masas o
volúmenes de agua, contenidas o en movimiento.

17. 96 50 CL es la concentración de una sustancia, elemento o compuesto,


que solo o en combinación, produce la muerte al cincuenta por ciento (50%)
de los organismos sometidos a bioensayos en un período de noventa y seis
(96) horas.

18. Lodo. Suspensión de un sólido en un líquido proveniente de tratamiento


de aguas, residuos líquidos u otros similares.

19. Muestra puntual. Es la muestra individual representativa en un


determinado momento.

20. Muestra compuesta. Es la mezcla de varias muestras puntuales de una


misma fuente, tomadas a intervalos programados y por periodos
determinados, las cuales pueden tener volúmenes iguales o ser
proporcionales al caudal durante el periodo de muestras.

21. Muestra integrada. La muestra integrada es aquella que se forma por la


mezcla de muestras puntuales tomadas de diferentes puntos
simultáneamente, o lo más cerca posible. Un ejemplo de este tipo de muestra
ocurre en un río o corriente que varía en composición de acuerdo con el
ancho y la profundidad.

22. Norma de vertimiento. Conjunto de parámetros y valores que debe


cumplir el vertimiento en el momento de la descarga.

23. Objetivo de calidad. Conjunto de parámetros que se utilizan para definir


la idoneidad del recurso hídrico para un determinado uso.

24. Parámetro. Variable que, en una familia de elementos, sirve para


identificar cada uno de ellos mediante su valor numérico.

25. Punto de control del vertimiento. Lugar técnicamente definido y


acondicionado para la toma de muestras de las aguas residuales de los
usuarios de la autoridad ambiental o de los suscriptores y/o usuarios del
prestador del servicio público domiciliario de alcantarillado, localizado entre el
sistema de tratamiento y el punto de descarga.

26. Punto de descarga. Sitio o lugar donde se realiza un vertimiento al


cuerpo de agua, al alcantarillado o al suelo.

27. Recurso hídrico. Aguas superficiales, subterráneas, meteóricas y


marinas.

28. Reúso del agua. Utilización de los efluentes líquidos previo cumplimiento
del criterio de calidad.

29. Soluciones individuales de saneamiento. Sistemas de recolección y


tratamiento de aguas residuales implementados en el sitio de origen.

30. Toxicidad. La propiedad que tiene una sustancia, elemento o compuesto,


de causar daños en la salud humana o la muerte de un organismo vivo.

31. Toxicidad aguda. La propiedad de una sustancia, elemento, compuesto,


desecho, o factor ambiental, de causar efecto letal u otro efecto nocivo en
cuatro (4) días o menos a los organismos utilizados para el bioensayo
acuático.

32. Toxicidad crónica. La propiedad de una sustancia, elemento,


compuesto, desecho o factor ambiental, de causar cambios en el apetito,
crecimiento, metabolismo, reproducción, movilidad o la muerte o producir
mutaciones después de cuatro (4) días a los organismos utilizados por el
bioensayo acuático.

33. Usuario de la autoridad ambiental competente. Toda persona natural o


jurídica de derecho público o privado, que cuente con permiso de
vertimientos, plan de cumplimiento o plan de saneamiento y manejo de
vertimientos para la disposición de sus vertimientos a las aguas superficiales,
marinas o al suelo.

34. Usuario y/o suscriptor de una Empresa Prestadora del Servicio


Público de Alcantarillado. Toda persona natural o jurídica de derecho
público o privado, que realice vertimientos al sistema de alcantarillado
público.

35. Vertimiento. Descarga final a un cuerpo de agua, a un alcantarillado o al


suelo, de elementos, sustancias o compuestos contenidos en un medio
líquido.
36. Vertimiento puntual. El que se realiza a partir de un medio de
conducción, del cual se puede precisar el punto exacto de descarga al cuerpo
de agua, al alcantarillado o al suelo.

37. Vertimiento no puntual. Aquel en el cual no se puede precisar el punto


exacto de descarga al cuerpo de agua o al suelo, tal es el caso de
vertimientos provenientes de escorrentía, aplicación de agroquímicos u otros
similares.

38. Zona de mezcla. Área técnicamente determinada a partir del sitio de


vertimiento, indispensable para que se produzca mezcla homogénea de este
con el cuerpo receptor; en la zona de mezcla se permite sobrepasar los
criterios de calidad de agua para el uso asignado, siempre y cuando se
cumplan las normas de vertimiento.

CAPÍTULO III

Del Ordenamiento del Recurso Hídrico

Artículo 4°. Ordenamiento del Recurso Hídrico. La Autoridad Ambiental


Competente deberá realizar el Ordenamiento del Recurso Hídrico con el fin
de realizar la clasificación de las aguas superficiales, subterráneas y marinas,
fijar en forma genérica su destinación a los diferentes usos de que trata el
artículo 9° del presente decreto y sus posibilidades de aprovechamiento.

Entiéndase como Ordenamiento del Recurso Hídrico, el proceso de


planificación del mismo, mediante el cual la autoridad ambiental competente:

1. Establece la clasificación de las aguas.

2. Fija su destinación y sus posibilidades de uso, con fundamento en la


priorización definida para tales efectos en el artículo 41 del Decreto 1541 de
1978.

3. Define los objetivos de calidad a alcanzar en el corto, mediano y largo


plazo.

4. Establece las normas de preservación de la calidad del recurso para


asegurar la conservación de los ciclos biológicos y el normal desarrollo de las
especies.

5. Determina los casos en que deba prohibirse el desarrollo de actividades


como la pesca, el deporte y otras similares, en toda la fuente o en sectores de
ella, de manera temporal o definitiva.
6. Fija las zonas en las que se prohibirá o condicionará, la descarga de aguas
residuales o residuos líquidos o gaseosos, provenientes de fuentes
industriales o domésticas, urbanas o rurales, en las aguas superficiales,
subterráneas, o marinas.

7. Establece el programa de seguimiento al recurso hídrico con el fin de


verificar la eficiencia y efectividad del ordenamiento del recurso.

Parágrafo 1°. Para efectos del ordenamiento de que trata el presente


capítulo, el cuerpo de agua y/o acuífero es un ecosistema. Cuando dos (2) o
más autoridades ambientales tengan jurisdicción sobre un mismo cuerpo de
agua y/o acuífero, establecerán la comisión conjunta de que trata el parágrafo
3° del artículo 33 de la Ley 99 de 1993, la cual ejercerá las mismas funciones
para el ecosistema común previstas en el Decreto 1604 de 2002, o aquella
que la adicione, modifique o sustituya, para las cuencas hidrográficas
comunes.

Parágrafo 2°. Para el ordenamiento de las aguas marinas se tendrán en


cuenta los objetivos derivados de los compromisos internacionales
provenientes de tratados o convenios internacionales ratificados por
Colombia, incluidos aquellos cuya finalidad es prevenir, controlar y mitigar la
contaminación del medio marino.

Artículo 5°. Criterios de Priorización para el Ordenamiento del Recurso


Hídrico. La autoridad ambiental competente, priorizará el Ordenamiento del
Recurso Hídrico de su jurisdicción, teniendo en cuenta como mínimo lo
siguiente:

1. Cuerpos de agua y/o acuíferos objeto de ordenamiento definidos en la


formulación de Planes de Ordenación y Manejo de Cuencas Hidrográficas.

2. Cuerpos de agua donde la autoridad ambiental esté adelantando el


proceso para el establecimiento de las metas de reducción de que trata el
Decreto 3100 de 2003 o la norma que lo modifique o sustituya.

3. Cuerpos de agua y/o acuíferos en donde se estén adelantando procesos


de reglamentación de uso de las aguas o en donde estos se encuentren
establecidos.

4. Cuerpos de agua en donde se estén adelantando procesos de


reglamentación de vertimientos o en donde estos se encuentren establecidos.

5. Cuerpos de agua y/o acuíferos que sean declarados como de reserva o


agotados, según lo dispuesto por el Capítulo II del Título V del Decreto 1541
de 1978 o la norma que lo modifique, adicione, o sustituya.
6. Cuerpos de agua y/o acuíferos en los que exista conflicto por el uso del
recurso.

7. Cuerpos de agua y/o acuíferos que abastezcan poblaciones mayores a


2.500 habitantes.

8. Cuerpos de agua y/o acuíferos que presenten índices de escasez de medio


a alto y/o que presenten evidencias de deterioro de la calidad del recurso que
impidan su utilización9. Cuerpos de agua cuya calidad permita la presencia y
el desarrollo de especies hidrobiológicas importantes para la conservación y/o
el desarrollo socioeconómico.

Una vez priorizados los cuerpos de agua objeto de ordenamiento, se deberá


proceder a establecer la gradualidad para adelantar este proceso.

Parágrafo. Esta priorización y la gradualidad con que se desarrollará,


deberán ser incluidas en el Plan de Gestión Ambiental Regional (PGAR) de la
respectiva Corporación Autónoma Regional o de Desarrollo Sostenible
regulado por el Decreto 1200 de 2004 o en el instrumento de planificación de
largo plazo de la Autoridad Ambiental Urbana respectiva, de acuerdo con la
reglamentación vigente en la materia. Igualmente en los planes de acción de
estas autoridades deberá incluirse como proyecto el ordenamiento de los
cuerpos de agua y/o acuíferos.

Artículo 6. Aspectos mínimos del Ordenamiento del Recurso


Hídrico. Para adelantar el proceso de Ordenamiento del Recurso Hídrico, la
autoridad ambiental competente deberá tener en cuenta como mínimo:

1. Identificación del cuerpo de agua de acuerdo con la codificación


establecida en el mapa de zonificación hidrográfica del país.

2. Identificación del acuífero.

3. Identificación de los usos existentes y potenciales del recurso.

4. Los objetivos de calidad donde se hayan establecido.

5. La oferta hídrica total y disponible, considerando el caudal ambiental.

6. Riesgos asociados a la reducción de la oferta y disponibilidad del recurso


hídrico.

7. La demanda hídrica por usuarios existentes y las proyecciones por


usuarios nuevos.
8. La aplicación y calibración de modelos de simulación de la calidad del
agua, que permitan determinar la capacidad asimilativa de sustancias
biodegradables o acumulativas y la capacidad de dilución de sustancias no
biodegradables y/o utilización de índices de calidad del agua, de acuerdo con
la información disponible.

9. Aplicación de modelos de flujo para aguas subterráneas.

10. Los criterios de calidad y las normas de vertimiento vigentes en el


momento del ordenamiento.

11. Lo dispuesto en el Decreto 1541 de 1978 con relación a las concesiones


y/o la reglamentación del uso de las aguas existentes.

12. Las características naturales del cuerpo de agua y/o acuífero para
garantizar su preservación y/o conservación.

13. Los permisos de vertimiento y/o la reglamentación de los vertimientos,


planes de cumplimiento y/o planes de saneamiento y manejo de vertimientos
al cuerpo de agua.

14. La declaración de reservas y/o agotamiento.

15. La clasificación de las aguas, de conformidad con lo dispuesto en el


artículo 205 del Decreto 1541 de 1978 o de la norma que lo modifique,
adicione o sustituya.

16. La zonificación ambiental resultante del Plan de Ordenación y Manejo de


la Cuenca Hidrográfica.

17. Los demás factores pertinentes señalados en los Decretos 2811 de 1974,
1729 de 2002, 1875 de 1979 y 1541 de 1978 o las normas que los
modifiquen, adicionen o sustituyan.

Parágrafo 1°. La identificación de los usos existentes o potenciales, debe


hacerse teniendo en cuenta las características físicas, químicas, biológicas,
su entorno geográfico, cualidades escénicas y paisajísticas, las actividades
económicas y las normas de calidad necesarias para la protección de flora y
fauna acuática.

Parágrafo 2°. El ordenamiento de los cuerpos de agua y/o acuífero deberá


incluir los afluentes o zonas de recarga de los mismos.

Artículo 7°. De los modelos simulación de la calidad del recurso


hídrico. Para efectos del Ordenamiento del Recurso Hídrico, previsto en el
artículo anterior y para la aplicación de modelos de simulación de la calidad
del recurso, el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial
expedirá dentro de los ocho (8) meses, contados a partir de la fecha de
publicación de este decreto, la Guía Nacional de Modelación del Recurso
Hídrico, con base en los insumos que aporte el Instituto de Hidrología,
Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM).

Parágrafo. Mientras el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo


Territorial, expide la Guía Nacional de Modelación del Recurso Hídrico, las
autoridades ambientales competentes podrán seguir aplicando los modelos
de simulación existentes que permitan determinar la capacidad asimilativa de
sustancias biodegradables o acumulativas y la capacidad de dilución de
sustancias no biodegradables, utilizando, por lo menos los siguientes
parámetros:

1. DBO5: Demanda bioquímica de oxígeno a cinco (5) días.

2. DQO: Demanda química de oxígeno.

3. SS: Sólidos suspendidos.

4. pH: Potencial del ion hidronio, H+

5. T: Temperatura.

6. OD: Oxígeno disuelto.

7. Q: Caudal.

8. Datos Hidrobiológicos.

9. Coliformes Totales y Coliformes Fecales.

Artículo 8°. Proceso de Ordenamiento del Recurso Hídrico. El


Ordenamiento del Recurso Hídrico por parte de la autoridad ambiental
competente se realizará mediante el desarrollo de las siguientes fases:

1. Declaratoria de ordenamiento. Una vez establecida la prioridad y


gradualidad de ordenamiento del cuerpo de agua de que se trate, la autoridad
ambiental competente mediante resolución, declarará en ordenamiento el
cuerpo de agua y/o acuífero y definirá el cronograma de trabajo, de acuerdo
con las demás fases previstas en el presente artículo.

2. Diagnóstico. Fase en la cual se caracteriza la situación ambiental actual del


cuerpo de agua y/o acuífero, involucrando variables físicas, químicas y
bióticas y aspectos antrópicos que influyen en la calidad y la cantidad del
recurso.

Implica por lo menos la revisión, organización, clasificación y utilización de la


información existente, los resultados de los programas de monitoreo de
calidad y cantidad del agua en caso de que existan, los censos de usuarios,
el inventario de obras hidráulicas, la oferta y demanda del agua, el
establecimiento del perfil de calidad actual del cuerpo de agua y/o acuífero, la
determinación de los problemas sociales derivados del uso del recurso y otros
aspectos que la autoridad ambiental competente considere pertinentes.

3. Identificación de los usos potenciales del recurso. A partir de los resultados


del diagnóstico, se deben identificar los usos potenciales del recurso en
función de sus condiciones naturales y los conflictos existentes o potenciales.

Para tal efecto se deben aplicar los modelos de simulación de la calidad del
agua para varios escenarios probables, los cuales deben tener como
propósito la mejor condición natural factible para el recurso. Los escenarios
empleados en la simulación, deben incluir los aspectos ambientales, sociales,
culturales y económicos, así como la gradualidad de las actividades a
realizar, para garantizar la sostenibilidad del Plan de Ordenamiento del
Recurso Hídrico.

4. Elaboración del Plan de Ordenamiento del Recurso Hídrico. La autoridad


ambiental competente, con fundamento en la información obtenida del
diagnóstico y de la identificación de los usos potenciales del cuerpo de agua
y/o acuífero, elaborará un documento que contenga como mínimo:

a) La clasificación del cuerpo de agua en ordenamiento.

b) El inventario de usuarios.

c) El uso o usos a asignar.

d) Los criterios de calidad para cada uso.

e) Los objetivos de calidad a alcanzar en el corto, mediano y largo plazo.

f) Las metas quinquenales de reducción de cargas contaminantes de que


trata el Decreto 3100 de 2003, o la norma que lo modifique, adicione o
sustituya.

g) La articulación con el Plan de Ordenación de Cuencas Hidrográficas en


caso de existir y,
h) El programa de seguimiento y monitoreo del Plan de Ordenamiento del
Recurso Hídrico.

El Plan de Ordenamiento del Recurso Hídrico será adoptado mediante


resolución.

Parágrafo 1°. En todo caso, el Plan de Ordenamiento del Recurso Hídrico


deberá definir la conveniencia de adelantar la reglamentación del uso de las
aguas, de conformidad con lo establecido en el artículo 108 del Decreto 1541
de 1978 y la reglamentación de vertimientos según lo dispuesto en el
presente decreto o de administrar el cuerpo de agua a través de concesiones
de agua y permisos de vertimiento. Así mismo, dará lugar al ajuste de la
reglamentación del uso de las aguas, de la reglamentación de vertimientos,
de las concesiones, de los permisos de vertimiento, de los planes de
cumplimiento y de los planes de saneamiento y manejo de vertimientos y de
las metas de reducción, según el caso.

Parágrafo 2°. El Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial


expedirá la Guía para el Ordenamiento del Recurso Hídrico, dentro de los
ocho (8) meses contados a partir de la publicación del presente decreto.

Parágrafo 3°. El Plan de Ordenamiento del Recurso Hídrico, tendrá un


horizonte mínimo de diez (10) años y su ejecución se llevará a cabo para las
etapas de corto, mediano y largo plazo. La revisión y/o ajuste del plan deberá
realizarse al vencimiento del período previsto para el cumplimiento de los
objetivos de calidad y con base en los resultados del programa de
seguimiento y monitoreo del Plan de Ordenamiento del Recurso Hídrico.

CAPÍTULO IV

De la destinación genérica de las aguas superficiales, subterráneas y


marinas

Artículo 9°. Usos del agua. Para los efectos del presente decreto se tendrán
en cuenta los siguientes usos del agua:

1. Consumo humano y doméstico.

2. Preservación de flora y fauna.

3. Agrícola.

4. Pecuario.

5. Recreativo.
6. Industrial.

7. Estético.

8. Pesca, Maricultura y Acuicultura.

9. Navegación y Transporte Acuático.

Parágrafo. El Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial dentro


de los dieciocho (18) meses, contados a partir de la publicación del presente
decreto, podrá definir nuevos usos, establecer la denominación y definir el
contenido y alcance de los mismos.

Artículo 10. Uso para consumo humano y doméstico. Se entiende por uso
del agua para consumo humano y doméstico su utilización en actividades
tales como:

1. Bebida directa y preparación de alimentos para consumo inmediato.

2. Satisfacción de necesidades domésticas, individuales o colectivas, tales


como higiene personal y limpieza de elementos, materiales o utensilios.

3. Preparación de alimentos en general y en especial los destinados a su


comercialización o distribución, que no requieran elaboración.

Artículo 11. Uso para la preservación de flora y fauna. Se entiende por


uso del agua para preservación de flora y fauna, su utilización en actividades
destinadas a mantener la vida natural de los ecosistemas acuáticos y
terrestres y de sus ecosistemas asociados, sin causar alteraciones sensibles
en ellos.

Artículo 12. Uso para pesca, maricultura y acuicultura. Se entiende por


uso para pesca, maricultura y acuicultura su utilización en actividades de
reproducción, supervivencia, crecimiento, extracción y aprovechamiento de
especies hidrobiológicas en cualquiera de sus formas, sin causar alteraciones
en los ecosistemas en los que se desarrollan estas actividades.

Artículo 13. Uso agrícola. Se entiende por uso agrícola del agua, su
utilización para irrigación de cultivos y otras actividades conexas o
complementarias.

Artículo 14. Uso pecuario. Se entiende por uso pecuario del agua, su
utilización para el consumo del ganado en sus diferentes especies y demás
animales, así como para otras actividades conexas y complementarias.
Artículo 15. Uso recreativo. Se entiende por uso del agua para fines
recreativos, su utilización, cuando se produce:

1. Contacto primario, como en la natación, buceo y baños medicinales.

2. Contacto secundario, como en los deportes náuticos y la pesca.

Artículo 16. Uso industrial. Se entiende por uso industrial del agua, su
utilización en actividades tales como:

1. Procesos manufactureros de transformación o explotación, así como


aquellos conexos y complementarios.

2. Generación de energía.

3. Minería.

4. Hidrocarburos.

5. Fabricación o procesamiento de drogas, medicamentos, cosméticos,


aditivos y productos similares.

6. Elaboración de alimentos en general y en especial los destinados a su


comercialización o distribución.

Artículo 17. Navegación y transporte acuático. Se entiende por uso del


agua para transporte su utilización para la navegación de cualquier tipo de
embarcación o para la movilización de materiales por contacto directo.

Artículo 18. Uso estético. Se entenderá por uso estético el uso del agua
para la armonización y embellecimiento del paisaje.

CAPÍTULO V

De los criterios de calidad para destinación del recurso

Artículo 19. Criterios de calidad. Conjunto de parámetros y sus valores


utilizados para la asignación de usos al recurso y como base de decisión para
el Ordenamiento del Recurso Hídrico.

