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Merlí, un hombre

Todos los hombres nacen y mueren,


Merlí es hombre
Merlí nace, vive y muere.

La serie da lugar a otros personajes que agitan sus historias incorporando temas, que como
docente, facilitan el abordaje en educación y en sociedad. Algunas de las escenas se presentan
como buenos disparadores para pensar en aspectos universales. Entendiendo que nos ofrece
un buen recurso audiovisual tomando escenas cortas, significantes y oportunas, a diferencia de
Merlí, que no lo hace, aunque deje “maravillados” a sus estudiantes por el sentido de la
palabra, las acertadas ejemplificaciones y el sentido rupturista de esquemas y etiquetas, que
en definitiva atrae a los chicos- y a otros profesores “envidiosos”.

La filosofía se retroalimenta en la serie catalana Merlí #. El profesor de filosofía, Merlí, recibe a


sus alumnos en un colegio público para culminar el ciclo de bachillerato, allí aprenden a
“filosofar”, a pensar, a convivir, a tolerar, sin dejar de enjuiciar la institucionalidad y el sistema,
sus propias vidas, las de sus docentes y directores, en un marco que transita por sobre la
currícula de la asignatura.
Merlí en los primeros capítulos se muestra todopoderoso, tan pleno de ego como sabio y
atractivo para la atención de sus alumnos. Sin embargo en el correr de la serie, en particular la
tercera temporada, muy atractiva por la diversidad de perfiles de profesores y de historias de
familias, aparece el hombre, en sus soledades y encrucijadas. Así vemos a Merlí en carne viva,
sin el traje de docente, que tanto cuesta dejar a muchos en esta profesión, para aceptar la
bocanada de aire que brinda “vivir la vida”.
Por eso, nos interesa no tomar el molde ni el ejemplo del profesor en la ficción, no se trata de
subirse al pupitre ni arrancar hojas de un libro, visto que ya la “Sociedad de los poetas
muertos” lo insinuó como simbolismos, se trata de tomar la serie para ver la humanidad de un
ser en un rol determinado, que aspira a generar proyectos en los demás sin perder las ganas
de desarrollar los suyos propios.
Mientras Merlí estimula a los otros a que se animen a definir la relación amorosa o el vínculo
con los padres, duda sobre su futuro en pareja, en negarse en tener nuevos hijos, en la
relación con su madre, una actriz veterana, firme y enérgica, que le insiste en que encuentre
un lugar en donde vivir. Ese lugar representa su propia contradicción humana, en la altura de
la vida, que a todo hombre, interpela el trayecto transitado.
Merlí trabaja la mentira en la clase desde un ejemplo de un individuo que persigue a una
persona que se protege en la casa de un tercero, cuando le pregunta a este si esta la persona,
alude a decir la verdad, según el autor trabajado ese día en clase, los chicos debaten sobre
otras alternativas, en donde la mentira es el eje de una provocadora discusión, como en todas
las clases. Para bajar la presión a su madre que quiere que se busque su propio apartamento,
Merlí crea una falsa situación de un estudio clínico que puede determinar una enfermedad
compleja, eso modifica la actitud del “desalojo”, pero cuando la mentira salta, la madre no lo
echa pero le da una lección “ejemplarizante”, le cuenta que él es un hijo adoptado con un
historial que la actriz sabe adornar frondosamente, hasta que le dice que es una “bromita”, en
el momento en queMerlí está al borde del llanto existencial desconsolado.
Por eso decir que Merlí es un hombre, es saber que nace, por eso existe; muere, lo cual desde
el lugar de este tipo de análisis, en donde la serie no es un thriller de suspenso que sea
necesario ocultar el final, llegará como a todos los mortales; incorporando la palabra vive, en
donde emerge el centro de este pensamiento, Merlí vive como un hombre.
La llegada de Silvana, docente joven y atractiva, mueve el punto de estímulos audiovisuales y
estrategias de cooperación en clase.El contrapunto agita y estimula.El perfil de los docentes se
expone en los pasillos y sala de profesores, con algunas pujas que enriquecen la mirada sobre
el centro educativo, la convivencia en clase, el vínculo en familia o con los amigos. El despertar
sexual, el noviazgo, y la figura gay son asiduos visitantes en los diversos capítulos, sobre este
último punto manifestado en tres personajes diferentes. El hijo de Merlí, que en nuestros
cursos quedaría inhabilitado de ir a la clase con su padre- un aspecto que no interesa discutir-
pasa varios capítulos indeciso de su opción hasta que llega un nuevo alumno que se define en
la primera oportunidad con su inteligente metáfora: ”debemos aprender a salir del armario”, a
ellos se agrega Pol Rubio, personaje singular, que tiene relaciones con hombres, mujeres de la
clase y madres de compañeros, descollante estudiante de filosofía, que sigue los pasos de su
profesor, que se define así: “ no soy gay, no soy bisexual, soy Pol Rubio”.
¿Qué significado nos despierta esta afirmación? Dejamos la interrogante.
Otros personajes encarnan al inmaduro, al chistoso de la clase que tiene que hacer de padre
con su hermanito, a una joven inmigrante que tuvo un hijo de adolescente; junto a otros que
muestran las crisis que trascienden los lugares geográficos.
En el sector docente aparecen perfiles caracterizados por el deterioro-profesor cercano a la
jubilación con pérdida de memoria-, por estigmatizar a sus alumnos- como en “Entre muros”
cuando en la primera coordinación docente le muestran a los “nuevos” la historia de sus
alumnos y sus comportamientos-, por cumplir con lo necesario o por emprender cosas
novedosas. Al igual que con Merlí, se deslizan aspectos personales, frustraciones y
ausencias,que son cómplices en actitudes con sus colegas y discípulos. El cargo de dirección es
protagónico pudiendo sacar buenas imágenes sobre la manipulación, la puja por el poder, la
orientación que toma un centro según la personalidad de quienes la dirigen, entre otras cosas.
Mientras que en “Semilla de Maldad”- en donde la escena de la sala de profesores es una de
las más significativas que el cine nos ofrece-, hace más de 60 años aparece el vandalismo y la
multicultura en los estudiantes junto a la diversidad de posturas de los docentes, en la serie
Merlí, nos seduce pensar en la humanidad de cada personaje y su actitud en la vida.
Por eso, no importa mirar lo que vemos, real o ficción, no es una serie documental a imitar
para mejorar nuestras prácticas, es una ficción televisiva, pero en este caso es un muy buen
material para que afloren otras miradas de respeto, de reconocimiento, de valorar al otro, es
un disparador para imaginar y solventar caminos propios, es un recorrido por la vida de un
hombre, que involucra mujeres y hombres de la sociedad, que nacen y mueren, teniendo que
decidir cómo vivir, entre esos dos extremos.

Prof. Gastón SOSA MICHELENA &


www.gastonsosamichelena.jimdo.com
098.365070

&Cinéfilo, docente, creador de EPUMA- Espacio Pedagógico Usando Medios Audiovisuales(uso


de escenas cortas de cine para despertar seducción por el aprendizaje). Autor del libro
“Guiños de un profesor”-Educación y cine.
Films aludidos: La sociedad de los poetas muertos-1989-Dir. Peter Weir
Entre Muros-2008-Dir. Laurent Cantet
Semilla de Maldad-1955-Dir. Richard Brooks
# Primer episodio: 14 de septiembre de 2015
Último episodio: 15 de enero de 2018
Idioma: Idioma catalán
Lugar de producción: Barcelona
Creadores del programa: Héctor Lozano, Eduard Cortés

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