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Extraños en El sótano Luis Cabrera

Julio 2004

La acción en un sótano.
Nico aparece por una puertita que se abre en una pared.
Nico está desorientado, con una linterna en la mano.Tropieza con cosas metálicas y se
produce un ruido. Nico paralizado.
Se abre la puerta tapa del sótano .
Aparece Guille, con una linterna también, lo encandila. Baja la escalera.

Nico- Epa!...¿Quien es? ¿Que hace acá?-

Guille- Soy Guille, ¿vos quien sos?-
Nico- Soy Nico... No hago nada... me perdí.-
Guille- Esta es mi casa.-
Nico- ¿Que... vivís acá?
Guille- No, nene... este es el sótano.-
Nico- Ah... el sótano... no entiendo...-
Guille- ¿Como entraste?-
Nico- ¿Adonde?-
Guille- Al sótano este. El sótano de mi casa.-
Nico- Yo... vine a ver los túneles antiguos... y me perdí... llegué a una puerta y...-
Guille- Se escuchaban ruidos y bajé a mirar. Nunca bajo. Es feo esto.-
Nico- ¿Así que entonces tu casa se comunica con los túneles?-
Guille- No sé. No sé de donde salís vos, pero mejor te vas por donde viniste. Tengo un
miedo bárbaro. Capaz que sos un fantasma. O un asesino, que se yo.-
Nico- Yo te tengo miedo a vos... Apareciste así, en lo oscuro, con esa linterna...-
Guille- Es el sótano de mi casa, pibe... Mi casa. Yo tengo derecho a estar acá.-
Nico- Yo no tengo la culpa de haberme perdido y venir a parar acá. Yo solo abrí una
puerta y aparecí acá.-
Guille- Acá no hay ninguna puerta. Nunca hubo una puerta. Andate que tengo miedo.-
Nico- Si vos decís que este es el sótano de tu casa , entonces dejame salir por ahí.-
Guille- Estás loco? ... Mirá que te voy a dejar entrar en la casa, andá a saber quien sos.
Capaz que querés robar.-
Nico- No, que voy a querer robar, yo lo único que quiero es salir. Si me voy por donde
vine me voy a perder otra vez. Es un laberinto todo oscuro, eso.-
Guille- Ah, no sé... Si te animaste a venir solo te podés volver...-
Nico- No vine solo... yo bajé a los túneles con mis hermanas pero algo pasó y nos
separamos. Tengo miedo que se hayan perdido. Quiero salir de una vez y pedir
ayuda. Ya hace mucho que estoy dando vueltas ahí abajo.-
Guille- Todas mentiras que inventás. Acá nunca hubo puerta. ¿De donde venís vos?
¿Sos un fantasma? ¿Como entraste?-
Nico- Vení. Mirá. – (busca con la linterna hasta que encuentra una pequeña puerta
escondida atrás de un baúl) Ves? Por acá entré. Por esta puertita.-
Guille- Nunca la había visto....-
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Guille abre la puertita.

Desde los túneles, cavernosa y lejana, se escucha una voz que llama “Guille!” “Guille!”.

Nico- Es Agustina! Me parece la voz de Agustina! –

Guille- ¿Que Agustina?-
Nico- Una de las que vino conmigo, ...uy, se debe haber perdido.... ¿Me acompañás a
buscarla?-
Guille- Vos estás loco. Mirá que me voy a meter ahí, andá saber lo que hay.-
Nico- Dale, acompañame, con dos linternas vemos mejor...-
Guille- ¿Y si nos perdemos?-
Nico- Dale, Guille, no seas miedoso...-
Guille- No. Yo no voy. Es asunto tuyo.-
Nico- Escuchá.... (la voz de Agustina se oye muy lejana) ...se está alejando...Es
chiquita, se va a perder. ¡Vamos, Guille! .-
Guille- Pará! Ya sé que vamos a hacer! ¿Viste el cuento de Hansel y Gretel?-
Nico- ¿Que tiene que ver? ¡Dale, que se va a perder!-
Guille- No. En serio. Esto es una idea bárbara. Hansel y Gretel tiraban miguitas para
acordarse cual era el camino, viste?-
Nico- Sí, ya sé. Mirá como les fue. Se las comieron las palomas y se perdieron.-
Guille- Pero en el tunel no va a haber palomas.-
Nico- Otros bichos puede haber.-
Guille- Si yo no digo tirar miguitas. Yo digo otra cosa.... (mira por el sótano)... mirá!
Acá encontré una caja con tuercas. Muchas tuercas.-
Nico- Eso no alcanza, Guille. Y es repesado. No vamos a andar llevando eso. Dale,
apurate, vamos así nomás. –
Guille- No, así nomás no. No voy. Tiene que haber algo acá. – (quiere mover unas latas
y se produce como un pequeño derrumbe de cosas, con gran ruido)
Nico- Dejá de embromar con eso, che. (se asoma a la puerta y grita hacia el túnel)
Agustina!! Acá, Agustina!!-

La puerta del sótano se abre y entra Abril, la madre de Guille, bajando con dificultad la
escalera.

