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Castro-Pérez R, Heruáudez-Tezoquipa.

-
1. Castro-Pérez R, Aeruáudez-Tezoquipa . . 1.
Opiuioues de los diversos actores sobre Some opiuious of tbe m e r e u t adors
la participación coniunitaria eu salud ou coniniuuity participation iu health
y plauuicacióu faniiüar. aud faniily plauuing.
Salud Publica de Mex 1993;35:376-392. Salud Publica de Mex 1993;35:376-392

RESUMEN ABSTRACT

La participación comitnitnria constituye irna estrategia Cornmrrnityynrticipationconstitirtes a central strategy in


central en la prestación de los servicios de salud, par- tlteprovision ofliealtli services, particularly inpoor com-
ticularmente en las comunidades marginadas del pak. micnities in tliis coirntry. Little is known, however, about
Sin embargo, se ha explorado poco el punto de vista de the different actors's point of view regarding this strat-
los diversos actores involucrados en ésta, en particular egy. Tliis is triteparticularly for female community mem-
el de las trabajadoras comunitarias y el de las mujeres de bers and commirnity workers. In tliispaper, historical an-
las comunidades. En este artículo se discuten los antece- tecedents of commitnity pnrticipation are discussed and
dentes históricos de la estrategia comunitaria y se pre- some resirlts of a researclt work are presented, which
sentan algunos resultados de irna investigación que explored attitirdes and opinions of different groups of in-
exploró las actitudes y las opiniones de diferentes irni- terviwees, regarding tlw idea of cornmitnityparticiparion
versos de población respecto a la idea de participar in healtlz and family planning. Tlie involved groitps are:
comunitariamente en programas de salud y planifica- female community members, community workers, com-
ción familiar. Los grirpos investigados fueron las micje- mirnity leaders, medical sirpervisors which control
res de las comunidades, las trabajadoras cornirnitarias, community workers, and medical executives wliiclz
los Iiaeres comunitarios, los sicpervisores médicos que control tlrose sirpervisors. It is emnpliosized tliat inedical
controlan a las trabajadoras cornirnitarias y los directi- execirtivesare tlre strongestsicpporters ofcommunitypar-
vos médicos que inonitorean a aquellos supervisores. ricipation, wliile cornrnunity members are tlie weakest.
Se destaca que los directivos médicos son los partidarios Tlie irnportance of taking into accoitnt tke community

(1) Candidato a Doctor en Sociología Médica (Universidad de Toronto).


(2) Departamento de Sociología de la Salud. Escuela de Salud Pública de México, Instituto Nacional de Salud Pública. Cuernavaca, México.

Fecha de recibido: 26 de agosto de 1991 Fecha de aprobado: 15 de octubre de 1993

SALUD PÚBLICA DE MÉXICO


más fuertes de la estrategia participativa, mientras que members'position on matters such as communi~>partici-
las mujeres de las comunidades son las que menos se in- pation In family plnnning a stressed.
volucran. Se advierte la necesidad de tomar en cuenta la
posición de las comunidades respecto a las estrategras
de participación en la planificación familinr.

Palabras clave: participanón comunitaria, planificación familiar, salud,


actitudes, opiniones I Key words: community participation, family planning, health, attitudes,
opinions

Solicitud de sobretiros: Mtro. Roberto Castro Pérez, 30 Charles Street West, Apt. 905, Toronto, Oniario, M4Y 1R5, Canadá

A PAR~CIPACI~N
COMUNITARIA constituye una gular de la atención primaria a la salud, tal como la define

L estrategia central en la prestación de los servi-


cios de salud, particulamlente en las comuni-
dades marginadas del país. Sin embargo, poco se sabe
la declaración de Alma-Ata, y como un elemento clave de
las políticas y progranias de población de acuerdo con la
Conferencia de Población de 1984.
acerca de las opiniones de los actores de esta estrategia. México no ha pemianecido al margen de esta estra-
El punto de vista de los directamente involucrados en tegia; en 1977 la entonces Secretaría de Salubridad y
esta modalidad de prestación de servicios (los habitan- Asistencia creó dos programas relacionados con este
tes de las comunidades, las trabajadoras comunitarias, los tenla: uno fue, el Programa de Extensión de Cobertura y
líderes comunitarios, y el personal de las instituciones de el otro el Programa Comunitario Rural. Ambos tenían
salud) es poco conocido. Aún menos conocido es el como finalidad ampliar la cobertura de los servicios (de
punto de vista de estos agentes respecto a la idea de salud el primero, y de planificación familiar el segundo)
participar comunitariamente en un programa que re- a las más de 13 000 comunidades rurales del país que
viste modalidades particularmente sensibles, como es el carecían de ellos. En 1979 se decidió fusionar ambos
de la planificación familiar. Este trabajo señala algunos progranias e integrar la planificación familiar a la aten-
de los principales resultados obtenidos en este sentido a ción primaria a la salud. El nuevo proyecto recibió el
través de una encuesta de opiniones realizada en 1989 nombre de Programa de Salud Rural. En ese año la
en 10 comunidades marginadas del país.' En la primera cobertura de estos servicios comprendía alrededor de
parte se discuten los antecedentes de la participación 5 000 comunidades de entre 500 y 2 500 habitantes, y a
comunitaria. La segunda plantea la pregunta de inves- mediados de 1980 esta cifra se incrementó a 11 000.
tigación que guió este estudio. La tercera presenta la Es importante señalar las modalidades de la participa-
metodología y la cuarta parte contiene algunos de los ción comunitaria impulsada bajo esta política: las comu-
resultados obtenidos. nidades rurales fueron organizadas en grupos de 10, y a
cada una de estas decenas se les llamó nlódulo. La
responsable de módulo generalmente tenía su lugar de
trabajo en un centro de salud "B". En cada comunidad se
La participación comunitaria ha figurado en el discurso designó o eligió (las modalidades variaron) a una encar-
político de gobiernos y agencias de desarrollo incluyen- gada de comunidad (o auxiliar de salud) que, bajo la
do al Sector Salud. Definida por la Organización Mundial dirección de la responsable de nióduio, es la que provee
de la Salud (OMS)como "el proceso mediante el cual los los servicios básicos de salud y distribuye los métodos
individuos y las familias asumen la capacidad de con- anticonceptivos a la población. Estas encargadas de co-
tribuir a su propio desarrollo y al de la comunidad",' la munidad reciben un pago simbólico por parte de la
participación co~nunitariaes considerada la piedra aii- Secretaría de Salud (SSA), como apoyo para sus gastos de

