“EL TIEMPO EN GEOGRAFIA” “EL “aqui y ahora” deben ser entendidos a la luz del pasado. Pro- yectos dei presente, invariablemente afectarin el futuro. Ast, ‘ues, la geografia, aunque en prinelpio dedicada a las conforma. clones en el espacio, tiene también una dimension histSrica”. Jan Broek, en “Geografia”. José Aguétin Blanco Barros, Explicacién Preliminar ‘Adin en lo breve de esta ocasién conviene explicar las razones y carac- teristicas de este trabajo. Bs el caso de un gedgrafo y profesor de Geografia, ‘que por eminente necesidad de su catedra universitaria de Geografia Himana de Colombia, hace unos afios se vié precisado a realizar una investigacién geogrifica-historica de archivo, de gabinete y también de campo a fin de llegar a disponer de datos seguros y de ideas claras respecto al proceso de poblamiento de Colombia y sus efectos. Dada la vastedad del tema y las indudables dificultades metodolégicas, hubo de elegir un area restringi perteneciente a una region del pais bien conocida por el autor. La regi fue la Provincia de Cartagena y el area tema de la investigacion el Depar- tamento del Atlntico, en. tiempos colonisles denominado Tierradentro, ‘A la prolongada investigacién en el Archivo Histrico Nacional se ha aadido Ia reyision y andlisis de la cartografia historica, disponible, del sector; y as{ mismo de la cartograffa actual, Ademés, ha habido necosidad de recorrer de nuevo el territorio del citado Departamento colombiano, especialmente en aquellas poreiones con las cuales el autor esté menos familiarizado, y de hablar con gentes representativas Principios fundamentales dela Geografia No se hari ahora un andlisis detallado de cada uno de ellos, pues no es la ocasién, Se presentaré s6lo una enumeracién, a efecto de destacar aque- os prineipios que més directamente tienen que ver con el tiempo geogrdfico, Los pensadores de 1a Geograffa Modema plantean los siguientes princi- pios como fundamentos de su clencia: 875a. Extensi6n, por excelencia el principio geogréfico, es el principio espacial o de localizacién, Los autores clisicos lo llaman corogrdfico. b. Conexién, puesto que el paisaje, que es ¢1 objeto de la Geograt es un complejo de factores fisieos y humanos o culturales. c. . Generatidad: en Geografia un hecho o un fenémeno no se da aisle do sino dentro de un conjunto; y es comparable con todos los hechos o fen6: ‘menos que le son andlogos, . Causalidad: Bs el principio bisico en geograffa, sies que ella quiere dejar de ser un mero estudio enumerativo o descriptivo y a pasar a ser algo explicativo, Si ella es ciencia debe dar razén de las causas. El principio de causalidad implica necesariamente el de evolucién hist6- rica, Bs en este punto donde para explicar los cambios, el ge6grafo se halla Con la necesidad de manejar el tiempo. La Geograffa es una ciencia de lo seta, Yale decir dol presente, mis para poder expicr és debe indagar pasado. El problema del ‘Tiempo en Geogratia As{ como al usar el principio espacial o de extensién, el gedgrafo debe precisar el concepto de “superficie terrestre”, del mismo modo debe superar €l desconcierto o perplejidad que en el campo de su ciencia le cause la cues- tidn referente a la magnitud de tiempo hasta la cual puede él hacer retroce- der el estudio de un fenémeno terrestre particular o de un complejo de Yenémenos relacionados con el espacio, teniendo presente que el retroceso fen el tiempo se hunde en el origen mismo de los fenémenos. Y el problema 6 el mismo si se trata de un fendmeno fisico, una geoforma por ejemplo, 0 fen hecho originado por el hombre, cuyo desarrollo entra hacia atrés en la historia humana, El autor de este ensayo confiesa que al llegar a este punto, es decir al de Ia aplicaci6n préctica de este principio, ha esperimentado el temor muy explicable de que sus colegas le hagan el reparo de que no est sctuando dentro del campo geogratico sino del histérico. Para tratar de explicar sucitamente cémo e! tiempo est implicado en el presente geogrifico, se expresan enseguida algunas de las ideas que R. Hatishorme y otros gedgrafos eminentes han publicado al respecto: En el presente geognifico el tiempo est implicado de Cuatro modos: 1. Bn Jo. que denominamos presente se debe incluir alguna duracién de tiempo. Nos interesan no solamente los rasgos estéticos de Ia Tierra, sino los que estén en movimiento: rfos, corrientes marinas o éreas, las ‘actividades del transporte, importantes en la integracién entre lugares. 