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SAGRADO CORAZON DE JESUS

MONICIÓN DE ENTRADA

Celebramos la fiesta del Corazón de Jesús. Una fiesta cargada de un profundo significado:
— Miramos el Corazón herido de Cristo que es fuente de nuestra salvación y casa de nuestras vidas y de nuestros caminos.
— Contemplamos el Corazón traspasado y abierto del Salvador que nos enseña que el amor verdadero hay que vivirlo de
cara a los demás.
Hoy queremos pedirle al Señor que su Corazón sea nuestro centro y nuestro apoyo, nuestro consuelo y nuestro descanso.
Y que nos ayude a tener un corazón como el Suyo: sensible, acogedor, sencillo, que perdona, ama y construye, que da
esperanza y es capaz de ponerse en el lugar del otro. Iniciemos esta celebración cantando.

MONICIÓN A LA LITURGIA DE LA PALABRA


Hermanos, una vez más Dios nos confirma su misericordia. Escuchémoslo, pues, para que alberguemos en nuestra
vida su bondad y santidad.
Lectura EVANGELIO, Mt 11, 25-30, “MANSO Y HUMILDE DE CORAZÓN”

ORACIÓN DE LOS FIELE


Oremos, hermanos y hermanas, al Señor nuestro Dios, que reveló su nombre en la zarza, su majestad en el fuego y la
tempestad, y su amor en su hijo Jesucristo, y pidámosle por las necesidades de todos los seres humanos:

Vamos a responder a cada petición: Corazón de Jesús, óyenos

Para que el Señor purifique y santifique sin cesar a su Iglesia, con el agua y la sangre que brotaron de su corazón,
Oremos…Corazón de Jesús, óyenos

Para que el Señor, Rey y centro de todos los corazones, atraiga a sí a los que aún no le conocen, y a los que habiendo
experimentado su amor, se han alejado de él, oremos…Corazón de Jesús, óyenos

Para que Cristo alivie con su amor los sufrimientos de quienes han experimentado la decepción de los amores humanos, y de
los que se sienten rechazados o traicionados en el amor. Oremos… Corazón de Jesús, óyenos

Para que Dios nos conceda encontrar descanso en el corazón de su Hijo, abierto por la lanza del soldado, Oremos Corazón
de Jesús, óyenos

Celebrante:
Dios nuestro, grande y fiel, que has revelado a los sencillos los misterios insondables del corazón de Cristo; escucha
nuestras oraciones y haz que, revestidos con los sentimientos de tu Hijo, que ha querido compartir nuestra debilidad para
hacernos herederos de tu gloria, sepamos amarnos unos a otros con un amor magnánimo y humilde y permanecer en tu Hijo,
que es el mismo amor y vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.

Monición de despedida:

Nuestra celebración ha terminado. Hemos platicado con Jesús y recibido su fuerza. Vayamos alegres a dar testimonio del
amor que Cristo nos tiene, conviviendo en la comunidad como verdaderos hermanos

Repitamos todos:
Jesús manso y humilde de corazón, haz mi corazón semejante al tuyo.

“El Corazón de Cristo es fuente inagotable de consuelo y de salvación”

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