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La historia de la Gimnasia Deportiva

La gimnasia deportiva actual se desgajó corno una rama independiente de la gimnasia


hacia la segunda mitad del siglo XIX. Hasta el momento estuvo mezclada con los
ejercicios de educaci6n física y preparación para otros deportes.

Sin embargo, como educación física, hay numerosísimos testimonios de la importancia


que le concedian nuestros antepasados: de todos ellos, por la gran importancia de su
autor, hemos elegido una cita de Sócrates encontrada en sus Memorias: “Música y
gimnasia son dos artes a enseñar a la juventud”. En ella destaca el profundo valor
educativo que asignaba a la gimnasia y la simbiosis que debia tener con la música,
simbiosis de la que han surgido la danza, gimnasia rítmica, gimnasia deportiva femenina
en el suelo y barra de equilibrio y, en general, en toda la gimnasia deportiva, ya que en
esencia se trata de unos ejercicios efectuados en un espacio y en un tiempo determinado.

Desde los ya lejanos tiempos de la Grecia de Olimpia y S6crates, hasta nuestros días,
tanto la gimnasia aplicada como la educación física atravesaron épocas distintas
jalonadas por una perdida progresiva de sus valores desde la espectacularidad romana al
desprestigio que padeció en la Edad Media, empezando un lento y penoso ascenso de su
prestigio hasta llegar al esplendor que goza en nuestros días. El bautismo de esta nueva
vida deportiva se la podemos atribuir a S.S. Rouseau (1712-1778), con su obra “Emilio”.
Cuando apareció este libro (1762) Europa atravesaba par una de sus crisis mas graves;
Educación clásica y sueños prerrománticos, naturalismo iluminista y perturbaciones
económicas son temas que pesan sobre los ánimos, sobre los estados. Robinson no es un
personaje literario: es el simbolo de un destino que apremia, de una humanidad que debe
encontrarse a sí misma. Las concepciones de Rouseau son el crisol de estas disputas: el
mal reside en nuestra educación: en nuestra civilización corrompida; es necesario cambiar
la educación y método de vida. En los hombres maduros quizá no pueda hacerse, pero en
los jóvenes, sí.

Surgen así educadores físicos que polarizan la atención de la juventud. En Alemania surge
Ludwiy Jahn, que crea su escuela de gimnasia orientándola hacia fines militares. A él se
deben los rediseños del potro con arcos, empleado ya por los romanos para fortalecer
muñecas, así como en la Edad Media imitando las evoluciones que debían hacer sobre el
caballo: la barra fija,.cuyo origen serán las ramas de los árboles, en donde desde siempre
han jugado todos los niños. Origen que recoge Rabelais describiendo los ejercicios que
ejecutaba Gargantúa sobre las ramas de los árboles. También se debe a él la creación de las
barras paralelas.

Casi simultáneamente surge en Suecia Ling, que funda la llamada gimnasia sueca,
resaltando la emoción del arte, y no la excitación del combate” coma principio básico que
debe regir las exhibiciones gimnásticas. Adjudicó una gran importancia a los ejercicios sobre
el suelo, cuyo origen remoto hay que buscarlo en la acrobacia practicada en todas las épocas,
diferenciándose de ella en que no busca la máxima dificultad, sino la estética y la perfección.
En Francia, merced al impulso del valenciano Amorós, se funda la escuela de Faisanderie,
en 1852, destinada a convertirse en la Escuela Militar de Joinville. Fue el descubridor de las
anillas, trapecio a vuelo y fijo.

Ya como deportiva, la gimnasia tuvo un magnífico ejecutante y teórico en el suizo


afrancesado Clias, cuyos ensayos gimnásticos constituyeron una forma nueva de
espectáculo y a la vez de fiesta pública para propagar los ideales eurítmicos. Estas
exhibiciones motivaron que en el libro de J. Caduff aparecido en 1862 se hiciera ya
mención al término de gimnasia artística.

Por fin, en 1880, con motivo de la fiesta federal suiza, entre los distintos festejos apareció
programada la primera exhibición de gimnasia deportiva, comprendiendo las siguientes
pruebas: Un ejercicio obligatorio y otro libre en la barra fija, barras paralelas, caballo con
arcos y salto de caballo : la puntuación se hizo sobre 6 puntos y se efectuó tomando la nota
media entre los ejercicios libres y obligatorios. Como dato curioso es de señalar que se tomó
la media del salto y potro con arcos para establecer como única puntuación.

Lo subjetivo de las apreciaciones de los jueces motivaron que se reunieran en Lucerna en


1888 para unificar criterios y establecer la puntuación sobre 10 puntos, sistema que sigue
hasta nuestros días.

Como en tantos deportes, fueron los Juegos Olímpicos los que contribuyeron decisivamente
a la expansión y auge de este deporte, siendo de consignar que ya desde la primera
Olimpíada, su fundador, Pierre de Coubertín, la incluyó en el programa, para lo que pidió
asesoramiento al director del Lycée Montaigne de París, que le aconsejó las pruebas
suguientes : Movimientos de conjunto para más de diez gimnastas y movimientos individuales
de trepa y tracción de cuerda, barra fija, anillas, paralelas, salto de potro, caballo con arcos
y pesas. Los resultados de esta primera Olimpíada de Atenas, de 1896, fueron :

Paralelas por equipos…………………Alemania


Barra fija……………………………… Alemania
Caballo con arcos…………………… Zutter (Suiza)
Anillas………………………………… Mitropoulos (Grecia)
Barra fija individual………………… Weingartner (Alemania)
Paralelas individual………………… Flatow (Alemania)
Escalada de cuerda (8 mts.)……… Andiakapoulos (Grecia)
Salto de caballo……………………… Shuman (Alemania)
Posteriormente fueron desapareciendo los ejercicios colectivos y la escalada de cuerda,
y es en la Olimpíada de Los Angeles, 1932, cuando se incorporaron los ejercicios de suelo,
siendo el primer campeón olímpico el americano G. Reth. En la siguiente Olimpíada, la de
Berlín, aparece por primera vez, y ya con carácter definitivo, la gimnasia femenina.

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