376‘La seecién transversal hasta la cual la goografia corta la ditnensién del tiempo, debe tener cierto espesor, cierta duracién de manera que mues- ‘re un Cuadro representativo de las situaciones existentes. Es algo similar a Jo que en el uso comin se quiere decir al mostrar un perfodo como “el presente”, aunque el iltimo momento, el mas inme- diato realmente esté ya en el pasado. ‘Muchos fenémenos del presente no s6lo varian de acuerdo con ciclos y Auctuaciones, sino que estén sujetos a cambios acumulativos. La plena descripeién de la geografia de un rea “como es ella en si”, ain consi- derada en un momento infinitesimal de tiempo, debe incluit lz descrip- ‘ién de la direccién y de la rapidez del cambio operado. Determinar las tendeneias presentes requiere examinar el curso del cambio a través de tuna porcién del pasado, por lo general mas larga que lo reque:ido para ‘medir las otras caracteristicas del presente. La medida o extensi6n en que las relaciones entre 16s fenémenos depen- den de los procesos comientes, se puede analizar en términos de un presente. Pero sucede que en muchos casos los procesos corrientes no ‘hos explican por qué los fenémenos se dan en sus relaciones presentes. Entonces es necesario examinar las relaciones establecidas en. un mo. mento del pasado, cuando al menos algunos de los fenémenos eran diferentes en cardcter, La cuestién e3 ésta: ‘eudn lejos hacia atrés on el pasado es nezesario 0 deseable investigar el desarrollo de los rasgos del presente, y el grado hhasta el cual los estudios geograficos del presente deberian ser organi- zados siguiendo una secuencia historia. Un planteamiento algo diferente proviene de los estudios que buscan explicar, no la integracién de los fenémenos, sino el origen y el desa- vrallo da log rasgos particulares en la geograffa actual de una determi- nada area, Tales estudios genéticos penetrando indefinidamento en ol tiempo, enfocan las causes del desarrollo de una particular clase de rrasgos; y se los considera mas estrechamente relacionados con las ‘ciencias sistematicas o con la Historia que con la Geograffa. Los ge6grafos estudiamos el pasado no s6lo como una Ilave del presen- ‘te “sino por raz6n de su propio contenido geogrifico”. Cada periodo ‘pasado posee la goografia de su propio presente, y el estudio compara- tivo de diferentes geografias a través de sucesivos perfodos de tiempo, ‘raza el perfil de la cambiante geografia de una regién, De ese modo la dimension histérica del tiempo se combina con las dimensiones del espacio. 377‘TIEMPO DEL HABITAT Y TIEMPO DE LOS RASGOS CULTURALES Los fenémenos del habitat u hogar terrestre de la sociedad humana se enmarean dentro de diversos conceptos del tiempo. Uno es el caso de. los Tenémenos geoldgicos, tectonicos 0 geomorfoldgicos, por ejemplo, con sus inconmensurables dimensiones de tiempo que muchas veces superan la capa- cidad imaginativa del hombre; y otro el de los fenémenos meteorolégicos o el de los sismicos, breves, répidos, convulsivos o estertorosos, por asf decir. ‘Los asuntos humanos por su parte, tienden a cambiar en un grado mucho mayor y més variado que los fendmenos naturales. Por ello es preciso tener como “presente” un periodo de tiempo més largo. [Al estudiar las condiciones pretéritas con el objeto de conocer las rela- nes culturales presentes, los problemas son mucho més