EFICIENCIA ENERGÉTICA EN EL SECTOR INDUSTRIAL

IGNACIO INDA
MIEMBRO DEL CONSEJO DIRECTIVO DE A3E Y DIRECTOR DEL
ÁREA DE EFICIENCIA ENERGÉTICA DE EUROCONTROL

El impacto de la eficiencia energética en la industria

Todavía existe una gran parte de la industria en nuestro país que no está especialmente
concienciada de los beneficios que puede obtener como resultado de implementar políticas de
control energético ni de introducir innovaciones basándose en nuevas metodologías de trabajo.
El ahorro energético obtenido como resultado de dichos proyectos puede oscilar entre el 10 %

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y el 35 %.

CONSUMO DE ENERGÍA

E
l sector industrial ha representa-
do en España, tradicionalmente,
el mayor porcentaje de consumo
energético. Dicho porcentaje fue desban-
cado por el transporte por diversos moti-
vos, tales como el comienzo de la implan-
tación de medidas de ahorro y eficiencia
energética, la optimización de los procesos
industriales y el incremento de movilidad
de las personas y mercancías.
El sector industrial es, en definitiva, res-
ponsable del 31% del consumo de energía
en nuestro país, según datos del Instituto
para la Diversificación y Ahorro de la Ener-
gía (IDAE), ocupando el segundo lugar tras
el transporte.
Según los resultados aportados por el Ins-
tituto Nacional de Estadística (INE 2015),
las comunidades con un mayor consumo
energético son Cataluña (21 %), la Co-
munidad Valenciana (12,2 %) y Andalucía
(10,9 %).
En los últimos diez años la electricidad
ha supuesto el mayor consumo. Según
datos obtenidos del INE, en 2013, alcanza
el 51,7 % del consumo total del sector in-
dustrial seguido por el gas con un 31,9 %
y los productos petrolíferos con un 11 %.
Actualmente nos encontramos en una
etapa de evolución creciente de la econo-
mía española, lo cual se ha reflejado en el
sector industrial. No obstante, en el infor-
me anual del 2014 del Ministerio de Indus-
tria, Energía y Turismo se indica que “el
nivel de la actividad industrial se mantiene
todavía alrededor de un 11% por debajo
del que tenía en 2008”.
Según datos facilitados por el INE, la indus-
tria representa el 15,9% del PIB de la econo-
mía española y genera más de 2,3 millones
39% Transporte.
31% Industria.
17% Edificación.
10% Servicios (comercio, hoteles, oficinas)
3% Agricultura y otros
Elaboración propia. Fuente: IDAE.
El sector industrial
ha representado
en España,
tradicionalmente, el
mayor porcentaje de
consumo energético
de empleos. Es el sector que realiza el mayor
esfuerzo en innovación e I+D, 48,3% en
2012, y el peso de las exportaciones indus-
triales en el PIB representan más del 20%,
por lo que es un sector que influye sensible-
mente en la economía del país.
Actuaciones destacables en
materia de eficiencia energética
Se han adoptado diversas medidas cuyo
objeto es garantizar el cumplimiento por
parte de España de los objetivos fijados
en materia de ahorro energético para
el año 2020, establecidos en la Directiva
2012/27/UE de eficiencia energética. Di-
chas medidas son:
La creación de un Fondo Nacional de Efi-
ciencia Energética que permita el apoyo
económico y financiero con el objetivo de
incrementar la eficiencia energética en el
sector industrial. La gestión del Fondo se
asignó al Instituto para la Diversificación y
Ahorro de la Energía (IDAE), contando con
un presupuesto superior a 115 millones de
euros en el 2015 para la mejora de la tec-
nología en equipos y procesos industriales,
así como la implantación de sistemas de
gestion energética.
El 13 de febrero se publicó en el BOE el
Real Decreto 56/2016, de 12 de febrero,
por el que se transpone parcialmente la
directiva 2012/27/UE del Parlamento Eu-
ropeo y del Consejo, de 25 de octubre de
2012, relativa a eficiencia energética en lo
referente a auditorías energéticas, acredi-
tación de proveedores de servicios ener-
géticos y auditores, y la promoción de la
eficiencia del suministro de energía. Con
este Real Decreto se pretende impulsar el
ahorro y la eficiencia energética contribu-
yendo de manera decisiva a alcanzar los
objetivos fijados por la Unión Europea.
Como se indica en el RD56/2016, están
obligadas de realizar una auditoría energé-
tica cada cuatro años, que cubra el 85%
del consumo total de energía final del con-
junto de instalaciones ubicadas en el terri-
torio nacional, aquellas empresas o grupos
de sociedades de más de 250 empleados o
con un volumen de facturación mayor de
50 millones y un balance general mayor de
43 millones de euros.

