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Universidad Central de Venezuela

Facultad de Ciencias Económicas y Sociales


Escuela de Sociología

Nombre y Apellido: Ana Yuleima Rodríguez Castellanos


Cédula: 14.252.312
Entrega 1,2,3,4 proyecto

Tema de Investigación: Políticas públicas de seguridad social dirigidas al


adulto mayor en Venezuela.
Objeto: Programa Gran Misión Amor Mayor en Venezuela.
Propósito: Conocer el programa de seguridad social dirigido a personas
adultas mayores en Venezuela y establecer su pertinencia en referencia a la
garantía de los derechos de las personas adultas mayores.
Justificación: Las políticas públicas en materia de seguridad social dirigidas
hacia personas adultas mayores, han tomado especial preponderancia, debido a la
trascendencia que protagoniza el envejecimiento poblacional mundial, situación que
no es ajena a Venezuela.
Según las previsiones, de la CEPAL (2011) para América Latina “el número
de adultos mayores superará por primera vez al de niños en 2040”, “el grupo de
personas con 60 años y más representaban el 5,6 % del total de la región en 1950
luego un 9,9% en 2010 y las estimaciones para el 2100 es del 35% de la población”
(p.14), esto significa que el grupo de adultos de mayor edad seguirá ampliándose
con más rapidez que el resto de la población: en el caso de Venezuela, el Instituto
Nacional de Estadística (2011), afirma que para 1990, el porcentaje de la población
de personas del grupo etario de 65 años y más era de 4,0%, en el 2001, asciende
a 4,9% repuntándose un aumento del 0,9% y nuevamente ascendiendo en el año
2011 a un 5,8%, lo que indica la misma proporción porcentual (0,9) de crecimiento.
(p.10).
Esta transformación en la estructura demográfica venezolana, implica
ineludiblemente la tarea de desarrollar políticas públicas acertadas que garanticen
el disfrute de los derechos de las personas de edad y mejoren su calidad de vida.
De allí la preocupación por analizar el programa social denominado Gran Misión en
Amor Mayor, para dimensionar su pertinencia e influencia en la calidad de vida de
sus beneficiarios.

Objetivo general:
Analizar el programa Gran Misión en Amor Mayor y su pertinencia como
política pública en materia de seguridad social en Venezuela.

Objetivos específicos:
1.- Describir la Gran Misión en Amor Mayor.
2.- Establecer la relación del programa como política pública adecuada para
la población adulta mayor de Venezuela.
3.- Valorar la influencia de la Gran Misión Amor Mayor en los beneficiarios.

Contexto de la investigación: la investigación será desarrollada a partir de


la revisión bibliográfica disponible, recopilando información desde fuentes primarias,
valorando los aportes de los beneficiarios directos del programa.
Se analiza la pertinencia del programa como política pública, apegada o no
a los derechos humanos, atendiendo a los retos que se desprenden desde la
perspectiva demográfica del envejecimiento poblacional.

Principales categorías de la investigación:


Envejecimiento Demográfico: es un cambio en la estructura por edades
que provoca un aumento de la edad media del conjunto. Por definición, este hecho
supone el aumento en proporción de personas de edad avanzada (mayores de 60
años) teniendo en cuenta el total de la ciudadanía. Así, todo lo que contribuya
disminuir la proporción de niños y jóvenes hace aumentar automáticamente la
proporción de adultos y ancianos, y, al contrario.
Adulto y adulta mayor: A la persona natural con edad igual o mayor a
sesenta años de edad.
Derechos de las personas mayores: son todos aquellos derechos de
carácter civil, su nacionalidad y ciudadanía, los derechos políticos, los derechos
sociales y de la familia, los derechos culturales y educativos, los derechos
económicos, los derechos ambientales que mejoren la calidad de vida de los
mayores, mediante su incorporación efectiva a programas, servicios y acciones que
faciliten, de acuerdo a sus condiciones, el acceso a la educación, el trabajo de
calidad, la salud integral, la vivienda y hábitat dignos, la participación y el control
social, la asistencia social, las asignaciones económicas según sea el caso, la
asistencia jurídica y la participación en actividades recreativas, culturales y
deportivas.

Políticas Públicas: son soluciones específicas de cómo manejar los asuntos


públicos, se desprenden de la agenda pública, permiten orientar la gestión de un
gobierno para alcanzar sus objetivos. El diseño, gestión y evaluación de las políticas
públicas son una parte fundamental del quehacer del gobierno.

Seguridad social: La seguridad social es la protección que una sociedad


proporciona a los individuos y los hogares para asegurar el acceso a la asistencia
médica y garantizar la seguridad del ingreso, en particular en caso de vejez,
desempleo, enfermedad, invalidez, accidentes del trabajo, maternidad o pérdida del
sostén de familia.

