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2 COMPENDIO DE DERECHO MATRIMONIAL CANONICO 2 DEFINICION DEL MATRIMONIO 1. ELMATRIMONIO COMO ACTO ¥ COMO ESTADO El término «matrimonio» presenta una doble acepcién, que conviene aclarar de~ finitivamente al objeto de evitar equivocos y confusiones. Unas veces se emplea para , esto nifica que interviene como representante dela Iglesia y actda como ministro de aquelias ‘ceremonias litirgias y de aquellos sacramentales que rodean la celebraciOn del ma- trimonio cristiano. ‘Son sujetos pasivos del sacramento del matrimonio los propios contrayentes, en cuanto reciben la gracia sacramental dimanante de su administracion. En punto a la materia y ala forma del matrimonio, I cuestion no se encuentra suficientemente aclarada por la doctrina®. La generalidad de los autores modernos ‘ceptan Ia teorfa de que la materia y la forma estén contenidas en la manifestaién del consentimiento matrimonial, estando la materia representada por ls manifesta- siones (palabras 0 signos) de los contrayentes en cuanto significan mutua entregs de sus personas, mientras que la forma viene representada por ls mismas manifer- taciones en cuanto significan Ia aceptacién de aquella entrega™. (CUALIPICACION SACRAMENTAL SEGUN EL CARACTER [DE LOS CONTRAYENTES La clevacién a la dignidad sacramental de! matrimonio de los bautizados se tra- ") que el matrimonio valido de dos bau- tizados es siempre sacramento (independientemente de Ia confesién que profesen, angnio, Baral WOR pets cet tera scence ne Boat XIV capes Cone {ees ater isl forma scrament mation arn cp, ina corpo {ivr ms nro ee cess experimen, man pegs "Gen psn orga mautne 3; MenvAD far een dda tases ee sree ‘cdo con una rena socal, ose prodoe a conferdaysminernion Glare en ‘4 que en on demas scrumenon (0.6, 165160. (CUBSTIONES FUNDAMENTALES 2» catélicos, protestantes, cismiticos, o del estado moral, gracia 0 pecado, en que se ‘encuentren);2.*) que el matrimonio de dos personas no bautizadas retiene su natu- raleza de unin meramente natural, por supuesto honesta y legitima, ‘Surge, en cambio, el problema de la consideraciGn sacramental dei matrimonio contraido entre persona bautizada y persona no bautizada o entre dos no bautizados feuando tino o ambos se convierten al cristianismo: 1.® La doctrina se encuentra dividida al considerar el carécter sacramental del ‘matrimonio celebrado entre persona bautizada y persona no bautizada, aunque al presente predomina la tesis negadora de la naturaleza sacramental de aquella unién. El problema se centra en lo referente al contrayente bautizado, toda vez que el infiel es incapaz de sacramentos, a excepcién, claro esta, del bautismo. Los mantenedores ‘dela tess negativa la fundamentan en estas consideraciones: siendo el contrato uno ¢ indivisible, no puede existir en una parte y no en otra, por lo que el sacramento tha de existir en ambas partes 0 en ninguna («el matrimonio no puede claudicar»); Ia potestad que en principio ostenta el Romano Pontifice para disolver el matrimo- ‘io en tales supuestos denota la ausencia de la sacramentalidad, puesto que el matri- ‘monio sacramental y consumado no puede ser disuelto por ninguna potestad™. 