Está en la página 1de 7

DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS

Introducción

El Partido Digital de México es una iniciativa ciudadana que parte de la idea


de que la política y la participación democráticas son de los pocos aspectos
de la vida pública que aún no están vinculados a las nuevas tecnologías de la
información.

Nuestra democracia y nuestros procesos democráticos son casi medievales.


Conservan los mismos usos y costumbres de cuando fueron creados. Una
democracia representativa a través de “representantes populares”
impuestos por cúpulas políticas cuyos compromisos están con quienes los
designan y no con quienes los eligen.

En los tres niveles y órdenes de gobierno lo que impera es la


discrecionalidad, la simulación, la ineptitud y la falta de respeto a la
ley en la toma de decisiones que afectan a todo el país. Aunado ello, la
corrupción como una práctica cotidiana tolerada, aceptada y alimentada por
la impunidad institucional y su combate simulado, además de que la falta de
capacidad para desempeñar un cargo público, también es corrupción.

Más allá de la estridencia y del debate con limitados argumentos en las redes
sociales, la participación política legítima se inhibe ante la falta de
incidencia de las opiniones y propuestas en los espacios de toma de
decisiones.

Hoy los canales de comunicación entre la ciudadanía y los tomadores de


decisiones en la vida pública son cuesta arriba para los primeros. Los
ciudadanos no se sienten identificados, ni representados y en su
mayoría ni siquiera conocen a sus legisladores o gobernantes.
El exponencial crecimiento del acceso a internet en México que ha
alcanzado una cobertura del 67% de la población los últimos cinco lustros
nos ofrece la oportunidad de mayor participación política organizada y
efectiva. Internet, como nunca antes en la historia nos iguala porque nos
permite emitir y recibir información de ida y vuelta, es una plaza pública digital
en donde podemos hacer y enviar mensajes de muchos a muchos.

Lo que proponemos desde esta nueva plataforma es utilizar la tecnología y el


acceso internet para enriquecer el debate y lograr que las opiniones de
los ciudadanos tengan incidencia en la vida pública del país.

Buscamos a gente que esté dispuesta a asumir la responsabilidad de


ser ciudadana y a construir ciudadanía informándose, opinando y
debatiendo con argumentos y participando de manera activa en los procesos
democráticos del país, con plena conciencia de lo que se está decidiendo y
con la garantía de que su opinión es tomada en cuenta de manera
directa y en tiempo real.

No buscamos ni queremos que la gente piense de determinada manera, sino


que plantee sus puntos de vista, los argumente y los debata en un ambiente
de respeto y colaboración. Gente que cuestione y genere ideas con base en
datos reales y hechos verificados y no con dogmas o prejuicios.

Buscamos crear espacios digitales de participación política informada directa


para dejar atrás prácticas que siguen haciéndole tanto daño a la democracia:
la corrupción, la simulación, la ineptitud.

No estamos en contra de partidos, personas o ideologías; estamos a


favor de la construcción de ciudadanía y de un país mejor para todos con
derechos, libertades y responsabilidades, de fomentar una mayor
participación política informada y del fortalecimiento de la democracia
como un factor determinante del desarrollo, la equidad y el combate a la
pobreza, la inseguridad y la falta de oportunidades para todas y todos.

Queremos promover a través de las Tecnologías de la Información y la


Comunicación una democracia de verdad y con verdad. Una democracia
digital basada en la participación y la inteligencia colectiva, respetando la
individualidad de cada persona..

Estamos convencidas y convencidos que es indispensable reconciliar al


país a través de mecanismos de debate informado, respetuoso y
constructivo porque en esencia todos queremos que a México le vaya bien.

Queremos erradicar la idea de que la gente no respete y no cuide lo público


porque asume que no es de nadie y que los políticos dejen de robárselo al
asumir que es suyo.

Aspiramos también a redignificar el ejercicio del servicio público y a que la


gente íntegra, preparada y dispuesta se interese legítimamente por la política
como una actividad inherente a la democracia y a la ciudadanía.

Esto es un cambio de paradigma, lo que estamos haciendo es meternos


al sistema político, para hackearlo en el más positivo de sus términos, tratar
de abrirlo de cara a la ciudadanía para sanearlo con transparencia y rendición
de cuentas, como se corre un antivirus para limpiar un sistema digital, pero
de manera colaborativa.

Es una acción colectiva transversal, permanente y de largo plazo como


instrumento de cambio social. Queremos contribuir a que todos podamos
mejorar la manera en que nos informamos, pensamos, debatimos, decidimos
y actuamos en consecuencia, asumiendo la responsabilidad de todos estos
procesos.

Por ello proponemos los siguientes:

PRINCIPIOS BÁSICOS

I. Ideología En el Partido Digital no nos guiamos por corrientes sino por


datos científicos, hechos verificados y resultados. No tenemos
una ideología determinada, sino principios. No rechazamos ni
apoyamos ideas o políticas con base en quién las plantea o ejecuta, sino
con base los resultados que tienen o anticipan.

II. Respeto al individuo y su forma de ser, pensar y decidir con libertad y


tolerancia lo que es mejor en lo individual y en lo colectivo. Esto significa
que el partido no obliga ni compromete a sus simpatizantes o integrantes
a pensar de determinada manera, siempre y cuando no atente contra las
leyes vigentes, las garantías individuales, la dignidad de otras personas y
la libre expresión y de pensamiento.

III. Respeto y aplicación irrestricta de la ley. El principio básico de la


convivencia social está en el respeto a las leyes y a las instituciones del
Estado que garantizan la equidad y que fomentan el desarrollo en
beneficio de todas y todos. Su aplicación debe ser incondicional, sin
distinciones de ningún tipo y hasta sus últimas consecuencias.

