Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Yo te digo: Galicia es un
mundo. Cada tierra es como si fuera el mundo entero. Podrás
recorrerla en poco tiempo de norte a sur y de este a oeste;
podrás volver a recorrerla una y otra vez; no conseguirás andarla
del todo. Y cada vez que la recorras, encontrarás cosas nuevas.
[...] Puede ser ella pequeña en extensión; pero en hondura,
en entidad, es tan grande como quieras." VICENTE RISCO
Cubertas: Barro Salgado Santana [Grupo Revisión Deseño]
www.turgalicia.es
el Camino
de Santiago
BRUSELAS
5
ARZÚA ARZÚA
SANTA IRENE O PINO
BERLIN
El Camino Francés
ARCA O PINO PARIS LUXEMBURGO
MONTE DO GOZO SANTIAGO DE COMPOSTELA
GALICIA
VIENA 6
El Camino del Norte
ALBERGUES DEL CAMINO DEL NORTE
SITUACIÓN AYUNTAMIENTO
LISBOA MADRID
ROMA
14
RIBADEO RIBADEO
LOURENZÁ LOURENZÁ La Ruta de la Plata
MONDOÑEDO
VILALBA
MONDOÑEDO
VILALBA ATENAS 16
BAAMONDE BEGONTE
SOBRADO DOS MONXES SOBRADO El Camino Portugués
18
ALBERGUES DEL CAMINO PRIMITIVO (CAMINO DE A FONSAGRADA)
SITUACIÓN AYUNTAMIENTO
Las Rutas Marinas
Autopista, Autovía
O CÁDAVO
LUGO
BALEIRA
LUGO
Carretera Nacional
Ferrocarril
20
Aeropuerto Llegada
ALBERGUES DE LA VÍA DE LA PLATA 22
64
2
SITUACIÓN AYUNTAMIENTO FERROL 634
0
64
A-9
BENDOIRO LALÍN
CAMPING MEDELO SILLEDA SANTIAGO 547 A-6
52
5
640
ALBERGUES DEL CAMINO PORTUGUÉS 640 N-VI
SITUACIÓN AYUNTAMIENTO
540
TUI TUI
550
541
525
TEO TEO
VIGO 120
A-52
525
BRUMA MESÍA
MIÑO MIÑO 532
NEDA NEDA
2 3
La Guía del Camino imitaciones en metal, con
de Santiago, de Aymeric un monopolio otorgado
Picaud, lo dice con claridad por el Arzobispo y ratifica-
francesa: “Hay cuatro rutas do por los papas.
que llevan a Santiago y se El peregrino o el viajan-
reúnen en una sola en te moderno, (no motoriza-
Puente la Reina, en territo- do) que recorre el camino,
rio español; [...] a partir de no suele portar el atuendo
allí un solo camino condu- clásico, pero algo le distin-
ce a Santiago”. De Arles, gue del simple caminante
cerca de Marsella, partía la Cruceiro del inicio del Camino de Santiago en Roncesvalles cuando baja el puerto de Indicadores del Camino
primera, la única que atra- Poio, por Triacastela, o
vesaba los Pirineos por
Somport. De París, Vézélay
En Marcha atraviesa la montaña de
Arzúa y Melide.
Hacia Santiago
y Le Puy partían las otras Antes era por cumpli-
tres, que entraban en miento de un voto, para El viajero moderno que recorre las carreteras del norte
Navarra por Roncesvalles. librarse de una penitencia, español desde los Pirineos a Galicia, encuentra con fre-
Es-tos eran los clásicos ca- para cumplir el deseo de un cuencia el letrero de: Camino de Santiago, acompañado
minos por los que discurrí- difunto, incluso por imposi- del número de kilómetros que le separan de Santiago de
an intermitentemente los ción judicial. Hoy es más Compostela. Las indicaciones están pensadas para los que
peregrinos de Compostela. frecuente hacerlo para revivir viajan en turismo y están colocadas en las rutas más próxi-
Buen calzado, ropa cor- nuestro pasado, descubrir mas al primitivo camino. Las sucesivas modernizaciones de
ta y esclavina. Bastón para nuestra cultura y nuestra his- la red viaria, desde los antiguos caminos reales a las carre-
apoyo y defensa. Calabaza toria, admirar la armonía del teras nacionales o autopistas modernas, han borrado en
para el agua o el vino. Un románico o, simplemente, muchos trechos el camino que hollaron durante siglos los
pequeño saco y un sombre- para recrearse en la contem- peregrinos. Pero algunas veces las actuales carreteras no
ro de ala ancha. Todo ello Peregrino plación de los paisajes de la siguen exactamente el Camino medieval. Es entonces
configura la típica estampa Tierra de Santiago. cuando los practicantes del “turismo lento”, a pie, a caba-
del peregrino desde la Edad Media. La concha de “vieira”, En tiempos pasados, al regresar de Compostela, se ofre- llo o en bicicleta, pueden rastrear el primitivo trazado. Este
que ya aparece en los caminantes de la mitología pagana, cía el vestido, con todo el equipo de viaje, a algún santua- trazado original conserva en muchos trayectos el empedra-
es el principal recuerdo que traen los peregrinos de Galicia, rio o se reservaba para asistir a las procesiones vestido con do, los hitos del camino, los antiguos hospitales, las ermi-
en cuyas costas abunda este molusco. Luego se cose al él. Ahora del Camino de Santiago se guardan álbumes de tas-refugio, las fuentes, las cruces, los antiguos puentes...
