EL PORTICO BAJO LAS ESTRELLAS
Una aventura de niveles 0-1 para CdM JdR
Por Joseph Goodman
INTRODUCCION
B uscando riquezas y huyendo de sus vidas de campesino,
los personajes investigan un sobrenatural pórtico que se
manifiesta tan sólo una vez cada medio siglo cuando las
constelaciones se alinean correctamente. El pórtico conduce al
túmulo de un caudillo hechicero de eones pasados. Los
personajes tendrán que batallar con hombres de hierro, una
demoníaca serpiente, muertos vivientes y una miríada de
extrañas estatuas para obtener los tesoros del temible brujo.
Esta aventura está diseñada para ser jugada por un grupo de
15 a 20 personajes de nivel 0 o de 8 a 10 de nivel 1. Recuerda,
los jugadores deberían tener unos 2 o 3 personajes cada uno,
para que pueda continuar la diversión incluso si alguno de sus
PJs muere. En las pruebas de juego con grupos de 15 PJs de
nivel 0, 7 u 8 normalmente sobreviven. El autor ha probado la
aventura con grupos de hasta 28 PJs y presenció una masacre
total y algunas sesiones con sólo un puñado de supervivientes.
El objeto de la aventura son las trampas y obstáculos antes que
el combate, puesto que esto asegura una mayor posibilidad de
supervivencia para los PJs de nivel bajo. Aún así, lecciones
sobre la fragilidad de la existencia humana surgirán
inevitablemente. El autor recomienda al juez adaptar la
letalidad de algunos encuentros cuando sea necesario
dependiendo del tamaño y habilidad del grupo de
aventureros, en particular para el área 3 (que potencialmente
puede borrar del mapa a todo el equipo si se apiñan en torno a
las puertas)
TRASFONDO
H ace muchos eones, un primitivo caudillo hechicero
gobernaba estas tierras con la ayuda de tribus bárbaras e
inquietantes criaturas venidas de más allá del vacío
interestelar. Cuando su mortal cascarón estaba cercano a la
muerte, sus extraños aliados le instruyeron en la correcta
preservación de su cuerpo, aislándolo en una tumba sellada.
Desde la tumba el brujo podría vagar libremente mediante la
proyección astral de su consciencia hasta lejanas estrellas. Su
intención era regresar más adelante para reclamar su mortal
recipiente, que sería posible cuando las estrellas se alinearan
correctamente. Sin embargo, las aventuras extraplanares del
hechicero no marcharon como él esperaba. Ahora, su cuerpo
sedente espera perfectamente preservado en su tumba,
protegido por encantamientos y la élite de su horda bárbara. Si
estas defensas se pudieran superar, los tesoros que guardan
serían para el osado ladrón.
TABLA DE ENCUENTROS
Área
1-1
1-2
Tipo
T
T
Encuentro
Abrasadora trampa de luz
Estatuas lanceras
1-3 T Estatua lanzallamas
1-4 C Ssisssuraaaaggg, la serpiente-demonio
inmortal
1-5 C Siete montones de huesos móviles
1-6 C Seis estatuas cristalinas
1-8 C 78 soldados de arcilla
INTRODUCCION PARA LOS
JUGADORES
Por largo tiempo has trabajado en los campos como los demás
campesinos, sucio y cálido sudor en verano y escalofríos
apenas acallados bajo una piel sin curar en invierno. La
cosecha de este año ha sido más de lo mismo, pero las labores
otoñales han sido el último clavo en el ataúd para el pobre
Roberts el Viejo. Cuando le visitasteis en su lecho de muerte,
os habló en un fino hilo de voz sobre constelaciones que no
aparecían en los cielos desde que era un mocoso. La última vez
que la Estrella Vacua se había alzado en el cielo fue hace
cincuenta inviernos, dijo. Bajo la luz de aquella exótica estrella
un pórtico se había abierto en los arcaicos túmulos de piedra.
