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Historia de Colombia contemporanea (1920-2010) Ricardo Arias Trujillo [ios‘Andes 2 LA REVOLUCION EN MARCHA YLA POLARIZACION DE LA SOCIEDAD En 1930, después de medio siglo de gobiernos conservadores, los liberales lograron retornar al poder: El fin de la hegemonéa conservar dora se debid, en primer lugar, a las divisiones internas del partido, Pero también a su incapucidad para responder a los nuevos desafios que habian surgido en los aiies anteriores, asi como a la crisis del ao 1929, EL viunfo liberal, por esas mismnas razones, habia suscitade {grandes expectativas de eambio, {Las reformas que ltevaron a cabo los cuatro gobiernos liberales que se sucedicron durante los dieciséis aflos que estuvieron en el poder (1930-1946), buscuban responder a losanhelos del electorado, Sin que se pueda hablar en ningtin caso, de programas radicales, las polit reformistas de los liberales generaron, pese a su caracter moderado, tun profundo temor en ta opasicidn, que vio en ellas la antesila del biunfo comunista, Rapidamente, la socieckad colombiana se polarizs en dos bloques enemigos, cuyos enfrentamientos, alimenticas par la no menos tensa coyuntura inter acional, no s6lo postergaron la Imodernizacién de la sociedad, sino que precipitaron al pais en una ramvitica guerra civil LOS INICIOS DE LA TRANSICION Micntras que muchos paises de América Latina y de Europa Conocieron en ka misma epoca tansicione: Hamar ta auroritarias, no deja de cidn el caso colombiano. Relegados a un segundo plane ‘lurante largos decenivs, los liberates accedieron al poder por ka vin is dunno ne cians Cor Strom ISQURO) democratica y su triunfo fie respetado por sus adversarios. Es posible que el takante del primero de los gohiernos liberales hay contribuid ‘a apiteiguar los fnimos de Ios conservadores. Enrique Olaya Herrera que habia sido embajador en Washington durante fa iltima adminis tracién conservadora, no imrodajo cambios bruscos en et manejo del Fstado, Sut politica fue tan moderaca, que varios investigadores han su Hegada al poder no signiticd se I fin de Ta hegemonia lado qu conservadora La misma sensaci6n fue compartida por muchos libe- an frustradas sus esperanzas de cambio. rales de la époc que’seni Qhizd no era tun Sencillo lunzarse a una po no tatdarfa en comprobarlo st sucesor. Mas alld de la moderacion clas haeian diffeil dar timonazos del nuevo mandatario, las circunsta bruscos. Con excepeidin ie Ia vama ejecuitiva, los conser vadores contro- laban todas kas instancias del pader, EI clero se mostraba resuelto a impedir que kas bases del Estado confesional fuesen modificadas, Como muchosotros dirigentes, Olaya pensaba que habia que proceder con cali y prudencia, no sélo para evitar en lo posible los roces con la oposici6n, sino porque el pats, decia, no se encontraba preparado, para aventunas rieggosas, No todo siguidigual.a pesarde lo que decfan quienes aspiraba profundas y nipidas reorientaciones, Su gabinere de Unidad Nacional, que le dio cabidit a varios representantes conservadores en los ministe- rios y en las gobernaciones, se puso en la tarea de initigar los severos, Gran Depresion, que en I efectos causadlos por tras el desplome de las bolsas internacionales, habia sumido al mundo entero en una profunda crisis socioeconémica, Al reducirse drasticamente las ventas de las exportaciones de café, tanto el sector oficial como el privado, cortos de recursos, detunieron sus programas, De inmediato se disparé el dese s obras pleo y disminuyeron los salaries. Olaya impulsd piiblicas, en especial, las carreteras, que empezaban a competir cou el Wen, y apoyé las leyes proteccionistas establecidas.a finales de la hege monia conservadort con el fin de ayudar a la industria nacional. En. sof as eas Heras cone en 185, Fi. El ercer tome ee Gera com las reformas det gobieena de Lape? Pumareo, 0 en 1980, cul los iberales reresaon al paler, ambos casos, el niandatario pretend, entre otros aspectos, generar ppuewas fuentes de trabajo, Olaya también intento modernizar en algo ta vida politica, Dos acciones concretas apuntaban en est direceidn, Por una parte, quiso poner fin, mediante la creacidn de la cédula de ciudadania,a uno de los sicjos vicios que desvirtuaban fa democracia: el Irmde, tan reeurrente en los diferentes comicius eleetorales, Por otra, le dio plia cabida a las nuevas generaciones, provenientes, por lo general, de las clases medias, que en muchos casos debian su posici6n no a sus recursos s, Buena parte de Los nuevos, aquellos intelectuales y polfticos que encontramos en el capitulo anterior, hicieron asf su ingreso a la burocracia oficial, ‘También mostré cierta preocupacién por la sitwaciGn juridicn de ke mujer, la cual, hast entonces, le negaba la posibilidad de mangjar sus bienes in cles una vex contrajert matimonio, disposicién elimi- nada por el Gobierno. En el pkino social, Olaya reconoci tuna serie de peticiones que los trabajadores y sus representantes yenian solicitande desde tiempo ateis, como las vacaciones remune das y la jornada laboral de ocho horas. En otros temas, el primer gobierno fibe I se mostr6 particu Esadtotglesia, dos puntos qe muichos esperaban que fren objeto de importantes replanteamientos En eto al printer, Olaya se lita de unas emntas haciendas previamente adquiridas por el Estado, y a fomentar los présumos entre el ea do, mediante fa creacion jae aka muy de la Caja de Crédito Agrario, Nada de ello podis cont Poderost Sociedad de Agricultores de Colombia, que represemtaba.los intereses de los (ernucnientes. En fo concernieute al segundo punto, Olaya fue host « cualquier iniciativa que pudicra afectar los intereses del clero; cuando un grupo de politicos liberales Te sugitié: modifica €] concordato, el presidente respondid que “la politica definida det Gobierno nacional es lade mantener y eunplirel concordata [...] abste= higndose de gestion alguna de reforms y antes bien procurando que sobre él contintien desarrollinclose con toda cordialidad y armor’ kas relaciones entre el Estarlo y la Iglesia” Si desde comienzos del siglo xx, la dependencia colombiana frente a Estados Unidos se habfa ido forta- leciendo rapi amente, durante el gobierno de Olaya esa rendencia se como se puede observar, por ejemplo, en fa politica petrolera, favorable a los intereses de las compaitias estadounidenses, El gobierno de Olaya representaba, en muchos aspectos, el conti- nuismo. ¥, s critieas por parte de una mbatrgo, fue objeto cle sever oposicidn que ercia realmente que los "pilares esenciales de la nacién™ estaban a punto de derrumburse. Desee la prensa y kv wibuna pol ador no tica, Jos representantes mis intransigentes del Partido Conse cesaron de condenar al liberalismo, a sus valores, a todos los males que se desprendian de una doctrina inspirada en el protestantismo, ¢ kam: en el socialismo y en el :teismo. Sus écidos ataques no todo se dlirigian jinicamente a los exponentes de semejantes her aquel que se atreviera a colaborar con el partido liberal era vietima dle las mismas condenas, como sucedid con los conservadares 4 Nacional. Las relaciones habian decidido hacer parte de la U entre liberales y conservadores sulfieron un mayor deterioro debido al ereciente sectarismo politico que se desats e1 pais algunas regiones del los dos Santanderes. Peri (1932-1934), del Amazonas, elimind brewe- en particular, en Boy fa guerra que esta entre Colombia y rot os en la regi mente fas tensiones entre Tiberales y conservadores, Durante unos vaca por litigios fronte ‘cuantos meses, los dirigentes del bipartidismo pidieron reiterada- mente deponer los énimos para poder enfventar con éxito al enemige externo, Laureano Gémer dejé de lado sus feroces alaques contra el liberalismo en atas dle Ia reconeilincién nacional: en el interior! declaré ante el Senadlo en 1mm eélebre y aplaudido discurso,!