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Guía del mensaje de 1888

Importancia de su comprensión
Una creciente inquietud asalta a muchos: '¿Es tan im- Pero el mensaje del Señor no consistía en una aterra-
portante el mensaje de 1888 como para que le dedique dora exigencia: "¡Haced lo imposible!". No era un
mi tiempo?' viaje hacia el "hágalo usted mismo" bajo la opresión
del temor, sino que era una experiencia de fe. Como el
Sí, lo es. Es aquello por lo que clama el hambriento rocío al descender sobre los campos sedientos, el men-
corazón de todo el que espera la segunda venida, en el saje fue una refrescante lluvia de gracia que "sobre-
mundo entero. ¿Cuál es la razón por la que impacta abundó" mucho más que todo el abundante pecado que
como el destello de un relámpago?: El mensaje fue "el el diablo pueda inventar. Le cautivaba a uno el cora-
principio" de una explosión rebosante del Espíritu, sin zón. Comenzó a propagarse el resplandor de una gozo-
precedentes desde los días de Pentecostés. Fue el co- sa esperanza, porque uno veía el carácter de Dios de
mienzo de "los aguaceros de la lluvia tardía provenien- una forma distinta. E. White lo describió como si al
tes del cielo". Era el refrigerio de las buenas nuevas doblar una esquina uno se encontrase cara a cara con
que ansiaban por doquier los corazones enfermos de Jesús sonriéndole, no frunciendo el ceño, "un Salvador
sequía. cercano, a la mano; no alejado" que nos cogiese por la
mano y dijese: "¡Venga!, ¡vamos al cielo!". Las bue-
"La tierra" iba a ser "alumbrada de su gloria". Efecti-
nas nuevas de la Biblia encendieron una luz de ensue-
vamente, una luz debe alumbrar el Islam, el hinduis-
ño en los corazones desanimados. ¡Fue sorprendente!
mo, el catolicismo, el protestantismo y el paganismo.
Los adolescentes eran ganados al evangelio. Dios no
"Otra voz del cielo" debe abrirse paso hasta cada alma
estaba procurando impedirle a uno la entrada al cielo,
humana: "Salid de ella [Babilonia], pueblo mío", dan-
sino preparándolo para ir allí. Cada oscura página de la
do cumplimiento a la tan esperada profecía de Apoca-
Biblia comenzó a iluminarse con la luz de las buenas
lipsis 18. Nuestro emblema debería incluir un "pode-
nuevas.
roso" cuarto ángel, junto a los tres habituales en las
fachadas de iglesias y escuelas. ¿No debiéramos haber recibido un mensaje tal con
regocijo desbordante? Ciertamente, y las nuevas de los
¿Es tan importante el mensaje? Desde que los apósto-
pastores sobre el nacimiento del Mesías en Belén de-
les del primer siglo revolucionaron "todo el mundo"
berían haber hecho venir a los sacerdotes en masa des-
(Hech. 17:6), ningún mensaje ha cumplido una obra
de Jerusalem, para darle la bienvenida. Pero "nos"
tal, si bien el "clamor de media noche" de 1844 le es-
sucedió algo extraño, lo mismo que a ellos. Excepción
tuvo cerca. El Señor tenía la determinación de preparar
hecha de una pequeña minoría de oyentes, el mensaje
un pueblo allí mismo, para enfrentar los últimos acon-
tuvo la misma acogida por "nuestra" parte hace cien
tecimientos de la historia. La orden del día no era
años, que la que tuvo Jesús por parte de los judíos hace
"prepararse para la muerte", sino "prepararse para la
dos milenios. Una pluma inspirada dice que si Cristo
traslación".
se hubiese hallado físicamente en persona, le "habría-
Lo menos que cabe decir es que resulta inquietante. mos" tratado como lo hicieron los judíos.

¿En qué consistió el mensaje propiamente dicho?


¿Fue meramente la enseñanza habitual Evangélica que White comprendió que el mensaje de 1888 fue mucho
hemos oído durante toda la vida? "Jesús me ama, lo sé. más allá que las iglesias populares guardadoras del
Debemos procurar ser buenos. Pecamos, y Jesús nos domingo. Era "el mensaje del tercer ángel en verdad",
perdona, ¿por qué re-inventar la rueda?" Algunos de "nueva luz", "un mensaje que es verdad actual para
nuestros propios teólogos han pensado sinceramente este tiempo", "luz del cielo", "la luz que debe alumbrar
que el mensaje de 1888 no era sino un renovado énfa- la tierra con su gloria". No era solamente que Jesús
sis en las enseñanzas de la Reforma del siglo XVI, o perdona el pecado; además, él nos salva del poder y
de las de los grupos evangélicos de nuestros días. esclavitud del pecado, ahora mismo. Hay esperanza
hasta para los adictos. Era el mensaje del evangelio
Pero tras la superficie se esconde algo diferente. E. más abarcante que el mundo moderno haya oído, ya
que estaba basado en la verdad de la purificación del que recupera el mensaje de 1888:
santuario. He aquí algunas de las ideas prominentes