Abril- Guillermo? ¿Sos vos? ¿Quien anda ahí?-

Guille- Soy yo, mamá. (a Nico) Escondete. Dale. Pasá por la puertita.-
Abril- Pero que estás haciendo ahí? Guillermo! ¿Que hacés ahí abajo? Está lleno de
humedad y todo oscuro.-
Guille- (encandilándola con la linterna) Me traje la linterna, ma. Estoy viendo las cosas
que hay acá....-
Abril- (terminando de entrar) ¿Vos estás loco, Guille? Andá inmediatamente para
arriba. Puede haber arañas, andá saber que otros bichos hay acá. Andá para
arriba.-
Guille- Sí, ya voy má. Enseguida subo.-
Abril- Ya. Ya mismo subís. Antes que llegue tu padre, que si se entera te mata, oís? –
Guille- Es que... tengo que acomodar unas cosas que se me cayeron y....-
Abril- Vos venís ya mismo, o querés que te lleve de una oreja, mocoso?-
Guille- Bueno, má, ya voy , ya voy. Ufa, no se puede hacer nada...-
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Abril- Se puede ponerse a hacer las tareas, por ejemplo. Seguro que no hiciste nada
todavía.-
Guille- Dentro de un rato las hago.-
Abril- Dentro de un rato es el cumpleaños de tu hermana. Y te tenés que bañar. Mirá
como estás.-
Guille- Ufa, che. No quiero estar en el cumpleaños ese.-
Abril- Es el cumpleaños de Diamela y tenés que estar. Y antes vas a hacer la tarea.
Subí , vamos. Dios mío, que lucha con este chico!. Vamos!-

Guille sale por delante de su madre. Abril cierra la puerta . En el sótano a oscuras, se abre
la puertita y entra Nico con la linterna, atrás de él , con esfuerzo, entran Agustina y Karen.
Karen llora, asustada.

Agustina- Pará de llorar, Karen. No seas boba. Ahora ya nos salvamos, ya lo encontramos
a Nico.-
Karen- Pero él también está perdido...- (llora)
Nico- No. No estoy perdido, nena.-
Karen- ¿Y si no estás perdido porqué estamos acá en lo oscuro?-
Nico- No estoy perdido. –
Karen- ¿A ver , entonces donde estamos?-
Nico- En el sótano de una casa.-
Karen- ¿Que casa?-
Nico- La casa de Guille.-
Karen- ¿Que Guille?-
Nico- Eh... el que vive acá arriba.-
Agustina- Dale, vamos a decirle que nos deje salir.-
Nico- No! No quiere. Además ahora llegó la mamá. No se puede.-
Karen- Vamos a decirle a la mamá, entonces.-
Nico- Te digo que no se puede. Y no llorés mas que van a escuchar los de arriba y...-
Karen- Que escuchen. Si yo quiero que escuchen así nos sacan de acá.-
Nico- Callate, te digo.-
Agustina- ¿Porqué? ¿Es mala la mamá de Guille?-
Nico- No sé, no sé si es mala o no. Que se yo. Como voy a saber si no la conozco.-
Agustina- Entonces capaz que es buena.-
Nico- No sé. A Guille lo retó y se lo llevó para arriba.-
Karen- Entonces sí que voy a seguir llorando!!-
Nico- Callate, che. Seguro que ahora va a volver Guille y nos saca de acá.-
Agustina- Yo tengo hambre, Nico.-
Nico- Aguantá. Aguantá un poco.-
Karen- Mi mamá se va a asustar. Se va a creer que me morí.-
Nico- No va a pasar nada. Quedate tranquila.-
Karen- Acá no hay ratas, no? –
Nico- No sé, Karen. Callate un poco que quiero escuchar los ruidos de arriba.-

Nico se sube por la escalera y escucha.

Agustina- Yo tengo hambre, Nico.-

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Nico- Sh!!!... dejame escuchar...-

Karen- ¿Que se oye?-
Nico- Nada.-
Karen- Tengo mucho miedo.-
Agustina- Yo tanto miedo no tengo. Mucho hambre tengo.-
Karen- Se ha pasado la hora de tomar la leche, seguro.-
Agustina- Puede ser. Pero yo tengo hambre de pizza.-
Karen- Estoy cansada.-
Agustina- Dormite. ¿Querés que estiremos ese colchón viejo?-
Karen- Dale.-
Agustina- Así. Tirá de la punta de allá.-
Karen- Ya está. .........Uy, mirá si nos dormimos y no nos despertamos mas.-
Agustina- Como no nos vamos a despertar, no digas pavadas. Además está Nico.-

Se van quedando calladas. Hay algún bostezo.

