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276 ASALES.—ApRit, oF 1865. Chilog,en 1862 pasaban de 12,500 el namero de imdividuos emplea- dos en la navegacion i pesea en el Archipiélaga. En el mismo afio se construyeron alli 9 buques i 20 emharcacioaes menores de da 40 to" neladas. La exporlacion de la madera anzaanualmente de un milk ni medio a dos millones de piezas, haciendo un valor que puede apre- ciarse de trescientos a cuatrocientos mil pesos. NOTA.—El Archipivlago es hoi sn dizel teatro de los acoatecimientas mas intere- santes que tienen lugar eu Sud-Ameérica. [a escuadra aliada tiene alli su apost: dero, la espaiiola, conociendo su impotencia, hace rumbo a sus aguas, La actual guerra es maritima; allise encuentran todos los elementos i facilidades para con truceiones navales; sus habitantes son los mejores marinas de 1a costa de! Pacit co. Este Archipiélago es, pues. el punto estratejieo del dia j al cual se dirijen con predileccion nuestrag miradas coino el arca santa de 1a salvacion de medio mundo. Ef apostadero de Chayahue (AL*,{0, fat. $. 173° lonj..0. de Greenwich), en donde los espafioles han sido enérjicamente rechazados el dia 7 de febrero, es una ence- nadaen el estremo meridional del continents dabrigada por el Suri el Oeste por las islas de Abtao i la Lagartija, pertenecientes al departamento de Carelmapa, i prdximame rte en la mitad deleamino de Anew a Melipulli_o Puerto Montt. Las puntas de Coronel i Cruces, que fguran en Jas descripeiones del combate, es- tén situadas: lapeimera en el continents i la segunda en ia isis grande, i Torman Ja entrada oriental del cana! de Chacao. Este canal es la entrada a Chayahue, Calbuco, Puerto Mantt, ete.; pero (a eseuadra espatiola no entré por alli sino que fué a tomarel canal de Huato, 150 kilémetros al Sur del anterior, i despues’ ef golta de Corcabado; dando asi wha vuelta d2 90 leguas,a finde no comprometerse enun lance arriesgado. Los marinos de la invencible hicioton su regresoa Valparaiso por el mismo camino en que entraron, a LAS BELLAS ARTES EN CHILL.—Bstudio h echa por el ‘joven don Pedro Francisco Lira Recabarren, a principi de S65. ne Srazat la historia de tas bellas artes. a Chile, hé aqui el objeto de nuestro a vemos que, al tratar de las bellas artes, no compreademos la misica, sino fa arpuitectara, Ja escultura i fa pintura, icula, Pero ante todo adver Ficil es conocer a primera vista el atraso en que se halla entre Nosotros este ramo de ilizacion, ni cuesta trabajo percibir las prin- cipales causas de él. Nos permitiremos indicarlas brevemente, como introduccion a nuestra estudio. Desde luego vemos que una de ellas ha sido i sigue siéndo una muestra del poco aprecio que hace nu ‘a sociedad de los artistas. Esiste en Ja sociedad chilena cierta preocupacion contra las bellas ar- tes, porque ho pertenecen a fo que, con alguna propiedad, pudiera amarse entre nosotros la aristacracia de las profesiones. Sin notar de ningun modo, poryite es ua hecho harto evidente, los malus resul- LAS BELLAS ARTES EN CHILE. 77 tados que tine a Chile uno preacupacion semejante, es sensible a fa verdad, que en una Repablica, donde los sentimienttos | las ideas de veaakled de bian dominar, se lleve ta aristocracia al trabajo i hasta nin punto donde no lo flevan atm las Monarquias enropeas. Notare- mos de paso que lo mismo que sucede ahora respecto a las bellag artes, sucedia no ha mucho con respecto a la Medicina. j Triste re- fiqnia del coloniaje ide la ignorancia, que la madre patria procuraba conservar en sus posesiones ainericanas! v creido que, a mas de ser en parle efecto, como acabamos de indicar; de la domi ando de encontrar las causas de esta preocupacion, hemos acivit espafiola, lo es tambien de la falta de gusto i dé que nuesira recie! e existencia como nacion ha hecho mirar los ta- lentos politicos i civiles cual si fueran los @ isos necesarios; porque; ena vez emancipades de la Espatia, nuestra constitucion como es- tado independiente era sin duda la necesidad