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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO

FACULTAD DE PSICOLOGÍA
ESPECIALIZACIÓN: COMUNICACIÓN, CRIMINOLOGÍA
Y PODER
MATERIA: LA LEY SU FRACCIÓN, SU CASTIGO Y SU
PREVENCIÓN

ANÁLISIS DE LA LEY FEDERAL DE JUSTICIA


PARA ADOLESCENTES

PROFESORA: MARÍA DEL CARMEN


MONTENEGRO NUÑEZ

ALUMNA: CONTRERAS SOLÍS YAHAIRA


ANTECEDENTES:

Durante la época prehispánica el derecho penal precortesano se encontraba ligado a la


religión y se encontraba bajo resguardo de la sociedad, en donde resultaba severo el
régimen correccional para menores.

En la cultura azteca se puede ver que ya marcaban la exclusión totalmente de


responsabilidad a los menores de 10 años de edad, mientras que a los de 15 años de edad
se les consideraba ya como mayores de edad y con responsabilidad penal.

En la época hispana en el sistema jurídico se encontraban normas referentes a la


responsabilidad de los menores, estas normas eran conocidas como las “Siete partidas” de
Alfonso X. En estas normas se establecía un sistema de irresponsabilidad penal total para
los menores de 10 años de edad y para los que tenían entre 10 y 17 años de edad existía
una cierta imputabilidad, además se establecía que a ningún menor de 17 años se le podría
aplicar la pena de muerte.

Después en la época colonial se seguía haciendo uso de las “Siete partidas” y surgió el libro
titulado la Novisima Recopilación en donde se contemplaba a los menores de 19 años
excluidos de todo castigo.

Luego vino la época independiente en donde durante los primeros 70 años posteriores a la
independencia la situación era semejante a la que prevaleció a principios del siglo XIX en
donde ce cerraron todos los orfanatorios, casa cuna entre otros. Tiempo después estas
instituciones se volvieron a abrir y surgieron las escuelas correccionales en donde se
internaban a los menores delincuente y a los que observaban conductas indebidas, sin
embargo los que cometían conductas graves eran encarcelados y castigados como los
adultos.

Durante la segunda mitad del siglo XIX se excluyó de toda responsabilidad a los niños
menores de 10 años y medio y se estableció la responsabilidad penal a los 18 años de edad
a los cuales se les aplicaba las penas de carácter correccional. Después en 1871 se publicó
el código penal inspirado en la doctrina clásica del derecho en donde se establecía la edad
y el discernimiento como bases para definir la responsabilidad de los menores, declarando
exento de responsabilidad al menor de los 9 años de edad y se consideraba la edad penal
a partir de los 14 años de edad. También cabe mencionar que durante el gobierno de
Porfirio Díaz (1873-1911) se crearon las escuelas correccionales. En el año de 1912 los
licenciados Miguel S., Macedo y Victoriano Pimentel propusieron que se tenía que hacer
una institución para sustraer a los menores de la represión penal y someterlos a la tutela
del Estado.

En la época actual finalmente en el año de 1923 en el Estado de San Luis Potosí se logra
fundar el primer Tribunal para Menores de la República Mexicana. Después en el año de
1924 se fundó la primera “Junta Federal de Protección a la Infancia” y en el año de 1926 se
formula el primer proyecto para la fundación de un Tribunal Administrativo para Menores,
esto gracias al doctor Robert Solís Quiroga.

Por otro lado en el código penal de 1929 se declaró al menor socialmente responsable, el
cual debería de ser sometido a tratamiento educativo por medio del Tribunal para Menores,
imponiendo sanciones como el internamiento en las correccionales. Después en el código
penal de 1931 se suprime la aplicación de sanciones a los menores señalando claramente
que esas medidas tutelares deberían ser con fines de orientación educativa y se establece
la edad penal a los 18 años de edad.

El diseño de s actuales leyes de justicia para menores gira en torno a la autonomía del
derecho del menor con respecto al derecho penal y también de un modelo garantista, esto
cobra relevancia gracias al artículo 40.3 de la Convención Internacional de los Derechos
del Niño en donde se prevé la obligación de los Estados de “promover el establecimiento
de leyes, procedimientos, autoridades e instituciones para los que hayan infringido las leyes
penales.

Para 1874 se crean los Tutelares para Menores, basado en el modelo tutelar el cual tiene
su origen en el primer Congreso Internacional de Tribunales para Menores de Paris en
1911, donde quedo establecido que la función de esa justicia era la defensa social frente a
la infancia delincuente. En México tomando como base esta ideología fueron creadas leyes
par amenores en los años noventa, tal es el caso de la ley que crea los Consejos Tutelares
para Menores Infractores del Distrito Federal y Territorios Federales.