sombrero, al saco y a la esclavina, hasta convertirse en el fotos, una concha de vieira, un botafumeiro de plata y,
emblema y en salvoconducto del peregrino. En Santiago sobre todo, un recuerdo inolvidable de todo lo que se vio
existía el barrio de los Concheiros, que aún conserva este y se vivió.
nombre. Era donde se vendían las conchas de vieira, o sus
4 5
Sea cual sea el motivo
de nuestro viaje a Galicia,
si lo queremos hacer si-
guiendo el Camino de
Santiago, entraremos en
tierras gallegas por la N-VI,
subiendo el puerto de
Pedrafita. También lo po-
demos hacer recorriendo el
antiguo trazado, de gran
belleza paisajística, por hospedarse, haciendo la
Vega de Valcarce y Herre- reserva con suficiente an-
rías. Los peregrinos medie- telación. En el santua-
vales lo hacían por un rio se expone el Santo
camino que atravesaba las Grial, símbolo heráldico
míticas aldeas de A Faba y de Galicia, cuyas leyendas
a Lagoa de Castilla, hasta inspiraron el argumento
ver, poco antes de llegar al
Cebreiro, el mojón ilustra- El Camino Francés literario del Parsifal de
Wagner. En el poblado de
do que marca el límite de O Cebreiro se conserva
Galicia, a 152 Km de Santiago por el camino peatonal. un interesante conjunto de “pallozas”, viviendas prerroma-
En O Cebreiro, la “más abrupta de las montañas del nas habitadas hasta no hace mucho tiempo. Una de ellas
Camino francés”, como dice Aymeric Picaud, fundó el está convertida en Museo Etnográfico y otras acomodadas
santo conde Giraldo de Aurillac, poco antes de terminarse para atender a los peregrinos.
el siglo IX, un hospital para atender a los peregrinos, sobre Los doce kilómetros que siguen discurren entre las sie-
todo a los franceses. Se convirtió luego en monasterio be- rras de Os Ancares y O Courel, con magníficos paisajes de
nedictino y no fue abandonado por estos monjes hasta el montaña, formando el tramo de carretera más alto de
siglo XIX. La iglesia, prerrománica, es el templo más anti- Galicia. Pueblos casi abandonados como Liñar do Rei, hoy
guo de la ruta jacobea conservado en su integridad. En el Liñares. Veiga de Forcas, cuna de los caballeros de la
hospital, hoy Mesón de San Xiraldo de Aurillac, es posible Orden de Santiago. Hospital, recuerdo del que fundó la
O Cebreiro
Santuario de O Cebreiro
Os Ancares Cruceiro
Santo Grial
O Courel Pallozas
6
Monasterio de Samos
condesa Exilo. Fonfría, famosa por una fuente que brota a monasterios gallegos, fundado por San Martín Dumiense
la orilla del Camino y un hospital desaparecido, que ofre- en el siglo VI. La actual carretera sí pasa por Samos, lo que
cía gratuitamente al caminante fuego, sal, agua y una ca- nos obligará, con sumo gusto, a conocer este interesante
ma con dos mantas. cenobio benedictino y la humilde capilla prerrománica del
Sobrepasado el puerto de Poio, el paisaje se va hacien- Ciprés. Las nuevas edificaciones son de los siglos XVII y
do más suave y risueño. Aparece la alta torre de la iglesia XVIII, y la escalinata de la fachada sirvió de ensayo al ar-
de Triacastela, fin de la undécima etapa, la más corta (47 quitecto gallego Fernando de Casas para la construcción de
kilómetros) pero la más dura desde los Pirineos. Tres casti- la del Obradoiro de Santiago.