IV. Compromiso con la verdad. Tenemos el compromiso de defender la


verdad como un valor máximo universal que da congruencia a nuestra
actuación como personas, que genera confianza en nuestras relaciones
sociales y que al mismo tiempo es la base que da certeza para aspirar a
un desarrollo sostenible en el largo plazo. No comulgamos con la
simulación, con los estereotipos, ni con los vicios de la política, como
incentivos ni requisitos para participar en ella. Aspiramos a que la política
se abra cada vez más a la participación ciudadana y que sea un espacio
en el que la verdad sea el común denominador.

V. Transparencia y rendición de cuentas. El ejercicio de la función


pública debe estar fundado en la ética y debe ser visto como un privilegio
al cual acceden y se desarrollan quienes están mejor capacitados para
ello y tienen vocación de servicio; es decir, para quienes la transparencia
y la rendición de cuentas no sea una carga adicional, sino un hábito
cotidiano que fortalece la confianza entre los servidores públicos y los
ciudadanos. Por ello debemos fortalecer las herramientas digitales del
Estado que permitan un acceso total y cotidiano a los espacios de toma
de decisiones, a la forma en que se ejerce el presupuesto público, a los
resultados de ese ejercicio y al sano cuestionamiento de esas decisiones.

VI. Libertad de expresión, de pensamiento y de elección. Después de


la vida, lo más sagrado que tiene un ser humano es su libertad y en
especial su libertad de pensar, decidir y expresarse libremente dentro de
los límites que establece la constitución. Ese es uno de los pilares de la
democracia. Creemos que la libertad contribuye con el desarrollo de las
personas en lo individual y en lo colectivo.

VII. Participación ciudadana. Creemos en la sociedad civil como una forma


de participación e interacción con los diferentes órdenes y niveles de
gobierno, como contrapeso y al mismo tiempo aliado del poder político
en la transformación cotidiana de la realidad, en su ejercicio responsable
de ciudadanía en beneficio de la colectividad, de conciencia social y de
civismo en el fortalecimiento de la convivencia armónica en la diversidad
de pensamientos y opiniones
VIII. Igualdad entre la mujer y el hombre Consideramos que es
indispensable el respeto irrestricto de la ley en esta materia, pero también
en la igualdad de oportunidades de desarrollo personal, profesional y
político para mujeres y hombres en una sociedad incluyente y diversa,
basados en sus capacidades, sus potenciales y no en su género.

IX. El derecho a la educación. Una sociedad basa su capacidad de


transformación en el acceso y la calidad de su educación y son
justamente las Tecnologías de la Información las que deben ser una
herramienta de verdadera transformación del modelo educativo en donde
sea el alumno el verdadero centro del modelo educativo, como un
imperativo de la apuesta por el desarrollo del país en todos sus ámbitos:
económico, intelectual, cultural, deportivo, etcétera.

X. Libertad para trabajar y desarrollarse. Lo que realmente detona el


desarrollo de un país es la libertad y cuando en una sociedad el Estado
tiene la capacidad de garantizar las condiciones legales y los incentivos
para la creación de empleos es cuando hay mayores oportunidades para
que las y los ciudadanos desarrollen sus mejores capacidades en las
áreas productivas en donde mejor se desempeñan y no se ven
condicionados por las circunstancias a hacer lo que pueden y no lo que
es su vocación. El Estado debe ser un promotor del desarrollo con
equidad.

XI. Protección del planeta y los recursos naturales. La propuesta


política del Partido Digital de México tiene muy claro que el desarrollo de
una nación no puede hacerse a costa de sus recursos naturales, de su
biodiversidad y del deterioro del medio ambiente y sus especies.
Consideramos que es justamente el cuidado y la explotación
responsables de sus recursos naturales, lo que garantiza a las nuevas
generaciones condiciones de calidad de vida y desarrollo a futuro.
XII. Calidad de vida y movilidad. La movilidad y la vivienda son elementos
determinantes para la calidad de vida de las personas; creemos que
debemos hacer de las ciudades espacios inteligentes de convivencia
armónica y de distancias cortas, con eficiencia, sensibilidad, seguridad en
todo los aspectos y calidad de vida; tanto en el acceso a la vivienda
como en los espacios públicos, con visión sustentable y eficiencia en el
cuidado de los recursos naturales.

XIII. Rol activo de México en el mundo. México es la economía número 12


del mundo, no podemos aislarnos del concierto internacional, tenemos
que integrarnos cada vez mejor porque nuestra economía depende de
nuestra relación con otros países y viceversa, pero al mismo tiempo
tenemos que promover la inclusión y reducir las brechas de desigualdad
para que las oportunidades de desarrollo con justicia y equidad estén al
alcance de quienes menos tienen. La soberanía de nuestro país no está
comprometida por la inversión extranjera, comercio o la explotación y
aprovechamiento de recursos naturales. Cerrarle las puertas al mundo es
cerrar las puertas al desarrollo.

XIV. Derechos Digitales. Estamos interesados especialmente en la


participación democrática incluyente de la ciudadanía a través de la
plataformas digitales, el voto digital, la neutralidad de la red, el acceso a la
información, la transparencia, la rendición de cuentas, a la justicia, a los
servicios que ofrece el Estado, pero de la misma manera a la protección
de datos y el derecho al olvido. Queremos que los espacios digitales sean
herramientas de desarrollo en todos los ámbitos, del ejercicio pleno de
derechos y libertades con seguridad y con garantías.

También podría gustarte