¿QUÉ SIGNIFICA ESE RUMOR?

TEXTO: LUCAS 18:35-36

IGLESIA NACIONAL PRESBITERIANA PRINCIPE DE PAZ
SEXTA E INDEPENDENCIA, ZONA CENTRO, H. MATAMOROS, TAMAULIPAS.
DOMINGO 25 DE MARZO DE 2018
PBRO. JUBENTINO VAZQUEZ VENTURA

“Aconteció que acercándose Jesús a Jericó, un ciego estaba sentado junto al camino
mendigando; y al oír a la multitud que pasaba, preguntó qué era aquello.” (Lucas 18:35-36).

El texto que abordaremos esta tarde introduce un nuevo episodio y se sitúa en el contexto
del último viaje de Jesús hacia la ciudad santa: “Tomando Jesús a los doce, les dijo: He aquí
subimos a Jerusalén, y se cumplirán todas las cosas escritas por los profetas acerca del Hijo
del Hombre” (Lucas 18:31). Concientemente nuestro Señor emprendió el viaje para
participar de la Pascua Judía y entregar su vida por los pecadores.
Nuestro texto nos sitúa casi al final del viaje, en la ciudad de Jericó, segunda ciudad en
importancia de Palestina y a una distancia aproximada de 27 a 30 kilometros al noreste de
Jerusalén, a 8 kilometros al oeste del río Jordán y a unos 10 de la punta norte del Mar
Muerto. En aquel entonces había dos ciudades con el mismo nombre, la antigua Jericó del
Antiguo Testamento y la nueva Jericó que Herodes el Grande había reconstruido, conocida
también como Jericó de los gentiles. Entre ambas había una distancia a un poco más de tres
kilometros. Lucas hace referencia a la nueva Jericó en tanto que Mateo y Marcos mecionan
a la ciudad que estaba en ruinas (Mt. 20:29; Mc. 10:46). Podemos decir que la sanidad
ocurrió cuando habían dejado a un lado la antigua Jericó y entraban a la nueva Jericó, a un
poco más de tres kilómetros al sur de la Jericó antigua y a los pies de la subida que conduce
a Jerusalén.

Lucas nos dice que al acercarse Jesús a Jericó: “un ciego estaba sentado junto al camino
mendigando”. Ciego (gr. Τυφλός tuflos o Tyflos ciego o cegado). Lucas presenta
brevemente al sujeto sin mencionar el nombre propio, se limita a decir que es ciego, prefiere
dejarlo en el anonimato y que siga siendo un desconocido para sus lectores. Tampoco explica
la causa de la ceguera, si era de nacimiento o no, de un accidente o por una enfermedad,
etc. Esta persona estaba privado del sentido de la vista, no podía ver nada, no era capaz de
percibir la luz y captar el mundo visible. Sus ojos no estaban funcionando, pocas cosas podía
desempeñar para ganar su alimento porque sus ojos estaban inutilizadas. No dudo que era
un individuo humilde e insignificante, en una situación económica muy mala y en medio de
mucha pobreza, pues era incapaz de trabajar como sus demás compatriotas. Era un hombre
sin estudios y sin ninguna pocisión social, pues no podía participar de eventos notables.

Ese hombre estaba totalmente en tinieblas, como alguien que camina por densa oscuridad
de la noche sin saber dónde colocar el pie, expuesto continuamente a caerse a menos que
alguien más le pudiera orientar y guiar.
Implica que no podía saber que encontrar al siguiente paso, no podía saber si al siguiente
paso permanecería de pie o caería, y si caería, caería de un sopetón sin algo en qué poder
apoyarse, estuvo siempre expuesto a una rápida caída repentina.