Nico baja de la escalera.

Agustina- Nico...(bosteza) ...no se escucha nada?...-

Nico- Como si hubiera una fiesta... pero mas lejos...-
Agustina- ¿Porque sabés que es una fiesta?
Nico- Ah... no sé... Me pareció.-
Agustina- ¿Porqué te pareció?-
Nico- Y... cantaban el “feliz cumpleaños”...-
Agustina- Ah... (bosteza)...bueno.... ¿Habrá pizza?-
Nico- Eh?-
Agustina- En la fiesta... capaz que hay pizza.-
Nico- Puede ser.-

Nico revuelve cosas. Por fin encuentra algo.

Nico- Una vela... Ojalá tuviéramos fosforos.-

Nico sigue buscando hasta que encuentra una caja de fósforos.

Nico- A ver... ojalá no estén húmedos.-

Prende la vela.

Nico- Mirá, Agus... tenemos luz.-

Agustina no contesta.
Nico deambula mirando el ambiente. No tarda en cansarse.
Nico se ha acostado también.
Un instante en que se escuchan los ronquidos.
Karen murmura en sueños.
Luego dice claramente : “Mamá!, mamá!”, casi con terror.
La luz cambia a una luminosidad verde y una música vibrante acompaña la aparición de
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una mujer.
Es Alejandrina, la madre de los tres chicos. Viste ropas estilo Superman con una leyenda
que dice “Super mamá”.

Karen- (Incorporándose, es la única que la ve) ¡Mamá!-

Ale- ¡No tengas temor, hijita! ¡¡Llegó Supermamá!!-
Karen- Tenía mucho miedo, ma.-
Ale- Yo vengo a rescatarte, mi amor. No tengas mas miedo.-
Karen- No, ma, ahora no tengo mas miedo. Vámonos a casa.-
Ale- No. A casa no. Algo mejor. Te voy a llevar al cyber.-
Karen- ¿Al cyber? Si vos nunca me dejás ir al cyber. ¿No era que a vos no te gustaba?-
Ale- Pero hoy es un dia especial. Mirá, además te voy a comprar un chocolate
grande, de esos aireados, con agujeritos.-
Karen- ¡Que bueno! ¿Vos estás contenta hoy, mamá? Porque nunca me dejás comer
chocolate.-
Ale- Yo siempre estoy contenta. Y hoy mas que nunca.-
Karen- Creí que ibas a estar enojada porque nos perdimos.-
Ale- ¿Como que se perdieron? ¿Donde se perdieron? –
Karen- Acá en esos túneles antiguos...¿que te pasa, mamá?-
Ale- Oh, no!! Mi hija está perdida y yo acá , sin hacer nada!! ¡¡Debo volar a
rescatarla!! ¡¡No temas hija!! Allá va tu Supermamá!! (sale corriendo)
Karen- Mamá!! ¡¡Mamáaa!!

La luz vuelve a la norma.

El grito de Karen ha despertado a los tres.
Karen- Pero...-
Nico- No grites, nena.-
Agustina- Ufa, che...-
Karen- Es que ... estaba soñando.-
Agustina- Yo voy a soñar con una pizza, me parece...-

Vuelven a dormirse.
Agustina murmura ahora.
Muy suave entra una música y otra vez la luz vira al verde.
Entra Ale ahora vestida de cocinero. Trae una gran pizza.

Ale- Feliz cumpleaños, Agustina.-

Agustina- Mamá!...-
Ale- Feliz cumple, hijita. Me pareció escuchar que querías pizza ...-
Agustina- Uy, que rica, mamá...¿cuantas porciones puedo comer?-
Ale- Las que quieras, mi amor, las que vos quieras.-
Agustina- Tengo muchísimo hambre, má.-
Ale- ¿Te gusta?-
Agustina- Fa! ¡De jamón y morrones! –
Ale- Bueno, es para vos por ser una nena tan buena...-
Agustina- Gracias, mamá.- (estira la mano para agarrar un porción)
Ale- No. No. Así no. No se come con la mano. –
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Agustina- Si es pizza, mamá.-

