Está en la página 1de 55
LICENCIATURA EN DERECHO OBLIGACIONES CUARTO SEMESTRE licenciatura en Derecho RAFAEL ROJINA VILLEGAS CATEDRATICO DE DERECHO CIVIL EN LA UNAM MINISTRO DE LA SUPREMA CORTE DE SUSTICIA COMPENDIO DE DERECHO CIVIL HI TEORLA GENERAL DE LAS OBLIGACLONES Decitanovena Epicion EDICION CONCORDADA CON LA LEGISLACION VIGENTE POR LA LIC. ADRIANA ROJINA GARCIA EDITORIAL PORRUA, S. A. AY. REPUBLICA ARGENTINA. 15 México 1, D. F ty 464 COMPENDIO DE DERECHO CIVIL éste puede ser materia de transmisién, dada su posibilidad de que sea disfrutado no sdlo por. ¢l acrecdor, sino también por um tercero; pero en aquellos créditos que sélo implican un interés personalisimo del acreedor, como la facultad de exigirle a su médico o a su enfermera que cumplan el contrato concertado para procurarle el servicio prome- tido, es evidente que no puede haber transferencia alguna, ante la im- posibilidad de que la prestacién pueda satisfacer algan interés de ter- cera persona, Existe una tiltima forma reconocida por el articulo 2030 para im- pedir la cesién, consistente en el convenio entre acreedor y deudor que asi lo estipule, pero siempre y cuando el mismo se haga constar en el titulo constitutive del crédito, ya que de lo contrario el deudor no po: dra alegar que el derecho no podia cederse, segan indica Ja parte final de! precepto invocado. La raz6n de ser de tal disposicién deriva de las circunstancias de cada caso, pues en funcién de ellas alguien puede consentir en ser deudor sdlo frente a un acreedor determinado, por ra- zones de mutua confianza, honorabilidad, condecendencia, etc. En con- secuencia, dado ese origen det crédito, éste puede nacer con la modali- dad de ser intransmisible. 5.—Anélisis de los elementos que caracterizan a la moderna cesién de dorechos.—La cesién de derechos moderna se caracteriza porque im plica un cambio en el acreedor 0 sujeto activo, que es reemplazado por otro, subsistiendo la misma relacién juridica, sin que se opere por lo tanto una novacién subjetiva y sin que se requiera el consentimiento del deudor. Segiin -este concepto, el acreedor puede transferir sus derechos a otro, sin la conformidad de su deudor y a pesar de este cambio en un elemento esencial de la relacién juridica, subsiste ésta, con todos sus derechos y obligaciones, tanto principales como accesorios. Por este motivo el Art, 2032 dice: “La cesién de un crédito comprende la de todos los derechos accesorios, como la fianza, hipoteca, prenda © pri- vilegio, salvo aquellos que son inseparables de la persona del cedente. Los intereses vencidos se presume que fueron cedidos con el crédito principal”. A. Von Tubr, Tratado de las Obligaciones, t. II, pigs. 308 y 309. Se distingue la cesién de derechos de la novacién subjetiva, por cambio de acreedor, en que esta Giltima opera una extincién de Ia rela- TEORIA GENERAL DE LAS OBLIGACIONES 465; cion juridica primitiva, que ¢s substituida mecesariamente por otra nue- va y esencialmente distinta. Por consiguiente, la novacién implica una extincién de las obligaciones principales y accesorias, y ésta es la raz6n por la cual ja fianza, prenda, hipoteca o privilegios no pueden con- servarse en la novacién, sino cuando existe una reserva expresa con- sentida por las partes, y también por los terceros que hayan otorgado esas garantias. “Caracteres distintivos de la novacién.—1° La novacién exige el consenti- miento del dendor, a quien se hace contraer una nueva obligacién. En la cesién de derechos, no se requiere su consentimiento; basta notificarle ¢l contrato cele- brado entre su antiguo y su nuevo acreedor. 2° La novacién no entra ninguna garantia: el antiguo acteedor nada he véndido ni transmitido. Pero, si ha delegado su deudor a su propio acreedor, a titulo de dacién en pago, y si el pretendido deudor se ha liberado ya, nada ha dado en realidad y queda sujeto a su antigua deuda: la delegacién, que no ha realizado su fin, no lo ha liberado. Por el contratio, la cesién implica habitual- mente cierta obligacion de garantia. La novacién extingue las garantias del crédito novado .(hipotecas, fianzas, ete); el nuevo crédito nace desnudo, 2 menos que expresamente se Je hayan transmitido aquéllas, en las condiciones en que Io permite la ley (articulos 1278, 1280, 1281). En cambio, la cesién de derechos conserva ¢stas garantias, y jas transmite de pleno derecho al cesionario”’. (Planiol, ob. cit. Teorfa General de Jos Contratos, traduc. de Cajica Jr., Puebla, pag. 282). 6.