* La prenss “Par, pare, par era, guerra, guerra en la frontera amenazaca!” ante el abrizo conservadora saludo efusivam ‘que se estrecharon Laureano Gémez, Felipe Llerasy Gabriel Turbay: “fue el abrazo que en toda la reptiblica se dieron ayer los hijos de Colombia, como simbolo 67: ba Ilsa, mare 1982, ns, 3,9 (£1 Pais 1 le sepiembne de 0 de la unidn y de la fuer © El arzobispe primado, Ismael Perdomo, Je transmnitié al presid He Olaya la disposicién del clero colambiano a ‘cumplir con ilimitada generosidad y entusi 8 amio los deberes quie su por a Ia Patria le imponen, sin rehusar ninguna clase de sacrificios".” Un aiio después, ef propio Laureano, con el mismo, emperio que antes, se encargé de reanudar Ios ataques contra el ibe yejo militar que le estaba dando al conflicto y por las nego ‘S6lo el valor de nuestros soldados, lez y pericia del ejército | supieron contearrestat la rorpeza de um gobierno que fue de error en error, de tumbo en tuumbo, hasta clar en la vergonzante ckaudicacién de Ginebr: Las retaliaciones que emprendieron no pocos liberales contra los conservadores por haber sido objeto de las perseenciones oficiales en los tos anteriores, agravaron la situacion. A todo ello se sumé el descontento de los scetores populares, molestos no s6lo por las pocas medidas tomadas en su fwor, sino, a is, por los problemas sociales que provoed la caida de los precios del calé a comienzos de los aris lreinta. Las tensiones se hiarian muchos mis profanda cont he Mega de un nuevo gobierno que anunciaba a los ewatro vientos su decisién de introducir reformas de mayor aleance. LA REVOLUECION EN MARCHA’ Alfonso Léper Pumarejo, un estadista identifieado con ama concepeién mis moderna del Estado y del manejo de la sociedad, ia, Pia dlicavo de Soar Lzese Glo na win ‘sla causa dat Congreso cloahinn He 1927 422 ae nonierbre de 183), Tallees Graficos Benedetti Hermanos, Panam, 188, pp. Hf la Repabliea Lie 1a ideas Heats en Co 188, cp, 42% Shr Mejia, Rae 9, ra al Fete Navona, Bog, Texcee Mundo, Universidad Nacional ais, Mite, te 115, cap, Peet iy 1953, Boge Sigh Dane, len y ides XXL cp. goberné al pais en dos ocasiones (1934-1938; 1842-1945), produ. Genco un profundo impacto en Tos contemporainees que vieron en €lun bito, para bien © para mal, en la historia colombiana, Para unos, Ja Revolucion en Marcha —nombre con el que se conoce st primer quattienio, el mas innovador de los dos— representaba el esfuerzo nis sélidlo que se habia Nevado a enbo hasta el momento para moder nizar al Estato colombiano mediante reformas acordes con los nuevos tiempos: en pocas palabras, era el comienzo de una nueva etapa Para owes, el Al ser ajenos a sit tomaba rumbos que deventir histérico, ponian en serio peligro la estahilichid nacional. Los impetus reformistas del Gobierno, alimentados por una ret6rica lena de promesis, no podian sino escandalizar a los sectores tradicionales, que de por siya estaban horrorizados por lo que hacian otros liberales en distintos lugares del plan: Desde un comienzo, Loper anuncié que el suyo seria un gobierno innovador. Con un lengtiaje desconacido para la sociedad, el nuevo mandatarie no dudaba en eriticar a las élites tradicionales, preocu padlas dnicamente por “constituir gobiernos de casta” y *regimenes ajenas por completo a las necesidades de las “masas popukires". Quiz lo ms sorprendente de todo era que quien form! oligirquicos", aba sas denumeias fuera an conniotade re te de esas misnias ‘oligarquias” que ahora fustigaba por desenter no, afirmaba en el mismo ono, estaria al servicio de una. derse del pueblo, Yes que su gobi repiiblica liberal y social. Liberal, en primer lugar, por su composieidn: todos los miembros del gabinete (con excepeién del Ministerio de Relaciones Esteriores, que siguid en manos de los conservadores con lin de darle continuielad a las negoeiaciones posbélicas eon el Pert) venian de las filas del partido que habia triunfado en las elecciones Liberal, ademas, por el programa que animabs al Gobierno. La Revolucion en Marcha partia de un postutado: para superar €1 atraso en el que se halkibs sumido ef pats, era necesario aplicar yeformas de corte liberal, El atraso remifa a diversos dmbitos, come zando por el econdmico. La Primera Guerra Mundial y, sobre todo, Ii crisis de 1929, habian Ikunado Ia atencién sobre ka fragilidad del sistema agroexportador larinoamericane, Con el fin de evicar los acional, diferentes riesgos propios a las vicisinades del in paises de la region impubiron la indasiia aacional para asegurar Ai menos la produccién basica y no depender exclusivamente de las potencias mundiaes, Desde his postrimerias de ks hegestonia conser yadora, it industria colonibiana venfa recibiendo apoyo oficial a waves de medics proteceionistas. Para los aitos treinta, el panorama incl. {rial presentaba varios rasgos favorables: se comtaba con un empresie riado pu del calé; con sna mejor infraestructura (sobre todo, en materia de vias de comumnicacion y de redes eléctrieas) y con una demanda interna creciente, Por estos motives, fa industria ncupaba tn lugar mis impor tante en Ia economia del pats y wendia a dliversificarse: al lado de los sectores tradicionales (bebidas, alimentos, textiles), fas inversiones se Sin embargo, pese a los avances, el desarrollo industrial todavia cera precatio y muy inferior a los logroy que habian aleanzado algunos paises vecinos, Para Lopez Pumarejo, e] atraso tecnolégico y la falta de una mano de obra especializada explicaban, en byena medida, Jos escasos resultados de la inelusiria nacional. Por consiguient nprescindible Henar esos va pais. EI desarrollo industrial implicaba emtonces di el campo ecucativo, 2Existian instituciones idéneas para eapacitar al 1 de la agrieultura y de la explotacion del pewroleo, y que, ademas, pretendia desarrolkar st. industria imecinica y sid 1s si se queria aprovechar la riqueza del Iamiirada hacia trabajador colombiano? En un pais que depen en qué estado s¢ hallaban las ciencias agronoma, quimic rgica? Resultaba evidente qu bases minimas para formar trabajadores especializados, wenican competentes. De ahi la recurrente necesidad de pedir aynda al extran- jer, no sélo en capitales, sino también en términos de conocimiento y de mano de obra ido Loper mostré cierto recelo por la presencia de [as grandes multinactonales que explotaban las riquezas del pais y su diseurso iuvo algunos tintes nacionalistas, pero nunca comparable por stiextrema moderacion, con el fuerte nacionalismo que para ese mismo entonces se manifestaba en paises como México y Brasil, Hitativas come, ‘ative eva artltia por mzones tant € La tarea edu tivas: la poblacton estudiantil era muy baja ex. todos los niveles dices dle desercidn eran clevadisimos, lo que se traduc cen aas pe les cran muy escasos y la infraestructura de analfabetismo; los macstros carecian de una adecuada los recursos ofick citac dejaba mucho que desear: Los esfuetzos emprendidos por el Gobierno, 1 democratizar y a mejorar la ensenanza, La educacion escolar fire declirada obligatoria y gratuita, la universidad acogi6 a las mujeres, se abrieron las escuclas nocturnas pura adultos trabajadores y se eliminaron numerosas resticciones que serv evitar cl ingreso a las aulas ele cierto tipo de estudiantes. Asi, al mismo tiempo que se intentaba facilitar el acceso de los sectores mis pobre Ia primvaria y de las mujeres los estudios superiores, se suprimian kas Wrabas que usualmente se empleaban para rechazar a los estudiantes indeseadlos, ya fwese por razones politicas (hijos de padres demasiado, liberales 0, peor ain, simpatia -s del "socialismo”), religiosas (hijos de no cat -0$), morales (“hijos naturale tes de familias 0 proven poco editic es), étnicas (nis demasiado aalejados de los patrones raciales socialmente aceptados). Los reformadores estaban motivados, ho simplemente por aumentar las tasas de escolaridad y reducjr cl analfabetismo, sino, ademas, y sobre todo, por establecer 1 sistema educativo menos excluyente, es decin, mas democritico, En relacién con la calidad de Ia ensedanza, la reforma apuntaba al desarrollo de und educacién laica, propicia al fortalecimiento de un ras metodologias y abierta a to pecidental, El jefe de Estado spirit eritico, racional, basado en nue rientes modernas del pensani lamentaba que “ka instruccidy secundaria, relegada casi totalmente a particular, subvencionada por el ‘Tesoro Pitblico, es hoy lun c1os en el cual vienen fracasindo sucesivamente millares de est diantes, desoriemtados y coufundidlos”. Y agregaba, en clara alusion al monopolio educativo del clero, que “El bachillerato se ha yenido convirtiendo en un negocio apostélico, y entre nosotros es una forma eit del comercio, que rechaza. con terca resistencia Ta intervencion del clero en ta edueacién, oficial’ Una ver reducida te injerenc el Estarlo tendria, incluso en los planteles privados, una intervenciin Jn y control de Jos programas ce estudio, muclis mayor en Lt elabor cen In escogen estudiantes, Si bien la mod tancia a ka primaria y a la secundaria, buena parte de los esfuerzos a dle los textos y en a concesién de los diplomas a los rnizacién del sistema educative le dia cierta impor- emprendidos por el Gobierno, apoyado por un grupo de intelec~ tuales de alto nivel, se concentrton en Jos estudios superiores. Ba en el siglo los afios treinta, la universidad pabliea contin: xix; las principales carreras que ofrecia eran medicina, inge yy deficiemte; entre las dife derecho, de una calidad por lo generat rentes facultades de un mismo pkantel no habia mayor relacién, lo que implicaba, entre otros Factores, la gen: muy dispersos, La Universidad Nacional, uno de los emblemas de las reforms educativas, fue reestructurada en Io académico y en lo A tivo. Aumentaron los recursos, ka aulonomfa y Tas liber erearon nuevas carreras y facultades, tales conto ea, arquitect ciones mas sélidas enire los diferentes saberes gracias a fa creacion de la Ciudad Universitaria y la investigacion recibid estimulos significa jas en los pines dues 8 se establecieron rel economia, veterinaria, qu livos, Muchas de estas reformas estaban inspi tivos que otros paises de Ta region ya hablan puesto en marcha, En este caso, la jafluencia del movimiento argentiny era notoria; German mente ene) Arciniegas, uno de los intelectuales que particips activ Ministerio de ancia y se Fducacion, conoeia muy de cerea esa exper sentia particularmente atraido por la libertad de catedra, algo nove- doso en el muy conservador escenario edueativo colombiano. Adem: gozaron del respaldo oficial y contribuyeron a revitalizar ef campo inte- ano, La Escuela Normal Superior, desde su ereaci6n en. 1936, en tun elina abierto a las nuevas corrientes de pensamiento ycon. de la Universidad Nacional, otras instituciones también Jeetual colomt 78, “Mensaje al Congreso Nacioual en la instalaciin de wus sesionesordinarias de 1935", en Lage Fumargjo, Alfonso, Oloas wlcas, Bag Clinara de Represeneates, 107 LL Hp. 6 sions uh cononaa coxtesteonssny (904010) jucle cle cientificos europeos que habian huido de eLapoyo de un p a extrema derecha, se convirtié en un centro intelectual que renoys, as de} saber en diferentes disciplinas, Por una parte, se encargé de la formacién de maestros de ensefiunza seeundaria, que se especializahan en na de Tas euatro reas que se iimpartian en ka Escucks; Ciencias naturales, fisica y matemticas, literatura e idiomas y ciencias sociales, Una yea culminados sus estudios, los recién egre- sados se convertian, 2 su vez, en maestros bien capacitaclos para trans- mitiv sus conocimiefitos a los bachilleres en las diferemees regiones. Por otra parte, la Normal conaibuyd de manera decisiva las primeras en el pai formas de institucionalizacién de las eiencias sociale . Esto significa que propicid Ia profesionalizacion de discipli a, la Fingtiistica, ete, que fl historia, Ja antropologia, la yeogral el momento habian estado en manos de simples aficionados, tos cuales, cen sus ratos libres sin el bagaje académico apropiado, se convertian en ‘antropéiloges”, “historiadores”.,. Los estuiantes de la Normal, por el contrario, cursaban todo un programa académico, familiarizandose con las tenxitieas y Jas teorfas dominantes en las universidades euro- peas, y demostrando, mediante rigurosoy exiinenes, que estaban et capacidad de manejar las herramientas propias a las ciencias sociales. Ente profesores y estudiantes se formé una comunidad académica que, aunque todavia muy pequetia e ineipiente, hizo valiosos aportes cnt las diferentes areas. De Ernesto Guhl aler: mano del etnélogo francés Paul Rivet; de los geogralos yPablo Vila, espaol; del fil6logo Pedro Urbano Gonziler de la Calle, también espaol, del historiador alemn Gethard Masur o del espai ol Jose Maria Ors Capdequi, entre otros destacados investigadores extranjeros, las clencias sociales en Colombia adqui rieron un rostro mas moderno. El paso hacia wn saber mi solide? de los marcos tedricosy metodologicos fue posible no solo por la de los que hacian gala los eruditos europeos; tan importante como la renovacibn ce los “instrumentos”, fue la aplicacién de esas twenicas y esos saberes i la realidad colombiana, De una u oura manera, las inves secentraron tigaciones de Gubl, de Rivet y compai el muy nove: doso estndio de los rasgos étnicos, geogrificos, lingiisticos, historicos, indo sus particularidades, en ocasiones sus riquezas y, €n Locos los casos, la diversicad de la nacion, En esa tarea Jos secundaron muy pronto sus diseipulos: por eitarapenas unos pocos » Uribe en la historia: Gregorio Hernandez ejemplos, Jaime Jaran de Alba y Virg Jogia. Todos ellos, junto a muchos otros igualmente destacados en esas via Gutigrrey en la antropologia; Lauis Flores en la filo- yotras disciplinas, sentaran ls bases para el estudio ce un pasado y tun presente que diferia notable oficiales. Quizd en ese enfoque reside