Ale- Igual, no se come con la mano. Ya te expliqué que nada se debe tomar con la
mano.-
Agustina- Bueno, mami, por esta vez, eh?-
Ale- No, no no. De ningún modo. Ünicamente con los cubiertos.-
Agustina- ¿Que cubiertos,ma?-
Ale- El cuchillo y el tenedor. Cuchillo y tenedor, querida. Así dicen las normas de la
buena educación.-
Agustina- Si acá no hay ... ¿No ves que no hay?...Dame pizza, mamá.-
Ale- No, señorita. Además veo que no te has puesto la servilleta. Ya te enseñé que
hay que ponerse la servilleta. ¿Vos querés mancharte la ropa? ¿Sabés que
trabajo dá lavar tu ropa? Y a lo mejor son manchas que no salen. Decime una
cosa: ¿Porqué no cuidás las cosas un poco mas, eh? Te creés que la regalan a la
ropa?-
Agustina- Tengo mucho hambre. ¡Dame pizza!-
Ale- ¿Que manera de pedir es esa? ¿Esos son modales para una niña educada?-
Agustina- ¡Dame pizza, mamá!-
Ale- La verdad no sé para que te mando a la escuela, mirá. Tendría que criarte en el
patio como si fueras un chancho. Cada vez tenés menos educación.-
Agustina- ¡¡¡PIZZA!!!-
Ale- No. Con esos modos no vas a ningún lado conmigo. Así no me vas a sacar nada.
Porque yo soy buena , pero no me busques, eh? Te lo advierto, Agustina, no me
busques porque me vas a encontrar. Yo te hice esta pizza con mucho amor y vos
como me pagás? –
Agustina- Por favor, mamá.-
Ale- No, nada de por favor. Ahora ya arruinaste todo. ¡¿Para que me esforcé horas y
horas preparando este manjar? Para darselo a una maleducada! No. No me
vengas ahora con... Mirá, sabés que voy a hacer con esta pizza? La voy a tirar.
Se la voy a dar al perro. Porque vos no te merecés nada. Nada.- (sale)
Agustina- Mamá!....-

La luz vuelve a la norma.

Nico- Che! No dejan dormir!-

Agustina- Es que... venía mami con una pizza...-
Nico- Estás soñando, Agustina. Pensá en otra cosa. Olvidate del hambre.-
Agustina- Si yo me olvidé. Y me dormí. Pero en el sueño se me aparece otra vez, el
hambre.-
Nico- Dejá de jorobar, nena. Dormite.-
Agustina- Ufa. .... ¿No podemos tocar la puerta para que nos traigan algo de comer?-
Nico- Callate de una vez, querés? Ya te dije que mas tarde va a volver el Guille ese a
rescatarnos. Dormite.-
Agustina- Bue.-

Silencio.

La luz vira la verde y entra por la puertita una mujer con estrafalarias ropas de turista
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extranjera , lleva una máquina de fotos. Es Abril.

Abril- Oh! Muy buenos tardes! ¿How are you, jouvencitou?-

Nico- Eh? ...¿Y usted quien es?-
Abril- Mi Jennifer O’Canion , from Cánada. Estoy tourista acá en Aryentina. Y tu?-
Nico- Ah... yo soy Nico...-
Abril- Oh! ¡Famoso guía Nico! Tu ser muy útil para entender estos túneles históricous
y no perderme .-
Nico- No, que dice?... Yo no soy guía.-
Abril- Oh, vamos! No siendo usted tan modestou... Usted muy famouso, todas revistas
de tourismo hablar de Nicou. Usted muy importante y yo mucho dinerou.
Puedo pagar usted en dollars. Muchous dolares.-
Nico- Ah sí?-
Abril- Yo perdida en visita estos túneles inmundous, necesito volver Sheraton Hotel y
darme una ducha bien caliente. Yo pagarte a usted para sacar de aquí. –
Nico- En serio?-
Abril- Yes, man. ¿How much?-
Nico- Eh?-
Abril- Preciou, joven. ¿How much?-
Nico- Bueno... no sé...¿cuanto tiene?-
Abril- Ah, no! Otrou aryentino avivado! Usted debe decir a mí cuanto coustar su
trabajou.-
Nico- Bueno... no sé... mil dolares?...-
Abril- Well. Ok. Trato hechou. Yo pagar usted cuando me deje en hotel, ok?-
Nico- Está bien.-
Abril- ¿Vamous?-
Nico- Si... espere un cachito que... que tengo un sueño que no doy mas...yo ya me
levanto, eh?...-
Abril- Ah, no! Si usted tarda mas yo contrato otrou guía.- (empieza a irse)
Nico- Es que estoy ...ya voy...-
Abril- Adiós, amigou...usted se ha perdido mil dollars...(sale)
Nico- No! ¡Nooo! Señora!!! ....

La luz vuelve a la norma, todos se han despertado.