—Caracter variable de la cesién de derechos —Esta tiene un ca- racter variable, en virtud de que es la fuente o causa eficiente de distintos contratos o figuras juridicas en general. Es decir, como la cesién de derechos puede ser 2 titulo oneroso o gratuito, puede dar lugar a una compraventa, si hay un precio cierto y en dinero a cambio del derecho cedido; a una permuta, si a cambio del crédito se da otro o alguna cosa; a una donacién, si es 2 titulo gratuito; a una aportacién en sociedad, si el crédito se transmite a la persona moral que se cons- tituya, etc. 7—Wrilidad de la cesién—La cesién de derechos ¢s sumamente til, tanto desde el punto de vista juridico como econémico, en vir; tud de que el acreedor puede tener ventajas indiscutibles al negociar su crédito que no es exigible atin, pues en esa forma recibe inmediata- mente su importe, Por su parte, el cesionario, mediante esta figura ju- ridica puede colocar su dinero a un tipo de interés conveniente, adqui- riendo un crédito a plazo. 470 COMPENDIO DE DERECHO CIVIL cedente no esté obligado a garantizar la solvencia del deudor, a no ser que haya estipulado expresamente o que Ia insolvencia sea piiblica J anterior a la cesién”. Esta ultima parte permite que, sin la Sarantia convencional, el cedente deba responder ante Ja insolvencia de su deudor, cuando ésta sea publica y anterior a la cesién. CAPITULO II Cesi6n pe Deupas 1.—Concepte,—La cesién de deudas es una institucién de derecho modezno. Implica una forma de transferencia de Ja obligacién por cam- bio de deudor, pero sin alterar la relacién juridica, la cual continia subsistente en principio. Se distingue de la novacién en que ésta implica una forma de extincién de las obligaciones, en tanto que la cesién de deudas sdlo constituye una manera de transmisién de las mismas. Podemos definir la cesién de deudas diciendo que es ua contrato entre el deudor y el asuntor (tercero que asume la deuda ajena), por virtud del cual éste acepta hacerse cargo de la obligacién del primero, ¥ Cuyo contrato es admitido expresa o tdcitamente por el acreedor. También cabe le posibilidad de que la cesién de deudas se Ileve a cabo mediante un conirato celebrado entre el deudor, el asuntor y el acree- dor, a efecto de que el primero sea substituido por el segundo, liberdn- dosele de la obligacién, 1a cual seré asumida por el nuevo deudor, con el consentimiento del acteedor. Sin embargo, 0 es menester que este Ultimo concurra desde un principio al pacto de cesién de deuda, bastando que posteriormente acepte el cambio de sujeto pasivo, bien mediante una manifestacién expresa de voluntad o en forma técita, permitiendo que el “sustituto ejecute actos que debia ejecutar el deudor, como pago de réditos, pagos parciales 0 periddicos, siempre que lo haga en nombre propio y no por cuenta del deudor Ptimitivo” (art. 2052). En este concepto general de la cesién de deudas, conviene dife- renciasla, como hace Ruggiero, de la asuncién simple, de Ja asuncién acumulativa 'y de la asuncién novatoria. Dicho autor reserva el término de asuncién privativa a la figura que nuestro Cédigo Civil vigente de- nomina “cesién de deudas”. Segtin se desprende de la exposicién que sigue, en la asuncidn simple, el asuntor asume el papel de obligado TEORIA GENERAL DE LAS OBLIGACIONES: 483 gacidén es legal 0 convencional”, y €l 1592 declaraba: “Le subrogacién convencional tiene lugar cuando ¢} acreedor recibe el pago de un ter- cero y le subroga en sus derechos, privilegios, acciones 0 hipotecas con- tra el deudor. Esta subrogacion debe ser expresa y hacerse al mismo tiempo que el page”. A esto forma Ia hemos denominado subrogacion convencional consentida por ¢l acreedor. Como en el Codigo vigente silo se habla en la subrogacién legal. se ha creido que ya no existe la convencional. Sin embargo, interpre: tando el alcance del Art. 2058, se nota que este precepto dnicamente hha querido reglamenter los casos en que sin necesidad de declaracion alguna de los interesados puede operarse por ministerio de ley Ja sub- rogaciér, pere e” manera alguna ha tratado de impedic al acreedor que por un convenio con un tercero le subrogue er sus derechos. Serle contierio al principio de !a autonomia de la voluntad prohibir Je subrogaciéa convencional. Ademés, como esta figura no es contraria al orden piblice ni 2 las buenas costumbres, no habria fundamento al- guno para considerar abolida esta institucién. 'A mayor abundamiento, el Art. 2072 del Codigo vigente confir- “| setotuir cue “el acreedor esté obligado a aceptar el page hecho por un tercero; pero no est Obligado a subrogurle en s: derechos, fuera de los casos previstos en los articulos 2058 y .2059". Es decir, Ja ley declara en qué casos el acreedor esta obligado @ sub- rogar al tercero que paga; pero esto no quiere decir que fuera de ellos, le prohiba que pox convenio traspase sus derechos al acreedor. 