EL OJO

Características

Cada globo ocular se encuentra en un hueco en el cráneo, llamado cuenca del ojo. Una pieza
flexible de piel, llamada párpado cubre y protege la parte frontal del globo ocular y el área blanca
conocida como la esclerótica cubre una gran parte del globo ocular. La ronda, el iris de color en
la parte frontal del globo ocular contiene un área pequeña, negra, y circular conocida como la
pupila. El iris está justo detrás de una ronda, la pieza de tejido transparente denominada córnea
y justo en frente del tejido esférico claro llama lente. Fuera de vista en la parte posterior del globo
ocular está una membrana delgada muy importante llamada retina.

Función

El ojo humano funciona como una cámara durante el proceso de ver para capturar imágenes
de objetos y eventos externos. La luz entra en el ojo a través de la córnea, que se ajusta para
centrar la atención en los elementos de la línea de visión. El iris controla los músculos que
alteran el tamaño de la pupila con el fin de ajustar la cantidad de luz que entra al ojo. Después de
pasar a través de la pupila, la luz llega al lente, que enfoca la luz en la retina como el cine. La
retina contiene miles de células que son sensibles a la luz y ayuda a transformar esta en un
mensaje neural para que el cerebro interprete como una imagen.

Lágrimas

Las lágrimas son una parte esencial del ojo humano, que ayudan a proteger a estos y a
asegurarse de que funcionan de la mejor manera que pueden. Cada ojo contiene una glándula
lagrimal en el borde exterior. Estas glándulas producen lágrimas que ayudan a limpiar y lubricar
la parte exterior de los ojos cada vez que parpadeas. El proceso de baño elimina todo tipo de
suciedad y las sustancias irritantes como el polvo y los gérmenes.

Consideraciones

Los ojos de algunas personas no funcionan perfectamente o correctamente. Cuando los ojos
tienen este tipo de problemas, puede que tengas que obtener lentes de contacto o gafas para
corregir la visión inadecuada. A veces, un procedimiento médico, como la cirugía láser, también
puede corregir los problemas de visión. Los problemas comunes incluyen hipermetropía, lo que
sucede cuando puedes ver claramente los objetos distantes y los cercanos no los ves lo
suficientemente claro, y la miopía, que ocurre cuando puedes ver claramente los objetos
cercanos y no puedes ver los lejanos lo suficientemente claros. El astigmatismo se produce
cuando la córnea no tiene una forma uniforme, lo que hace que los objetos se vean borrosos.
Advertencia

Para mantener los ojos sanos, es importante hacerse controles regulares de la visión, sobre
todo porque muchas enfermedades y problemas de los ojos son tratables si se detectan a
tiempo. Los profesionales del cuidado de los ojos pueden hacerte exámenes para ver si
funcionan correctamente. Las indicaciones de un problema con tus ojos son sensibilidad anormal
a la luz, el enrojecimiento o lagrimeo constante, el frotamiento frecuente, la incapacidad para ver
los objetos lejanos, los problemas de lectura, el entrecerrar los ojos y las pupilas blancas.

El ojo y la luz

1.- La luz pasa a través de la córnea y llega a la pupila que se contrae o expande según su
intensidad. La pupila será más pequeña cuanta más luz haya para evitar deslumbramientos. En
habitaciones o lugares en penumbra aumentará de tamaño para dejar entrar más cantidad de
luz.

2.- El cristalino del ojo será quien proyecte las imágenes enfocadas en la retina. Puede aplanarse
o abombarse según lo cerca o lejos que esté el objeto que veamos. El cristalino se deteriora con
los años y pierde capacidad de acomodación. Esto da lugar a conocidos problemas ópticos como
la presbicia o vista cansada.

3.- La retina recibe la imagen invertida en sus paredes. La luz estimula los conos y los bastones
quienes transforman esa información en impulsos nerviosos. Esta electricidad se trasladará al
cerebro a través del nervio óptico. El cerebro es quien realmente ve las imágenes. Endereza la
imagen invertida de la retina e interpreta la información de color, tamaño, posición, etc.

La imagen formada en la retina es plana, en 2 dimensiones. Vemos imágenes en 3 dimensiones

por la separación de aproximadamente 6 cm. de nuestros ojos
1. Experimento de la increíble cuchara que se encoge

Materiales:

 1 recipiente plástico grande

 1 cuchara
 Agua

Cómo hacer:

Llenar el recipiente plástico con agua hasta llegar al tope (un recipiente con capacidad para más de
un litro está bien). Sencillamente sumergir la cuchara hasta la mitad del recipiente con agua y
observar qué sucede.

Qué sucede:

Lo que sucede es que parece que la cuchara se ha encogido, que se ha vuelto considerablemente
pequeña, ¿no es así? Esto se debe a la refracción de la luz en el agua. Normalmente, los rayos
de luz llegan a nuestros ojos en línea recta pero no es así al pasar por el agua, donde los rayos se
doblan. Por ello la mitad de la cuchara sumergida parece más pequeña que la que está afuera.

2. Experimento de la mano translúcida

Materiales:

 1 trozo de papel (un papel delgado, como por ejemplo el de la impresora)

 Tu mano

Cómo hacer:

Enrollar el trozo de papel (unos 25 cm o más) para hacer un tubo. Como si de un telescopio se tratase,
colocar el tubo de papel en el ojo derecho. Con los ojos cerrados, mantener la mano abierta bien en
frente del ojo izquierdo. Abrir los ojos y sorprenderse mirando hacia adelante.

Qué sucede:

Increíblemente, pareciera que en el medio de la mano se hubiese abierto una ventana circular. Esto se
debe a la fascinante forma en la que funciona el sentido de la vista y cómo se captan los que el ojo
derecho está mirando a través del tubo de papel, mientras que el ojo izquierdo está mirando la mano.
Como sabemos, lo que vemos son imágenes compuestas que se crean en el cerebro a partir de la
información que le llega desde los ojos. En el cerebro, esa información se combina y se nos
representa, por ello, la imagen recreada es la de la mano (que nos llega desde el ojo izquierdo) y el
círculo o agujero en el centro (que nos llega desde el ojo derecho).
3. Experimento del lápiz que se quiebra

Materiales:

 1 vaso de vidrio
 1 lápiz
 Sal
 Agua
 1 cuchara

Cómo hacer:

Con la cuchara, verter unas 7 u 8 cucharadas de sal en el vaso y llenarlo hasta la mitad con agua.
Revolver muy bien, hasta que la sal se disuelva lo más posible. Completar el vaso con agua del grifo,
suavemente, teniendo mucho cuidado e intentando que las aguas (que ahora tienen
diferentes densidades) no se mezclen demasiado. Colocar el lápiz dentro, hasta tocar el fondo y ver
qué sucede.

Qué sucede:

Te sorprenderás al ver como el lápiz parece quebrarse, partiéndose en 3 partes. Ello ocurre porque
los rayos de luz tienen ahora tres ángulos diferentes de refracción y como ocurrió en el
primer experimento, los rayos se refractan a diferentes ángulos, modificando la imagen que se nos
figura. La parte del lápiz que está fuera del agua se verá de una manera; la que está en el agua, de
otra; la que está en la mezcla de agua y sal, también se verá diferente