LUNA DE LA FORTUNA

La Luna siempre ejerció una particular fascinación en el hombre. Fuente de

inspiración de los poetas y amiga de los enamorados, fue venerada desde tiempos
remotos y le atribuyeron multitud de nombres, entre los más famosos se
encuentran Selene, Diana, Isis o Cibeles. Hace miles de años, y gracias a la
observación de las diversas fases de la Luna, el hombre aprendió a sobrevivir en
un mundo hostil. Aprendió a través de las diversas fases cuándo era el momento
de sembrar o recoger la cosecha guiándose así por lo que llamamos “calendario
lunar” o sencillamente lo utilizó para medir el paso del tiempo. Este calendario se
basa en la sucesión de las diversas fases (creciente, menguante, llena y nueva),
cuya duración total es de veintiocho días. Aunque siempre asociada a la fertilidad y
las emociones, la Luna, además de elemento de inspiración, influye en las mareas,
las lluvias, los animales, las plantas, los seres humanos y en el azar. De acuerdo a
su fase, ejerce un atracción distinta en cada uno y tiene un número con le que se
puede tentar a la diosa fortuna.
Cuarto Creciente
Se produce cuando el Sol ilumina el hemisferio derecho de la Luna y dura
alrededor de 13 días, éstos son días de regeneración. Para reconocerla hay que
observar que es la mitad izquierda la que no se ve. Aprovechar esta fase para:
poner en marcha un nuevo proyecto; realizar cambios en su hogar como pintar,
cambiar muebles de sitio, etc.; realizar tratamientos de belleza (ya que los poros
están más dilatados) y tratar problemas de piel. También son días propicios para
cortar el cabello y uñas para que crezcan de modo más rápido y fuerte. Aquellas
personas que siguen algún tipo de dieta deberán tener en cuenta que son días en
que se asimila mejor lo que se come, por lo que deberán procurar no cometer
“imprudencias” durante esta fase lunar. Durante estos días el cuerpo retiene
mucho líquido, así que es fácil que notemos que engordamos un poco. En esta
época las intoxicaciones por alimentos pueden ser más graves que en otros días
del mes. Para tentar al azar, el número del Cuarto Creciente es el 13.
Luna Llena
En este período la Tierra se encuentra entre el Sol y la Luna, y ésta aparece
totalmente iluminada; el Sol y la Luna ocupan el mismo grado del zodíaco. Su
duración es de un día, aunque sus efectos se dejan sentir los días anterior y el
posterior. Durante esta fase, muchas personas tienden a mostrarse más irritables o
eufóricas y es posible que les cueste conciliar el sueño o sufran de jaquecas o
migraña. También es un momento en el que se puede, de modo inesperado,
encontrar respuestas a preguntas que se estaban formulando. Ejerce gran
influencia sobre la excitación sexual. Es buen momento para firmar contratos y
afianzar relaciones; también para realizar compras de todo tipo; conquistar a la
persona que tanto se desea (aumentan las dotes de seducción); disfrutar de una
sesión de relajación. También es un día propicio para “buscar un bebé” o para
disfrutar de una velada romántica con su pareja. En el azar, el número de la Luna
Llena es el 80.
Cuarto Menguante
El Sol ilumina la mitad izquierda de la Luna. Esta fase dura aproximadamente 13
días. Es ideal para limpiar los vidrios de la casa; pintar o barnizar (seca más
rápido); hacer reparaciones. También son días favorables para limpieza de cutis y
depilaciones (el vello crecerá más lenta y débilmente). No deberán cortarse las
uñas ya que crecen más frágiles. Se puede comenzar una dieta (procurando beber
agua en abundancia porque el cuerpo suda más) o iniciar una cura depurativa o
tratamiento médico (tratar enfermedades). Las posibilidades de éxito en una
intervención quirúrgica son mayores y los procesos curativos más cortos. Las
heridas producidas apenas sangran y cicatrizan rápidamente. Son días adecuados
para ir al dentista; hacer deporte (incluso aquellos que requieran de mayor
esfuerzo físico) y hacer un balance de su vida, para plantearse planes y proyectos
personales. La suerte acompaña al Cuarto Menguante con el número 06. Luna
Nueva En esta fase, la Luna está situada entre la Tierra y el Sol, que ilumina la
cara de la Luna que no vemos. Durante este período la Luna “desaparece” por
unos días. Sólo hay una al mes y sus efectos duran los días anterior y posterior.
En este tiempo se puede plantear abandonar viejos hábitos o costumbres que no
nos benefician, como fumar o beber. Si hay que hacer ayuno es un buen día.
También es favorable para descansar, ya que se está más tranquilo y uno tiene
mayor capacidad de autocontrol. Planificar un nuevo negocio o perfilar un
proyecto, pero no iniciarlo porque son días de mucha inestabilidad donde todo
puede salir al revés. Durante este día y el anterior y posterior a la Luna Nueva es
fácil soñar con acontecimientos que pueden suceder pasados un par de días. En el
azar, se puede tentar fortuna con el número 21.