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PASIONES Enq LA HISTORIA DE MEXICO ise de porate: Ramis Nar (©2012, Aleut Ros Robes Derchon teres (02012, aor Paes Mec S.A de [ue talo ctor MARTIN? ROCA we le pope ee ‘or etpnesa coi Pia fe: xg imei oo 215, isnereonan oe? No peep at pri de ee os inrponsn ‘Sosuonn nrc, nos meme cage ome 9 pe Sant SS ee Wer, cine cr ore oe ‘nasa pein eo pst dele tars & cpr passé de ewane mons pd ae cosine io Nantes incase Coe 2399 Eien dea Ly Peele Durcos de Ary Ars #3) sles ba Capo Pane. peso en es alee Linge Inman, S.A fe CY. {Cen eals Graas Eamed, Mac, D. ‘sya yh eh Metken "Prado ma Meco A mis pops, ema y Jaime, quienes se las ngeniaron para cumplr 45 aos de ensados (fos que flan). ‘Annis chamacos Santiago y Natalia, para que vivan 20m absaitaliberead lox 99 emores (cuando menos) ‘que tengon en su vida A la mujer més hermosa del verso entero anexas (xi el coronel Pepito Guzman, Sangre y Fuego). Indice Introdvecién Entre el amor y el poder 1. Esposa nedmoda. Hernda Conds y Catalina Nua 2. Pasion en el escenario Tes Garcia y Fé Marte Calla. 5. La Gtern ye libertad, Agustin de leur y Mara Iymacia Reser 4. dolor def wiudo, ‘Antonio Lier de Santa Anna y Dooves Tost 5. Mager y Pai, Benito Juices y Margarita Masa 6. La mujer de Tehuamsepec. Jana Catalina Romero y Porto Dae 1. Matrimonio pointers. ‘Maximillano y Caloea 8. Bror de percep, Sebastn Lerdode Tejada y Manuela Revilla - 9, eBlcilo we deja vida» Miguel Miramsn y Concha Lombardo 10. Castigo divino? Potiio Diary Delfina Orcega 0 2 2% 2» 3 35 39 2 30 3 11, Desde Rusia con amor. Manvel Gonsdler yla Cieasiana, Manuel Serdin Guanes y Carmen Alstriste © 25 Amoradistancia. Gustavo A. Madero yCaroina Villareal 12. No erst, 2930" Franeisa 1. Madero y Sara Pérez 13. «Bund por Juana sls con Chana» ‘Vieroriana Hoertay Eni Aguila =. 6 29. Viele at mi misao pensamenio». 14, Amonue del poder. Joxt Ma Pio Suter Mara Canara ‘Alvaro Obreén y Mata Tapia ° 530. Amor entre prinos, 15 Solo wm anur. ‘elas Domingues y Doin ZebadaPalenctn Plan Elias Calls Joefina Boafgo ss. ceceesees TE steLaisla mali 16, «Mi rexoro més importante». "Rapa Amand y Alicia Rovira ‘Alora L- Rodrigue Aida Sliven «-.....-seeeeseee 75 52. Las miees de mi general 17, Bajo la sombna de Los Pino. Pancho Vilay Liz Coal Liar Cardenas y Amalia Slsnano 18 33. Que eins as mje. 18, Laespa que means nilano Zapata yom Expeio Miguel Aleman e Hilde Keser eee) 54. Dos ens. Felipe Angeles y Clara Keauss seco 35. Peregrna de ojo laos. Felipe Carlo Puerta y Alma Reed 36. Tal para cul. ‘Gonzalo N. Santos y Leola Pus Amor con olor a pélvora 19. El gran calavera lgnacio Allende y Antonia Hemera a 20. Un beso por an estado, ‘Ma, Luisa Ferner Villy Antonio Lépesde Santa Anna .. 90 21. Nupeias com la mere. “Dos tetas jalan mis que dos carretass José Marie Lingua y Dolores Escalante 3 37. La pasién en na exquina 22, Paria omejer? 38. La mujer deta Conquista Ise Zaragoca y Rafael Pail | ‘Doft Marin y Hernia Cords 23. Los suas de la Marscala. 139, Semartana del amr. Pepitade la Petty AquilesBasaine 99 ‘Marta Manvela Casrején 24, Bscudo humano, 40. Amores lcs Soledad Soldrimnoy Nicolts Regles 102 ‘Micaela del Corral elgnaco de Fonnegea 25. Amor en el campo de batalla 41 Amorfos en lacorte Felixy Agnesde Salm-Salm co csveseesseees 108 Tania Bonita y Meximiliano ur ns us. a m4 1a - 30 133 . at ut ur 150 153, 156 - 159 4. Brine amor y el debe. Kar Kheresillery Leonor Adsl .Unduel ald. Fenands Rusguellay su mores 4. Loagorenon como... él mismo 1 Tig de Sana Julia ys mujeres 45. Nockesde pasion 46.Lawmmena. ‘et Vaconcels y lens Arismeadi 47.No debestener dos amos ‘Mata Trea Lana y Moiaés Vial 48. El acuerdo Jan OGoeman yL 49. Majer deat. Gaciels Olmos, la Bandi Inteleetuales apasionados 50. Amor was as wes. | Jou Ferninder de Lind y Mara Dolores Oren, 51, eMcmain evi pore amor. Fea Gonsles Bocanegra y Qadlupe Gone del Pino 52. Lainoenciade una ni ‘ailermo Pies y Maia Coxe 53. Miao de nadie Vicente Riva Palacio yJoefina Bros 54, Ane caver. Mange Acuiay Rosario dela PeB <=. 