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PARTICIPACIÓNCOMUNITARIA EN SALUD Y PLANIFICACIÓNFAMILIAR

transportación al centro de salud y como un estímulo por taria es educacional, habilitante, procesal, asociativa,
el desempeño d e su labor. cognoscitiva, planificada comunitariamente y c ~ l e c t i v a . ~
Adicionalmente se impulsó la creación de comités de En la práctica, la participación comunitaria se limita a
salud, integrados por tres o cinco personas de la comu- una o varias mujeres de la comunidad. El caso de México
nidad (generalmente mujeres), quienes tienen la respon- es significativo porque en los programas oficiales la co-
sabilidad de apoyar a la encargada de comunidad en los laboración comunitaria consiste, principalmente, en con-
asuntos relacionados con la salud comunitaria. Esta es- tar con alguna integrante de la comunidad para distribuir
trategia complementaria ha funcionado más sinibólica servicios básicos de salud y métodos anticonceptivos. En
que efectivamente. De hecho, la SSA ha realizado es- otras ocasiones, la ayuda comunitaria se canaliza hacia
tudios tendientes a evaluar el funcionamiento de este áreas no relacionadas directamente con la prestación de
programa, y encontró que con frecuencia "las metas servicios de salud; en estas circunstancias, los servicios
programadas para el nivel comunitario no están siendo de salud se ofrecen a cambio de trabajo colectivo realiza-
alcanzadas debido a la baja productividad que presenta do en la comunidad, que puede consistir en que las muje-
la encargada d e c ~ m u n i d a d " . ~ res barran las calles, o en la reparación del centro de
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS)tam- salud u otras obras de albañilería realizadas porlos hom-
bién ha impulsado la participación comunitaria, princi- bres. En algunos casos, diversos organismos no guberna-
palmente a través del IMSS-COPLAMAR,* que atiende a mentales trataronde llevara la práctica una interpretación
un amplio número de comunidades rurales marginadas más amplia buscando involucrar a los integrantes de la
de 17 estados del país y que, en témiinos generales, se comunidad en la planeación de los proyectos de salud, en
implanta bajo las modalidades antes descritas.** su nianejo y en otras funciones relacionadas con la toma
En síntesis, la estrategia de participación comunitaria de decisiones sobre los mismos.
en salud y planificación familiar está vigente, en el dis- La distancia existente entre el concepto de partici-
curso oficial y en la práctica, en miles de comunidades de pación, entendido como el involucramiento de los miem-
nuestro país. Sin embargo, no existe un consenso en tor- bros de la coniunidad en la toma de decisiones, y la
no a lo que puede y debe ser entendido propianiente realidad de la mayoría de los programas de participación
por participación comunitaria. De hecho, ésta es una comunitaria, que no suelen ir más allá de capacitar a una
estrategia que, por su versatilidad, admite muchas mo- mujer de la comunidad como proveedora de ciertos servi-
dalidades, diferentes entre sí, en lo que respecta a su cios mínimos, ha sido el objeto de muchas de las investi-
implantación. En otras palabras, muchas formas de ex- gaciones que sobre el tema se realizaron recientemente.
tensión de cobertura pueden ser llamadas participación Quizá debido al entusiasmo que los formuladores de
comunitaria. políticas experinientaron en un principio por esta estra-
Algunos autores advierten que en ésta es posible tegia, la mayor parte de las primeras investigaciones que
distinguir diversos grados de participación, que pueden ir se llevaron a cabo sobre el tema de la participación comu-
desde un nivel pasivo hasta uno a ~ t i v o Se . ~ señala tain- nitaria en atención a la salud, se concentró en demostrar
bién que es posible distinguir varias formas de participa- la factibilidad de ésta a través del estudio de pequeños
ción' dentro de las que caben diversas gradaciones en proyectos "exitosos", generalmente impulsados poragen-
la distribución del poder. Otros autores apuntan que la cias no gubernaine~itales.~~~ A medida que aumentó el
plena participación comunitaria puede llegar a ser acti- número de gobiernos que optaban por impulsar esta es-
va, consciente, responsable, deliberada, organizada y trategia en escalas cada vez mayores, los hallazgos de los
~ o s t e n i d aO, ~bien, que la auténtica participación coniuni- investigadores comenzaron a revelar algunas de las li-
mitaciones de esta política;1° incluso algunos de estos
últimos comenzaron a mostrarse desconfiados con res-
pecto a la medida en que las comunidades pueden cola-
borar activamente, con pleno conociniiento de causa, en
* A partir de este sexenio renombrado IMSS-SOLIDARIDAD los programas de participación comunitaria implantados
** Al momento de la realización de esta investigación, se trataba de los
17 estados no descentralizados, toda vez que en los ya descenirali-
por los gobierno^.^'^'^ Las limitaciones y el escepticismo
zados este programa ha sido absorbido por el Sistema Estatal de hacen referencia, sobre todo, a la capacidad real y po-
Salud. tencial de las comunidades para involucrarse en la toma
de decisiones y para aportar recursos destinados a las gadas de co~iiunidad,auxiliares y promotoras de salud,
tareas de atención a la salud. comités de salud, etc.), así como del personal médico
encargado de supervisar a los trabajadores y de los di-
rectivos de salud, responsables de monitorear a estos
supervisores. Ello, con el fin de contar con una visión
La mayoría de las investigaciones efectuadas sobre la más integral de esta situación.
participación comunitaria en planificación familiar se Esta información es i~nportantedada la utilidad que
han centrado en los aspectos de organización e implan- puede tener para los tomadores de decisiones en salud,
tación de esos programas; esto es, en aspectos tendientes no sólo porque ellos están en condiciones de influir di-
a determinar cómo los diversos organismos y agencias rectamente en el funcionaniiento tanto de la estrategia
pueden motivar a las comunidades para que intervengan de participación comunitaria como del programa de pla-
activamente en sus programas de planificación familiar. nificación fa~niliar,sino también porque existe un vacío
El punto de partida de esas investigaciones, en conse- en lo que se refiere al conocimiento del punto de vista
cuencia, equivale a la perspectiva de los proveedores; de las comunidades, principalmente en relación a uno de
los inipulsores de la participación comunitaria asumieron los programas más sensibles que actualmente se imple-
implícitamente que los integrantes de las comunidades mentan en este país: la planificación familiar. Este es, en
(sobre todo las mujeres) están dispuestos a colaborar efecto, un programa público con impacto en la esfera
participar en actividades de planificación familiar. In- de lo privado. Es necesario, por lo tanto, conocer cómo
cluso cuando la cooperación de la comunidad no se logra se sitúan los individuos ante la idea de tener no sólo a
inmediatamente, se presume que con un poco de persua- un iiiédico, sino a la comunidad, parcialmente o en su
sión basta para que ésta perciba los beneficios de la conjunto, colaborando activamente en la organización y
estrategia y comience a participar, formando comités, or- adiiunistración de un programa directamente vinculado
ganizaciones locales, etcétera. a su vida privada e intimidad personal: su propia sexua-
También el grado y la extensión de la participación en lidad. En cierto sentido, la participaciónconiunitaria en la
las actividades de planificación familiar se examinaron planificación faiiiiliar es una forina extrema de la dicoto-
desde la perspectiva de las iiistituciones proveedoras mía público-privado señalada más arriba, y por lo mismo
de los servicios. Esos estudios han identificado obstácu- resulta fundamental explorar en detalle sus iniplicacio-
los organizacionales (objetivos inadecuados, estructuras nes sociales.
administrativas centralizadas, etc.) que limitan el trabajo En resumen, a partir de las afirmaciones contenidas en
de la comunidad en las actividades del programa, resul- las políticas y los programas, puede presumirse que los
tando una serie de recomendaciones en torno a cómo formuladores de políticas mantienen una postura favo-
mejorar tales programas para facilitar una mayor coope- rable respecto de la participación de la comunidad en la
ración comunitaria. Sin embargo, esos obstáculos no planeación y gestión de los programas de planificación
pueden explicar del todo el porqué de la baja respues- familiar. Más aún, la mayoría de las investigaciones rea-
ta popular encontrada, y menos aún la dificultad para lizadas hasta ahora tienden a reforzar el conocimiento
mantener el entusiasnlo por los programas participativos sobre cómo puede instrumentarse esta estrategia más
de desarrollo. eficazmente por organizaciones tanto públicas como pri-
Lo anterior sugiere que las comunidades desean in- vadas. Persiste, sin embargo, un supuesto aún no proba-
tervenir, o que pueden ser fácilmente motivadas para do, en el sentido de que las comunidades por sí mismas
ello. En concreto, se requiere conocer las actitudes de desean involucrarse en la organización e implantación
los integrantes de cada comunidad hacia la idea de inte- de los prograiiias de salud, toda vez que experiencias
grarse a un programa de planificacióii familiar coniu- recientes al respecto han demostrado que dicho supues-
nitariamente organizado, así como sus opiniones sobre to es, por lo menos, cuestionable. Este proyecto de in-
los costos y las ventajas de participar, y de quiénes, vestigación busca alcanzar una mejor comprensión de la
llegado el caso, deberían involucrarse en tales activida- disposición de las comunidades para participar, así como
des. Del mismo modo, se requiere conocer las actitudes de las opiniones y actitudes del personal de las insti-
en este sentido de las trabajadoras comunitarias (encar- tuciones de salud encargado de estos programas.