1. Un enfoque refrescante de la justificación por la fe


La idea predominante hace cien años (y también aho- ¡No hace falta esperar a la santificación para saber lo
ra) era que la justificación por la fe es solamente el que es guardar esos mandamientos! En la genuina jus-
perdón por los pecados pasados, una maniobra legal tificación por la fe, el corazón es reconciliado con
por parte de Dios, que le quita a uno la culpa, pero que Dios; no es meramente un acto judicial que declara la
deja al pecador que cree en punto muerto. No hay pro- absolución de los pecados pasados. Esa mejor com-
greso real en cuanto a vencer el pecado, hasta la santi- prensión significa que uno disfruta ya de la victoria
ficación. Pero el mensaje de 1888 vio mucho más. Lo sobre el pecado, ya que es imposible que el corazón
que llenó de gozo el corazón de E. White cuando ésta sea reconciliado con Dios sin serlo al mismo tiempo
oyó el mensaje, es que la justificación hace al creyente con su santa ley. Esa poderosa verdad de piedad prác-
obediente a todos los mandamientos de Dios . Obra lo tica descansa sobre el firme fundamento de otra verdad
que muchos creen que es exclusivo de la santificación. no menos refrescante:

2. Una nueva perspectiva de la cruz de Cristo


Comenzó en 1882, en una experiencia en la que el dando a salvarnos a nosotros mismos? El mensaje de
joven E.J. Waggoner tuvo una vislumbre de la cruz, 1888 dice: No, el sacrificio de Cristo es más que sim-
como centro y sustancia del mensaje del tercer ángel. plemente provisional. Es efectivo en tanto en cuanto
Cuando Cristo dio su sangre por los pecados del mun- compró nuestra vida actual y todo cuanto poseemos y
do, redimió a la raza humana perdida. Nadie está somos; todavía más, compró la salvación eterna en
exento de una implicación íntima, ya que de otro modo favor nuestro y nos la dio en el don de sí mismo, (si
no habría sido cierto "que por gracia de Dios gustase bien podemos rechazarla, habiendo Cristo cumplido su
la muerte por todos" (Heb. 2:9). En otras palabras, parte).
Cristo murió la segunda muerte de toda persona, su La parálisis espiritual de la tibieza se origina en lo más
castigo final por el pecado. hondo de nosotros, en la consideración de Cristo como
Y realizó todo ello antes de que tuviéramos la mínima un banco que no hace nada, hasta que ingresamos pre-
oportunidad de decir sí o no. Jesús se implicó a sí viamente un depósito. Lo convertimos en alguien im-
mismo con el alma de todo hombre, hasta el nivel más personal, distante. A nosotros toca dar el primer paso.
profundo del ser de éste, hasta esa fuente oculta de su Es decir, hacemos depender nuestra salvación de nues-
miedo íntimo y personal a la muerte eterna. El sacrifi- tra propia iniciativa. Sin embargo, en realidad Cristo
cio de Cristo lo ha librado ya de ese temor, que lo te- hizo ya el depósito de vida eterna con todas sus bendi-
nía esclavizado "por toda la vida" (vers. 14 y 15) (el ciones, ingresándolos inmerecidamente en nuestra
pecador puede resistirlo y rechazarlo para su propia cuenta bancaria. Son ya nuestros "en él". Ahora,
perdición, ya que Cristo no fuerza a nadie a ser salvo). hagamos efectivo el cheque y reconozcamos la bendi-
ción, por fe. Una fe tal "obra por el amor" y produce
Dice Isaías: "Jehová cargó en él el pecado de todos en sí misma obediencia interna y externa a aquel que
nosotros". Pablo declara que "es Salvador de todos los lo dio todo por nosotros. Todo lo anterior está incluido
hombres, mayormente de los que creen". Y Juan añade en la experiencia de la justificación por la fe.
que "él es la propiciación por nuestros pecados: y no
solamente por los nuestros, sino también por los de La consecuencia es que la única razón por la que al-
todo el mundo" (Isa. 53:6; 1 Tim. 4:10; 1 Juan 2:2). guien puede finalmente perderse es por haber resistido
y rechazado lo que Cristo realizó ya en su favor. Por la
¿Acaso Cristo no hace nada por nosotros hasta que incredulidad, puede malograr deliberadamente el don
iniciamos el proceso y lo elegimos como nuestro Sal- que Dios puso en sus manos. Esa incredulidad es el
vador personal? ¿Es solamente un Salvador posible, pecado de los pecados, y es el pecado universal del
con un gran SI... condicional? ¿Es que el pecador debe mundo. En otras palabras: si alguien finalmente se
hacer primeramente algo, como creer, u obedecer los salva, será debido a la iniciativa de Dios; si se pierde,
mandamientos, a fin de convertir a Cristo en su Salva- se deberá a su propia iniciativa. ¡Se trata de dejar de
dor? ¿Funcionamos acaso como co-salvadores, ayu- resistir su gracia!.
¿Por qué es tan importante comprender eso? Porque el tamente? Esto no debería ser así. Jesús es
temor como motivación, carece del poder necesario atractivo. Está lleno de amor, misericordia y
para preparar un pueblo para el regreso de Cristo. Pue- compasión."
de despertar temporalmente a algunos, pero nada más.
Hay una motivación superior que E. White describió: "No es el temor al castigo, o la esperanza de la
recompensa eterna, lo que induce a los discípu-
"Se nos señala la brevedad del tiempo para es- los de Cristo a seguirle. Contemplan el amor
timularnos a buscar la justicia y convertir a incomparable del Salvador, revelado en su pe-
Cristo en nuestro amigo. Pero éste no es el gran regrinación en la tierra, desde el pesebre de Be-
motivo. Tiene sabor a egoísmo. ¿Es necesario lén hasta la cruz del Calvario, y la visión del
que se nos señalen los terrores del día de Dios Salvador atrae, enternece y subyuga el alma."
para compelirnos por el miedo a obrar correc-

