Está en la página 1de 1

Tarea académica Nro.

Luego de leer los siguientes pasajes, responde en grupos las siguientes preguntas de manera
argumentativa, clara y original. Se evaluará también la redacción. Puntaje máximo: 15 ptos.

DEFINICIÓN DE FILOSOFÍA

Cuenta una anécdota que Pitágoras al regresar a Grecia –después de haber conocido a muchos
sabios en Egipto, Persia e India– fue interrogado por Leonte, tirano de Fliunte, quien se hallaba
admirado por la elocuencia y el ingenio del sabio jónico:
–Oh, sabio Pitágoras ¿A qué te dedicas? ¿Cuál es tu sabiduría particular?
–No soy maestro en arte alguna, Leonte, y tampoco soy un sabio (sophos), más bien soy un filósofo
(philos-sophos): alguien que ama y aspira a la sabiduría (sophia), es decir, me dedico a la Filosofía”.
Leonte quedó maravillado por esta nueva palabra y quiso saber más sobre ella, y sobre lo que
distingue a los filósofos de los demás.
–La vida –le explicó Pitágoras– es como los Juegos Olímpicos, donde acuden tres tipos de personas
distintas: los atletas, que compiten por la gloria de algún premio; los comerciantes, que van con la
intención de comprar y vender; y los espectadores, quienes sólo asisten para ver los juegos, siendo
indiferentes a los aplausos y al lucro. Así es el mundo, unos buscan la fama y otros el dinero, pero un
tercer grupo se dedica a la contemplación de la naturaleza, por amor a la sabiduría. Este último es el
de los filósofos.

PITÁGORAS DE SAMOS

01. ¿Cómo diferencia Pitágoras su actividad de la del sabio? ¿Por qué dice que no lo es?
02. ¿Qué ventajas tiene el ser un simple espectador en la descripción que hace Pitágoras?
03. ¿Puede el filósofo cambiar su rol con uno de los otros? ¿qué implicaría esto para él?

***

Para ver un objeto tenemos que acomodar de una cierta manera nuestro aparato ocular. Si nuestra
acomodación visual es inadecuada, no veremos el objeto o lo veremos mal. Imagínese el lector que
estamos mirando un jardín a través del vidrio de una ventana. Nuestros ojos se acomodarán de
suerte que el rayo de la visión penetre el vidrio, sin detenerse en él, y vaya a prenderse en las flores y
frondas. Como la meta de la visión es el jardín y hasta él va lanzado el rayo visual, no veremos el
vidrio, pasará nuestra mirada a su través, sin percibirlo. Cuanto más puro sea el cristal menos lo
veremos. Pero luego, haciendo un esfuerzo podemos desentendernos del jardín y, retrayendo el rayo
ocular, detenerlo en el vidrio. Entonces el jardín desaparece a nuestros ojos y de él sólo vemos unas
masas de color confusas que parecen pegadas al cristal. Por tanto, ver el jardín y ver el vidrio de la
ventana son dos operaciones incompatibles: la una excluye a la otra y requieren acomodaciones
oculares diferentes.

José Ortega y Gasset. La deshumanización del arte

01. ¿Qué representa la ventana en el texto de Ortega?, ¿qué significaría ver el jardín a través de una
ventana?
02. ¿Con cuál de las dos operaciones oculares se corresponde la actividad filosófica?, ¿por qué?

También podría gustarte