Vio joyas dentro, buenas lanzas de acero y armaduras
laqueadas, pero huyó cuando los hombres de hierro atacaron.
En ese momento, viejo y moribundo, deseaba haber elegido
una vida de aventuras. La Estrella Vacua de nuevo se yergue,
y un joven con coraje podría ser algo más que un mero
campesino...si eligiera el camino que el Viejo Roberts no tomó.
Vosotros sí lo tomaréis. Parados ante las monolíticas rocas de
los viejos túmulos, observáis la oscura bóveda estrellada. La
Estrella Vacua se muestra claramente sobre vosotros,
refulgente. Tres de las ciclópeas rocas se apoyan precariamente
unas sobre otras formando un pórtico rectangular tan alto
como uno de los vuestros. Parecen estar situadas justo debajo
de la estela del lucero. Justo cuando la Estrella Vacua llega a su
brillante cénit, la luz se derrama sobre el pórtico, y un
fulgurante corredor de piedra se hace visible a través de las
rocas, pero sólo desde un lado de la apertura. Agarrando con
fuerza vuestras improvisadas armas entráis en el rutilante
pórtico, en el mismo que ayer no estaba, con imágenes de ricas
joyas y ardientes trigales flotando en vuestra mente.
 AREAS DEL MAPA
Características generales: A no ser que se diga lo contrario,
la mazmorra es oscura y seca. Las puertas no están cerradas con
llave. El acceso a la tumba está restringido, por lo cual no hay
monstruos errantes.
Área 1-1 – El pórtico: Aunque el corredor sólamente es
visible desde un lado del pórtico, pisáis sólidas baldosas de
piedra. La luz de las estrellas apenas llega al interior del pasillo,
que termina abruptamente en una robusta puerta reforzada con
planchas de hierro. Lo que parecen joyas o cristales incrustados
en la puerta forman extrañas configuraciones estelares.
El corredor se manifiesta sólo bajo la luz de ciertas
constelaciones relacionadas con la Estrella Vacua. Las
configuraciones estelares de la puerta son idénticas a las del
cielo nocturno visible al otro lado del corredor.
Si los personajes esperan un par de horas, el movimiento de la
bóveda celeste al inicio del corredor se iguala al del patrón de la
puerta. (Una prueba de CD 14 de Inteligencia permite
descubrirlo). Durante los diez minutos siguientes, la puerta se
abre por sí misma.
Puerta: En cualquier otro momento, es inamovible, como si
estuviera cerrada con llave. Prueba de Fuerza para derribarla de
CD 15; o prueba de Forzar Cerraduras de CD 15.
Trampa: Si se fuerza la puerta, una abrasadora luz surge del
patrón estelar. El personaje más próximo recibe 1d8 puntos de
daño (salvación de Reflejos, CD 10, mitad de daño). Es posible
detectarla con un Buscar de CD 20 (el personaje se da cuenta de
la sortílega disposición del patrón estelar).
Área 1-2 – El vestíbulo de los guardianes: En el lado
opuesto de la habitación hay otra robusta puerta. Cuatro
estatuas de hierro flanquean dicha puerta, dos en cada lado.
Cada estatua representa un guerrero distinto pertrechado con
yelmo, gruesa cota de escamas y larga lanza en posición de
lanzamiento. Las puntas de las mismas apuntan a la puerta por
la que acabáis de entrar.
Las estatuas son creaciones mecánicas del hechicero. Aguardan
el momento oportuno para lanzar repentinamente sus lanzas a
los personajes. Cuatro ataques de lanza: +2 al ataque (+2
adicional si algún personaje permanece en el lugar de la puerta),
daño 1d8.
Los abruptos lanzamientos son claramente mecánicos. Las
estatuas se mantienen en la posición posterior al ataque y no se
mueven más. Se les puede atacar, pero están fabricadas en
hierro puro y las armas empleadas contra ellas se dañarán. Sus
cotas de escamas están bellamente laqueadas con un cetrino
brillo. Las armaduras se puede recuperar, y ser usadas o
vendidas por el doble del precio estándar.
