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Figura :v
Proceso de cálculo:
Perforar un pozo cilíndrico en el suelo, hasta una determinada profundidad por debajo del
nivel de la capa freática.
Habiendose llegado a la profundidad deseada, esperar que el agua freática alcance su nivel
original.
Una vez llegado al nivel original, extraer agua del pozo de manera que el agua freática vuelva a
fluir a través de las paredes y del fondo del mismo.
Consideraciones generales
Para esta elección se deberá considerar toda la información existente como mapas
topográficos, aerofotografías, estudio de suelos con fines de drenaje, agrológico, etc, de
manera que los puntos elegidos sean representativos de un área determinada y puedan ser
ajustados en el campo. La época más apropiada para realizar las pruebas será aquella en que
se tenga la tabla de agua cerca de la superficie.
Profundidad de perforación
Esta profundidad dependerá de la naturaleza, espesor y secuencia de los horizontes del suelo,
así como de la profundidad estimada de los drenes terciarios a construir. Cuando el suelo es
homogéneo y de gran profundidad, la perforación podrá ser de 60 a 70 cm por debajo de la
tabla de agua.
Tiempo de recuperación
La recuperación del nivel de agua en el pozo dependerá de acuerdo al tipo de suelo, para
suelos ligeros alcanzará en un tiempo relativamente corto, 10 a 30 minutos, mientras que para
suelos medianos y pesados podrá variar desde 30 minutos a algunas horas.
Nivel de depresión
El nivel de agua en el pozo se deprimirá entre 20 y 40 cm. El factor que condiciona el nivel de
depresión es el tipo de suelo, teóricamente es recomendable deprimir 20 cm en suelos
ligeros, de manera que se tenga una carga hidráulica pequeña en un medio muy permeable, y
deprimir 40 cm en suelos pesados de forma que se tenga una buena carga hidráulica en un
medio menos permeable.
En los comienzos de la recuperación, existe una marcada regularidad entre los valores de Δt y
los correspondientes Δy, al ir avanzando la recuperación, la relación lineal se va perdiendo y
para un mismo valor de Δt el valor de Δy va decreciendo.
Con la finalidad de lograr una buena precisión y reducir los efectos de irregularidades, se
utilizan para el cálculo de la conductividad más o menos 5 lecturas uniformes de elevación del
nivel de agua, es decir, aquellas lecturas en los que Δy varían en forma lineal con los Δt.
Debe tenerse la precaución de completar las medidas antes que el 25% del volumen de agua
extraída del orificio, haya sido reemplazada por el flujo aportado por el agua del suelo.
Después se forma una capa freática en forma de un embudo, muy marcado alrededor de la
parte superior del orificio. Esto aumenta la resistencia del flujo alrededor y hacia el interior del
orificio. Este efecto no es tenido en cuenta en las fórmulas o nomogramas desarrollados para
el método del agujero de barrena y por lo tanto debe comprobarse que Δy < ¼ yo.
Luego que se han hecho las mediciones respectivas, será necesario revisar su consistencia y
confiabilidad. Para tal efecto será necesario realizar todo el proceso de nuevo, hacer nuevas
mediciones en el mismo pozo, eliminar aquellos datos que merezcan dudas y finalmente
utilizar solo aquellos, con los cuales se obtiene máxima consistencia.
Equipo
Una bomba de tipo manual (achicador), que se usa como un extractor del agua del agujero,
consiste en un tubo de 60 cm de longitud cuyo extremo del fondo va provisto de una válvula
con charnela. Piezas adicionales pueden ser atornilladas al extremo superior del tubo.
Un flotador, cinta métrica ligera de acero y un pie. El pie se clava en el suelo hasta cierta señal
de modo que las lecturas del nivel de agua pueden tomarse a una altura fija sobre la superficie
del terreno. El orificio debe practicarse inalterando el suelo lo menos posible.
Un barreno de hoja abierto usado en Holanda, es muy adecuado para suelos arcillosos
húmedos, mientras que el barreno cerrado empleado generalmente en USA es excelente para
suelos sueltos y secos.
Cálculos
Ernst (1950) encontró que la relación entre la conductividad hidráulica del suelo y el flujo de
agua en el interior del sondeo, depende de las condiciones límites. Esta relación ha sido
obtenida numéricamente por el método de compensación por diferencias y viene dado por:
∆𝑦
𝐾=𝐶
∆𝑡
Donde:
𝑦𝑜 = depresión inicial
∆𝑦 = 𝑦𝑜 − 𝑦𝑛
H = profundidad del nivel del pozo por debajo del nivel freático
Para el cálculo de C , Ernst preparó varios nomogramas, para valores de r = 4cm y r = 5cm,
ambos divididos a su vez en otros dos según que S = 0 (fondo del pozo coincide con la capa
impermeable) o que S > 0.5H, siendo su empleo el siguiente:
Desde este punto, trazar una línea paralela hasta interpretar el eje de ordenadas, donde se lee
el valor de C.
∆𝑦
Para el cálculo de K, se une este punto del valor de C, con el valor de ∆𝑡 (escala de la izquierda)
y por intersección con la escala central se determina el valor de K.
Cuando r sea distinto a 4 o 5 cm para utilizar los nomogramas indicados, hay que hacer el
cambio de escala oportuno para los valores de H e y.
En el caso de no disponer de estos gráficos , se puede hacer una estimación por medio de las
siguientes relaciones empíricas:
4000𝑟 2 ∆𝑦
𝐾= 𝑦 𝑥
(𝐻 + 20𝑟) (2 − ) 𝑦 ∆𝑡
𝐻
En la que:
r, H e y vienen dados en cm
∆𝑦
en cm/seg
∆𝑡
K en m/día
Con esta fórmula se obtiene resultados con suficiente exactitud, siempre que :
2 < r < 7 cm
y > 0.2H
S>H
∆𝑦
∆𝑦 ≤ 4
3600𝑟 2 ∆𝑦
𝐾= 𝑦 𝑥
(𝐻 + 10𝑟) (2 − ) 𝑦 ∆𝑡
𝐻