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FRANCOIS PERROUX (19955)

Economista francés. Realizo estudios sobre los modelos de equilibrio general y a los
problemas de la política y economía monetaria y elabora la teoría de los polos de
desarrollo como instrumento de la política económica.
Polos de desarrollo pueden ser atracción y de difusión.
Genera efectos de polarización y de desarrollo donde se encuentra localizada
a) Efectos “input-output” directos e indirectos
b) Aceleración del crecimiento, altas tasas de inversión y reinversión de
beneficios.
c) Creación de infraestructura y capital social;

Su objetivo es el crecimiento económico en un espacio determinado, no puede explicar


todos los problemas del desarrollo y evolución de una sociedad, por lo que su valor es
relativo. Se define e términos de elasticidad del bienestar de una región periférica ante
la inversión realizada en el centro urbano, debe tener empresas
propulsoras(innovadoras), generadoras de efectos de difusión a través de la inversión.
Contiene dos ideas fundamentales:
1) Creación de plataforma de producción para otros mercados (base de exportación)
2) La innovación en el desarrollo

Perroux señala que el análisis económico convencional ha estado obsesionado por el


espacio y la localización banales, justamente cuando se encuentra una tendencia entre
los agentes y grupos económicos a "desvalorizar las fronteras". En la economía
convencional, a la nación se le trata "como un complejo local de factores de producción,
cuyo contenido se determina por el aprovisionamiento relativo de las diversas naciones
de estos factores. El análisis habitual relaciona sus conclusiones a un espacio banal,
limitado por fronteras políticas, es decir, acepta fundamentalmente los mismos límites
que se trata de desvalorizar".20

Por ello, "el espacio de la economía nacional no es el territorio de la nación, va más allá
de ella acompañando las relaciones e intereses de los grupos y firmas que la componen
y en ese sentido pueden ser dominantes o dominados y normalmente incompatibles
entre sí".
Las temáticas económicas para el desarrollo de esta noción son múltiples. Sin embargo,
puede resultar muy útil a la lectura de los procesos financieros contemporáneos. Si se
consideran los espacios monetario y nacional cabe preguntarse sobre la jerarquía
monetaria y la acción de poderes monetarios desigualmente dominantes y dominados;
como relación de fuerzas, permite preguntarse sobre las determinaciones del
comportamiento de los flujos financieros, las redes de pago, los centros financieros, e
incluso las crisis cambiarías; como conjunto homogéneo permite preguntarse acerca de
los patrones monetarios históricamente dominantes, sobre las consecuencias de la
desmonetización del oro y la desregulación financiera.
Al respecto Perroux afirma que: "La distinción entre los diversos espacios económicos
disipa la ilusión de una internacionalización efectiva y completa de la moneda, e indica
cómo puede obtenerse una internacionalización practicable: haciendo compatibles los
planes de empleo de la moneda y armonizando las influencias de los centros monetarios
dominantes."22 El espacio económico no es únicamente el campo del intercambio o de
la formación de precios, en tanto que éstos son también un proceso social de aplicación
de fuerzas en un momento determinado.
Espacio y tiempo son conceptos que en la economía convencional no alcanzan a estar
presentes. Los espacios económicos así considerados poseen un sentido claramente
variable. "Pero salvo casos de planificación integrada, el espacio nacional es un
entrelazamiento intrincado de mercados nacionales e internacionales, por categorías de
productos y de servicios; de precios fijados por datos relacionales con el espacio nacional
y de precios determinados por datos relacionables con elementos exteriores al espacio
nacional."
Esta noción de espacio económico le permite a Perroux distinguir entre un bloque o una
unión cuando ésta procede de "una cooperación económica que desvaloriza las fronteras
y otra que sólo pretende hacerlas retroceder.
La teoría convencional considera el crecimiento sin variación en las proporciones, sin
fluctuaciones y desigualdades, un crecimiento equilibrado. Sin embargo, precisamente
uno de los aspectos de" los cambios de estructuras consiste en la aparición y
desaparición de industrias, en la proporción variable de las diversas industrias. En el flujo
del producto global en las tasas de crecimiento diferentes para las distintas industrias.
Así, en el sistema de análisis desarrollado por Perroux, el crecimiento se manifiesta en
polos de crecimiento, que incrementan la actividad económica con distintos ritmos y con
efectos variables en el conjunto de la economía. En su análisis sobre el crecimiento
destaca que éste se sucede como una combinación de industrias motrices, polos
industriales, actividades geográficamente reunidas, e industrias seguidoras, regiones
dependientes de los polos de crecimiento. Así, las nociones de espacio económico y
polos de crecimiento permiten a Perroux establecer que hay un conflicto entre la
tendencia a constituir grandes espacios económicos de las empresas (deslocalización,
internacionalización), de las ramas industriales e incluso de los polos de crecimiento, con
los espacios políticamente organizados de los estados nacionales. A todo ello Perroux lo
llama "el conflicto de los espacios de crecimiento engendrados por los polos de desarrollo
y los polos de crecimiento y los espacios territoriales políticamente organizados".
LOS MODELOS DE DESARROLLO REGIONAL EXOGENO (BOUDEVILLE J.R.)

