Está en la página 1de 3

EL INGENIERO RESPECTO A LA REFORMA ENERGETICA

(SECTOR ELECTRICO)

Introducción

El decreto que reforma y adiciona diversas disposiciones de los artículos 25, 27 y 28 de la


Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en materia energética (la “Reforma”),
promulgado por el Ejecutivo Federal el 20 de diciembre de 2013, incluye diversos cambios a la
estructura y organización del sector eléctrico en México. Aun cuando la legislación secundaria
incorporará en detalle el contenido de la Reforma, pueden ya anticiparse algunos aspectos
relevantes en materia de electricidad:

Generación y comercialización de energía eléctrica

Al día de hoy, el Estado, actuando por conducto de la Comisión Federal de Electricidad (CFE),
controla toda la cadena de actividades concernientes a la energía eléctrica, desde su generación,
hasta su comercialización, pasando por la distribución y transmisión. La Reforma prevé que el
sector privado participe abiertamente en dos eslabones de la cadena productiva, la generación y la
comercialización de energía eléctrica. Con ello se busca incentivar el mercado de generación
eléctrica con el desarrollo de más y mejores proyectos.

Tanto del debate legislativo, como del texto de la Reforma, se desprende que la participación del
sector privado será abierta en materia de generación de energía eléctrica, requiriéndose de un
permiso otorgado por la autoridad (actualmente la Comisión Reguladora de Energía - CRE) para el
desarrollo de dicha actividad. Respecto a la comercialización, se vislumbra que los particulares
podrán comercializar la energía generada y transmitida por la CFE. Se espera que estos cambios
repercutan de manera positiva en el sector eléctrico, donde podrán participar más activamente
jugadores del sector privado, lo que busca desde luego generar mayor inversión y mejor
tecnología, en un esquema regulatorio más flexible.

Transmisión y distribución de energía eléctrica

La Reforma contempla asimismo que los particulares participen en actividades de transmisión y


distribución de energía eléctrica, que seguirán bajo la rectoría del Estado a través de la CFE.

Bajo el esquema actual, la CFE lleva a cabo la transmisión y distribución de energía eléctrica
generada bajo cualquiera de los esquemas contemplados por la regulación vigente, para su
posterior comercialización. Se busca que una vez implementada la Reforma los particulares 2
intervengan en actividades de transmisión y distribución conjuntamente con la CFE, a través de
esquemas contractuales. Previsiblemente, y a falta de un esquema definitivo, esto se haría
realidad mediante contratos de construcción, operación y mantenimiento de líneas de
transmisión.
A partir de lo anterior, toda la cadena productiva admitiría, en mayor o menor medida, la
participación del sector privado, generando nuevos mercados y oportunidades de inversión que
idealmente derivarían en mejor infraestructura y, consecuentemente, en un servicio público de
energía eléctrica más eficiente, bajo la rectoría del Estado.

Contratos relacionados con la infraestructura eléctrica

Se espera que los particulares participen en actividades de financiamiento, mantenimiento,


gestión, operación y ampliación de la infraestructura eléctrica mediante contratos de servicios a
celebrarse con CFE, definiéndose para ello un esquema adecuado de contraprestaciones.

Dado el impulso que se espera dar a las actividades referidas en generación y comercialización, y
la participación privada en distribución y transmisión, se espera un aumento en la necesidad de
contratar servicios privados de mantenimiento, operación y ampliación de la infraestructura,
pudiendo anticiparse oportunidades de inversión en estas actividades.

Centro Nacional de Control de Energía (CENACE)

El CENACE, actualmente adscrito a la CFE, se convertirá en un organismo público descentralizado,


que continuará a cargo del control operativo del Sistema Eléctrico Nacional (SEN), a fin de que sea
un tercero imparcial, y no la propia CFE, quien opere el mercado eléctrico mayorista, garantizando
el acceso abierto al SEN, tanto para transmisión como para distribución de energía eléctrica.

Impacto en energías renovables

Si bien la Reforma no tiene como objetivo central la promoción de energías renovables, los
cambios que contempla deben generar un impacto significativo en el desarrollo de dicho sector.

Se espera que la liberalización de las actividades de generación y comercialización impulse


fuertemente el desarrollo de proyectos con fuentes de energía renovable. Esto debido a que se
anticipa un esquema más flexible, donde se prevé que desaparezca la figura de las sociedades de
autoabastecimiento, y se pueda generar y entregar energía libremente a personas físicas y
morales. En el último lustro, la participación de energías renovables en la matriz energética
nacional ha aumentado del 4% al 8%, por lo que se estima que el ritmo de crecimiento sea mayor
una vez que los nuevos esquemas sean implementados en forma definitiva.

Aunado a lo anterior, se ha incluido el concepto de “sustentabilidad” a nivel constitucional, en el


artículo 25, de lo que se infiere que la promoción de energías renovables se convierta en un
objetivo primordial en las actividades económicas que regule el Estado. Estos cambios deberán ser
materializados de forma concreta en la legislación secundaria a expedirse como resultado de la
Reforma. El sector eléctrico pasa de ser una cadena de actividades verticalmente integrada, a un
sector parcialmente liberalizado, abierto a la participación privada, si bien la CFE mantendrá la
rectoría de la industria. 3 A partir de lo anterior, se amplían las posibilidades de participación de
los particulares, con un esquema regulatorio más flexible que permita la celebración de contratos
para llevar a cabo actividades diversas y la creación de nuevos mercados en el sector eléctrico.

También podría gustarte