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HISTORIA DEL

CEMENTO
Y EL CONCRETO
(Primera parte)
PO R I NG . JOSÉ G ABRIEL GÓMEZ C.
Fuente: REVISTA ALCUN No. 15. SEPTIEMBRE DE 1994

L
a obra de concreto más antigua de la cual se de esta forma. Previo al concreto como tal se empleó
tiene evidencia cierta está fechada alrededor el llamado “seudo-concreto” que consistía en una
de los años 5600 a.C. y fue descubierta piedra fracturada en forma tosca y unida mediante un
durante excavaciones en las riberas del río material de cal y arena.
Danubio en Lepenski Vir (Yugoslavia). Fue empleada La civilización romana probablemente copió la
para hacer pisos de chozas en un pueblo de la edad idea de la manufactura del concreto de los griegos. Se
de piedra. Luego parece haber desaparecido la han encontrado concretos romanos fechados con
técnica durante un largo periodo de tiempo. No obs- anterioridad al año 300 a. C. Durante el siglo II a. C.
tante, existen autores que sostienen explotaron una cantera de material
que algunas obras, especialmente las con apariencia de arena rosada, en un
pirámides de Egipto y de ellas la de lugar cercano a la población de
Giza (2500 a.C.), emplearon en su El arte Puzzoli. Encontraron con agradable
construcción concreto. Incluso algu- de hacer concreto sorpresa que esta arena, mezclada con
nos autores sostienen que en el anti- cal, proporcionaba un material de
guo Egipto manejaban la tecnología se remonta mucha mayor resistencia que los
del concreto geopolimérico. previamente producidos por ellos. De
La más antigua referencia gráfica a varios miles hecho, el material empleado no era
que se tiene sobre trabajos de concre- de años una simple arena sino una ceniza vol-
to proviene de un mural en Tebas tánica que contiene sílice y alúmina
(Egipto) que data del año 1950 a.C. de la civilización que se combinaban químicamente con
apróximadamente y muestra varias eta- la cal resultando en lo que luego se
pas en la manufactura y usos de mor- actual. conociera como un cemento puzoláni-
tero y concreto. Por varios años el con- co. Este material fue empleado en gran
creto fue usado como material de relle- escala en la construcción del teatro de
no en muros de piedra y solamente más tarde fue Pompeya en el año 75 a. C.
empleado como material estructural. Existen referencias de que los romanos intentaron
El arte de hacer concreto pasó de Egipto al Medite- reforzar algunas de las estructuras que construyeron
rráneo occidental y alrededor del año 500 a. C. fue con barras y láminas de bronce, si bien los resultados
utilizado por los antiguos griegos. Ellos también usa- no fueron satisfactorios, entre otros aspectos porque
ron compuestos basados en la cal para recubrir el bronce tiene un coeficiente de dilatación por
muros o ladrillos no cocidos, llegando a mencionarse temperatura mayor que el del concreto, con lo cual
que los palacios de Creso y Atala fueron construidos se causaban agrietamientos y descascaramientos de
los elementos así reforzados. A raíz de esto, diseña- metros de altura y más de 120 km de longitud, su
ron sus construcciones para soportar cargas de com- núcleo fue construido con concreto de apreciable re-
presión, resultando estructuras con muros excesiva- sistencia. El sistema contaba, aparte del muro, con
mente gruesos, algunos de más de ocho metros de una serie de 16 cuarteles para alojar entre 500 y 800
espesor. A su vez, esto los llevó a intentar desarrollar hombres cada uno, 80 pequeños fuertes conocidos
un tipo de concreto aligerado. Los primeros ensayos como “castillos de milla” y 158 torres.