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PARTICIPACIÓN COMUNITARIA EN SALUD Y PLANIFICACIÓNFAMILIAR

MATERIAL Y MÉTODOS Estas se midieron entre los diversos grupos de entre-


vistados. La intención era conocer si existe alguna dife-
rencia en las actitudes entre ellos y, en su caso, el tipo de
divergencias identificadas. Por otra parte, s e les pregun-
Esta investigación* fue realizada simultáneamente en tó cuál era su posición hacia la participación comunitaria
cuatro países envías de desarrollo (México, Tailandia, Sri en plaiiificacióii familiar; para ello se aplicaron cues-
Lanka y Zimbabwe) con lo que se buscaba generar in- tionarios tanto a las mujeres de la comunidad, como a los
formación que, además de ser relevante para cada país, individuos ya involucrados en tareas con~unitarias(que
hiciera posible una comparación entre diferentes con- en esta investigación son identificados conlo trabaja-
textos socioculturales, en relación con la participación doras comunitarias). A ambos grupos s e les cuestionó
comunitaria ensalud y planificación familiar. Los priiici- sobre sus preferencias del trabajo en grupos, así como a
pales resultados comparativos entre estos cuatro países tráves de comités y del papel que esperan que de-
fueron ya publicados en otro lugar.14 En este estudio se senipeiíeii tanto los Iíderes como las trabajadoras comu-
señalan únicamente algunos de los resultados obtenidos nitarias en la estrategia de participación comunitaria.
para el de México. A los supervisores y a los directivos de salud s e les
preguntó su opinión sobre la "gestión participativa de la
planificación familiar". S e partió del supuesto de que un
estilo directivo de esta naturaleza es un prerrequisito
S e diseñaron y aplicaron cuestionarios específicos para para implantar un programa geiiuiiiamente participa-
los siguientes grupos: a) mujeres de la comunidad; b) tivo por parte de la comunidad.
trabajadoras comunitarias (es decir, aquéllas involucra- Por otro lado, se consideraron cinco grandes varia-
das en actividades de participación comunitaria en sa- bles como factores estrechamente asociados hacia las
lud); c) líderes comunitarios; d) supervisores médicos, actitudes de participación: a) tradiciones de participa-
responsables de supervisar a los trabajadores coinunita- ción comuiiitaria existentes en las comunidades; b) va-
rios; e) directivos médicos encargados de controlar a lores y creencias subyacentes a aquellas tradiciones; c)
estos supervisores. antecedentes de programas de participación comunita-
En otras investigaciones hemos abordado el tema de ria iiistitucioiializados en las coniuiiidades; d) políticas y
la salud, la reproducción humana y la planificación fami- programas oficiales en torno a la participación comuni-
liar desde una perspectiva sociológica que busca explo- taria; e) programa de planificacióii familiar. Estas varia-
rar el sentido subjetivo que los diversos actores enlazan bles se midieron a través de preguntas abiertas a Iíderes
a este tipo de f e n ó m e n ~ s ' ~ J ~este
E n estudio se coiiside- comuiiitarios, supervisores y directivos desalud, así como
ró que un abordaje de ese tipo hubiera resultado inapli- mediante la utilización de documentos oficiales. Si bien
cable dados los requerimientos de la iiivestigacióii en su la iiaturaleza cualitativa de éstas no permite explorar es-
conjunto. S e utilizó, entonces, una combinación de pre- tadísticaiiiente su asociación con las variables depen-
guntas abiertas, preguntas cerradas precodificadas y es- dientes, el análisis de la iiiforniacióii de aquéllas s e hizo
calas d e clasificación. siempre con refereiicia a éstas últimas.
Finalmente, cii el caso de las mujeres de la comunidad
y de las lrabajadoras comunitarias, se evaluaron algunas
variables de orden socioecoiiónuco (educación, ocupación)
Las tres variables dependientes de este estudio son: a) y demográfico (edad, paridad, estado civil, conocimien-
actitudes hacia la participacióii en general; b) actitudes tos y actitudes sobre aiiticoncepción) con el propósito de
hacia la participación comu~iitariaen planificación fami- caracterizar mejor a estas poblaciones.
liar; y c) actitudes hacia la gestión participativa del pro-
grama de planificación familiar.