Estado del Arte:


Iniciando este proyecto se presenta a manera de antecedentes el siguiente
trabajo, realizado a manera de un informe por el movimiento Transparencia
Venezuela (2018) bajo el título Gran Misión en Amor Mayor Venezuela:
oscurantismo para la tercera edad, señala que se ha promovido el asistencialismo
con las misiones sociales bajo la figura de la cobertura de la seguridad social, las
políticas sociales no han creado un piso de protección social, que pueda garantizar
a las poblaciones más vulnerables unas condiciones necesarias para un nivel de
vida digno.
Asimismo, existe un artículo realizado por Carlos Welti Chanes (2013)
titulado Política social y envejecimiento, donde señala que la estructura por edad de
una población constituye el marco de referencia de la política social y a través del
tiempo, sus acciones deben responder a las transformaciones de esta estructura,
implementado acciones de política social para una sociedad que envejece
aceleradamente y que demanda atención a los mayores, ante el incremento de sus
condiciones de vulnerabilidad.
En referencia al tema se destaca el informe anual de PROVEA del año 2013,
donde se señala que la Gran Misión en Amor Mayor Venezuela (GMAMV ) no está
concebida para garantizar la universalidad de la seguridad social, sino para extender
la cobertura de la pensión de vejez complementaria y/o asistencial a una parte
importante de la población, e incorpora procesos operativos para garantizar esa
extensión, como el acceso al sistema financiero. Si bien esto último no
necesariamente es un componente per se dé la seguridad social, dignifica a la
población pensionada, haciendo viable un manejo más adecuado de su asignación
económica, al reducir progresivamente las filas que estas personas suelen hacer
para acceder a la pensión en las entidades financieras.

Planteamiento del problema:


