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PRESENTACION

FACULTAD DE CIENCIAS QUÍMICAS

LICENCIATURA EN FARMACIA

MATERIA: BIOQUÍMICA II (METABOLISMO)

TEMA: MUTAGENESIS

CATEDRATICO: PAOLA HERNANDEZ CARRANZA

MATRICULAS:

201422059

NOMBRE DEL ALUMNO:

DIANA CAROLINA MENDEZ BANDA

YURIDIA LÓPEZ RAMÍREZ

FECHA DE ENTREGA: 22 DE NOVIEMBRE DE 2017

FECHA LIMITE DE ENTREGA: 22 DE NOVIEMBRE DE 2017

OTOÑO 2017
En genética se denomina mutagénesis a la producción de mutaciones sobre
ADN, clonado o no. De realizarse in vitro, dicha alteración puede realizarse al
azar (mutagénesis al azar), sobre cualquier secuencia, o bien de forma
dirigida (mutagénesis dirigida) sobre una secuencia conocida y en la
posición de interés. En el caso de realizarse in vivo, sobre organismos y no
sobre ADN clonado por tanto, se realiza a gran escala y sin conocimiento de
secuencia, empleando para ello sustancias denominadas mutágenos.

Mutagénesis es aquella modificación del material genético que resulta


estable y transmisible a las células hijas que surgen de la mitosis. Las
lesiones generadas por estos agentes mutagénicos pueden resultar en
modificaciones de las características hereditarias o la inactivación del ADN.
Cuando el ADN afectado corresponde a células de la línea germinal se
relacionan con la aparición de enfermedades hereditarias, mientras que las
mutaciones que se dan en las células somáticas están relacionadas con
enfermedades degenerativas y procesos carcinogénicos. La mutagénesis
tiene como objetivo analizar las mutaciones inducidas por agentes físicos,
químicos y biológicos, analizar sus interacciones y mecanismos de acción.
La razón para aislar y caracterizar una mutación es poder saber sus
consecuencias, es decir su fenotipo. En otras palabras las propiedades de
una función normal puede ser aprendida por medio de las consecuencias de
la perturbación o la eliminación de un solo gen o un elemento genético.

Los mutágenos según lo establecido en 1983 por la comisión internación


para la protección contra mutágenos y carcinógenos, son aquellos agentes
que tienen afinidad para interactuar con el ADN, es decir agentes que
ocasionan daño al material genético y componentes asociados en dosis
subtóxicas.

Historia

Las investigaciones sobre mutaciones se iniciaron en 1927 con los trabajos


de Müller acerca de los efectos de los rayos X sobre Drosophila
melanogaster. Posteriormente, fueron observados los efectos mutagénicos
de los rayos X sobre las plantas, así como la mutagenicidad de la luz
ultravioleta. No obstante, la primera evidencia inequívoca de un caso de
mutagénesis química se da en el año 1942, cuando Auerbach y Robson
demostraron los efectos tóxicos del gas mostaza sobre Drosophila. El
desarrollo ocurrido en el área de Genética molecular a partir de los trabajos
de Watson y Crick, donde el 1953 elucidaron la estructura tridimensional del
ADN, el código genético y la síntesis de proteínas, permitieron investigar
acerca de los mecanismos de la mutagenésis. Entonces se entendió que un
simple cambio de una base podría dar lugar a la aparición de un nuevo
fenotipo y, por ello, se comenzó a investigar intensamente sobre los efectos
de los productos químicos en el ADN. Hacia finales de la década de los
sesenta se tiene el convencimiento de que el ser humano está expuesto a un
gran número de compuestos químicos, que pueden tener un efecto
mutagénico, que pueden ser un peligro para la salud y la de los
descendientes. Ames en 1979 introdujo el ensayo de mutagenicidad en
Salmonella typhimurium, e identificó varios contaminantes químicos
capaces de causar mutaciones en bacterias y cáncer en mamíferos.
Finalmente se vio que aparte de los agente físicos y químicos, también los
agentes biológicos como virus, bacterias y parásitos generan mutágenos
cuando ocasionan infecciones crónicas.

Principalmente fueron dos factores los que impulsaron el rápido desarrollo


de la mutagénesis en la década de los setenta: Primero, disponer de
bacterias genéticamente definidas con mutaciones en genes particulares, y
segundo, el empleo de sistemas de activación metabólica in vitro, que
permitió la obtención de metabolitos electrofílicos reactivos con el ADN.