1
 ¿QUÉ SIGNIFICA ESE RUMOR?
TEXTO: LUCAS 18:35-36
IGLESIA NACIONAL PRESBITERIANA PRINCIPE DE PAZ
SEXTA E INDEPENDENCIA, ZONA CENTRO, H. MATAMOROS, TAMAULIPAS.
DOMINGO 25 DE MARZO DE 2018
PBRO. JUBENTINO VAZQUEZ VENTURA
Estaba expuesto a caer por sí mismo, sin que alguien lo empujara, no necesitaba otra cosa
que su propia ceguera para caer completito. La razón por la que seguía con su ceguera era
porque no había hallado la cura o no tenía con que pagar su curación.

La observación del estado de este hombre ilustra muy bien el estado espiritual de la
humanidad. No hay otra cosa que mantenga a los hombres en ceguera espiritual en todo
momento más que su propio pecado. El pecado restringe, dificulta e impide ver y entender
a Dios, al respecto, el apóstol Pablo dijo: “Pero si nuestro evangelio está aún encubierto,
entre los que se pierden está encubierto; en los cuales el dios de este siglo cegó el
entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria
de Cristo” (2ª corintios 4:4). El diablo, el archienemigo de Dios ciega a los hombres para que
permanezcan perdidos y ciegos al evangelio. El diablo no desea ni siente placer en ningún
momento hacer que el hombre vea, tampoco el hombre no puede hacer nada por sí mismo.
Los hombres se encuentran en dificultad y no hay fuerza en sí mismo para salir de su
condición.
Aunque llegaran a juntarse las manos de dos o más ciegos o hasta llegar a ser una multitud
nunca podrían mejorar la situación, igualmente todos caerían. El diablo los ciega para
reternerlos, pues le pertenecen, él tiene sus almas en su posesión y bajo su dominio. En el
alma del hombre reina el pecado, está activo, por eso actúa impíamente.

El escritor bíblico dice que el ciego: Estaba sentado junto al camino mendigando”. Una
persona con una enfermedad ocular tenía pocas perspectivas de curación y el destino era
muy duro, por lo general no le quedaba otra salida que la mendicidad. Este hombre
mendigaba porque era pobre por su ceguera. La ceguera hacía al hombre un ser miserable,
es por eso que lo único que puede realizar es mendigar, era la única forma de sobrevivir y de
preservar su propia vida o cuidar de sí mismo. El mal estaba en los ojos nada más. No era una
enfermedad fingida, no estaba pretendiendo ser un ciego, sino que realmnete estaba ciego.
Allí estaba este hombre con los ojos inútiles, con los que no podía ver nada.

La situación de este personaje puede ser útil para hacer despertar a algunas personas en esta
congregación. Esto que has oído es el caso de cada uno de ustedes que se encuentran fuera
de Cristo. Estas en un mundo de miseria espiritual, lo único que te espera es el lago de fuego
y azufre (Apocalipsis 21:8). Allí esta el espantoso lago de fuego ardiente, un fuego eterno,
que nunca se apagará. Allí está ese lugar con las puertas abiertas esperando a los ciegos
espirituales. El dios de este mundo no quiere que veas la realidad que te espera.
Posiblemente te ves fuera del infierno, lo que debes saber ahora es que tu ceguera espiritual
te lleva directamente hacia ese lugar, cada día que pasa te acercas más y más, al llegar allí
serás sumergido de inmediato y rápidamente en ese lago sin fondo. Allí llorarás y crujirás tus

2
 ¿QUÉ SIGNIFICA ESE RUMOR?
TEXTO: LUCAS 18:35-36
IGLESIA NACIONAL PRESBITERIANA PRINCIPE DE PAZ
SEXTA E INDEPENDENCIA, ZONA CENTRO, H. MATAMOROS, TAMAULIPAS.
DOMINGO 25 DE MARZO DE 2018
PBRO. JUBENTINO VAZQUEZ VENTURA
dientes. Jesús dijo que es un fuego que no puede ser apagado, donde el gusano de ellos no
muere, y el fuego nunca se apaga. (Marcos 9:43, 44)