Actualmente, existe una tendencia demográfica mundial, que proyecta un
cambio significativo de la población de adultos mayores, según los datos de la
Comisión Económica para América Latina, CEPAL (2011), “el envejecimiento de la
población es un proceso sin precedentes en la historia de la humanidad” (p. 14).
La evolución del índice de envejecimiento a nivel mundial y regional, revelan
en todos los casos que va en aumento, con algunas diferencias que varían según
las regiones.
Dichas diferencias, son planteadas por la CEPAL, destacando que, en
Europa, y América del Norte, para 2050, “el índice de envejecimiento habrá
alcanzado 270 y 190 personas de edad por cada 100 menores de 15 años,
respectivamente. Para finales de siglo, Europa se habrá estabilizado alrededor de
260 y América del Norte, alrededor de 240”. (p.18)
Por su parte, Asia y América Latina muestran un comportamiento similar a lo
largo del período de estudio, si bien Asia presenta siempre un índice de
envejecimiento más alto. En 2010, en América Latina había alrededor de 36
personas de edad por cada 100 menores de 15 años. Según las previsiones, a
mediados de siglo la región ya habrá sobrepasado el valor de 150 adultos mayores
por cada 100 menores y convergerá con América del Norte a finales de siglo con un
índice de envejecimiento de 240 (Ibid).
De manera que las proyecciones en cuanto al envejecimiento mundial, dan
cuenta del cambio en la estructura de la población, a este respecto estima la misma
CEPAL (2007) que “los países de América Latina han registrado profundas
transformaciones demográficas, cuyas expresiones distintivas son la disminución
del crecimiento de la población (1,3% en el quinquenio 2005-2010) y el
envejecimiento de las estructuras de edad” (p.10). En definitiva, la estructura
demográfica, ha sido objeto de cambios, que le imprimen características que
ameritan el análisis y desarrollo de aplicación de políticas públicas pertinentes a
dicha situación.
La tendencia sigue siendo, menor crecimiento y aumento del proceso de
envejecimiento, siendo en gran medida la baja fecundidad y la disminución de la
mortalidad parte de las causas de dicho panorama demográfico, hecho que se
“inició a finales de la primera mitad del siglo XX y hoy se refleja en una esperanza
de vida al nacer de 73,4 años” (período 2005-2010) (Ibid).
Según las previsiones, de la CEPAL (2011) para América Latina “el número
de adultos mayores superará por primera vez al de niños en 2040”. Estas
consideraciones permiten observar que se está en pleno proceso de transición o
remodelación de la estructura etaria de la población, destacando así que “se pasa
de una estructura de población joven en 1950 a una población en claro proceso de
envejecimiento” (p.14).
La CEPAL, señala que “el grupo de personas con 60 años y más
representaban el 5,6 % del total de la región en 1950 luego un 9,9% en 2010 y las
estimaciones para el 2100 es del 35% de la población” (p.14), esto significa que el
grupo de adultos de mayor edad seguirá ampliándose con más rapidez que el resto
de la población.
Por lo tanto, se puede decir, que definitivamente los indicadores
demográficos para Latinoamérica y sus respectivas proyecciones, siguen los
patrones de la tendencia mundial del crecimiento de las personas mayores de 60
años, dicha tendencia se va expresando en los países de la región con sus propios
matices.
En el caso de la población venezolana, el Instituto Nacional de Estadística
(2011), afirma que para 1990, el porcentaje de la población de personas del grupo
etario de 65 años y más era de 4,0%, en el 2001, asciende a 4,9% repuntándose un
aumento del 0,9% y nuevamente ascendiendo en el año 2011 a un 5,8%, lo que
indica la misma proporción porcentual (0,9) de crecimiento. (p.10)
En el mismo censo, se resalta el índice de envejecimiento de la población,
comparados en los censos de 1990, 2001 y 2011, en los cuales se observa una
tendencia al aumento, ya que para 1990 se ubicaba en 16,3 %, en el 2001 alcanza
un 21,3%, repuntándose en el 2011 a un 32,4 %, es decir, que entre 1990 al 2001
tuvo una tendencia al aumento en un 5% y entre el 2001 y el 2011 aumentó en un
11,1%, de tal manera en el 2011, habían 32,4 personas mayores de 59 años por
cada cien personas menores de 15 años. Estas cifras dan cuenta de cómo
Venezuela, manifiesta la tendencia del aumento de personas mayores. (p.13)
Al respecto de cómo los países van a ir asumiendo este fenómeno
demográfico, la CEPAL (2011), señalan algo interesante, a pesar de que los países
desarrollados y los que están en vías de desarrollo en algunos periodos van a
coincidir en su índice de envejecimiento y la población de los adultos mayores en
su estructura poblacional, la adaptación hacia este aspecto no será igual, se avizora
que ese rápido crecimiento requerirá ajustes económicos y sociales de gran
envergadura en la mayoría de los países. Dado que la de América Latina está
envejeciendo más rápidamente que la de los países desarrollados, los países en
vías de desarrollo de estas regiones tendrán menos tiempo para adaptarse a las
consecuencias de este fenómeno y se agrava debido a los niveles de desarrollo
socioeconómico de los mismos. (p.19)
La trascendencia del envejecimiento según la CEPAL (2011,) es “un cambio
profundo que tiene repercusiones en todas las facetas de la vida humana” (p.13)
destacando el impacto en los distintos quehaceres de la sociedad, referidos en el
siguiente párrafo:
“en lo económico, el envejecimiento de la población incide en el crecimiento,
el ahorro, las inversiones, el consumo, los mercados de trabajo, las pensiones, la
tributación y las transferencias intergeneracionales. En lo social, influye en la
composición de la familia y las modalidades de convivencia, la demanda de
vivienda, las tendencias de la migración, la epidemiología y los servicios de atención
de la salud. En lo político, puede alterar los patrones de voto y la representación”
(p.13)
Esto significa que el alcance del envejecimiento, es un proceso que afecta de
una manera multidimensional la vida del ser humano en sociedad, propulsando
cambios en todo el entramado social y el desarrollo de las políticas de Estado
adecuadas para atender a la población en la etapa del envejecimiento.
Por tal motivo, es necesario que cada país incluyendo Venezuela, realice una
adecuación integral, con iniciativas públicas y privadas para asumir los retos que le
plantea el aumento de las personas adultas mayores, para así garantizar los
derechos inherentes a su persona, y garantizar una mejor calidad de vida.
El fenómeno del envejecimiento de la población, iniciado en los países
desarrollados hace varias décadas, avanza con rapidez, impulsando a las
organizaciones internacionales, a los gobiernos, asociaciones científicas y
gremiales, a analizar y plantearse políticas públicas en materia de seguridad social,
cuya acción esté dirigida a la promoción de servicios sociales y protección social
(programas de salud, vivienda, recreación, educación, capacitación y otros) que den
respuestas oportunas, adecuadas y económicamente factibles a los efectos
ocasionados por el envejecimiento.
En el caso de Venezuela, la tendencia del aumento de la población de adultos
mayores, ha impuesto cambios profundos en el funcionamiento de la sociedad
venezolana, sobre todo en el área de las políticas públicas: seguridad social,
servicios sociales, vivienda, trabajo y salud, que podrían tener serios conflictos a la
hora de sostenerse, porque se está hablando de una población que va a vivir más,
que no está laboralmente activa, que además está afectada por los procesos
migratorios actuales en el país, que manifiestan características de dependencia,
entre otros.
De allí la imperante necesidad del diseño y la aplicación de políticas públicas
en materia de seguridad social que garanticen los derechos a las personas de la
tercera edad. El incremento en el número y proporción de la población en edades
avanzadas genera nuevos retos para la política social enfocada a la protección de
los mayores, porque a diferencia de otros grupos poblacionales, a ellos se asocian
condiciones de vulnerabilidad creciente y aislamiento.
Por tal motivo es necesario preguntarse sobre la idoneidad de la Gran Misión
en Amor Mayor como programa o política pública en materia de seguridad social,
por lo que son oportunas las siguientes interrogantes:
¿Cuáles son las características de la Gran Misión en Amor Mayor.?
¿Este programa guarda pertinencia con la realidad sociodemográfica del
país?
¿La GMAMV es en realidad una política pública garante de la seguridad
social para los beneficiarios?
¿Cuál ha sido la influencia de la Gran Misión, en los beneficiarios?

La resolución de estas interrogantes, permitirá no sólo establecer los retos


que deben tener las políticas públicas para la población mayor en Venezuela.

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