Piloto del Gordo Hijueputa

Por
Rafael Santander
Daniel Vargas

Basado en la serie de radio inédita con el mismo nombre

CABEZOTE
A través de la pantalla pasan imágenes de Jesús, Buda,
Alejandro Magno, Nerón, Calígula, Julio César, Obispo
Savonarola, Algún arabe haciendo álgebra y luego
inmolándose, Las tortugas ninja (los artistas), Napoleón,
Hitler.
NARRADOR DE CABEZOTE
DESDE TIEMPOS INMEMORIALES, EL
DESTINO DE LA RAZA HUMANA HA ESTADO
ATADO INTRÍNSICAMENTE A LAS
ACCIONES Y LA PASIÓN DE GRANDES
HOMBRES. ESTA ES LA HISTORIA DEL
ÚLTIMO MIEMBRO DE LA ILUSTRE LÍNEA
GENEALÓGICA A LA CUAL ESTOS HOMBRES
LE SABEN A MIERDA. ESTA ES LA
HISTORIA DE: EL GORDO HIJUEPUTA.
EN SU NUEVA AVENTURA: AQUELARRE DE
LOS DEGENERADOS O EL GORDO
HIJUEPUTA CONTRA LA MOMIA.

EXT. CIUDAD DE BOGOTÁ. DÍA.

Panorámica de la ciudad de bogotá que se acerca al barrio
egipto.

NARRADOR (V.O)
Egipto. Lugar de misterio y
leyenda. Sus edificaciones se
levantan precariamente, víctimas ya
del paso inexorable de los años, y
casi enterradas en las arenas del
olvido. Por sus azarosas y
estrechas callejuelas rondan las
memorias perdidas de sucesos
oscuros y sórdidos. Es en este
lugar peligroso e impredecible que
empezará la más grande aventura de
nuestro héroe...EL GORDO HIJUEPUTA.

INT. TIENDA "LA ESFINGE". DÍA.

El grupo de alcohòlicos anònimos està sentado en círculo y

lo preside la DOCTORA VERGARA.
DOCTORA VERGARA
Buenas noches, quiero agradecerles
que hayan asistido a
la reunión de ho...

(CONTINUED)
CONTINUED: 2.

NARRADOR (V.O)
EGIPTO. Lugar de contradicciones,
de secretos insondables. Es entre
sus antiguas y descuidadas
construcciones, que el Gordo
Hijueputa encontrará su más grande
reto hasta el momento. Y, Eh, las
milenarias pirámides...
El grupo de alcohòlicos anónimos miran en todas direcciones
desconcertados.

DOCTORA VERGARA
¿Qué?
NARRADOR(V.O)
las milenarias pirámides...

DOCTORA VERGARA
No hermano (murmullos)
NARRADOR (V.O)
¡Ah!... Es aquí, en el BARRIO
Egipto, en la cafetería y
cigarrería LA ESFINGE que
establecemos nuestra escena. Un
grupo de desadaptados dados a la
bebida, se reunen para ayudarse
mutuamente, en el espiritu de el
amor filial y el compañerismo. Su
líder, la doctora Vergara, es una
hermosa mujer, joven y radiante, y
con sus ojos oscuros les brinda a
los asistentes tranquilidad y
sosiego.
Todos miran a la doctora
DOCTORA VERGARA
Buenas noches, quiero agradecerles
que hayan asistido a la reunión de
ho...
NARRADOR
Sus formas delicadas, esbeltas,
contrastan deliciosamente con sus
cálidos, redondos, provocativos
y voluptuosos--
La doctora hace un gesto de disgusto. Luego indignada por la
línea del narrador alza la voz y lo interrumpe.

(CONTINUED)
CONTINUED: 3.

DOCTORA VERGARA
Quiero agradecerles que hayan
asistido a esta sesión. El día de
hoy vamos a continuar con el
testimonio de nuestro compañero
Óscar Rubén quien en la sesión
anterior nos estaba comentando cómo
el alcohol destruyó su vida, pero
ahora desea redimirse con la
sociedad.

ÓSCAR RUBÉN se levanta.