fueron hechos dejando jarras de barro dentro de los Un tipo de mortero denominado “cemento de
muros y arcos, siguiendo luego con el uso como agre- maltha rosácea” fue empleado en la construcción del
gado, de roca volcánica triturada, la pumicita. famoso Pont Du Gard, y consistía en una mezcla de
Resulta interesante conocer la descripción que cal, grasa de cerdo y jugo de higos sin madurar. El
sobre este material, la tierra de puzzoli, hace Vitruvio puente se ha constituido en muestra de la calidad de
en su obra Los diez libros de la Arquitectura escrita la ingeniería y la arquitectura romana de la época, y
por los años 738 - 741 d. C. y que se ha convertido en es notable por su belleza, antigüedad y tamaño. Lle-
obra de obligada referencia cuando se habla de los vaba por gravedad agua de los manantiales próximos
conocimientos que los antiguos poseían sobre el arte
de la construcción, puesto que se supone es un
compendio de los conocimientos existentes hasta el
momento. Refiriéndose en el capítulo VI del libro 2 al
“Polvo de Puzol”, afirma: “Hay también una clase de
polvo que por su propia naturaleza produce efectos
maravillosos. Se le halla en la región de Bayas y en los
territorios de los municipios que están en las
cercanías del Vesubio. Este polvo, mezclado con la
cal y la piedra machacada, no sólo consolida toda
clase de ediftcaciones, sino que incluso las obras que
se hacen bajo el agua de mar tienen solidez. La razón
de ello parece ser esta: en las entrañas de aquellos
montes hay tierra y numerosas fuentes de agua
caliente, que no existirían si no estuvieran debajo
fortísimos fuegos, alimentados o por azufre o por
alumbre o por betún. Este fuego y estas llamas, al
penetrar y actuar a través de los meandros y venas de
la tierra, la hacen ligera, y el tufo (o toba) que allí a la aldea de Ucetia hasta una ladera de Nemausus
existe es lúmido y enjuto”. (hoy Nimes), con una pendiente mínima (0,34
Con esta técnica de concreto aligerado fueron m/km) durante los 50 km de recorrido. Fue cons-
construidos algunos arcos del coliseo romano y truido probablemente en el año 19 a. C. por Marco
también el domo del Panteón, el cual es una de las es- Agripa. Tiene una longitud de 275 m y una altura de
tructuras antiguas más interesantes y fue la de mayor 49 m, la cual se logró superponiendo tres hileras de
luz (diámetro 50 m) durante mucho tiempo, atesti- arcos, con dimensiones respectivas de 21,9 m de
guando cómo el concreto, además de su capacidad altura y 6,4 de ancho la inferior, 19,5 m de altura y
estructural para resistir compresiones, posee una 4,6 m de ancho la intermedia, y la superior, que so-
buena durabilidad. porta el canal de mortero, de 7,4 m de altura y 3 m
En el año 122 d. C. el emperador Adriano, con el de ancho. Mientras en el resto del acueducto la con-
ánimo de reorganizar el sistema de defensas en la ducción va enterrada, con piso de cemento, paredes
zona norte del imperio, ordenó construir el muro que de mampostería revocadas y techo con bóveda de
lleva su nombre, que se constituyó en el más grande media caña, en los tramos descubiertos v. gr. el puen-
proyecto romano de construcción. De más de 3 te, era gerenalmente un rectángulo, cuyo techo se
cubria con grandes placas horizontales. También es
notable que modernos estudios han concluido que
las dimensiones de la construcción dan un factor de
seguridad de 2 para los esfuerzos de tensión (los más
desfavorables para mamposteria de las pilas) genera-
dos por los vientos más intensos de 150 km/hora
presentes en la zona.
Con la caída del Imperio romano declinó el uso
del concreto y muchos de los conocimientos adquiri-
dos con su construcción y uso desaparecieron com-
pletamente. La técnica comenzó a ser recobrada en
Inglaterra y se tienen evidencias, de que hacia el año
700 d. C. se construyeron en Saxon artificios mezcla-
dores de concreto en forma de recipientes superfi-
ciales en la roca, de diámetro 2 y 3 m, encontrándo-
se que empleaban en la fabricación del concreto y el
mortero una caliza del sector como agregado y una
cal quemada como cemento. Los normandos emplea-
ron concreto como material llenante en muros que
luego eran recubiertos con piedra. De esta técnica
da fe la abadía de Reading en la región de Berkshire,
donde el recubrimiento de piedra cayó totalmente,
dejando al descubierto un esqueleto en concreto.
El concreto fue ampliamente usado durante esa
época. La catedral de Salisbury tiene una cimenta-
ción en concreto que aún permanece en buen esta-
do y la torre blanca de la famosa torre de Londres
también empleó ese material en su construcción. La
casa Moretón en Cheshire, construida entre 1559 y
1580 tiene un piso superior hecho en un material
que combina la cal, arena y ceniza de madera y que
fue empleado en los cuartos que tenían chimeneas
con el fin de evitar los riesgos de incendio de los
pisos de madera.
Durante la Edad Media y el Renacimiento fue muy
poco empleado el material, a juzgar por las eviden-
cias encontradas. Existen algunas de que fue emplea-
do en 1753 por George Semple en la cimentación
del puente Essex en Dublín.
En el año de 1756 un ingeniero de Leeds fue co-
misionado para que construyera por tercera vez un
faro en el acantilado de Edystone, situado a 14 millas
al SW de Plymouth en Inglaterra. Los dos primeros
habían sido construidos en madera, siendo destrui-
dos la primera vez por un incendio y la segunda por
un vendaval. El encargdo, John Smeaton, determinó
que la única manera de garantizar la solidez de la
construcción debía ser empleando piedra, pero se
enfrentaba al problema de hallar con qué material
unir esas piedras para formar una construcción
monolítica, con el inconveniente adicional de que la
parte inferior de ella estaba expuesta permanente-
mente a la acción de las olas y vientos con alto con-
tenido de finas gotas de agua de mar.