Mutación espontánea

Se produce de forma natural o normal en los individuos. Las principales


causas de las mutaciones que se producen de forma natural o normal en las
poblaciones son tres:

Errores durante la replicación:

-La tautomería: las bases nitorgenadas se encuentran habitualmente en su


forma cetónica y con menos frecuencia aparecen en su forma tautomérica
enólica o imino. Las formas tautoméricas o enólicas de las bases
nitrogenadas (A*, T*, G* y C*) muestran relaciones de apareamiento distintas:
A*-C, T*-G, G*-T y C*-A. El cambio de la forma normal cetónica a la forma
enólica produce transiciones. Los errores en el apareamiento incorrecto de
las bases nitrogenadas pueden ser detectados por la función correctora de
pruebas de la ADN polimerasa III.

-Las mutaciones de cambio de fase o pauta de lectura: se trata de


inserciones o deleciones de uno o muy pocos nucleótidos. Según un modelo
propuesto por Streisinger, estas mutaciones se producen con frecuencia en
regiones con secuencias repetidas.

-Deleciones y duplicaciones grandes: las deleciones y duplicaciones de


regiones relativamente grandes también se han detectado con bastante
frecuencia en regiones con secuencias repetidas. En el gen lac I de E. coli se
han detectado deleciones grandes que tienen lugar entre secuencias
repetidas. Se cree que estas mutaciones podrían producirse por un sistema
semejante al propuesto por Streisinger ("Apareamiento erróneo deslizado")
o bien por sobrecruzamiento desigual. Del sobrecruzamiento desigual
hablaremos más adelante en el curso.

Lesiones o daños fortuitos en el ADN:

-Despurinización: rotura del enlace glucosídico entre la base nitrogenada y


el azúcar al que está unida con pérdida de una Adenina (A) o de una Guanina
(G). Como consecuencia aparecen sedes Apurínicas. Existe un sistema de
reparación de este tipo de lesiones en el ADN. Este tipo de lesión es la más
recurrente o frecuente: se estima que se produce una pérdida de 10.000 cada
20 horas a 37ºC.

-Desaminación: consiste en la pérdida de grupos amino. La Citosina (C) por


desaminación se convierte en Uracilo (U) y el Uracilo empareja con Adenina
(A) produciéndose transiciones: GC→AT.

-Daños oxidativos en el ADN: El metabolismo aeróbico produce radicales


superoxido O2, peróxido de hidrógeno H2O2 e hidroxilo. Estos radicales
producen daños en el ADN, y una de las principales alteraciones que
originan es la transformación de la Guanina (G) en 8- oxo-7,8-dihidro-
desoxiguanina que aparea con la Adenina (A).

Los elementos genéticos transponibles: Los elementos genéticos


transponibles son secuencias de ADN que tienen la propiedad de cambiar de
posición dentro del genoma, por tal causa también reciben el nombre de
elementos genéticos móviles. Por tanto, cuando cambian de posición y
abandonan el lugar en el que estaban, en ese sitio, se produce un deleción o
pérdida de bases. Si el elemento transponible estaba insertado en el interior
de un gen, puede que se recupere la función de dicho gen. De igual forma, si
el elemento genético móvil al cambiar de posición se inserta dentro de un
gen se produce una adición de una gran cantidad de nucleótidos que tendrá
como consecuencia la pérdida de la función de dicho gen. Por consiguiente,
los elementos genéticos transponibles producen mutaciones.

Mutación inducida

Las mutaciones inducidas ocurren cuando se expone un organismo a un


agente físico o químico, denominado mutágeno. Pueden ser producidas por:
Agentes físicos: Radiaciones ionizantes 3D rayos X que producen los
siguientes efectos a nivel celular:

 Efectos genéticos: alteraciones en los genes.

 Efectos citogenéticos: alteraciones en los cromosomas: roturas


cromosómicas y translocaciones.

 Efectos fisiológicos: alteraciones en las enzimas y hormonas.

Rayos alfa, beta y gamma de fuentes radiactivas (radio, uranio, cobalto),


rayos cósmicos (disminución de la capa de ozono), radiaciones no
ionizantes =3D rayos U.V. y choque térmico.

Agentes químicos: Análogos de bases de ácidos nucleicos (cafeína),


agentes que atacan al ADN (formalina), nitrógeno, gas mostaza, colorantes
de acridina (proflavina, acridina), carcinógenos (benzopireno), sulfato de
cobre, ácido bórico, ácido fórmico, colchicina, uretano, etc. Agentes
biológicos: Virus, bacterias.