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Otra opción que tienen dichas empresas
es implantar un sistema de gestión ener-
gética o ambiental, según la ISO 50001 o
la ISO 14001, siempre que el sistema de
gestión incluya una auditoría energética
que cumpla los requisitos establecidos en
el Real Decreto.
¿Qué impacto tiene el Real
Decreto 56/2016 en el sector
industrial?
Según fuentes del INE, existen en el sec-
tor empresarial más de 3.800 empresas
con más de 250 empleados y un total de
más de 27.000 establecimientos. Aunque
el sector industrial representa el 6,4% so-
bre el total de las empresas españolas, si
analizamos el segmento gran empresa,
este sector representa más del 21%. O lo
que es lo mismo, cerca de 800 empresa in-
dustriales tendrán que realizar la auditoria
energética antes de noviembre del 2016.
Con nuestra experiencia hemos podi-
do identificar variedad de barreras a las
que se enfrenta el sector industrial ante
la perspectiva de llevar a cabo auditorías
energéticas y la posterior implantación de
las medidas de mejora propuestas.
• Desconfianza e incertidumbre: La lec-
tura del Real Decreto está generando
muchas dudas en cuanto a la interpre-
tación de las obligaciones que implica,
tanto para las empresas del sector (efi-
ciencia energética) como para las em-
presas obligadas.
Las empresas industriales se muestran
reacios ante la posibilidad de introducir
instalaciones de energía renovable y
cogeneración, debido a que conside-
ran demasiado inestable el marco re-
gulatoria actual.
• Económicas: muchas empresas conside-
ran demasiado costosa la financiación
que deberían afrontar en el caso de
adoptar las medidas de mejora detec-
tadas tras la auditoría y demandan sub-
venciones que les ayuden a afrontarlo.
Certificados de ahorro energético
o ‘Certificados Blancos’
En concepto general, un Certificado Blan-
co representa una cierta cantidad de aho-
rro de energía que se ha logrado durante
un determinado periodo de tiempo. Estos
ahorros, en la mayoría de los casos donde
estos certificados ya están implantados,
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Elaboración propia.
vienen establecidos como objetivos de
ahorro energético impuestos a distribui-
dores o comercializadores de energía del
país.
Los propios Certificados que el autor recibe
del organismo emisor pueden usarse para:
• Demostrar el cumplimiento propio de
objetivos de ahorro energético.
• Para la venta de los mismos a agentes
obligados al cumplimiento propio de
objetivos de ahorro energético.
La implantación de un sistema de CBs a
nivel nacional podría ser beneficiosa para
la consecución de los objetivos generales
de ahorro. Además, la implantación de un
sistema de CBs vendría acompañada de la
aparición de nuevos agentes de mercado,
como entidades acreditadas en M&V de
ahorros y gestores de CBs.
Impacto de la eficiencia
energética en la industria
La eficiencia energética juega un papel
fundamental en las decisiones tomadas en
el sector industrial, ya que de ello depen-
den sus beneficios económicos y la com-
petitividad en el mercado internacional.
Como se ha mencionado anteriormente,
el sector industrial es el responsable del
31% del consumo energético en España
y con la eficiencia energética se presentan
múltiples y diversos escenarios para con-
seguir reducir dicho consumo. Ejemplo de
ello es la alteración de algunos hábitos
de consumo y la gestión de los equipos
básicos existentes en las empresas, sin ne-
cesidad de alterar la calidad y el bienestar
La eficiencia energética
juega un papel
fundamental en las
decisiones tomadas en
el sector industrial, ya
que de ello dependen
sus beneficios
económicos y la
competitividad en el
mercado internacional
de las mismas, consiguiendo con ello un
potencial ahorro energético.
Todavía existe una gran parte de la in-
dustria en nuestro país que no está espe-
cialmente concienciada de los beneficios
que puede obtener como resultado de
implementar políticas de control energé-
tico ni de introducir innovaciones basán-
dose en nuevas metodologías de trabajo
o invirtiendo en equipos energéticamente
eficientes. En el sector industrial podemos
decir que el ahorro energético obtenido
como resultado de dichos proyectos pue-
de oscilar entre el 10 % y el 35 %.
Por lo tanto tenemos el gran reto de
llegar a esas empresas para ayudarles a
identificar sus debilidades energéticas y
lograr corregirlas consiguiendo el mayor
ahorro energético posible mediante estu-
dios de sensibilidad, lo que deriva en un
ahorro económico, una mejora en la opti-
mización de sus procesos y un incremento
de la vida útil de sus instalaciones 
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