El muestrco incluyó criterios para selcccioiiar a 10 co-


munidades del país, alrededor de 500 mujeres en edad
* Financiada por la Overseas Developiiieni Agency de Inglaicrra reprodiictiva (usuarias y no usuarias de niétodos de pla-

380
nificación familiar); a todos los trabajadores coniuiiita- Mujeres de la cotnltnidad
rios, líderes de la comunidad, supervisores médicos y
directivos de salud directamente relacionados con el Desde el inicio se deterniinó que, para efectos de com-
programa de planificación familiar, que a través de la es- paración entre los cuatro países que participaron en esta
trategia de participación comuniíaria se lleva a cabo en investigación, la muestra sería de 50 individuos por
las comunidades seleccionadas. Los criterios utilizados comunidad. S e decidió que este universo estaría consti-
para su selección fueron: tuido sólo por mujeres en edad reproductiva, debido a la
dificultad que representa localizar a los hombres duran-
Comunidades te el día* y los riesgos que iniplicaba esperarlos hasta la
noche. Lo ideal hubiera sido entrevistar también a hom-
Se seleccionaron en forma aleatoria cinco estados según bres, aunque nuestra decisión no carece d e fundamen-
su grado de marginación:17 Hidalgo (muy alto), San Luis tación teórica ya que diversos estudios demuestran que el
Potosí y Michoacán(alto), Durango (medio) y Chihuahua tériiiino"comunitario" es un eufemismo que disimula una
(medio bajo). La finalidad era identificar dos coiiiunida- realidad evidente: las estrategias de participación comu-
des por estado, una atendida por el prograiiia m s s - nitaria, incluyendo las de este país, básicamente se apoyan
COPLAMAR y la otra por la SSA. Las comunidades elegidas en el trabajo de las i i i u j e r e ~ . * * ' ~Para
- ~ ~la identificación
debían reunir dos características: a) contar con un pro- y elección de las entrevistadas se utilizó el conjunto de
grama de participación comunitaria en el que cooperan registros de población con que normalmente trabajan las
uno o vanos trabajadores comunitarios y carecer de encargadas de comunidad y las promotoras de salud.
cualquier tipo de servicios de salud convencionales @.e. Cuando el número de mujeres registradas excedía de
hospital, clínica, etc.); b) no encontrarse próximas (es 50, se hacía una selección aleatoria de las mismas. En
decir, a menos de una hora) a algún centro urbano, dado una ocasión hubo la necesidad de realizar un censo
que su influencia podría estar afectando negativamente gencral de población, para luego elegir a los informan-
el desarrollo de la estrategia comunitaria. Se trabajó con tes requeridos.
la información con que dispone el IMSS-COPLAMAR. Con
estos criterios s e escogó aleatoriaiiiente una coiiiunidad Trobojodoras y líderes cornrtn~tarros
de cada entidad atendida por esta institución. Una vez
identificadas estas cinco comunidades, se seleccionarcn Se entrevistó al total de trabajadoras y líderes coiiiunita-
las cinco restantes atendidas por la SSA. Los criterios fue- rios presentes en las localidades seleccionadas. Dentro
ron los nusnios, únicamente se aiiadió que las coniuiiida- de las primeras, se incluyó a las encargadas de coinuni-
des debían encontrarse relativamente cercanas a alguna dad, auxiliares de salud, parteras empíricas, proniotoras
comunidad del IMSS-COMPU\MAR, de tal manera que fuera de salud e tntegrantes del comité de salud.
posible hablar de pares de comunidades de una nusiiia
región. Las que finalmente se eligieron fueron: d ) Supervisores médicos y d~rectivosde salud

Institución Todas las comunidades que cuentan con un programa de


Estado: Comunidades: responsable: participación comunitaria son controladas por una uni-

Chihua hua Vicente Guerrero IMSS-COMPLAMAR


La Paz SSA
Durango Pinos Altos IMSS-COMPIM
* En un caso se encontró que la coiiiunidad carecía casi por completo
Bruno Martínez SSA
de individuos del sexo iiiasculino, pucs la mayoría de ellos se
Hidalgo Totoapita IMSS -COMPLAMAR encontraban trabajando durante esa estación del año en Estados
Alnioloya SSA Unidos
Michoacán El Llanito '* Bochetii A A chi l o c a pulire il mondo? 11 Mdniiesto 1986 mayo 23.
IMSS-COMPLAMAR
En Cardaci D Pen\ando conio mujeres (propuestas educativas en
San Isidro SSA
salud d e los coleciivos y redes de mujeres). Programa Interdiscipli-
San Luis Potosí Ojo de Agua IMSS-COMPIM nario de Esiudios de Id Mujer, El Colegio de México, 1989 Mimeo-
Tepozán SSA grafiado

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dad médica rural, un centro de salud "B" o "C",o por un El cuadro 111 muestra que más del 80 por ciento de las
hospital regional. Cada uno de estos centros de salud es, mujeres de la comunidad y de las trabajadoras comunita-
a su vez, controlado por un centro estatal. Se consideró rias aprueban la planificación familiar. Hay que destacar
como supervisores médicos al personal médico de los que de acuerdo con las respuestas dadas por ellas, sólo
primeros, excepto al director del hospital y en general a un 50 por ciento de las parejas de las entrevistadas
los que supervisan directamente a las encargadas y a los acepta la planificación familiar. El resto no lo aprueba o
trabajadores comunitarios. Se consideró, en cambio, como su opinión la desconoce su pareja. En futuras investi-
directivos de salud, a los funcionarios del nivel estatal y gaciones deberá buscarse las razones de estas diferen-
de unidades hospitalarias, responsables de controlar a cias, así como sus implicaciones tanto en la participación
los supervisores médicos. comunitaria femenina en la planificación familiar como
La mayor parte de estos últimos y de los directivos de en la manera en que las familias manejan este fenóme-
salud encontrados fueron entrevistados para confirmar no en la vida cotidiana.
de qué manera estaban vinculados con la supervisión del
programa de participación comunitaria, del de planifica- A c n m ~ HACIA
s LA PARTICIPACIÓN
ción familiar, o de ambos, en las comunidades. El cuadro
1 muestra la distribución final de la muestra por estado, Uno de los resultados centrales de la investigación es
institución responsable y tipo de entrevistado. Se en- que existe un entusiasnlo mucho más evidente por la
cuestó a un total de 462 mujeres de la coniunidad, 44 tra- participación comunitaria entre los supervisores médi-
bajadoras comunitarias, 17 líderes de la comunidad, 35 cos y directivos de salud, que entre las mujeres de la
supervisores médicos y 17 directivos de salud. comunidad. El cuadro IV presenta los coeficientes que
se obtuvieron para algunos de los reactivos utilizados
en las escalas de medición de actitudes hacia la partici-
RESULTADOS pación comunitaria. Los porcentajes indican el número
de entrevistados que estuvieron "de acuerdo" con cada
una de las afimlaciones. La media debe interpretarse
como sigue: mientras más cerca de cinco, más fuerte la
El cuadro 11 representa la distribución de la muestra de opinión a favor de la participación y mientras más cerca
las mujeres y de las trabajadoras comunitarias, de acuer- de uno, más fuerte la tendencia a estar en contra de ella.
do a las variables socioeconómicas y demográficas. La En la última columna se señalan los grupos para los que
edad promedio de las mujeres de la comunidad fue de se encontró diferencias estadísticamente significativas
31.06 años, mientras que para las trabajadoras comunita- (p<.05).
rias fue de 34.29, con una moda de 25 para ambas. La La situación anterior coexiste con el hecho de que
paridad promedio fue de 3.84 hijos nacidos vivos para en las con~unidadesdonde se realizó el estudio poseen
las mujeres de la comunidad (moda= 2), y para las tra- arraigadas tradiciones de participación comunitaria, re-
bajadoras comunitarias de 3.79 (moda= O). En ambos lacionadas sobre todo con festividades religiosas y ce-
grupos del 25 por ciento de las entrevistadas tienen lebraciones civiles de diverso tipo. La hipótesis que
seis o más hijos, lo cual es un reflejo del alto índice de subyace a niuchos de los programas de participación
natalidad que aún existe entre amplios grupos de la comunitaria, es en el sentido de que la cultura partici-
población. pativa de las comunidades puede ser aprovechada para
En términos de ocupación el 91 por ciento de las en- instruinentardichos programas, situaciónque resulta par-
cuestadas de ambos grupos son "amas de casa" y el 9 por cialniente cuestionada con estos resultados.
ciento restante se distribuye en otras tareas. Con res- Las mujeres de las comunidades atendidas por elmss-
pecto a la ocupación de la pareja, en ambos grupos el 51 COPLAMAR tienen una actitud más favorable hacia la
por ciento de los esposos son canlpesinos. Por otra parte participación a través de los líderes que las de las aten-
puede apreciarse que el 80 por ciento de los casos no didas por la SSA (cuadro V, p <.05). Sin embargo, las
cuenta con más de seis años de escolaridad. Finalmente, trabajadoras comunitarias de la SSA tienen actitudes más
más de las tres cuartas partes de ambos grupos se encon- favorables si se las compara con las del IMSS-COPLAMAR
traban casadas o unidas al momento de la encuesta. (cuadro VI, p ~ 0 . 5 ) Se
. plantea como hipótesis prelimi-