Agentes Mutagénicos que afectan

Radiaciones: Las investigaciones sobre las radiaciones han tomado la


atención de los científicos desde fines del siglo XIX. La primera evidencia de
que un agente externo podía aumentar el número de mutaciones fue en 1927
por Hermann Müller, quien demostró los efectos mutagénicos de los rayos X
en la mosca de la fruta (Drosophila melanogaster). Todas las radiaciones
pueden ser agentes mutagénicos con tal de que posean energía suficiente
para entrar en contacto con el ADN. Los rayos cósmicos que llegan del
espacio, formados por una mezcla de protones y de fotones de muy alta
energía, son responsables de muchas mutaciones de las que denominamos
“espontáneas”. Tanto la luz ultravioleta (UV) como las radiaciones ionizantes
se han utilizado en estudios de mutagénesis en bacterias; aunque los
mecanismos de mutagénesis son bastante diferentes para cada tipo de
radiación. Uno de los agentes mutagénicos más efectivos en bacterias es la
radiación UV de longitud de onda corta. La longitud de onda efectiva para la
mutagénesis está comprendida entre los 200 y 300 nm. El mecanismo más
importante de la acción de la luz UV es la formación de dímeros (timina-
timina; timina-citosina; citosina-citosina) entre pirimidinas adyacentes, lo
que incrementa enormemente la probabilidad de que durante la replicación,
la polimerasa de ADN inserte un nucleótido incorrecto.

Las radiaciones ionizantes son formas de radiación más potente, e incluyen


rayos de longitud de onda corta, como los rayos X, emisiones de elementos
radioactivos, y rayos ϒ. Estas radiaciones causan la ionización del agua y de
otras sustancias; produciéndose indirectamente efectos mutagénicos
debido a esta ionización. Entre los derivados químicos formados por la
radiación ionizante se encuentran los radicales libres, siendo el más
importante el radical hidroxilo (OH–). Los radicales libres reaccionan en la
célula con macromoléculas, como el ADN, y las alteran produciendo
rupturas que dan lugar a rearreglos cromosómicos.

La tasa de mutaciones inducidas depende de la dosis de y de la frecuencia


de aplicación. Es decir, el efecto de un mutágeno es mucho más perjudicial
si una misma dosis de radiación alta es administrada todo en una sola vez
que si se administra a lo largo del tiempo radiaciones bajas. Esto es debido a
que, en el primer caso, los mecanismos de reparación del ADN se
encuentran saturados. Igualmente, los tejidos irradiados son más o menos
sensibles según su tasa de replicación que tengan.

Agentes químicos: La genetista escocesa Charlotte Auerbach fue la primera


en demostrar, en la década de 1960, el peligro que representaba la utilización
de un agente químico (el “gas mostaza”) para las personas, debido a su
fuerte actividad mutagénica. Hoy en día, se conocen varios productos
químicos que son mutagénicos, clasificándose según su modo de acción en:

-Análogos de bases: Se incorporan en el ADN (durante la replicación) en


lugar de las bases correspondientes, debido a su alta similitud. Cuando uno
de estos análogos de bases se incorpora en el ADN, la replicación sigue
normalmente, aunque a veces ocurren errores de lectura que resultan en la
incorporación de bases erróneas. Algunos ejemplos de estos agentes son, la
6-amino purina que se incorpora en el ADN en lugar de las bases “oficiales”
(A, T, G y C), lo que provoca transversiones o transiciones en las futuras
replicaciones del ADN.

-Agentes intercalantes: Son moléculas planas que se insertan entre dos


pares de bases del ADN, separándolas entre sí. Durante la replicación, esta
conformación anormal puede conducir a microinserciones o
microdelecciones, originando mutaciones por corrimiento de lectura.
Ejemplos de estos agentes intercalantes son el naranja de acridina, el
bromuro de etidio, la proflavina y el 4,5',8-trimetilpsoraleno (TMP).

-Agentes que reaccionan con el ADN: Son agentes químicos que reaccionan
directamente con el ADN que no se está replicando, ocasionando cambios
químicos en las bases al momento de la replicación. Entre ellos se encuentra
el ácido nitroso (HNO2), la hidroxilamina (NH2OH) y los agentes alquilantes.

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