Carmen acude a consulta acompañada de su madre porque presenta déficit en el
control de esfínteres desde hace seis meses, tanto por el día como por la noche, habiéndose detectado periodos significativos de control vesical. Carmen es una niña de 6 años escolarizada en primer año de primaria. Es la menor de dos hermanas (hermana de ocho años). Según la entrevista con la madre, la niña presenta un rendimiento académico aceptable y una adecuada relación con sus compañeros, no detectando rechazo por parte del resto de la clase. La madre le define como una niña muy dócil e integrada en el ambiente escolar y familiar. La niña se muestra consciente de su problema y con ganas de solucionarlo, porque comprende que éste le dificulta realizar ciertas actividades, como “ir de paseo” o “dormir fuera de casa”. Con respecto a los progenitores, el padre tiene 39 años y se muestra muy poco participativo y colaborador con la terapia, a diferencia de la madre, de 36 años, que se encuentra totalmente implicada en el tratamiento.