9,—Diferenta entrée ei pago con subrogation y los casos en que un tercero paga—En los Aits. 2065 al 2074 del Cédigo vigente, se reglamentan los casos en que un tercero paga con consentimiento del deudor, sin su conocimiento y aun cofitra su voluntad, Estos casos son distintos de los relativos a la subrogacién legal. En efecto, cuando el tercero paga con consentimiento del acreedor, se observan, por dispo- sicion del Art. 2069, las reglas del mandato, es decir, el tercero se ‘considera como un mandatario del deudor y tiene derecho al reembolso de Ia cantidad pagada y al de sus intereses, pero no se subroga en el crédito. Cuando un tercero paga ignorindolo el deudor, segin el Art. 2070 solo tendré derecho a reclamar Ja cantidad que hubiere pagado, < una cen‘i4-4 menor con consentimiento del acreedor, solo podrd reclamar ésta. Ademds, no uene derecho a exigir intereses. OC tas menere gue § 484 COMPENDIO DE DERECHO CIVIL Cuando un tercero paga contra la voluntad del deudor, s6lo’ten- dr4 derecho a cobrar aquello en que Je hubiere sido util el pago. En el Cédigo anterior no se concedia ninguna accion al tercero en este caso pero el vigente. respetando el principio del enriquecimiento sin causa, feconoce en el Art. 2071 el derecho de reclamar la centidad en que fue util el pago. Todos estos casos se distinguen de la subrogacién legal porque en ésta el tercero tiene interés juridico en el cumplimiento de la obliga- cién. Por lo tanto, no es un mandatario del deudor, que obre con su coasentimiento expreso o presunto, y dado ese interés se subroga en todos los derechos, privilegios y garantias sin limitar sus acciones a Prestaciones inferiores como sucede cuando el tercero paga sin con- sentimiento del deudor, ignorindolo éste o contra su voluntad. 10.—Dittincibn entre la subrogacién y la cesién de derechos,—La mn legal se distingue en todos sus aspectos de la cesién de chos, ya que aquélla es, como decian los romanos, una cesién obli- gada de acciones; es decir, se verifica aun contra la voluntad del acree- dor y del ceudor. En cambio, ia cesion de créditos supone siempre el consentimiento del acreedor, como es evidente. La subrogacién convencional consentida por el acreedor, se distin gue de la cesién de créditos, en que en la subrogacién, el tercero tink camente adquiere derechos contra cl deudor en Ja cantidad que paga, pero no por Ia totalidad del crédito cuando el acreedor consiente en recibir una cantidad inferior, En cambio, en la cesion de créditos, aun- que el deudor venda su derecho en una cantidad inferior, el cesionario puede reclamar la totalided de la deuda, Ademés, la subrogacién con- vencional sélo tiene como fuente o causa eficiente un Pago, en tanto que la cesién de derechos, tiene distintas causas: venta, permuta, dona- cién, etc., etc. Estas diferencias se deben a que en el pago con subrogacién, dicen los tratadistas gue el tercero interviene con una funcién de amistad en favor del deudor; es decir, hace un pago tinicamente para favorecer al deudor y substituirse en lugar del acreedor, pero si éste acepta una cantidad inferior, al tercero subrogado no puede exigir la totalidad de la deuda, porque su funcién no es la de comprar un crédito para reclamar después el pago total. Ademés, se distingue 1a subrogacién de la cesién de créditos, en gue, en la primera no existen las formalidades de la segunda, ya que la ley no requiere la notificacién al deudor que debe existir en todo MANUEL BORJA SORIANO PROFESOR HONORANIO DE LA FACULTAD DE DERECHO DE LA UNIVERSIDAD NACIONAL a TEORIA GENERAL DE LAS OBLIGACIONES CONCORDADA GON LA LEGISLACION VIGENTE TOR FRANCISCO E IGNACIO, BORJA MARTINEZ 16" edicién rs Aw EDITORIAL PORRUA AV. REPUBLICA ARGENTINA, 15 } MEXICO, 1998 TEOR{A GENERAL DE LAS OBLIGACIONES 435 Diez pesos. Monedas de oro Cinco pesos: Un peso, Monedas de plata ......... ..4 Cincuenta centavos. Veinte centavos. Diez centavos. Monedas de niguel ........... j Cinco centavos. Dos centavos. Monedas de bronce nee GR GOAtavO, “Art. 3° La liga de las monedas de oro seré de novecientos milésimos (0.900) de oro fino y de cien milésimos (0.100) de cobre. La de las monedas de plata sera: para las piezas de valor de un peso, de nueve mil veintisiete diezmilésimos (0.9027) de plata pura y de novecientos setenta y tres diezmilésimos (0.973) de cobre; y para las piezas de menor valor, de ochocientos milésimos (0.800) de plata y doscientos milésimos (0.200) de cobre. La liga de las monedas de bronce serdé de noventa y cinco partes de cobre, cuatro de estafio y una de zinc, La moneda de cinco centavos se fabricaré de nfquel comercialmente puro.” En la ley de la que nos estamos ocupando se cambié el principio adop- tado cn nuestros antiguos cddigos civiles, como puede verse en los articu- los de esa ley, que transctibimos a continuacién: “Art. 20. La