siempre estuvo presente en la evolución de las civilizaciones. Su explotación y uso se han destacado en la economía y en la sociedad en todos los tiempos. Por miles de años, el hombre vivió en la edad de piedra. Entonces descubrió metales y fue evolucionando. Según los historiadores, la primera era de cobre tuvo un notable desarrollo en Egipto. Existe evidencia de explotación de minas en la península del Sinaí, que se remonta al reinado de Senefru (3800 aC), y los utensilios que se han descubierto también indican que la extracción del metal era muy refinada. La colonización de los egipcios de África y del Mediterráneo, permitió a estas regiones desarrollar el uso de los metales conocidos en sus estados nativos, principalmente oro y cobre. Al principio ellos fueron extraídos de sus minas, pero pronto comenzaron a ser utilizados en las aleaciones, la primera de la que se tiene noticia es de cobre con estaño (bronce), una hazaña de gran impacto. Los primeros artesanos descubrieron que el metal de cobre podría ser fácilmente martillado y posteriormente laminado para darle otras formas. Después de la introducción del bronce, también era posible fundir una gran variedad de piezas. Los primeros artesanos descubrieron que el metal de cobre podría ser fácilmente martillado y posteriormente laminado para darle otras formas. Después de la introducción del bronce, también era posible fundir una gran variedad de piezas. Los romanos comenzaron una era de uso más intensivo del cobre. El uso del metal se propagó por donde sus legiones marcharon, conquistaron y civilizaron. La mayor parte del cobre romano vino de la isla de Chipre, a la que llamaron Cyprium, que dio origen a la palabra Cuprum y a Cu como símbolo químico del cobre. La propiedad del cobre, bronce y latón de resistir a la corrosión hizo que estos metales se mantuviesen no solo como un elemento decorativo, sino también funcional durante la Edad Media y en los siglos posteriores, de la Revolución Industrial hasta nuestros días. El cobre alcanzó su dimensión de metal esencial para el desarrollo industrial a nivel mundial en 1831, cuando Faraday descubrió el generador eléctrico. Desde entonces, la demanda del metal creció notablemente. Durante gran parte del siglo XIX, Gran Bretaña fue el mayor productor de cobre en el mundo, pero la importancia del metal llevó a la apertura de nuevas minas en otros países, como Estados Unidos, Chile y África. Así usos importantes fueron descubiertos para el cobre y las mejoras logradas en la metalurgia permitieron la producción de diversas aleaciones de este metal, ampliando su campo de aplicación.
Fortalecimiento de Los Procesos de Enseñanza Mediante El Uso Pedagogico de Las Tic Con Los Docentes de La Institucion Educativa Atanasio Girardot Del Municipio de Girardot2