Aquel cielo maquinal

Capítulo 1
Oh mañanas como las extraño

Oh bellas mañanas como las extraño… con sus olores campantes.

Oh bellas mañanas como las extraño… con sus nubes blancas y radiantes.

Oh bellas mañanas como me osan abandonarme, Como osas permitir que te

matase. Porque has dejado que mi avaricia y ambición te alejase de mí. Tengo
todo el dinero del mundo, puedo pedir lo que quiera que haya en este mundo y lo
tendría en un abrir y cerrar de ojos, pero aun así nunca podré volver a tenerte.

Alambres, baterías, circuitos, combustible, plomo, pólvora, plástico y como dejar la

atrás, a mi pesadilla dorada y brillante. Si. Tú, el oro, por el que vendí mi pasado,
mi familia, mis tardes y más que todo mis mañanas con olor apasto recién cortado
y a whisky barato, con sus nubes blancas y radiantes que hacía en de mi vida una
miseria que hoy en día anhelo. Deje mi vida por una millonada de papeles verdes,
de bloques macizos dorados y por unos cuantos miles de pedacitos de vidrios por
los que hubiese matado miles de años tras.

Es verdad, deje todo eso por una fortuna inalcanzable. Lo recuerdo bien era una
mañana nublada y triste, leía el periódico en mi miserable jardín, los infernales
perros de mi vecino ladraban, el viento soplaba, arrasando con el delicioso olor a
desayuno recién servido en la casa de los Miller. Cuando de repente una luz
blanca encandelillan te se pronunciaba a lo alto en el cielo, por un momento
pensé que podía ser el porro que había injerido para olvidar lo triste que era mi
vida. Pero no, la luz se acercaba cada vez más hacia mí, cada vez más brillante,
más fuerte. De repente para mi sorpresa se baja un ser algo desconocido, algo
inusual. Mi calma era alucinante. Todo a mí alrededor había cesado. Los perros, el
viento y los olores habían desaparecido totalmente. Mi cuerpo se hallaba en un
cuarto vacío, pero mi mente aún seguía en mi mísero jardín. Como rayos estoy en
un lado y pienso que estoy en otro. Como demonios sé que no estoy en mi jardín y
pienso que estoy en un cuarto blanco. Si pienso que estoy en mi jardín, ¿porque
creo que estoy en un cuarto vacío? O ¿será que pienso que estoy en un cuarto
vacío pero en realidad estoy en mi jardín? La verdad aun después de 4 mil años
no lo sé. Recuerdo que el ser inusual era de mi estatura, sus facciones eran
humanas y su voz poco particular, es más aun la escucho, la escucho mientras
escribo esto, mientras como, la escucho cada vez que hablo, que pienso, cada vez
que hay un milímetro de vives en mi vida.

No he olvidado las palabras que me dijo, pero para que repetirlas es obvio que me
ofreció vivir en el futuro y tener riquezas inimaginables. Claramente no me dijo a
qué costo. Hoy en día no lo puedo ver, el hollín y los químicos obstruyen todo lo
que destruí.

Capitulo dos
Todo era normal

Como es de costumbre me he levantado a las 5 de la mañana para trabajar en mi

exotrablejius vialos. Un maquina cuyo potencia es darle al hombre habilidades
inmensurables; viajes en el tiempo, reducción corporal hasta ser un átomo, súper
fuerza y una capacidad mental. Nunca imagine que este día tendría que preformar
una operación de mente abierta. A las 9 de la mañana llega un señor que dice
tener recuerdos de una vida pasada, de recordar como el mataba a unas
personas. Lo dirijo directamente al cementerio virtual, en donde abriré su mente y
suprimiré los recuerdos de este otro individuo.

Se me olvida a un pequeño detalle, soy Alfred pukri un científico traído del 2016
hasta el año 6050, he trabajado toda mi vida en encontrar nuevas maneras de
crear a un hombre con capacidades extrahumanas. Uno de mis logros fue poder
usar el cuerpo de un ser humano en perfectas condiciones corporales pero no
mentales, para agregarles más años de vida a personas con la capacidad
monetaria para pagarlo. El proceso consiste en suprimir la mente del dador e
ingresar la mente del recibidor al cuerpo dado.
También he encontrado la manera de poder reconstruir celular muertas por
enfermedades que en el 2016 se creyeron incurables, todo gracias a los takions
que mi amigo pulka normanda descubrió en el año 5300.

Todo parecía ser un día común y corriente, con una que otra alteración claro está
pero todo transcurría sin ajetreos.

Mi vida desde que llegue a este tiempo ha tomado un rumbo diferente.