3. Más buenas nuevas


El sacrificio de Cristo revirtió para todos los hombres Pero el delito de Adán no puede compararse
la "condenación" que pesaba sobre todos nosotros "en con el don que hemos recibido de Dios... El
Adán". Literalmente, salvó al mundo de un suicidio pecado de un solo hombre no puede compa-
prematuro que el pecado nos habría deparado. La cruz rarse con el don de Dios, pues por aquel solo
del Calvario está estampada en cada pan. "Nadie, san- pecado vino la condenación, pero por el don
to o pecador, come su alimento diario sin ser nutrido de Dios los hombres son declarados libres de
por el cuerpo y la sangre de Cristo." Cuando esta gran sus muchos pecados... Y así como el delito de
verdad se clarifica, aparece por doquier en la Biblia: Adán puso bajo condenación a todos los
hombres, el acto justo de Jesucristo ha traí-
Porque el pan de Dios es aquel que descen- do a todos los hombres una vida libre de
dió del cielo y da vida al mundo... y el pan condenación (Rom. 5:15-18. V. Dios habla
que yo daré es mi carne, la cual yo daré por hoy).
la vida del mundo (Juan 6:33,51).

¡Una poderosa motivación!


El resultado práctico de creer esas buenas nuevas es en realmente fácil ser salvo, y difícil perderse. Esa
que al experimentar la justificación por la fe, se produ- noción impregnada de buenas nuevas, constituye una
ce ya en nosotros un cambio de corazón. Estábamos parte esencial del mensaje de 1888 de la justicia de
alejados de Dios, en enemistad con él; ahora lo vemos Cristo (Mat. 11:28-30; Hech. 26:14).
como a un Amigo. Dicho de otra forma, "hemos ahora ¿Parece demasiado bueno para ser cierto? E. White
recibido la reconciliación" (Rom. 5:7-11), o "hemos amaba profundamente esas buenas nuevas. Su ilustra-
llegado a tener paz con Dios" (Id., V. Dios habla hoy), ción predilecta era la proclamación de emancipación
somos reconciliados con él, recibimos la expiación. de los esclavos en la que, bajo el mandato de Abraham
¡Hemos sido redimidos de la muerte eterna! Es como Lincoln –el 1º de enero de 1863–, se declaró legal-
si alguien, estando en un pelotón de fusilamiento, fue- mente libres a todos los esclavos de los territorios con-
se liberado en el último instante. Como dice Pablo, federados. Sin embargo, ninguno de ellos experimentó
"presentaos a Dios como vivos de los muertos". El la libertad hasta que oyó las buenas nuevas, las creyó,
fatigado corazón se ve libre de la carga, cuando fluye y obró en consecuencia. E. White comprendió que ese
esa "paz con Dios". De ahora en adelante, no nos pare- mensaje del evangelio significaría el fin de la omni-
cerá difícil ningún sacrificio hecho para Aquel que presente tibieza. El gozo que le produjo le impedía
sabemos que nos salvó ya de la destrucción misma. conciliar el sueño en la noche.
Un amor tal nos constriñe a vivir para él, convirtiendo