El sistema Tutelar tiene como prioridad el principio del interés del niño (entendido como su
protección y bienestar moral y social), lo cual no necesariamente se traducía como
beneficio, ya que se le negaba un procedimiento penal , y la negársele esto se le estaba
privando de su derecho a tener un proceso justo. Después en el año de 1985 se da un
cambio del modelo tutelar al modelo garantista con la entrada en vigor de la Convención
Internacional de los Derechos del Niño, Las Reglas de Beijín, Las Reglas mínimas de las
Naciones Unidas para los Jóvenes privados de Libertad, Las Disectrices de las Naciones
Unidas para la prevención de la delincuencia juvenil. El modelo garantista o de protección
integral considera que el menor es titular de todas sus garantías propias de los adultos,
además complementarias específicas para los niños a fin de delimitar las pretensiones
punitivas del Estado, con el cual el interés superior del niño pasa a ser equivalente a la
satisfacción de todos sus derechos, así mismo se considera al niño como sujeto de
responsabilidad por la conducta infringida pero con consecuencias distintas a la de los
adultos y con procesos penales especiales.

Y finalmente en es el año de 2008 se cambia el nombre de Tutelar Para Menores Infractores


por Comunidad de Adolescentes en Conflicto con la Ley con el objetivo de crear un sistema
especial para adolescentes que respete sus derechos humanos y sus derechos como
"personas en desarrollo".
ARTÍCULOS DE LA CONSTITUCIÓN A LOS QUE ESTA SUJETA LA LEY FEDERAL
DE JUSTICIA PARA ADOLESCENTES

ARTICULO 4°(Parrafo 6 al 8)

En todas las decisiones y actuaciones del Estado se velará y cumplirá con el principio del
interés superior de la niñez, garantizando de manera plena sus derechos. Los niños y las
niñas tienen derecho a la satisfacción de sus necesidades de alimentación, salud,
educación y sano esparcimiento para su desarrollo integral. Este principio deberá guiar el
diseño, ejecución, seguimiento y evaluación de las políticas públicas dirigidas a la niñez.

Los ascendientes, tutores y custodios tienen la obligación de preservar y exigir el


cumplimiento de estos derechos y principios.

El Estado otorgará facilidades a los particulares para que coadyuven al cumplimiento de los
derechos de la niñez.

Párrafo adicionado DOF 07-04-2000. Reformado DOF 12-10-2011

En este artículo cuarto de la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos tiene como
objetivo resguardar los derechos de los niños y las niñas, además también en este artículo
se menciona que los padres o tutores tiene la obligación de darle alimentación, educación,
servicios de salud de los niños para su sano desarrollo integral y que el Estado solo le
corresponde la parte supervisora y aseguradora de que los padres o las instituciones
cumplan adecuadamente con lo que marca el artículo cuarto constitucional.

ARTICULO 18:

La Federación, los Estados y el Distrito Federal establecerán, en el ámbito de sus


respectivas competencias, un sistema integral de justicia que será aplicable a quienes se
atribuya la realización de una conducta tipificada como delito por las leyes penales y tengan
entre doce años cumplidos y menos de dieciocho años de edad, en el que se garanticen
los derechos fundamentales que reconoce esta

Constitución para todo individuo, así como aquellos derechos específicos que por su
condición de personas en desarrollo les han sido reconocidos. Las personas menores de
doce años que hayan realizado una conducta prevista como delito en la ley, solo serán
sujetos a rehabilitación y asistencia social.
La operación del sistema en cada orden de gobierno estará a cargo de instituciones,
tribunales y autoridades especializados en la procuración e impartición de justicia para
adolescentes. Se podrán aplicar las medidas de orientación, protección y tratamiento que
amerite cada caso, atendiendo a la protección integral y el interés superior del adolescente.

Las formas alternativas de justicia deberán observarse en la aplicación de este sistema,


siempre que resulte procedente. En todos los procedimientos seguidos a los adolescentes
se observará la garantía del debido proceso legal, así como la independencia entre las
autoridades que efectúen la remisión y las que impongan las medidas. Éstas deberán ser
proporcionales a la conducta realizada y tendrán como fin la reintegración social y familiar
del adolescente, así como el pleno desarrollo de su persona y capacidades. El
internamiento se utilizará solo como medida extrema y por el tiempo más breve que
proceda, y podrá aplicarse únicamente a los adolescentes mayores de catorce años de
edad, por la comisión de conductas antisociales calificadas como graves.

En este artículo 18 constitucional se dice que es la obligación de la Federación, los Estados


y el Distrito Federal establecer un ámbito con sus respectivas competencias, así como un
sistema integral de justicia para adolescentes.