Las lanzas también se pueden salvar; la puerta no está ni
cerrada con llave ni protegida con trampas.
Área 1-3 – La sala del monumento: Esta espaciosa cámara
tiene suelo de mármol y una puerta en cada pared. Casi en el
otro extremo una colosal estatua de granito representa a un
bárbaro con uno de sus brazos estirados y el dedo índice
apuntando la puerta por donde has entrado. El musculoso
salvaje está vestido con pieles, pero sus ojos denotan
inteligencia, y de su cuello cuelgan amuletos y talismanes. Un
grimorio acompaña a una espada en el cinturón de este
monumento de nueve metros.
Los personajes observadores (prueba de Inteligencia, CD 12)
descubrirán una multitud de marcas de fuego en el suelo
marmóreo, como si se hubiesen encendido hogueras.
La estatua de granito pesa varias toneladas, pero puede rotar
libremente sobre una bien engrasada y escondida base. Con un
profundo y chirriante sonido gira para seguir el deambular de
los personajes. Si el grupo se separa, se fijará en el más grande;
la extendida mano es la que apunta.
Si un personaje hace ademán de abandonar la sala (incluso a
través de la puerta por la que entraron), la estatua proyecta un
ardiente chorro de fuego desde su dedo: +6 al ataque, 1d6 daño,
1d6 de daño adicional cada asalto debido a las llamas que
envuelven al desafortunado blanco y que se pueden sofocar con
una salvación de Reflejos de CD 10. Una vez ha comenzado, la
estatua lanza llamas continuamente una vez por asalto hasta
cinco asaltos seguidos, momento en el cual su depósito de aceite
se agota.
Los fornidos personajes que desgoznen las puertas de las áreas
1 y 2 las pueden usar como escudos contra la estatua; esta
barrera de cuerpo completo incrementa la CA en +4 pero reduce
a la mitad el movimiento.
La estatua puede ser apaciguada pronunciando el nombre del
caudillo hechicero en cuyo honor se talló; por desgracia, dicho
nombre no pasó a la historia y nadie lo recuerda. En cualquier
caso, es tan titánica que está por encima de las posibilidades de
los personajes el dañarla.
Todas las puertas están abiertas.
Área 1-4 – La cámara de las visiones: Un amplio trono de
piedra domina el centro de esta cámara cuadrada. Las paredes
están repletas de primitivas tabletas de arcilla a la altura de
vuestros ojos, con extraños símbolos garabateados sobre su
superficie. Cada tableta es un poco más ancha que vuestros
hombros, y docenas de ellas cuelgan de los cuatro muros. Sin
embargo, lo que centra inmediatamente vuestra atención es la
enorme serpiente que acaba de emerger arrastrándose de la
parte trasera del trono. Bandas de un intenso carmesí la decoran
y un demoníaco cuerno surge de su cabeza repleta de colmillos.
La inmortal serpiente-demonio guarda esta cámara de las
visiones. Habla con un sibilante siseo: “Soy Ssisssuraaaaggg, la
guardiana de esta cámara, y vosotros intrusos...” Entonces, sin
dar tiempo a parlamentar o a reaccionar, ataca.
Ssisssuraaaaggg , la serpiente-demonio inmortal:
Iniciativa +0, Ataque mordisco +6 melé, Daño 1d8; CA 13; PV
20; Movimiento 20'; Acción 1d20; Salvaciones Fort +8, Ref +4,
Vol +4; AL L.
Al morir Ssisssuraaaaggg, su cuerpo se torna en cenizas,
dejando únicamente su demoníaco cuerno como recuerdo. El
cuerno se puede utilizar para contactar con un demonio, y
usado correctamente como foco de meditación (prueba sortílega
de CD 12), confiere la posibilidad de usar el sortilegio Invocar
patrón.
Un portal mágico ocupa la parte posterior de la puerta de
entrada. Si esta se cierra y alguien sentado en el trono lo mira
fijamente, muestra estrellas nunca vistas en el cielo nocturno.