2,° Acerca del matrimonio vilido contraido antes del bautismo, estiman Ia ge- neralidad de los autores modernos que se convierte en unin sacramental una vez ‘que ambos cnyuges reciben el bautismo”. Asf parece deducirse del can, 1055, § 2. Se entiende, en efecto, que por el bautismo de ambos no se ha de disolver ef ma- trimonio validamente contraido en la infidelidad, y siendo asi que entre crstianos ‘no puede darse matrimonio que ala vez no sea sacramento, se deduce que aque! ma- trimonio adquiere la naturaleza de sacramental. Y como prueba de ello se aduce la prictica de la Iglesia, que no exige el que los cOnyuges convertidos renteven su con- Sentimiento para poder convivir maritalmente 3." _ Lasanteriores consideraciones ayudan a resolver el caso del matrimonio con- {aldo por dos no bautizados cuando s6lo uno de los cényuges recibe el bautismo. ‘Teniendo en cuenta la doctrina dominante de la naturaleza puramente natural dei ‘matrimonio entre persona no bautizada y persona bautizada, es evidente que, a la uz de esta doctrina, la conversin de uno solo de los eényuges no cambia la natura Jeza del primitivo matrimonio, Ello encuentra su confirmacion en la posibilidad de disolver el matrimonio por la conversién de uno de los cOnyuges y aun cuando se haya consumado después de la conversin (can. 1143, § 1). ‘4° Cabe también sefialar que, a tenor de lo ya expuesto, el matrimonio con- traido por persona bautizada y persona no bautizada deviene sacramento cuando cl conyuge no bautizado recibe, con posterioridad a la celebracién del matrimoni sacramento del bautismo. "FU aa de a divers razon pte vers on Viatinc-Rioen, oc, pp. 34; Wene-VinnL, 1s cononcum, 1. V, Rotac 1952, aes Daur, 12; Weave-VIOAL, 069.4; F. M. CAPPELLO, 0. 8 35; VAMINO- reer ac, BOT Sin desconoe i solder deo arguments de eos autores, exten pnt niente x- ‘When anesebuyesmintado ay ae tener en ucin qo uninimeente sma ued cre. ‘tenelgurse faye aminitade ay ae ener en etn got sata que sre ‘omar dat ue dimou sas cone anion rt. No pre suet ‘Poulet es ec, soc cmcameto seni con aio fer. No pre uote ‘Tomo tac ow sore afrmar Gu, dada a pemaneacia de conscamiato matrimonial (oe de 6 Jour trevoablo), ago! sonsertmic ager arlcea sacramental una vr bea btnlo {occ oponin i scramentaldad fala de beta) como tmpoco buscar una rain de anal lin sanacionn racic 30 ‘COMPENDIO DE DERECHO MATRIMONIAL CANONICO $5 EL PRINCIPIO DE LA INSEPARABILIDAD ENTRE EL SACRAMENTO Y EL CONTRATO Ensefia el Cédigo que «por tanto, entre bautizados, no puede haber contrato ma- ‘trimonial vilido que no sea por eso mismo sacramento» (can. 1055, § 2), principio ferme mols ager ear dom ewan tetas Sock Sree se Se oer es 'Y Contrato integran una misma realidad, de tal mancra que es imposible la existencia Laie os ares Some Seite Eyes SST Ceres Sia esie onc ne op I dati map i el spicy cae pe Speman cee eis aa est cee an ase Vpn meer maa fait ecco hc an Se Epi pcs os dices son an == So 2 spine Tow ans nes te tected sa tie opal Sooners es oS ee age pi Siar a satay yt ht cele gl ae a ‘SiS cg ie hme ey ‘perenne Ene ene at apne be eS SEeaRg ole 05) CST re Seren oe a ge alan ae a | SESVHO ST St eal Pace Secret tt ue ep rip oe soem eee em ta ‘i det ratimoniocanoico por lo estos que an pide ay is osc eprnn pera res el mcramena A ets psn ports pr, ee, owe ies dberia pdr elec Gl mation canine, por gad fl mics Srey 7 Deocanctm, on. 1640, 176, 1773, 1854 y 2257 2 Uns expoiin quem dhs dos psn ocala en J SALA2AR, en VV.AA. Mao Derecho ‘anonco Maan 198, Pp 136 38, Bate otton anor poede Ves J MANZANARES, cbitdo marimooium bapiatrum nis t- ‘quncotn cue mavimoniom durum tapaxtorm ate pecessoscramennn™, ee PRA (1978), 35-72: Low NAUNOW,eL* mariage de baptacs Gane glee Caaliqne gust me (Goto), ist-174; A. Caivo Geran, «Sobre in scrementalidad del mattapano de ‘Seritorum Pitorene, 29 (1982) ‘io Gnonam,ex 16 (15811 (Sat atimcain, co {enoai al Distn canenco» Tab; cone tain eqeale ebcle inmpertis Gf manoaln. Tala bn prc eto pode arp Gola toi con