NARRADOR
La belleza inconmensurable de la
doctora Vergara. Invita al joven
Óscar Rubén a que se desembarace de
sus pecados, descargue el dolor
inifnito de sus transgresiones
pasadas, de sus atentados contra sí
mismo y la sociedad en este espacio
de amabilidad, confianza y perdón
que será pronto transgredido por
el...
Óscar Rubén se sienta de nuevo, todos miran hacia arriba.
DOCTORA VERGARA
No no, todavía no. Antes
necesitamos del testimonio de
nuestro querido compañero, Óscar
Rubén.
La doctora hace un gesto a Óscar Rubén para que se levante
y comience a hablar.
ÓSCAR RUBÉN
Parce, a mí me decían la Momia,
pero ya no porque me quitaron el
saludo y el celular. Lo que pasa es
que el trago es una cosa muy
berraca, parce.
NARRADOR
Un silencio sepulcral cae sobre la
sala.

Cada uno de los asistentes mira fijamente a La Momia.

DOCTORA VERGARA
¿y..?

(CONTINUED)
CONTINUED: 4.

ÓSCAR RUBÉN
Y ya.

DOCTORA VERGARA
Agradezcamos todos a nuestro
compañero óscar por habernos
abierto su corazón y por su tan
sentido testimonio de sus
sufrimientos pasados.

EXT. TIENDA "LA ESFINGE". DÍA

La barriga del GORDO HIJUEPUTA entra por la tienda de la
puerta, su sombra oscurece el sitio.

NARRADOR
De repente. Eclipsando el sol con
su vientre prominente, el hombre
hijo de aquella mujer que se gana
el pan dando pan, oficiosa de la
más antigua profesión en el mundo
entra en escena.

INT. TIENDA "LA ESFINGE. DÍA

El Gordo Hijueputa atraviesa el umbral. Todos los miembros

del grupo de apoyo miran con terror al Gordo.
NARRADOR(V.O) (CONT’D)
Mientras suena la chirriante
bisagra de una de las puertas que
hace eco en el recinto suprimiendo
el sepulcral silencio en el que se
ven sumidos la momia, la doctora
vergara y los demás integrantes de
la reunión, nuestro personaje
principal, héroe de nuestra
historia, el agente del caos, el
heraldo de la destrucción, el primo
segundo de Belcebú, el concuñado
político por parte de la hermana de
Cthulhu, amigo personal de la
empleada de servicio de
Mefistófeles, burócrata del
departamento de reparaciones del
acueducto de Barranquilla y
consultor jurídico de la madrastra
de Blancanieves. EL GORDO
HIJUEPUTA.
La doctora Vergara cierra la boca.

(CONTINUED)
CONTINUED: 5.

DOCTORA VERGARA
(nerviosa)
Bienvenido, ¿has venido a la
reunión de alcohólicos anónimos?
Siéntate tranquilo, aquí estás en
tu casa, ponte cómodo, relájate.
NARRADOR
El gordo hijueputa se sienta.
El Gordo Hijueputa se sienta, la silla rechina bajo él.

GORDO HIJUEPUTA
¡Niña, una cerveza!
DOCTORA VERGARA
¿Qué haces?

GORDO HIJUEPUTA
Me estoy poniendo cómodo.
DOCTORA VERGARA
Ponte los pantalones por favor.

El Gordo apoyando sus pies en otra silla y los pantalones a

un lado en el suelo levanta una ceja.
GORDO HIJUEPUTA
Usted me dijo que me sintiera como
en casa doctora. ¡Niña y un paquete
de Mustang!
En la base de la pantalla cruza rápidamente la advertencia
contra el tabaco.

NARRADOR
(MUY RÁPIDO)
Marca registrada. El tabaco es
nocivo para la salud, Ley 30 de
19loquesea

DOCTORA VERGARA
¿Pero qué estás haciendo? ¿No ves
que estamos en una reunión de
alcohólicos anónimos? ¿No ves que
el acohol ha destruído la vida de
los hombres aquí presentes? ¿No los
ves con su alma destrozada, con sus
alas rotas, con su mirada perdida y
vacía?

(CONTINUED)
CONTINUED: 6.

GORDO HIJUEPUTA
Deberían tomarse un trago. ¿Alguien
quiere un trago?
Los ojos de los presentes se abren un poco.

DOCTORA VERGARA
¡No! Nadie se va a tomar trago, ya
ha causado muchos estragos en el
espíritu de los aquí congregados.
Todos tienen fuerza de voluntad y
saben las consecuencias que acarrea
este terrible acto.
NARRADOR
Los integrantes de la reunión
aplauden al discurso de la doctora.
Todos menos uno, al cual las
palabras del gordo hijueputa le
hacen mella, vulneran su voluntad
ya endeble. Es, nada más ni nada
menos que el compañero Óscar
Rubén...

