Viernes 4/05 (segunda hora)

PICHON RIVIERE (Analista-Psiquiatra)

Se interesó en la acción social de las patologías. Realiza una crítica al psicoanálisis, pero también lo
incluye en su visión social. Dice que, el psicoanálisis ”pecó” en su abordaje con la patología en la
confrontación social con la que se trabaja con los vínculos, que si bien se trabaja con los vínculos cuando
se aborda al paciente en análisis, se trabaja desde una visión intrapersonal, y no con una visión
interpersonal o con una visión de confrontación social. Esta es la critica que le hace, por eso intenta
integrar la parte psicoanalítica y sumarle la confrontación social.

Sus principios, los que tienen que ver con el abordaje grupal, lo realiza en la Experiencia Rosario en un
hospital público, con los cuidadores de los pacientes, que presentaban obstáculos, no tanto vinculado
con los pacientes si no con el tratamiento y los cuidadores (profesionales de la salud). La Experiencia
Rosario es una experiencia piloto en la que se trabaja en grupo con los cuidadores, intentando generar
nuevas normas, reglas, visiones, para poder lograr acuerdos intra-grupales vinculados con el trabajo
diario.

Es importante el concepto de locura, dice que parte de lo social, no tiene que ver tanto con lo individual,
si no que parte de lo social y que desemboca en el individuo que a su vez tiene que desempeñarse en lo
social, es un circuito que se termina en el individuo para lo social, para Pichón la hipótesis patogénica
pasa por la locura desde lo social.

Es en la Sociedad o en el contexto social el único lugar en donde puede estudiarse una tensión interna.
Dice que las enfermedades surgen en los grupos por lo tanto la manera de abordarlas tiene que ser en
los grupos, si no se aísla a la persona y no se puede reproducir en el trabajo terapéutico lo que sucede
afuera. Su manera de abordar las problemáticas es en grupo, para que en el contexto terapéutico el
sujeto repita junto con el analista del grupo, esas tensiones internas que suceden afuera para corregirlas
y operar sobre la realidad. Pichón lo llamo grupo operativo, el objetivo es operar sobre la realidad con
determinadas reglas y normas. Hay tres dimensiones de investigación en los que se desarrolla la tarea
correctora.

1. Nivel Psicosocial: las relaciones del paciente con cada uno de los miembros del grupo familiar.
2. Nivel Socio dinámico: la totalidad del grupo, como un todo, relacionado con otros grupos. Lo
que va a permitir ver la maleabilidad del grupo, las adaptaciones a los cambios que el grupo
tiene con relación a otros grupos, las normas en relación con ser parte de ese grupo para ese
grupo.
3. Nivel Institucional: el grupo como institución vinculado con otras instituciones e inserto en una
estructura sociodinámica en un contexto social histórico, económico.

Pichón habla, principalmente, de su abordaje psiquiátrico vincular social, como una psiquiatría del
vínculo. Para él un término importante, es el de vinculo y dice que es la manera particular en que un
sujeto, se conecta o relaciona con otro u otros creando una estructura particular. No hay un único tipo
de vínculo si no que las relaciones vinculares son mixtas y varían en las relaciones de los sujetos. Si bien
no hay un único tipo de vínculo hay un vínculo esperable y medianamente normal, este vínculo se da
cuando hay una clara diferenciación entre sujeto y objeto, cuando puedo vincularme con otro sin
confundirme ni mezclarme con el otro, cuando tengo claro en donde termina mi persona, en donde está
mi límite y donde comienza el límite de la persona del otro, cuando las personas en los vínculos tienen
una libre elección de objeto y no están sujetos a una coerción para elegir y pueden pensar con claridad
que están eligiendo al otro. Da como ejemplo el vínculo madre e hijo, al principio lo lógico y normal es
que el vínculo sea parasitario, el bebé que depende absolutamente de un otro (en este caso es la mama)
y para el niño, no hay diferenciación entre la madre y él, no logra identificar que ese otro que acude a su
demanda esta diferenciado de él. Paulatinamente ese vínculo se transforma en un vínculo simbiótico en
donde comienza un intercambio de emociones, hay un feedback, hay reciprocidad, para luego
transformase en un vínculo diferenciado, es decir hay una clara diferenciación entre la presencia
materna y el niño, entre el yo y un otro, hay un límite preciso. Va a pasar de la interdependencia a una
dependencia y luego a una independencia. Apunta a vincularse de manera independiente y a no
perderse en el vínculo con el otro.

Habíamos dicho que el concepto de locura o de enfermedad mental parte de lo social, vuelve a lo social
porque para Pichón es una hipótesis patogénica Social. La enfermedad mental es una ruptura con el
equilibrio que había entre el sujeto y el ambiente, hay algo que se rompe y da síntoma. Hasta ese
momento y no sabemos porque extraño motivo se mantenía medianamente estable hasta que pasa algo
e irrumpe. Dentro de un grupo, el paciente identificado que es el que puede mandar alguna información
al grupo a través del síntoma, diciendo algo no está funcionando bien. El paciente identificado es el
miembro clínicamente más fuerte, en el sentido de que su aparto psíquico puede sostener, las tensiones
internas que suceden en el grupo, a través de algo patológico. El grupo primario es el que está enfermo,
lo que hace el paciente identificado es mandar a avisar mediante el síntoma que hay tensiones
insostenibles. Mediante la enfermedad, parte del sujeto se expresa hacia afuera, hacia los miembros
que lo rodean y manda un aviso (síntoma), de las tensiones existentes dentro del grupo. En la mayor
parte de las enfermedades grupales, hay alguna problemática vinculada con el desprestigio de algún rol
importante como el liderazgo. Muchas veces las enfermedades muestran que hay un líder en crisis,
alguien que no está cumpliendo una función y empieza a perder liderazgo, entonces uno de los
miembros lo anuncia y empieza a liderar el grupo desde un lugar patológico. Avisa que hay que poner las
cosas en orden y es lo que se intenta trabajar en el espacio terapéutico o grupo. La psiquiatría es
psiquiatría de vinculo al igual que la patología es de vinculo.

El carácter tiene que ver con la manera habitual de comportarse que surge de establecer una relación
particular con un objeto animado o inanimado de una manera y con una forma particular. El carácter se
construye en el vínculo con otros, en la medida en que me voy vinculando con otros, y voy afianzando
mis patrones de carácter. En el trabajo terapéutico individual lo que uno genera es que el paciente haga
una mirad interna acerca de descubrir rasgos de su carácter, (el carácter tiene que ver con la manera
que tengo de comportarme con mis vínculos, voy descubriendo mi carácter a través de los vínculos y mi
relación con los otros desde mi). El vínculo es un pasaje constante entre lo interno y lo externo y en la
introspección lo que se busca a través del trabajo con el terapeuta es conocer que tipos o modos de
vínculo tengo para modificar algún patrón. Si esta modalidad de traslada al trabajo en grupo es más
enriquecedor ya que al coordinador, al terapeuta del grupo le permite ver como la persona, se
comporta con él, con otros y cómo se repiten las tensiones internas que ocurren por fuera, dentro del
grupo.