Las constelaciones se mueven lentamente en el “cielo” exhibido
en el portal. Un poderoso mago podría usar el portal para
observar visiones de lugares muy lejanos (prueba sortílega de
CD 25).
Cualquiera que estudie las tabletas puede recomponer la
historia que cuentan. Relatan la saga de una raza extraterrestre
que vino de las estrellas para ofrecer mágicas armas a una tribu
bárbara que doblegó incontables tierras con sus nuevos poderes.
Los extraterrestres retornarían cuando las estrellas se alinearan
correctamente. Otros eventos menos relevantes son predichos
por las estrellas (y las tabletas): sequías, plagas, el nacimiento y
muerte de reyes, etc.
Área 1-5 – Las tumbas de los caciques: Esta polvorienta
habitación es claramente una cripta. Siete espaciosos nichos
guardan pilas de huesos desordenados. Armas y armaduras
oxidadas adornan los muros que flanquean los nichos y
máscaras funerarias ocultan los rostros de las calaveras.
Las máscaras funerarias muestran serias caras con rasgos
primitivos, casi simiescos. Si se examinan los huesos más
concienzudamente, se descubre que no son del todo humanos:
las extremidades son muy gruesas, las columnas vertebrales
muy cortas, y los arcos superciliares muy prominentes.
Cada uno de los siete esqueletos fue un general en el ejército del
brujo. Si los cráneos de esta sala son destruidos, los espíritus
que animan a los guerreros del área 8 son liberados y descansan
en paz.
Los huesos son muertos vivientes casi descompuestos debido al
paso de eones. Se agitan y traquetean cuando alguien se
aproxima, pero no pueden formar un esqueleto cohesionado.
Las calaveras castañetean intentando morder, pero son
fácilmente evitables y aplastadas con un simple pisotón.
Siete montones de huesos móviles: Iniciativa -2, Ataque
+0 melé, Daño 1d4-1; CA 8; PV 2; Movimiento 5'; Acción 1d20;
Salvaciones Fort +0, Ref -4, Vol +1; AL C.
La mayoría de las armas y armaduras están oxidadas y son
inútiles, pero un hacha de mano, un hacha de batalla y una cota
de malla pueden ser recuperadas. Debido a su edad y
fragilidad, las hachas imponen un -1 al ataque y la cota de malla
sólo ofrece un bonificador de +4 a la CA.
Área 1-6 – El estanque brillante: Esta enorme cámara está
ocupada en su parte central por un enorme estanque
rectangular lleno de agua. Una difusa luz surge de la piscina,
iluminando gruesos pilares que se alinean a intervalos entre el
estanque y las paredes. Lo más perturbador, sin embargo, son
las criaturas cristalinas con forma humanoide que se
vislumbran entre las sombras. Merodean lentamente, sus
extraños cuerpos vidriosos refulgen como joyas cada vez que
un rayo de luz incide sobre ellos. Veis también una puerta en la
esquina opuesta de la sala.
Esta habitación supone la venganza del brujo sobre sus
enemigos; los transformó en estatuas cristalinas vivientes, para
atraparlas después aquí.
Capaces sólo de impulsos animales, son incapaces de hablar y
no necesitan sustento. Han recorrido esta cámara durante
milenios, atrapados en el interminable infierno de sus cuerpos
cristalinos.
Hay seis estatuas cristalinas. Sus rasgos son difíciles de discernir
debido a que son translúcidas, pero son réplicas perfectas de los
guerreros proto-humanos que hace eones fueron transformados.
Se sienten atraídas por la luz y se arrastran hacia las antorchas y
linternas. No atacan, pero sus acciones pueden parecer
amenazantes, y sí que se defenderán. Si alcanzan una fuente de
luz y no son molestadas, permanecerán quietas absorbiendo el
calor que desprende.
Seis estatuas cristalinas: Iniciativa -2, Ataque puñetazo +2
melé, Daño 1d4; CA 12; PV 8; Movimiento 10'; Acción 1d20;
Salvaciones Fort -2, Ref -2, Vol +0; AL N.