OSCAR RUBÉN
No, parce. Pero usted por que tiene
que ser así. ¿No se da cuenta que
yo haría lo que fuera por una
cerveza?

GORDO HIJUEPUTA
SILENCIO PECADOR. Yo sé qué haría
usted por una cerveza. Y lo que es
más importante: Dios, que todo lo
ve, que todo lo sabe, también lo ha
visto haciendo porquerías en quién
sabe qué sitios con quién sabe qué
gentes por una sola prueba de
alcohol etílico. ¿Y sabe por qué?
¿SABE POR QUÉ?

OSCAR RUBÉN
No, parce.
GORDO HIJUEPUTA
Por que es rico.

Sin quitarle la vista al Gordo, los asitentes se meten la

mano al bolsillo.
NARRADOR
Por enésima vez cae sobre el grupo
el supulcral silencio. Abatidos por
(MORE)
(CONTINUED)
CONTINUED: 7.

NARRADOR (cont’d)
las verdades de a puño de nuestro
héroe, algunos de los asistentes
empiezan a hacer vaca para media de
guaro.

Los asistentes cuentan monedas y reunen billetes. Por el

umbral de la puerta vemos un atraco.
NARRADOR (V.O)
Pero la victoria nunca es tan fácil
y se compra con el altísimo precio
de el sudor y la sangre. El gordo
hijueputa lo sabe y se prepara una
vez más para el embate inevitable
de la despreciada virtud cuando el
compañero Oscar Rubén envía en su
dirección una estocada verbal de
gran elocuencia.
OSCAR RUBÉN
¡Esperen! Parce, no hagan eso. Eso
es malo.

NARRADOR
El silencio sepulcral inunda
nuevamente la sala, todos los
presentes permanecen a la espera
del discurso del compañero Óscar
Rubén. Después de unos quince
segundos que parecen horas por la
tensión de estas dos grandes
colosos enfrentados, representantes
ambos de dos antiguos principios
encontrados que se baten en el
devenir de la historia como
gladiadores.
DOCTORA VERGARA
¿Y?

ÓSCAR RUBÉN
Y ya. Eso, parce.
NARRADOR
Para tratar de calmar los ánimos y
evitar un enfrentamiento que a lo
mejor pase a mayores, la doctora
Vergara interviene y desactiva la
volátil situación.

(CONTINUED)
CONTINUED: 8.

DOCTORA VERGARA
Bueno, órden, por favor. Tratemos
de comprender a este hombre que
viene a perturbar la paz perfecta
de nuestro pequeño cónclave. Sus
acciones demuestran que es
solamente un espíritu atormentado e
incomprendido. En lugar de
enfrentarlo hemos de entenderlo.
Cuéntanos amigo, déjanos ayudarte.
Relátanos la historia de los males
que te aquejan para que juntos
podamos solventar el dolor que
atormenta tu alma.
NARRADOR
Desconcertado, no sólo por la
amabilidad infinita y la caridad
cristiana de esta mujer, sino
además por su belleza virginal, por
ese halo de luz en el que parece
estar envuelta, el gordo hijueputa
considera sus próximas palabras.
Para sorpresa de todos; sus ojos
empiezan a humedecerse, sus
párpados comienzan a cargarse de
unos gotarrones pesados de un
líquido salino. El gordo hijueputa
trepida.
GORDO HIJUEPUTA
¡Hipócritas! No quiero, y no
hablaré de mis tragedias personales
a menos que alguien me brinde un
ron. El que quiera oír lo que me
acontece tiene que compartir
conmigo del fruto de la vid o sus
afines.
NARRADOR
Todos los beodos, faltos de fuerza
de voluntad y curiosos por conocer
la historia de este enigmático
personaje, deciden comprar una
bolsa de ron jamaiquino y armar una
mesa grande donde se sirven sus
tragos.
DOCTORA VERGARA
¡Esperen!

(CONTINUED)
CONTINUED: 9.