Artículo 20. Competencia para definir los criterios de calidad del recurso
hídrico. El Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial dentro de
los dieciocho (18) meses contados a partir de la publicación del presente
decreto, definirá los criterios de calidad para el uso de las aguas superficiales,
subterráneas y marinas.
Artículo 21. Rigor subsidiario para definir los criterios de calidad del
recurso hídrico. La autoridad ambiental competente, con fundamento en el
artículo 63 de la Ley 99 de 1993, podrá hacer más estrictos los criterios de
calidad de agua para los distintos usos previa la realización del estudio
técnico que lo justifique.

El criterio de calidad adoptado en virtud del principio del rigor subsidiario por
la autoridad ambiental competente, podrá ser temporal o permanente.

Artículo 22. Criterios de Calidad para usos múltiples. En aquellos tramos


del cuerpo de agua o acuífero en donde se asignen usos múltiples, los
criterios de calidad para la destinación del recurso corresponderán a los
valores más restrictivos de cada referencia.

Artículo 23. Control de los criterios de calidad del recurso hídrico. La


autoridad ambiental competente realizará el control de los criterios de calidad
por fuera de la zona de mezcla, la cual será determinada para cada situación
específica por dicha autoridad, para lo cual deberá tener en cuenta lo
dispuesto en la Guía Nacional de Modelación del Recurso Hídrico.

CAPÍTULO VI

De los vertimientos

Artículo 24. Prohibiciones. No se admite vertimientos:

1. En las cabeceras de las fuentes de agua.

2. En acuíferos.

3. En los cuerpos de aguas o aguas costeras, destinadas para recreación y


usos afines que impliquen contacto primario, que no permita el cumplimiento
del criterio de calidad para este uso.

4. En un sector aguas arriba de las bocatomas para agua potable, en


extensión que determinará, en cada caso, la autoridad ambiental competente.

5. En cuerpos de agua que la autoridad ambiental competente declare total o


parcialmente protegidos, de acuerdo con los artículos 70 y 137 del Decreto-
ley 2811 de 1974.

6. En calles, calzadas y canales o sistemas de alcantarillados para aguas


lluvias, cuando quiera que existan en forma separada o tengan esta única
destinación.
7. No tratados provenientes de embarcaciones, buques, naves u otros medios
de transporte marítimo, fluvial o lacustre, en aguas superficiales dulces, y
marinas.

8. Sin tratar, provenientes del lavado de vehículos aéreos y terrestres, del


lavado de aplicadores manuales y aéreos, de recipientes, empaques y
envases que contengan o hayan contenido agroquímicos u otras sustancias
tóxicas.

9. Que alteren las características existentes en un cuerpo de agua que lo


hacen apto para todos los usos determinados en el artículo 9° del presente
decreto.

10. Que ocasionen altos riesgos para la salud o para los recursos
hidrobiológicos.

Artículo 25. Actividades no permitidas. No se permite el desarrollo de las


siguientes actividades.

1. El lavado de vehículos de transporte aéreo y terrestre en las orillas y en los


cuerpos de agua, así como el de aplicadores manuales y aéreos de
agroquímicos y otras sustancias tóxicas y sus envases, recipientes o
empaques.

2. La utilización del recurso hídrico, de las aguas lluvias, de las provenientes


de acueductos públicos o privados, de enfriamiento, del sistema de aire
acondicionado, de condensación y/o de síntesis química, con el propósito de
diluir los vertimientos, con anterioridad al punto de control del vertimiento.

3. Disponer en cuerpos de aguas superficiales, subterráneas, marinas, y


sistemas de alcantarillado, los sedimentos, lodos, y sustancias sólidas
provenientes de sistemas de tratamiento de agua o equipos de control
ambiental y otras tales como cenizas, cachaza y bagazo. Para su disposición
deberá cumplirse con las normas legales en materia de residuos sólidos.

Artículo 26. Requerimientos a puertos o terminales marítimos, fluviales o


lacustres. Los puertos deberán contar con un sistema de recolección y
manejo para los residuos líquidos provenientes de embarcaciones, buques,
naves y otros medios de transporte, así como el lavado de los mismos.
Dichos sistemas deberán cumplir con las normas de vertimiento.

Artículo 27. De la reinyección de residuos líquidos. Solo se permite la


reinyección de las aguas provenientes de la exploración y explotación
petrolífera, de gas natural y recursos geotérmicos, siempre y cuando no se
impida el uso actual o potencial del acuífero.
El Estudio de Impacto Ambiental requerido para el otorgamiento de la licencia
ambiental para las actividades de exploración y explotación petrolífera, de gas
y de recursos geotérmicos, cuando a ello hubiere lugar, deberá evaluar la
reinyección de las aguas provenientes de estas actividades, previendo la
posible afectación al uso actual y potencial del acuífero.

Artículo 28. Fijación de la norma de vertimiento. Modificado por el art. 1,


Decreto Nacional 4728 de 2010 El Ministerio de Ambiente, Vivienda y
Desarrollo Territorial fijará los parámetros y los límites máximos permisibles
de los vertimientos a las aguas superficiales, marinas, a los sistemas de
alcantarillado público y al suelo.

El Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial dentro de los dos


(2) meses, contados a partir de la fecha de publicación de este decreto,
expedirá las normas de vertimientos puntuales a aguas superficiales y a los
sistemas de alcantarillado público.

Igualmente, el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial deberá


establecer las normas de vertimientos al suelo y aguas marinas, dentro de los
veinticuatro (24) meses, contados a partir de la fecha de publicación de este
decreto.

Artículo 29. Rigor subsidiario de la norma de vertimiento. La autoridad


ambiental competente con fundamento en el Plan de Ordenamiento del
Recurso Hídrico, podrá fijar valores más restrictivos a la norma de vertimiento
que deben cumplir los vertimientos al cuerpo de agua o al suelo.

Así mismo, la autoridad ambiental competente podrá exigir valores más


restrictivos en el vertimiento, a aquellos generadores que aún cumpliendo con
la norma de vertimiento, ocasionen concentraciones en el cuerpo receptor,
que excedan los criterios de calidad para el uso o usos asignados al recurso.
Para tal efecto, deberá realizar el estudio técnico que lo justifique.

Parágrafo. En el cuerpo de agua y/o tramo del mismo o en acuíferos en


donde se asignen usos múltiples, los límites a que hace referencia el presente
artículo, se establecerán teniendo en cuenta los valores más restrictivos de
cada uno de los parámetros fijados para cada uso.

Artículo 30. Infiltración de residuos líquidos. Previo permiso de vertimiento


se permite la infiltración de residuos líquidos al suelo asociado a un acuífero.
Para el otorgamiento de este permiso se deberá tener en cuenta:

1. Lo dispuesto en el Plan de Manejo Ambiental del Acuífero o en el Plan de


Ordenación y Manejo de la Cuenca respectiva, o
2. Las condiciones de vulnerabilidad del acuífero asociado a la zona de
infiltración, definidas por la autoridad ambiental competente.

Estos vertimientos deberán cumplir la norma de vertimiento al suelo que


establezca el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial.

Artículo 31. Soluciones individuales de saneamiento. Toda edificación,


concentración de edificaciones o desarrollo urbanístico, turístico o industrial,
localizado fuera del área de cobertura del sistema de alcantarillado público,
deberá dotarse de sistemas de recolección y tratamiento de residuos líquidos
y deberá contar con el respectivo permiso de vertimiento.

Artículo 32. Control de vertimientos para ampliaciones y


modificaciones. Los usuarios que amplíen su producción, serán
considerados como usuarios nuevos con respecto al control de los
vertimientos que correspondan al grado de ampliación.

Toda ampliación o modificación del proceso o de la infraestructura física,


deberá disponer de sitios adecuados que permitan la toma de muestras para
la caracterización y aforo de sus efluentes. El control de los vertimientos
deberá efectuarse simultáneamente con la iniciación de las operaciones de
ampliación o modificación.

Artículo 33. Reubicación de instalaciones. Los usuarios que no dispongan


de área apropiada para la construcción de sistemas de control de
contaminación y/o que no cumplan con las normas de vertimiento, deberán
reubicar sus instalaciones, cuando quiera que no puedan por otro medio
garantizar la adecuada disposición de sus vertimientos.

Artículo 34. Protocolo para el Monitoreo de los Vertimientos en Aguas


Superficiales, Subterráneas. Modificado por el art. 2, Decreto Nacional 4728
de 2010 El Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial expedirá
dentro de los seis (6) meses siguientes, contados a partir de la publicación del
presente decreto, el Protocolo para el Monitoreo de los Vertimientos en Aguas
Superficiales, Subterráneas, en el cual se establecerán, entre otros aspectos:
el punto de control, la infraestructura técnica mínima requerida, la
metodología para la toma de muestras y los métodos de análisis para los
parámetros a determinar en vertimientos y en los cuerpos de agua o sistemas
receptores.

Parágrafo. Mientras el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo


Territorial adopta el Protocolo para el Monitoreo de los Vertimientos en Aguas
Superficiales, Subterráneas, se seguirán los procedimientos establecidos en
la Guía para el Monitoreo de Vertimientos, Aguas Superficiales y
Subterráneas del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales
- IDEAM.

Artículo 35. Plan de Contingencia para el Manejo de Derrames


Hidrocarburos o Sustancias Nocivas. Modificado por el art. 3, Decreto
Nacional 4728 de 2010 Los usuarios que exploren, exploten, manufacturen,
refinen, transformen, procesen, transporten o almacenen hidrocarburos o
sustancias nocivas para la salud y para los recursos hidrobiológicos, deberán
estar provistos de un plan de contingencia y control de derrames, el cual
deberá contar con la aprobación de la autoridad ambiental competente.

Artículo 36. Suspensión de actividades. En caso de presentarse fallas en


los sistemas de tratamiento, labores de mantenimiento preventivo o correctivo
o emergencias o accidentes que limiten o impidan el cumplimiento de la
norma de vertimiento, de inmediato el responsable de la actividad industrial,
comercial o de servicios que genere vertimientos a un cuerpo de agua o al
suelo, deberá suspender las actividades que generan el vertimiento,
exceptuando aquellas directamente asociadas con la generación de aguas
residuales domésticas.

Si su reparación y reinicio requiere de un lapso de tiempo superior a tres (3)


horas diarias se debe informar a la autoridad ambiental competente sobre la
suspensión de actividades y/o la puesta en marcha del Plan de Gestión del
Riesgo para el Manejo de Vertimientos previsto en el artículo 44 del presente
decreto.

Artículo 37. Registro de actividades de mantenimiento. Las actividades de


mantenimiento preventivo o correctivo quedarán registradas en la minuta u
hoja de vida del sistema de pretratamiento o tratamiento de aguas residuales
del generador que desarrolle actividades industriales, comerciales o de
servicios que generen vertimientos a un cuerpo de agua o al suelo,
documento que podrá ser objeto de seguimiento, vigilancia y control por parte
de la autoridad ambiental competente.

Artículo 38. Obligación de los suscriptores y/o usuarios del prestador


del servicio público domiciliario de alcantarillado. Los suscriptores y/o
usuarios en cuyos predios o inmuebles se requiera de la prestación del
servicio comercial, industrial, oficial y especial, por parte del prestador del
servicio público domiciliario de alcantarillado, de que trata el artículo 3° del
Decreto 302 de 2000 o la norma que lo modifique, adicione o sustituya, están
obligados a cumplir la norma de vertimiento vigente.

Los suscriptores y/o usuarios previstos en el inciso anterior, deberán


presentar al prestador del servicio, la caracterización de sus vertimientos, de
acuerdo con la frecuencia que se determine en el Protocolo para el Monitoreo
de los Vertimientos en Aguas Superficiales, Subterráneas, el cual expedirá el
Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial.

Los usuarios y/o suscriptores del prestador del servicio público domiciliario de
alcantarillado, deberán dar aviso a la entidad encargada de la operación de la
planta tratamiento de residuos líquidos, cuando con un vertimiento ocasional
o accidental puedan perjudicar su operación.

Artículo 39. Responsabilidad del prestador del servicio público


domiciliario de alcantarillado. El prestador del servicio de alcantarillado
como usuario del recurso hídrico, deberá dar cumplimiento a la norma de
vertimiento vigente y contar con el respectivo permiso de vertimiento o con el
Plan de Saneamiento y Manejo de Vertimientos –PSMV reglamentado por la
Resolución 1433 de 2004 del Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo
Territorial, o la norma que lo modifique, adicione o sustituya.

Igualmente, el prestador será responsable de exigir respecto de los


vertimientos que se hagan a la red de alcantarillado, el cumplimiento de la
norma de vertimiento al alcantarillado público.

Cuando el prestador del servicio determine que el usuario y/o suscriptor no


está cumpliendo con la norma de vertimiento al alcantarillado público deberá
informar a la autoridad ambiental competente, allegando la información
pertinente, para que esta inicie el proceso sancionatorio por incumplimiento
de la norma de vertimiento al alcantarillado público.

Parágrafo. El prestador del servicio público domiciliario del alcantarillado


presentará anualmente a la autoridad ambiental competente, un reporte
discriminado, con indicación del estado de cumplimiento de la norma de
vertimiento al alcantarillado, de sus suscriptores y/o usuarios en cuyos
predios o inmuebles se preste el servicio comercial, industrial, oficial y
especial de conformidad con lo dispuesto por el artículo 3° del Decreto 302 de
2000 o la norma que lo modifique, adicione o sustituya. Este informe se
presentará anualmente con corte a 31 de diciembre de cada año, dentro de
los dos (2) meses siguientes a esta fecha.

El Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial dentro de los tres


(3) meses siguientes, contados a partir de la publicación del presente decreto,
expedirá el formato para la presentación de la información requerida en el
presente parágrafo.

Artículo 40. Control de contaminación por agroquímicos. Además de las


medidas exigidas por la autoridad ambiental competente, para efectos del
control de la contaminación del agua por la aplicación de agroquímicos, se
prohíbe:
1. La aplicación manual de agroquímicos dentro de una franja de tres (3)
metros, medida desde las orillas de todo cuerpo de agua.

2. La aplicación aérea de agroquímicos dentro de una franja de treinta (30)


metros, medida desde las orillas de todo cuerpo de agua.

Para la aplicación de plaguicidas se tendrá en cuenta lo establecido en el


Decreto 1843 de 1991 o la norma que lo modifique, adicione o sustituya.

CAPÍTULO VII

De la obtención de los permisos de vertimiento y planes de


cumplimiento

Artículo 41. Requerimiento de permiso de vertimiento. Toda persona


natural o jurídica cuya actividad o servicio genere vertimientos a las aguas
superficiales, marinas, o al suelo, deberá solicitar y tramitar ante la autoridad
ambiental competente, el respectivo permiso de vertimientos.

Parágrafo 1°. Se exceptúan del permiso de vertimiento a los usuarios y/o


suscriptores que estén conectados a un sistema de alcantarillado
público. NOTA: Parágrafo SUSPENDIDO PROVISIONALMENTE por la
Sección Primera del Consejo de Estado mediante Auto 245 de 13 de
octubre de 2011 - Expediente No. 11001-03-24-000-2011-00245-00.

Parágrafo 2°. Salvo en el caso de la Corporación para el Desarrollo


Sostenible del Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina–
Coralina, los permisos de vertimiento al medio marino, que hayan sido
otorgados por autoridades ambientales distintas al Ministerio de Ambiente,
Vivienda y Desarrollo Territorial, con anterioridad a la publicación del presente
decreto, deberán ser entregados con su respectivo expediente al Ministerio
para lo de su competencia. Se exceptúan los permisos que hayan sido
otorgados dentro de una licencia ambiental o por delegación del Ministerio de
Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial.

Artículo 42. Requisitos del permiso de vertimientos. El interesado en


obtener un permiso de vertimiento, deberá presentar ante la autoridad
ambiental competente, una solicitud por escrito que contenga la siguiente
información:

1. Nombre, dirección e identificación del solicitante y razón social si se trata


de una persona jurídica.

2. Poder debidamente otorgado, cuando se actúe mediante apoderado.


3. Certificado de existencia y representación legal para el caso de persona
jurídica.

4. Autorización del propietario o poseedor cuando el solicitante sea mero


tenedor.

5. Certificado actualizado del Registrador de Instrumentos Públicos y


Privados sobre la propiedad del inmueble, o la prueba idónea de la posesión
o tenencia.

6. Nombre y localización del predio, proyecto, obra o actividad.

7. Costo del proyecto, obra o actividad.

8. Fuente de abastecimiento de agua indicando la cuenca hidrográfica a la


cual pertenece.

9. Características de las actividades que generan el vertimiento.

10. Plano donde se identifique origen, cantidad y localización


georreferenciada de las descargas al cuerpo de agua o al suelo.

11. Nombre de la fuente receptora del vertimiento indicando la cuenca


hidrográfica a la que pertenece.

12. Caudal de la descarga expresada en litros por segundo.

13. Frecuencia de la descarga expresada en días por mes.

14. Tiempo de la descarga expresada en horas por día.

15. Tipo de flujo de la descarga indicando si es continuo o intermitente.

16. Caracterización actual del vertimiento existente o estado final previsto


para el vertimiento proyectado de conformidad con la norma de vertimientos
vigente.

17. Ubicación, descripción de la operación del sistema, memorias técnicas y


diseños de ingeniería conceptual y básica, planos de detalle del sistema de
tratamiento y condiciones de eficiencia del sistema de tratamiento que se
adoptará.

18. Concepto sobre el uso del suelo expedido por la autoridad municipal
competente.
19. Evaluación ambiental del vertimiento.

20. Plan de gestión del riesgo para el manejo del vertimiento.

21. Derogado por el art. 9, Decreto Nacional 4728 de 2010.Plan de


contingencia para la prevención y control de derrames, cuando a ello hubiere
lugar.

22. Constancia de pago para la prestación del servicio de evaluación del


permiso de vertimiento.

23. Los demás aspectos que la autoridad ambiental competente consideré


necesarios para el otorgamiento del permiso.

Parágrafo 1°. En todo caso cuando no exista compatibilidad entre los usos
del suelo y las determinantes ambientales establecidas por la autoridad
ambiental competente para el Ordenamiento Territorial, estas últimas de
acuerdo con el artículo 10 de la Ley 388 de 1997 o la norma que lo modifique,
adicione o sustituya, prevalecerán sobre los primeros.

Parágrafo 2°. Los análisis de las muestras deberán ser realizados por
laboratorios acreditados por el IDEAM, de conformidad con lo dispuesto en el
Decreto 1600 de 1994 o la norma que lo modifique, adicione o sustituya. El
muestreo representativo se deberá realizar de acuerdo con el Protocolo para
el Monitoreo de los Vertimientos en Aguas Superficiales, Subterráneas.

Parágrafo 3°. Los estudios, diseños, memorias, planos y demás


especificaciones de los sistemas de recolección y tratamiento de las aguas
residuales deberán ser elaborados por firmas especializadas o por
profesionales calificados para ello y que cuenten con su respectiva matrícula
profesional de acuerdo con las normas vigentes en la materia.

Parágrafo 4°. Los planos a que se refiere el presente artículo deberán


presentarse en formato análogo tamaño 100 cm x 70 cm y copia digital de los
mismos.

Artículo 43. Evaluación ambiental del vertimiento. Para efectos de lo


dispuesto en el numeral 19 del artículo 42 del presente decreto, la evaluación
ambiental del vertimiento solo deberá ser presentada por los generadores de
vertimientos a cuerpos de agua o al suelo que desarrollen actividades
industriales, comerciales y de servicio, así como los provenientes de
conjuntos residenciales y deberá contener como mínimo:

1. Localización georreferenciada de proyecto, obra o actividad.


2. Memoria detallada del proyecto, obra o actividad que se pretenda realizar,
con especificaciones de procesos y tecnologías que serán empleados en la
gestión del vertimiento.

3. Información detallada sobre la naturaleza de los insumos, productos


químicos, formas de energía empleados y los procesos químicos y físicos
utilizados en el desarrollo del proyecto, obra o actividad que genera
vertimientos.

4. Predicción y valoración de los impactos que puedan derivarse de los


vertimientos generados por el proyecto, obra o actividad sobre el cuerpo de
agua y sus usos o al suelo. Para tal efecto se debe tener en cuenta los
Planes de Ordenamiento del Recurso Hídrico y/o el plan de manejo ambiental
del acuífero asociado. Cuando estos no existan, la autoridad ambiental
competente definirá los términos y condiciones bajo los cuales se debe
realizar la predicción y valoración de los impactos.