58. 7 Amado Nero y Ana Ceviis its Daillet 5°58. «No me catia contin. Jovita Arellano y Donato Blasco 59, Amor heenico, ‘Alfonso Reyes ¥Manuela Mota (60. «Soy una cosa echada a perder» ‘Mariano Amiel y Carmen Rivers «| 61. Un sala a wai, ‘Antonieta Rivas Mercado y Manel Rodrigues Lozano 62. Juntos pero separados. Diego Rivera y Frida Kahlo. (63. Amor en rj. David Alfaro Siquezosy Blanca Lz Brum (64, «Bas la cosa que andaba buscando ‘an Ruf Clara Aparicio. . 65. Obseston Rotsrlo Castellanos y Ricardo Guerca 66. Los amorasos Jaime Sabine y Josefa Rodriguer La pasion a ercena (67. La primera «Lolitas. Esperana Iris y Miguel Gusies 68. Bl amor es una puesta enescena. ‘Virgina Fabregas y Francisco Cardone 69. Lava ye decor Dolores del Ro y Orson Welles 70.Com el dempo 9 ganchito Tosquin Pardavey Soledad Garcia Villegas 11. Brana fica aco Sierra yExperanca Iris 20 24 a7 220 23 ns 2 Be = 35 29 m5 28 254 - 251 81. Blamor en wna hacienda © Rosalie Evans y Hay Brans «.. 88, Amor gaseroitestna Solel Gonzi: y Abraham Ayala Gonzéler 159. El soir del Jueves Sanco Th Dien gue soy mario» Pedr fant y Mara Luisa Leén Bs Emilio el indo Fernnder y Columba Dominguez 14. Blamor ena guera Maria Fac ‘Alfredo Robles y Concepcién Cabral Historias de familia De padres ¢ hijos 75.No hay qinto malo. ‘90. Los padres también onan. . Juan Canoe Isabel Moctensma m ‘91. Dulce venganaa. 16, Venganea asional Peso de Lezama y Luisa de Salinas » Den Jun Manvel de Soléreanoy dot Mariana de Laguna 92. Bsclava del amor. ‘71.Feriiinsirgee, Gertrudis de San Nicolts y Nicolés dela Crus Pedro Moreno y Rita Peres m | 93. Elde la mano horadadi. 18, Penis. 4 Pedro de Moncada y Maria Ana del Jaral de Berio Jos Faustino Dias y Petron Mori. 280 © 94. Consejos pateros, 79. Una partida de napes. 1 ‘Aguttin de turbide y Ana Maria Huare ‘Urmula de Armas y Juan de Haro 283 95. Mamita queda. £80. «Solo mu amor consolarme puede Ignacio Comonforty Guadalupe de los Rios Melcher Ocampo y Ana Maria Escobar 2... 286 | 96, «Perdiname madre. 81. A polar el meno, i Jose Marfa Arteaga y Apolonia Magallanes Francico Gmes Palacio y Catalina de la Trinidad 289 | 97. zAmorde madre? 182. Amor embalsarnad | Agustina Ramirez y Severiano Rodeiquet Francisco arco y Luss Elorcngs | 292 |) 98, Padre'y mate 5, Hamillaciones | Juan de Dios Pera Concepcién Echegaray ‘Amma Din gnacio de In Torre 295 99, «Mi ijo no estd muerto>. 84, Una vida en Cuernasaca. ‘Petra Hidalgo y Mariano Arceo Rose E, King y Norman Robson King sere D8 85, Por qué, Dios miot Apradecimientos Maria rave y Crispin Robles «.- 22s es es -301 86, Valeremasasr fice Don Rafael Aguie yJovits Benavides aot 307 310 35 319 oa 305 334 37 340 38 346 39 k | Introduccién Bsa que Tamas emer fu nveniado ‘eres como yo pave vende medias Dow Dasrer, Mad Men Elaor én. divess prsentaciones x uno de lt owe dea sorts Tan democtes come la mre, nora funder pol tem, principiog cena talent rofslones Recon tla talc de day vr tamblén come lemuceoelade Tasandancas humans | EnMesics clamor aot pot gus conqusade yon | quer alin etnupentes a iberlsy corer | eeewoluclonar, ee datos fo vinefs lor reset, | clones iy agen 7 | | | guird zordndonos hasta el final de los tempos. En alguna ocasisn se me ocurrié decir