LEY FEDERAL DE JUSTICIA PARA ADOLESCENTES

DISPOSICIONES PRELIMINARES

CAPÍTULO I

Objeto, Principios y Definiciones

Artículo 1. Esta Ley es de orden público e interés general. Tiene como objeto la creación
del Sistema Federal de Justicia para Adolescentes, el cual incluye a los órganos, instancias,
procedimientos, principios, derechos y garantías previstos, y derivados de la Constitución
Política de los Estados Unidos
Mexicanos, la presente Ley, la Ley para la Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, y
los tratados y convenios internacionales aplicables.

Esta Ley se aplicará a quienes se les atribuya o compruebe la realización de una o varias
conductas tipificadas como delito competencia de las autoridades federales y tengan al
momento de la comisión de dichas conductas, entre doce años cumplidos y menos de
dieciocho años de edad.

Artículo 2. Son sujetos de esta Ley:

I. Adolescentes: Personas de entre doce años cumplidos y menos de dieciocho años de


edad a quienes se les atribuya o compruebe la realización de una o varias conductas
tipificadas como delito;

II. Adultos jóvenes: Personas de entre dieciocho años cumplidos y menos de veinticinco
años de edad, a quienes se les atribuya o compruebe la realización de una conducta
tipificada como delito cometida cuando eran adolescentes, a los que se les aplicará el
Sistema Federal de Justicia para Adolescentes en todo aquello que proceda; y

III. Las víctimas u ofendidos por las conductas referidas en las fracciones anteriores. Las
autoridades, instituciones y órganos previstos en esta Ley, se harán cargo de operar el
Sistema Federal de Justicia para Adolescentes.

ANÁLISIS: En el artículo uno se puede ver claramente los derechos que se establecen en
el artículo cuarto constitucional solo que para la ley Federal de Justicia para Adolescentes
se adaptaron estos derechos de los niños para los adolescentes

En el artículo dos de esta ley se habla sobre a quienes se les puede aplicar esta ley, se
hace una separación entre adolescente y adulto joven, se establece como adolescente a
las personas que tengan 12 años cumplidos y menos de 18 años cumplidos, dejando
exentos de castigo a los menores de 12 años de edad. Esta cuestión de la inimputabilidad
en los menores causa mucha polémica ya que se está dando por hecho de las personas
que tiene entre 12 años y menores de 18 años de edad son incapaces de ver que es bueno
y que es malo ya que según el derecho todavía no están totalmente maduros para
comprender las consecuencias de sus actos y es hasta cuando se cumple los 18 años
cuando se adquiere esta madurez.
CAPÍTULO II

Derechos y Garantías de los Sujetos de esta Ley

Artículo 9. Los derechos y garantías reconocidos a los sujetos de esta Ley son
irrenunciables, tienen un carácter enunciativo y no limitativo.

No constituirán antecedentes penales los datos, acusaciones, procesos, resoluciones y


medidas que se apliquen al adolescente o adulto joven.

Artículo 10. Son derechos y garantías del adolescente o adulto joven sujeto a investigación
y proceso, en los términos de esta Ley:

I. Los considerados en la Constitución, en la Ley para la Protección de los Derechos de


Niñas, Niños y Adolescentes, así como en los tratados internacionales que contengan
normas de protección en esta materia;

II. Los adolescentes tienen derecho a la libertad. Cualquier medida que implique una
restricción a este derecho deberá aplicarse de forma excepcional, como último recurso y
durante el tiempo más breve que proceda, únicamente para conductas consideradas como
graves de conformidad con el artículo 113 de esta Ley; cualquier restricción indebida en un
establecimiento público o privado será considerada como una forma de privación ilegal de
libertad;

III. Al registro de su detención, en los términos del Código Federal de Procedimientos


Penales, en el módulo especial que les corresponda en su calidad de adolescente o adulto
joven;

IV. En ningún caso, ser sujetos de medidas cautelares o definitivas que no estén
establecidas en esta Ley;

V. Ser siempre tratados y considerados como inocentes, mientras no se les compruebe la

Responsabilidad en la realización de la conducta que se les atribuye;

VI. Que la carga de la prueba la tenga su acusador;

VII. Ser defendidos en igualdad de circunstancias respecto de su acusador;


VIII. Hacerse representar por un Defensor Público Federal de Adolescentes o privado que
posea cédula profesional que lo acredite como licenciado en derecho;

IX. Ser informados, en un lenguaje claro y accesible, sin demora y personalmente o a través
de sus padres, tutores, quienes ejerzan la patria potestad o la custodia o representantes
legales, sobre:

1) Las razones por las que se les detiene, juzga o impone una medida;

2) La persona que les atribuye la realización de la conducta tipificada como delito;

3) Las consecuencias de la atribución de la conducta;

4) Los derechos y garantías que les asisten en todo momento;

5) El derecho de disponer de defensa jurídica gratuita; y

6) Todo aquello que interese respecto de su sujeción al Sistema Federal de Justicia para
Adolescentes;

X. Que sus padres, tutores o quienes ejerzan la patria potestad o la custodia, participen en
las actuaciones y les brinden asistencia general;

XI. En caso de ser indígenas, extranjeros, sordos, mudos o no sepan leer ni escribir, ser
asistidos de oficio y en todos los actos procesales, por un defensor que comprenda
plenamente su idioma, lengua, dialecto, así como su cultura; o bien, de ser necesario, a
que su defensor sea auxiliado por un traductor o intérprete asignado por la autoridad
correspondiente o designado por el adolescente o el adulto joven.