uno de los p de la Escuela al pen: cidn del profesoracto, del desarrollo de las ciencias sociales, del surgi- micnto de una incipiente comunidad acadiémica, logros de por si muy aliosos, el reconocimiente de Ia diversidad cultural, regional, lings te cel que difundian los cireulos pales legados miento colombiano: mis alli de ka capaci ica, constitufa un paso hacia la construceién de un modelo de naci mucho mas comple) que el que habsan construido las ites de finales del siglo XIX: asi, a un pais eatdlieo, hispanohablante, y, si no blanco, al menos mayoritariamente mestizo, identificado con los modelos de ‘cvilizacién™ europeos, se sumé, todavia con muchas difieultades y no pocas convadicciones, la imagen de una nacion mas diversa, mas plural, que hundia sus raices en los tiempos prehispanicos.” La politica cultural del Gobi no encontré en la Revista de fas Initias wr med st apuesta, Esta publicacién oficial agrupé a un sclecto grupo de inte- lectuales liberales que se convirtiero » muy eficwz para difundir sus ideales y para legitimar 2) “ejecutores de Ia moderni: cidin del sistema educativo y de Is promocién de métodos cientificos para el estudio de Ia realiead nacional” ENG novedoso de la reforma educativa, orientadaa la brisqueda del progreso ierno y sus simpatizantes insistian con raz6n en el eardcter 7. Lina muy buena sitesi sobre i mmportanca de I rxS se erent en fail Jaime Eevaeeo, La Eacels Normal Superior: ay senillera eis enc hums socials", en Sierra Mejia, Ruben (ec). Area teal lta § orn, Bog Universidad Nacional, 2009, pp. 57409, 7B. Marines, Lina Marta, £ Revit de as Talis, 19%6-L93% sa inrinles r rasaresy enor deta reform urate seta [aba de grat], Boa, Carvers ds Hivonia, Universal eax ies, 2000p. 72 68 tistomis cor omnes cosrenronsnn (19202910) cconémico, a la inclusion de nuevos sectores y al desarrollo de una ycientifiea. La profirnca fe que algumos dirigentes, liberales depositaban en la educaci6n introduefa una mirada mis opti- mista sobre el individuo y la sociedad colombiana, una mirada alejada de los sombrios vat ios que raza geografia y en la raza, profundamente elitistas, En adelante, si el Estado cumplia su misién como docente, 1 individuo, dorado de un aparato racional susceptible de indicarle las mejores opciones para 6Ly para el conjunto ae la sociedad, estaria en condiciones de contri bnir con el progreso del pais, un progreso que no era entendido |, Lopery sus asesores mtclecttales erefan, en efecto, que la educacién también io liber rajar grandes heneti ios politicas; para todos ellos, una bi formacién debia ser una herr democracia, Preocupados por el los pediagogos liberales espera blindara al ciudadano contra el fascismo, el cual, gracias en parte al ige de la extrema dereeha do n que una mejor preparaci sulragio electoral, habia alcanzado el poder y amenazaba ta demo- ccracia en varios lugares del planeta, inclutida Colombia, Es tudes explican, en cierta medida, € del Gobierno en difundir Ja cititura en amplios sectores de la sociedad, en partieukir, en los sectores populares, a los que erréneamente se juzgs propensos: a las veleidades antidemocratieas.™ Sibien esistia el deseo de “educaral pueblo” para controtarlo mejor (vieja receta de las élites de toda el comtin J), en sus dos gobiernos Lopez también quiso lemocratizar la eultura ofzecienda a los sectores ial. La di sién del libro mediante bibliotecas aldeanas, ferias del libro, publica togralia populares r levis posibilidades para sti desarrollo espiri ciones con tarifis reducidas; las ese! cs, ln cine ambulae educativa, las conferencias didicticas apuntaban en ese sentido. Mis atine Lopez y su “equipo cultural” de colaboradores desplegaron 78. Sia, Renin, “Replies ier sn Cohombit" epilienhiera,stoetuoesy tara ppt, Medellin, La Carveta, AN, pM tw, pp ABT, importantes esfuerzos para rescatary promover la “cultura popukwe™, el sfolclor” (Haibulas, coplas, refranes, cuentos, ete,), considerados por los imelectuales liberales como una especie de “reencarnacidén de lo mas anténtico que tiene u pueblo Las politicas econémieas, educativas y culturales replinteaban, todas elas, el papel del Rstudo, Si ta gran preocupacion de ts Gonstituci6n conservadora de 1886 era asegurar el orden y el desa- ba que el radio se para cumplir con nucvas metas rralla econdmico, la Revolucion en Marcha consider de accidn del Estado debia amy econdmicas, docentes y culturales. tizar el bien comin se necesitaba un Estado interventor, eotado de que reformar la Constitucién, Otras medidas de In Revohucién en Marcha pocas palabras, para las competencias ¥ de los recursos indispensables, Cor mecanismos que facilitaran el interyencionismo estatal, ha plant Es el caso de la reforma tibutaria. Hasta entonces, los recursos estatales dependian esencialmente de los impuestos que gravaban kas exporiaciones y las importacion cs, un modelo obsoleto que sometia al Estado a los vaivenes de la coyuntura internacional. Al igual que cen el siglo x1x, los ingresos fiseales eran muy reducidos: la pobla- la ion en. cion_no pagaba pricticamente impuestos y cuando éstos exist ‘evasion era la norma, Lopez inicié un proceso de modernira las finanzas, mis equitativo y racional, sustentado en la creacién de nuevos impuestos y en el increntento de las obligaciones fiscales de los Li delieado. Lopez asuntas que iban ms all del plano espir intervenciGn estatal también era imprescindible en tro punto. Jddera que la injerencia de la Iglesia catoliea en. ocasionaba grandes rastornos no sélo a kt institucién eclestistica, sino a kt sociedad en sit conjunto. En los del Estado y en las decisiones de los individuos, tarea facilitada por stu iy sus alianzas eon el Partido Gonservador: 1 la Iglesia inter alto grado de politizae la educacion estaba bajo su control; pretendia imponer un Gaico 7 hisrowta bp Corasunn coxrparonven (1920-2000) modelo moral y jucidico para ka mujer, ka familia y el mat Por consiguiente, era imprescindible delimitar el poder aspectos principales de fa reforma se centraron en las relaciones entre las autoridacles temporal y espiritual, la educacion, el estatute de la mujer; ky Adicionalmente, se qui ibertad religiosa, el matrimonio chil y el divorcio vincular, abolir el nombre de Dios del predmbulo constitucional y algunos articulos concordatatios que le reconocian dliversos. priv egios a} catolicismo, Todas estas medias implicaban modificar el concordate, pues temas como la educaciéa y el matri- monio babfan sido definides mediante un acuerdo enue ef Estado, 10 y el Vaticano, adekinte, no se pretendfa, de ninguna m relegar al clero a los asuntos puramente espirituales ni, mucho menos, desconocer los derechos religiosos de Ia pobkicién, Al limitar el poder de Ta Iglesi Gobierno buseaba un doble objetivo: por una parte, al Estado de las trabas que imponia el poder eclesiistico y 1 el ejercicio de sus atribuciones; por otra, extender la ciudadania a sectores hasta entonces excluidos por los ricios del elero, L por ériteris sociales, La Revolucion en Marcha signifi una nueva politica incliyente del Gobierno también estuve determinat elapa en las rekieiones Estado-sector populares, lo que supuso fuerte virajecon respectoalo que habia sucedido durantela hegemonfa conservadora, Ya