que en la historia per sonal, el amor aparece como uns nota al ple de pagina. Mi aseve- raclén no cay6 en gracia y transi cemporalmente pot los infer ‘nos de la incomprensidn. Sin embargo, la investigacin pata estos relatos me llevé a confirmar lo dicho. A pesarde que elamor es catalzador dela historia, se encuentra poco documentado yen la | Biograffa de los geandes personafes, en efecto, es apenas una note alpie ‘Ms preocupados por sel bien de la Patras que porel romance, slgunos hombres del poder, eauillosy jefes de armas eran muy ‘escuctos 2 la hora de mostrar su sentimientos —eterna queja fe rmenina—j sus pocas Incas amorosas eran tan romdnticas como in "7 decreto presidencial oun ofigio buroeritis. En cambio las inte- lecruales y los artistas se desbordaban, eran intensos y artebatadcs El sol, la luna y las estrellas eran poca tosa ala hore de absie el comaxén, En ambos extremos, las historias de emor demuestran que ls vida es una sucesién de compensaciones: se sute yse hace sufee Para disfrutar lo dulce es necesario probar lo amargo y por més sombrio que puliera presentarse el porvenir, una de las enseRanzas de [a naturaleza humana es que nadie se muere de amor. Al final, Tos amores que otonga la vida se convierten en memoria y se re- construyen y relaventan en los recuerdos. Fl lengusje del emer es un inmenso lugar comin; no hubo per- sonaje masculine que no recurrers al centenario catélogo de fases pata todo romance: «amor demi vidas, «no existe nadie como tin, samantisima compateras, «n0 puedo vivir sin tin, haces de tuna mejor personas, «vida mas, xen mi corassa no tienes rivals, ‘cielo mio», wserds mia ode nadies, «amada mia», «nadie te que rrfa como yor, «ser queridoss, por una mujer como tf, es ls mejor fortuna que puede tener un hombre como yor, wees la inica» Las frases son tillodss, pero poco impor a falea de imagina- ‘ign. Lo esencial es que hubo una mujer capa de hacer que todas ‘sss fares adquiriean sentido, tomaran su forms e hicieran surgie los sentimientos més profundos de otro ser human sin importar cual fuera el desenlace de la historia, Y la historia se repit. ‘esta las primeras décadas del siglo XX, en el caso de los pro- tagonistas de ls historia, era cil prometer amor eterno o entregat cl coruzdn para siempre, Le eternidad tenfa fecha de caducidad: los matrimonios generalmente drabun entre die: y quince aos —aungue hay excepciones—, antes de que la muerte interviniers, ya fuera en el campo de batalla 0 por causes natueles. En muchos casos el fameso retin «matrimonio y martaja del cielo bajans era tuna senteneta: Ia mujer subfa al altar para luego deseender a reco 8 | | | | -_ gerel cadiver de au marida, sobre todo cusndo la guerra era parte Ede avila condiana, Ei mayo de htt ont pce de Sptea Frasculina—auesjebaalamujea un papel ecandarormarca- do pola shogun todas etn plenaments documenta y proceden ie epistles, libres de temarls, archives, nots per ods rfrecin neces ya vans egal, Apes tn esbo del que egies amor par qulenes han conan ‘esa historia Silos amores dels protagonists de meso pe- teoson dfs de documentay, ea in sculls femenina —eomo en mucho oxen nbs de ahora aco ral Poca jer dejaron testimonio de usmory deus dsecs tnd patonadsyprofundoe. 