5. Predicción a través de modelos de simulación de los impactos que cause el


vertimiento en el cuerpo de agua y/o al suelo, en función de la capacidad de
asimilación y dilución del cuerpo de agua receptor y de los usos y criterios de
calidad establecidos en el Plan de Ordenamiento del Recurso Hídrico.

6. Manejo de residuos asociados a la gestión del vertimiento.

7. Descripción y valoración de los proyectos, obras y actividades para


prevenir, mitigar, corregir o compensar los impactos sobre el cuerpo de agua
y sus usos o al suelo.

8. Posible incidencia del proyecto, abra o actividad en la calidad de la vida o


en las condiciones económicas, sociales y culturales de los habitantes del
sector o de la región en donde pretende desarrollarse, y medidas que se
adoptarán para evitar o minimizar efectos negativos de orden sociocultural
que puedan derivarse de la misma.

Parágrafo 1°. La modelación de que trata el presente artículo, deberá


realizarse conforme a la Guía Nacional de Modelación del Recurso Hídrico.
Mientras se expide la guía, los usuarios continuarán aplicando los modelos de
simulación existentes.

Parágrafo 2°. Para efectos de la aplicación de lo dispuesto en este artículo


en relación con los conjuntos residenciales, la autoridad ambiental definirá los
casos en los cuales no estarán obligados a presentar la evaluación ambiental
del vertimiento en función de la capacidad de carga del cuerpo receptor,
densidad de ocupación del suelo y densidad poblacional.
Parágrafo 3°. En los estudios ambientales de los proyectos, obras o
actividades sujetos a licencia ambiental, se incluirá la evaluación ambiental
del vertimiento prevista en el presente artículo.

Artículo 44. Plan de gestión del riesgo para el manejo de


vertimientos. Las personas naturales o jurídicas de derecho público o
privado que desarrollen actividades industriales, comerciales y de servicios
que generen vertimientos a un cuerpo de agua o al suelo deberán elaborar un
Plan de Gestión del Riesgo para el Manejo de Vertimientos en situaciones
que limiten o impidan el tratamiento del vertimiento. Dicho plan debe incluir el
análisis del riesgo, medidas de prevención y mitigación, protocolos de
emergencia y contingencia y programa de rehabilitación y recuperación.

Parágrafo. El Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial


mediante acto administrativo, adoptará los términos de referencia para la
elaboración de este plan dentro de los seis (6) meses, contados a partir de la
publicación del presente decreto.

Artículo 45. Procedimiento para la obtención del permiso de


vertimientos. El procedimiento es el siguiente:

1. Una vez radicada la solicitud de permiso de vertimiento, la autoridad


ambiental competente contará con diez (10) días hábiles para verificar que la
documentación esté completa, la cual incluye el pago por concepto del
servicio de evaluación. En caso que la documentación esté incompleta, se
requerirá al interesado para que la allegue en el término de diez (10) días
hábiles, contados a partir del envío de la comunicación.

2. Cuando la información esté completa, se expedirá el auto de iniciación de


trámite.

3. Dentro de los treinta (30) días hábiles siguientes a la publicación del auto
de iniciación de trámite, realizará el estudio de la solicitud de vertimiento y
practicará las visitas técnicas necesarias.

4. Dentro de los ocho (8) días hábiles siguientes a la realización de las visitas
técnicas, se deberá emitir el correspondiente informe técnico.

5. Una vez proferido dicho informe, se expedirá el auto de trámite que declare
reunida toda la información para decidir.

6. La autoridad ambiental competente decidirá mediante resolución si otorga


o niega el permiso de vertimiento, en un término no mayor a veinte (20) días
hábiles, contados a partir de la expedición del auto de trámite.
7. Contra la resolución mediante la cual se otorga o se niega el permiso de
vertimientos, procederá el recurso de reposición dentro de los cinco (5) días
hábiles siguientes a la fecha de notificación de la misma.

Parágrafo 1°. Para los efectos de la publicidad de las actuaciones que den
inicio o pongan fin a la actuación, se observará lo dispuesto en los artículos
70 y 71 de la Ley 99 de 1993.

Parágrafo 2°. Al efectuar el cobro del servicio de evaluación, la autoridad


ambiental competente aplicará el sistema y método de cálculo establecido en
el artículo 96 de la Ley 633 de 2000 y su norma que la adicione, modifique o
sustituya.

Parágrafo 3°. Las audiencias públicas que se soliciten en el trámite de un


permiso de vertimiento se realizaran conforme a lo previsto en el Decreto 330
de 2007 o la norma que lo adicione, modifique o sustituya.

Artículo 46. De la visita técnica. En el estudio de la solicitud del permiso de


vertimiento, la autoridad ambiental competente practicará las visitas técnicas
necesarias sobre el área y por intermedio de profesionales con experiencia en
la material verificará, analizará y evaluará cuando menos, los siguientes
aspectos:

1. La información suministrada en la solicitud del permiso de vertimiento,

2. Clasificación de las aguas de conformidad con lo dispuesto en el artículo


205 del Decreto 1541 de 1978.

3. Lo dispuesto en los artículos 24 y 25 del presente decreto.

4. Si el cuerpo de agua está sujeto a un Plan de Ordenamiento del Recurso


Hídrico o si se han fijado objetivos de calidad.

5. Si se trata de un cuerpo de agua reglamentado en cuanto a sus usos o los


vertimientos.

6. Plan de Manejo o condiciones de vulnerabilidad del acuífero asociado a la


zona en donde se realizará la infiltración.

7. Los impactos del vertimiento al cuerpo de agua o al suelo,

8. El plan de gestión del riesgo para el manejo del vertimiento y plan de


contingencia para el manejo de derrames hidrocarburos o sustancias nocivas.
Del estudio de la solicitud y de la práctica de las visitas técnicas se deberá
elaborar un informe técnico.

Artículo 47. Otorgamiento del permiso de vertimiento. La autoridad


ambiental competente, con fundamento en la clasificación de aguas, en la
evaluación de la información aportada por el solicitante, en los hechos y
circunstancias deducidos de las visitas técnicas practicadas y en el informe
técnico, otorgará o negará el permiso de vertimiento mediante resolución.

El permiso de vertimiento se otorgará por un término no mayor a diez (10)


años.

Artículo 48. Contenido del permiso de vertimiento. La resolución por


medio de la cual se otorga el permiso de vertimiento deberá contener por lo
menos los siguientes aspectos:

1. Nombre e identificación de la persona natural o jurídica a quien se le


otorga.

2. Nombre y localización del predio, proyecto, obra o actividad, que se


beneficiará con el permiso de vertimientos.

3. Descripción, nombre y ubicación georreferenciada de los lugares en donde


se hará el vertimiento.

4. Fuente de abastecimiento de agua indicando la cuenca hidrográfica a la


cual pertenece.

5. Características de las actividades que generan el vertimiento.

6. Un resumen de las consideraciones de orden ambiental que han sido


tenidas en cuenta para el otorgamiento del permiso ambiental.

7. Norma de vertimiento que se debe cumplir y condiciones técnicas de la


descarga.

8. Término por el cual se otorga el permiso de vertimiento y condiciones para


su renovación.

9. Relación de las obras que deben construirse por el permisionario para el


tratamiento del vertimiento, aprobación del sistema de tratamiento y el plazo
para la construcción y entrada en operación del sistema de tratamiento.
10. Obligaciones del permisionario relativas al uso de las aguas y a la
preservación ambiental, para prevenir el deterioro del recurso hídrico y de los
demás recursos relacionados.

11. Aprobación del Plan de Gestión del Riesgo para el Manejo del
Vertimiento.

12. Aprobación del Plan de Contingencia para la Prevención y Control de


Derrames, cuando a ello hubiere lugar.

13. Obligación del pago de los servicios de seguimiento ambiental y de la tasa


retributiva,

14. Autorización para la ocupación de cauce para la construcción de la


infraestructura de entrega del vertimiento al cuerpo de agua.

Parágrafo 1°. Previa a la entrada en operación del sistema de tratamiento, el


permisionario deberá informar de este hecho a la autoridad ambiental
competente con el fin de obtener la aprobación de las obras de acuerdo con
la información presentada.

Parágrafo 2°. En caso de requerirse ajustes, modificaciones o cambios a los


diseños del sistema de tratamientos presentados, la autoridad ambiental
competente deberá indicar el término para su presentación.

Parágrafo 3°. Cuando el permiso de vertimiento se haya otorgado con base


en una caracterización presuntiva, se deberá indicar el término dentro del cual
se deberá validar dicha caracterización.

Artículo 49. Modificación del permiso de vertimiento. Cuando quiera que


se presenten modificaciones o cambios en las condiciones bajo las cuales se
otorgó el permiso, el usuario deberá dar aviso de inmediato y por escrito a la
autoridad ambiental competente y solicitar la modificación del permiso,
indicando en qué consiste la modificación o cambio y anexando la
información pertinente.

La autoridad ambiental competente evaluará la información entregada por el


interesado y decidirá sobre la necesidad de modificar el respectivo permiso
de vertimiento en el término de quince (15) días hábiles, contados a partir de
la solicitud de modificación. Para ello deberá indicar qué información adicional
a la prevista en el artículo 42 del presente decreto, deberá ser actualizada y
presentada.
El trámite de la modificación del permiso de vertimiento se regirá por el
procedimiento previsto para el otorgamiento del permiso de vertimiento,
reduciendo a la mitad los términos señalados en el artículo 45.

Artículo 50. Renovación del permiso de vertimiento. Las solicitudes para


renovación del permiso de vertimiento deberán ser presentadas ante la
autoridad ambiental competente, dentro del primer trimestre del último año de
vigencia del permiso. El trámite correspondiente se adelantará antes de que
se produzca el vencimiento del permiso respectivo.

Para la renovación del permiso de vertimiento se deberá observar el trámite


previsto para el otorgamiento de dicho permiso en el presente decreto. Si no
existen cambios en la actividad generadora del vertimiento, la renovación
queda supeditada solo a la verificación del cumplimiento de la norma de
vertimiento mediante la caracterización del vertimiento.

Artículo 51. Revisión. Los permisos de vertimiento deberán revisarse, y de


ser el caso ajustarse, de conformidad con lo dispuesto en el Plan de
Ordenamiento del Recurso Hídrico y/o en la reglamentación de vertimientos.

Artículo 52. Requerimiento del Plan de Cumplimiento. Modificado por el


art. 4, Decreto Nacional 4728 de 2010 Tratándose de vertimientos existentes
sin permiso de vertimiento a la entrada en vigencia del presente decreto, si de
la evaluación de la información proveniente de la caracterización del
vertimiento, así como de la documentación aportada por el solicitante, de los
hechos y circunstancias deducidos de las visitas técnicas practicadas por la
autoridad ambiental competente y del informe técnico, se concluye que no es
viable otorgar el permiso de vertimiento al cuerpo de agua o al suelo, la
autoridad ambiental competente exigirá al usuario la presentación de un Plan
de Cumplimiento, siempre y cuando el vertimiento no se realice en cuerpos
de agua Clase 1 de que trata el artículo 205 del Decreto 1541 de 1978.

El Plan de Cumplimiento deberá incluir los proyectos, obras, actividades y


buenas prácticas, que garanticen el cumplimiento de la norma de
vertimientos. Así mismo, deberá incluir sus metas, sus periodos de evaluación
y sus indicadores de seguimiento, gestión y resultados con los cuales se
determinará el avance correspondiente.

En la resolución mediante la cual se exija el Plan de Cumplimiento, se


deberán entregar los términos de referencia para la elaboración de la primera
etapa, establecer las normas de vertimiento que deben cumplirse y el plazo
para la presentación de la primera etapa del plan.

Parágrafo 1°. El Plan de Cumplimiento se presentará por una (1) sola vez y
no podrá ser prorrogado por la autoridad ambiental competente, sin embargo,
en los casos de fuerza mayor o caso fortuito definidos en los términos de la
Ley 95 de 1890 y en concordancia con el artículo 8° de la Ley 1333 de 2009,
su cumplimiento podrá ser suspendido hasta tanto se restablezcan las
condiciones normales. Para tal efecto, el interesado deberá presentar la
justificación ante la autoridad ambiental competente.

Parágrafo 2°. Los prestadores del servicio público domiciliario de


alcantarillado, se regirán por lo dispuesto en los Planes de Saneamiento y
Manejo de Vertimientos aprobados por la autoridad ambiental competente,
teniendo en cuenta lo establecido en la Resolución 1433 de 2004 del
Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, o la norma que lo
modifique, adicione o sustituya.

Artículo 53. Etapas de los Planes de Cumplimiento. En los planes de


cumplimiento se exigirá el desarrollo de las siguientes etapas:

1. Primera etapa: Elaboración del programa de ingeniería, cronograma e


inversiones y el Plan de Gestión del Riesgo para el Manejo del Vertimiento y
el Plan de Contingencia para la Prevención y Control de Derrames cuando a
ello hubiere lugar.

2. Segunda etapa: Ejecución de los proyectos, obras, actividades y buenas


prácticas propuestas, de acuerdo con el cronograma presentado y aprobado.

3. Tercera etapa: Verificación del cumplimiento de las normas de vertimiento.

Artículo 54. Plazos para la presentación de los Planes de


Cumplimiento. Modificado por el art. 5, Decreto Nacional 4728 de 2010 Los
generadores de vertimientos que no tengan permiso de vertimiento y que
estén cumpliendo con el Decreto 1594 de 1984, tendrán un plazo de hasta
seis (6) meses, contados a partir de la fecha de publicación del presente
decreto, para efectuar la legalización del mismo, sin perjuicio de las
sanciones a las que haya lugar.

Los generadores de vertimientos que no tengan permiso de vertimiento y que


no estén cumpliendo con el Decreto 1594 de 1984, tendrán un plazo de hasta
seis (6) meses, contados a partir de la fecha de publicación del presente
decreto, para presentar ante la autoridad ambiental competente el Plan de
Cumplimiento, sin perjuicio de las sanciones a las que haya lugar.

Artículo 55. Plazos para el desarrollo de los Planes de Cumplimiento. Los


plazos que podrán concederse para el desarrollo de planes de cumplimiento,
para cada una de las etapas, son los siguientes:

1. Primera etapa: Hasta tres (3) meses.


2. Segunda etapa: Hasta doce (12) meses

3. Tercera etapa: Hasta tres (3) meses

Artículo 56. Aprobación del Plan de Cumplimiento. La autoridad ambiental


competente tendrá un plazo de tres (3) meses, contados a partir de la
radicación del Plan de Cumplimiento para pronunciarse sobre su aprobación.

La resolución mediante la cual se aprueba el Plan de Cumplimiento deberá


relacionar el programa de ingeniería, cronograma e inversiones, Plan de
Gestión del Riesgo para el Manejo del Vertimiento, Plan de Contingencia para
la Prevención y Control de Derrames, los proyectos, obras, actividades y
buenas prácticas aprobados.

Cuando la autoridad ambiental competente no apruebe el Plan de


Cumplimiento, se indicarán las razones para ello y se fijará al interesado un
plazo de un (1) mes para que presente los ajustes requeridos. En caso de no
presentarse dentro del término señalado para ello, el interesado deberá dar
cumplimiento inmediato a la norma de vertimiento vigente.

Artículo 57. Revisión. Los planes de cumplimiento deberán revisarse, y de


ser el caso ajustarse, de conformidad con lo dispuesto en el Plan de
Ordenamiento del Recurso Hídrico y/o en la reglamentación de vertimientos.

Artículo 58. Seguimiento de los permisos de vertimiento, los Planes de


Cumplimiento y Planes de Saneamiento y Manejo de Vertimientos–
PSMV. Con el objeto de realizar el seguimiento, control y verificación del
cumplimiento de lo dispuesto en los permisos de vertimiento, los Planes de
Cumplimiento y Planes de Saneamiento y Manejo de Vertimientos, la
autoridad ambiental competente efectuará inspecciones periódicas a todos
los usuarios.

Sin perjuicio de lo establecido en los permisos de vertimiento, en los Planes


de Cumplimiento y en los Planes de Saneamiento y Manejo de Vertimientos,
la autoridad ambiental competente, podrá exigir en cualquier tiempo y a
cualquier usuario la caracterización de sus residuos líquidos, indicando las
referencias a medir, la frecuencia y demás aspectos que considere
necesarios.

La oposición por parte de los usuarios a tales inspecciones y a la


presentación de las caracterizaciones requeridas, dará lugar a las sanciones
correspondientes.
Parágrafo. Al efectuar el cobro de seguimiento, la autoridad ambiental
competente aplicará el sistema y método de cálculo establecido en el artículo
96 de la Ley 633 de 2000 o la norma que la adicione, modifique o sustituya.

Artículo 59. Sanciones. El incumplimiento de los términos, condiciones y


obligaciones previstos en el permiso de vertimiento, Plan de Cumplimiento o
Plan de Saneamiento y Manejo de Vertimientos, dará lugar a la imposición de
las medidas preventivas y sancionatorias, siguiendo el procedimiento previsto
en la Ley 1333 de 2009 o la norma que la adicione, modifique o sustituya.

Artículo 60. Disposición de residuos líquidos provenientes de terceros. El


generador de vertimientos que disponga sus aguas residuales a través de
personas naturales o jurídicas que recolecten, transporten y/o dispongan
vertimientos provenientes de terceros, deberán verificar que estos últimos
cuenten con los permisos ambientales correspondientes.

CAPÍTULO VIII

Del Plan de Reconversión a Tecnologías Limpias en Gestión de


Vertimientos

Artículo 61. De la procedencia del Plan de Reconversión a Tecnologías


Limpias en Gestión de Vertimientos. Modificado por el art. 6, Decreto
Nacional 4728 de 2010 Los generadores de vertimientos que a la entrada en
vigencia del presente decreto sean titulares de un permiso de vertimiento
expedido con base en el Decreto 1594 de 1984, podrán optar por la ejecución
de un Plan de Reconversión a Tecnologías Limpias en Gestión de
Vertimientos.

En este evento, el Plan de Reconversión a Tecnologías Limpias en Gestión


de Vertimienos deberá ser presentado ante la autoridad ambiental
competente dentro del primer año del plazo previsto en el artículo 77 de este
decreto.

Artículo 62. Del Plan de Reconversión a Tecnologías Limpias en Gestión


de Vertimientos. Mecanismo que promueve la reconversión tecnológica de
los procesos productivos de los generadores de vertimientos que desarrollan
actividades industriales, comerciales o de servicios, y que además de dar
cumplimiento a la norma de vertimiento, debe dar cumplimiento a los
siguientes objetivos:

1. Reducir y minimizar la carga contaminante por unidad de producción, antes


del sistema de tratamiento o antes de ser mezclada con aguas residuales
domésticas.
2. Reutilizar o reciclar subproductos o materias primas, por unidad de
producción o incorporar a los procesos de producción materiales reciclados,
relacionados con la generación de vertimientos.

Parágrafo. El Plan de Reconversión a Tecnologías Limpias en Gestión de


Vertimientos es parte integral del permiso de vertimientos y en consecuencia
el mismo deberá ser modificado incluyendo el Plan.

Artículo 63. Contenido del Plan de Reconversión a Tecnologías Limpias


en Gestión de Vertimientos. El Plan de Reconversión a Tecnología Limpia,
deberá incluir como mínimo la siguiente información:

1. Descripción de la actividad industrial, comercial y de servicio.

2. Objetivo general y objetivos específicos y alcances del plan.

3. Caracterización de las aguas residuales antes del sistema de tratamiento.

4. Carga contaminante de las aguas residuales antes del sistema de


tratamiento por unidad de producto.

5. Definición precisa de los cambios parciales o totales en los procesos de


producción.

6. Definición de los indicadores con base en los cuales se realizará el


seguimiento al cumplimiento de los objetivos del Plan.

7. Estimativo de la reducción o minimización de las cargas contaminantes por


unidad de producto, antes de ser tratados por los equipos de control y antes
de ser mezclados con aguas residuales domésticas.

8. Descripción técnica de los procesos de optimización, recirculación y reuso


del agua, así como de las cantidades de los subproductos o materias primas
reciclados o reutilizados, por unidad de producción.

9. Plazo y cronograma de actividades para el cumplimiento de la norma de


vertimientos.

10. Presupuesto del costo total de la reconversión,

Parágrafo. Los generadores de vertimientos deberán presentar la


caracterización a que se refiere el numeral 3 de este artículo, teniendo en
cuenta los parámetros previstos para su actividad en la resolución mediante
la cual el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial establezca
las normas de vertimiento.
Artículo 64. Fijación de plazos para la presentación y aprobación de los
Planes de Reconversión a Tecnologías Limpias en Gestión de
Vertimientos. Los generadores de vertimientos que desarrollen actividades
industriales, comerciales o de servicios previstos en el artículo 61 del
presente decreto, tendrán un plazo de un (1) año para presentar ante la
autoridad ambiental competente el Plan de Reconversión a Tecnologías
Limpias en Gestión de Vertimientos. Este plazo se contará a partir de la fecha
de publicación del acto administrativo mediante el cual se fijan las respectivas
normas de vertimiento por parte del Ministerio de Ambiente, Vivienda y
Desarrollo Territorial.

