El terremoto del 5 de agosto de 1949, golpeo la Provincia
de Tungurahua entre unos de los cantones afectados por
esa catástrofe natural fue el, Catón Pelileo marcando un antes y después en cada uno de los hogares de sus coterráneos.
Pelileo, baluarte de coraje, cuna de ilustres que, de las
ruinas por las inclemencias del tiempo, te levantaste de entre los escombros y resurgiste. Pelileo Grande, fue el epicentro del terremoto, donde varios pelileños , perdieron su vida, edificaciones propias de la época, terminaron en escombros.
Actual mente caminar por Pelileo Grande, donde se
encuentra el parque central, que fue un cementerio improvisado, allí se enterraron a las víctimas del terremoto, el silencio, la penumbra, nos recuerdan el pasado trágico y valor cultural de lo que algunas fue Pelileo y hoy solo quedan vestigios de aquello.