Artículo 11. Los adolescentes y adultos jóvenes sujetos a las medidas previstas en esta
Ley, tienen derecho a:

I. No ser privados o limitados en el ejercicio de sus derechos y garantías, sino como


consecuencia directa o inevitable de la medida impuesta;

II. En cualquier caso que implique su internamiento, tienen derecho a ser alojados en
lugares exclusivos y especializados, de acuerdo con su edad y sexo, totalmente separados
de los adultos.

X. Cursar el nivel educativo que le corresponda y recibir instrucción técnica o formación


práctica sobre un oficio, arte o profesión, recibir o continuar con la enseñanza e instrucción
en otras áreas del conocimiento y, en su caso, recibir terapias o educación especial.
XIII. Realizar actividades recreativas, artísticas, culturales, deportivas y de esparcimiento,
bajo supervisión especializada;

XIV. Recibir o continuar con atención médica preventiva y correctiva y cualquier otro tipo de
atención vinculada con la protección de su salud, siempre en razón de su género y
circunstancias particulares.

Este derecho será extensivo a las y los hijos menores de seis años de edad que
permanezcan con sus madres adolescentes o adultas jóvenes en los términos de esta Ley;

ANÁLISIS: En el artículo 9 de esta ley se menciona que a las personas que ingresen en
este caso a las llamadas Comunidades para Adolescentes en Conflicto con la Ley no se les
generaran antecedentes penales ya que el objetivo de esta ley de justicia para adolescente
y de las comunidades es lograr la reinserción social y reintegración familiar de los
adolescentes. Con respecto a lo anterior cabe resaltar que solo se está tomando en cuenta
a los adolescentes que solo tienen familia y se está haciendo a los menores que viven en
las calles, no se dice que es lo que pasa con estos chicos cuando salen de estas
comunidades para adolescente, a que lugares los mandan para lograr la reinserción social.

En el artículo 10 de esta ley nos menciona todos los derechos que tiene un adolescente al
ingresar a una comunidad para adolescentes lo cual nos pinta un ambiente muy bonito pero
que es en realidad lo que se cumple de todo la anterior en realidad muy poco por ejemplo
en el apartado nueve de artículo 10 se dice que se le debe de explicar al adolescente el
motivo por al cual es detenido en un lenguaje claro para el o bien cuando la persona hala
una lengua indígena se debe contar con un defensor que sepa hablar la lengua, esto no
sucede en México.

Por ultimo en el artículo 11 de esta ley se vuelve a mencionar la protección de las garantías
de los adolescentes, así como las actividades que tiene que realizar dentro de la
comunicada como son terminar sus estudios y realizar algún deporte o actividad artística, a
que parte del objetivo de las comunidades para adolescentes es darles herramientas a los
muchachos para que puedan reintegrarse a la sociedad de una forma adecuada y evitar
que vuelvan a cometer algún delito.
CAPÍTULO III

Responsabilidad de los Adolescentes frente a la Ley Penal Federal

Artículo 13. Los adolescentes podrán ser responsables por infringir la ley penal federal y
demás legislación que contemple delitos que sean competencia de las autoridades
federales, en los casos y términos que se establecen en esta Ley.

La niña o niño menor de doce años de edad a quien se le atribuya una conducta tipificada
como delito quedará exento de toda responsabilidad, sin perjuicio de las responsabilidades
civiles a las que haya lugar.

Si los derechos de la persona menor de doce años a quien se atribuye la comisión de un


delito se encuentran amenazados o vulnerados, la autoridad competente podrá remitir el
caso a las instituciones públicas o privadas responsables de la protección de los derechos
del niño o de la niña.

Artículo 14. No se procederá contra los adolescentes quienes al momento de realizar el


hecho tipificado como delito padezcan de algún trastorno mental que les impida comprender
la trascendencia y las consecuencias de la conducta realizada, salvo que el sujeto activo
se encuentre en estado de ebriedad o bajo el efecto de estupefacientes o psicotrópicos sin
que medie prescripción médica, y esta condición la haya autoprovocado. Cuando el
trastorno se presente durante el procedimiento o en la fase de ejecución, la autoridad
judicial o administrativa competente deberá suspender el desarrollo del procedimiento o la
ejecución de la medida durante el tiempo en que dure el trastorno, si es temporal o
definitivamente, si es permanente y entregará al adolescente o adulto joven a quienes
legalmente corresponda hacerse cargo de ellas.