98 psons.esun record a través de los amores que dble: goon les hamibs del poder eam pola en mano deo cau- Allo los peellloe y venture licenciost de gas petonaies duines cretancon fe cege que wos teas olan ma que do cae- tae lence tears de Les ntlerale la puesta en escena Cklemor que mar al muedo del epectcuo ls ies coi ‘an fia y del nia amr grail depts ios His tora de carver, alegtesy mins tite smb, as Caolsel amor vind su gar par dejar abc lpi, alimenos como esperar, de que pace hakern final fel Ausyannao Rosas (Ciudad de Mésico, 28 de margo de 2012 19 | | | Entre el amor y el poder e 1. Esposa incémoda Hemén Cortésy Catalina Xuérez sited Test 13 dng dy 1891 fom 2aia épiea, Con poco mis de 900 espaiioles bajo sx mando ymiés de 100 000 alizdos indigenas, Hernin Cortés logré rene al imperio ateca. De la magna cludad imperial no quedé piedea sobre piedra. Por razones politica, Cortés deci fundar la capital de la Nueva spate sobre los restos de Mexico-Tenochtitlan. El conguistador proferis6 que la cialad llegaia a tenet Ia majestad de otros tiem. ps, ast lo hizo saber a Carlos V en su Tercera Carta de relacién, fechada en mayo de 1522: «De custzo 0 cinco meses para ac, que la dicha ciudad de Temixtitan se va reparando, eseé muy hermosa; ‘crea VM. que cada da se ied ennobleciendo en tal manera, que ‘como antes fue principal y seiora de todas ests provinciss, que lo serd ambien de oquf adelante; y se hace y haré de eal manera, que los espafoles estén muy fuertes y segutos, y muy sefiores de los paturaess Mienteas sus hombres realizaban los traajos de limpieza, Cor ‘és se estableci6 en Coyoacén, su «amada villa». Por entonces , para aclamar al milter, y fue tan ‘grande el homenaje, que el vierey Franciseo Xavier Venegue s- 16 celos y determing no volver a concurrir al teatro mientras Calleja permaneciera en le Ciudad de México. ‘Al vencedor de Hidalgo le gurtaba el stro, y partcularmente unt acts que desde 1808, «por su graciaydesparpajos, babfa puesto de ‘moda algunas tonakillas con nombres sugerentes:Lasoltrta, Las eros, Yo so, sir, na mociay La deapasionada Era una ater ta Tentosay muy carismstic, qu se consagrs bajo le pas del militar Luego de algunas intrigas y de sus eriunfos mnilieares, el 4 de mano de 1813, Calleje ocup6 el cargo de virrey de la Nueva Es pata y desde las aleuas del poder, mientras I guerea consinuaba, Se dio tiempo para impulsar la carrera de la acista Inés Garefa, lamada La ines En la capital de inmediato corrié el rumor de que Inés era amante de Calleja y aunque el virey tena a su viereina, no hubo lugar a escéndales, nia chismes que pusieran en tela de juito la 26 | | | | jnoral de la mékima autoridad novehispana. La asistencia del go- te alas funciones, las deferencias que tenta hacia Inés y ‘huberlaconvertido en Is estrella favorita del momento, poces judas dojaban sobre la relacin que mantenian. Para el virey La “Iesilla era une vsidn, la mujer de sus desvelos, pues su bellez era ‘eautivadora; por sola hubiese sido capar de persuade a Calleja de conga la independencia. “El 6valo desu sostro —exerbi6 Enrique de Olavarta y Ferra ‘en su Reseiahistrca del teatro en México, tenuemente apifona- do encerrabsgraciosamente en un marco de suavisimos cabellos negtos,artificialmente rizados: negrosy grandes sus ojos, miraban, a medroso ante su hermosurd, con graciona piearia, yal atrevido con apacible sencilles; la boca era en “La Inesilla” un canastillo de verdaderas gracias; pequetiosy encendles ls labios, diminutosy blancos fs dientes,embrisgador y aromitico el aliento, No era de lea escanara, pero tenga lx bastante para sobreslis por la correc: cin de sus formas entee sus demés compaferas; sus manos eran, fines, alargodas, como las de las stir pequetio ydelicadosy en ellos tenia cifrado su ongullofemenil, no sin justictay aed» ‘Sibien le posicién del virey le impedia darlerienda suelta'a sus deseos, durante su gobiemo que concluyé hasta 1816, fue el agzan benefactor de La Inesillay Ia colmé de favores, no obstance que era la segunda damade misiea» y