llos, tres castros o tres caminos hacia Castilla. No hay La marcha se va haciendo más cómoda y agradable. El
acuerdo en la etimología. El Camino pasaba por delante valle se abre y empieza a desplegarse la fértil y extensa
del templo, con ábside románico, y atravesaba el poblado, vega de Sarria. La villa creció sobre un altozano donde
donde se conserva el portalón del antiguo hospital. tenían su fortaleza los poderosos condes de Lemos y mar-
Triacastela fue la primera villa que levantó un monumen- queses de Sarria. Sólo una singular torre medieval recuerda
to al peregrino. su pasada grandeza. Frente a ella, la iglesia románica del
No pasaba por Samos el Camino Francés, pero eran Salvador y, muy cerca, el antiguo hospital de la Magdalena,
muchos los peregrinos que hacían una pequeña desviación también resisten el paso del tiempo.
de cuatro kilómetros para conocer uno de los más antiguos
8 9
Iglesia de Mirallos
10 11
Cruceiro de San Pedro. Melide
12
Torre de los Andrade. Vilalba
Lagos de Teixeiro
Catedral de Lugo Monasterio de Sobrado dos Monxes
14
Puente romano. Allariz Fuente de Peregrinos
Monasterio de Oseira
Iglesia de
Xunqueira de Ambía
16 17
Los portugueses se sien- porque según la tradición
ten muy orgullosos de ser, encaminaba a los peregri-
desde los orígenes, el pue- nos descarriados hacia
blo más ligado a la cultura Compostela. De Ponte-
del Camino de Santiago y vedra a Caldas de Reis
de poseer una gran varie- es un paseo tranquilo y su-
dad de rutas para enca- gerente. Desde el atrio
minarse hacia el Apóstol. de la iglesia barroca de
Su Camino del Noroeste Perdecanai se domina el
salía de Oporto y apenas valle, donde se pierde el
se separaba de la costa, románico de Agudelo, los
por Viana do Castelo pazos de Curuxal y Casal
y Camiña, entrando en Novo, y resuenan roncas
Galicia por Tui. También en el alto campanario de
salían de Oporto el Arcos da Condesa las cam-
Camino del Lima y el del panas que se funden en la
Norte, que, siguiendo dis- “casa dos campaneiros” de
tintas vías, se unían todos
en Tui, donde la ciudad
El Camino Portugués Badoucos.
De la mansión romana
Iglesia Virgen Peregrina Ayuntamiento de Porriño
Catedral de Tui Iglesia de San Telmo. Tui Castillo de Suotomaior Río Ulla Pontecesures
18 19
Siempre hubo peregri- numental de la “Ciudad
nos que se acercaban a Vieja”. Salían de la ciudad
Galicia desde los puertos por Eirís, contemplando
del norte de Europa por los históricos campos de
mar. Dos eran las rutas Elviña, dominados por el
escogidas que empiezan a castro. A partir de Sigrás,
traer romeros desde el siglo una ondulada ruta, entrete-
XIV a los puertos de Ferrol nida y apacible, sube hasta Iglesia de Santa María de Cambre
Convento de San Francisco. Betanzos
y A Coruña, o a Vilagarcía el Mesón do Vento en la
de Arousa. Hasta 3.000 que dejaron su recuerdo
peregrinos ingleses se regis- Felipe II (en las casas bla-
tran en el puerto coruñés el sonadas de Sarandóns y
año 1434, que acabaría por Poulo) y la reina Mariana
absorber casi la totalidad de de Neoburgo (en el pazo de
estos peregrinos marítimos. Marzoa). Atravesando el
Pero también desembarca- puente románico y gótico
ban en Ferrol, desde donde de Sigüeiro, se acelera el
iniciaban su marcha a pie.