El Juez de Distrito Especializado para Adolescentes, en su caso, resolverá sobre la


adecuación de la medida, en forma provisional o definitiva, considerando las características
del trastorno, así como las necesidades del tratamiento.

En los casos en que el adolescente o adulto joven padezca un trastorno mental, la autoridad
que esté conociendo del asunto deberá solicitar la intervención de instituciones médico-
psiquiátricas, para efecto de que rindan su dictamen correspondiente y, en su caso, se
hagan cargo del tratamiento.
Artículo 15. La responsabilidad del adolescente o adulto joven se fincará sobre la base del
respeto rrestricto al principio de culpabilidad disminuida por el acto y no admitirá, bajo
ninguna circunstancia, consideraciones acerca de la personalidad, vulnerabilidad biológica,
temibilidad, peligrosidad, ni de cualquier otra que se funde en circunstancias personales del
autor del hecho imputado.

ANÁLISIS: En este capítulo tercero de esta ley se ve que los tres artículos que lo conforman
están muy relacionados con lo que es el desarrollo cognoscitivo del adolescente debido a
que nuevamente dan por hecho que antes el derecho los niños de 12 años y menores de
18 años de edad no son capaces de diferenciar lo que es bueno o lo que es malo, es decir
no tiene razonamiento moral y no piensan en las consecuencias. Aquí nos podemos dar
cuenta que no se toman en cuenta a los psicólogos para la elaboración de estas leyes ya
que el concepto que la ley maneja de adolescencia no es el mismo que en psicología como
por ejemplo que pasaría con todas aquellas personas que son adolescentes tardíos que
tiene ya 40 años de edad y aun viven en su casa con sus padres, en otras palabras podemos
ver que para la ley el factor importante es la edad para poder determinar si se le aplica a un
adolescente o no esta ley, dejando a un lado esta cuestión que no señala kollberg con lo
que es el desarrollo moral, el autor nos maneja tres niveles los cuales son:

Nivel I: Moralidad Preconvencional: Consiste en que las personas bajo controles extremos
obedecen las reglas para evitar el castigo u obtener recompensas o actúan en beneficio
propio.

Nivel II: Moralidad Convencional: Consiste en que las personas ya han interiorizado los
patrones de las figuras de autoridad. También están interesados en ser “Buenos”
complaciendo a los demás y manteniendo un orden social. Esta etapa se alcanza después
de los 10 años de edad, pero hay gente que se queda estancada hasta la adultez.

Nivel II: Moralidad Posconvencional: Es cuando las personas reconocen que hay conflictos
entre patrones morales y emiten sus propios juicios con base en los principios de lo bueno
y lo malo, equidad y justicia. Por lo general, la gente no llega a este nivel de razonamiento
moral hasta por lo menos en la adolescencia temprana que se comprende de los 10 a los
14 años de edad.

De acuerdo con lo anterior un niño de 12 años a pesar de que es considerado como menor
ante la ley ya realiza el razonamiento moral y no como lo marca la ley que es hasta los 18
años cuando ya la persona sabe las consecuencias de sus actos.
Por otro lado retomando lo que dice Piaget respecto al desarrollo cognoscitivo del
adolescente es que a la edad de 11 años el niño ya tiene pensamiento formal, en el cual ya
hay un razonamiento hipotético deductivo, es decir ya existe una planeación y prevención
de los resultados, esto contradice lo que no marca este capítulo tercero de la ley federal de
justicia para adolescentes ya que a los menores de 11 años los dejan exentos ante esta
ley.

TÍTULO CUARTO

MEDIDAS

CAPÍTULO I

Disposiciones Generales

Artículo 78. Las medidas reguladas por esta Ley tienen como fin una justicia restaurativa,
la reintegración social, y familiar del adolescente o adulto joven, así como el de proporcionar
a éste una experiencia de legalidad y una oportunidad de valorar los beneficios de la
convivencia armónica, del civismo y del respeto a las normas y derechos de los demás.
Para ello, éstas deben instrumentarse, en lo posible, con la participación de la familia, de la
comunidad y, en su caso, con el apoyo de especialistas.

Todas las medidas de esta Ley están limitadas en su duración y no podrán, bajo ninguna
circunstancia, superar el máximo previsto para cada una de ellas. Ello no excluye la
posibilidad de determinar el cumplimiento de la medida antes de tiempo, ni de adecuarla en
beneficio del sujeto de la misma, en los términos previstos por esta Ley.