Agustina- Eh! ¿que te pasa?-

Karen- Tonto! Me asustaste.-
Nico- Tuve una pesadilla.-
Agustina- Soñaste con una pizza!.-
Nico- No. Que me perdía mil dolares.-
Agustina- ¿Te los perdiste?-
Nico- Y... sí...-
Agustina- Sos pavo... con esa plata podríamos haber comprado no se cuantas pizzas.-
Karen- Dejense de pavadas.-
Nico- Uy! ...se oyen ruidos...-

Todos se esconden.
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La puerta del sótano se abre y baja Guille, seguido por Diamela.

Guille- Te digo que sí... lo tengo acá , escondido...-

Diamela- Vos tenés cada idea... Mirá que vas a tener un chico escondido en el sótano.-
Guille- Pero te digo que sí, se llama Nico. Uia...no está...-
Diamela- Sos chiquilín, Guille, eh.-
Guille- ¡Nico! ...¡Nico!... Salí que vine con Diamela, mi hermana, te trajimos unas
porciones de pizza!.-

Agustina aparece desde atrás de uno trastos viejos.

Agustina- ¡A mí! ¡Yo quiero!-

Guille- Ay! Pero... vos quien sos? ...-

Nico y Karen aparecen.

Nico- Es mi hermana Agustina.-

Agustina- (tomando una porción y comiendo desesperada) ¡Que rico!-
Guille- ¿Y esa otra?-
Karen- Nada de otra, nene. Me llamo Karen. Y yo no quiero pizza. Me quiero ir a
casa.-
Diamela- Pero Guille, ¿de donde sacaste estos chicos?-
Guille- Aparecieron acá , por una puertita .-
Nico- Sí, venimos de pasear por los túneles antiguos y...-
Diamela- ¿Pero que puertita? Guille, vos estás loco!-
Guille- No. ¿Que querés que haga? No se quieren ir...-
Diamela- Se llega a enterar mamá, te mata.-
Nico- Me das una? Yo también tengo hambre.-
Karen- Bueno, vamos a casa.-
Guille- Acá les trajimos una Coca.-
Agustina- Bueno, por lo menos no nos vamos a morir de hambre.-
Karen- ¡Yo me quiero ir!-
Guille- Hoy es el cumple de Diamela.-
Nico- Feliz cumpleaños.-
Agustina- Feliz cumple, Diamela.-
Diamela- Bueno, gracias. –
Guille- Comé pizza, Karen.-
Nico- Dale, nena, comé.-
Karen- (come) Bueno. Pero yo me quiero ir con mamá.-
Guille- Pará. ¿Sabés que? ¡Voy a traer la torta que quedó! ¡Traigo la torta y apagás las
velitas de nuevo, Diamela!-
Diamela- ¿Si se aviva mamá?-
Guille- No! , si está en la cocina lavando todos los platos....- (sale)
Diamela- A mamá no le gusta que bajemos al sótano.-
Nico- Y ...si... si vamos para arriba, digo... y apagás las velitas allá. No sé, por ahí le
tendrían que decir a tu mamá que nosotros estamos acá y que nos deje salir,
no?-
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Diamela- Mmmm .... no . No creo que eso sea lo mejor. Lo que podríamos hacer es...-
Nico- ¿Que?-
Diamela- Esperar a que ella se duerma y entonces cuando esté dormida, vengo con Guille
y les abrimos . Cruzan por la casa sin hacer ruido y se van. –
Karen- Pero entonces va a ser de noche. Si esperamos a que tu mamá se acueste, ya va
a ser la noche.-
Diamela- Y sí, nena. Si ya está anocheciendo. Es un rato mas, nada mas.-
Agustina- Nuestra mamá va estar furiosa.-
Karen- No, furiosa y preocupada. Le va a parecer que nos perdimos para siempre. Se
va a asustar mucho.-

Guille entra con la torta.

La trae con las velitas prendidas.

Guille- (canta)¡Que los cumplas feliz, (los demas cantan)que los cumplas feliz, que los
cumplas Diamela, que los cumplas feliz!-

Diamela apaga las velitas.

Guille- No! No aplaudan, que se va a avivar mi vieja!-

Diamela corta porciones de torta que los chicos van agarrando.

Comen un momento en silencio.