SALUD PÚBLICADE MÉXICO


CUADRO i
Distribucirin de la muestra par esfado,.ínstítuú6n resp~mbley tipode informantes

Miembros Trabajadores Líderes


Estado Institución de la comunidaG comunitarios comunitarios Supervisores Directivos Total

Michoacán
El Llanito IMSS-COPLAMAR 42 63
San Isidro SSA 45 52
Total 87 115

San Luis Potosí


Ojo de Agua IMSS-COPLAMAR 49 62
Tepozán SSA 43 50
Total 92 112

Hidalgo
Totoapi ta IMSS-COPLAMAR 42 50
Alrnoloya SSA 51 60
Total 93 110

Durango
Pinos altos IMSS-COPLAMAR 47 57
Bruno Martínez SSA 49 62
Total 96 119

Chihuahua
Vicente Guerrero IMSS-COPLAMAR 48 64
La Paz SSA 46 55
Total 94 119

Total IMSS-COPLAMAR 228 296


SSA 234 279
Total 462 575

nar para explicar estas diferencias, que las políticas espe- cepciones en cuanto a quién o quiénes son los actuales
cíficas de cada institución influyen significativaii~eiiteen encargados de llevar a cabo las actividades del programa
estas actitudes. de plaiiificación faiiuliar en la comunidad, así como sus
opiniones sobre quiénes deberían ser tales responsables.
IDENTIFICACION
DE RESPONSABLES DEL PROGRAMA Cabe recordar que se presulne que en estas comunidades
DE PLANIFICACI~N FAMILIAR POR LOS DIVERSOS GRUPOS el progranid existente se iiiiplenienta a través de la estra-
ENTREVISTADOS tcgia de participación coiiiunitaria. En el cuadro VI1 s e
observa cuál-s son las actividades para las que existe un
Se aplicó una batería especial de preguntas a los cinco consenso (esto es, más del 50 por ciento d e los entrevis-
grupos d e informantes con el fin de registrar sus per- tados por grupo) seiialando a un actor específico que es

JULIO-AGOSTODE 1993,VOL. 35,No. 4 383


PARTICIPACIÓNCOMUNITARIA EN SALUD Y PLAMFICACIÓNFAMILIAR

CUADRO III
Conoeknient~sy actiturieS hada la planificacibnfamiliar
de las mujetes de la comunidad y d e trabajadoras
comunitarias

Mujeres de la Trabajadoras
Variable Categorías comunidad comunitarias Mujeres de la Trabajadoras
N= 462 N= 44 Variable Categorías comunidad comunitarias
% % N= 44
%
Edad c 19 años 8.9 6.8
20-24 17 2 18 2 Conocimientos Pastillas 97.7
25-29 20.6 18 2 d e métodos an- DIU 97.7
30-34 17.7 13 6 ticonceptivos Inyectables 93.2
35-39 14 4 9.1 Diafragma 75.0
40-44 13.2 15 9 Condón 77.3
45 y más 7.6 18 3 Est femenina 97.7
Vasectomía 68.2
Paridad O 113 29.5 Abstinencia 52.3
1-2 25.8 13.6 lietiro 38.6
3 -5 36 6 31 8
6 y más 26 3 24 8 Uso actual de Ninguno 72 7
NR O6 métodos anti- Pastillas 23
conceptivos DIU 6.8
Sexo Femenino 100.0 95.5 Inyecciones
Masculino 4 .S Diafragma
Condón 4 .5
Ocupación Ama de casa 90 7 90 9 Est femenina 9.1
Otra 9.3 9.1 Vasectomía
Abstinencia 23
Ocupación Campesino 48 3 54 5 Retiro 23
d e la pareja Obrero 16 2 23
Peón 87 4.5 Aprobac~óndc Si 86 4
Otra 85 115 la planificación No 11 4
NSMR 18 3 27 2 familiar No sabe 23

Escolaridad Ninguna 7.6 68 La pareja aprue- Sí 50 o


Hasta 6 años 81 6 79 5 ba la planifica- No 15 9
Más d e 6 años 10.8 13 7 ción familiar No sabe 114

Estado civil Casadalunida 85.7 77.3 Deseo de No 40.9


Divorciadal d e más hijos 1 15.9
Separada 13 23 2 20 5
Viuda 2.6 23 3
Soltera 10 4 20 5 4 o más 23
No sabe 20 5

SALUD PÚBLICADE MÉXICO


CUADRO l V
Pacenrajes de*actlerdo*, medias y degviadoneses~ndacde aigwos mctivos en tomo a la participaci6n comuní.fafia
en pne;ral y fa partici~acirjncomunitaria en pianificacíbn famtiiar, por grupos & eritrevtstados

Grupo 1 Grupo 2 Grupo 3 Grupo 4 F


Reactivos Mujeres de la Trabajadoras Supervisores Directivos (Grupos significa-
comunidad comunitarias médicos médicos tivamente diferentes)*

1. El gobierno debería ser el Único 42 9 38 6 25 8 59


responsable d e planear e instru- 2.913 3 A048 3 6571 4.5294
mentar los programas de desa- 16267 15311 1 1868 0.7998
rrollo. 2-4

2. Los miembros d e la comunidad 84.2 86 3 94.3 100 0


deben participar activamente en 1S262 16744 1.5429 1.O588
la planeación d e programas de O 8159 O 8373 O 7005 O 2425
desarrollo. 3-4

3. Ningún programa de desarrollo 53 0 45.4 34 3 29.4


d e la comunidad puede tener 2.5336 2 8140 3.1143 3 3529
éxito sin la ayuda d e expertos d e 15041 1 4517 1.3009 1 1695
fuera.