nola primera. El virey tanta la feultad de otorgar una funcign de gracia en favor de alguno de los artista. Todos los ingresosy los obsequios ‘que regslar el pblico iran a manos del actor o errs, lo cual, de las las dftclleseizcunstancias econdmicas que atravesiba la Nueva Espana por la guerra de Independencia, era el mejor regalo que oda recibir Le Inesilla de su amante Ni tardo ni perezoso, en 1813, Calleja autori6 une funcién de beneficio en favor de Inés y fue un éxito, Antes de comencar de buena clase; sus pies 2 La Ineslla le dedies la noche al vitreyy Callefahiza que sus aye antes azrojasen 2 sus pies «ms de cien onsas de oros; incluso la vireina —que se izo dela vista gorda—, le envi6 no de sus me= jores aderezos de beillances. El pablico no tuvo mds que sumarse @ To hecho porel vitrey y croj6 al escenario vontas yatras monedas decoro, y entre los obsequios de alhajas, que fueron numeroses, i sturaron hilos de perla,aretes,eruces, cffecitos de or, rosariosy reloes con pledrasfinass Desde luego, a funcign desat6 las malas lenguas ¢ Inés debi ‘ess as més acerbas etieas, no po sv actuscidn, que haba so de gran calidad artstica, sino por la evidente complicidad intima ‘que guatdaba con el vtrey. El tiempo y los asuntas de la Nueva, Esparta enfiaron I relacién, y cada uno de los amantes siguié ‘propio camino, tan oscuro como lo eran los tiempos de guera ‘Ouavannta ¥ Fensant, Enrique de, Rese inca del teatro en México (1538-1911), Mésle, Porra, 1961 ‘Starts, Anne, coord, Hori de la wid coniiana en Mé- sco. 1. Bienes» vivencas. El silo xX, México, FCS/EL Colegio de México, 2008. 3. La Giiera y el libertador Agustin de Iturbide y Marfa Ignacia Rodriguez finales del siglo XIX, oe mayores se reunfan para comtar his- orias en la plaza Juirez de Apasco, en Guanajuato. Los re= ‘euerdos se apoderaban de las horas y los minutos se transforme- ban en leyendas. Por encima de todas ls anéedotns, la gente del pueblo disrutaba una en particular: la que refers la presencia de una hermosa mujer que logré cautivar & propios y extraios ‘nando la guerra de Independencia Iegabs # m fn. Frente a la belleza de aquella dama, la Casa de los Pectos —une de [as principales mansiones del lugae-—, com tada su malestad, palidecfa, Era una mujer cautivadore que sembraba a su pasa la se luocidn, Su carfeter era suficiente para rend los hombres y solo un eéeenino podia define: hyjuria, Saba sacar provecho a sus atibutos fisics, alos cuales ningtin| «aballero podta neyarse. Se decia que habfa ensefiado las ares del mor a Simén Bolivar cuando apenas era un mozo, que most detalladamente la geoprafia de su cuerpo al viaje ycientfico ale- imi Alejandeo de Humboldt y que en 1820 le encregs su cari, su admiraci6n y su cuerpo a un ambicioso caudillo, en otra mo- mento perseguidor de insurgentes: Agustin de Truride. ‘Sern concabuan fs lugareis de Apaseo, la famosa Gera Ro- seus también lo conaei por esos dias walto, bien hecho, de na notable distinelén sa sesto de gran noblesi,ageadablemente bron premios intemacionales; gracias a ella se introdueistan escueas, se remoratian calles iglesias, se fandarian bras de beneficencine —Ninguno de los dos laments la separseién Ia asumieron como algo que debia suceder Porfiio, sin embargo, siempre estuva all tanto de lo que Juana Cate desarollaba en Tehuantepec ydesde la | presidencia apoy6 sus grandes proyectos. No dejaron de esribitse aunque el contenido desus carta se redujo a una cordial relacién amistosa con detalles sobre el orden, la pat y el progreso dela re sign y del pais (Caando se reencontraron en 1907 por una razén eminente- mente comercial —Ia inauguraeién del ferrocaril de Tehuance [Pec se vieron com el mismo gusto con que vivieron su aventura medi siglo antes. La vida los hab llevado por camlnos diferentes ylesdio una oportunidad de verse una ver mis, la skims. Cutiosa- mente, Porfirio y Juana Cata, murleron en 1915 y ambos se eans- formaron en leyenda ‘Brasseux o# Boursour, Charles Benne, Vil pore smo dz Tehuantepec. 