NARRADOR
...Grita la doctora Vergara, presa
de la empatía inconmensurable, de
la preocupación inmensa que siente
por el bienestar de sus
pacientes...
DOCTORA VERGARA
¡No beban! ¿Acaso es suficiente la
promesa de una anécdota para que
rompan la promesa de abstinencia
que han hecho conmigo y con Dios?
OSCAR RUBÉN
Eso, parce.
DOCTORA VERGARA
Todos ustedes han comentado sus
vicisitudes a cambio de nada
excepto la promesa de salvación y
perdón divino. Este hombre no tiene
por qué pedir más, a pesar de sus
rotundas proporciones.

NARRADOR
Ante esto, nuestro héroe se
defiende, haciendo uso de
su legendaria elocuencia.

GORDO HIJUEPUTA
¡Silencio! El precio de mi historia
es trago, y no solo para mi, sino
para todos, porque en el fondo soy
un hombre ecuánime. Hay que
disolver la atmósfera opresiva
de este lugar y el único remedio es
libar las bocas sedientas de estos
pecadores con precioso alcohol. Y
no me diga gordo.

NARRADOR
Oscar Rubén, alias La Momia, ha
oído suficiente, y decide que debe
hacer uso de su propia oratoria
para acudir en defensa del honor de
la doctora.

OSCAR RUBÉN
No le hable así a la nena....parce.
GORDO HIJUEPUTA
¿O qué, fariseo, o qué? Esa mujer
los seduce con sus palabras falsas.
(MORE)
(CONTINUED)
CONTINUED: 10.

GORDO HIJUEPUTA (cont’d)

Con sus decires fáciles. La que tu
llamas doctora, desdichado, no es
más que una culebrera, una
vendedora de falsos bálsamos para
suplir los unicos bálsamos que tu y
yo sabemos que son
eficaces. demás, obviamente
ustedes solo vienen acá porque
quieren verle las....

DOCTORA VERGARA
¡Maten a ese gordo hijuerputa!
NARRADOR
(Como un rayo, Oscar Rubén alias La
Momia se abalanza sobre nuestro
héroe blandiendo una patecabra que
le prestó un primo. El deslumbrante
brillo de la hoja encegece a los
asistentes. ¿Será este el comienzo
de otra gloriosa batalla para el
Gordo Hijueputa?¿veremos en acción
las legedarias habilidades
olímpicas del consabido y hercúleo
personaje?
Todos quedan congelados. Óscar y El Gordo se miran
desafiantes. Suena no SIRENA DE AMBULANCIA.
NARRADOR
No.(pausa) Mientras el incólumne
Gordo sangra de las heridas varias
de arma blanca y los doctores se
esfuerzan por salvarlo camino al
hospital, de vuelta en la
cigarrería, el compañero Oscar
Rubén considera sus acciones, y se
llena de amargura y remordimientos.

OSCAR RUBÉN
No parce, paila.
DOCTORA VERGARA
Por qué te afliges, Oscar Rubén. Lo
que hiciste era necesario para
preservar la paz de este recinto
sagrado. A veces es necesario
recurrir a medidas extremas, y los
aqui prersentes perdonamos tu
transgresión.

(CONTINUED)
CONTINUED: 11.

NARRADOR
Una tristeza infinita llena los
ojos de Oscar Rubén, sus facciones
enjutas se deforman en una mueca de
amarga ironía mientras apura ya su
cuarto aguardiente. Mira a la
doctora Vergara y se dirige a ella,
pero la voz que brota de su pecho,
no es ya la de el hombre buscando
redención sino un sonido bien
diferente.

OSCAR RUBÉN
No me diga así doctora. Oscar Rubén
está muerto, murió por la misma
mano que apuñalo al gordo ese.
Ahora y por siempre, sólo quedo yo,
LA MOMIA... parce.
NARRADOR
¿Será esta la última aventura de
nuestro héroe? ¿Podrán los doctores
de la Nueva EPS salvar su vida?¿Qué
peripecias le esperan en camino a
la clínica? ¿Será esta la última
vez que veamos a la siniestra
Momia? ¡Y los senos protuberantes
de la Doctora Vergara, qué será
de ellos? Síganos la próxima semana
donde sin duda se responderán si no
estas, otras preguntas no
relacionadas pero de un interés
comparable, en el próximo episodio
de EL GORDO HIJUEPUTA, que lleva
como título: LAS SUTURAS DE LUCIFER
o EL GORDO HIJUEPUTA CONTRA LA
AMENAZA CUADRAPLÉJICA.