Boudeville introduce la versión geográfica de los polos de desarrollo de Perroux. Se trata


de una visión ampliada de la tesis de la acusación acumulativa, con la introducción de la
variable espacio en el análisis, y con la apertura del círculo de causalidad en una etapa
final de difusión del crecimiento hacia las zonas menos favorecidas inicialmente.

Boudeville introduce la variable espacio en el análisis, Berry define los canales de


difusión del crecimiento y Friedmann, en el modelo centro-periferia, define y caracteriza
las etapas de generación y difusión geográfica de la dinámica económica.

El polo de crecimiento, definido por Perroux como un conjunto industrial imbricado en


torno a una dinámica industria central a través de una serie de eslabonamientos input-
output, ha servido para fundamentar acciones de política regional encaminadas a la
concentración meramente geográfica de la actividad económica como factor de
desarrollo.

El concepto inicial de enclave industrial pasa a ser interpretado y puesto en práctica a


través de la aglomeración espacial y de la polarización en el espacio. La localización
empresarial obedece no sólo a relaciones funcionales entre empresas, sino que las
unidades productivas se benefician de la mera concentración de actividades económicas
en el espacio. Son las denominadas economías de aglomeración, que suponen el
abaratamiento de sus costes, la seguridad en los suministros, el clima industrial, la
amplitud del mercado, etc.

Perroux, explicando su teoría de los polos de desarrollo, manifestó en 1955 que “el
crecimiento económico no aparece en todos los lugares al mismo tiempo: surge en un
determinado punto geográfico, para después difundirse a través de diferentes canales
de intensidad variable”. Berry desarrolló el concepto de canales de difusión del
crecimiento, centrándose en los dos siguientes:

(1) desde los centros metropolitanos hacia ciudades satélite más pequeñas;
(2) desde el centro de las ciudades hacia sus periferias.

El modelo centro-periferia, diseñado por Friedmann, divide el fenómeno del crecimiento


económico en cuatro etapas: en la primera, correspondiente a los estados iniciales del
desarrollo, con estructura productiva pre-industrial, el espacio geográfico presenta
algunos centros de desarrollo independientes e inconexos.

La segunda etapa se aproxima a la polarización espacial a la Boudeville: se produce la


industrialización en un núcleo central único que atrae las materias primas, mano de obra
y capital desde la periferia hacia el centro.
La tercera etapa incluye elementos de difusión del crecimiento desde el centro hacia las
áreas periféricas en las que empiezan a surgir nuevos enclaves industriales
interconectados con el área central inicial. La fase final corresponde a un sistema
económico post-industrial, muestra un sistema de regiones interdependientes y un
reparto equilibrado de producción y riqueza.

Según este diseño espacial del crecimiento, las regiones no compiten entre sí con
igualdad de oportunidades como en la formulación neoclásica, sino que la concentración
inicial de actividades en la zona “centro” marca también la centralización del poder
económico en esa área, y los efectos difusores del crecimiento hacia la periferia no
tendrán lugar más que al ritmo y según los intereses de los detentadores de ese poder
en las regiones o ciudades centrales.