dats eplitod seine encased a por con ve tcc ee ‘St reconocimiente que bye pot presi ol Eatdo mje jaca! En‘ credo ndepaclntments ou fac etn ool Bata posta ppuedan plantearse acerca de In vaidez 0 disoluc 1 mantenimiento de la vida en comin (cann. 1671 y 1672); punitvo, sancionando a ‘yeces con penas canénicas la contravencién de las normas reguladoras del matrimo- aio (can, 1394). ttinionio y establecer normas posi nantes, asimismo, de la validez 0 lici- ‘ud del matrimonio; se extiende, igualmente, a la disolucién del vinculo conyugal, ‘asi como al establecimiento del régimen de Y, en general, a los I Ri f ‘xclusivo y Ia ejerce independientemente del poder ior y porto que respects al mairisnio de loeerauanae, regula los efetse tempo Tales seperbles o «meramente civil» del réglnen matrimonial (cana. 1039, 1672). > STG) ir copecam Pode vr F.ADNAR Gl, La propraci pastoral pare I cxlera- ‘in dl scrotal marina on aga, 981, Gt ams ex ttces putes desis epics Cela screen Ti Go) sibs Fone fey porcine era mina pect te dig de Dee cmon 2 ‘k's plate y scone, Fos Flag, 88 7k hace GF asm, 13531 32 (COMPENDIO DE DERECHO MATRIMONIAL CANONICO )_ La disilion matimonial de I Iglesia obligari,en principio, a todos los aude Cn 2 el align de 117 en a mormaiva vite smte8 toe pin cm 1 y 102g enn cnscnon ee a ‘ing igycino hen pune srl C108 “También s rige por el Derecho canénico-l matrimonio contaidaente persona catia y no betta un los aoes egy te cc Sen toms compte ina Ps einen ower ao sacl dene cs poate an vain posal srs qc ue or “rhe 4] matrimonio de los no bautizados, a Iglesia es incompe- tent, si bien las ‘eclesiésticas referentes al Derecho divino —vincu- Sis de mage ps tod eure colons ttn clos uo Sento, donde kk Iglesia puede conocer de la adecuacién o no de un matrimonio meramente natural al Derecho divino cuando sobreviniendo un punto de conexién con el ordensmiento persona civilmente ddez de aquél in calificaciGn de un matrimonio canénico. 47 ‘7 © FINES DEL MATRIMONIO del ae es BUCoder de 1917 éetrte: ea eucscin den sig hapa ttn crete choncgiooncnera fascia an IE ha alterado el modo de presentar las finalidades del matrimo- io en Taga de enunciarlas diretamente ba preferio ofrecer una dfinici esen- vida plensen que consiste el m misma indole pale Nz clcyegss ys k pmrusin' ooucacla ola pricy (en, Frnt al euter entrinseco ‘en principio, tienen los fines o causas finales ‘en relacién con un | foo 5s pee Senet comet Oe Gi) neon sulfone ut ses emer en esencin de a reali smcemento cnminva descendent: (CUESTIONES FUNDAMENTALES 3 lemento formal o especificador de la unién conyugal frente a otro tipo de unio See ae ens oicanetar tts Tat peal oe Tociales.. a ‘una entidad’o realidad significa: a) Una aptitud o predisposicin de la entidad para alcanzar sus fines; 6) una tendencia o tensiGn que impulsa a la entidad a Ia realizacion de sus fines; c) una exigencia 0 necesidad de que la realidad en cuestiGn se conduzea dind- ‘micamente hacia el logro de aquellas finalidades”. De esta forma la ordenacién a Jos fines esta determinando la propia estructura de a comunidad o consorcio conyu- sal, larelacin interpersonal en la que consiste, asi como el haz de derechos y obliga- éiones que la componea. Es decir, que mediante la «ordinatio ad fines», 10s fines estén presentes en la propia estructura de la realidad social a modo de aptitud, ten- dencia o exigencia, si bien el logro de los fi jor, en. ik tucion de esa entidad (pris intentione, posterius in executione). “De exte Plaifeamiento podemos deducir: 1.