BAJAR DE PESO

Cómo pasé de 98 kg a 56 kg solamente en dos meses

¡Hola, chicos! Todos se dieron cuenta de la increíble cantidad de peso que

perdí y me empezaron a hacer preguntas a lo loco. Quise contestarles a
ustedes uno por uno pero la verdad es imposible, para eso tendría que vivir en
línea las 24 horas del día. Entonces se me ocurrió que lo mejor era escribir la
respuesta a la pregunta ¿Cómo logré adelgazar 42 kg? (Eso no quiere decir
que ustedes me pidieran que escribiera esto, lo hice para hacerme la vida más
fácil).

¡Mi transformación me llevó DOS MESES! ¿Increíble el resultado,

¿verdad?

Trasfondo
Nunca fui una flaquita pero me di cuenta que cada vez estaba más gorda. Tres
terribles rollos me aparecieron en la panza, parecía un bulldog en bikini, y ¡me
daba cuenta que mis caderas, piernas y cola cada vez se agrandaban
más! Decidí ponerme en forma y tener un cuerpo sano, costara lo que
costara, así que dejé de comer cosas grasas y frituras y dejé de cenar
abundante a horas avanzadas de la noche. ¡Salía a correr a la mañana y a la
tarde iba al gimnasio pero en lugar de adelgazar continuaba subiendo de peso
más y más! En un mes mi peso llegaba a la terrorífica cifra de — ¡CASI 100
KILOS! Seguí haciendo dieta más estricta, dejé de comer carne, pan, papas
fritas, y dulces. Terminé comiendo frutas y vegetales y tomando solo agua
pura. También me di con esos tés y pastillas para adelgazar que se venden por
allí y son carísimos pero nada me hacía efecto. Después de bajar un poco, el
peso retornaba a mi cuerpo exhausto.

¡No sirven las dietas ni las píldoras, son una estafa! Hacer ejercicio es
difícil y lleva demasiado tiempo para ver los resultados. ¿Qué debía
hacer?

Después de cientos de dietas, pastillas y horas en el gimnasio y de pagar miles

de pesos al personal trainner, tiré la toalla por completo. Un día me crucé con
un artículo sobre las Bayas Goji y dije: lo voy a probar. Había escuchado que
Demi Moore, Kate Perry, J-Lo y muchas otras famosas adelgazaron gracias a
esas bayas pero yo era escéptica. Pero había probado todo lo que conocía y
estaba desesperada. ¡No tenía elección! ¡Después de leer las reseñas, me
parecieron convincentes!