hicimos mencién al cardeter de est muevas rela cioney cuando nos detuyimos en las politeas cullurales de] Gobierno con respecto a obreros y campesinos, Un giro de la mismna na sealer se aprecia tumbién en la esfera laboral, Después de i dos décacias de exigir infructuosamente el reconocimiento de sus derechos labo- sales, el cumpesinado y, sobre todo, et protetariada urbano, eneon= uraron en el gobierno de Lope un interlocutor dispuesto a introducit algunos cambios de importaneia, El problema social, como ya vimos, haba ilquirido dimensiones nacionalesy las thnidlas y escasas medidas idoptadas por el gobierno de Olaya Herrera, lejos de apaciguuar los Jinimos, quizd los atizaron mas debido a la frst on que generaron, La Revoluci6n en Marcha quiso dar, a su mauera, ana respuesta tanto, agratias como a los conlictos laborales turbanos, En 1936 alas hue Colombia todavia dependia en muy buiena medida de la venta de café de la inmensa importancia que revestia sored ener Pers =p or altel pas ea uy ata en trinon agratios con a anya alg, te ain yen, Mientras qe tenolgt cons eae ele ecw dn feriees que hacian en ie Heras, se ieopsamch ve erplanon en av conjano, nose mosniban decdidos 2 nos, uruguayos @ chilenos, los terratenientes ment «inmovariones tenis. Tapco paretan fr prvivecin pate de nen ; eo jales con sus trabajaciores, todavia sa las relaciones so dispestos reno ‘ sdieionales, mis propias del mundo colonial sustentadas en las for yhacendatario que del sistema capitalista moderno, ; esigual distr Lopes se mostraba preocupado no tanto por lam ucidn de tas tierras, como por la baja produccién de las grandes propic~ davles, ALigual que muchos otros politicos, crefa que fa soluici6n consistia en presionar a los terratenientes para que explotaran de manera mis adecuiadla sus enormes estensiones y asf aumentar la produecion y Te oferta laboral. Segiin sus cileulos, de est manera la poblacién rural fa mejorar en algo su situacién y, al mismo tiempo, se sentarian podria mejorar en algo su sin y Jas bases para el desarrollo de una mayor demands. La Ley de Tierras fada en un lapso de estipulaba que la propiedad que no a expl » se amplid a quince— pasar iex arios —un plazo que hie del Estado previa indemnizacidin, La misma ley introdujo una novedad ial: es irle a la propiedad el cardcter de bien so finca, una hacienda particular, podrian ser nacionalizadas si ‘algtin plan oficial que pudiiera beneficiar a la comunidad (la construecién de wna carretera de una represa, por ejemplo) audaz en Ia legislaci6n laboral. EL taba El Gobierno se mostro mv nizado y inas politizado que el campesino, jador urbano, mejor or do por los diferentes partidos, sobre todo a partir de 1936, era codie ‘ cuando el gobierno de Lépee elimind las restriceiones ecandmicas y culturales que Fimitaban el suftagio de Tos hombres, los derecho al voto, lo que-le dio una mayor heterogeneidad al electorade, ales y étnicos, La extrema derecha, agrupada en torno al Partido Conservador, la izquierda radical, liderada por el red Insroma pieovosns cossesinonane (19202010) ‘creado Partido Comunista (1930), la disidencia liberal orquestada p nal Revolucionaria zquierdista, Lopez no se el apoyo del prolera riadto, no s6lo por lelant6; desde antes, las debilidades del sindlicalismo, las divisiones de la izquierda y et poco formas sociales que respalclo con el que contaba Jaitin mas alld cle Bogota, faclitaron ef aicereamiento entre kuftevolucién en Marcha y el pueblo, wna alianza que se consolidé atin masa medliados de losafios treinta, cuando tanto Jia uxne como ef Partido Comunisia se unieron al liberalismo, Las reivindlicaciones del mundo obrero giraban en torno.a mejoras condiciones de abajo, al reconocimiento de bb organizaci6n sindical ya derechos relacionados con diversas prest clones. EI Gobierna no defraudé a lam de tabajadores. Presioné a fos empresarios para que aumentaran Jas rem iciones, lo qu iciones del obrero, sino adem permitiria no sélo mejor estimulara produccion industrial yagricola; veconocid la huelga como derecho coustitucional, establecis el dest nso remunerad y la prove cién a la maternidad, una medida dirigida, sobre todo, a lay madres trabajgeor apoyando juridica, eeonémics También le dio un gran impulso a ta organizacién obrer, fue asi politicamente al sindicalism que surgi6, cx 1938, la Confederacion de Trabajadores de Colombia (ere), centre pattonios y trabajadores, el Gobierno intervino para favorecer los empleados del ferrocarril, del petrdleo, de las willudoras de café, ier central obrera del pais, En los numerosos conilictos BI apoyo gube Lal explica, sin duda, ef auge del sindicalismo, mero de susaliliados y el de que vio erecer el ndicatos asociados tiempo que se expancdia por nuevas regiones del pais. EL mundo luboral experimenté un gran cambio. Privados hasta entonces de muchos derechos, resultabst evidente que tanto el campe: sino como el trabajador urbano no eran verdaderos ciudadanos, pues la ley no eeconueia sus peticinnes, la “buena sociedad” sospechaba de ellos y el Estado Jos reprimia. A partir de la Revolucién en Marcha, las relaciones laborales quedaron reglamentadas en términes modernos | pero los efectos de las medidas sociales iban mas alli del plano estiets n forzosamente mente fahoratl, 0 mejor, las reformas sociales implic 1 ots Jimbitos. El humilde empleato foria de ciudadano: ese cambio, ese transcen- io” el jornalero podian aspirar a una mejor a ‘ha de servi :i] cambio, significaba que la “much det de la finca, el chofer, podian ahora vora calidad de vida (en su trabajo y en su cotidianidad) , po ‘edad de sus jetes, contar con el respalilo del Estado para provegerse de la arbi toda ello no 110s parece mucho; pero para la gente gnificé una verda- Hoy, seguramente, de que realmente fite poco, tle In Gpoea, a pes deta revoluci6n, tanto juridiea, como social y mental: Part los liberfes [ae alrts deberia de quedar ta nocian de parley", simplemente al uso para el sermén, para la contienda elec toral @ parte] enfremtamiento balico, Se teataba ahora, por el cont rio, del “pueblo” como “sujeto aedivo” —aunquee desde I un “pueblo nie” por educar y guiar— objeto de deberes, pero tame bin de derechos, vereludera encarnacion del futro [I La ampliacién de derechos también beneficié en alguna medida a por alas comunidades indigenas. La Repiiblica Liberal, influenc a politica indigenista mexicana y por el activismo del movimiento peruuino Alianza Popular Revolucionaria Americana, funds el Instituto Eqiolégieo Nacional (1941), det cue 1 jo la conduceidn de Paul Rivet. Los Giones de cmblogos colombianos, ba trabajos dle campo y las publicaciones del Insti : cjaban a los indigenas. Las 7 1 pusieran el acento sociales que aq en los grandes problema Investigaciones también se enfocaron en sus rasgos culturales, Io © ssidad cultural de ka sociedad colombiana, contribuy6 a valorizar la di Algunios escritores ¢ intelectuales colaboraron en est unismna tarea, parti= cipando asi en una amplia corriente indigenista presente por entonces: en toda América Latina: en novelas, en articulos periadisticas, en, pintura, exaltaron lo “americano’, denunciaron los attopellos de Los u riesromts be carannns coxrmntosns (19202010) que eran viclimas los