° Que los fines enunciados ast i corres den: {2 «por su misma indole natural» y vienen a ser su razén de exisi en térmiinos menos laicista, son los fins sehalados por Dios, autor de la naturaleza,— ala insticucién matrimonial 2.2. Laafirmacién anterior no solo se refiere al instituto matrimonial en general ‘o en abstracto, sino que debe tener su debida proyeccién sobre cada matrimonio © tila conus! en cone re Que eg pasusciga sobre cada matrimonio enconcretoexige o ti. lyn vo ota on oe sex precia Tenses ees ‘Sogio tees a ordenacn o tendencia aos fines la ereto debe tener k re Go pride a fata Spee por Sata os Song (erehoan Ts jes 0 caracteristicas personales y objetivas que hacen posible faquella ordenacién, sino también a parte intentionis (por parte de la intencién de inv comeayents) on elon de qos TO SOMTAVEMIS musten su predaposcon para el cumplimiento de los fines. Fi. Lromouce ata mots ‘Aunque el Cédigo In presenta en segundo lugar y sin que concedamos especial trascendencia al orden de exposicion de estas finalidades, parece conveniente est- alnsuficientemen- tehhubiera provisto Dios, sapientisimo, no, si ademas no hubiese encomendado el derecho y la obligaciGn de eduear oS a quienes dio el derecho y Ia potestad de engendrar» (nn. 9 y 13). 37 Para, eva, a wort a ines se ese en min, deer y exact exencil det smavimonio. Ver 3. Heivaos?. Losmatolay 0c, 5 4 ‘COMPENDIO DE DERECHO MATRIMONIAL CANONICO Tyan de isiista» por haber destacado una funcion tn sublime dela parja-matrimonio ala ve ta teficlosay genera para los nuevo seres. Como dice un documento del magistrio Celesistio, ia vida er un don que debe ser concedido de modo conforme as dgn dad tamo del sueto que larelbe come de los suetos quel transmiten, El mismo documento prociama el derecho dea persona a ser concebida ya ner cn el ma ‘monio y dl matrimonio: slo através del referencia conociday segura asus pares ‘Ueden Tos hijos descubrir Ia prop identidndy alangar la macurez bumana = El Conclio Vaticano Ise ba obtervado que hasta diez veces noha dejado de destacarlo.Invocaremos los siguientes txt ors dole natura, la mista nstiteion del matrimonio ye amor con- yugai eatin ordenados a in proreacin y la edocacion de la pole eon a que se Giten somo con su corona propa. Aal que el maridoy la mujer, que por dl pacto onyugal ya no son do, sino una sla carne (Mt 19, 6) se ayudan y se sstenen ‘mutuamente,adgulerenconcencla desu unidad y ia ogran cada vez ms pleaamea te por Ia intima nin de sus personas y actividadesn (GS. 48). 2. ¢El matrimonio ye amor conga estan ordenados por su propia natura Jeraa la procreaciny edacacin dels hijo. Por tanto el auténticoeericio del mor conyugaly toda estructura de la vide familar, que nace de aqui: ss dear ‘endo todos lou dems fines el matrimonio, ede ¢capactar aloe esponos port. ooperar valeroramente con el amor del Creadory Salvador, quien por medio Ge ellos aumentay enrquece su propia familia» (GS, n. 50, iio). # "cE matrimonio noes olamente para a procreai, sino que a naturalera de vineulo insoluble entre las personas el bien dea pro equeren que el amor ‘mutuo se manifiste ordenadamante, progreey vaya maturando. Por eo, ila des- Cendencia, tan descada a Yeoes, falar, el maiimonio persist como regina y 6o- ‘nin do toda a via ut ou vite Consuetudo ef commuuno)y conserva so Yall {ex (valorem) eindlaclubiidad (lon. 30 in fine). Coocitinos someramene: ) La denacén 4a pole generac yeducacn— ‘5 connatual al matron, Cs connecucon ai pid ponds Lala bear Saari 7 es (a Vee fan desea), en Gyo caso Pere aor df matron pes ext cuore ape ‘Queda a salvos 1.