Está en la página 1de 2

¿Por qué quiero a mi esposa?

Te lo voy a decir…

No te quiero porque seas la más guapa, sino porque entregas todo lo bello que tienes, a mí y a
nuestros hijos.

No te quiero porque tengas el cuerpo más hermoso, sino porque en él están las huellas de lo
vivido juntos.

No te quiero porque tus ojos sean azules o verdes o negro azabache, sino porque un día se
atrevieron a mirar el mismo horizonte que los míos.

No te quiero porque seas licenciada, sino porque has decidido jugarte la vida poniendo al servicio
de los más jóvenes todo lo que sabes.

No te quiero porque te codees con gente importante, sino por la manera con la que tratas a las
abuelas y abuelos que conoces.

No te quiero porque seas la mejor cocinera del mundo, sino porque sabes cocer la vida a fuego
lento.

No te quiero porque compartamos hobbies y seas mi perfecta compañera de aventuras, sino


porque me has enseñado que a veces sólo se trata de querer formar parte de los hobbies del otro.

No te quiero por ser la perfecta esposa de los años 20, sino por luchar por ser mujer, madre y
esposa del siglo XXI.

No te quiero por tener la casa ordenada, sino por intentarlo sabiendo que yo lo necesito.

No te quiero por ser la tía más divertida del mundo, sino porque cuando te ríes me reenamoras.

No te quiero porque no tengo otro remedio, sino porque elijo hacerlo cada mañana.
Te quiero por tu despertar a tientas. Te quiero por tu café recién hecho sin azúcar. Te quiero por
tu salir corriendo siempre de casa. Te quiero por tu camiseta azul de hace mil años. Te quiero por
tu mantita y el sofá de después de comer. Te quiero por tus siestas. Te quiero por tus caricias. Te
quiero porque me has enseñado que en un abrazo se contiene todo un universo. Te quiero cuando
te enfadas te pone los pelos de punta mi sosiego. Te quiero porque me conoces y, pese a eso,
sigues eligiéndome cada mañana. Te quiero porque confías en mí. Te quiero porque me quieres
feliz. Te quiero porque respetas lo que soy, porque me permites ser. Te quiero pese a no
entenderte tantas veces… Te quiero por llevarme a una hamburguesería en nuestra primera cita.
Te quiero por la manera en que quieres a mi familia y por el amor con el que acoges mi tierra, mi
historia, mi atrás. Te quiero por regalarme el don de la paternidad. Te quiero porque eres valiente.
Te quiero por lo soñado juntos, por las margaritas blancas, por la casa abierta, por dejar paso
juntos a los imprevistos. Te quiero porque has aceptado tus debilidades y porque siempre has
sabido arroparme en la mía. Te quiero por tu oído atento, por tu mirada limpia, por tu corazón
dulce.

Te quiero porque has captado desde siempre lo esencial de Dios, la ternura, y porque,
simplemente siendo tú, lo testimonias a Él.

También podría gustarte