indigenas de lay cnicherias, reseaniron el mundo, prehispinieo, defindieron los derechos de los indigenas.” G otorgar nuevos derechos la mujer; al obrero, al jas a sti politica reformisia, el Estado extendié sus bases. Al umpesino, a los este diantes, el Estado se hac is ineluyente, ais repr sitativo y. por lo lanto, mas democratico. Gierto, 10 inclufa a todos les seetores histori camente gginados, pero eran paso hacia una sociedad mas phwal, Un paso timido, sin duda, como fo sefialaron en su momento unos cuantos seetores del liberalismo y de la izqu ‘da, muy minoritarios para inelinar fa balan a st fivor, Mas alli de la retoriea empleada por el Gobierno y sus simpatizantes, la Revohucién en Marca fi realidad, um modesto plan de reformas que no 160 j sJaambicién de cambiar profiundamente las reg de juego. No era ese el propdsite, del propio Lépez, un destacado miembro de kas élites mac jante objetivo no figuraba entre los planes de buena parte de la dirigencia liberal, en el fondo, bastante conservadora. WNA REVOLUCION A MEDIAS La mayor parte de las reforms impulsidas por el Gobierno se quedaron an ino. Fue el caso, por ejemplo, de quienes se identificaban con el “feminismo”. Si, por una parte, la emancipae Gién de las mujeres se vio recompensada con el derecha que se les otorgé para ingresar a Ia universidad, asi como con la eliminacion de algunas tac dle ea wsulas discriminatorias en las relaciones conyugales, los estauntos juridicos continuaron discriminando claramente a la mujer en materia moral, sexual, familiar, EL nuevo Codigo penal de 19 6 equipard al hombre y a la mujer en cuanto a la responsabilidad de los 80, Pined Sire, Rubs Rober, “Chand los indie xe ywchen comunistas (1N102850)", (ed), Repriin tba cut 9 siinted, Bogor, Universidad Nacional 20119, pp, 288216, CC et mismo autor, La reinlicacién del india en el pensarienta social eolombjne (1880-1950)", en Arocta, Jaime, Fiedemann, Ni ele Ce), Ui vie de imran sei. Antmpulbgin on Celonhin, Bagot, Editorial Exo, 1984, pp an elitos, pero permitid que las sanciones fi vis dristieas para las En el adulterio, la mujer podia ser recluida en un establecimiento rmpo-que deci de cuatio altos, En el defito de concubinate tambien is penis mayo tes ian part ks met: Dominabs el principio de irresponsabilidad si cel marido asesinabs su nuier legitima sorprendida en “acto carnal o dleshonesto” [por lo cial] hasta los ates 50, los marie celosos conti ponaron matanco impunemente.®) En asuntos politicos, la mujer siguid igualmente excluida, Los pocos avances que se dicron en el campo de los derechos de la mujer se explican, en muy buena medida, por la actitud conservadar de los propios libe s, el dinamico lider estudiantil de Jos avios veinte, quien habia alentado a las mujeres a expresar su descontento por la disc de la que cran objeto, se opuso, cen la década siguiente, a las nuevas reformas edueativas: la educacién, mixta, dec come consecuencia Irastornos sexuales” pi mujer: st ingreso a ka unniversidad era un “simple brote demagogico™ aber: “que la mujer no, que quiere desconocer un hecho irrefutable, es siete competente para ciertos menesteres y profesiones que perte- hecen y corresponden a los hombres”! Los derechos politicos de la mujer suscitaron también hondas discrepancias en las filas del Partido, Liberal, Jorge Elicer Gaitin, Gerardo Molina y José Mar, represet tances del liber eran favorables isme “progresista”, del socialismo y del comunismo, al econoeimiento pleno de sus derechos come dana, Otros, invocando todo tipo de razones, rechazaban tates inieia tivas, Armando Solano, 2 quien ya hemos eitado en otras ocasiones, SS. Palacios, Mavens Ftv lati le oles Com 1875-1904, Borg Nori, 105. 159, S82 Cyc Nelaper, Magda, "Condicin jriieny souk ee Ta mujer". 6 cit, p28. CE tambien Tira, Alara, Ayton pation primer yb de Min Li Boot, ntl Golambiann de Cultura, 198, ppeAI8120. many: 241 Nuestra mujer, gracias a Dios, ¢s esencialmente casera, daméstica, y es demi del hog Ab donde despliega sus buenas y malas condiciones ribs sit fuerza y sit gracia, Los que algo, amque poquis ygamtos todavia de Intinas. no queremos, no tleraremas, ki mujer politiquera, Ia mujer de accidn, oradora, periodista 0 redlentora del pueblos? Para el pais no esti preparada para int inistro de Gobierno, Dario Eehandi la mujer Yen ese 1 Tiempo, el diario liberal mis influyente del pais, eriticaba con sarcasmo ta sitmacién de las mujeres tras la Segunda Guerra Mundial: “Las jévenes solteras se rien del matrimonio, y proclaman el derecho de rvenciones oficiales tener hijos sin necesidad det neulo sagrado. Otras muchas, mas 0 inienos asextales, que antes se casaban para buscar apoyo ccondmico, declaran la voluntad de 1 ¢ solteras, y las easida se estiny divoreiando”, El diario insistia Ta necesidad de salvar a la mujer y de evitar que se sometiera “a la prueba insensata del voto femenino, que sera el paso inicial en la transformacion fwnesta cle nuestras costumbres y de la pgna entre los sexos”.® Asi, yoceros del liberalisino legitimaban Ia el thundo mascutino y el femenino, abocadlo este diltimo a una especie de las “buenas costumbres decfan los conservadores y los expontentes mis recale regral El campo educative conocié el mismo resultado contradictorio, ‘oridad de la mujer; estableciendo uma separacién tajante entre Nada diferente Intes del eato~ licismo Los propésitos originales permitieron reducir en eierta medida el analfabetismo, pero la calidad ofvecida a los estudiantes era muy desigual. Los contrastes que ya existian de tiempo atras entre la eelucae ci6n privada y pablica, entre la educacion urbana y rural, se bieieron mas evidentes, en detrimento de las segundas. Yi buena parte de los SE Tiempa 8 deagosus de 1985, chlo en Tir, Akar, dp. et p. AB BL AF Temps 2 de enero de 10 kad en Hi 8. Voges, Malt. “Conti sie ridin y social dle bx mer, emp. ei pe. r esfuerzos gubernamentales estuvieron enficados en promover una de la ensefianzt confesional, los educieién independiente de las trab: resuliados, Cn este caso, tampoco fueron muy alentadores: tan pronto tlegaron los fiberalesal poder, la Iglesia abri6 nuevas universidades cato- ficas en Bogota (Javeriana) y Medellin (Pontificia Bolivariana), las dos pa cla, en un futuro cercano, ee manejar el pais principales ciucaces del pais, en fas que forméa buena parte de los hijos de ks elite, ha Si bien los trabajadores urbanos recibieron ln atencién del Gobierno, la poblacién rural, pese a constinuir la mayor parte de ta verdade te de las auto- i el ntimero de heetireas q poblaci > apoyo de pi vida reforma agrar simplemente decepeionante. Para 1 Gobierno distribuy6 entre el Pero asi esa cifta hubiese sido mayor, campesinado fue insignificante. dificilmente la situacion hubiera eambiado para la poblacion rural. De hecho, en departamentos como Boyaed y Naritio, la tierra estaba divi- dida en infinidad de minifundios que perteneeian a familias campe- uy pobres, pues no existia una politica agraria que los apoyara parcels, tierra, asesoria en mercadeo par no, ademmds de us necesitaba eréditos, conock EI campes mientos para explotar invertir en productos econdmicamente atractives, vias de comunicacién, seguros que protegieran la inversion contra las adversidades de