El estanque tiene un metro de profundidad. Su fondo está
pintado de negro e incrustado con miles de cristales que forman
desconocidas constelaciones. (De hecho, es como será el cielo
nocturno dentro de veinte mil años, cuando los extraños
benefactores del brujo regresarán).
La luz brilla a través de los cristales estelares, procedente del
área 8, bajo la piscina. Cada cristal tiene un valor de 10 pp y
cuesta dos minutos extraerlo. Arrancar cristales vacía parte del
agua del estanque, que va a parar al área 8; burbujas de aire
ascienden, y después el agua empieza a correr. El drenaje es
patente después de quitar diez cristales; tras la extracción de
cincuenta, el fondo se tambalea; y si se extirpan cien, se
desploma sobre el área 8, mandando a los que estuvieran en el
estanque en profuso y chapoteante torrente a la habitación
inferior (daño 1d6, salvación de Ref para mitad).
Área 1-7 – La habitación táctica: La escalera de caracol lleva
hasta una larga y estrecha habitación con una puerta en la
pared más lejana. Varias estanterías soportan soldados de
arcilla en miniatura, y dos mesas con ejércitos en cruenta batalla
están desplegados alrededor de edificios y colinas.
El caudillo hechicero organizó esta sala para ser su centro
neurálgico de cara a futuras conquistas. Cuatro de los soldados
de arcilla están hechos de plata: son los generales, claramente
los líderes de los cuatro ejércitos dispuestos en las dos mesas.
Prueba de Buscar de CD 10; tienen un valor de 20 po cada uno.
Área 1-8 – El ejército de arcilla: La puerta se abre a una
sobrecogedora escena. Una enorme cámara con tres niveles se
extiende ante ti. Un descomunal trono descansa sobre una
tarima en el extremo más alejado de la sala. Sentado sobre el
trono hay un caudillo de arcilla que parece el mismo que
representaba la enorme estatua. Una pulsante luz emana de un
globo de cristal sobre el trono.

Bajo la tarima, un nivel inferior sostiene a siete generales de
arcilla inmóviles; más abajo, en el nivel del fondo, un foso que
ocupa casi toda la cámara contiene un ejército de soldados de
arcilla. Hay docenas de ellos, ordenados en formación de
desfile, pertrechados con lanzas y armaduras de barro.
Una quietud opresora impregna la sala. Es la quietud de la
muerte, el silencio de una tumba. De repente, la quietud es rota
al mismo tiempo que el caudillo alza un brazo hacia sus
generales: en ese momento, el ejército en su totalidad se
tambalea al unísono y da un paso, y sus botas rompen el
silencio con el estruendo de la perdición.
Esta es la guardia de élite del caudillo, preservada y reanimada
hasta el fin de los tiempos. Los personajes no tienen ninguna
posibilidad de derrotar a los 70 guerreros, los 7 generales y el
caudillo. Todos comparten las mismas características: Iniciativa
+0, Ataque lanza +4 melé, Daño 1d8; CA 12; PV 9; Movimiento
10'; Acción 1d20; Salvaciones Fort +2, Ref +0, Vol +0; AL N.
Hay, empero, algunas ingeniosas formas de pasar:
• Si se sumerge al ejército de barro al extraer los cristales
del estanque, todos los que se encuentren en la sala
sufren 1d6 de daño de los cascotes cuando el techo se
derrumbe. Además, los soldados de arcilla que
sobrevivan se transforman lentamente en lodo,
recibiendo un punto de daño cada asalto hasta que se
disuelven en cieno.
• La fuerza vital de los generales está ligada a sus
esqueletos del área 5. Si las calaveras son destruidas,
las cabezas de los generales de arcilla se resquebrajan y
caen en polvo y pedazos. Los personajes llegarán para
ver a los generales ya destruidos.
• Los personajes más agudos intentarán asesinar al
caudillo directamente, lo cual terminará con la
amenaza.