La autoridad ambiental competente tendrá un plazo de tres (3) meses,


contados a partir de la radicación del Plan de Reconversión a Tecnologías
Limpias en Gestión de Vertimientos, para pronunciarse sobre la aprobación
del mismo.

La resolución mediante la cual se aprueba el Plan de Reconversión a


Tecnologías Limpias en Gestión de Vertimientos deberá relacionar la
definición precisa de los cambios parciales o totales en los procesos de
producción; definición de los indicadores con los cuales se determinará el
cumplimiento de los objetivos del plan; estimativo de la reducción o
minimización de las cargas contaminantes por unidad de producto, antes de
ser tratados por los equipos de control y antes de ser mezclados con aguas
residuales domésticas; descripción técnica de los procesos de optimización,
recirculación y reúso del agua, así como de las cantidades de los
subproductos o materias primas reciclados o reutilizados, por unidad de
producción y plazo y cronograma de actividades.

Cuando la autoridad ambiental competente no apruebe el Plan de


Reconversión a Tecnologías Limpias en Gestión de Vertimientos, se indicarán
las razones para ello y se fijará al interesado un plazo de un (1) mes para que
presente los ajustes requeridos. En caso de no presentarse dentro del
término señalado para ello, se entenderá que el interesado desiste de la
implementación de dicho plan y deberá dar cumplimiento a la norma de
vertimiento aplicable en los plazos correspondientes.

Parágrafo. El Plan de Reconversión a Tecnologías Limpias en Gestión de


Vertimientos se presentará por una (1) sola vez y no podrá ser prorrogado por
la autoridad ambiental competente. Sin embargo, en caso de fuerza mayor o
caso fortuito definidos en los términos de la Ley 95 de 1890 en concordancia
con el artículo 8° de la Ley 1333 de 2009, su cumplimiento podrá ser
suspendido hasta tanto se restablezcan las condiciones normales. Para tal
efecto, el interesado deberá presentar la justificación ante la autoridad
ambiental competente.
CAPÍTULO IX

Reglamentación de vertimientos

Artículo 65. Procedencia de la reglamentación de vertimientos. La


autoridad ambiental competente con el fin de obtener un mejor control de la
calidad de los cuerpos de agua, podrá reglamentar, de oficio o a petición de
parte, los vertimientos que se realicen en estos, de acuerdo con los
resultados obtenidos en el Plan de Ordenamiento del Recurso Hídrico.

El objetivo de esta reglamentación consiste en que todos los vertimientos


realizados al cuerpo de agua permitan garantizar los usos actuales y
potenciales del mismo y el cumplimiento de los objetivos de calidad.

Si del resultado del Plan de Ordenamiento del Recurso Hídrico, se determina


la conveniencia y necesidad de adelantar la reglamentación, la autoridad
ambiental competente, así lo ordenará mediante resolución.

En dicha resolución se especificará, la fecha lugar y hora de las visitas


técnicas correspondientes al proceso de reglamentación de vertimientos.

Artículo 66. Publicidad del acto que ordena la reglamentación. Con el fin
de poner en conocimiento de los interesados la resolución mediante la cual se
ordena la reglamentación de vertimientos, la autoridad ambiental competente,
dentro de los cinco (5) días hábiles siguientes a la publicación de la
resolución, procederá a:

1. Fijar por el término de diez (10) días hábiles, en un lugar público de la sede
de la autoridad ambiental competente y en su página web y en la Alcaldía o
Inspección de Policía correspondiente, copia de la resolución.

2. Publicar un (1) aviso en un (1) periódico de amplia circulación en la región


en el que se indique la fecha lugar y hora de las visitas técnicas. Si existen
facilidades en la zona, adicionalmente se emitirá este aviso a través de la
emisora radial del lugar.

Artículo 67. Efectos de la orden de reglamentar los vertimientos. Los


permisos de vertimiento que se otorguen durante el proceso de
reglamentación previsto en el presente capítulo, deberán revisarse por parte
de la autoridad ambiental competente como resultado de dicho proceso.

Artículo 68. De la visita técnica y estudio de reglamentación de


vertimientos. La visita técnica y los estudios para la reglamentación de
vertimientos, comprenderán por lo menos los siguientes aspectos:
1. Revisión y actualización de la información contenida en el Plan de
Ordenamiento del Recurso Hídrico.

2. Revisión y actualización de la georreferenciación de los vertimientos en


cartografía oficial.

3. Inventario y descripción de las obras hidráulicas.

4. Caracterización de los vertimientos.

5. Incidencia de los vertimientos en la calidad del cuerpo de agua en función


de los sus usos actuales y potenciales.

6. Análisis de la capacidad asimilativa del tramo o cuerpo de agua a


reglamentar teniendo en consideración el Ordenamiento del Recurso Hídrico
correspondiente.

Artículo 69. Proyecto de reglamentación de vertimientos. La autoridad


ambiental competente, elaborará el proyecto de reglamentación de
vertimientos, dentro de los seis (6) meses siguientes contados a partir de la
realización de las visitas técnicas y el estudio a que se refiere el artículo
anterior.

Dentro de los cinco (5) días hábiles siguientes a la elaboración del proyecto,
la autoridad ambiental competente deberá publicar un (1) aviso en un (1)
periódico de amplia circulación en la región en el que se informe sobre la
existencia del proyecto de reglamentación y el lugar donde puede ser
consultado. Si existen facilidades en la zona, adicionalmente se emitirá este
aviso a través de la emisora radial del lugar. Adicionalmente el proyecto de
reglamentación deberá ser publicado en la página web de la autoridad
ambiental competente.

Finalizado el plazo anterior, los interesados dispondrán de un plazo de veinte


(20) días calendario para presentar las objeciones del proyecto.

Artículo 70. Objeciones al proyecto de reglamentación de


vertimientos. Una vez expirado el término de objeciones la autoridad
ambiental competente, procederá a estudiarlas dentro un término no superior
a sesenta (60) días hábiles, en caso de que sean conducentes ordenará las
diligencias pertinentes.

Artículo 71. Decisión sobre la reglamentación de los vertimientos. Una


vez practicadas estas diligencias y, si fuere el caso, reformado el proyecto de
reglamentación de vertimientos, la autoridad ambiental competente,
procederá a expedir la resolución de reglamentación y su publicación se
realizará conforme a lo dispuesto en los artículos 70 y 71 de la Ley 99 de
1993.

La reglamentación de vertimientos afecta los permisos existentes, es de


aplicación inmediata e implica el otorgamiento de permisos de vertimientos
para los beneficiarios o la exigencia del plan de cumplimiento. Contra la
decisión de la autoridad ambiental competente procede el recurso de
reposición dentro de los cinco (5) días hábiles siguientes a la notificación de
la misma.

Artículo 72. De la aprobación de los sistemas de tratamiento en los


procesos de reglamentación de vertimientos. La autoridad ambiental
competente requerirá en la resolución de reglamentación de vertimientos a
los beneficiarios de la misma, la presentación de la información relacionada
con la descripción de la operación del sistema, memorias técnicas y diseños
de ingeniería conceptual y básica, planos de detalle del sistema de
tratamiento y condiciones de eficiencia del sistema de tratamiento y señalará
el plazo para su presentación.

Artículo 73. Revisión de la reglamentación de vertimientos. Cualquier


reglamentación de vertimientos podrá ser revisada por la autoridad ambiental
competente, a petición de parte interesada o de oficio, cuando hayan
cambiado las condiciones o circunstancias que se tuvieron en cuenta para
efectuarla.

Cuando quiera que la revisión de la reglamentación implique la modificación


de la misma, se deberá dar aplicación al procedimiento previsto en el
presente capítulo.

CAPÍTULO X

Registro de los permisos de vertimientos

Artículo 74. Registro de los permisos de vertimiento. De conformidad con


lo dispuesto en el artículo 64 del Decreto 2811 de 1974, la autoridad
ambiental competente deberá llevar el registro discriminado y pormenorizado
de los permisos de vertimiento otorgados, Planes de Cumplimiento y Planes
de Saneamiento y Manejo de Vertimientos.

Este registro estará integrado al Sistema de Información del Recurso Hídrico.


El Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial expedirá dentro de
los tres (3) meses, contados a partir de la publicación del presente decreto, el
Formato Único Nacional para el Registro de los Permisos de Vertimiento,
cuya información deberá ser ingresada al Sistema en mención.
CAPÍTULO XI

Disposiciones finales

Artículo 75. Transición de los permisos de vertimiento a alcantarillados


públicos. Teniendo en cuenta lo dispuesto en este decreto sobre los
suscriptores y/o usuarios conectados a la red de alcantarillado público, las
autoridades ambientales competentes deberán revisar sus actuaciones y
adoptar las medidas a que haya lugar.

Artículo 76. Régimen de transición. El Ministerio de Ambiente, Vivienda y


Desarrollo Territorial fijará mediante resolución, los usos del agua, criterios de
calidad para cada uso, las normas de vertimiento a los cuerpos de agua,
aguas marinas, alcantarillados públicos y al suelo y el Protocolo para el
Monitoreo de los Vertimientos en Aguas Superficiales, Subterráneas.

Mientras el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial expide las


regulaciones a que hace referencia el inciso anterior, en ejercicio de las
competencias de que dispone según la Ley 99 de 1993, continuarán
transitoriamente vigentes los artículos 37 a 48, artículos 72 a 79 y artículos
155, 156, 158, 160, 161 del Decreto 1594 de 1984.

Artículo 77. Régimen de transición para la aplicación de las normas de


vertimiento. Modificado por el art. 7, Decreto Nacional 4728 de 2010 Las
normas de vertimiento que expida el Ministerio de Ambiente, Vivienda y
Desarrollo Territorial se aplicarán a los generadores de vertimientos
existentes en todo el territorio nacional, de conformidad con las siguientes
reglas:

1. Los generadores de vertimiento que a la entrada en vigencia del presente


decreto tengan permiso de vertimiento vigente expedido con base en el
Decreto 1594 de 1984 y estuvieren cumpliendo con los términos, condiciones
y obligaciones establecidos en el mismo, deberán dar cumplimiento a las
nuevas normas de vertimiento, dentro de los dos (2) años, contados a partir
de la fecha de publicación de la respectiva resolución.

En caso de optar por un Plan de Reconversión a Tecnología Limpia en


Gestión de Vertimientos, el plazo de que trata el presente numeral se
ampliará en tres (3) años.

2. Los generadores de vertimiento que a la entrada en vigencia del presente


decreto tengan permiso de vertimiento vigente expedido con base en el
Decreto 1594 de 1984 y no estuvieren cumpliendo con los términos,
condiciones y obligaciones establecidos en el mismo, deberán dar
cumplimiento a las nuevas normas de vertimiento, dentro de los dieciocho
(18) meses, contados a partir de la fecha de publicación de la respectiva
resolución.

En caso de optar por un Plan de Reconversión a Tecnología Limpia en


Gestión de Vertimientos, el plazo de que trata el presente numeral se
ampliará en dos (2) años.

Artículo 78. Ajuste de los Planes de Cumplimiento. Modificado por el art.


8, Decreto Nacional 4728 de 2010 Los Planes de Cumplimiento que se hayan
aprobado antes de la entrada en vigencia de la nueva norma de vertimiento
que expida el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial,
deberán ser ajustados y aprobados, en un plazo que no podrá exceder de
tres (3) meses, contados a partir de la fecha de publicación de la respectiva
resolución.

En todo caso el plazo previsto para la ejecución del Plan de Cumplimiento no


podrá ser superior al previsto en el presente decreto.

Artículo 79. Vigencia y derogatorias. El presente decreto rige a partir de la


fecha de su publicación y deroga las disposiciones que le sean contrarias, en
especial los artículos 193, 213 a 217 y 231 del Decreto 1541 de 1978 y el
Decreto 1594 de 1984, salvo los artículos 20 y 21.

Publíquese y cúmplase

Dado en Bogotá D. C., a 25 de octubre de 2010

JUAN MANUEL SANTOS CALDERÓN

La Ministra de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial,

Beatriz Uribe Botero.

NOTA: Publicado en el Diario Oficial 47873 de octubre 25 de 2010.


Temas
Decreto Ley 2811 de 1974, Código de Recursos Naturales Renovables Artículo 1.- El ambiente es
patrimonio común. El Estado y los particulares deben participar en su preservación y manejo, que
son de utilidad pública e interés social. La preservación y manejo de los recursos naturales
renovables también son de utilidad pública e interés social. … Artículo 13.- Con el objeto de
fomentar la conservación, mejoramiento y restauración del ambiente y de los recursos naturales
renovables, el gobierno establecerá incentivos económicos. Artículo 19.- El Gobierno Nacional
calculará, por sectores de usuarios y por regiones que individualizará, los costos de prevención,
corrección o eliminación de los efectos nocivos al ambiente. Artículo 67.- De oficio o a petición de
cualquier particular interesado, se impondrá limitación de dominio o servidumbre sobre inmueble
de propiedad privada, cuando lo impongan la utilidad pública o el interés social por razón del uso
colectivo o individual de un recurso, previa declaratoria de dicho interés o utilidad efectuada con
arreglo a las leyes. Tanto la limitación o la servidumbre voluntariamente aceptadas como las que
se imponen mediante resolución o sentencia ejecutoriadas, se inscribirán en la correspondiente
oficina de instrumentos públicos, sin perjuicio de lo dispuesto en este Código sobre sistema de
registro. Se podrá solicitar el concurso de las autoridades de policía para hacer efectiva la
limitación del dominio o la servidumbre. Artículo 159.- La utilización de aguas con fines lucrativos
por personas naturales o jurídicas, públicas o privadas, dará lugar al cobro de tasas fijadas por el
gobierno nacional que se destinarán al pago de los gastos de protección y renovación de los
recursos acuíferos, entre ellos: a) Investigar e inventariar los recursos hídricos nacionales; b)
Planear su utilización; c) Proyectar aprovechamientos de beneficio común; d) Proteger y
desarrollar las cuencas hidrográficas, y e) Cubrir todos los costos directos de cada
aprovechamiento. Artículo 160.- El gobierno nacional calculará y establecerá las tasas a que haya
lugar por el uso de las aguas en actividades lucrativas. Artículo 331.- Las actividades permitidas en
el sistema de parques nacionales son las siguientes: a) En los parques nacionales, las de
conservación, de recupera ción y control, investigación, educación, recreación y de cultura; b) En
las reservas naturales las de conservación, investigación y educación; c) En las áreas naturales
únicas las de conservación, investigación y educación; d) En los santuarios de flora y fauna, las de
conservación, de recuperación y control, de investigación y educación, y e) En las vías parques, las
de conservación, educación, cultura y recreación. Artículo 332.- Las actividades permitidas en las
áreas de sistemas de parques nacionales deberán realizarse de acuerdo con las siguientes
definiciones: a) De conservación: son las actividades que contribuyen al man tenimiento en su
estado propio los recursos naturales renovables y al de las bellezas panorámicas y fomentan el
equilibrio biológico de los ecosistemas; b) De investigación: son las actividades que conducen al
conocimiento de ecosistemas y de aspectos arqueológicos y culturales, para aplicarlo al manejo y
uso de los valores naturales e históricos del país; c) De educación: son las actividades permitidas
para enseñar lo relativo al manejo, utilización y conservación de valores existentes y las dirigidas a
promover el conocimiento de las riquezas naturales e históricas del país y de la necesidad de
conservarlas; d) De recreación: son las actividades de esparcimiento permitidas a los visitantes de
áreas del sistema de parques nacionales; e) De cultura: son las actividades tendientes a promover
el conocimiento de valores propios de una región, y f) De recuperación y control: son las
actividades, estudios e investigaciones, para la restauración total o parcial de un ecosistema o para
acumulación de elementos o materias que lo condicionan. Artículo 334.- Corresponde a la
administración reservar y alindar las áreas del sistema de parques nacionales aunque hayan sido
previamente reservadas para otros fines. También compete a la administración ejercer las
funciones de protección, conservación, desarrollo y reglamentación del sistema. Artículo 1°.
Objetivos. El Ministerio De Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, tendrá como objetivos
primordiales contribuir y promover el desarrollo sostenible a través de la formulación y adopción
de las políticas, planes, programas, proyectos y regulación en materia ambiental, recursos
naturales renovables, uso del suelo, ordenamiento territorial, agua potable y saneamiento básico
y ambiental, desarrollo territorial y urbano, así como en materia habitacional integral. Artículo 19.
Unidad Administrativa Especial del Sistema de Parques Nacionales Naturales. La Unidad
Administrativa Especial del Sistema de Parques Nacionales Naturales - UAESPNN, es una
dependencia del Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, con autonomía
administrativa y financiera, en los términos del literal j) del artículo 54 de la Ley 489 de 1998,
encargada del manejo y administración del Sistema de Parques Nacionales Naturales y de los
asuntos que le sean asignados o delegados. La Unidad Administrativa Especial del Sistema de
Parques Nacionales Naturales – UAESPNN tendrá las siguientes funciones: 1. Proponer e
implementar las políticas, planes, programas, proyectos, normas y procedimientos relacionados
con las áreas del sistema de parques nacionales naturales y del sistema nacional de áreas
protegidas SINAP.… 4. Otorgar permisos, concesiones y demás autorizaciones para el uso y
aprovechamiento de los recursos naturales renovables asociados a las áreas del Sistema de
Parques Nacionales Naturales y emitir concepto para el Ministerio de Ambiente, Vivienda y
Desarrollo Territorial en materia de otorgamiento de Licencias Ambientales que afecten o puedan
afectar las áreas del Sistema de Parques Nacionales Naturales. 5. Liquidar, cobrar y recaudar
conforme a la ley, los derechos, tasas, multas, contribuciones y tarifas por el uso y
aprovechamiento de los recursos naturales asociados a las áreas del Sistema de Parques
Nacionales Naturales y demás bienes y servicios ambientales ofrecidos por dichas áreas. … 9.
Otorgar incentivos de conservación en las áreas del Sistema de Parques Nacionales Naturales, en
los términos previstos por la normatividad vigente. 10. Velar por la elaboración y mantenimiento
del registro de las Reservas Naturales de la Sociedad Civil.… 13. Orientar y coordinar la elaboración
de estudios y reglamentaciones para los programas Ecoturísticos que se puedan desarrollar en las
áreas de Sistema de Parques Nacionales Naturales.… 15. Diseñar e implementar la estrategia de
sostenibilidad financiera para la generación de recursos, que apoyen la gestión de las áreas del
Sistema de Parques Nacionales. Artículo 20. Recursos. Los recursos de la Unidad Administrativa
Especial del Sistema de Parques Nacionales Naturales estarán conformados por: 1. El valor de los
recursos provenientes de derechos, concesiones, autorizaciones, contribuciones, tasas, multas y
participaciones derivadas por el aprovechamiento de los recursos naturales asociados a las áreas
del sistema de parques nacionales naturales que perciba conforme a la ley y reglamentaciones
correspondientes. 2. Los recursos provenientes de la administración de los bienes patrimoniales,
oferta y venta de los bienes y servicios ambientales asociados a las áreas del sistema de parques
nacionales naturales. 3. Los recursos provenientes de los derechos patrimoniales derivados de la
creación, transformación, traducción, distribución, comunicación, reproducción o venta de
cualquier producto relacionado con los valores de las áreas del sistema de parques nacionales
naturales. 4. Los recursos que se llegaren a determinar, provenientes de los contratos nacionales e
internacionales de acceso a los recursos genéticos asociados a las áreas del sistema de parques
nacionales naturales, que celebre el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial. … 8.
Los recursos que el Fondo Nacional Ambiental, Fonam, o cualquier otro fondo destine para la
consolidación de las áreas del sistema de parques nacionales naturales. Parágrafo 1°. Los recursos
recaudados por el cobro de tasas, multas, tarifas, concesiones, contribuciones o por la venta de
bienes y servicios ambientales asociados a las áreas del Sistema de Parques Nacionales Naturales,
se aplicarán al cumplimiento de los objetivos señalados en la ley y en el presente decreto, sin
perjuicio de la destinación específica que tengan algunos de ellos.
Última actualización: 28 de agosto de 2017
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LEY 253 DE 1996

(enero 9)

Diario Oficial No. 42.688, de 17 de enero de 1996

Por medio de la cual se aprueba el Convenio de Basilea sobre el control de los movimientos transfronterizos
de los desechos peligrosos y su eliminación, hecho en Basilea el 22 de marzo de 1989

Resumen de Notas de Vigencia

Resumen de Notas de Vigencia

EL CONGRESO DE COLOMBIA

Visto el texto de la traducción oficial de la "CONVENIO DE BASILEA SOBRE EL CONTROL DE LOS


MOVIMIENTOS TRANSFRONTERIZOS DE LOS DESECHOS PELIGROSOS Y SU ELIMINACIÓN", hecho en
Basilea el 22 de marzo de 1989. (Para ser transcrito: se adjunta fotocopia del texto íntegro del instrumento
internacional mencionado, debidamente autenticado por el Jefe de la Oficina Jurídica del Ministerio de
Relaciones Exteriores).