1859-1860, México, SE, 1981 Diaz, Poxfirio, Porfirio Diag. Memoras, Mésico, Editorial ier, 1983, Katze, Borie, Siglo de coulis, México, Taquets, 1994 a I 7. Matrimonio por interés Maximiliano y Carlota Nici tera sor No gab ii iquiera los caillos europe, los paisajes de Francia, Aus Iria, Béleiea o Trieste sievieron como escenario para une historia, ‘roméntica. En México solo les aguardaba el infortunio que la ‘pareja imperial parecia buscar afanosamente, En 1856, Maximiliano de Habsburgo realis6 una gira de trabajo por Europa con un claro fn: encontrar esposa. Visits la coete Be 1, cneabezad por el rey Leopoldo |, yah conocis a Carlota, quien por entonces contaba con diecistisafioe de edad. El porte del a ‘riaco y sus cartas credenciales genealdgicasseguramente deslum- ‘baron ala joven prince: Maximilian era descendientedel famosa Carlos Vy ademas hermano del emperador Austriaco, (Carlota se enamors como lo que era, una chiquilla, Max le pa- recié «encantador bajo todos los agpectos. Fisicamente me parece hermoso y moralmente no puede desearse miss. Al rey Leopol do Ino le quedé duda que su hija haba cafdo rendida ance los encantos de archiduque, pero como buen observador que era, se percaté de que Maximiliano la traté con fred, no hizo comen- tario alguno sobre la princesa y anuncié que seguirfa su gira por Europa, pues tenfa previsto conocer a las princesas de Holanda y de Hannover. 2 i [Maximiliano] dio por terminada su visita —le everbis do su sobrina, la reina Vitoria de Inglaerra—sin dear fever los propérito que alguncs le atsbufan con respecto ami © hija Carlota. Nilo lamento ni me preocupa Creo que ya me ha- "fri olvidado asta dela existereia de exe joven principe, ano set porque veo en mi hijaalgo que me apenay me conmueve. Calora soa joven impresionabey parece haberse enamorado del Habs Inu con novelesco rene. $i ul amor fue tan solo de parce de Carlota, lo que hubo, Maimiiano se encargs de desrurl poco’ poco. Las zones del sechidugue par contacr matrimonio, nada tenfan que ve con el enamoramiento:sabta que la dote de la princes era muy jugo- sa —Hlegé a ser una de Ins mujeres ms ias del mundo— yl «ncontaba en problemas financieos pola etera constuccién de ‘st casilo de Miramar yotasdeudas adqutdes con anterioidad. EL padee de Carlota presioné a Maximilian para que despo sama asu hija; ra el negocio perfecto. Max relveda sus anos financietosy Bélaicaentraria en una alianss politica importante con Austria, con la bendici de la eina de Inglaterra. Carlota, desde luego, no conoci ls enteetelones de au enlace y Maxima 1a dejé muy caro quel princess belga no le provocaba mas que algunas laesnieas lineas: «Ela es pequehiay yo soy grande, como debe ser le escribié Maximiliano a su hermano Carlos Lais— Ella es morena y yo soy obo, lo que iguslmente ex bien. Ella es muy integente, aunque con un poco de mal créer, peo sn dda nos entenderemos finalmente= ‘Caria subs al altar profundamente enamorada de Maxim lino, 27 de jlo de 1857, y durante un par de alos a lacs flay in los vaivenes emacionals del azchidugue, Sin embargo, sl earicter melanclic,dubitaivo y hasta pervers dl austsaeo ro tards enaflorae A finales de 1859, lov arcidgues rparon en Miramar en un viaje que enfa como destin a islas Madr, lo 8 calizadas en