La decisión sobre la medida que debe ser impuesta tendrá relación directa con los daños
causados, el grado de participación del adolescente en los hechos y los fines señalados en
el primer párrafo de este artículo.
Sección II

Libertad Asistida

Artículo 84. La libertad asistida consiste en ordenar al adolescente o adulto joven a


continuar con su vida cotidiana, pero bajo la vigilancia de un supervisor y de conformidad
con el Programa Individualizado de Ejecución. La duración de esta medida no podrá ser
inferior a tres días ni mayor de cuatro años.

La finalidad de esta medida es inculcar en el adolescente o adulto joven el aprecio por la


vida en libertad y la importancia que en la convivencia común tiene el respeto a los derechos
de los demás; en consecuencia, el Programa Individualizado de Ejecución deberá contener
actividades dirigidas al efecto, de modo que se afirme la cultura de la legalidad y se aprecien
las desventajas de comportamientos irresponsables frente a las leyes y los derechos de
otras personas.

El supervisor designado por la Unidad Especializada, dará seguimiento a la actividad del


adolescente o adulto joven mientras dure la medida y tendrá las siguientes obligaciones:

I. Supervisar la asistencia y aprovechamiento del adolescente o adulto joven a los


programas y actividades previstas en el Programa Individualizado de Ejecución, y
proporcionar la orientación requerida;

II. Promover socialmente al adolescente o adulto joven y su familia proporcionándoles


orientación y;

III. Presentar los informes que le requiera la Unidad Especializada así como el Juez de
Distrito Especializado para Adolescentes.

ANÁLISIS: En el artículo 78 de esta ley se vuelve a mencionar la reintegración social y


familiar del adolescente quedando en el aire los adolescentes que no tiene familia ni un
lugar donde vivir a donde irán después de cumplir con su castigo, y después el artículo 84
de esta ley que nos menciona la libertad asistida la cual se lleva a cabo bajo la supervisión
de un especialista designado por la unidad especializada que dará seguimiento a la
actividad del adolescente, esta parte la veo muy lejana porque no creo que el gobierno
tenga el dinero necesario para poder pagar este tipo de especialistas, lo que comúnmente
se hace es que se les hace firmar a los padres del adolescente que se harán responsables
de vigilar a su hijo para que no vuelva a cometer ningún delito.

Sección IV

Reparación del Daño

Artículo 88. La medida de reparación del daño tiene la finalidad de infundir en el


adolescente o adulto joven el respeto por el derecho a la integridad moral, física y
psicológica de las personas, así como el derecho a la propiedad, el valor estimativo de los
bienes privados y garantizar los derechos de la víctima u ofendido. Esta medida comprende:

I. La restauración del bien lesionado por la conducta tipificada como delito y si no fuere
posible, el pago del precio del mismo;

II. La indemnización por el daño material y moral causado, incluyendo el pago de los
tratamientos curativos que, como consecuencia de la conducta, sean necesarios para la
recuperación de la salud de la víctima;

III. En los casos de conductas tipificadas como delito en la ley penal federal contra la libertad
y el normal desarrollo psicosexual, se comprenderá el pago de los tratamientos
psicoterapéuticos necesarios para la víctima; y

IV. El resarcimiento de los perjuicios ocasionados.

Artículo 89. En atención a la finalidad de esta medida, se procurará que la reparación del
daño consista en acuerdos restaurativos y no necesariamente en el pago de una suma de
dinero, pero cuando ello sea inevitable, se procurará que éste provenga del propio esfuerzo
del adolescente o adulto joven y se buscará, en la medida de lo posible, que no provoque
un traslado de la responsabilidad de este último hacia sus padres, tutores o personas que
ejerzan la patria potestad o la custodia.
ANÁLISIS: Tanto en el artículo 88 como en el 89 de esta ley se le empieza a dar al
adolescente la responsabilidad de sus actos y ya la responsabilidad no cae totalmente
sobre a familia por no saber educar a su hijo, volvemos a retomar lo del desarrollo
cognoscitivo en donde el adolescente ya es capaz de ver las consecuencias de sus actos,
además tiene la capacidad de decidir si usa los valores que se la han dado en casa o no en
ese momento para cometer un delito.

CAPÍTULO III

Medidas de Internamiento

Artículo 113. Por medida de internamiento se entiende a los distintos grados de privación
del derecho a la libertad de tránsito de adolescentes y adultos jóvenes que lo ameriten en
los términos de la presente Ley.