CONVENIO DE BASILEA SOBRE EL CONTROL

DE LOS MOVIMIENTOS TRANSFRONTERIZOS

DE LOS DESECHOS PELIGROSOS Y SU ELIMINACIÓN

NACIONES UNIDAS 1989

PREÁMBULO

Las Partes en el presente Convenio


Consciente de que los desechos peligrosos y otros desechos y sus movimientos transfronterizos pueden causar
daños a la salud humana y al medio ambiente.

Teniendo presente el peligro creciente que para la salud humana y el medio ambiente representan la generación
y la complejidad cada vez mayores de los desechos peligrosos y otros desechos, así como sus movimientos
transfronterizos.

Teniendo presente también que la manera más eficaz de proteger la salud humana y el medio ambiente contra
los daños que entrañan tales desechos consistente en reducir su generación al mínimo desde el punto de vista
de la cantidad y los peligros potenciales,

Convencidos de que los Estados deben tomar las medidas necesarias para que el manejo de los desechos
peligrosos y otros desechos, incluyendo sus movimientos transfronterizos y su eliminación, sea compatible con
la protección de la salud humana y del medio ambiente, cualquiera que sea el lugar de su eliminación.

Tomando nota de que los Estados tienen la obligación de velar porque el generador cumpla sus funciones con
respecto al transporte y a la eliminación de los desechos peligrosos y otros desechos de forma compatible con
la protección de la salud humana y del medio ambiente, sea cual fuere el lugar en que se efectúe la eliminación.

Reconociendo plenamente que todo Estado tiene el derecho soberano de prohibir la entrada o la eliminación
de desechos peligrosos y otros desechos ajenos en su territorio.

<Párrafo adicionado. Ver Notas de Vigencia> Reconociendo que los movimientos transfroterizos de desechos
peligrosos, especialmente hacia los países en desarrollo, encierran un alto riesgo de no constituir el manejo
ambientalmente racional y eficiente de los desechos peligrosos que se perceptúa en el Convenio.

Notas de Vigencia

Reconociendo también el creciente deseo de que se prohíban los movimientos transfronterizos de los desechos
peligrosos y su eliminación en otros Estados, en particular en los países en desarrollo.

Convencida de que, en la medida en que ello sea compatible con un manejo ambientalmente racional y eficiente,
los desechos peligrosos y otros desechos deben eliminarse en el Estado en que se hayan generado.

Teniendo presente asimismo que los movimientos transfronterizos de tales desechos desde el Estado en que
se hayan generado hasta cualquier otro Estado deben permitirse solamente cuando se realicen en condiciones
que no representen peligro para la salud humana y el medio ambiente, y en condiciones que se ajustan a lo
dispuesto en el presente Convenio.

Considerando que un mejor control de los movimientos transfronterizos de desechos peligrosos y otros
desechos actuará como incentivo para su manejo ambientalmente racional y para la reducción del volumen de
tales movimientos transfronterizos.
Convencida de que los Estados deben adoptar medidas para el adecuado intercambio de información sobre los
movimientos transfronterizos de los desechos peligrosos y otros desechos que salen de esos Estados o entren
en ellos, y para el adecuado control de tales movimientos.

Tomando nota de que varios acuerdos internacionales y regionales han abordado las cuestiones de la
protección y conservación del medio ambiente en lo que concierne al tránsito de mercancías peligrosas.

Teniendo en cuenta la Declaración de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Humano
(Estocolmo, 1972), las directrices y principios de El Cairo para el manejo ambientalmente racional de desechos
peligrosos, aprobado por el Consejo de Administración del Programa de las Naciones Unidas para el Medio
Ambiente por su Decisión 14/30 de 17 de junio de 1987, las recomendaciones del Comité de Expertos en el
Transporte de Mercaderías Peligrosas de las Naciones Unidas (formuladas en 1957 y actualizadas cada dos
años), las recomendaciones, declaraciones, instrumentos y reglamentaciones pertinentes adoptados dentro del
sistema de las Naciones Unidas y la labor y los estudios realizados por otras organizaciones internacionales y
regionales.

Teniendo presente el espíritu, los principios, los objetivos y las funciones de la Carta Mundial de la Naturaleza
aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en su trigésimo séptimo período de sesiones (1982)
como norma ética con respecto a la protección del medio humano y a la conservación de los recursos naturales.

Afirmando que los Estados han de cumplir sus obligaciones internacionales relativas a la protección de la salud
humana y a la protección y conservación del medio ambiente, y son responsables de los daños de conformidad
con el derecho internacional.

Reconociendo que, de producirse una violación grave de las disposiciones del presente convenio o de
cualquiera de sus protocolos, se aplicarán las normas pertinentes del derecho internacional de los tratados.

Conscientes de lo que es preciso seguir desarrollando y aplicando tecnologías ambientalmente racionales que
generen escasos desechos, medidas de reciclado y buenos sistemas de administración y de manejo que
permitan reducir al mínimo la generación de desechos peligrosos y otros desechos.

Conscientes también de la creciente preocupación internacional por la necesidad de controlar rigurosamente


los movimientos transfronterizos de desechos peligrosos y otros desechos, así como de la necesidad de reducir,
en la medida de lo posible, esos movimientos al mínimo.

Preocupadas por el problema del tráfico ilícito transfronterizo de desechos peligrosos y otros desechos.

Teniendo en cuenta también que los países en desarrollo tienen una capacidad limitada para manejar los
desechos peligrosos y otros desechos.

Reconociendo que es preciso promover la transferencia de tecnología para el manejo racional de los desechos
peligrosos y otros desechos de producción local, particularmente a los países en desarrollo, de conformidad con
las directrices de El Cairo y la decisión 14/16 del Consejo de Administración del Programa de las Naciones
Unidas para el Medio Ambiente sobre la promoción de la transferencia de tecnología de protección ambiental.

Reconociendo también que los desechos peligrosos y otros desechos deben transportarse de conformidad con
los convenios y las recomendaciones internacionales pertinentes.
Convencidas asimismo de que los movimientos transfronterizos de desechos peligrosos y otros desechos deben
permitirse solo cuando el transporte y la eliminación final de tales desechos sean ambientalmente racionales, y

Decididas a proteger, mediante un estricto control, la salud humana y el medio ambiente contra los efectos
nocivos que pueden derivarse de la generación y el manejo de los desechos peligrosos y otros desechos,

Han Acordado lo siguiente:

ARTÍCULO 1o. ALCANCE DEL CONVENIO.

1. Serán "desechos peligrosos" a los efectos del presente Convenio los siguientes desechos que sean objeto
de movimientos transfronterizos:

a) Los desechos que pertenezcan a cualquiera de las categorías enumeradas en el anexo I, a menos que no
tengan ninguna de las características descritas en el Anexo III, y

b) Los desechos no incluidos en el apartado a), pero definidos o considerados peligrosos por la legislación
interna de la parte que sea Estado de exportación, de importación o de tránsito.

2. Los desechos que pertenezcan a cualesquiera de las categorías contenidas en el Anexo II y que sean objeto
de movimiento transfronterizo serán considerados "otros desechos" a los efectos del presente Convenio.

3. Los desechos que, por ser radiactivos, estén sometidos a otros sistemas de control internacional, incluidos
instrumentos internacionales, que se apliquen específicamente a los materiales radiactivos, quedarán excluidos
del ámbito del presente convenio.

4. Los desechos derivados de las operaciones normales de los buques cuya descarga esté regulada por otro
instrumento internacional quedarán excluidos del ámbito del presente convenio.

ARTÍCULO 2o. DEFINICIÓN. A los efectos del presente convenio:

1. Por "desechos" se entienden las sustancias u objetos a cuya eliminación se procede, se propone proceder o
se está obligado a proceder en virtud de lo dispuesto en la legislación nacional.

2. Por "manejo" se entiende la recolección, el transporte y la eliminación de los desechos peligrosos o de otros
desechos, incluida la vigilancia de los lugares de eliminación.

3. Por "movimiento transfronterizo" se entiende todo movimiento de desechos peligrosos o de otros desechos
procedentes de una zona sometida a la jurisdicción nacional de un Estado y destinado a una zona sometida a
la jurisdicción nacional de otro Estado, o a través de esta zona, o a una zona no sometida a la jurisdicción
nacional de ningún Estado o a través de esta zona, siempre que el movimiento afecte a dos Estados por lo
menos.

4. Por "eliminación" se entiende cualquiera de las operaciones especificadas en el Anexo IV del presente
convenio.
5. Por "lugar o instalación aprobado" se entiende un lugar o una instalación de eliminación de desechos
peligrosos o de otros desechos que haya recibido una autorización o un permiso de explotación a tal efecto de
una autoridad competente del Estado en que esté situado el lugar o la instalación.

6. Por "autoridad competente" se entiende la autoridad gubernamental designada por una parte para recibir, en
la zona geográfica que la Parte considere conveniente, la notificación de un movimiento transfronterizo de
desechos peligrosos o de otros desechos, así como cualquier información al respecto, y para responder a esa
notificación, de conformidad con lo dispuesto en el artículo 6.

7. Por "punto de contacto" se entiende el organismo de una parte a que se refiere el artículo 5 encargado de
recibir y proporcionar información de conformidad con lo dispuesto en los artículos 13 y 15.

8. Por "manejo ambientalmente racional de los desechos peligrosos o de otros desechos" se entiende la
adopción de todas las medidas posibles para garantizar que los desechos peligrosos y otros desechos se
manejen de manera que queden protegidos el medio ambiente y la salud humana contra los efectos nocivos
que pueden derivarse de tales desechos.

9. Por "zona sometida a la jurisdicción nacional de un Estado" se entiende toda zona terrestre, marítima o del
espacio aéreo en que un Estado ejerce, conforme al derecho internacional, competencias administrativas y
normativas en relación con la protección de la salud humana o del medio ambiente.

10. Por "Estado de Exportación" se entiende toda parte desde la cual se proyecte iniciar o se inicie un
movimiento transfronterizo de desechos eligrosos o de otros desechos.

11. Por "Estado de Importación" se entiende toda parte hacia la cual se proyecte efectuar o se efectúe un
movimiento transfronterizo de desechos peligrosos o de otros desechos con el propósito de eliminarlos en él o
de proceder a su carga para su eliminación en una zona no sometida a la jurisdicción nacional de ningún Estado.

12. Por "Estado de Tránsito" se entiende todo Estado, distinto del Estado de exportación o del Estado de
importación a través del cual se proyecte efectuar o se efectúe un movimiento de desechos peligrosos o de
otros desechos.

13. Por "Estados Interesados" se entienden las partes que sean Estados de exportación o Estados de
importación y los Estados de tránsito, sean o no Partes.

14. Por "persona" se entiende toda persona natural o jurídica.

15. Por "exportador" se entiende toda persona que organice la exportación de desechos peligrosos o de otros
desechos y esté sometida a la jurisdicción del Estado de exportación.

16. Por "importador" se entiende toda persona que organice la importación de desechos peligrosos o de otros
desechos y esté sometida a la jurisdicción del Estado de importación.

17. Por "transportista" se entiende toda persona que ejecute el transporte de desechos peligrosos o de otros
desechos.
18. Por "generador" se entiende toda persona cuya actividad produzca desechos peligrosos u otros desechos
que sean objeto de un movimiento transfronterizo o, si esa persona es desconocida, la persona que esté en
posesión de esos desechos y/o los controle.

19. Por "eliminador" se entiende toda persona a la que se expidan desechos peligrosos u otros desechos y que
ejecute la eliminación de tales desechos.

20. Por "organización de integración política y/o económica" se entiende toda organización constituida por
Estados soberanos a la que sus Estados miembros le hayan transferido competencia en las esferas regidas por
el presente convenio y que haya sido debidamente autorizada, de conformidad con sus procedimientos internos,
para firmar, ratificar, aceptar, aprobar o confirmar formalmente el convenio, o para adherirse a él.

21. Por "tráfico ilícito" se entiende cualquier movimiento transfronterizo de desechos peligrosos o de otros
desechos efectuado conforme a lo especificado en el artículo 9.

ARTÍCULO 3o. DEFINICIONES NACIONALES DE DESECHOS PELIGROSOS.

1. Toda Parte enviará a la Secretaría del Convenio, dentro de los seis meses siguientes a la fecha en que se
haga parte en el presente convenio, información sobre los desechos, salvo los enumerados en los Anexos I y
II, considerados o definidos como peligrosos en virtud de su legislación nacional y sobre cualquier requisito
relativo a los procedimientos de movimiento transfronterizo aplicable a tales desechos.

2. Posteriormente, toda Parte comunicará a la Secretaría cualquier modificación importante de la información


que haya proporcionado en cumplimiento del párrafo 1.

3. La Secretaría transmitirá inmediatamente a todas las partes la información que haya recibido en cumplimiento
de los párrafos 1 y 2 .

4. Las Partes estarán obligadas a poner a la disposición de sus exportadores la información que les transmita
la Secretaría en cumplimiento del párrafo 3.

ARTÍCULO 4o. OBLIGACIONES GENERALES.

1. a) Las partes que ejerzan su derecho a prohibir la importación de desechos peligrosos y otros desechos para
su eliminación comunicarán a las demás Partes su decisión de conformidad con el Artículo 13;

b) Las partes prohibirán o no permitirán la exportación de desechos peligrosos y otros desechos a las Partes
que hayan prohibido la importación de esos desechos, cuando dicha prohibición se les haya comunicado de
conformidad con el apartado a) del presente artículo;

c) Las Partes prohibirán o no permitirán la exportación de desechos peligrosos y otros desechos si el Estado de
importación no da su consentimiento por escrito a la importación de que se trate, siempre que dicho Estado de
importación no haya prohibido la importación de tales desechos.
2. Cada parte tomará las medidas apropiadas para:

a) Reducir al mínimo la generación de desechos peligrosos y otros desechos en ella, teniendo en cuenta los
aspectos sociales, tecnológicos y económicos;

b) Establecer instalaciones adecuadas de eliminación para el manejo ambientalmente racional de los desechos
peligrosos y otros desechos, cualquiera que sea el lugar donde se efectúa su eliminación que, en la medida de
lo posible, estará situado dentro de ella;

c) Velar porque las personas que participan en el manejo de los desechos peligrosos y otros desechos dentro
de ella adopten las medidas necesarias para impedir que ese manejo dé lugar a una contaminación y, en caso
de que se produzca ésta para reducir al mínimo sus consecuencias sobre la salud humana y el medio ambiente;

d) Velar porque el movimiento transfronterizo de los desechos peligrosos y otros desechos se reduzca al
mínimo, compatible con un manejo ambientalmente racional y eficiente de esos desechos, y que se lleve a cabo
de forma que se protejan la salud humana y el medio ambiente de los efectos nocivos que puedan derivarse de
ese movimiento;

e) No permitir la exportación de desechos peligrosos y otros desechos a un Estado o grupo de Estados


pertenecientes a una organización de integración económica y/o política que sean Partes, particularmente a
países en desarrollo, que hayan prohibido en su legislación todas las importaciones, o si tienen razones para
creer que tales desechos no serán sometidos a un manejo ambientalmente racional, de conformidad con los
criterios que adopten las partes en su primera reunión;

f) Exigir que se proporcione información a los Estados interesados sobre el movimiento transfronterizo de
desechos peligrosos y otros desechos propuesto, con arreglo a lo dispuesto en el Anexo V A. para que se
declaren abiertamente los efectos del movimiento propuesto sobre la salud humana y el medio ambiente;

g) Impedir la importación de desechos peligrosos y otros desechos si tiene razones para creer que tales
desechos no serán sometidos a un manejo ambientalmente racional;

h) Cooperar con otras partes y organizaciones interesadas directamente y por conducto de la secretaría en
actividades como la difusión de información sobre los movimientos transfronterizos de desechos peligrosos y
otros desechos, a fin de mejorar el manejo ambientalmente racional de esos desechos e impedir su tráfico ilícito;

3. Las partes considerarán que el tráfico ilícito de desechos peligrosos y otros desechos es delictivo.

4. Toda parte adoptará las medidas jurídicas, administrativas y de otra índole que sean necesarias para aplicar
y hacer cumplir las disposiciones del presente convenio, incluyendo medidas para prevenir y reprimir los actos
que contravengan el presente Convenio.

5. Ninguna Parte permitirá que los desechos peligrosos y otros desechos se exporten a un Estado que no sea
Parte o se importen de un Estado que no sea Parte.

6. Las Partes acuerdan no permitir la exportación de desechos peligrosos y otros desechos para su eliminación
en la zona situada al sur de los 60 de latitud sur, sean o no estos desechos objeto de un movimiento
transfronterizo.
7. Además toda Parte:

a) Prohibirá a todas las personas sometidas a su jurisdicción nacional el transporte o la eliminación de desechos
peligrosos y otros desechos a menos que esas personas estén autorizadas o habilitadas para realizar ese tipo
de operaciones;

b) Exigirá que los desechos peligrosos y otros desechos que sean objeto de un movimiento transfronterizo se
embalen, etiqueten y transporten de conformidad con los reglamentos y normas internacionales generalmente
aceptados y reconocidos en materia de embalaje, etiquetado y transporte y teniendo debidamente en cuenta
los usos internacionalmente admitidos al respecto;

c) Exigirá que los desechos peligrosos y otros desechos vayan acompañados de un documento sobre el
movimiento desde el punto en que se inicie el movimiento transfronterizo hasta el punto en que se eliminen los
desechos.

8. Toda parte exigirá que los desechos peligrosos y otros desechos que se vayan a exportar, sean manejados
de manera ambientalmente racional en el Estado de importación y en los demás lugares. En su primera reunión
las partes adoptarán directrices técnicas para el manejo ambientalmente racional de los desechos sometidos a
este convenio.

9) Las Partes tomarán las medidas apropiadas para que solo se permita el movimiento transfronterizo de
desechos peligrosos y otros desechos si:

a) El Estado de exportación no dispone de la capacidad técnica ni de los servicios requeridos o de lugares de


eliminación adecuados a fin de eliminar los desechos de que se trate de manera ambientalmente racional y
eficiente; o

b) Los desechos de que se trate son necesarios como materias primas para las industrias de reciclado o
recuperación en el Estado de importación, o

c) El movimiento transfronterizo de que se trate se efectúe de conformidad con otros criterios que puedan decidir
las Partes a condición de que esos criterios no contradigan los objetivos de este convenio.

10. En ninguna circunstancia podrá transferirse a los Estados de importación o de tránsito la obligación que
incumbe, con arreglo a este Convenio, a los Estados en los cuales se generan desechos peligrosos y otros
desechos de exigir que tales desechos sean manejados en forma ambientalmente racional.

11. Nada de lo dispuesto en el presente convenio impedirá que una parte imponga exigencias adicionales que
sean conformes a las disposiciones del presente convenio y estén de acuerdo con las normas del derecho
internacional, a fin de proteger mejor la salud humana y el medio ambiente.

12. Nada de lo dispuesto en el presente Convenio afectará de manera alguna a la soberanía de los Estados
sobre su mar territorial establecida de conformidad con el derecho internacional ni a los derechos soberanos y
la jurisdicción que poseen los Estados en sus zonas económicas exclusivas y en sus plataformas continentales
de conformidad con el derecho internacional, ni al ejercicio, por parte de los buques y las aeronaves de todos
los Estados, de los derechos y libertades de navegación previstos en el derecho internacional y reflejados en
los instrumentos internacionales pertinentes.
13. Las partes se comprometen a estudiar periódicamente las posibilidades de reducir la cuantía y/o el potencial
de contaminación de los desechos peligrosos y otros desechos que se exporten a otros Estados, en particular
a países en desarrollo.

ARTÍCULO 4-A. <Artículo 4A adicionado. Ver Notas de Vigencia>

1. Cada una de las partes enumeradas en el anexo VII deberá prohibir todo movimiento transfronterizo de
desechos peligrosos que estén destinados a las operaciones previstas en el anexo IV A, hacia los Estados no
enumerados en el anexo VII.