4. En lugar d e involucrarse en los 39.0 364. 11 4 5.9


programas comunitarios, los 3.0043 3.3256 3 9429 4 0588
miembros de la comunidad de- 1S436 14593 0 9056 1029
berían atender sus propias ne-
cesidades familiares.

5. La participación comunitaria en 16.5 20 5 57 59


planificación familiar es una pér- 3.7549 3 6512 4 2571 4 1765
dida d e tiempo porque la plani- 1 3982 1 3781 1o100 1 0744
ficación familiar es un asunto to-
talmente personal.

6 El trabajo comunitario siempre 12 7 9O 29 oo


será un obstáculo para el pro- 3.9303 4.0698 4 3429 4 7647
grama de planificación familiar. 1.3165 1211 O S382 O 4372

7. Todos los asuntos d e la comuni- 69 9 63 6 17 1 29.4


dad deberían ser organizados por 19674 2 0698 2 7143 3.4706
los líderes de la comunidad 1.2442 1 1629 1 1775 1.2805
2 -3
2 -4
3 -4

JULIO-AGOSTO DE 1993, VOL 35, NO 4 385


CUADRO V
Actitudes de las mujeres de fa comunidad hacia la participación a través de; los li'dexeis
de la comunidads según institacidn rwpanwble

Institución responsable Contra la participación Neutral A favor de la participación Total


N" % N" % N" % N" %

I IMSS-COMPLAMAR

CUkDRO VI
Actitudes de las trabajadotas comunitarias hacia la participación comunitaria, según instituci6n mponsabk

Institución responsable Contra la participación Neugral A favor de la participación Total


N" % N" % N" % N" %

IMSS-COMPLAMAR 0 00 8 27 6 21 72 4 29 67.4

SSA 0 00 0 00 14 1000 14 32.6

Total O OO 8 18 6 35 81.4 43 100.0

reconocido como el responsable de las mismas. Los nú- son ellas las que se identifican a sí mismas como las que
meros de la parte superior del cuadro correspoiiden a las designan a tales trabajadoras, sino que son precisamente
diferentes actividades que aparecen enlistadas al pie de las trabajadoras comunitarias (63.6%) y los supervisores
la página. l o s nombres de los actores ideiit~ficadospor los médicos (62.9%) quienes atribuyen esta responsabili-
entrevistados como los responsables de cada actividad dad a la comunidad.
aparecen con mayúsculas, mientras que los nombres de Es importante destacar que para ninguna actividad las
los diferentes grupos de encuestados aparecen con mi- mujeres de la coniunidad se identifican como las res-
núsculas. De acuerdo con este cuadro, las iiiujeres ponsables. Por el contrario, el único consenso registrado
(miembros) de la comunidad aparecen seiialadas como dentro de este grupo es el que tiende a reconocer a los
las encargadas de sólo una actividad: seleccionar a las supervisores como los encargados de las actividades 4
trabajadoras con~unitarias(actividad NQ 7). Llama la (monitorear y supervisar a las trabajadoras comunitarias)
atención que esta observación no es hecha por las pro- y 12 (proveer de métodos de planificación familiar a las
pias mujeres de la comunidad, lo cual manifiesta que no nuevas usuarias. En el caso de la actividad 4, son varios
CUADRO Vi1
Adores sirtdmente respoasables de las diversas actividades de planificaciánfanGliar ssgún wmenso de bs entmvistados

4ctividades 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19

MIEMBROS DE LA COMUNIDAD
Miembros de la wmunidad
Trabajadores wmunitarios
Supervisores médicos
Directivos de salud
Líderes comunitarios

TRABAJADORES COMUNITARIOS
Miembros de la comunidad
Trabajadores wmunitarios
Supervisores médicos
Directivos de salud
Líderes comunitarios

L~DERESC O M ~ A R I O S
Miembros de la wmunidad
Trabajadores wmunitarios
Supervisores médicos
Directivos de salud
Líderes comunitarios

SWERVISORES M m I C O S DE CAMPO
Miembros de la comunidad 52 8 74 5
Trabajadores comunitarios 61 4 86 4 77 3 84 1
Supervisores médicos 85 7 85 7 886 857 77 1 S5 7 71 4 68 6 62 Y
Directivos de salud 76 5 88 2 64 7 58 8 82 4 64 7 82 4 64 6 Y4 1 76 5 64 7
Líderes comunitarios

SUPERVISORES M ~ I C O S
JURISDICCIONALES
Supervisores médicos SO O 54 3
Directivos de salud 529 706 706 647 5 s 8 64 7 82 4 76 5 64 7

DIRECTlVOS DE SALUD
Supervisores médicos
Directivos de salud

GOBIERNO
Miembros de la wmunidad
Trabajadores comunitarios
Líderes comunitarios

1) Promover la planificanón familiar en la comunidad 13) Identificar y localirdr d otras iiiujeres que deseen ingresar al programa de
2) Educar a los usuanos (potennales) de métodos de planificación faniiliar pl.inilicación Faiiiiliar
3) Esiablecer las metas del programa de planificanón familiar 14) Llevar las tiiianzas del progrmia de planiticación familiar
4) Controlar y supervisar a la encargada de comunidad (auxiliar de salud o partera 15) Sugerir nuevas acliridddes para el programa de planificanón familiar
rural). 16) Canalizar a la clinicd a las mujeres (si tienen algún problema o si quieren
5) Entrenar a la encargada de wmunidad (auxiliar de salud o partera rural) esteriliznrión)
6) Pagarle a la encargada de comunidad (auxiliar de salud o partera rural) 17) Tr.insport.ir a las personas a la oliona
7) Seiecnonar a la encargada de comunidad (auoliar de salud o partera rural) 18) Hacer risitas de seguiniiento a lab señoras que están en el programa de
8 ) Llevar los registros o archivos del programa de planificación familiar planificación
9) Guardar y almacenar los métodos de planificanón familiar 19) Planear nuevas xtividades comunitarias para el programa de planificanbn
10) Reaprovisionar de métodos de planificación familiar a la comunidad familiar
11) Distribuir los métodos de planificación familiar entre los usuarios
12) Propornonar un método de planificanón familiar por pnmera vez a una señora
que quiera ponerlo en práctica