El monasterio de O Couto,
Las Rutas Marinas paso para ver alzarse, desde
Boisaca, las torres de la
con su preciosa iglesia ro- Catedral Compostelana.
mánica de San Martiño de Xubia, reflejándose en la ría de La otra ruta marítima llegaba desde el puerto de
Ferrol, era la primera parada. El de Caaveiro quizás la se- Vilagarcía, penetrando por la Ría de Arousa, la más amplia
gunda, pero con toda certeza atravesaban los puentes me- de las Rías Baixas y la más pesquera. Desde Aguiño y
dievales que construyeron los Andrade: Pontedeume, Ribeira a Rianxo por la orilla norte, desde O Grove a Fachada de Santa María de Cambre
Lambre, Betanzos y O Burgo, donde se unían a la ruta Carril por la ribera meridional, velas y remos –hoy tam- Monasterio de Caaveiro Iglesia de Santa María. Betanzos Iglesia de Santiago de Sigrás
coruñesa, después de atravesar “una de las comarcas más bién motores– recorren la ría para ofrecernos los mejores
hermosas y variadas de Europa” como leemos en la mariscos y pescados. A partir de la isla Cortegada, una
“Crónica General de España” de 1865, con monumen- serie de cruceiros colocados en islotes o a orillas del estua-
tos medievales inolvidables, como los castillos de rio del Ulla marcan el Camino, atravesando las míticas
Pontedeume, el románico de Breamo, Tiobre, Santa María Torres de Catoria y los espacios naturales de las Brañas de
de Cambre y la monumental ciudad de Betanzos. Laíño, hasta llegar a Padrón. Esta ruta marítima también
En Santiago de Sigrás se unían las dos rutas. Los que era seguida por los portu-
venían de A Coruña se habían encomendado al Apóstol gueses, que la celebraban,
en el templo románico de Santiago o en su hermano el precisamente, como la mis-
de Santa María, que agrupan el conjunto histórico y mo- ma que siguieron los discí-
pulos trayendo las reliquias
de Santiago.
Iglesia de
San Miguel
de Breamo.
Pontedeume Torre dos Andrade. Pontedeume Pontedeume Rianxo Torres del Oeste. Catoira.
20 21
Vista general de Santiago de Compostela
Altar Mayor
22
Convento de San Francisco
Puerta Santa. Catedral de Santiago Otros tres edificios, de diversas épocas y estilos, cierran
la plaza. El Colegio de San Xéróme, fundado por el obispo
Fonseca, con una portada románico-ojival. El palacio de
Raxoi, de estilo neoclásico del XVIII, se construyó para
San Martín Pinario seminario de confesores, residencia de niños de coro de la
catedral y casa consistorial de la ciudad. Y el Hospital
Real, mandado construir por los Reyes Católicos para aco-
ger a peregrinos y enfermos es un hermoso ejemplar de es-
tilo plateresco, poco frecuente en Galicia, actualmente
convertido en Parador de Turismo.
La plaza de la Acibechería es la primera que encuentra
el viajero al entrar en Santiago por el Camino Francés. Era
conocida como Puerta del Paraíso, pero en el siglo XVIII
fue sustituida por la actual, de estilo neoclásico, y recibió
el nombre de Acibechería. El arte de la azabachería, estre-
chamente ligado a la Peregrinación, floreció en Santiago
desde el siglo XV. En esta plaza estaban los talleres y los
Hostal de los puestos de venta.
Reyes Católicos
En el lado opuesto, la puerta del brazo meridional del
crucero conserva toda la rica iconografía románica de la
época gloriosa de Compostela. Es la puerta de las
Praterías. A su costado se alza la Torre del Reloj, o la
“Berenguela”, de estilo barroco, como los demás edificios
que rodean esta plaza. Detrás de la catedral se extiende la
amplia plaza de la Quintana. La Puerta Santa, que da a
esta plaza, sólo se abre el Año Santo Compostelano, cuan-
do la fiesta del Apóstol, 25 de julio, coincide en domingo.
Fachada del
Obradoiro.
Catedral de
Santiago Pazo Raxoi
25
Los edificios, torres y fachadas, que se fueron añadiendo la que se abren diez capillas absidales, un abigarrado altar
a lo largo de los siglos, ocultan la gran catedral románica, barroco rodea la imagen románica del Apóstol, al que se da
comenzada a construir el año 1075 por disposición del el ritual abrazo. Bajo el altar se halla la cripta con el arca,
obispo Diego Peláez. El Pórtico de la Gloria, con sus dos- donde se conservan los restos mortales de Santiago.