obligacién de pagar cualquiera suma en moneda mexicana, se solventa entregando monedas del cuiio corriente por el valor que repre- sentan. Por tanto, las oficinas ptiblicas de la Federacién y de los Estados, asf como los establecimientos, compafifas y particulares, estdn obligados a admitir dichas monedas en pago de Io que se les deba, sin més limitaciones que las que expresa el articulo siguiente. “Art. 21, Las monedas de oro de cualquier valor y las de plata de valor de un peso tienen poder liberatorio ilimitado. En cuanto a las otras monedas de plata, a la de nfquel y a las de bronce, sélo es obligatoria su admisién en un mismo pago, en cantidad no mayor de yeinte pesos para Jas monedas de plata, ni de un peso para la de niquel y las de bronce. “Art. 22, La moneda extranjera no tiene curso legal en la Reptiblica, salyo los casos en que la ley determine expresamente otra cosa. Las obli- gaciones de pago en moneda extranjeta contrafdas dentro o fuera de la Repiiblica para ser cumplidas en éia, se solventan entregando el equiva- lente en moneda nacional, al tipo de cambio vigente en el lugar y fecha en que deba hacerse el pago. “Art. 23. Las prevenciones de los tres articulos anteriores no son re- nunciables. En consecuencia, toda estipulacién en contrario sera nula de 008 MANUEL BORJA SORI na 774]; “Es préciso entender por ello Jas excepciones que no estén adhee ridas a la deuda asumida, sino a las otras relaciones y circunstancias pet sonales del deudor... Entre las excepeiones personales del deudor y, é las cuales el que asume la deuda no podria prevalerse hay que mencionar fi compensacién.” : “ET que asume 1a deuda no podria oponer al acteedor las excepei que resultan de la relacién juridica que existe entre el que asume la det y el antiguo deudor, y de la cual proviene Ia asuncién de deuda... relacién es extraiia al contrato de asuncidn de deuda: constituye solamet ei motivo que ha determinado al que asume la deuda a celebrar contrato con el acreedor. Si el que asume la deuda ha prometido asumi en cambio de una contraprestacién del deudor, no tiene pues el derecho, en caso de inejecucién de esta contraprestacién de oponer al acreedor la xe cion non adimpleti coniractus. Asimismo, si ha asumido la deuda porque se creia obligado hacia el deudor, no puede prevalerse de su error en cont del acreedor...” [Tuhr, pag. 775). 1322, Nulidad. “Cuando se declara nula ta sustitucién de deudor, antigua deuda renace con todos sus accesorios; pero con la reserva ded chos que pertenecen a terceros de buena fe’ [art. 2057 del cddigo de 1928 En vista de las explicaciones que hemos dado anteriormente debemos” entender que cuando dice cl artfeulo que acabamos de copiar que la a tigua deuda renace, no quiere significar que una antigua deuda ha si sustituida por una nueva, pues esto es lo que caracteriza a la novyaci sino simplemente que renace la relacién jurfdica que antes habfa entre dl acreedor y el antiguo deudor, 1323. La novacion y la cesién de deuda. Antes, segtin el articulo 1 del cédigo de 1884 [inspirado en el articulo 1271 del c6digo Napoleé cuando un nuevo deudor sustitufa al antiguo, que quedaba exonerado habia novacién, es decir, una obligaci6n nueva reemplazaba a la antig Dicho articulo ha sido suprimido en el cédigo de 1928. La supresién debe a que este eédigo, a semejanza del cddigo civil alemén y del suizo de las obligaciones, ha adoptado la cesién de deuda con la tendencia de que desempefie el papel que antes correspondié a la novacién por camb de deudor [véase Planiol, t. II, nim. 530]. Los articulos 2051 y 2052 del cédigo de 1928, a los que antes nos’ hemos referido en relacién con el rubro del capitulo al que pertenecen, tubro que dice: “De la cesién de deudas”, dan a entender que la sustitu de deudor implica cesién de deuda, es decir, que persiste la misma ol cién. Asi pues, bajo el imperio del cédigo de 1928 la regla general es at cuando Jos contratantes quieren que el deudor cn una obligacién sea s tuido por otro, s6lo pretenden modificar esa obligacién sin perjuicio de su identidad [Enneccerus-Lehmann, pég. 364]. Pero a pesar de que nuestro cédigo de 1928 no ha reconocido exp mente la novacién por cambio de deudor, los contratantes, al amparo d TEOR[A GENERAL DE LAS OBLIGACIONES 609 principio de Ja libertad en los contratos, pueden efectuar una novacién de esta especie, es decir, pueden hacer que el cambio de deudor implique el nacimiento de una nueva obligacién que sustituya a la antigua si asi lo quic- ren [Enneccerus-Lehmann, pag. 365; Saleilles en Code, etc., pag. 600] En este caso los contratantes deben manifestar su voluntad de una manera clara para que no se suponga que han querido efectuar una cesidn de deuda, 1324. Estipulacion