JULIO-AGOSTO DE 1993, VOL. 35,No. 4


PARTICIPACIÓN COMUNITARIA EN SALUD Y PLANIFICACIÓNFAMILIAR

los grupos que coinciden en identificara los supervisores, pide de la escala social. Los actores de la base (mujeres
además de las mujeres de la coniunidad: ellos son las de la coniunidad) aparecen coiiio responsables de una
trabajadoras comunitarias, los propios supervisores y los sola actividad. En el siguiente nivel las trabajadoras
directivos de salud. coinunitarias están como responsables de ocho. Sin em-
Pero no sólo las mujeres de la coniunidad tienden a se- bargo, los actores que aparecen a la mitad del cuadro
ñalar a los supervisores niédicos conio los responsables (supervisores niédicos) son los responsables de la ma-
d e ciertas actividades. De hecho, el grupo de los super- yoría de las actividades. De ahí éstas comienzan a descen-
visores es el más frecuentemente identificado por los der de nuevo, hasta llegar a cero en el extremo superior
diversos entrevistados como el encargado de la niayoría d e la escala social (el gobierno). En teoría, un programa
de las actividades relacionadas con la planificación fami- totalmente participativo d e plaiiificacióii familiar debería
liar. Lo que resulta aún más interesante es que tal fre- reflejarse en una mayor cantidad de números en la parte
cuencia de señalaniientos sobre los supervisores se debe superior del cuadro (en la base de la escala social) y
en buena medida a las respuestas de ellos niisiiios y de los viceversa. La diferencia entre este ideal y el cuadro es,
directivos d e salud, lo cual obligadamente traduce un quizá, la distancia que existe entre el discurso oficial
cuestionamiento sobre el grado de convicción que estos sobre participación comunitaria y la realidad.
actores poseen en relación con la genuina participación El cuadro VI11 presenta información similar a la ante-
comunitaria. En el cuadro también s e observa que los rior enfocada a quién debe ser el responsable d e cada
Iíderes de la comunidad no poseen iiiiigún papel iiii- una de las actividades del programa de planificación
portante en relación a la participación comunitaria en la familiar según la opinión de los intrevistados. Es impor-
planificación familiar: su marginación se manifiesta por tante destacar, en primer lugar, que las mujeres (miem-
el doble hecho de que no son serialados por nadie conio bros) de la comunidad son reconocidas por todos los
responsables de alguna actividad y tampoco logran se- grupos, incluyendo los líderes, como las responsables de
ñalar con consenso a algún actor como encargado de seleccionar a las trabajadoras comunitarias (actividad
alguna tarea. No.7). En todos los casos, esta identificación se da con
Las trabajadoras coniuiiitarias, por el contrario, de- porcentajes superiores al 7 0 por ciento, lo cual muestra
sempeñan un papel activo en relación a ciertas tareas. un alto grado de consenso en relación a este punto.
Ellas, junto con los supervisores y directivos, se seiialan Los directivos también atribuye otras responsabilida-
como las responsables de las actividades 13 y 16 (identi- des a las niujeres de la comunidad, tales conio la pro-
ficación de nuevos usuarios y canalización a la clínica). moción de la planificacióri familiar dentro de ésta(l),
Los supervisores y directivos, por su parte, también las sugerencia de nuevas actividades comunitarias para re-
indican como encargadas de otras actividades que ellas forzar el progr~iiiia(15) y la transportación (17) de los
mismas no reconocen como suyas: promoción dc la pla- usuarios a la clínica de salud."
nificación en la coniunidad (l),educaciónde las usuarias Las trabajadoras coiiiiitiitarias, por su parte, se iden-
(2), almacenamiento y adniinistración de los métodos an- tifican como las responsables de seis actividades: pro-
ticonceptivo~(9 y lo), visitas de seguimiento (18), y pla- nioción de la plaii~ficacióiifamiliar en la comunidad,
neación de nuevas actividades comunitarias (19). educación de los usuarios potenciales, elaboración de
Finalmente, los supervisores y directivos reconocen los registros de los usuarios, aliiiaceiiaiiiieiito de los anti-
que ellos son los responsables actuales de dos activida- conceptivo~,canalizacibn a las clínicas y visitas de se-
des: la determinación de las metas y objetivos del pro-
grama de planificación familiar, y el manejo financiero
del mismo. Es interesante advertir que ningún grupo,
excepto los que pertenecen al gobierno (supervisores
y directivos) seííalaron a éste coiiio respoiisable de al- * Esta aciividad puede ser interpretada de,dos maneras a) como una
guna tarea. actividad quees responsabilidad decada iiidividuo en lo particular. o b)
coi110 una tarea de Id que debcríd hacerse cargo la comunidad en su
Una visión general del cuadro VI1 periiiite apreciar conjunto En aiiibos casos Id atribuc~ónde la responsabilidad a "los
un fenómeno interesante: nótese que los actores son iiiiciiibros de la coniunidad" e s lógica. pero los sentidos de tal
iiiencionados en orden ascendente, de la base a la cús- atribución son ev~drntcnirniedistintos
CUADRO VXXí
Ad~residealmextte mspousables& 3as divemas acfi~ídadesde pianifiraciáttfamiliar, según consetiso do los entritvisfadas

Actividades

MIEMBROS DE LA COMUNIDAD
Miembros de la comunidad
Trabajadores comunitarios
Supervisores médicos
Directivos de salud
Lideres comunitarios

TRABAJADORES COMUNITARIOS
Miembros de la comunidad
Trabajadores comunitarios
Supervisores médicos
Directivos de salud
Líderes comunitarios

L~DERESCOMUNITARIOS
Miembros de la comunidad
Trabajadores comunitarios
Supervisores médicos
Directivos de salud
Líderes comunitarios

SüPERVlSORES MÉDICOS DE CAMPO


Miembros de la comunidad
Trabajadores comunitarios
Supervisores médicos
Directivos de salud
Líderes comunitarios

SUPERVISORES MÉDICOS JURISDICCIONALES


Supervisores médicos 62 9
Directivos de salud 52 9 64 7 76 5 64 7 58 8 58 8 S2 4 8 2 4 64 7

DIRECTíVOS DE SALUD
Supervisores médicos
Directivos de salud

GOBIERNO
Miembros de la comunidad
Trabajadores comunitarias
Líderes comunitarios

1) Promover la planificación familiar en la comunidad 13) Identificar y localizdr a otras mujeres que deseen ingresar al programa de
2) Educar a los usuanm (potenciales) de métodos de planificación familiar planiticación Taiiiilidr
3) Establecer las metas del programa de planificación familiar 14) Llevar las Finanzas del progrmia de pldnificación taniiliar
4) Controlar y supervisar a la encargada de comunidad (auxiliar de salud o partera 15) Sugerir nuevas aciiwdades pdra el progaind de planificación familiar
rural) 16) Can;ilizar a la clinic.~a las mujeres (si tienen algún problema o si quieren
5) Entrenar a la encargada de comunidad (auxiliar de salud o partera rural) esierili~ación)
6) Pagarle a la encargada de comunidad (auxiliar de salud o partera rural) 17) Trnnsporiar a 14s personas a la otiana
7) Seleccionar a la encargada de comunidad (auxiliar de salud opartera rural) 18) llacer Lisitas de seguimiento a las señoras que están en el programa de
8) Llevar los registros o archivos del programa de planificación familiar planificación
9) Guardar y almacenar los métodos de planificanón familiar 19) Planear nuevas activtdades comunitariss pxa el programa de planificación
10) Reaprovisionar de métodos de planificación familiar a la comunidad fdiniliar
11) Distribuir los métodos de planificanón familiar entre los usuarios
12) Propornonar un método de planificación familiar por pnmera vez a una señora
que quiera ponerlo en práctica