la naturaleza. jerras de Ia Hamada Nada de esto estaba contemplado en la Ley de 1 Reyolucién en Marcha, mucho mis interesada en modernizar la g propiedlad que en promover una verdadera reforma agnuia, Ysi los obreros urhanos contaren con un apoyo mis decidida por parte det Gobierno, quiz el precio que pagaron fire muy elevadlo: su respaldo al liberalismo se wadujo en su sometimiento al liberalismo, lo que comprometié seriamente su posibilidad de actuar de manera un poco ands austnoma, é de aque le diera eabida a temas ta jsmo conseryadurismo caraeteriz6 las relaciones con la Iglesia, Par a una reforma religiosa aulos lideres del liberalismo, plan delicados como el matrimonio civil, el divorcio y la educact6n at resultaba a todas luces inoportuna, pues cess medidas no s6lo provacarfan nuevos enfrentamientos bipartidistas (como lo ditia Ednarda Santos, suces Presidtencia), de Léper en ki 7% tnesromia me: conan CON TPMPORANK (120-900) sino que, ademas, al atentar contra la 74 veligiosa, debilitaria “Ia base fundamental de la exeltura colombiana”, segtin Carlos Lleras." antes del cl Durante los dos gobiernos de Lopez, altos repres solian asistir a las ceremonias oficiales en compaiia dle representantes estatales y en las paginas de £1 Liberal, principal diario lopista, era ur articulos bastante condescendientes con la iglesia, Cuando el concordato fue finalmente aprabade por el Congreso y recibi6 el visto bueno de dos de Jos principales jerarcas del episco- paclo, el propio Lopez, en su segundo periodo presidencial (194 1945), prefirié no ratificar el wratado, ach Jendo que no era prudente invodueir el divorcio y el matrimonio civil en una sociedad como Liberales menos temierosos de las ias santas, recor nclo daban que, mientras en Espaia “el seior Avaia esta reconsir con mano firme todo lo que kas derechas le echaron abajo, nosouos venimos aqui indecisos, balbucientes, a hacer la reforma, con dnimo a todo el mundo, ¥ ¢ (0 €S mo Ser Consectientes con NOs fel senior Azaiia los inismos".” Precisamente, los sucesos de la Espaii cexplicaban en buena medida los temores de los seetores clericale LA OPOsICION A pesar de In modleracién de la politica refarmista del gobierno de Lopez, la oposicién reaccioné de manera virulenta, El estallido de ka Gu Trextrema derecha en Europa alertaron a los enemigas del Gobierna 1 Civil espatola, el auge del comunismo y la consolidacién de acerca de lo que podia pasar en el pais si no se frenaba a tiempo la obra destructora de Lopez. La prensa fe una tribuna privileginda para atacay al rival. Completamente politizada, su objetivo no era informar de una manera mas o menos neutral, sino servir a la causa del partido con el que se identificaba. Cada partido, mas atin, cada tendencia partidista, poseia su propio periddico. Lopez contaba can EU Liberal 81, Chaco en Tira, Abaro, Vetisquer, Mall, La mfr consiteronel de 19%, 1 tes, Siplent,siones ora, 10 de mare ‘ogo, Fundacin Friedrich Naw, Oveja Neg, 1882, pp, 7. Amare Camara ep te 1986, serie, sim, 16, etada en Trad. Alsae9, Op. ep. 12 ris que los liberales ms moderados, enemigos del Gobierno, any El Tiempn, sn duda el diario mas influ Ais, Del lado conservador, Laureano Gomez, unio de los mis tenfan a su servicio La Ra yente del jmplacables enemigos del liberalismo, funds en 1936 el diario £2 Sigtas los jesuitas erewron la Revive Javerianayen Medellin, dels Repiblea Liberal fueron vocerose bv kes comservuloras mls Para tds ellos, a Revolucin en Macha en como obeivo tn tocarlos fundamnentos mais sagrados de la socieclad, La familia, en primer Jagat amienazauda por los proyectos sobre matrimonio civil y divorcio: Hoy cursan en nuestro parlamento proyectos de alocada temeridad reformadora, que desdibujn el croquis tradicional del hogar eolom- biano. Contra ese laicismo de costumbres es menester una ardorosa ioniizacisn dle todas Tas fers sociales, Guerra contra el mation civil, guerra cone fa igualdad de hijos naturales y tegitimos, guerra & los anufiados nigromantes qxte quieren convert la familia en Enseguida, Ia propiedad privada, en peligro por la llamada “reforma agraria”, que en realidad no era mis que “la confiscacion y el despojo de los propietarios que en una cadena de generaciones crearon Ta riqueza y la estabilidad de la repiibliea*.” Igualmente, la armonia social, condenada a desiparecer debido a una legislacion laboral que no hacéa sino alimentar ef resendimiento de las masay populares, que pareefan prestas a encender la chispa de la revolucion. La sama educacién religiosa, que ahora se vefa relegada por ka ense- A fea, La coytntura internacional se prestaba para hablar past laiea y en tono tan apocaltptico. 88, Earata Monsave, Joaquin, “La mils propietara y ersians", en Lt radii nn. 5, 1 de sepriembre de19 8, wen La Tinie, win, 9. V5 de janie de 195, pp. “0 ustoNts pe cote coNtestoRanes (1920-2010) Para amplios sectores de la oposicidn, lo que sucediia en Colombia anda en ot cera el fel reflejo de lo que estaba ps Tatitudes del planeta: el Gobierno espaol habia desatado el anticlericalismo mas cespia- dadlo; Ia revuelta social sacudlfa a Europa y:talgunos paises katinoameri- canos; el comunismo conocia un auge sin precedentes en todas partes, De una u otra manera, eso mismo estaba sticeciende ent Colombi zel gobierno de Léper no se haba case aliado eon los comunistas creando, como en Francia y en Espai tun Frente Popular? La perse- cucidn religiosa y la exacerbacién de las masas, zno constituzan una, Inquierante copia de las politicas areas y social cas de los regimens Fevolucionarios de la Union Soviétiea y de México? 1a espantost muestra que [eomunistas y masones} dievow de sf en Espatia, y el abisme de sn ju, immoral y abyeecion a que han arrojado a Mésico, comparable slo con el exos de Rusia, dejan ver lo ‘que nos aguarda s los pkanes dso iadores yantirreligiosos de esos dos stros se dejan prospe El conilicto que se estaba desarrollando en Colombia era un episodiv mas de la gran lucha que 4e libraba en el mundo enue los defepsores de Ia wadicitin y del orden cristiano y sus mnigos. Pot es misino, fas soluciones mmds id6nens no podian desconocer lo que estaban haciendo las fuerzas conservadores del munde entero, Pant frenar el comunismo, para evitar la Tucha de clases, no habia ire camino que el del autoritarismo de derecha, Los ejemplos los brindaban la Halia de Mussolini, ef nacional-socialismo de Hitler ¢ Alemania y ef franguismo espanol, baluartes de la lucha contra los acia, contrariamente a la a bolcheviques y modelos de orden y ef quia ya la demagogia que caracterizaban a la cemocracia ya sus institue ciones (par lamento, partidos politicos, elecciones): Nosotros queremos dotar a fa dereeha colombiana de Yo que bia sid fica en otras lutiuides 10 ndo de sus maneras lo que tienen de 90."EL11 Congreso Encieitico” discursa de Franca Cristal obispo de Ato Jevies, geste le 1985, citar et La Ilia in 244, ayonerepiembe 1, p 268 r universal yacophinndolas lo nuestra [.] EL ascisiao italiane, len Y portuguese J infinitamente mis populary mis demoeriica que lo que venimos wostenionda presuntuosamente come democracia." En la Guerra Civil no estaba en juego tan solo Ta suerte de Espaia: se jugaba cl destino de fa “civilizaci6n latina’, tiafa