complicados que ‘cuando se trata de rasgos naturals. EL poblamiento del Departamento del Atlatitico Dentro del campo de la Goegrafia historica en este caso nos interesa ‘mediante el cual se pobl6 el Departamento del Atléntico, antiguo Partdo de ‘Tierradentro. El estudio hasta ahora realizado abarca desde los tiempos pre-heridianos, es decir desde antes de 1533, hasta las postrimerias del siglo XVII El siglo’ XIX no ha sido inclufdo por dos razones: una la incapacidad fisica del autor para aleanzar hasta allé, dado el hecho de que trabaja solo; la segunda fs que esta parte del asunto, correspondiente ya a los tiempos republizants, presentan caracteres bien diferentes de los hallados para los tiempos colonia- les. AAdemés hay otra razén que consiste en la inexistencia de archivos en el Departamento del Atlintico y en la ciudad de Cartagena, que contengan ‘material usable en esta investigacién. La inmensa mayor parte del trabajo se ha realizado en el Azchivo Histérico Nacional y en menor grado en el Archivo General de Indias (Sevi- lla). La cartogralia estudiada es de cardcter histérico colonial y también geografico actual, El estudio de campo lo ha hecho el autor en repetidos jes al Atléntico, donde ha tenido oportunidad de interrogar a muchas personas, algunas de las cuales le han proporcionado valiosa informaci6n escrita documental de origen privado o datos del directo conocimiento del terreno. Conclusiones Preliminares 1, Elpoblamiento primitivo del Atléntico, tema de la investigacion arqueo- logica, es de una antiguedad mayor de 10s 6.000 afios, por lo menos. ‘Alaunos poblados aborigenes contienen yacimientos que prueban el cultivo del maiz y de Ia yuca por lo menos desde el afio 1.000 a. de C. 378Documentalmente se puede demostrar que al tiempo de la expedicién de Pedro de Heredia (1583), en el norte de Ia Provincia de Cartagena habia unos 69 poblados indigenas, de distintos tamaiios e importancia, En 1610 los documentos nos presentan 27 pueblos indigenas en calidad de Encomiendas en este mismo Departamento. De acuerde con las cifras de indios tributarios (entre 18 y 50 aos de edad) se puede esti- ‘mar toda la poblacién indigena para ese afio en Tierradentro, Desde el puro inicio de la Conquista, o sea, en el segundo tercic del siglo XVI empiezan los sibditos libres a ocupar tierras en esta parte de la Provincia de Cartagena. Son gentes oriundas de esta tiltima ciudad, de Santa Marta y Mompox. Adems aparecen otras gentes provenientes de la Peninsula Thérica, las Islas Canarias, La Ciénaga de Santa Marta y de las propias sabanas de Tierradentro posteriormente. El poblamiento de las tierras por fuera de las Encomiendas, mencionado atris, lo realizan gentes mestizas, mulatas, zambas, europeas, blancos hhjjos de éstos. También hay negros He Guinea y Angola. Log primeros sitios de libres datan de los puros finales del siglo XVI y de la primera mitad del siglo XVI. Tales sitios se originan en hatos de cerdo, estancias agropecuarias, campamentos de. gentes armadas para contener indios bravos o negros cimarrones. EI anilisis de las cifras de poblaci6n obtenidas de las “Visitas de la tierra” a las Encomiendas de indios, dice que de la Conquista ¢ la mitad dol siglo XVIII, la poblacién indigena estuvo en continuo deszenso. Al contrario, Ia poblacién de libres no solo aument6 en variedad sino también répidamente en ntimero, No sélo disminuyé el ntimero de indigenas, por lo menos hasta 1750, sino que el niimero de pueblos de indios también disminuy®. Al contra: Ho, la poblacién de libres ered més sitios cada ves. La reforma del modelo de poblamiento en el Atkintico la ordené en 1742 el Virrey Eslava, Se pretendia que cada vez hubiera menos disper- sién y més concentracién. Il éxito s6lo fue parcial. El primer censo oficial de Tierradentro se hizo en 1777 y arrojo 20.600 habitantes: 3.500 indios, 500 esclavos. El resto poblacién libre muy mezolada, 379