¿Habrá entre nosotros hoy un alma indigente que necesita un salvador? ¿Hay alguien aquí
con los ojos ciegos espiritualemente, que no puede ver las cosas que quisiera ver, y necesita
que sus ojos sean restaurados? No se cómo estan tus ojos espirituales, tu lo sabes mejor.
¿Quieres saber que eres un ciego espiritual? La respuesta está en cuánto amas y buscas a las
cosas de Dios. ¿Te gusta estar en comunión con Dios? ¿Te gusta pasar tiempo con Dios? ¿Te
congregas y pasas tiempo con los que ya han sido redimidos por Jesucristo? ¿cuál es el
escenario o terreno que pisas constantemente? ¿en cuál camino pasas más tiempo? De
acuerdo a la costumbre de ese tiempo, especialmente en la época de peregrinación, los
ciegos siempre se juntaban a las orillas del camino que conducía a la ciudad para limosnear,
acto considerado como humillante.

“y al oír a la multitud que pasaba, preguntó qué era aquello. De aquí la pregunta ¿Qué
significa ese rumor?
El ciego mendigo, aunque no podía ver, podía escuchar el bullicio o murmullo de la multitud
que se acercaba. Pudo percibir el tropel de la multitud. Multitud (gr. ὄχλου okslu, gente,
plebe, multitud, compañía) La plebe era la clase social formada por gente común del pueblo
y que eran de la clase socio-económico más bajo.
Lucas no dice que Jesús iba sólo con sus discípulos sino mucha gente con él. Peregrinos de
Galilea que iban a participar de la pascua en Jerusalén. ¿Qué ilustra el viaje de Jesús y la
multitud de peregrinos hacia la fiesta de pascua en Jerusalén? Tres cosas se pueden
mencionar. Primero, la multitud de peregrinos representa a los creyentes, la iglesia.
Segundo, Jesús al frente dirigiendo a su iglesia y tercero, todos en dirección a la nueva
Jerusalén, la ciudad celestial.
En este aniversario de la iglesia considero pertinente que cada uno se pregunte ¿He
caminado con Jesús este año? ¿Soy realmente uno de los que caminan con Él hacia la patria
celestial? ¿Es Jesús mi guía? Si no lo es, ten por seguro que no vás a llegar a esa ciudad. A la
Jeruslén terrenal todos podían llegar con su propia fuerza, pero a la nueva es solo por Jesús.
Ten presente que el que es de Cristo está en el camino, no está sentado junto al camino
escuchando solamente el murmullo como el ciego de Jericó. Si Jesús no es tu guía, no vas a
la nueva ciudad, eres un ciego que va derechito al infierno. Recuerda, Jesucristo es el único
que camina en medio de nosotros, Juan del Apocalipsis dijo: “y en medio de los siete
candeleros, a uno semejante al Hijo del Hombre,...” (Apocalipsis 1:13).
Como iglesia gozamos de la presencia y de la dirección de Jesucristo, ahora el nos lleva a una
mejor y esplendente ciudad: “…pero la ciudad era de oro puro, semejante al vidrio limpio”.
(Apocalipsis 21:18).

3
 ¿QUÉ SIGNIFICA ESE RUMOR?
TEXTO: LUCAS 18:35-36
IGLESIA NACIONAL PRESBITERIANA PRINCIPE DE PAZ
SEXTA E INDEPENDENCIA, ZONA CENTRO, H. MATAMOROS, TAMAULIPAS.
DOMINGO 25 DE MARZO DE 2018
PBRO. JUBENTINO VAZQUEZ VENTURA
El ciego preguntó qué era aquello. De la misma manera debes preguntarte qué es ese
murmullo que se escucha en estos días. La respuesta es: La iglesia recordando el viaje de
Jesús a Jerusalén para entrar por última vez y como un pacífico rey que entra decididamente
a entregar su vida por el pecador ciego y empedernido.