METRO.

Iba rumbo a su salida cuando sucedi, la mirada, la de el, la de ella, fijas en el mismo punto, no
precisamente en los ojos de cada uno, sino en un punto en el futuro, como un gran maestro de Ajedrez
que al ver la posicin en el tablero sabe que va dar mate en 13 jugadas, en ese instante, ambos
infirieron, cada sonrisa, mirada, noche, lugar y beso que sucedera entre ellos, adems cada pelea,
reencuentro, discusin y error que cometeran, pudieron estar en el futuro y ver este momento como un
recuerdo, pudieron en 6 segundos, valorar completamente que estaban destinados a estar juntos, y que
cada segundo a partir de ahora valdra la pena.

Hola balbucearon los dos, despus de todo entender el amor a primera vista cuando sucede no es tan
fcil como en las pelculas, ambos estaban confundidos pues aunque los dos lo saban, ninguno estaba
seguro de que esto fuera real, despus de todo ninguno jugaba al ajedrez. Sonrisas y una risa tmida.
Ella camina, el la sigue a tomar el siguiente metro, el a pesar que vive aqu, no puede sino seguir
caminando, algo lo impulsa, no le importa llegar tarde hoy a casa, que ni siquiera le pregunta hacia
donde se dirige, esperan el arribo, sin decir una palabra, despus de todo, Que le diras al amor de tu
vida si la encontraras maana?, los dos saben, que es real, pero tan acostumbrados estn a desconfiar,
que el instinto de desconfianza les impide hablar, sin embargo les gusta estar juntos, saben que cuando
salgan del metro la vida les dir por donde continuar, solo les queda esperar el vagn.

Al fin, se abren las puertas, ella aborda, hay mas gente de lo normal, el es empujado las puertas cierran,
miedo. Esprame en la siguiente estacin, dice el, ella, asiente. Ahora el esta solo, y aqu la duda cobra
fuerza a medida que el siguiente no llega, 10 minutos. POR FALLAS EN LOS SISTEMAS EL
SERVICIO QUEDA SUSPENDIDO, gritan los altavoces. La tristeza lo atrapa, an as, se sabe capaz
de llegar a la siguiente estacin corriendo en por lo menos 10 minutos ms, 20 minutos, la mente suma
en automtico, se da cuenta que nadie espera a un extrao 20 minutos, sale del metro, camina directo a
su casa, tal vez fue mi imaginacin se dice, ni siquiera puede recordar su cara, porque lo que vio fue un
sentimiento y no una persona. En la siguiente estacin ella espera por 40 minutos, a los 30 el servicio
quedo restablecido, se siente como una idiota, esperando un extrao, y an mas idiota, a uno que nunca
llego, sube en el siguiente vagn, se pierden para siempre.