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KEDACCIÓN
PUNTOS DE SUSGRlPGiÓíI
o CALLE DEL TUTOR, NUMERO 41 •'EN LAS PRINCIPALES LIBRERÍAS
•O
Nada de cientos n i miles Más pan y más azadones
2^
A CORRESPONSALES Y VENDEDORES,,,.
CANTARES
Lá verdad es que.,.se está muy ricarrienfe.én Avila. Si
no fuese por mis ami^os^.... Ayer he recibid<xia.visita de Ya que ti'enes más orgullo Ayer, te compadecía Tengo lo que tú no tienes
Venáneio Gronzález,' que tiene muchas ganas de volver que Don Rodrigo en la horca, al par que te despreciaba; gitana de mal trapío;
á ser ministro. Ese Venancio es insoportable. Nó' sabe no se. te olvide, serrana, hoy, necesito tu vida, tengo vergüenza y decoro,
hablarrjnás que de sus diabetes y deltratado de comercio
que estás viviendo á mi costa. iienibra de malas entrañas. cosas que nunca has tenido.
conFraóciaV'iY dale eon que regresé á Madrid! .
Ya¿i,os-:á vep, ¿y qué voy á hacer yo ;en Madrid? [Se
ranea /•a'harba;)%a, breva no está aún lo suficientemente Así te castigue Dios, Me las tienes que pagar Si yo no me vengo en vida,
madura, diganlQ que digan mis amigos. Demos tiempo ..^gerrana de mis pecados, gitana, cuando te coja; me voy á vengar en muerto;
al tiempo, señores. ¿Que mi o'ompadre Antonio es un en aquello que más quieras, y he de gastar en tu cara andaré las sepulturas
hombre funesto, y que las instituciones corren peligro? los tacones de mis botas. todas, hasta que te encuentre.
si es que puedes querer algo.
¡Pues-allá se las componga él cómo pueda! Yo soy poco
í.íNcno PANZA.
aficion^o á meterme em libros de^ caballería. Los años
me haií hecho algo egoísta. Lo riiismq se me da á mí
Juan;que Pedro Que, me quiten lo bailado. Yo h^;' Entre sus obras literarias merecen citarse sus colec-
sido ya ministro muchas veces ' Terigo necesidad de
Ernesto García Ladevese. ciones de versos tituladas Euego ij cenizas y Olas del
descanso, l^a me llamarán cuando menecesiten. ¡ Cal- mar., y su novela La hija del corsario.
ma, amigos míos, calma! No recordamos quién ha dicho que Ruiz /Zorrilla r e - Recientemente ha publicado un libro que ha produ-
Además, lo diré ahora que nadie me oye: tengo mi presentaba en la política española la tenacidad revolu- cido verdadera sensación: Memorias de un emigrado.
poquito de miedo Huelo la tempestad El melifluo cionaria. Reciba el Sr. Ladevese con estas líneas la expresión
Moret, que es algo asustadizo; me dijo hace poco que no A García Ladevese puede aplicársele también esta de nuestro afecto. ' '
le llegaba la camisa al cuerpo..,;. Cíipdcpón tiene tam- frase. Desde que se liizo la restauración, no ha cesado
bién una gran jindama. «¿Qué v a á s e r de nosotros?» El un momento de trabajar por el triunfo de la República.
pánico se há"apoderado de las filas monáíquicas. Conocida es de todos su intervención en los sucesos del H Á Q A S E IvUZ
Pues bien, lo;repito: yo-he pasado ya de la edad de 19 de Septiembre. García Ladevese, seguido de cerca
las aventuras, y me he hecho algo egoísta. Si me necesi- por los esbirros b.orbónicos durante el verano de 188C),
tan, que me llamen. La vida én Avila es muy agrada- Merced al Marqués de Cubas, hemos sabido que de la
tuvo, .que abandonm- á E-Spaña. Pero el inolvidable Vi-
ble. Decididamente no me marcho. Que aguarden senta-. cantidad designada para jornales por el Ayuntamiento
dos mis amigos. ••', ; '. de Madrid, estaban disfrutando treinta jornaleros de le-
¡Angelita! ¡Angelita! Que no háganlas maletas. No vita y chistera, protegidos por el antiguo federal Luis
estoy para nadie, ni para el Marqués de Nájera.-Tefótt. Felipe Igualdad, hoy monárquico, y Iiasta hace pocos
días concejal delegado de vías y obras.