a javor de tercero y cesién de deuda. Refiriéndo- nos a lo expuesto en este libro, ntimeros 550, 551, 552 y 558, ahora agre- gamos lo que sigue. Si el estipulante (al que llamaremos D) es deudor del tercero (al que Hamaremos A) y celebra un contrato con el promitente (al que Hamaremos C), contrato en el que éste conviene en pagar al ter- cero (A) Io que le debe el estipulante (D), entonces, sin perjuicio de la subsistencia de la antigua obligacién del estipulante (D) a favor del ter- cero (A),, habré nacido una obligacién nueva del promitente (C) para con el tercero (A) que tendra el mismo objeto que la antigua. El tercero (A) podra exigir el cumplimiento de la nueva obligacién al promitente (C) [ar- ticulo 1869 del eddigo de 1928]. Para que lo convenido entre el estipulan- te (D) y el promitente (C) pueda considerarse como cesién de deuda sera necesario que manifiesten claramente su voluntad de que el promitente (C) sustituya como deudor al estipulante (D), quedando éste exonerado [yéase Tubr, pag. 767, y Rossel y Mentha, op. cit,, t. II, pég. 162] y serd nece- sario, ademas, que consienta el acreedor (A) en la sustitucién del deudor, es decir, en que el promitente (C) sustituya al estipulante (D) [art. 2051 del cddigo de 1928]. Ademés, en este caso no habra obligacién nueva alguna. IGNACIO GALINDO GARFIAS HO. MAESTRO EMERITO DE LA FAGULTAD DE R_DE LA MATERIA EN LA MISMA FACULTAD. PRI NACIONAL, CHO UNAM 0 UNIVERSIDAD TEORIA DE LAS OBLIGACIONES bs EDITORIAL PORRUA AV. REPUBLICA ARGENTINA 15 MEXICO, 2000 ‘TRORIA DE LAS OBLIGACIONES 257 la subrogacién, no obstante el pago efectuado al acreedor por el tercero, el crédito permanece, no se extingue. Diez-Picazo expone: Si existe regularmente la figura de la cesién de créditos, es licita la pregun- ta en punto al modo en que deban configurarse otras categorias diferentes de transmision del crédito y en especial la que Mamamos subrogacién. %Cnéles son las diferencias que separan o una u otra figura? Para algunos autores, asf como la cesién se produce siempre en virtud de un negocio ju- ridico que celebran el cedente y el cesionario y es, por ello, una transmi- sidn voluntaria del crédito, la subrogacién es obra de la ley y se caracteri- za como cesién o transmisién legal. Sin embargo, esta caracterizacién no es exacta, por cuanto que, aunque la subrogacién pueda resaltar ope legis, es admisible una subrogacién voluntaria 0 convencional, como resulta del art. 1.209 CC... Como puso de relieve Betti, la cesién es un cauce institu- cional para realizar el interés de la circulacién del crédito y, se basan, por consiguiente, en la consideracién del crédito como un bien patrimonial o como un objeto de tréfico jurfdico con el que se puede comerciar. La ce- sién es siempre negocial.$ 4. SUBROGAGION Y CESION DE CREDITOS.—No se concebia, en el Dere- cho Romano, la posibilidad de transmitir a otra persona el crédito o la deuda derivada de una relacién juridica que se estimaba inseparable de la persona del acreedor o del deudor. La subrogacién participa de la cesién de créditos, en el caracter traslativo del crédito o de la deuda subrogada; pero difiere, en que la subrogaci6n toma su origen en raz6n del pago de la deuda subrogada 0 del préstamo al deudor, para hacer el pago a su acreedor. En este ultimo caso, la suma prestada al deudor para satisfacer el derecho del acreedor, se encuentra en funcién del pago de la deuda, y por ello el prestamista se sustituye en los derechos del acreedor, frente al deudor. De lo dicho se desprende la diferencia entre subrogacién y cesién de créditos. Ya se dijo que, en uno u otro caso, directa o indirectamente la subro- gacién se realiza en funcién del pago hecho por el tercero o el présta- mo para el pago de la deuda; pago que el deudor se obliga a efectuar. En todo caso, la cesién de crédito nace del contrato celebrado al efecto entre cedente y cesionario. No ocurre necesariamente asf en la subrogacién, que puede tener lugar por acto de voluntad (subrogacion voluntaria) 0 por disposicién de la ley (subrogacién legal) 2 Disz-Prcazo Luis. Fundamentos de! Derecho Civil Patrimonial. T. 11. Las Relaciones Obligatorias, Ed, Civitas. Madrid 1993. 258 IGNACIO GALINDO GARFIAS Quiza por el origen histérico de la cesién de créditos, originalmente no se percibié distincién entre una y otra figura juridica. Pero existe una diferencia fundamental entre ambas instituciones: en tanto la cesion de créditos necesita el acuerdo entre cedente y cesionario, la s yacidn es consecuencia de un payo ocasionado por un tercero.t Como ya dijimos la subrogacién produce la transmisién a un terce- ro de los derechos del acreedor, como consecuencia del pago que éste recibe del tercero o por efecto del préstamo de dinero al deudor para efectuar el pago. 5. SUBROGACION Y NOVACION.