el Atléntica, al noroeste de Africa, Carlota descor cla! motivo del viaje que resulté sumamente doloroso para cll. En Madeira descansaban ls rests de Maria Amelia de Orleans, y Braganca, hija del emperadoe Pedto Ide Brasil, In. que —ya com: ‘prometida con Max en Europa habla fallecido siete ats antes. {Bra} una criatura periecta —escrbig Maxcen su diatio— que dejs este mundo ingrato, como un éngel puro de us, para volveral cielo, su verdadera, patria». Aquela mujer habfa sido el verdadero amor ‘de Maximiliano y con la tristeza que lo invadis durante su estancia, en Madeira, se lo hizo aber a Carlota. Sin tentarse el contin, la Hev6 ala casa donde habia fallecido su armada y ala tumba donde reposaba, mostrindose ante su esposa, en todo momenta, llena de stristeza y duelo». No contento con eso, la de tes meses en Ma- eica, junto ala mucre, mlentrasreaisaba un viaje a Bra ‘Cuando regresaron 2 Miramar en 1860. El matrimonio estaba ‘completamente destruio. A partic de ese momento lo nico que los unis fue la ambicion y deste 1863, la obsesién por el tron mexicano. Ante Ia decepeisa, Carlota supo guard las formas as apariencias el protocolo yen todo momenta, frente a las distineas casas reinantes europeas, se mastré con la dignidad propia de una archiduquesa, Una ver en México (1864) desahogs su frustracisn, motos entregindose de leno ala onganizacién politica del imp: tio, ejeciendo el poder cuando Max se ausentaba de la Ciudad de México. Como dictaban Ia formas, en su correspondeneia Carlota rnunea dejé de lamar «tesoro entrafablemente amado~ En 1866, cuando el imperio se dereumbaba, Carlota regress a Europa para peditle @ Napoledn ll que continuare prestando xilio, pero fue indi. La riqueca personal de la emperattiz habeia, sido sufiiente para sostener dos afios més al imperio, peso decid ‘quardar silencio, exigkndoe inclusoa Maximiliane que de ningin ‘mado absicar, Penida ya en la aurora de su locura durante el vije a Europa, “ fun momento de lucides, Carlota recordé lo que habla sido su dal lado de Maximiliano en 1857, cuando el archidusue go- sel reno de Lombardo-Véneto, y con ls restos desu amor le egcrbis al emperador en 1866: “En este paistan leno de recuerdos de felicidad y de legs, on "ete pals en el que hemos pasado los mejores afios de nuestra vd, pienio enti sn cesae Todo respira agut ta recuerdo, tengo ante mi ‘sea el Iago de Com® que amates tanto can su calma azul, Nada he cambiado, pero et ests els, muy lejos, al otra lad del océano, iy han pasado cerca de dies afos! sin embargo, re parece que foe ayer yesta naturaleza no me habla sino de una flicidad serena, y node difcultaesni de decepciones. Tavlos los nombres, todos los acontecimnientos surgen de nuevo desde los rinconeslnngamente clvidados de mi cerebro y vuelvo a ver Lombardfa como sino la Inubiésemos dejado jams. Vivo en dos dies los dos afios que nos faecon tan came» [No wolvi6a recuperarla rx hasta 1927, dias antes de fallces. Desrusnss, Sanne y Henriette Chandet, Maxiniiana y Carlowe, México, Diana, 1964 Irunniana ot i Putt, José N., Eseroy mescenoe de Car Tora de Bagca, México, Banco de México, 1992, ‘Viniaveanto, José Manuel, Masimitano, México, Clio, 1999, 8. Error de percepcisn Sebastidn Lerdo de Tejada y Manuela Revilla FTPs ms inane cron demade op vo cs por su soberhia, Sebastiéa Lerdo de Tejada «no exeia neeestar de nadie para la aeciin —eseribié Justo Sierras to- {Jos Ios hombres le eran iguales, todos eran para él instramentos ficilmente manejables eon el seinelo del interés no erela nece- sitar de consejo, no deliberaba, se informaba negligentemente y Aeekia sn elementos suficientes muchas