Diamela- Vamos a tener que subir, Guille. Mirá si mamá nos busca y se da cuenta que no
estamos.-
Guille- Sí. Está medio frío acá... ¿Quieren que les baje unas frazadas?-
Nico- No sé...-
Karen- Yo lo que quiero es salir.-
Guille- Estaría bueno que les traiga las frazadas y se quedan a dormir y mañana bajo
con un montón de juegos que tengo y lo pasamos bárbaro acá, no? Total mamá
sale a trabajar y...-
Agustina- Pero no, querido, ...¿y mi mamá? Sa va a preocupar mucho.-
Karen- Además yo quiero ir a dormir a mi cama. Si te gusta dormir en un sótano
quedate vos.-
Guille- Uh! Que caracter tenés,che. Yo decía nomás. Como nunca tengo amigos nuevos
para jugar.-
Agustina- Cuando salgamos te voy a invitar a mi casa. Tengo un perro labrador, grande
así.-
Karen- Que se llama Rita.-
Diamela- ¡Que suerte! A nosotros no nos dejan tener perro.-
Guille- Yo tengo uno de trapo. Se llama Buco.-
Karen- ¿Buco?!-
Guille- Sí, pero es medio aburrido.-
Nico- Porque no van y nos avisan cuando podemos salir.-
Diamela- Sí. A nosotros nos gustaría invitarlos tambien. Podemos jugar a... no sé...
tenemos juegos raros... Eso sí, no tenemos patio. Hay que jugar adentro.-
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Guille- ¡Podríamos venir a jugar acá, al sótano! ¡Es redivertido! Nos traemos comida ,
como hoy ...-
Agustina- A mi no me gustan mucho los sótanos, está muy oscuro.-
Karen- En mi casa no hay sótano. Mejor, porque a mí me da un miedo bárbaro.-
Nico- No tenés que tener miedo. Es como una pieza, como otra habitación, pero
enterrada. –
Karen- Siempre están sucios y oscuros.-
Agustina- Hay un poquito de humedad, y hace frío.-
Guille- Yo una vez vi una película que un pibe se metía a revolver en un sótano y abría
un baúl y aparecía un muerto, así, con toda la cara comida, y entonces el chico
éste lo alumbraba con la linterna y el muerto se despertaba, así todo desfigurado
y se levantaba . Después el chico quería huir pero el monstruo le cerraba el paso
y entonces el muchacho agarró una horquilla y lo mató, se la clavó en la panza
y el muerto se murió otra vez, así, clavado contra las maderas de la pared. ....
Ah, claro, no era un sótano, ya me parecía. Era un establo.-
Diamela- Callate, Guille. Asustás a todos con esas pavadas.-
Karen- Che, Nico, vamos. Volvamos para allá, para los túneles.-
Nico- No, Karen, si ya vamos a salir, es un rato nomás.-
Karen- Entonces me voy sola.-
Agustina- ¿Sos loca, nena? Si te metés ahí te vas a perder otra vez. Mirá si te perdés y no
aparecés mas.-
Guille- Capaz que pasás a otra dimensión.-
Karen- ¿Eh?-
Guille- Claro, te perdés y aparecés en otra dimensión. En una película que ví el otro
día,...-
Diamela- Cortala , Guille.-
Guille- No, digo. Puede pasar. Suponete que aparece en otro año , o que sale a algún
lugar raro...-
Diamela- Basta , Guille. Terminala. No te asustes, Karen. Pero es mejor que esperen acá.
Vamos, Guille, apurate, nos acostamos pronto y....-

Con un ruido chirriante se abre la puerta del sótano. Abril aparece en la punta de la
escalera.

Abril- (con miedo) ...¿Guillermo?... ¿Sos vos, Guille? ....- (empieza a bajar)

Los chicos se esconden.

Abril- ¿Quien anda ahí?.... ¿Diamela?.....¿Guille?....-

Alguno de los chicos se mueve y se escucha caer un objeto.

Abril- ¿Pero ...quien está acá?- (Abril toma un fierro como para defenderse)

Lejana, se escucha la voz de Alejandrina, llamando a sus hijos.

Abril- Eh?!....-
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Agustina- (apareciendo) Mamá!!-