—Como ya se dijo, la subrogacién es efecto del pago o en funcién del pago; en tanto que en la cesién de crédito hay una transmision de la relacion juridica pura y simple entre cedente y cesionario La subrogacién se encuentra en funcién del pago al acreedor. Tiene lugar por convenio entre el acreedor, que recibe el pago de su crédito y transmite sus derechos al tercero que paga la deuda o bien en razon de que el deudor que recibe un préstamo, para el fin del pago de la deu- da, se obliga ante el prestamista, a satisfacer los derechos del acreedor. Se distingue de la novacion en que esta ultima figura extingue una relacién y crea una nueva. En la subrogacién en cambio, se sustituye un acreedor por otro, en tanto que permanece existente la misma rela- cidn obligacional. La novacidn extingue la deuda primitiva y genera una nueva. La subrogacién mantiene existente la relacién juridica, la misma deuda que se transmite a otra persona, (el subrogado). La semejanza es mayor entre la subrogacién y la cesién de crédito pero sustancialmente son diferentes, como se explica en el apartado an- terior; son solamente distintas una de otra. Esto pone en relieve la naturaleza substitutiva de los sujetos de la subrogacion, ya que el cambio consiste en que aparece en la relacién jurfdica otro titular (e] subrogado) del crédito. Asi queda puesta en relieve la naturaleza sustitutiva de la subroga- cion. Sustitutiva no de la deuda, que sigue siendo la misma, sino del titular del crédito, La subrogacion es un medio juridico para satisfacer el derecho del acreedor, y a la vez —y ésta es su caracteristica esencial— es un ins- trumentos traslativo de la relacién juridica a la persona del tercero su- brogado, que paga al acreedor o presta al deudor dinero para pagar la obligacion 4 Phastot, Ripert, opus cit, ‘T. I nim, $20. ‘TEORIA DE LAS OBLIGACIONES: 259 En cualquier caso, la subrogacién opera en favor del tercero, (subro- gado) y se efectéa bien por el pago, bien por efecto del préstamo que hace el tercero prestamista. Con lo expuesto hasta aqui, se aprecia que la relacién permanece sin cambio alguno, Lo que cambia por virtud de la subrogacién es el ti- tular del crédito. En la subrogacién, en el pago efectuado al acreedor por el tercero subrogado, el crédito permanece vivo, no se extingue. 6. SUBROGACION CONVENCIONAL—En la subrogacién el acreedor transmite el crédito al tercero. En esta especie de subrogacion, el terce- ro que paga puede convenir con el acreedor en que éste le transmita sus derechos y la accién de pago contra el deudor. Esta estipulacién debe ser expresa y no se puede proceder por deduccién. Esto debe ha- cerse constar expresamente en el documento respectivo, ya sea que haya sido pagado directamente al acreedor 0 que el tercero (subrogado) haya prestado dinero al deudor para que éste haga el pago. a) Subrogado en convenio con el acreedor, En esta especie de subro- gacién, el tercero que paga puede convenir con el acreedor en que éste le transmita sus derechos frente al deudor (particularmente la accién de pago). Esta estipulacién debe ser expresa segtin ya se dijo. 5) Por convenio con el deudor. El articulo 2059 del Cédigo Civil dispone lo siguient “Guando la deuda fuere pagada por el deudor con dinero que un tercero le prestare con ese objeto, el prestamista quedard subrogado por ministerio de ley en los derechos del acreedor, si el préstamo constare en titulo auténtico en que se declare que el dinero fue prestado para el pago de la misma deuda. Por falta de esta circunstancia, el que presté sdlo tendra los de- rechos que exprese sn tespectivo contrato”. (de mutuo, celebrado con el deudor) De la lectura de este precepto se desprende que para que proceda la subrogacidén debe declararse expresamente, en t{tulo auténtico, cudl es la finalidad del préstamo, Elemento probatorio esencial para que se produzca la subrogacién en favor del prestamista. Por titulo auténtico debe entenderse; documento puiblico, documen- to privado, suscrito por ambas partes ante dos testigos o ante notario pblico o autoridad competente que haga constar la identidad de quie- nes firman el documento: el deudor y el prestamista. En ese titulo debe constar expresamente que el deudor subroga al prestamista en los derechos del acreedor. 7. SUBROGACION LEGAL.