veces». Fue ol ministro que hizo fuerte a Juices cuando Iles a tener duds. Assujuicio, «en politica, como en todos los negocios de a vida, los términos medios son por lo general los peores; hay que decidisse por cuslquiere de los extremos>. Fio,caleulador, com un ceréccer de blero, ajeno a toda creencia, Lerdo parecta entregar sa volun- ‘ad por completo ala que consideaba su tinica omen: a Paria. YY sin embargo, a pesar de ser considerado «insensible al dolor sajeno ¥ cerrado al amor», le toes perder con una mujer, de Iz cual se enamons perdidamente en Chihuahua, cuando Jaren esablecis cl gobierno republicano en el nore, huyendo del avance frances {en octubre de 1864 —donde permanecieron hasta septiembre de 1865. Por esos meses, Lerdo conoci6 a le hila de uno de los hom- bres que con mas afin recibis a Jusees en Chthuahua: el ilusre Liberal Bernardo Revilla Valensucla 46 a joven Manuela —casi una nifia~ tenia catorce afte de «ly don Sebastiin sleanzaba los 42. Se habtan conocido en los ses anteriores; 0 al menos, el ministo habla ys fjado su interés E ysu énimo en la joven; sin embargo, la ocasién pare habla legs tun baile crganisado para celebrar el cumpleaiios de Jer, cl = 21 de marco de 1865, que terming «a las cinco y media de la mate na, cuando ya el sol emprendfa su majestuose marcha». ‘quella noche, Leo entreas su alma, abandons ala Pacria—su © pico amor hasta enronces— y abrié su corazén para que Manuela _sessomar a, Hombrede acciones yno de reflexiones don Sebas- tid fue directo al grano: le propuso a Manuela que se casran, La joven no se sorprendis; desde hacte alain tiempo sabta de les intenciones del ministo, quien habia malinterpretado cierte coqueteria juvenil con la que se movia Manuela entre la socie- dd chihuahuense, Lerdo se habia construdo una historia de amor . Sor prendido por la macabeareliquia, un sacerdote Ia persuadié para ‘que dejase descensar en paral valiente general, Mienceas cata la terra sabre cl dleimo vestigio del guerrero, Concha se hiso una promesa de amor para el resto de vidas -Péguese mi lengua a mi boca si legaras olvidarte» CArneas, Erma, Como yo whe querido, México, Docu rmantacin y estdios de mujeres, 2009, Lowpanbo oe Mitauson, Concepcisn, Memoria de Concep cin Lombardo dz Mirancn, Mexico, Porria/Biblioteca Porwia 74, 1989 10. {Castigo divino? Porfirio Diaz y Delfina Ortega de 36 afios a la mujer que amabs. Extra peticiin, ls alter- _nntivas eran extremas. Lo tnico cierto es que amor, ai lo iis, El problema no eran las edades —entre ellos mediaban quince aos de diferencia—, sino el parentesco. El vietorioso general Porfirio Dine estaha enamorado de su sobrina carnal, Delfina, hija de su hermans Mannela a quien le hebie echado el ojo en alguns ocasidn que regresé Oaxaca durante la guerra de Refor= rma y la Imerveneidn francesa, ‘Tan bueno para las armas como para las eres ematovias, duran- te los afos de guerra Porfici dedi algunas horas al aor fuga, antes de dr el paso hacia el registro civil, instituido apenas ocho ‘afosatras, en 1859, por las leyes de Reforma. En los afos de la lucha contra los conservadores (185 sgran romance con Juana Catalina Romero —ia mujer de Tebuan- tepec—, célebre personaje que durdace el Porfiriago impulsacia el ‘desarrollo econémico del Istmo. Atos despues, en vispers ela de rota definitiva del imperio (1867), con la soldadera Raftela Qui- ones concibi6 una nia a quien bautizé con el nombre de Amada aque resulté ser la mis amada de sus hijos—. Y cert el ciclo de sus aventuras emorosas después del salto @Puebla—2 de abril de 1861) corrié el ramor de un 33

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