cientas figuras maravillosamente talladas, constituye una Antes de recorrer el entrañable y sugerente entramado
de las más valiosas obras del arte románico universal. La del núcleo urbano que rodea la catedral, con sus monu-
nave principal es un modelo de armonía, sobriedad y gran- mentos religiosos y civiles, recogeremos la “Compostela”,
diosidad. En la del crucero, contemplamos un espectáculo documento que certifica la peregrinación. Sólo se concede
insólito: un gigantesco incensario, el “Botafumeiro”, de a los que documentalmente prueban su venida a Santiago a
metro y medio de altura y cincuenta kilos de peso, oscila pie o a caballo desde más de 100 kilómetros de distancia,
de extremo a extremo de la nave transversal en las grandes más de 150 en bicicleta, con espíritu de piedad o inquietud
solemnidades. La ceremonia es tan antigua como la misma espiritual. Se entrega en la Casa do Deán, n.º 1 de la Rúa
catedral y está descrita en la Guía del Peregrino de Aymeric do Vilar, edificio barroco que es también lugar de acogida
Picaud del siglo XII. En la cabecera, con hermosa girola en de peregrinos.
26
El viaje a Santiago de Si la ruta de Santiago
Compostela, como peregri- a Fisterra se hace por la
no o turista, se completa costa, el viajero encontra-
con la visita de Padrón y rá en Noia una pequeña
Fisterra, lugares estrecha- Compostela. Fue precisa-
mente ligados a la peregri- mente un arzobispo fran-
nación. A Padrón se llega cés, Berenguel de Landoire,
atravesando la comarca de el que, mal recibido por los
Amaía “toda Galicia en santiagueses, estableció allí
grandiosa síntesis”, donde su residencia habitual,
podemos ver la casa de construyendo iglesias y pa-
Ortoño donde pasó su in- lacios. En la boca de la ría
fancia Rosalía de Castro, se agrupa el caserío de la
aunque es en Padrón don- villa marinera de Muros, y
de veremos la que habitó en seguida la costa abierta
los últimos años de su vida, hacia Fisterra. Una costa
convertida en museo. con amplios arenales abier- Costa da Morte
Padrón es una villa mo-
derna crecida en el lugar Fisterra tos al océano y elevados
montes a la espalda. El más Santuario Virxe da Barca. Muxia
donde, según la tradición, impresionante por sus altos
atracó la barca que traía de y misteriosos peñascos de
Jerusalén los restos del granito rosado es el Monte
Apóstol Santiago. La barca Pindo, el Olimpo Celta de
fue atada a una piedra, “o los gallegos. Y, por fin, la
pedrón”, en realidad un ara villa de Fisterra, alrededor
romana que se puede ver de su plaza del Ara Solis,
bajo el altar de la iglesia de nostálgico recuerdo del al-
Santiago. Padrón, con el tar levantado por los roma-
nombre de Iria Flavia, fue nos para adorar la puesta
una de las grandes metró- del sol. Iglesia de Santa Comba. Carnota Iglesia de San Martiño. Noia
polis romanas de Galicia. El camino que lleva al
Encontraremos también re- extremo del cabo arranca
cuerdos de Santiago en la Fuente de Santiago y en junto a la iglesia románica de Santa María das Areas, don- Iglesia de
Santiaguiño do Monte, donde una ermita y unos conjun- de se conserva la imagen del Santo Cristo da Barba Santa María das Areas.
Fisterra
tos megalíticos recuerdan la primera predicación del Dourada, de incontables leyendas. En la parte más alta del
Apóstol. monte, había una ermita y unas piedras talladas que daban
La condición de “fin de la tierra” es también un alicien- al lugar un carácter sagrado. Ahora un faro orienta el in-
te para emprender el Camino de Santiago, pues todo viaje- cesante desfilar de navíos por uno de los lugares de más
ro desea llegar siempre más allá, hasta el final del camino. Ya intenso tráfico marítimo del mundo. Hoy ya no estamos
el historiador romano Lucius Florus cuenta como los legio- en el fin de la tierra, pero sí en el fin del Camino de
narios de Roma contemplaron con temor sagrado la puesta Santiago. Sólo falta regresar. Regresar de Santiago conten-
de sol sobre el océano, cuando alcanzaron el Finis Terrae, en tos y satisfechos. El haber hecho el Camino de Santiago
el siglo II a. C. El Finis Terrae, Finisterre o Fisterra, como se es una condecoración que se puede ostentar siempre con
denomina en Galicia, se convirtió desde entonces en un orgullo. Si se ha llegado hasta Fisterra, con más razón.
lugar obligado para todo el que hizo ya la Ruta Jacobea.
Casa-Museo Rosalía de Castro. Padrón Colegiata de Iria Flavia Ermita de Santiaguiño do Monte. Padrón Fisterra
28 29