Entre esos treinta., figura D. Valeriano Morales, cu-
ñado de D. LuisEelipe.
El Uesumen ha publicado un hermoso artículo, en el D. Ensebio Poveda, hijo de un cacique de Almodóvar
que habla de no .sabemos qué casa habitada por Un viejo (distrito por el que ha sido diputado en varias ocasiones
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sátiro, en la que á ciertas horas de la noche—repitamos I); Luis Felipe.)
la frase del cologa—«se puebla la conversación de deli- D.. José Berraúdez, antiguo redactor honorario de El
tos de lesa majestad.» • Demócrata, y hoy secretario particular de D. Luis F e -
Kl Resumen habla, también en su artículo de un viejo lipe.
Bisniarck, de plebeyos endiosados, de ninfas conserva- Y cuatro periodistas incógnitos, pues no hay en la
doras y de rebeldías femeninas. . •• prensa quien los conozca.
¡Ah! Es preciso averiguar quiénes son esas ninfas y Con tal motivo, han empezado á hacerse severos car-
ese viejo Bismarck, y esa casa donde se cometen tales gos contra muchos periodistas que cobran del Estado,
delitos. '•''.- •' Diputación y Ayuntamiento, sueldos sin trabajar.
Sí; todos debemos ser iguales ante la justicia. Nada Hablase de un periódico conservador, dirigido por un
de jerarquías, ni de clases, ni de privilegios: todos título, que paga á sus redactores con empleos de momio.
iguales. • •; • De un redactor de un diario de la mañana, de gran
El delito es delito, cométalo quien lo cometa. Nadie, circulación, que además es novelista y autor dramático,
tiene derecho á la impunidad. ^i$'^\-'!'-.. que tiene 14.000 reales en Hacienda, que le llevan todos
El Director de DON QUIJOTE ha sido condenado a dos los meses á su casa.
años, cuatro meses y un día de prisión correccional, poí De otro redactor del mismo diario, que cobra 12.000
í%- haber injuriado, segxín dicen, á la reina regente. llacampa llamó á Ladevese por telégrafo, y en la misma reales en la Diputación Provincial.
Nosotros no nos hemos quejado del fallo de los tribu- mañana del 19 de Septiembre llegó éste .á:Madrid, y ya De otro redactor de dos periódicos de la noche, y muy
nales. ¿Para qué? Hubiera sid.o inútil y hubiera sido co- no se separó del heroico jefe de aquel movimiento, hasta amigo de asistir á banquetes, que cobra en el Gobierno
barde.'N.os hemos limitado, á acudir en recurso al Tri- que la derrota puso en dispersión á loS yalientes su-, civil.
bunal Supíemo, y él decidirá si somos merecedores de blevados. ^^:' ;- Y, enfin,de otros muchos.
sufrir la pena que nos han impuesto. Ladevese consiguió, casi milagrosamente, entrar en' Como creemos que el honor de la. prensa honrada está
Tenemos, pues, derecho á exigir que la justicia sea Madrid, y á pesar da. las-grandes fafeilidades que tenía empañado con todos estos dichos, creemos con BU Im-
igual para todos, y excitamos el celo .de las auto.tidades para gan£r la froiífera, se negó á marcharse.mientras parcial que debe hacerse luz en este asunto; saber lo que
para qup averigüen, sin pérdida de tiempo, quiénes son Villacampa estuviese en peligro de ser fusilad©.' hay en él de cierto, y expulsar de sus respectivas redac-
eBCis'plebeyos endiosados y esas ninfas conservadoras Después del indulto, Ladevese se marchó á Francia, ciones á todos estos sujetos que se valen del periodismo
que cometen delitos de lesa majestad. donde continúa emigrado y trabajando por el triunfa de para cobrar sueldecitos de momio.
De deijunciados nos convertimos en denunciadores, y la revolución. : , , . '. Y ya que tratamos de cosas que conciernen á \a.pren-
gritamos: ^ '*'" García Lj,,devese es un periodista notable, y ha escii- sa honrada, oreemos que sería muy conveniente que los
—¡Justicia! ¡Justicia! Y nada más por .hoy. . to en periódicos tan importantes • como rfiqs-ifovedades, Ministerios, Bancos, grandes empresas, etc., publicasen
KiU. El Museo üfíiversal, Gil Blas y otros. una lista de las subvenciones que, según dicen por ahí,
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DON QUIJOTE