Abril- Ay! Pero quie...?-
Diamela- (apareciendo)- No te asustes , má.-
Agustina- ¡Mamá!-
Nico- (apareciendo) Sos tonta, Agus, nos descubriste...-
Abril- ¡Diamela! ¿Que es esto? ¿Quienes son...?-
Diamela- Lo que pasa , mami, es que....-
Guille- (apareciendo junto con Karen) No llorés, nena!...Es mi mamá.-
Abril- Pero Guille! ¿De donde salieron estos chicos? ¿Que hacen acá?-
Nico- (gritando en la puertita) ¡Mamá!! ¡¡Mamá!! ¡Acá, má!-
Guille- Ellos son....-
Abril- ¿No estaban en tu cumpleaños, no , Diamela? ...-
Diamela- No, mamá, estabamos haciendo otro cumpleaños acá, con ellos, porque...-
Guille- Estos son los chicos del sótano, má.-
Abril- ¿De donde salieron?... ¿Quiero decir...como entraron? ¡Oíme Diamela: quiero
saber quienes son estos chicos!-
Nico y
Karen- ¡¡Mamá!!-
Abril- ¡Silencio, caramba! Basta de gritar. ¿Que hacen acá?-
Agustina- Nosotros nos perdimos, señora , y entonces vinimos acá y Guille nos encontró y
me trajo pizza, que estaba muy rica , y...-
Nico- Callate, Agus.-
Abril- ¿Los encontraste? Guille, donde los encontraste?-
Guille- Acá , mamá.-
Abril- Esto no va a quedar así, Guillermo. Vos y tus travesuras me tienen cansada. Vas
a ver cuando papá llegue de viaje.-
Diamela- No hizo nada malo, mamá.-
Abril- Vos no te metás. ¿Te parece lindo, el día de tu cumpleaños? ¿Con tu mejor
vestido, metida acá, en esta mugre?-
Karen- Viste Guille, te dije que estaba todo mugriento...-
Abril- A ver: ¿Quienes son estos chicos?-
Nico- Yo soy Nico, señora, y estas son mis hermanitas, Agus y Karen...(en este
momento se escucha la voz de Ale, parece mas cercana)....(Nico corre a la
puertita) ¡Mamá! ¡Acá estamos, má!-
Abril- Pero que pasa? Hay alguien escondido ahí?-
Guille- No, mamá. Dejame que te cuento. Resulta que ahí hay una puerta que nunca la
habíamos visto, que da a unos túneles que...-
Abril- ¿Que puerta? Guillermo, no empieces otra vez con tus mentiras!-
Nico- Es cierto , señora. Nosotros vinimos por ahí, de los túneles. Y parece que por
ahí anda mamá buscándonos.-
Diamela- Mirá , mamá, vení, acá esta la puertita.-
Abril- A ver... a ver... Ajá, una puertita. ¿A donde dá esta puerta? Nunca hubo una
puerta acá.... Nunca la ví...-
Karen- Da a los túneles, señora, ya le explicó Guille.-
Abril- ¿Y estos chicos salieron de ahí?-
Guille- Claro, má. Se perdieron y aparecieron acá.-
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Abril- Y ustedes se juntan con ellos acá abajo... Andá a saber quienes son. Por ahí nos
quieren ocupar la casa. O son ladrones. ¿Porqué no me avisaste, Guille? Ya
hace rato que hubieramos llamado a la policía.-
Karen- ¡¡La policía?? Yo me voy, Nico!-
Nico- Pará, Karen.-
Agustina- Nosotros somos buenos, señora.-
Abril- Sí, sí... pero esto lo vamos a aclarar. No se pueden meter en la casa de la gente
así como si nada.-
Diamela- Es que se perdieron, má.-
Abril- Diamela, vos andá a llamar a la policía. Yo los voy a vigilar.-
Diamela- Pero mamá...-
Abril- Vas , agarrás el teléfono y llamás.-
Guille- No vayas , Diamela-
Abril- ¡Guillermo! ¡Usted se calla! Vamos, Diamela.-
Diamela- Mamá, estos chicos no hacen nada, son ...están perdidos, nada mas.-
Abril- No importa, si se perdieron , la policía los va a llevar a la casa.-
Diamela- Mamá...-
Abril- ¿Que querés que haga? ¿Nos invaden la casa y querés que me quede tranquila?-

Mas cerca, la voz de Ale llamando: ¡Chicos! ¡Nico!...

Nico- Es mi mamá, nos está buscando.-

Guille- (asomándose a la puertita con la linterna) ¡Por acá, señora!-
Abril- ¡¡Guillermo!! ¡Cerrá eso! ¿Que estás haciendo?!-
Guille- Es la mamá de ellos. La llamo.-
Abril- ¡Pero lo único que faltaba! ¿Te parece poco con los que ya se nos metieron?
¡Cerrá eso! Trabalo con algo, que no entre mas nadie. Diamela, te dije que
vayas a llamar a alguien, apurate!-
Karen- ¿Nos van a matar, Nico?-
Nico- No seas boba, Karen.-
Diamela- Mirá, mamá, estás asustando mucho a esta nena. ¿No te dá lástima, pobrecita?-
Abril- Yo... No sé. Tu padre está de viaje y... (a Karen)Vos no te asustes, nena... una
vez que se aclare esto los van a llevar a su casa.-

La voz de Ale, muy cerca: ‘Agustina!”