—Conforme a lo expuesto por el articulo 2058 del Codigo Civil del D.F. el tercero que paga al acreedor queda subrogado en los derechos del acreedor, para obtener de los demas deu- OBLIGACIONES CIVILES Tetcera Edicion, Manuel Bejarano Sanchez Profesor Titular por Oposici6n Facultad de Derecho Universidad Nacional Auténoma de México HARLA HARPER & ROW LATINOAMERICANA. mixico ige Gestidn de negocios ~cuarta fuente de obligactones— 2 175. Nocién El articulo 1896 del C.C. dispone: “El que sin mandato y sin estar obligado a ello se encarga de un asunto de otro, debe obrar conforme a los intereses del duefio del negocio”. Otra fuente de obligaciones es este hecho juridico volun- tario licito, concebido tradicionalmente como cuasicontrato. Consiste en la in- tromisién intencional de una persona que carece de mandato y de obligacién legal, en los asuntos de otra, con el propésito altruista de evitarle daiios o de pro- ducirle beneficios. Es una interferencia deliberada en la esfera juridica ajena que la Ley no prohibe ni condena, porque se funda en un sentimiento de solidari- dad social, en un propdsito benefactor que debe ser alentado. El gestor de negocios, que actiia gratuitamente, se ocupa de asuntos ajenos cuando su duefio esta imposibilitado de hacerlo, para obrar conforme a los in- tereses de éste ya sea con el fin de producirle un beneficio o de evitarle un daiio. 176. Caracteristicas Primera. Para que haya gestion, la intromision debe ser intencional, el gestor sabe que esté inmiscuyéndose en los asuntos de otro. El que gestiona un asunto ajeno creyéndolo propio, no realiza una gestion de negocios. Segunda. La intromision es espontanea, pues, ni procede de un mandato legal (no es obligatoria), ni de solicitud del duefio del negocio (no es contrato de mandato). Tercera. Debe estar presidida por el propdsito de obrar conforme a los intereses del dueiio del negocio. Cuarta, Aunque no lo sefiale la Doctrina, no debe ser emprendida contra la expresa 0 presunta voluntad del duefo del negocio, pues la invasion autorizada es excepcional y debe ser salvaguardado el derecho de cada quien a decidir lo que le conviene en lo relativo a sus intereses personales, salvo que se tratare de una gestion por utilidad publica (articulo 1905 in fine). En la gestion se decide “hasta qué punto el individuo es libre (sin que nadie pueda entrometerse en su esfera patrimonial) y hasta qué punto esta intromisi6n es licita por utilidad general”’ (Simoncelli). 212 FUENTES Y ELEMENTOS DE LAS OBLIGACIONES 177. Naturaleza juridica La gestion de negocios engendra obligaciones tanto a cargo del gestor como del duefo del negocio gestionado. Tales obligaciones, de origen legal, no pue- den ser modificadas ni sujetas a modalidad por los que intervienen, y, una vez presente la figura juridica, se producen al margen de su voluntad. No es una declaracion de voluntad, porque no se dirige a las consecuencias juridicas de la gestion de negocios. Se trata de un hecho juridico y no de un acto juridico, aunque Enneccerus no duda en calificarla como “un acto seme- jante a los negocios juridicos”’. 178. Régimen juridico OBLIGACIONES Del Gestor 1. Debe obrar conforme a los intere- ses del dueno del negocio (articulo 1896). Obrar conforme a la volun- tad presunta del dueno. 2. Debe desempefar su encargo con la: diligencia que emplee en sus negocios propios (articulo 1897). 3. Debe dar aviso al duejio y esperar su decision (a menos que haya peligro en la demora) (articulo 1902). Del Dueiio 1. Si el negocio fue &tilmente gestio- nado, debera pagar los gastos nece- sarios realizados por el gestor, y los intereses legales, hasta la con- currencia de las ventajas (articulos 1903, 1904 y 1907 del C.C.). . Debera cumplir las obligaciones contrafdas por el gestor a nombre de él (articulo 1903). . Si ratifica la gestion, se convierte en mandato (articulo 1906) con efecto retroactivo a la fecha de inieiacion de la gestion. Por lo tanto, debera pagar todos los gastos, aunque no hubiere sido util Ja gestion (articulo 2577), e indem- nizarle los daiios y perjuicios que le Gestién de negocios —cuarta fuente de obligactones— 213 haya causado el cumplimiento del mandato (articulo 2578) con derecho de retencién (articulo 2579) y cobro de honorarios (articulo 2549). 4.Debe continuar su gestion hasta concluir el asunto (articulo 1902), §. Debe rendir cuentas. ee 179. Gestion ilicita Hay casos de gestion anormal, cuyas consecuencias se explican como fruto de un hecho ilicito y no de la gestion de negocios. No realiza una gestion de ne- gocios, sino comete un hecho ilicito: ~ El que ha obrado en interés propio (artfeulo 1900) — El que realiza operaciones arriesgadas (articulo 1900) — El que incurre en culpa o negligencia (articulo 1897) ~ El que actia contra la voluntad del duefio (articulo 1899), Por ello, surge a su cargo la obligacién de reparar los daios y perjuicios causados (responsabilidad civil), caracteristica del hecho ilicito (ver Capi- tulo 11). ACTIVIDAD: # 49 1. Interprete y transcriba los articulos 1897 y 1900. 2. Relaciénelos con el articulo 1910. 