de bsirbaros filles a las consignas de los pudaleras moscovitas” En la lucha enue el bien y el mal, entre el cristianismo y el marxismo, el desenlace habia sido Favorable para el primero: “Y nosotros salt damos desde ahora a la repitblica derechista, al faseismo vietorioso a hispanidad y redomando ka tierra aridecicla por las pezuftas de tanto bsirharo”.” De la exaltacion restauranda los imperios espirituales de lel xégimen, se pasaba a lx apologia de sus conductores: “los grandes jeles fascistas no son tiranos [..], son la culminacién de wn engranaje poderoso, de un sistema que los colaca a ellos corontanda el sistema por voluntad soberana de las mismnas corporaciones’ Unavez mis, habia excepciones en lasfilasdel Partido Conser vador 1electuales, como Aquilino Villegas yGon Restrepo Jaramillo, denunciaron con valor los peligros que entra- Unoscuan ospoliticose fiaba una excesiva simpatfa con el fascismo, ailadiendy de paso que tal doctsina era incompatible con el cristianismo y con los auténticos principios del Partido Conservador colombiano. El mismo Laurea Gomer, a finales de los afios veinte, habia condenado el autoritarisme de los lideves dle Ia extrema derecha europea. Pero a mediados de la ente, esas veleidades democrat sido extir déeada sigu svat habia padas completamente de su disenrso, Laureano, como easi todos los conseryadores, hicieron suya la idea que promovié un seguidor incon dicional de Hitler y Mussolini en un libro publicado en 1936; Silvio vs clea derecha. Villegas. El libro se intittlaba No hay enemige {, Naranjo, Abel. Demuneraciay demerits, en En Trade nm. 2, Widener e197, pp SPLITS. de 1936, pp, 12 sloliador poitiew, Lr leeen le Hsp nin, 16,8 ae agosto 98 Naranjo, Abe, “Democracy dense Es decir, el fin justifies Jos medins, un precepto que no ha sido el monopolio de la extrema derecha colombiana y que ha cansade cenormes dailos al paisa lo largo de st historia, Para aleanzar sus fines, cl clero no dud en justificar la violencia contra los liberales. En tono, cesafiante y agresivo no s6lo condend Ia politica reformista de Megs incluso a ame ur al Congreso con desatar una guerra religiosa sise aprobuhan las reformas propuestas por el Gobierno: Hacomos consiar qite nosotros y asestza elera ne hemos provacade asa [Js pert si el Congreso insite en plantearnns el problema religioso, lo afrontaremos decididdamente y defendereios nuestrt fe y ha de nuestro pueblo a costa de woda clase de suerifieios, rcia de Dios (...] y Hegado et lever yomente de hacer pres ni nosotros ni nuestro clero, ni nuestzs feles, permanece- Conviene tener e1 mente este tipo de consig was y la agresividad con la que fueron proclamadas, no s6lo por los efectos inmediatos que pudieron tener, sino porque a partir de 1946, con el retorno de los conservadores al poder, se convertirfan en la doctrina oficial Desde otra perspectiva, el gobierno de Lopez también fue objeto de sev criticas por parte de los seetores més radicales det like ralismo, A diferencia del al moderada ce Santos, constitufan una pequefia minoria, entre la que ya empezaba a destacarse Ia figura del impetuoso Jorye Eligeer Gaitin, Decepe io por la modera- cién del primer gobierno liberal, Gaitin encaber6 una disidencia y cred en 1933 su propio partido, la Nie. Sin embargo, fue una jugada inoportuna, pues la llegadla al poder de Lopez 176 el descontento popular dentro de las filas del liberalism oficialista, Dos aiios después de fundar su meximiento, Gaitin regresé a las filas de su partide. EI comunismp conocid un proceso similar: si en los primerus aitos de Ta Reptiblica Liberal adelanto ima férrea oposicién contra los gobiernos 94. Gedo eu Tino, Sharo, Vekiaquer, Mi ul, pc, pp, 295-297, spurgueses", en 1936, siguiendo la orden de Mosc, sello wna al con Lépez para oponerse eonjuntamente al Partido Conseryador ‘De manera que los principales enemigos de Lépez venian no de tuna izquierda radical, sino de devecha, Jo eval refleja bien el sentir politico de las clases dirigentes, en las que st. conservatis oy apego 1 ka tradici6n reflejaba posiciones fuerte te clasistas, Aeosado por a oposicién, Léper deckiré la “pausa” de sus reformas en diciembre de 1986. Par adoptadas; en ardekante, su afin “revolucionario” cedié el lugar aun exe emonces, muchay de sus medias ya habian sido discurso coneiliador, es decir, se hizo atin mis moderado. La "pausa significé no s6lo una derrota para Lopez, sino para quienes intentaban. sentar las bases de una sociedad menos injusta y excluyente. Pocos meses después, en las eleceiones parlamentarias de 1937, el triunfo 1 suntista corroboré las reorientaciones del Partido Liberal, poco. de dispucsto ahora, bajo la conduecid despertar las firias del clericalismo, de sus nuevas lider Tras mas CONCLUSIONES. La historiografia colombiana cereana al liberalismo ha contri buido a hacer de ki Revolucién en Marcha la gran empresa moderni= tendencia apologética no se debe tinicamente a cuestiones ideoldgicas. En el contexto summmente conser zadora del siglo xx. L jor de la época, Iquier reforma modernizante, por superficial que fuera, aparecia come algo no s5lo innovador sino revoltcionario, radical. De ahi el entusiasmo exagerado con el que sus partida medidas cle Lopea: de ahi también el profunde temor que despertaron jos saludaron las centre sus enemigos. Las veformas no fi n superficiales; con! veron sin duuda a que los sectores tradicionalmente excluidos tomaran mayor conciencia acerca de sus derechos y, de manera mis general Je dicron al Estado nuevas funciones relacionadas con el bien comin, De manera conereta, Lopez. intenté ampliar el concepto de “demoeracia’ Si en el siglo x1x sus copartidarios habian luchado por los derechos Politicos, ahora, ya bien entrada ef siglo xx y con las cousectencias visibles que acarreaba el proceso de industializacién, er at usta on eceomy coveesonnetyes (9202010) lucha por los derechos soci Eldebil tadlos espers P como Jorge E es si se queria distensionar cl ambiente lo de bienestar quie quis stautrar no traje todos losresul los, pero mareé un referente importante en ta historia de} qne no tn 1n ser retomada —y profimelizado— por lieleres Ga Elliberalismo, en su versidn “progresista’, el vocero de los sectores pop La pokwvizacion que suscité ka Revolucion en Marcha puso al descubierto las diferencias, mis ati, In incompatibilidad que habia centre los dos modelos sociales enfrentdos. Por un Tado, lt obra de il mas abierta, en la que los individnos veian ampliar sus derechos politicos, sociales, religiosos y cultur il fuertemente je regida por los valores del catolicismo, preocupada antes que nada por asegurar el orden y el principio de autoridad. Fs decir Laper apnntaba a una soe por el otro, los partidarios ce una socie' opesicion no cena simplemente una cuestién de intereses: lo que estaba en juego © cl porvenir mismo de fa sociedad, hipotecado, segiin los lopista . por yrde acuerdo con la aposicidn, por los vientos modernizantes que podian dar al waste con las bases de Ta identidad nacional, La gravedad de Ia situacién radica diferencias entre uno y otro hando desbordaban de una manera cada en el hecho de que las vex mis evidlemte Jos mecanismos institucion

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