Agustina- ¡Acá estoy , mamá! ¡Vení rápido que hay una señora muy mala!!-
Guille- Dejame ver, mamá, me parece que está por acá nomás.-
Abril- Ni se te ocurra abrir, eh? (se dirige a la puertita y la traba con cosas)-
Diamela- Es la madre de ellos, mami, dejá que los encuentre y...-
Abril- Te dije que fueras a llamar a la policía, aunque sea avisale a algún vecino. Andá
a llamarlo a don Gutierrez!!-

Ruidos en la puertita, como si quisieran abrir.

Nico, Karen y Agustina gritan al unísono: ¡Mamá!!
Voz de Ale-Chicos! ¡Acá estoy!-
Nico- Mamá, estamos acá!-
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Ale- Abran. ¿Se quedaron encerrados?-

Abril- ¡Diamela! ¡Llamá a la policía!-
Diamela- Pero mamá...-
Abril- (la lleva a la escalera) ¡Subí te digo!-

En este instante y aprovechando la distracción de Abril, Guille corre y abre la puertita.

Abril- ¡Guillermo! ¿Que hacés, tonto?!-

Ale- (entrando, con un casco) ¡Hijos!...¿Están bien?-
Karen , Agustina y Nico corren a abrazarla.

Abril- ¡Señora! Ustedes están invadiendo una propiedad privada. Esta es mi casa. Le
ruego que se retire ya mismo.-
Karen- Nos secuestró, mamá!-
Ale- ¿Que!?-
Agustina- Es remala, mami, nos tenía cautiverios.-
Abril- No... no, ustedes se metieron en mi casa.-
Ale- ¿Usted vive acá!?-
Abril- Sí, señora.-
Ale- ¿En los túneles!?-
Abril- ¿Que dice? Este es el sótano de mi casa.-
Ale- ¿Pero como es que se comunica con los túneles?-
Abril- ¿Que túneles dice usted?-
Ale- Los túneles históricos. –
Abril- No sé... no sé...-
Ale- Los chicos fueron a recorrer los túneles y se perdieron.-
Agustina- Pero fue sin querer, mamá.-
Ale- Ya sé, querida.-
Abril- Mi hija ya fue a llamar a la policía.-
Ale- ¿A la policía? ¿Para qué?-
Abril- ¿Como para qué? Para que los saquen de mi casa.-
Ale- Bueno... pero si nosotros lo que queremos es irnos...-
Abril- Y vayanse, entonces.-
Ale- Bueno. Por donde se sale?-
Abril- Por donde vino.-
Ale- No, digo, la salida para la calle.-
Abril- De ningun modo. Se van por donde entraron.-
Ale- Es imposible. Ni sé como llegué hasta acá. Es un laberinto todo oscuro.-
Abril- Ni se imagine que los voy a dejar entrar a mi casa.-
Ale- Porqué no , señora?-
Agustina- ¿Viste que es mala, má?-
Guille- Dejalos salir, mamá. Así vuelven a jugar otro día.-
Abril- Que se yo quienes son, Guillermo. Pueden ser ladrones.-
Ale- ¿Ladrón , yo? Señora, yo trabajo en el ministerio de Justicia, para que sepa. Soy
abogada.-
Abril- ¿Sí? ....Mire que casualidad.-
Ale- ¿Que?-
 14

Abril- Tengo una prima segunda que trabaja en el Ministerio de Justicia, pero hace
mucho que no la veo.... Tambien es abogada.-
Ale- ¿Y como se llama?-
Abril- Alejandrina.-
Ale- Pero si soy yo...-
Abril- ¿¡Sos vos, Ale?!-
Ale- ¡¡Pero si vos sos Abril!!-
Abril- Uy, que susto me pegaste, che! Esto está tan oscuro que no te reconocí...-
Ale- Hace mucho que no nos vemos...¿Este es tu hijo?-
Abril- Sí, el es Guillermo, el mas chico. Diamela , la mas grande es la que fue a llamar
a la policía... ¡Uy, la policía!-
Ale- Pero que cosa, mirá que manera de reencontrarnos.-
Abril- Sí, parece joda, no? Bueno, vamos a subir antes que esta chica llame a la
policía.-
Ale- Dale. No veo la hora de salir de acá abajo. Pasé un susto terrible.-
Abril- Si vos te asustaste imaginate los chicos, pobrecitos. – (acaricia a Karen y
Agustina, pero estás se asustan) No tengan miedo. Vamos. Ah, sabés que hoy es
el cumple de Diamela. Quedaron unas pizzas, las calentamos y comen algo.
(empieza a salir)
Karen- Vamos a casa, má.-
Agustina- Pará nena, que hay pizza.-

La puerta del sótano se abre con violencia, entra una luz fuerte y una voz dice: “Nadie se
mueva, policía!”
Los chicos se aterrorizan, Ale y Abril se miran , tentadas.

FIN