El efecto lucifer

CAPITULO I
Respondiendo de manera honesta a la pregunta inicial, puse la vista sobre la imagen tan
rápido, sin prestar atención que solo vi demonios, claro, esto debido a la sugestión del título
del libro.
Para empezar, el autor nos relata que es el mal a su concepción haciendo alusión a la divina
comedia, principalmente, sin embargo, para mí no existe la maldad, nosotros creamos el mal
y el bien, con nuestra interpretación de lo “políticamente correcto” que nos hemos forjado a
través de los años, subsistiendo de una falsa moral que nos enjaula en una prisión de
hipocresía social, que retiene el salvajismo natural que caracteriza a todo ser viviente, por lo
tanto:
¿Qué hace que la gente actué mal?... yo siempre he compartido la idea de Maquiavelo: “el
hombre es malo es malo por naturaleza” somos animales, al fin y al cabo, es solo que nos
creemos lo suficientemente superiores para decidir quién está bien y quien mal.
Después se inicia con los actos que el hombre ha realizado a lo largo de su paso por el tiempo
enmarcando, por supuesto, la responsabilidad social que nos “caracteriza” como seres
racionales, buscando un culpable al cual usar como chivo expiatorio, pues claro, la
humanidad nunca se equivoca, es perfecta e inmutable. Y por supuesto, no se esperaba
menos, el autor hace mención a que se debe buscar el Qué de la actuación humana, los
factores que lleva a un animal racional a actuar de sobremanera en la sociedad que lo acogió.
Un poco de historia:
La inquisición, una brecha de tiempo en el cual el hombre necesitaba más que nunca creer en
lago, y no es para menos, siempre me he preguntado ¿Cuál es el motivo por el cual estamos
aquí y porque existimos?, sin embargo, el temor de no saber la respuesta nos orilló a crear
dioses, seres/entes supremos que satisfacen nuestra existencia con el buen obrar, si no, se te
amenaza con el sufrimiento eterno.
Y es en ese punto donde se llega a un fanatismo, donde nos creemos lo que hemos inventado
y castigamos a quienes no piensan como nosotros.
En seguida, la trama evoluciona al Estatismo, la organización democrática donde un puñado
de gente es la responsable de tomar las riendas de nuestro futuro y la actuación de los medios
como cómplices de esta nueva clase elitista alineando a la “patria” como símbolo casi
religioso que lleva a los demás a actuar por ellos.
A forma de conclusión, se nos hace rememorar ciertos actos de maldad cometidos por el ser
perfecto, el hombre con delitos que van desde violación, genocidio, discriminación,
corrupción de menores, lenocinio, homicidio, tomando como protagonistas a los Tutsis y los
Hutus, en Ruanda haciendo caso a su gobierno en un acto de patriotismo que orilla a los
Hutus a acabar con sus vecinos por una causa que al parecer no tiene sentido. Y todo, con
una falta de remordimiento impresionante que denota la decadencia social, tal como paso con
Sodoma, Roma, Constantinopla.
Denotado una deshumanización, con tan solo obtener un prejuicio de alguien a quien no
conocemos, como una simple idea puede llevarnos a decidir si torturar o no, a alguien, como
sucedió en Abu Grahib, jóvenes de sociedad media sin antecedentes, sacando su lado salvaje
sin razón aparente hacia personas que se suponía debían cuidar, humillándolas y
lesionándolas a grados más que físicos y es lo que más adelante se buscara determinar.
CAPITULO II
Esta iniciamos fuerte con las rebeliones hechas por estudiantes en Estados Unidos, siendo la
sedición al delito que más se acerca al descrito, pero desde un punto de vista psicológico va
mas allá. Phillips menciona una teoría ya conocida anteriormente, “la teoría de las ventanas
rotas” donde se nos plantea la idea de que las personas y sociedad actúan según su estándar
de oportunidad, es decir, si tienen la oportunidad de delinquir siendo estos anónimos, es decir,
que si las personas se sientes invisibles ante la posibilidad de delinquir sin duda lo harán, sin
embargo, nos menciona que, al colocar los automóviles en dos lugares diferentes como es el
Bronx y el Palo Alto, se esperaba que ambos autos fueran mutilados por las personas, sin
embargo, esto solo sucedió en el Bronx, donde se tiene una sociedad no tan reciproca como
Palo Alto, y esto es una teoría que se nos ofrece, la reciprocidad que tiene o siente una
sociedad hacia las instituciones y la seguridad.
De aquí el autor nos conecta a un experimento que quiere realizar, en la universidad de
Stanford, quiere saber cómo es que las personas adoptan su identidad en el tiempo, desde
cero, toma 24 personas voluntarias, con estudios, nivel socioeconómico medio y
aparentemente un buen estado de salud mental, toma al igual novatos de la policía, aquellos
que no sean corruptos por la violencia, lo que quiere estudia es como se adaptan las personas
a un rol después de varias semanas simulando el rol de carceleros y ricos, haciendo
detenciones “rutinarias” a los voluntarios, implicando al mismo tiempo una presión de los
medios de comunicación, ¿a qué nos referimos? A esa coalición de la que es necesaria para
las instituciones para poder subsistir en sociedad para que las personas confíen en ellos.
Nos platica como fuera 3 de los arrestados, los voluntarios siendo solo uno el que se
sugestionara, iniciando así el experimento.