Las medidas de internamiento son las más graves entre las previstas por este
ordenamiento y por tanto deben aplicarse como último recurso, por el tiempo más breve
que proceda, de modo subsidiario y sólo puede imponerse a quienes tengan o hayan tenido,
al momento de realizar la conducta, una edad de entre catorce años cumplidos y dieciocho
años no cumplidos; siempre que se trate de alguna de las siguientes conductas graves
tipificadas como delito:

I. Terrorismo, previsto en el artículo 139, párrafo primero del Código Penal Federal;

II. Contra la salud, previsto en los artículos 194, 195, 196 Ter, 197, párrafo primero y 198,
parte primera del párrafo tercero del Código Penal Federal y los previstos en las fracciones
I, II y III del artículo 464 Ter y en los artículos 475 y 476 de la Ley General de Salud;

III. Ataques a las vías de comunicación, previsto en el artículo 170, primer y tercer párrafos
del Código Penal Federal;

IV. Violación, previsto en los artículos 265, 266 y 266 Bis fracciones I y II del Código Penal
Federal;
V. Asalto en carreteras o caminos, previsto en el artículo 286 del Código Penal Federal;

VI. Lesiones, previsto en los artículos 291, 292 y 293, cuando se cometa en cualquiera de
las circunstancias previstas en los artículos 315 y 315 Bis del Código Penal Federal;

VII. Homicidio, previsto en los artículos 302 con relación al 307, 312, 313, 315, 315 Bis, 320
y 323 del Código Penal Federal;

VIII. En materia de secuestro, previsto en los artículos 9, 10, 11, 12, cuarto párrafo, 14, 15,
17 y 18 de la Ley General para Prevenir y Sancionar los Delitos en Materia de Secuestro,
Reglamentaria de la Fracción XXI del Artículo 73 de la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos, y tráfico de menores, previsto en el artículo 366 Ter del Código Penal
Federal;

IX. Robo calificado, previsto en el artículo 367 cuando se realice en cualquiera de las
circunstancias señaladas en los artículos 372, 381, fracciones VII, IX, y X, y 381 bis; y el
monto de lo robado exceda de cien veces el salario mínimo de conformidad con lo dispuesto
en el artículo 370, párrafos segundo y tercero; así como el robo previsto en el artículo 371,
párrafo último, todos del Código Penal Federal;

X. Uso, acopio, portación e introducción de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército,
Armada o Fuerza Aérea, previsto por los artículos 83, fracción III, 83-Bis fracción II, 83-Ter,
fracción III y 84, fracción I de la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos; y

XI. Robo de hidrocarburos previsto en el artículo 368 Quáter del Código Penal Federal.

La finalidad de estas medidas es limitar la libertad de tránsito de adolescentes o adultos


jóvenes, de modo que se faciliten procesos de reflexión sobre su responsabilidad individual
y social en torno a las consecuencias de las conductas cometidas. Durante los periodos de
privación de libertad se deben realizar actividades grupales dirigidas por personal técnico
capacitado para estos fines.

En ninguna circunstancia, las medidas de internamiento implican la privación de derechos


distintos a los que limita la resolución del Juez de Distrito Especializado para Adolescentes.

ANÁLISIS: En este articulo 113 se menciona que solamente se privara de su libertad al


adolescente cuando haya cometido un delito grave sino es así no se le podrá aprender por
que se estarían violando sus derechos que se establecen en el artículo primero de esta ley.
INTRUMENTOS INTERNACIONALES QUE ESTAN RELACIONADS CON LA LEY
FEDERAL DE JUSTICIA PARA ADOLESCENTES

REGLAS MINIMAS DE LAS NACIONES UNIDAS PPARA LA ADMINISTRACIÓN DE


JUSTICIA DE MENORES (REGLAS DE BEIJING)

Fueron aprobadas el 29 de noviembre de 1985 por la Asamblea General de la ONU.

Estas reglas se dividen en seis partes: La primera habla de los principios fundamentales
generales, en donde los Estados deben de procurar que se respeten los intereses generales
y promover el bienestar del menor. En la segunda parte se habla sobre los aspectos
vinculados a la investigación y el procesamiento, en la tercera parte se refiere a la sentencia
y la resolución, la cuarte parte contiene las reglas acerca del tratamiento en los
establecimientos penitenciarios y por último la sexta parte se refiere a la investigación,
planificación, formulación y evaluación de políticas.

CONVENCIÓN INTERNACIONAL DE LOS DERECHOS DEL NIÑO

Fue aprobada el 20 de noviembre de 1989.

Esta convención no habla de que solo se admite la privación de la libertad como medida
excepcional y por menor tiempo posible, es decir que el menor no puede ser detenido salvo
caso de flagrancia. También en este instrumento se establece que el menor no puede ser
privado de su libertad sin el debido procedimiento legal y que además se le debe otorgar
un abogado para su defensa de manera gratuita.

LAS DISECTRICES DE LAS NACIONES UNIDAS PARA LA PREVENCIÓN DE LA


DELINCUENCIA JUVENIL

(LAS DISECTRICES DE REID)

Las disectrices de Reid llamadas así en la alusión a una reunión internacional de expertos
en Arabia Saudita en 1988 que fueron adoptadas para Latinoamérica por la Asamblea
General de la ONU el 14 de diciembre de 1990.