2. Cada una de las partes enumeradas en el anexo VII deberá interrumpir gradualmente hasta el 31 de diciembre
de 1997 y prohibir desde esa fecha en adelante todos los movimientos transfronterizos de desechos peligrosos
contemplados en el apartado a) del inciso y) del artículo 1 del Convenio que estén destinados a las operaciones
previstas en el anexo IV B hacia los Estados no enumerados en el anexo VII. Dicho movimiento transfronterizo
sólo quedará prohibido si los desechos de que se trata han sido caracterizados como peligrosos con arreglo a
lo dispuesto en el Convenio.

Notas de Vigencia

ARTÍCULO 5o. DESIGNACIÓN DE LAS AUTORIDADES COMPETENTES Y DEL PUNTO DE


CONTACTO.Para facilitar la aplicación del presente Convenio, las Partes:

1. Designarán o establecerán una o varias autoridades competentes y un punto de contacto. Se designará una
autoridad competente para que reciba las notificaciones en el caso de un Estado de tránsito.

2. Comunicarán a la Secretaría, dentro de los tres meses siguientes a la entrada en vigor del presente Convenio
para ellas, cuáles son los órganos que han designado como punto de contacto y cuáles son sus autoridades
competentes.

3. Comunicarán a la Secretaría, dentro del mes siguiente a la fecha de la decisión, cualquier cambio relativo a
la designación hecha por ellas en cumplimiento del párrafo 2 de este Artículo.

ARTÍCULO 6o. MOVIMIENTOS TRANSFRONTERIZOS ENTRE PARTES.

1. El Estado de exportación notificará por escrito o exigirá al generador o al exportador que notifique por escrito,
por conducto de la autoridad competente del Estado de exportación, a la autoridad competente de los Estados
interesados cualquier movimiento transfronterizo de desechos peligrosos o de otros desechos. Tal notificación
contendrá las declaraciones y la información requerida en el Anexo V A. escritas en el idioma del Estado de
importación. Solo será necesario enviar una notificación a cada Estado interesado.
2. El Estado de importación responderá por escrito al notificador, consintiendo en el movimiento con o sin
condiciones, rechazando el movimiento o pidiendo más información. Se enviará copia de la respuesta definitiva
del Estado de importación a las autoridades competentes de los Estados interesados que sean Partes.

3. El Estado de exportación no permitirá que el generador o el exportador inicie el movimiento transfronterizo


hasta que haya recibido confirmación por escrito de que:

a) El notificador ha recibido el consentimiento escrito del Estado de importación, y

b) El notificador ha recibido del Estado de importación confirmación de la existencia de un contrato entre el


exportador y el eliminador en el que se estipule que se deberá proceder a un manejo ambientalmente racional
de los desechos en cuestión.

4. Todo Estado de tránsito acusará prontamente recibo de la notificación al notificador. Posteriormente podrá
responder por escrito al notificador, dentro de un plazo de 60 días, consintiendo en el movimiento con o sin
condiciones, rechazando el movimiento o pidiendo más información. El Estado de exportación no permitirá que
comience el movimiento transfronterizo hasta que haya recibido el consentimiento escrito del Estado de tránsito.
No obstante, si una Parte decide en cualquier momento renunciar a pedir el consentimiento previo por escrito,
de manera general o bajo determinadas condiciones, para los movimientos transfronterizos de tránsito de
desechos peligrosos o de otros desechos, o bien modifica sus condiciones a este respecto, informará sin demora
de su decisión a las demás Partes de conformidad con el Artículo 13. En este último caso, si el Estado de
exportación no recibiera respuesta alguna en el plazo de 60 días a partir de la recepción de una notificación del
Estado de tránsito, el Estado de exportación podrá permitir que se proceda a la exportación a través del Estado
de tránsito.

5. Cuando, en un movimiento transfronterizo de desechos, los desechos no hayan sido definidos legalmente o
no estén considerados como desechos peligrosos más que:

a) En el Estado de exportación, las disposiciones del párrafo 9 de este Artículo aplicables al importador o al
eliminador y al Estado de importación serán aplicables mutatis mutandis al exportador y al Estado de
exportación, respectivamente, o

b) En el Estado de importación o en los Estados de importación y de tránsito que sean Partes, las disposiciones
de los párrafos 1, 3, 4 y 6 de este artículo, aplicables al exportador y al Estado de exportación, serán aplicables
mutatis mutandis al importador o al eliminador y al Estado de importación respectivamente, o

c) En cualquier Estado de tránsito que sea Parte serán aplicables las disposiciones del párrafo 4.

6. El Estado de exportación podrá, siempre que obtenga el permiso escrito de los Estados interesados, permitir
que el generador o el exportador hagan una notificación general cuando unos desechos peligrosos u otros
desechos que tengan las mismas características físicas y químicas se envíen regularmente al mismo eliminador
por la misma oficina de aduanas de salida del Estado de exportación, por la misma oficina de aduanas de
entrada del Estado de importación y, en caso de tránsito, por las mismas oficinas de aduanas de entrada y de
salida del Estado o los Estado de tránsito.

7. Los Estados interesados podrán hacer que su consentimiento escrito para la utilización de la notificación
general a que se refiere el párrafo 6 dependa de que se proporcione cierta información, tal como las cantidades
exactas de los desechos peligrosos u otros desechos que se vayan a enviar o unas listas periódicas de esos
desechos.

8. La notificación general y el consentimiento escrito a que se refieren los párrafos 6 y 7 podrán abarcar múltiples
envíos de desechos peligrosos o de otros desechos durante un plazo máximo de 12 meses.

9. Las partes exigirán que toda persona que participe en un envío transfronterizo de desechos peligrosos o de
otros desechos firme el documento relativo a ese movimiento en el momento de la entrega o de la recepción de
los desechos de que se trate. Exigirán también que el eliminador informe tanto al exportador como a la autoridad
competente del Estado de exportación de que ha recibido los desechos en cuestión y, a su debido tiempo, de
que se ha concluido la eliminación de conformidad con lo indicado en la notificación. Si el Estado de exportación
no recibe esa información, la autoridad competente del Estado de exportación o el exportador lo comunicarán
al Estado de importación.

10. La notificación y la respuesta exigidas en este Artículo se transmitirán a la autoridad competente de las
Partes interesadas o a la autoridad gubernamental que corresponda en el caso de los Estados que no sean
Parte.

11. El Estado de importación o cualquier Estado de tránsito que sea Parte podrá exigir que todo movimiento
transfronterizo de desechos peligrosos esté cubierto por un seguro, una fianza u otra garantía.

ARTÍCULO 7o. MOVIMIENTO TRANSFRONTERIZO DE UNA PARTE A TRAVES DE LOS ESTADOS QUE
NO SEAN PARTES. El párrafo 1 del Artículo 6 del presente Convenio se aplicará mutatis mutandis al
movimiento transfronterizo de los desechos peligrosos o de otros desechos de una Parte a través de un Estado
o Estados que no sean Partes.

ARTÍCULO 8o. OBLIGACIÓN DE REIMPORTAR. Cuando un movimiento transfronterizo de desechos


peligrosos o de otros desechos para el que los Estados interesados hayan dado su consentimiento con arreglo
a las disposiciones del presente Convenio no se pueda llevar a término de conformidad con las condiciones del
contrato, el Estado de exportación velará porque los desechos peligrosos en cuestión sean devueltos al Estado
de exportación por el exportador, si no se pueden adoptar otras disposiciones para eliminarlos de manera
ambientalmente racional dentro de un plazo de 90 días a partir del momento en que el Estado de importación
haya informado al Estado de exportación y a la Secretaría, o dentro del plazo en que convengan los Estados
interesados. Con este fin, ninguna Parte que sea Estado de tránsito ni el Estado de exportación se opondrán a
la devolución de tales desechos al Estado de exportación, ni la obstaculizarán o impedirán.

ARTÍCULO 9o. TRÁFICO ILÍCITO.

1. A los efectos del presente Convenio, todo movimiento transfronterizo de desechos peligrosos o de otros
desechos realizado;

a) Sin notificación a todos los Estados interesados conforme a las disposiciones del presente Convenio, o
b) Sin el consentimiento de un Estado interesado conforme a las disposiciones del presente Convenio, o

c) Con consentimiento obtenido de los Estados interesados mediante falsificación, falsas declaraciones o
fraude,

d) De manera que no corresponda a los documentos en un aspecto esencial, o

e) Que entrañe la eliminación deliberada (por ejemplo, vertimiento) de los desechos peligrosos o de otros
desechos en contravención de este Convenio y de los principios generales del derecho internacional, se
considerará tráfico ilícito.

2. En el caso de un movimiento transfronterizo de desechos peligrosos o de otros desechos considerado tráfico


ilícito como consecuencia de la conducta del exportador o el generador, el Estado de exportación velará porque
dichos desechos sean:

a) Devueltos por el exportador o el generador o si fuera necesario por él mismo, al Estado de exportación o, si
esto no fuese posible;

b) Eliminados de otro modo de conformidad con las disposiciones de este Convenio, en el plazo de 30 días
desde el momento en que el Estado de exportación haya sido informado del tráfico ilícito, o dentro de cualquier
otro período de tiempo que convengan los Estados interesados. A tal efecto, las Partes interesadas no se
opondrán a la devolución de dichos desechos al Estado de exportación, ni la obstaculizarán o impedirán.

3. Cuando un movimiento transfronterizo de desechos peligrosos o de otros desechos sea considerado tráfico
ilícito como consecuencia de la conducta del importador o el eliminador, el Estado de importación velará porque
los desechos peligrosos de que se trata sean eliminados de manera ambientalmente racional por el importador
o el eliminador o, en caso necesario, por él mismo, en el plazo de 30 días a contar del momento en que el
Estado de importación ha tenido conocimiento del tráfico ilícito, o en cualquier otro plazo que convengan los
Estados interesados. A tal efecto, las partes interesadas cooperarán, según sea necesario, para la eliminación
de los desechos en forma ambientalmente racional.

4. Cuando la responsabilidad por el tráfico ilícito no pueda atribuirse al exportador o generador ni al importador
o eliminador, las Partes interesadas u otras partes, según proceda, cooperarán para garantizar que los desechos
de que se trate se eliminen lo antes posible de manera ambientalmente racional en el Estado de exportación,
en el Estado de importación o en cualquier otro lugar que sea conveniente.

5. Cada Parte promulgará las disposiciones legislativas nacionales adecuadas para prevenir y castigar el tráfico
ilícito. Las Partes Contratantes cooperarán con miras a alcanzar los objetivos de este artículo.

ARTÍCULO 10. COOPERACIÓN INTERNACIONAL.

1. Las partes cooperarán entre sí para mejorar o conseguir el manejo ambientalmente racional de los desechos
peligrosos y otros desechos.

2. Con este fin, las Partes deberán:


a) Cuando se solicite, proporcionar información, ya sea sobre una base bilateral o multilateral, con miras a
promover el manejo ambientalmente racional de los desechos peligrosos y otros desechos, incluida la
armonización de normas y prácticas técnicas para el manejo adecuado de los desechos peligrosos y otros
desechos;

b) Cooperar en la vigilancia de los efectos del manejo de los desechos peligrosos sobre la salud humana y el
medio ambiente.

c) Cooperar, con sujeción a sus leyes, reglamentos y políticas nacionales, en el desarrollo y la aplicación de
nuevas tecnologías ambientalmente racionales y que generen escasos desechos y en el mejoramiento de las
tecnologías actuales con miras a eliminar, en la mayor medida posible, la generación de desechos peligrosos y
otros desechos y a lograr métodos más eficaces y eficientes para su manejo ambientalmente racional, incluido
el estudio de los efectos económicos, sociales y ambientales de la adopción de tales tecnologías nuevas o
mejoradas;

d) Cooperar activamente, con sujeción a sus leyes, reglamentos y políticas nacionales, en la transferencia de
tecnología y los sistemas de administración relacionados con el manejo ambientalmente racional de los
desechos peligrosos y otros desechos. Asimismo, deberán cooperar para desarrollar la capacidad técnica entre
las Partes, especialmente las que necesiten y soliciten asistencia en esta esfera;

e) Cooperar en la elaboración de las directrices técnicas o los códigos de práctica apropiados, o ambas cosas.

3. Las Partes utilizarán medios adecuados de cooperación para el fin de prestar asistencia a los países en
desarrollo en lo que concierne a la aplicación de los apartados a), b) y c) del párrafo 2 del Artículo 4.

4. Habida cuenta de las necesidades de los países en desarrollo, la cooperación entre las Partes y las
organizaciones internacionales pertinentes debe promover, entre otras cosas, la toma de conciencia pública, el
desarrollo del manejo racional de los desechos peligrosos y otros desechos y la adopción de nuevas tecnologías
que generen escasos desechos.

ARTÍCULO 11. ACUERDOS BILATERALES, MULTILATERALES Y REGIONALES.

1. No obstante lo dispuesto en el párrafo 5 del artículo 4, las Partes podrán concertar acuerdos o arreglos
bilaterales, multilaterales o regionales sobre el movimiento transfronterizo de los desechos peligrosos y otros
desechos, con Partes o con Estados que no sean Partes siempre que dichos acuerdos o arreglos no
menoscaben el manejo ambientalmente racional de los desechos peligrosos y otros desechos que estipula el
presente convenio. Estos acuerdos o arreglos estipularán disposiciones que no sean menos ambientalmente
racionales que las previstas en el presente Convenio, tomando en cuenta en particular los intereses de los
países en desarrollo.

2. Las Partes notificarán a la Secretaría todos los acuerdos o arreglos bilaterales, multilaterales y regionales a
que se refiere el párrafo 1, así como los que hayan concertado con anterioridad a la entrada en vigor del presente
Convenio para ellos, con el fin de controlar los movimientos transfronterizos de los desechos peligrosos y otros
desechos que se llevan a cabo enteramente entre las Partes en tales acuerdos. Las disposiciones de este
Convenio no afectarán a los movimientos transfronterizos que se efectúan en cumplimiento de tales acuerdos,
siempre que estos acuerdos sean compatibles con la gestión ambientalmente racional de los desechos
peligrosos y otros desechos que estipula el presente convenio.

ARTÍCULO 12. CONSULTAS SOBRE LA RESPONSABILIDAD. Las partes cooperarán con miras a adoptar
cuanto antes un protocolo que establezca las normas y procedimientos apropiados en lo que se refiere a la
responsabilidad y la indemnización de los daños resultantes del movimiento transfronterizo y la eliminación de
los desechos peligrosos y otros desechos.

ARTÍCULO 13. TRANSMISION DE INFORMACION.

1. Las partes velarán porque, cuando llegue a su conocimiento, se informe inmediatamente a los Estados
interesados en el caso de un accidente ocurrido durante los movimientos transfronterizos de desechos
peligrosos o de otros desechos o su eliminación que pueda presentar riesgos para la salud humana y el medio
ambiente en otros Estados.

2. Las Partes se informarán entre sí, por conducto de la secretaría, acerca de:

a) Los cambios relativos a la designación de las autoridades competentes y/o los puntos de contacto, de
conformidad con el artículo 5;

b) Los cambios en su definición nacional de desechos peligrosos, con arreglo al artículo 3; y, lo antes posible,
acerca de:

c) Las decisiones que hayan tomado de no autorizar, total o parcialmente, la importación de desechos peligrosos
u otros desechos para su eliminación dentro de la zona bajo su jurisdicción nacional;

d) Las decisiones que hayan tomado de limitar o prohibir la exportación de desechos peligrosos u otros
desechos;

e) Toda otra información que se requiera con arreglo al párrafo 4 de este artículo.

3. Las Partes, en consonancia con las leyes y reglamentos nacionales, transmitirán, por conducto de la
Secretaría, a la conferencia de las Partes establecida en cumplimiento del artículo 15, antes del final de cada
año civil, un informe sobre el año civil precedente que contenga la siguiente información:

a) Las autoridades competentes y los puntos de contacto que hayan designado con arreglo al artículo 5;

b) Información sobre los movimientos transfronterizos de desechos peligrosos o de otros desechos en los que
hayan participado, incluidas:

i) La cantidad de desechos peligrosos y otros desechos exportados, su categoría, sus características, su destino,
el país de tránsito y el método de eliminación, tal como constan en la respuesta a la notificación;
ii) La cantidad de desechos peligrosos importados, su categoría, características, origen y el método de
eliminación;

iii) Las operaciones de eliminación a las que no procedieron en la forma prevista;

iv) Los esfuerzos realizados para obtener una reducción de la cantidad de desechos peligrosos y otros desechos
sujetos a movimiento transfronterizo;

c) Información sobre las medidas que hayan adoptado en cumplimiento del presente convenio;

d) Información sobre las estadísticas calificadas que hayan compilado acerca de los efectos que tengan sobre
la salud humana y el medio ambiente la generación, el transporte y la eliminación de los desechos peligrosos;

e) Información sobre los recursos y arreglos bilaterales, unilaterales y regionales concertados de conformidad
con el artículo 11 de presente convenio;

f) Información sobre los accidentes ocurridos durante los movimientos transfronterizos y la eliminación de
desechos peligrosos y otros desechos y sobre las medidas tomadas para subsanarlos;

g) Información sobre los diversos métodos de eliminación utilizados dentro de las zonas bajo su jurisdicción
nacional;

h) Información sobre las medidas adoptadas a fin de desarrollar tecnologías para la reducción y/o eliminación
de la generación de desechos peligrosos y otros desechos, e

i) Las demás cuestiones que la conferencia de las Partes considere pertinentes.

4. Las partes, de conformidad con las leyes y los reglamentos nacionales, velarán porque se envíen a la
Secretaría copias de cada notificación relativa a cualquier movimiento transfronterizo determinado de desechos
peligrosos o de otros desechos, y de la respuesta a esa notificación, cuando una Parte que considere que ese
movimiento transfronterizo puede afectar a su medio ambiente haya solicitado que así se haga.

ARTÍCULO 14. ASPECTOS FINANCIEROS.

1. Las Partes convienen en que, en función de las necesidades específicas de las diferentes regiones y
subregiones, deben establecerse centros regionales de capacitación y transferencia de tecnología con respecto
al manejo de desechos peligrosos y otros desechos y a la reducción al mínimo de su generación. Las Partes
Contratantes adoptarán una decisión sobre el establecimiento de mecanismos de financiación apropiados de
carácter voluntario.

2. Las Partes examinarán la conveniencia de establecer un fondo rotatorio para prestar asistencia provisional
en situaciones de emergencia, con el fin de reducir al mínimo los daños debidos a accidentes causados por el
movimiento transfronterizo y la eliminación de desechos peligrosos y otros desechos.
ARTÍCULO 15. CONFERENCIA DE LAS PARTES.

1. Queda establecida una conferencia de las Partes. El Director Ejecutivo del Programa de las Naciones Unidas
para el Medio Ambiente convocará la primera reunión de la conferencia de las Partes a más tardar un año
después de la entrada en vigor del presente convenio. Ulteriormente, se celebrarán reuniones ordinarias de la
conferencia de las Partes a los intervalos regulares que determine la conferencia en su primera reunión.

2. Las reuniones extraordinarias de la conferencia de las Partes se celebrarán cuando la conferencia lo estime
necesario o cuando cualquiera de las Partes lo solicite por escrito, siempre que, dentro de los seis meses
siguientes a la fecha en que la solicitud les sea comunicada por la secretaría, un tercio de las Partes, como
mínimo, apoye esa solicitud.

3. La conferencia de las Partes acordará y adoptará por consenso su reglamento interno y los de cualesquiera
órganos subsidiarios que establezca, así como las normas financieras para determinar, en particular, la
participación financiera de las Partes con arreglo al presente convenio.

4. En su primera reunión, las Partes considerarán las medidas adicionales necesarias para facilitar el
cumplimiento de sus responsabilidades con respecto a la protección y conservación del medio ambiente marino
en el ontexto del presente convenio.

5. La conferencia de las partes examinará y evaluará permanentemente la aplicación efectiva del presente
Convenio, y además:

a) Promoverá la armonización de políticas, estrategias y medidas apropiadas para reducir al mínimo los daños
causados a la salud humana y el medio ambiente por los desechos peligrosos y otros desechos;

b) Examinará y adoptará, según proceda, las enmiendas al presente convenio y sus anexos teniendo en cuenta,
entre otras cosas, la información científica, técnica, económica y ambiental disponible;

c) Examinará y tomará todas las demás medidas necesarias para la consecución de los fines del presente
Convenio a la luz de la experiencia adquirida durante su aplicación y en la de los acuerdos y arreglos a que se
refiere el artículo 11;

d) Examinará y adoptará protocolos según proceda, y

e) Creará los órganos subsidiarios que se estimen necesarios para la aplicación del presente Convenio.