JULIO-AGOSTO DE 1993, VOL 35, No. 4


PARTICIPACIÓN COMUNITARIA EN SALUD Y PLANIFICACIÓN FAMILIAR

guimiento. Sin embargo, ni las mujeres de la comunidad Como se manifestó antes, un programa de participa-
ni los líderes comunitarios reconocen a las trabajadoras ción comunitaria en planificación familiar, cuyo espíritu
comunitarias como las encargadas ideales de alguna ac- hubiera ya permeado las conciencias de todos los invo-
tividad. La hipótesis puede ser que se trata de un cuestio- lucrados, debería reflejarse en la atribución, por parte de
namiento de las comunidades a la estrategia participativa, los diferentes grupos, de más obligaciones a los actores
al menos respecto al programa de planificación familiar. ubicados en la base de la escala social, incluso sin que
Es necesario recalcar que mientras los directivos atri- ello significara descargar a los supervisores médicos de
buían 11actividades a las trabajadoras comunitarias, los los compromisos que se les atribuyen, sino sólo como una
supervisores sólo les asignaban cuatro. Por otra parte, muestra del ánimo de compartir y asumir estas tareas.
también los directivos involucraban a los líderes de la Al comparar los cuadros VI1 y VIII, debemos señalar
comunidad en algunas actividades, tales como la pronlo- que mientras sólo dos grupos (trabajadoras comunitarias
ción de la planificación familiar, la sugerencia de nuevas y supervisores) identifican a los miembros de la comu-
actividades y la transportación a la clínica. nidad como los responsables reales de seleccionar a las
Los supervisores médicos aparecen de nuevo como trabajadoras comunitarias, los cinco grupos coinciden en
el grupo más señalado como el responsable ideal de va- que preferirían que la comunidad misma se hiciera cargo
rias actividades. Hay dos para las cuales existe una apro- de esta actividad. Las trabajadoras comunitarias apare-
bación general entre los cinco grupos: educación de las cen como las encargadas reales de ocho actividades (de
usuarias potenciales (2) y entrenamiento y capacitación acuerdo a lo expresado por los diferentes grupos), al
de las trabajadoras comunitarias (5). En otras cuatro ac- mismo tiempo que son señaladas como las responsables
tividades (4,10,12 y 19) el consenso se registra en cuatro ideales de 12. Debe ponerse especial atención en el
de cinco grupos. Otras cuatro son idealmente asignadas hecho de que mientras las trabajadoras comunitarias, los
a los supervisores médicos por tres grupos de entrevis- supervisores y los directivos se refieren a las primeras
tados: las trabajadoras comunitarias, los supervisores como las que identifican a las posibles nuevas usuarias
mismos y los directivos depositarían en ellos la respon- de métodos anticonceptivos, ninguno de los grupos las
sabilidad de almacenar los anticonceptivos (9) y de re- sugirió como las personas ideales para dicha tarea. Este
surtirlos (10); mientras que las mujeres, los supervisores resultado necesita de un análisis cuidadoso para explicar
y los directivos los encontrarían como los encargados de la contradicción existente entre lo que las trabajadoras
sugerir nuevas actividades comunitarias al programa (15) comunitarias hacen en relación a esta actividad y lo que
y de realizar las visitas de seguimiento (18). todos los grupos desean que hicieran (o dejaran de hacer).
Como puede apreciarse, los supervisores forman el Por otra parte, todos los grupos desean que los super-
grupo más mencionado por los demás como los respon- visores médicos estén más involucrados en las activida-
sables ideales de la mayoría de las actividades del pro- des de planificación familiar. Al mismo tiempo se aprecia
granla de planificación familiar. Ello puede ser el reflejo una demanda implícita por contar con una rnayorpartici-
de la naturaleza médica de los programas de salud y bie- pación de las trabajadoras comunitarias y de las mujeres
nestar social, lo cual, a su vez, iniplica que incluso pro- de la comunidad.
gramas que se supone que deben ser realizados a través El cuadro IX muestra la distribución de las mujeres de
de la participación comunitaria, no puedan evitar la la comunidad de acuerdo a su deseo expreso de interve-
presencia del personal médico. Hay que destacar que, nir o no, más activamente, en las cuestiones comunitarias
después de los supervisores médicos, el personal que relacionadas con la planificación familiar, así como el
trabaja en el nivel regional y jurisdiccional es el que tie- tipo de actividades que estarían dispuestas a desarrollar.
ne el más alto número de responsabilidades atribuidas Un poco más del 50 por ciento de las entrevistadas rna-
por los demás. Finalmente, el gobierno, situado eii la cús- nifestó una disposición positiva para involucrarse más
pide de la escala social, aparece como el encargado de en estas tareas. Sin embargo, el 47 por ciento de la po-
remunerar a las trabajadoras comunitarias, c&iforiiie al blación expuso su incertidumbre o una postura en contra
punto de vista de ellas mismas y de las mujeres de la al respecto. Por otra parte aquéllas que indicaron su de-
comunidad. seo de colaborar, la actividad que más les gustaría desa-

SALUD PÚBLICA DE MÉXICO


participación, o bien al interés de estas poblaciones por
educarse constantemente, toda vez que la educación es
CUADRO I X vista como uiia herramienta para mejorar su nivel de vida.
Msrrib-ucihde las mujeresde i a comunidad,
segiin su desea departicipar m& en activ~dades
c o ~ ~ n i @ i rdatioaadas
as can la plaaifkan'án familiar
El objetivo de esta investigación es presentar resulta-
dos que muestren en forma sistemática el punto de vista
Desea participar más (N=464) %
de los actores involucrados en la estrategia de partici-
Sí* 52 1
No 33 8
pación comunitaria y en el programa de planificación
No sabe 14 1 familiar. Al nivel más general, este estudio confirma la
Total 100 O0 existencia de percepciones diferenciales e n relación a
la participación comunitaria por los diferentes grupos de
*Actividad que le gustaría realizar % informantes: los directivos son los partidarios más fuer-
Ser asistente de la encargada de comunidad 5.6 tes, y las mujeres de la comunidad son las más débiles.
Ser una promotora de salud 71 Posiblemente la principal conclusión es la que se refiere
Participar como educador para la salud 28 6 a la reserva con que las niujeres de la comunidad apoyan
Actividades no especificadas o no esta estrategia. Puede señalarse que los resultados ge-
relacionadas con salud 10 8 nerales de este trabajo constituyen una advertencia
Subtotal 52.1
sobre la necesidad de realizar investigaciones locales
de pequeña escala, para evaluar la posición de la comu-
nidad en relación a la participación, a efecto de no pre-
juzgar sobre la disposición de las comunidades a este
rrollar está relacionada con la educación. Involucrarse respecto. Tomar en cuenta su punto de vista puede ser el
como asistentes de educación para la salud, parece ser la primer paso hacia una mayor eficacia de los programas
actividad más interesante para las niujeres de la comuni- de salud y planificación familiar.
dad. Ello puede deberse a la limitación de alternativas de

JULIO-AGOSTO DE 1993, VOL. 35, No. 4


PARTICIPACI~NCOMUNITARIA EN SALUD Y PLAMFICACIÓN
FAMILIAR

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