Decidió este ilustre ingeniero investigar las pro
piedades de diferentes clases de morteros. La lectura
de su obra Construcción y descri#m¿% de la erec-
ción del faro de Edystone resulta interesante y muy
adecuado ejemplo sobre las cualidades que deben
distinguir a un ingeniero en cuanto a la rigurosidad
en la realización de las pruebas y lo importante de
una correcta redacción de las experiencias. De esa
obra merece la pena citar algunos fragmentos. En el
capítulo IV hace una descripción de los experimen-
tos realizados para establecer una composición com-
pleta para los cementos hidráulicos.
Allí menciona: “Sobre este tema, me hallaba yo ya
informado de que dos medidas de ,cal muerta o
apagada, en polvo seco, mezcladas con una medida mostrara su tendencia a humedecerse en tiempo muy
de Tarras holandés, ambas bien batidas hasta obtener húmedo, y la argamasa aparecerá manifiestamente
la consistencia de una pasta, empleando la menor descolorida sobre las juntas. Pero como a mi enten-
cantidad de agua posible, constituía el preparado co- der, en el caso del mortero de Tartas, el secado y el
rriente, que se empleaba generalmente para la cons- endurecido son propiedades distintas, sin dependen-
trucción de las mejores obras hidráulicas, tanto en cia evidente entre ambas, podría ocurrir que si bien el
piedra como en ladrillo; el cual una vez fraguado, se mortero de Tarras preparado con agua salada pudiera
endurece después, sin secarse nunca del todo; más igualmente revelar su sensibilidad a la humedad, si se
aún, este se endurece con el tiempo, incluso debajo utilizara para el mismo propósito que el mortero ordi-
del agua. Este era, por tanto, el tipo de cemento que nario hecho con arena solamente; dicha circunstancia
parecía adecuado para nuestro uso; y lo que me que- no menoscaba& sin embargo, su dureza o firmeza de
daba todabía por averiguar era cuales serían los mejo- adherencia donde no hiciese falta una sequedad per-
res materiales y el mejor modo de tratarlos y utilizar- fecta; en consecuencia, no habria perjuicio en lo que
los. En aquel tiempo ignoraba yo si existiría alguna respecta a la Construcción Hidmulica y como la nece-
diferencia en la firmeza del mortero, por el hecho de sidad del acarrear, o no, desde tierra toda el agua que
obtener la cal de distintas clases de piedra caliza, precisaríamos para esta obra, era una cuestión de im-
siempre que la dosificaoión de los ingredientes fuese portancia, el estudio a fondo del problema se convir-
la conveniente. Me enteré de que tió en algo muy serio”.
los albañiles aseguraban corrien- Hace también una interesante
temente, que cuanto más dura o re- consideración sobre la diferencia
sistente fuera la piedra caliza, tanto de resistencias obtenidas mezclan-
más fuerte seria la cal; ahora bien, do con agua dulce o agua de mar,
lo que no se decía era si esta má- problema de gran significación
xima se refería principalmente a la para él, puesto que en el sitio de la
composición habitual de cal y arena obra no contaba con la primera. Al
para las construcciones corrientes respecto afirma:
(que eran las que ellos conocían “&uál es la diferencia en cuanto
sobre todo) o si valía también para a la resistencia del mortero cuando
el mortero de Tarras. También esta- éste se prepara con agua’dulce, o
ban los albañiles de acuerdo en con agua de mar al sumergir el pre-
que, el mortero, si se mezclaba con parado en la misma agua?
agua salada, nunca se endurecería “Se prepararon bolas con las
hasta el mismo grado que lo haría el mismas distintas dosificaciones que
mismo tipo de mezcla con agua antes; un par con agua salada y el
dulce. Yo podía imaginarme que si otro par con agua dulce, repitién-
se mezclaba un mortero con agua salada, y se utiliza- dose esto varias veces; el resultado fue que por lo
ba para revocar, o incluso para los muros de una vi- que respecta a lo que sucedió inmediatamente, o en
vienda, el muro construido así nunca quedaría perfec- el plazo de unos pocos días, no había diferencias apa-
tamente seco, y que cuando la atmósfera se hallara en rentes; pero de las bolas que se conservaron enteras,
condiciones de humedad, las sales marinas, introduci- después de permanecer bajo el agua durante dos, o
das por este medio en la composición del mortero, tres meses, las preparadas con agua salada, de haber
atraerían la humedad del aire, haciendo que el muro alguna diferencia, parecían tener la preferencia. De
aparezca visible y palpablemente húmedo. Más aún, aquí deduje que no necesitábamos cargar con nuestra
me habían dicho que si se revoca una casa con una agua dulce hasta Edystone para hacer el mortero; y
argamasa que tuviera arena marina en su composi- en consecuencia todos los ensayos posteriores,
ción, aun estando mezclada con agua dulce, e incluso mientras no se diga otra cosa, fueron realizados con
si se emplea arena marina en las juntas de los muros, agua salada”. m

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