6. Las Naciones Unidas y sus organismos especializados, así como todo Estado que no sea Parte en el presente
convenio, podrán estar representados como observadores en las reuniones de la conferencia de las Partes.
Cualquier otro órgano u organismo nacional o internacional, gubernamental o no gubernamental, con
competencia en las esferas relacionadas con los desechos peligrosos y otros desechos que haya informado a
la secretaría de su deseo de estar representado en una reunión de la conferencia de las partes como observador
podrá ser admitido a participar a menos que un tercio por lo menos de las Partes presentes se opongan a ello.
La admisión y participación de observadores estarán sujetas al reglamento aprobado por la conferencia de las
Partes.
7. La conferencia de las Partes procederá, tres años después de la entrada en vigor del Convenio, y
ulteriormente por lo menos cada seis años, a evaluar su eficacia y, si fuera necesario, a estudiar la posibilidad
de establecer una prohibición completa o parcial de los movimientos transfronterizos de los desechos peligrosos
y otros desechos a la luz de la información científica, ambiental, técnica y económica más reciente.

ARTÍCULO 16. SECRETARÍA.

1. La secretaría tendrá las siguientes funciones:

a) Organizar las reuniones a que se refieren los artículos 15 y 17 y prestarles servicios;

b) Preparar y transmitir informes basados en la información recibida de conformidad con los artículos 3, 4, 6, 11
y 13, así como en la información obtenida con ocasión de las reuniones de los órganos subsidiarios creados
con arreglo a lo dispuesto en el artículo 15, y también, cuando proceda, en la información proporcionada por las
entidades intergubernamentales y no gubernamentales pertinentes;

c) Preparar informes acerca de las actividades que realice en el desempeño de sus funciones con arreglo al
presente convenio y presentarlos a la conferencia de las partes;

d) Velar por la coordinación necesaria con otros órganos internacionales pertinentes y, en particular, concertar
los arreglos administrativos y contractuales que puedan ser necesarios para el desempeño eficaz de sus
funciones;

e) Comunicarse con las autoridades competentes y los puntos de contacto establecidos por las Partes de
conformidad con el artículo 5 del presente Convenio;

f) Recabar información sobre los lugares e instalaciones nacionales autorizados de las Partes, disponibles para
la eliminación de sus desechos peligrosos y otros desechos, y distribuir esa información entre las Partes;

g) Recibir y transmitir información de y a las Partes sobre:

- Fuentes de asistencia y capacitación técnicas;

- Conocimientos técnicos y científicos disponibles;

- Fuentes de asesoramiento y conocimientos prácticos; y disponibilidad de recursos, con miras a prestar


asistencia a las Partes que lo soliciten en sectores como:

- El funcionamiento del sistema de notificación establecido en el presente convenio;

- El manejo de desechos peligrosos y otros desechos;

- Las tecnologías ambientalmente racionales relacionadas con los desechos peligrosos y otros desechos, como
las tecnologías que generan pocos o ningún desecho;
- La evaluación de las capacidades y los lugares de eliminación;

- La vigilancia de los desechos peligrosos y otros desechos;

- Las medidas de emergencia;

h) Proporcionar a las Partes que lo soliciten información sobre consultores o entidades consultivas que posean
la competencia técnica necesaria en esta esfera y puedan prestarles asistencia para examinar la notificación de
un movimiento transfronterizo, la conformidad de un envío de desechos peligrosos o de otros desechos con la
notificación pertinente y/o la idoneidad de las instalaciones propuestas para la eliminación ambientalmente
racional de los desechos peligrosos y otros desechos, cuando tenga razones para creer que tales desechos no
se manejarán de manera ambientalmente racional, ninguno de estos exámenes debería correr a cargo de la
Secretaría;

i) Prestar asistencia a las Partes que lo soliciten para determinar los casos de tráfico ilícito y distribuir de
inmediato a las Partes interesadas toda información que haya recibido en relación con el tráfico ilícito;

j) Cooperar con las partes y con las organizaciones y los organismos internacionales pertinentes y competentes
en el suministro de expertos y equipos a fin de prestar rápidamente asistencia a los Estados en caso de
situaciones de emergencia, y

k) Desempeñar las demás funciones relacionadas con los fines del presente Convenio que determine la
conferencia de las Partes.

2. El Programa de las Naciones Unidas para el Medio ambiente desempeñará con carácter provisional las
funciones de secretaría hasta que termine la primera reunión de la conferencia de las Partes celebrada de
conformidad con lo dispuesto en el artículo 15.

3. En su primera reunión, la conferencia de las partes designará la secretaría de entre las organizaciones
intergubernamentales competentes existentes que hayan declarado que están dispuestas a desempeñar las
funciones de secretaría establecidas en el presente Convenio. En esa reunión, la conferencia de las Partes
también evaluará la ejecución por la Secretaría interina de las funciones que le hubieren sido encomendadas,
particularmente en virtud del párrafo 1 de este artículo, y decidirá las estructuras apropiadas para el desempeño
de esas funciones.

ARTÍCULO 17. ENMIENDAS AL CONVENIO.

1. Cualquiera de las Partes podrá proponer enmiendas al presente Convenio y cualquier Parte en un protocolo
podrá proponer enmiendas a dicho protocolo. En esas enmiendas se tendrán debidamente en cuenta, entre
otras cosas, las consideraciones científicas y técnicas pertinentes.

2. Las enmiendas al presente convenio se adoptarán en una reunión de la conferencia de las Partes. Las
enmiendas a cualquier protocolo se aprobarán en una reunión de las Partes en el protocolo de que se trate, el
texto de cualquier enmienda propuesta al presente convenio o a cualquier protocolo, salvo si en tal protocolo se
dispone otra cosa, será comunicado a las partes por la Secretaría por lo menos seis meses antes de la reunión
en que se proponga su adopción. La Secretaría comunicará también las enmiendas propuestas a los signatarios
del presente Convenio para su información.

3. Las partes harán todo lo posible por llegar a un acuerdo por consenso sobre cualquier propuesta de enmienda
al presente Convenio. Una vez agotados todos los esfuerzos por lograr un consenso sin que se haya llegado a
un acuerdo, la enmienda se adoptará, como último recurso, por mayoría de tres cuartos de las partes presentes
y votantes en la reunión, y será presentada a todas las Partes por el depositario para su ratificación, aprobación,
confirmación formal o aceptación.

4. El procedimiento mencionado en el párrafo 3 de este artículo se aplicará a las enmiendas de cualquier


protocolo, con la salvedad de que para su adopción bastará una mayoría de dos tercio de las Partes en dicho
protocolo presentes y votantes en la reunión.

5) Los instrumentos de ratificación, aprobación, confirmación formal o aceptación de las enmiendas se


depositarán con el Depositario. Las enmiendas adoptadas de conformidad con los párrafos 3 o 4 de este artículo
entrarán en vigor, respecto de las Partes que las hayan aceptado, el nonagésimo día después de la fecha en
que el Depositario haya recibido el instrumento de su ratificación, aprobación, confirmación formal o aceptación
por tres cuartos, como mínimo, de las Partes que hayan aceptado las enmiendas al protocolo de que se trate,
salvo si en éste se ha dispuesto otra cosa. Las enmiendas entrarán en vigor respecto de cualquier otra parte el
nonagésimo día después de la fecha en que esa Parte haya depositado su instrumento de ratificación,
aprobación, confirmación formal o aceptación de las enmiendas.

6. A los efectos de este artículo, por "Partes presentes y votantes" se entiende las Partes que estén presentes
y emitan un voto afirmativo o negativo.

ARTÍCULO 18. ADOPCIÓN Y ENMIENDA DE ANEXOS.

1. Los anexos del presente convenio o de cualquier protocolo formarán parte integrante del presente Convenio
o del protocolo de que se trate, según proceda y, a menos que se disponga expresamente otra cosa, se
entenderá que toda referencia al presente convenio o a sus protocolos se refiere al mismo tiempo a cualquiera
de los anexos. Esos anexos estarán limitados a cuestiones científicas, técnicas y administrativas.

2. Salvo si se dispone otra cosa en cualquiera de los protocolos, respecto de sus anexos, para la propuesta,
adopción y entrada en vigor de anexos adicionales del presente Convenio o de anexos de un protocolo, se
seguirá el siguiente procedimiento:

a) Los anexos del presente Convenio y de sus protocolos serán propuestos y adoptados según el procedimiento
prescrito en los párrafos 2, 3 y 4 del artículo 17;

b) Cualquiera de las Partes que no pueda aceptar un anexo adicional del presente Convenio o un anexo de
cualquiera de los protocolos en que sea parte, lo notificará por escrito al Depositario dentro de los seis meses
siguientes a la fecha de la comunicación de la adopción por el Depositario. El Depositario comunicará sin
demora a todas las Partes cualquier notificación recibida. Una Parte podrá en cualquier momento sustituir una
declaración anterior de objeción por una aceptación y, en tal caso, los anexos entrarán en vigor respecto de
dicha Parte;
c) Al vencer el plazo de seis meses desde la fecha de la distribución de la comunicación por el Depositario, el
anexo surtirá efecto para todas las Partes en el presente Convenio o en el protocolo de que se trate que no
hayan hecho una notificación de conformidad con lo dispuesto en el apartado b) de este párrafo.

3. Para la propuesta, adopción y entrada en vigor de enmiendas a los anexos del presente Convenio o de
cualquier protocolo se aplicará el mismo procedimiento que para la propuesta, adopción y entrada en vigor de
anexos del Convenio o anexos de un protocolo. En los anexos y sus enmiendas se deberán tener debidamente
en cuenta, entre otras cosas, las consideraciones científicas y técnicas pertinentes.

4. Cuando un nuevo anexo o una enmienda a un anexo entrañe una enmienda al presente Convenio o a
cualquier protocolo, el nuevo anexo o el anexo modificado no entrará en vigor hasta que entre en vigor la
enmienda al presente Convenio o al protocolo.

ARTÍCULO 19. VERIFICACIÓN. Toda Parte que tenga razones para creer que otra Parte está actuando o
ha actuado en violación de sus obligaciones con arreglo al presente Convenio, podrá informar de ello a la
Secretaría y, en ese caso, informará simultánea e inmediatamente, directamente o por conducto de la
Secretaría, a la Parte contra la que ha presentado la alegación. La Secretaría facilitará toda la información
pertinente a las Partes.

ARTÍCULO 20. SOLUCIÓN DE CONTROVERSIAS.

1. Si se suscita una controversia entre Partes en relación con la interpretación, aplicación o cumplimiento del
presente Convenio o de cualquiera de sus protocolos, las Partes tratarán de resolverla mediante la negociación
o por cualquier otro medio pacífico de su elección.

2. Si las Partes interesadas no pueden resolver su controversia por los medios mencionados en el párrafo
anterior, la controversia se someterá, si las Partes en la controversia así lo acuerdan, a la Corte Internacional
de Justicia o a arbitraje en las condiciones establecidas en el anexo VI sobre arbitraje. No obstante, si no existe
común acuerdo para someter la controversia a la Corte Internacional de Justicia o a arbitraje, las Partes no
quedarán exentas de la obligación de seguir tratando de resolverla por los medios mencionados en el párrafo
1.

3. Al ratificar, aceptar, aprobar o confirmar formalmente el presente Convenio, o al adherirse a él, o en cualquier
momento posterior, un Estado u organización de integración política y/o económica podrá declarar que reconoce
como obligatoria de pleno derecho y sin acuerdo especial, respecto de cualquier otra Parte que acepte la misma
obligación, la sumisión de la controversia:

a) A la Corte Internacional de Justicia y/o

b) A arbitraje de conformidad con los procedimientos establecidos en el anexo VI.

Esa declaración se notificará por escrito a la Secretaría, la cual la comunicará a las Partes.
ARTÍCULO 21. FIRMA. El presente Convenio estará abierto a la firma de los Estados, de Namibia, representada
por el Consejo de las Naciones Unidas para Namibia, y de las organizaciones de integración política y/o
económica en Basilea el 22 de marzo de 1989, en el Departamento Federal de Relaciones Exteriores de Suiza,
en Berna, desde el 23 de marzo hasta el 30 de junio de 1989 y en la Sede de las Naciones Unidas en Nueva
York desde el 1o. de julio de 1989 hasta el 22 de marzo de 1990.

ARTÍCULO 22. RATIFICACIÓN, ACEPTACIÓN, CONFIRMACIÓN FORMAL O APROBACIÓN.

1. El presente Convenio estará sujeto a ratificación, aceptación o aprobación por los Estados y por Namibia,
representada por el Consejo de las Naciones Unidas para Namibia, y a confirmación formal o aprobación por
las organizaciones de integración política y/ o económica. Los instrumentos de ratificación, aceptación,
confirmación formal o aprobación se depositarán en poder del Depositario.

2. Toda organización de la índole a que se refiere el párrafo 1 de este artículo que llegue a ser Parte en el
presente Convenio sin que sea Parte en él ninguno de sus Estados miembros, estará sujeta a todas las
obligaciones enunciadas en el Convenio. Cuando uno o varios Estados miembros de esas organizaciones sean
Partes en el Convenio, la organización y sus Estados miembros decidirán acerca de sus responsabilidades
respectivas en lo que concierne a la ejecución de las obligaciones que les incumben en virtud del Convenio. En
tales casos, la organización y los Estados miembros no estarán facultados para ejercer simultáneamente los
derechos que establezca el Convenio.

3. En sus instrumentos de confirmación formal o aprobación, las organizaciones a que se refiere el párrafo 1 de
este artículo especificarán el alcance de sus competencias en las materias regidas por el Convenio. Esas
organizaciones informarán asimismo al Depositario, quien informará a las Partes contratantes de cualquier
modificación importante del alcance de sus competencias.

ARTÍCULO 23. ADHESIÓN.

1. El presente convenio estará abierto a la adhesión de los Estados, de Namibia, representada por el Consejo
de las Naciones Unidas para Namibia, y de las organizaciones de integración política y/o económica desde el
día siguiente a la fecha en que el Convenio haya quedado cerrado a la firma. Los instrumentos de adhesión se
depositarán en poder del Depositario.

2. En sus instrumentos de adhesión, las organizaciones a que se refiere el párrafo 1 de este artículo
especificarán el alcance de sus competencias en las materias regidas por el Convenio. Esas organizaciones
informarán asimismo al Depositario de cualquier modificación importante del alcance de sus competencias.

3. Las disposiciones del párrafo 2 del Artículo 22 se aplicarán a las organizaciones de integración política y/o
económica que se adhieran al presente Convenio.

ARTÍCULO 24. DERECHO DE VOTO.


1. Salvo lo dispuesto en el párrafo 2 de este artículo, cada Parte en el presente Convenio tendrá un voto.

2. Las organizaciones de integración política y/o económica ejercerán su derecho de voto, en asuntos de su
competencia, de conformidad con el párrafo 3 del Artículo 22 y el párrafo 2 del Artículo 23, con un número de
votos igual al número de sus Estados miembros que sean partes en el Convenio o en los protocolos pertinentes.
Esas organizaciones no ejercerán su derecho de voto si sus Estados miembros ejercen el suyo, y viceversa.

ARTÍCULO 25. ENTRADA EN VIGOR.

1. El presente Convenio entrará en vigor el nonagésimo día siguiente a la fecha en que haya sido depositado
en vigésimo instrumento de ratificación, aceptación, confirmación formal, aprobación o adhesión.

2. Respecto de cada Estado u organización de integración política y/o económica que ratifique, acepte, apruebe
o confirme formalmente el presente Convenio o se adhiera a él después de la fecha de depósito del vigésimo
instrumento de ratificación, aceptación, aprobación, confirmación formal o adhesión, el Convenio entrará en
vigor el nonagésimo día siguiente a la fecha en que ese Estado u organización de integración política y/o
económica haya depositado su instrumento de ratificación, aceptación, aprobación, confirmación formal o
adhesión.

3. A los efectos de los párrafos 1 y 2 de este artículo, los instrumentos depositados por una organización de
integración política y/o económica no se considerarán adicionales a los depositados por los Estados miembros
de tal organización.

ARTÍCULO 26. RESERVAS Y DECLARACIONES.

1. No se podrán formular reservas ni excepciones al presente Convenio.

2. El párrafo 1 del presente artículo no impedirá que, al firmar, ratificar, aceptar, aprobar o confirmar formalmente
este Convenio, o al adherirse a él, un Estado o una organización de integración política y/o económica formule
declaraciones o manifestaciones, cualesquiera que sean su redacción y título, con miras, entre otras cosas, a
la armonización de sus leyes y reglamentos con las disposiciones del Convenio, a condición de que no se
interprete que esas declaraciones o manifestaciones excluyen o modifican los efectos jurídicos de las
disposiciones del Convenio y su aplicación a ese Estado.

ARTÍCULO 27. DENUNCIA.

1. En cualquier momento después de la expiración de un plazo de tres años contados desde la fecha de entrada
en vigor del presente Convenio respecto de una Parte, esa Parte podrá denunciar el Convenio mediante
notificación hecha por escrito al Depositario.

2. La denuncia será efectiva un año después de la fecha en que el Depositario haya recibido la notificación o
en cualquier fecha posterior que en ésta se señale.
ARTÍCULO 28. DEPOSITARIO. El Secretario General de las Naciones Unidas será el Depositario del
presente Convenio y de todos sus protocolos.

ARTÍCULO 29. TEXTOS AUTÉNTICOS. Los textos en árabe, chino, español, francés, inglés y ruso del
presente Convenio son igualmente auténticos.

EN TESTIMONIO DE LO CUAL los infraescritos, debidamente

autorizados para ello, han firmado el presente Convenio.

Hecho en Basilea el día 22 de marzo de 1989.

ANEXO I.

CATEGORÍAS DE DESECHOS QUE HAY QUE CONTROLAR

Corrientes de desechos

Y1 Desechos clínicos resultantes de la atención médica prestada en hospitales, centros médicos y clínicas

Y2 Desechos resultantes de la producción y preparación de productos farmacéuticos

Y3 Desechos de medicamentos y productos farmacéuticos

Y4 Desechos resultantes de la producción, la preparación y la utilización de biocidas y productos


fitofarmacéuticos

Y5 Desechos resultantes de la fabricación, preparación y utilización de productos químicos para la preservación


de la madera

Y6 Desechos resultantes de la producción, la preparación y la utilización de disolventes orgánicos

Y7 Desechos, que contengan cianuros, resultantes del tratamiento térmico y las operaciones de temple

Y8 Desechos de aceites minerales no aptos para el uso a que estaban destinados

Y9 Mezclas y emulsiones de desecho de aceite y agua o de hidrocarburos y agua

Y10 Sustancias y artículos de desecho que contengan, o estén contaminados por bifenilos policlorados (PCB),
terfenilos policlorados (PCT) o bifenilos polibromados (PBB)

Y11 Residuos alquitranados resultantes de la refinación, destilación o cualquier otro tratamiento pirolítico
Y12 Desechos resultantes de la producción, preparación y utilización de tintas, colorantes, pigmentos, pinturas,
lacas o barnices.

Y13 Desechos resultantes de la producción, preparación y utilización de resinas, látex, plastificantes o colas y
adhesivos

Y14 Sustancias químicas de desecho no identificados o nuevas, resultantes de la investigación y el desarrollo


o de las actividades de enseñanza y cuyos efectos en el ser humano o el medio ambiente no se conozcan

Y15 Desechos de carácter explosivo que no estén sometidos a una legislación diferente

Y16 Desechos resultantes de la producción, preparación y utilización de productos químicos y materiales para
fines fotográficos

Y17 Desechos resultantes del tratamiento de superficie de metales y plásticos

Y18 Residuos resultantes de las operaciones de eliminación de desechos industriales.

Desechos que tengan como constituyentes:

Y19 Metales carbonilos

Y20 Berilio, compuestos de berilio

Y21 Compuestos de cromo hexavalente

Y22 Compuestos de cobre

Y23 Compuestos de zinc

Y24 Arsénico, compuestos de arsénico

Y25 Selenio, compuestos de selenio

Y26 Cadmio, compuestos de cadmio

Y27 Antimonio, compuestos de antimonio

Y28 Telurio, compuestos de telurio

Y29 Mercurio, compuestos de mercurio

30 Talio, compuestos de talio

Y31 Plomo, compuestos de plomo

Y32 Compuestos inorgánicos de flúor, con exclusión del fluoruro cálcico


Y33 Cianuros inorgánicos

Y34 Soluciones ácidas o ácidos en forma sólida

Y35 Soluciones básicas o bases en forma sólida

Y36 Asbestos (polvo y fibra)

Y37 Compuestos orgánicos de fósforo

Y38 Cianuros orgánicos

Y39 Fenoles, compuestos fenólicos, con inclusión de clorofenoles

Y40 Eteres

Y41 Solventes orgánicos halogenados

Y42 Disolventes orgánicos, con exclusión de disolventes halogenados

Y43 Cualquier sustancia del grupo de los dibenzofuranos policlorados

Y44 Cualquier sustancia del grupo de las dibenzoparadioxinas policloradas

Y45 Compuestos organohalogenados, que no sean las sustancias mencionadas en el presente anexo (por
ejemplo, Y39, Y41, Y42, Y43, Y44).