La característica diferenciadora de la zona centro es su capacidad para generar o


adaptarse a las innovaciones. En palabras de Friedmann, “las regiones centro son
subsistemas de la sociedad organizados sobre una base territorial que tienen una gran
capacidad para generar y absorber cambios innovadores; las regiones periféricas son
subsistemas cuya senda de desarrollo está determinada fundamentalmente por las
instituciones de la región centro, con respecto a la cual se encuentra en una relación
básica de dependencia.”

El centro y la periferia se relacionan entre sí mediante los siguientes procesos: la difusión


de innovaciones, lo que supone la progresiva implantación de los sectores productivos
modernos en las áreas menos desarrolladas, caracterizadas inicialmente por la
predominancia en ellas de las estructuras productivas rurales.

Esta difusión del crecimiento desde el centro hacia la periferia puede realizarse también
a través del descubrimiento de nuevos recursos productivos, o por mejoras en el
transporte o por la expansión de los mercados. También pueden contribuir la
implementación de políticas de desarrollo regional o los cambios en la organización
industrial que permiten descentralizar los procesos de producción, manteniendo la
dirección de la empresa en la región central, permitiendo así aprovechar localización y
mano de obra más baratas en la periferia.

Y ello junto con un proceso paralelo de control de esa difusión por parte de las
instituciones de la región central, que tienen en su mano la decisión del alcance y ritmo
de implantación de las innovaciones en la periferia.

Los procesos espaciales de migración y localización de las inversiones completan el


paradigma descrito por Friedmann. Éstos contribuirían a la polarización geográfica en las
dos primeras etapas, y a la difusión, tímido primero y decidida después, del crecimiento
económico en las dos etapas finales del proceso.

La descripción del dualismo centro-periferia de Friedmann nos permite completar los


modelos de localización empresarial a través de las siguientes reflexiones: los
empresarios pueden estar teniendo en consideración a la hora de decidir su localización
otra serie de factores, más allá de los ya descritos, en relación con el desequilibrio de
poder político y económico existente entre las regiones centrales y las periféricas.

Deben tenerse en cuenta factores tales como la facilidad de acceso directo a los centros
de poder gubernamental para ejercer determinadas presiones a favor de sus actividades
económicas o simplemente obtener información, o para beneficiarse de contratos
públicos, evitando toparse desde regiones desfavorecidas con centralismos burocráticos
que dificulten el progreso de su actividad.

PENSAMIENTO ECONOMICO (MILTON FRIEDMAN)


para muchos economistas, la teoría de la renta permanente y su aplicación al consumo
es la aportación más relevante de Milton Friedman al pensamiento económico. La
teoría keynesiana vigente sostiene que el consumo es una renta corriente de las
familias, de modo que incrementos de renta corriente provocan incrementos
proporcionalmente menores del consumo. Esa relación tenía un papel muy importante
en la teoría keynesiana, porque la estabilidad dela propensión marginal al consumo era
la clave de la estabilidad y cuantía del multiplicador que, a su vez, sustentaba el
modelo keynesiano de equilibrio con desempleo y la eficacia de la política para
conseguir el pleno empleo.
Pero la contrastación empírica presentaba algunos problemas no resueltos. En primer
lugar, los estudios a largo plazo con series temporales, llevados a cabo principalmente
por kuznets, sugerían que la ordenada en el origen era nula, en contra de los estudios
a corto plazo de sabor keynesiano. Y, en segundo lugar, los estudios de series
temporales mostraban una propensión marginal más elevada que los de corte
transversal. En los años cincuenta se ofrecieron varias explicaciones aa esos
problemas, entre las cuales la de Milton Friedman adquirió justa fama.
Friedman utilizo la renta permanente, un concepto basado del capital de Irving Fisher,
de acuerdo con el cual la renta es el rendimiento de la riqueza, y esta el valor actual de
las rentas futuras esperadas. Friedman supuso que los sujetos toman sus decisiones
de consumo atendiendo a la renta permanente, no a la renta corriente. Este
razonamiento tiene una sólida base en la teoría de los precios, cuando los sujetos
actúan con un horizonte temporal de varios periodos y su desarrollo permite resolver
satisfactoriamente las dificultades citadas antes.

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