3. Proporcione un ejemplo de la aplicacién de cada uno de esos pre- ceptos. Cosién de derechos ANT 10S {ordiounsd ua) O12¥ AWYBLVINA OLY = (SINOLIBTA = (SYOLIGAND. yoaaa yOV 130 SOHI9NIG aLuvd Xa) aLwd X39) S07 ¥WOL A'van3a yoanda = yoag34ov v1 vovd oo1aryn| 73 NOD 73 NOD SSYILNINODONSIIAILNA OGNANIV YOd OawaNdv HOE Sf NOIDVNOG =WLAWY3d — WLN3A V4dWOO OLIOWL OSaBdx3 1531 IYNOIINIANOD BINIAVIINIVES 'VOVN NaI O8LO OWSNIG NI OLYaID O1D3%d NO YJ ys woasauov 130 “yemancne> 30 O1WWYO Vv asa ag ¥VONT | vWOL and | W331 NA A YOGNAG 13 ‘YOUaAYY oovd {omnuos) SOHD4¥ 30 3G NOISID. SYIN3 WLIAVdIYLOIGNIAl OLY —- Yo" NOIDVNONANS | TP wa _ yanad v13a OlIddy¥9 13a SANOIOV9IIO 3G NOISIWSNVUL 416 TRANSMISION DE OBLIGACIONES 0 DERECHOS PERSONALES 347. Introduccion Asi como pueden transmitirse las cosas corporales, también se pueden transferir los derechos o las deudas. El acreedor transfiere a otro su derecho y se produce asi una sustitucién del titular de esos derechos, sin modificar la relacion jurfdica. El deudor transmite a otro su deuda, quien deviene nuevo deudor de la misma obligacion. Se habla entonces de la transmisién de los dere- chos o de las obligaciones, segiin el caso. La transmision, tanto en el aspecto activo (derechos) como en el Ppasivo (deudas), es una idea originada en el Derecho moderno. La concepcién elasica del Derecho Romano no contemplaba la posibilidad de cambiar a los sujetos de la obligacién, sin extinguirla. La sustitucion de sujetos llegé a efectuarse me- diante la figura juridica llamada novacion (ver adelante Capitulo 20), esto es, extinguiendo la obligacién original y creando una nueva con diverso sujeto, mas sin preservar el vinculo juridico, pues la nueva obligacion era diversa de la original que fue sustituida. El Derecho ha evolucionado, admitiendo primeramente la transmision de los derechos, como en los Cédigos francés y espaiiol y reconociendo después la posibilidad de transferir también las deudas, como en los Cédigos Civiles ale- man, suizo, y mexicano de 1928. La transferencia del derecho personal o de crédito puede realizarse por medio de dos procedimientos diversos, que son otros tantos actos juridiecos: I. La cesién de derechos. Tl. La subrogacién por pago. La transmision de la deuda puede efectuarse de una sola forma, mediante el acto juridico denominado, Til. Cesién o asuncién de deudas. __—tesion de derechos __—del derecho=—_ . seen a ~~ subrogacién P cesion o asuncién “de la deuda je dede Cesién de derechos ay 348. Cesion de derechos Es un contrato a virtud del cual el titular de un derecho (cedente) lo transmite a otra persona (cesionario), gratuita u onerosamente, sin modificar la relacion juridica. Preferimos el anterior concepto al que da el legislador en el articulo 2029 del C.C. que dice: “Habra cesion de derechos cuando el acree- dor transfiere a otro los que tenga contra su deudor”, porque dicha definicion es sumamente estrecha y comprende sdlo la cesién de derechos personales, de crédito u obligaciones, y no asi las demas especies de derechos, que también pueden ser cedidas, 349. Naturaleza juridica de la cesion Se ha dicho que la cesién es un contrato cambiante porque asume la forma de diversos contratos como la compra-venta, la permuta o la donacién. Cabe decir que no es un contrato diferente a la compra-venta, permuta o donacion, sino que asume la naturaleza de uno u otro. Es compra-venta si, a cambio de los derechos cedidos, se paga un precio cierto y en dinero (articulo 2248 del C.C.). Es permuta si, a cambio de los derechos cedidos, se recibe otra cosa (que bien puede ser también incorporal, es decir derechos) (articulo 2327 del C.C.) y, es donacién si los derechos se transmiten gratuitamente (articulo 2332 del C.C.). En realidad, la cesién es una forma de transferir la titularidad de los derechos, ya mediante la compra-ven- ta-cesién, la permuta-cesién o la donacién-cesién, de la misma manera que se transmite la propiedad de las cosas corporales, debiendo observarse las reglas particulares del acto juridico al que corresponda, por disposicion del articulo 2031 del C.C: “En la cesién de crédito se observaran las disposiciones relativas al acto juridico que le dé origen, en lo que no estuvieran modificadas en este capitulo”. En Ultimo andlisis, también la transferencia de la propiedad sobre una cosa corporal es una cesion de derechos, aunque no estemos acostumbrados a verlo asi en raz6n de que el derecho de propiedad confiere tal suma de facul- tades sobre la cosa, que se confunde con ella y se corporeiza: aquél que adquie- re el derecho de propiedad adquiere la cosa en si. No suele considerarse que la adquisicién de la propiedad de esa cosa sea una adquisicion de derechos y, sin

También podría gustarte