° Objetivamente o Dor la posited deta sophia coavo- 2a de wstontrario habia impedimente de iapotency seta nvdido el aire "oy; 2) Subjevamente 0 parce hominis por la intencion de no desnaturalizr ato compu sper horns IL. EL BIEN DE LOS CONYUGES [Niel Codigo nicl Concilio Vaticano 1 han expresado en qué consist espeifica- ‘mente este bien ola ordenacin del matrimonio al mismo. En la doctrina onciiar encontramos algunas alusione, casi siempre genricas: «bios es el autor del mat monio al que ha dotado de bienesy ines varot», sanarido y mujer se ayudan y “27a Tatras de ie SCDF de 22 de febrero 1967 bre rept dea vida humana, Expeciimen- te nota 32, Puede consase en Eelate W987, 330573 _sostignen mutuamenten,mutuum sibladtutorium et servitium praestant), «los hij ‘como miembros de la familia contribuyen a su manera a la santificacién de sus ‘res... y los asstrin en las dificultades de laexistenciay en la Soledad de la anciani- ‘dad» (GS, n. 48), «este amor por ser un acto eminentemente humano —ya que va ‘de persona a persona con el afecto dela voluntad— abarca ef bien de toda la persona Gb., n. 49)s, «los hijos son don excelentisimo del matrimonio y contribuyen funda- ‘mestaimente al bien de sus mismos padres» (ib, n. $0). Por otra parte, se ha de entender comprendido en el bien de los.cSnyuges[o que 1 Céder de 1917 desgnaba como (concept que hemos visto ala oper socio conn) ea each fn pea fun ayuda, poet co Tatrimonio una comunidad integral de existe, ‘Torden moral y sobrenatural, 1 qUue, a su vez, les capacita para el mejor cumpl Iniento del fin priniario, de &cierdo con el precepto biblico: «Por eso abandonard cl vardn a su padre y a su madre y se uniré con una mujer, formando ambos una sola carmen (Gen. 2, 24; Mt. 19, 5). tidad. ASf por ejemplo: «os actos con los que los esposos se unen intima y casta- ‘mente entre si, son honestos y dignos y, ejecutados de manera verdaderamente hu- ‘mana, significany favorecen el don reciproco con el que se enriquecen mutuamente en un clima de gozosa gratitud» (b.,n. 49), «la Iglesia recuerda que no puede haber contradiccin verdadera entre la leyes divinas dela transmisiOn dela vida y el fo- ‘mento del auténtico amor conyugab» (ib... 51). ‘Integrando los diversos elementos disperios, puede decirse g ‘comprende todo aquello que pueda redundar en favor del enriqu to, desarrollo o perfeccién ‘de los consortes enriquecimien- erfeccién personal Tos diversos sectores de la vida humana (material, econémico, afectivo, asistencal,reigioso, cic.) CConcluimos someramente: a) Que el bien de los eényuges nose distingue adecus- ddamente del consorcio o comunidad conyugal sino que es el resultado 0 logro de su misma operatividad; por elo no es un fin extrinseco (como el bien de la pro), tun fin intrinseco o inmanente, sin dejar de ser fin, puesto que esa perfeccion, Personal y comunitara se alcanza a lo largo de la convivencia matrimonial. 6) El ‘ado dc realizacion que puede alcanzar en cada caso concreto es muy variable & ‘merced de las circunstancias concurrentes, por lo que desde ef punto de vista juridi- ‘colo que ha de quedar a salvo es la wordenaciény de la comunidad conyugal al de los esposos. c) Esta ordenaciGn presupone: 1,° Objetivamente (0 @ parte re) el ‘Que los contrayentes sean aptos para la vida conyugal, lo que en principio se presu- me (Gl toda persona tne fs connubl, pore apa para el conmbio, sae lcaso en que conste la ineptitud dela persona (de abi la mulidad por incapaci de asumir las cargas matrimoniales; can, 1095, 3.*). 2.