En sus principios fundamentales se establece que la prevención de la delincuencia juvenil


es parte esencial de la prevención del delito en la sociedad, por lo que es necesario que
cada sociedad procure un desarrollo armonioso para los adolescentes. También se
reconoce la importancia y necesidad de una política progresista de prevención de la
delincuencia con el fin de elaborar medidas que eviten criminalizar y penalizar al niño por
alguna conducta que no perjudique a los demás.

LAS REGLAS DE LAS NACIONES UNIDAS PARA LA PROTECCIÓN DE MENORES


PRIVADOS DE SU LIBERTAD

Fue adaptada y aprobada por la Asamblea General de la ONU el 14 de diciembre de 1990.

En este instrumento las perspectivas fundamentales más importantes son:

Perspectivas fundamentales

1. El sistema de justicia de menores deberá respetar los derechos y la seguridad de los


menores y fomentar su bienestar físico y mental. El encarcelamiento deberá usarse como
último recurso.

2. Sólo se podrá privar de libertad a los menores de conformidad con los principios y
procedimientos establecidos en las presentes Reglas, así como en las Reglas mínimas de
las Naciones Unidas para la administración de la justicia de menores (Reglas de Beijing).
La privación de libertad de un menor deberá decidirse como último recurso y por el período
mínimo necesario y limitarse a casos excepcionales. La duración de la sanción debe ser
determinada por la autoridad judicial sin excluir la posibilidad de que el menor sea puesto
en libertad antes de ese tiempo.

3. El objeto de las presentes Reglas es establecer normas mínimas aceptadas por las
Naciones Unidas para la protección de los menores privados de libertad en todas sus
formas, compatibles con los derechos humanos y las libertades fundamentales, con miras
a contrarrestar los efectos perjudiciales de todo tipo de detención y fomentar la integración
en la sociedad.

4. Las Reglas deberán aplicarse imparcialmente a todos los menores, sin discriminación
alguna por motivos de raza, color, sexo, edad, idioma, religión, nacionalidad, opinión política
o de otra índole, prácticas o creencias culturales, patrimonio, nacimiento, situación de
familia, origen étnico o social o incapacidad. Se deberán respetar las creencias religiosas y
culturales, así como las prácticas preceptos morales de los menores.
LEY DE PROTECCIÓN DE LOS DERECHOS DE NIÑAS Y NIÑOS Y ADOLESCENTES

Publicada en el diario oficial el 29 de mayo del año 2000.

Esta ley protege los derechos establecidos en el artículo cuarto constitucional los cuales
son: En todas las decisiones y actuaciones del Estado se velará y cumplirá con el principio
del interés superior de la niñez, garantizando de manera plena sus derechos. Los niños y
las niñas tienen derecho a la satisfacción de sus necesidades de alimentación, salud,
educación y sano esparcimiento para su desarrollo integral. Este principio deberá guiar el
diseño, ejecución, seguimiento y evaluación de las políticas públicas dirigidas a la niñez.
REFERENCIAS:

Carbonell. M (2002) Constitución y Menores de Edad, Biblioteca jurídica virtual del


Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, México.
Cervantes, J. Análisis de la Legislación en Materia de Justicia para Adolescentes,
Centro de Estudios de Derecho e Investigaciones Parlamentarias.
Gonzales, O. (2004) La Reforma al artículo 18 Constitucional, Biblioteca jurídica
virtual del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, México.
Papalia, D. (2001) Psicología del Desarrollo, octava Edición, Bogotá Colombia,
Editorial Mc Graw Hill.
Vázquez, D. (2012) Acercamiento Estadístico a la Realidad de los Menores
Infractores en México: Legislación del crimen organizado, nuevos desafíos.,
Universidad Iberoamericana, Plantel Puebla México.
Constitución de los Estados Unidos Mexicanos
http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/1.pdf
Ley Federal de Justicia para Adolescentes
http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/LFJA.pdf
Reglas de las Naciones Unidas para la Protección de los Menores privados de su
Libertad.
http://www.guanajuato.gob.mx/ssp/leyes/onu-proteccion-privados-libertad.pdf
Directrices de las Naciones Unidas para la Prevención de la Delincuencia Juvenil
(Directrices de Riad)
http://www.ordenjuridico.gob.mx/TratInt/Derechos%20Humanos/OTROS%2003.pd
f
Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para la Administración de Justicia de
Menores
http://www.pgjdf.gob.mx/temas/4-6-1/fuentes/5-A-20.pdf
Ley para la Protección de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes
http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/185.pdf
Convención Internacional de los Derechos del Niño
http://www.iin.oea.org/Cursos_a_distancia/La_convencion_internacional.pdf

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