Si el caudillo y los generales sobreviven, los guerreros treparán
desde el foso (una acción) y atacarán mientras los generales
observan. Si los generales son eliminados, los guerreros
perderán su disciplina y se dedicarán a deambular
desordenadamente durante unos asaltos antes de decidirse a
atacar. Si desaparece el caudillo, el ejército entero pierde el
soplo vital, convirtiéndose en una colección de estatuas de
arcilla.
La puerta secreta puede encontrarse con un prueba de CD 14.
El globo de cristal emite una luz continua. Tiene un valor de 200
po, ya que es una obra de arte. Un mago que descubra sus
secretos (prueba sortílega de CD 18 más tiempo de estudio y
consultas a maestros de lo oculto) comprende que lo puede usar
como una bola de cristal mágica. Dicho mago podría escudriñar
un lugar que ha visitado o del que tiene referencias (p. ej.,
puede espiar a una criatura de la que posee un mechón de pelo);
prueba sortílega de CD 18 para activar durante 1d6 asaltos;
penalizador de -2 por cada uso consecutivo en el mismo día. Sin
embargo, una vez cada 1d8 días, un rostro alienígena se
muestra en la bola y observa al mago. Es uno de los
benefactores extraterrenales del caudillo hechicero, que le
enseñó cómo usar el globo cristalino para guiar su proyección
astral, y que lo usa en ocasiones para contemplar las realidades
mundanas. Consulta el área 9 para más información.
Área 1-9 – La cámara del tesoro: Al final del largo pasillo
hay una espartana habitación que contiene estanterías de
madera, una sencilla silla y un jergón. Las estanterías están
ocupadas por un cetro de bronce, un brasero de cobre, bellas
armas y armaduras y un tomo guarnecido y reforzado con
brillante latón. En mitad del suelo hay un gran pentagrama con
un círculo perfecto de cristal en su centro. Dentro del círculo
reposa una mesa de piedra en la que descansan los arrugados
restos del caudillo hechicero. Una depresión cóncava preside la
mesa, justo sobre la cabeza del difunto.
He aquí los nobles pertrechos del brujo:
• El broncíneo cetro de hegemonía está grabado con la
mitad de una demoníaca faz. En sí mismo equivale a
150 po, pero mira más abajo.
• El brasero de cobre tiene un valor de 10 po.
• La panoplia de armas incluye una espada larga, un
arco largo, 40 flechas en su carcaj, una maza, una lanza,
un hacha de batalla, una daga y un hacha de mano.
• Hay una cota de escamas.
• El tomo está escrito en una lengua tan antigua que es
indescifrable por un humano de la época. Un mago
que lo estudie puede descubrir (tras una prueba
sortílega de CD 14) un hechizo de la elección del juez.
Si un personaje coloca la bola de cristal en la concavidad de la
mesa, contempla lo siguiente:
Escrutando la bola de cristal, contempláis un infinito fondo de
gris claro tachonado de titilantes estrellas. Una etérea imagen
del brujo vaga a la deriva por el éter estrellado. Entonces una
áspera cara de rasgos caprinos ocupa por completo la esfera,
mirándoos a los ojos. “Largo tiempo he esperado a alguien que
sustituyera al caudillo”, dice el extraño hombre-cabra con una
profunda voz. “Su periplo astral fue truncado antes de que
pudiera reavivar la chispa de su mortal envoltura. Todavía
necesito un aliado en vuestro mundo. Llenad el brasero de
cobre con madera de un árbol de dríade y encendedlo con la
pavesa de un fuego viviente. La lumbre os revelará la
localización de la otra mitad del bastón de mando. Encontradlo,
y seréis recompensados generosamente.” Tras esto, el globo se
apaga.
Se dice que una dríade ha sido vista en un bosque cercano...
EL PÓRTICO
BAJO LAS
ESTRELLAS

1
CUADRO
= 5'

SECCIÓN DEL ÁREA 8