4. Una bendición adicional


Observándola ahora con más detenimiento, la justifi- cación por la fe resulta ser mucho más que una decla-
ración legal de absolución. Siendo que hace obediente Dios. Muchos sinceros guardadores del domingo em-
a todos los mandamientos de Dios al pecador que cree, pezarán gozosos a guardar el sábado del séptimo día
la bendición incluye el cuarto mandamiento (el sába- cuando lo vean en su relación con la justificación por
do). El sello de Dios es el secreto para vencer las in- la fe, y la purificación del santuario que comenzó en
numerables adicciones de las que la raza humana pe- 1844. Se nos señaló que la verdad del sábado deja de
cadora está plagada. Para todo aquel que cree real- traer convicción a los corazones, a menos que se la
mente el evangelio, resulta imposible continuar vi- presente relacionada con la purificación del santuario.
viendo en pecado, que es transgresión de la ley de

5. Pero existe un problema


Todo lo anterior deja todavía una percha donde colgar una palabra: tibieza.
las dudas, hasta que podamos comprender qué es la fe El mensaje de 1888 trajo a la luz una nueva y superior
realmente. ¿Es un deseo egoísta de recompensa celes- motivación: el vivo deseo de honrar y vindicar a Cris-
tial, combinado con el afán por escapar del infierno? to, como ilustra el sentimiento de una novia hacia su
Todos admitimos que el deseo de poseer una magnífi- prometido. Va más allá de sus propios deseos egoístas.
ca mansión en esta tierra implica una motivación ego- La fe viene a ser una apreciación profunda y sincera
céntrica. Pero cuando uno se hace cristiano, ¿es que del gran amor revelado en la cruz, independiente de
simplemente transfiere su deseo de vivir en la opulen- nuestro anhelo de recompensa o temor al infierno.
cia y el bienestar a la expectativa de ocupar una posi- Trasciende a toda motivación centrada en el yo.
ción todavía mejor, en el cielo? De ser así, la motiva-
ción sigue estando basada en el propio interés. El inte- Una tal "fe... obra por el amor". No hay límite para las
rés propio no es capaz de suscitar más que una devo- buenas obras, durante toda una vida y por la eternidad.
ción mesurada, cuya mejor expresión cabe definir en

6. Todavía más buenas nuevas


Todos nosotros estamos espiritualmente enfermos, y venir a ser misericordioso y fiel Pontífice en
necesitados de un médico para nuestra alma. Jesús lo que es para con Dios, para expiar los pe-
tuvo que someterse a una disciplina especial, a fin de cados del pueblo. Porque en cuanto él mis-
cualificarse para ser nuestro gran sumo sacerdote (o mo padeció siendo tentado, es poderoso para
psiquiatra divino): socorrer a los que son tentados... Porque no
tenemos un Pontífice que no se pueda com-
Así que, por cuanto los hijos participaron de padecer de nuestras flaquezas; mas tentado
carne y sangre, él también participó de lo en todo según nuestra semejanza, pero sin
mismo, para destruir por la muerte [la se- pecado. (Heb. 2:14-18; 4:15)
gunda] al que tenía el imperio de la muerte,
es a saber, al diablo, y librar a los que por el El término traducido "destruir", significa "paralizar".
temor de la muerte estaban por toda la vida Cierto, Satanás no está muerto todavía, pero cuando
sujetos a servidumbre... por lo cual, debía creemos esas buenas nuevas, queda paralizado.
ser en todo semejante a los hermanos, para

7. Cristo en tanto que sumo sacerdote, vino tan cerca de nosotros, al tomar nuestra naturale-
za humana, que conoce plenamente la fuerza de todas nuestras tentaciones
Resistió "hasta la sangre, combatiendo contra el peca- santuario celestial 24 horas al día, y no se duerme ja-
do". Sea cual fuere nuestra tentación, no importa lo más (Heb. 12:4; 7:25).
bajo que hayamos caído en el pecado, por más terrible Es como si uno fuese el único paciente de ese médico,
que parezca nuestra desesperación, por mucho que nos recibiendo atención plena durante todo el tiempo.
haya embargado el sentimiento de culpa, "puede tam- ¡Imaginemos ser el único paciente de un hospital, con-
bién salvar eternamente a los que por medio de él se tando con todo el equipo de médicos y enfermeras a
acercan a Dios, ya que está siempre vivo para interce- nuestra entera disposición! Eso es lo que nos sucede
der por ellos." Está ocupado en el lugar santísimo del
en la unidad de cuidados intensivos de Cristo. Crea- ciosísimo mensaje". Le sugerimos comenzar con el
mos lo maravillosas que son las buenas nuevas, y libro 'Introducción al mensaje de 1888', para un exa-
nuestra vida cambiará desde lo más profundo. men más profundo del tema.
Este capítulo es solamente una breve anticipación de R.J.W.
las refrescantes buenas nuevas contenidas en ese "pre-

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