ANEXO II.

CATEGORÍAS DE DESECHOS QUE REQUIEREN UNA CONSIDERACIÓN ESPECIAL

Y46 Desechos recogidos de los hogares

Y47 Residuos resultantes de la incineración de desechos de los hogares

ANEXO III.

LISTA DE CARACTERÍSTICAS PELIGROSAS

Clase de las Naciones Unidas

No. de Código

Características

1 H1 Explosivos.
Por sustancia explosiva o desechos se entiende toda sustancia o desecho sólido o líquido (o mezcla de
sustancias o desechos) que por sí misma es capaz, mediante reacción química, de emitir un gas a una
temperatura, presión y velocidad tales que pueden ocasionar daño a la zona circundante.

3 H3 Líquidos inflamables.

Por líquidos inflamables se entiende aquellos líquidos, o mezclas de líquidos, o líquidos con sólidos en solución
o suspensión (por ejemplo, pinturas, barnices, lacas, etc. pero sin incluir sustancias o desechos clasificados de
otra manera debido a sus características peligrosas) que emiten vapores inflamables a temperaturas no
mayores de 60, 5C, en ensayos con cubeta cerrada o no más de 65, 6C en ensayos con cubeta abierta (como
los resultados de los ensayos con cubeta abierta y con cubeta cerrada no son estrictamente comparables, e
incluso los resultados obtenidos mediante un mismo ensayo a menudo difieren entre sí, la reglamentación que
se apartará de las cifras antes mencionadas para tener en cuenta tales diferencias sería compatible con el
espíritu de esta definición).

4.1 H4.1 Sólidos inflamables

Se trata de los sólidos, o desechos sólidos, distintos a los clasificados como explosivos, que en las condiciones
prevalecientes durante el transporte son fácilmente combustibles o pueden causar un incendio o contribuir al
mismo, debido a la fricción.

4.2 H4.2 Sustancias o desechos susceptibles de combustión espontánea

Se trata de sustancia o desechos susceptibles de calentamiento espontáneo en las condiciones normales del
transporte, o de calentamiento en contacto con el aire, y que pueden entonces encenderse.

4.3 H4.3 Sustancias o desechos que, en contacto con el agua, emiten gases inflamables.

Sustancias o desechos que, por reacción con el agua, son susceptibles de inflamación espontánea o de emisión
de gases inflamables en cantidades peligrosas.

5.1 H5.1 Oxidantes Sustancias o desechos que, sin ser necesariamente combustibles, pueden, en general, al
ceder oxígeno, causar o favorecer la combustión de otros materiales.

5.2 H5.2 Peróxidos orgánicos

Las sustancias o los desechos orgánicos que contienen la estructura bivalente -0-0- son sustancias inestables
térmicamente que pueden sufrir una descomposición autoacelerada exotérmica.

6.1 H6.1 Tóxicos (venenos) agudos

Sustancias o desechos que pueden causar la muerte o lesiones graves o daños a la salud humana, si se ingieren
o inhalan o entran en contacto con la piel.

6.2 H6.2 Sustancias infecciosas


Sustancias o desechos que contienen microorganismos viables o sus toxinas, agentes conocidos o supuestos
de enfermedades en los animales o en el hombre.

8 H8 Corrosivos

Sustancias o desechos que, por acción química, causan daños graves en los tejidos vivos que tocan, o que, en
caso de fuga, pueden dañar gravemente, o hasta destruir, otras mercaderías o los medios de transporte; o
pueden también provocar otros peligros.

9 H10 Liberación de gases tóxicos en contacto con el aire o el agua

Sustancias o desechos que, por reacción con el aire o el agua, pueden emitir gases tóxicos en cantidades
peligrosas.

9 H11 Sustancias tóxicas (con efectos retardados o crónicos) Sustancias o desechos que, de ser aspirados o
ingeridos, o de penetrar en la piel, pueden entrañar efectos retardados o crónicos, incluso la carcinogenia.

9 H12 Ecotóxicos

Sustancias o desechos que, si se liberan, tienen o pueden tener efectos adversos inmediatos o retardados en
el medio ambiente, debido a la bioacumulación o los efectos tóxicos en los sistemas bióticos.

9 H13 Sustancias que pueden por algún medio después de su eliminación, dar origen a otras sustancia, por
ejemplo, un producto de lixiviación, que posee alguna de las características arriba expuestas.

Pruebas

Los peligros que pueden extrañar ciertos tipos de desechos no se conocen plenamente todavía; no existen
pruebas para hacer una apreciación cuantitativa de esos peligros. Es preciso realizar investigaciones más
profundas a fin de elaborar medios de caracterizar los peligros potenciales que tienen estos desechos para el
ser humano o el medio ambiente. Se han elaborado pruebas normalizadas con respecto a sustancias y
materiales puros. Muchos Estados han elaborado pruebas nacionales que pueden aplicarse a los materiales
enumerados en el anexo I, a fin de decidir si estos materiales muestran algunas de las características descritas
en el presente anexo.

ANEXO IV

OPERACIONES DE ELIMINACIÓN

A. Operaciones que no pueden conducir a la recuperación de recursos, el reciclado, la regeneración, la


reutilización directa u otros usos.

La sección A abarca todas las operaciones de eliminación que se realizan en la práctica.

D1 Depósito, dentro o sobre la tierra (por ejemplo, rellenos, etc.).

D2 Tratamiento de la tierra (por ejemplo, biodegradación de desperdicios líquidos o fangosos en suelos, etc.)
D3 Inyección profunda (por ejemplo, inyección de desperdicios bombeables en pozos, domos de sal, fallas
geológicas naturales, etc.).

D4 Embalse superficial (por ejemplo, vertido de desperdicios líquidos o fangosos en pozos, estanques, lagunas,
etc.)

D5 Rellenos especialmente diseñados (por ejemplo, vertido en compartimientos estancos separados,


recubiertos y aislados unos de otros y del ambiente, etc.)

D6 Vertido en una extensión de agua, con excepción de mares y océanos.

D7 Vertido en mares y océanos, inclusive la inserción en el lecho marino.

D8 Tratamiento biológico no especificado en otra parte de este anexo que dé lugar a compuestos o mezclas
finales que se eliminen mediante cualquiera de las operaciones indicadas en la sección A.

D9 Tratamiento fisicoquímico no especificado en otra parte de este anexo que de lugar a compuestos o mezclas
finales que se eliminen mediante cualesquiera de las operaciones indicadas en la sección A (por ejemplo,
evaporación, secado, calcinación, neutralización, precipitación, etc.)

D10 Depósito, dentro o sobre la tierra (por ejemplo, rellenos, etc.).

D11 Incineración en el mar.

D12 Depósito permanente (por ejemplo, colocación de contenedores en una mina, etc.)

D13 Combinación o mezcla con anterioridad a cualquiera de las operaciones indicadas en la sección A

D14 Reempaque con anterioridad a cualquiera de las operaciones indicadas en la sección A

D15 Almacenamiento previo a cualquiera de las operaciones indicadas en la sección A

B. Operaciones que pueden conducir a la recuperación de recursos, el reciclado, la regeneración, la reutilización


directa y otros usos

La sección B comprende todas las operaciones con respecto a materiales que son considerados o definidos
jurídicamente como desechos peligrosos y que de otro modo habrían sido destinados a una de las operaciones
indicadas en la sección A.

R1 Utilización como combustible (que no sea en la incineración directa) u tros medios de generar energía

R2 Recuperación o regeneración de disolventes

R3 Reciclado o recuperación de sustancias orgánicas que no se utilizan como disolventes

R4 Reciclado o recuperación de metales y compuestos metálicos


R5 Reciclado o recuperación de otras materias inorgánicas

R6 Regeneración de ácidos o bases

R7 Recuperación de componentes utilizados para reducir la contaminación

R8 Recuperación de componentes provenientes de catalizadores

R9 Regeneración u otra reutilización de aceites usados

R10 Tratamiento de suelos en beneficio de la agricultura o el mejoramiento ecológico

R11 Utilización de materiales residuales resultantes de cualquiera de las operaciones numeradas R1 a R10

R12 Intercambio de desechos para someterlos a cualquiera de las operaciones numeradas R1 a R11

R13 Acumulación de materiales destinados a cualquiera de las operaciones indicadas en la sección B.

ANEXO V A.

INFORMACIÓN QUE HAY QUE PROPORCIONAR CON LA NOTIFICACIÓN PREVIA

1. Razones de la exportación de desechos

2. Exportador de los desechos 1/

3. Generador (es) de los desechos y lugar de generación 1/

4. Eliminador de los desechos y lugar efectivo de eliminación

5. Transportista (s) previsto (s) de los desechos o sus agentes, de ser conocidos (s) 1/

6. Estado de exportación de los desechos Autoridad competente 2/

7. Estados de tránsito previstos Autoridad competente 2/

8. Estado de importación de los desechos

Autoridades competentes 2/

9. Notificación general o singular.

10. Fecha (s) prevista (s) del (de los) embarque (s), período de tiempo durante el cual se exportarán los
desechos e itinerario propuesto (incluidos los puntos de entrada y salida 3/.

11. Medios de transportes previstos (transporte por carretera, ferrocarriles, marítimo, aéreo, vía de navegación
interior).
12. Información relativa al seguro 4/.

13. Designación y descripción física de los desechos, incluidos su número y su número de las Naciones Unidas,
y de su composición 5/ e información sobre los requisitos especiales de manipulación, incluidas las
disposiciones de emergencia en caso de accidente.

14. Tipo de empaque previsto (por ejemplo, carga a granel, bidones, tanques).

15. Cantidad estimada en peso/ volumen 6/.

16. Proceso por el que se generaron los desechos 7/.

17. Para los desechos enumerados en el anexo I, las clasificaciones del anexo II: Características peligrosas,
número H y clase de las Naciones Unidas.

18. Método de eliminación según el anexo III.

19. Declaración del generador y el exportador de que la información es correcta.

20. Información (incluida la descripción técnica de la planta) comunicada al exportador o al generador por el
eliminador de los desechos y en la que éste ha basado su suposición de que no hay razón para creer que los
desechos no serán manejados en forma ambientalmente racional de conformidad con las leyes y reglamentos
del Estado de importación.

21. Información relativa al contrato entre el exportador y el eliminador.

1/ Nombre y apellidos y dirección, número de teléfono, de télex o de telefax, y nombre, dirección, número de
teléfono, de télex o de telefax de la persona on quien haya que comunicarse.

2/ Nombre y apellidos y dirección, número de teléfono, de télex o de telefax.

3/ En caso de notificación general que comprenda varios embarques, indíquense las fechas previstas de cada
embarque o, de no conocerse éstas, la frecuencia prevista de los embarques.

4/ Información que hay que proporcionar sobre los requisitos pertinentes en materia de seguro y la forma en
que los cumple el exportador, el transportista y el eliminador.

5/ Indíquese la naturaleza y la concentración de los componentes más peligrosos, en función de la toxicidad y


otros peligros que presentan los desechos, tanto en su manipulación como en relación con el método de
eliminación propuesto.

6/ En caso de notificación general que comprenda varios embarques, indíquese tanto la cantidad total estimada
como las cantidades estimadas para cada uno de los embarques.

7/ En la medida en que ello sea necesario para evaluar el riesgo y determinar la idoneidad de la operación de
eliminación propuesta.
ANEXO V B.

INFORMACIÓN QUE HAY QUE PROPORCIONAR ENEL DOCUMENTO RELATIVO AL MOVIMIENTO

1. Exportador de los desechos 1/.

2. Generador (es) de los desechos y lugar de generación 1/.

3. Eliminador de los desechos y lugar efectivo de la eliminación 1/.

4. Transportista (s) de los desechos 1/ o su (s) agente (s).

5. Sujeto a notificación general o singular.

6. Fecha en que se inició el movimiento transfronterizo y fecha (s) y acuse de recibo de cada persona que
maneje los desechos.

7. Medios de transporte (por carretera, ferrocarril, vía de navegación interior, marítimo, aéreo) incluidos los
Estados de exportación, tránsito e importación, así como puntos de entrada y salida cuando se han indicado.

8. Descripción general de los desechos (estado físico, nombre distintivo y clase de las Naciones Unidas con el
que se embarca, número de las Naciones Unidas, número y número H cuando proceda).

9. Información sobre los requisitos especiales de manipulación incluidas las disposiciones de emergencia en
caso de accidente.

10. Tipo y número de bultos.

11. Cantidad en peso/ volumen.

12. Declaración del generador o el exportador de que la información es correcta.

13. Declaración del generador o el exportador de que no hay objeciones por parte de las autoridades
competentes de todos los Estados interesados que sean Partes.

14. Certificación por el eliminador de la recepción de los desechos en la instalación designada e indicación del
método de eliminación y la fecha aproximada de eliminación.

NOTAS.

La información que debe constar en el documento sobre el movimiento debe integrarse cuando sea posible en
un documento junto con la que se requiera en las normas de transporte. Cuando ello no sea posible, la
información complementará no repetirá, los datos que se faciliten de conformidad con las normas de transporte.
El documento sobre el movimiento debe contener instrucciones sobre las personas que deban proporcionar
información y llevar los formularios del caso.
1/ Nombre y apellidos y dirección, número de teléfono, de télex o de telefax, y nombre, dirección, número de
teléfono, de télex o de telefax de la persona con quien haya que comunicarse en caso de emergencia.

ANEXO VI.

ARBITRAJE

ARTÍCULO 1A. Salvo que el compromiso a que se refiere el artículo 20 del Convenio disponga otra cosa, el
procedimiento de arbitraje se regirá por los artículos 2 a 10 del presente anexo.

ARTÍCULO 2A La parte demandante notificará a la Secretaría que las Partes han convenido en someter la
controversia a arbitraje de conformidad con el párrafo 2 o el párrafo 3 del artículo 20 del Convenio, indicando,
en particular, los artículos del Convenio cuya interpretación o aplicación sea objeto de la controversia. La
Secretaría comunicará las informaciones recibidas a todas las Partes en el Convenio.

ARTÍCULO 3A. El tribunal arbitral estara compuesto de tres miembros. Cada una de las Partes en la
controversia nombrará un árbitro y los dos árbitros así nombrados designarán de común acuerdo al tercer
árbitro, quien asumirá la presidencia del tribunal. Ese último árbitro no deberá ser nacional de ninguna de las
Partes en la controversia, ni tener su residencia habitual en el territorio de ninguna de esas Partes, ni estar al
servicio de ninguna de ellas, ni haberse ocupado ya del asunto en ningún otro concepto.

ARTÍCULO 4A.

1. Si dos meses después de haberse nombrado el segundo árbitro no se ha designado al presidente del tribunal
arbitral, el Secretario General de las Naciones Unidas, a petición de cualquiera de las partes, procederá a su
designación en un nuevo plazo de dos meses.

2. Si dos meses después de la recepción de la demanda una de las Partes en la controversia no ha procedido
al nombramiento de un árbitro, la otra parte podrá dirigirse al Secretario General de la Naciones Unidas, quien
designará al presidente del tribunal arbitral en un nuevo plazo de dos meses. Una vez designado, el presidente
del tribunal arbitral pedirá a la Parte que aún no haya nombrado un árbitro que lo haga en un plazo de dos
meses. Transcurrido ese plazo, el presidente del tribunal arbitral se dirigirá al Secretario General de las Naciones
Unidas, quien procederá a dicho nombramiento en un nuevo plazo de dos meses.

ARTÍCULO 5A.

1. El tribunal arbitral dictará su laudo de conformidad con el derecho internacional y con las disposiciones del
presente convenio.
2. Cualquier tribunal arbitral que se constituya de conformidad con el presente anexo adoptará su propio
reglamento.

ARTÍCULO 6A.

1. Las decisiones del tribunal arbitral, tanto en materia de procedimiento como sobre el fondo, serán adoptadas
por mayoría de sus miembros.

2. El tribunal podrá adoptar las medidas apropiadas para determinar los hechos. A petición de una de las partes,
podrá recomendar las medidas cautelares indispensables.

3. La Partes en la controversia darán todas las facilidades necesarias para el desarrollo eficaz del procedimiento.

4. La ausencia o incomparecencia de una Parte en la controversia no interrumpirá el procedimiento.

ARTÍCULO 7A. El tribunal podrá conocer de las reconvenciones directamente basadas en el objeto de la
controversia y resolver sobre ellas.

ARTÍCULO 8A. Salvo que el tribunal arbitral decida otra cosa en razón de las circunstancias particulares del
caso, los gastos del tribunal, incluida la remuneración de sus miembros, serán sufragados, a partes iguales, por
las Partes en la controversia. El tribunal llevará una relación de todos sus gastos y presentará a las Partes un
estado final de los mismos.

ARTÍCULO 9A. Toda Parte que tenga en el objeto de la controversia un interés de carácter jurídico que pueda
resultar afectado por el laudo podrá intervenir en el proceso con el consentimiento del tribunal.

ARTÍCULO 10A.

1. El tribunal dictará su laudo en un plazo de cinco meses contados desde la fecha en que se haya constituido,
a menos que juzgue necesario prolongar ese plazo por un período que no debería exceder de cinco meses.

2. El laudo del tribunal arbitral será motivado. Será firme y obligatorio para las Partes en la controversia.

3. Cualquier controversia que surja entre las Partes relativa a la interpretación o la ejecución del laudo podrá
ser sometida por cualquiera de las Partes al tribunal arbitral que lo haya dictado o, si no fuere posible someterla
a éste, a otro tribunal constituido al efecto de la misma manera que el primero.

ANEXO VII.

<Anexo adicionado. Ver Notas de Vigencia> Partes y otros Estados que sean miembros de la OCDE y de la
CE, y Lienchtenstein

Notas de Vigencia
RAMA LEGISLATIVA DEL PODER PÚBLICO

PRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA

Santafé de Bogotá, D.C.

APROBADO. SOMETASE A LA CONSIDERACIÓN DEL HONORABLE

CONGRESO NACIONAL PARA LOS EFECTOS CONSTITUCIONALES

ERNESTO SAMPER PIZANO

El Ministro de Relaciones Exteriores,

RODRIGO PARDO GARCÍA-PEÑA.

DECRETA:

ARTÍCULO 1B. Apruébase el CONVENIO DE BASILEA SOBRE EL CONTROL DE LOS MOVIMIENTOS


TRANSFRONTERIZOS DE LOS DESECHOS PELIGROSOS Y SU ELIMINACIÓN, hecho en Basilea el 22 de
marzo de 1989.

ARTÍCULO 2B. De conformidad con lo dispuesto en el artículo 1o. de la Ley 7a. de 1944, el CONVENIO DE
BASILEA SOBRE EL CONTROL DE LOS MOVIMIENTOS TRANSFRONTERIZOS DE LOS DESECHOS
PELIGROSOS Y SU ELIMINACIÓN, hecho en Basilea el 22 de marzo de 1989, que por el artículo primero de
esta Ley se aprueba, obligará al país a partir de la fecha en que se perfeccione el vínculo internacional respecto
de la misma.

ARTÍCULO 3B. La presente Ley rige a partir de la fecha de su publicación.

El Presidente del H. Senado de la República,

JULIO CESAR GUERRA TULENA.

El Secretario General del H. Senado de la República,

PEDRO PUMAREJO VEGA.

El Presidente de la Honorable Cámara de Representantes,

RODRIGO RIVERA SALAZAR.

El Secretario de la H. Cámara de Representantes,

DIEGO VIVAS TAFUR.

REPÚBLICA DE COLOMBIA-GOBIERNO NACIONAL


Comuníquese y publíquese.

Ejecútese previa revisión de la Corte Constitucional,

conforme al artículo 241-10 de la Constitución Política.

Dada en Santafé de Bogotá, D.C., a los 09 de enero de 1996.

ERNESTO SAMPER PIZANO

El Ministro de Relaciones Exteriores,

RODRIGO PARDO GARCÍA-PEÑA.

La Ministra del Medio Ambiente,

CECILIA LÓPEZ MONTAÑO.

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