° Subjetivamente (0 @ parte ‘hominis) el que los contrayentes se muestren dispuestos ala normal convivencia ma- ‘rimonial sin exclur radicalmente esta ordcnacién al bien del otro™. Por alo, ene cjemplo que ha wtilzado a diverts efxot la dctina dl matrimonio conrido ot ody part vengaan de contrayens ea pusom del ot, salamos enn sues de iva EEsSal eno ene arunl Derecho candice ‘matrimoniales al calficar a uno de prima- flo y a otros de secundarios. De acuerdo con esto en la Enciclica Cast! conmubil se dice: «Hay, efectivamente, tanto en el matrimonio como en el uso del derecho con- ‘yugal, otros fines secundarios, como son el mutuo aurilio y el fomento del mutuo ‘amor y Ia mitigacion de la concupiscencia, cuya prosecucién en manera alguna est ‘ein n en sempre gu ede ay rl ats de st La -vigente Cédigo no ban pretendido establecero declarer una jerarquie entre los divesos ‘ines insttuciontles del matrimonio o que han optado por Ia igual significacién y ‘elevancia de unos y otros y los han situado al mismo nivel. Sin embargo, no ¢5 10 ‘mismo una y otra afirmacién. Parece, en efecto, que el legislador no ha entrado en cl toma de fa jerarqula de fines. Pero no entrar en el tema no quiere decir que los Jhayasitundo aun mismo nivel (lo que supondria entrar en el tema dela jerarqula de fines para pronunciarse por su igualdad «jrérquicay). ee een eee a aan ete San eae = ee ee Fin Homanae Mog, tm, 1, y Bxharacin ‘acon Can conmub tt 37. Famine Conor, 2. 9. ‘Ghcia Bann ve eee et exo fein go ad en br brine yi emai seni yf ‘etmatimoni, ot Constanan Gaunt Sp, en CDM "Ba 1941 Po Xl habla aver ‘stor exreon por a pre ope ek ° wrencia de las so connubio. Indepen- dientemente del carat nite del fin ge ie existen dos Srdenes de benes, que son verdaderos fines cabeplantears la cuetion des ala vilida constitucién de un matrimonio concreto se precisard la concurrencia de ‘ambos drdenes (se entiende que en su raiz 0 en sus principios) 0 si, por el contratio, seria suficiente la presencia de alguno de ellos que actuaria, por ast decirlo, como causa legitimadora de la unién. Aunque el cardcter teleoldgico de ambos érdenes de finalidades parece justificar la suficiente constitucién del matrimonio substenta- do sobre una sla de xa lads, debe sulndere. ae por see snes amas cndenacions, las dos deben veifcars (al menos virtualmente 0 en sus principio) ‘quunmatimonia.conget, Deo contaro, e matrimonio carceria de un clemen- y, como se dice isualmente, ninguna cosa puede subsist sin su esenca. ‘Seg un conocido axiomafilosofico, la bondad del todo depende de I bondad de todas las partes mientras que la imperfeccion del todo depende de la imperfeccin de las mismas (bonum ex integra causa, malum ex quocumaue defect). Noes obs- ticulo el pasae concliar seain el cual sla proe faltara el matrimonio retiene u valor (GS, n. 50 in fine), puesto que esta docttina se ha rferido a la hipétesi de esterii- ‘dad y no al sipuesio de impotencia, en que el Derecho eanénico delara la invalidez el matrimonio (ean. 1084) §8 FUNCION DEL AMOR CONYUGAL Aunque las fuentes biblicas destacan la importancia del amor conyugal al pre- sentar al matrimonio como la fntima union de los esposos (una caro) y como el sti ‘bolo de la unin de Cristo con su Iglesia (Gen. 2, 24; Mt. 19, 6; Eph. 5, 25-33), el ‘amor conyugal ha constituido para la canonistica una dificil euestin desde el punto SU, Navgnnars, «Sructura indica, ct.» PRMC, 56 (1967), 38, La sentence: Pato de 12 de noviembre d 1973 Inierprea i dot con en sentido ve los tos nes no puedes anteponeae ol eqlparare fit prosreador an qoetensta Que Pespones, dg, mimurvlorare) (65, B12. * Otelrvese quel punto setitco dl incvo eantsor leo tendent utd donde te quiere decir

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