intRopvuccion Si bien el vampiro es una figura omnipresente en los relatos de todas las culturas desde Sumeria hasta nuestros dias, la tradicién literaria occidental -al menos esa es la convencién- se inicia con El vampiro de Polidori, fuente de numerosas secuelas inmediatas, la mas célebre de las cuales es sin duda el Dracula de Bram Sto- ker. Tanto aquel cuento como un fragmento finalmente no incluido en la novela del irlandés estan presentes en esta antolo- gia, en la que también aparecen otros destacados exponentes del genero, desde Robert Bloch, hijo literario ~debidamente recono- cido- de H. P. Lovecraft, hasta el alucinante Edgar A. Poe. Y tam- bien una pieza no estrictamente literaria, pero cuya inclusion es més que justificable: la confesion escrita del asesino serial John Haig, el “vampiro de Londres”, que hacia 1949 mato al menos a nueve personas para beber su sangre. La rascinacién iPor qué el yampiro fue siempre una figura fascinante, quizas el mito mas difundido entre las diversas culturas humanas? {Cual es la razon de la persistencia del tema yampirico desde tiempos Temotos hasta estos primeros anos del siglo XXI? : De las culturas anteriores no hay que hablar aqui, puesto que Pe no es para el analisis sociolégico o antropoldgico, unease el goce estético y literario. Pero la tentacion de pregun- Teepe anes época es grande, tanto como la de ensayar una ¢Por qué en nuestros dias, ajeno a la supuesta prepon= Intropuvcclon 7rotar al Tiempo, puede sucedernos ivadlo del ruso upyr 1s linguistas sos- que, en realidad, en el Diccionario de Ja edicién de 1843. s —quienes la tomaron n aparece en inglés. por primera vez ¢? jones: una, en mar20, Paole); la seg apelaba a una 6lume hasta >". iro es un ser maligno que sale de s atacar a las personas que estan descans: ‘sus lechos, hombres, mujeres y nifios Por igu sexo, succionandoles toda la sangre y aniquildndolas. A los que antes de morir ee eae por n causa de su afeccion dijeron que personas recientemente falle ‘abian retornado de la muerte ara atormentarlos”. ‘Mas periodistica —por prédiga en ejemplos—e: i Pei del Diablo de auibieke Blerees eeuce _ ‘Demonio que tiene la censurable costumbre de devorar los muer- tos. Su existencia ha sido disputada por polemistas mas interesados en privar al mundo de creencias reconfortantes que de reemplazarlas ‘por otras mejores. En 1640 el padre Sechi vio un vampiro en un ‘cementerio proximo a Florencia y lo espant6 con el signo de la cruz describe dotado de muchas cabezas y de un nimero extraordina- de piernas, y no dice que lo vio en mds de un lugar al mismo sl buen hombre venta de cenar y explica que si no hubiera ado de comida”, habria atrapado al demonio contra todo ston relata que unos robustos campesinos de Sudbury un vampiro en un cementerio y lo arrojaron en un bebe- os. (Parece creer que un criminal tan distinguido debié /un tanque de agua de rosas). El agua se convirtié ins- e en sangre “y asi continua hasta el dia de hoy”, escribe tarde, el bebedero fue drenado por medio de una del siglo XIV un vampiro fue acorralado en la Amiens y la poblacion entera rodeo el lugar. mados con un sacerdote a la cabeza, Ilevando un ‘capturaron al vampiro que, pensando escapar a, habia asumido el aspecto de un conocido que lo ahorcaran y descuartizaran en ares. El ciudadano cuya forma edd tan afectado por él siniestro episo- -en Amiens, y su destino sigue siendo un bién una definicién de Karl ital establecid que “el capital es 'u tumba por la noche ando pacificamente en al, sin fijarse en edad o