mas premiosa. Mag porel curso natural de los acontecis ientos, a medida que avanzalsa- mos en nuestra vida politica, debiainos igaalinente ir sintiendo otras nuevas necesidades. La falta de gusto gue hemos notado como una de las causas de Ja preocupacion contra las bellas artes, lo es tambien i mui especial- mente del atraso de éstas. En efecto, teniendo tan pocos cuadros buenos como tenemos i tantos malos, no podia ménos de estragarse el gusto; de donde debin hacer por consecuencia que nadie debia de querer concluir estudios detenidos i profundos, persuadido de que no se sabria apreciar six meérito. A este respecto la escuela quitefia ha ocasionado gravisimos malés, La constante introduccion de sus innumerables cuadros debia pre. cisamente intiair entre nosotros: la vista cuotidiana de ellos aebia acabar por hacernos perder todo sentimiento e idea artistica, acos- tumbrado el ojo a mirar toda clase de defectos i ninguna belleza (1). (2} Per fortuna la _venida de Monvoisin i su permanencia entre nosotros, como tambien la creacion de la Academia dedibujo ide las clases de arquitectura i escultura, han estendido bastante las nociones del arte, tendiendo constantemen- te a reformar el gusto. Asi vemos en la actualidad que algunos aficionados tra- ton de formar galerias de pintura, que es de las bellas artes la mas cultivada entre nosotros, i que varios de ellos poseen algunos cuadros de mérito sobresa- liente, reputedos orijinales por nuestros mas intelijentes pintores. Notaremos, sin embarg », que en estas mismas galerias se echa de vera menude el airaso del gusto. Mui frecuente es enellas que las pinturas se hallen colocadas en un punto de vista falso respecto a la luz que les conviene; como tampoco es raro que sus duesios no sepan apreciarlas segun su mérito respectivo, haciéndolo a ces consistir en Ia aftigtiedad que suponen a sus cuadtos, Lo’ que esté pro- pando que, si se ha dado un Sran peso dei adelante, aun estamos tui léjos de poder considerarnos avanzad 278 ANALES.—ABRIL DE 1866. Del poco aprecio del arte i de Ia falta de gusto, nace como efecto immediate la carencia de estimulo. Ein verdad jcon qué objeto se habria de trabajar, sabiendo que {fa obra no habia de ser estimulada? 0a dedicarse a una profesion 1? Para {Quién seria el hombre que se atre que no diera gloria ni lucro, ni conquistara una posicion socia esto seria necesario estar demasindo enamorado de ella, ser mui fi- ldsofo i en estremo desinteresado. Por fin, ta falta de maestros ide modelos es otra de las casas que determinan el atraso artistico de Chile, como que sin ellos seria ne- cesario el jenio de Rafsel para sev un Delaroche, ni tanto acaso, un Monvoisin. Pero como Jo manifiesta don Miguel Luis Amundtegui, en el arti- ‘ido las bellas artes en Chile, publicé el culo que, sobre lo que han aifo 49 en la Revista de Santiago, no es alicion ni intelijencia de to que en nuestra sociedad se carece; Iéjos de eso, es indudable que el dia que tengamos una seccion de bellas artes bien organizada i convenientemente atendida por el Gobierno, tendremos tambien ar- tistas de mérito. ll. Estudindas ya las principales causas de nuestro poco adelantamien+ to artistico, vamos a dar una idea de lo que han sido las bellas artes en Chile hasta el aiio 49, en que se fundd ta Academia de dibujo. Emnpefiados los espaiicles por una mal entendida conveniencia en no permilir a Jos estranjeros la entrada en sus colonias, el jeneral atraso de estas se estendié tambien, cumo era natural, a las bellas aites. Los Padres de la Compaiiin de Jesus, sin embargo, hicieron algo por el adelanto de ellas; siendo digno de mencionarse el padre Carlos, que introdujo en Chile algunos artistas disfrazados de jesuita Las citcunstaiteias en que se hallaban las colonias dirijieron Ja atencion alos trabajos misticos, de manera que los ensayos de ar- quitectura consistieron en la cons uccion de altares; los de escultura, en imijenes de santos i vasos sagrados; i los de pintura en otras obras analogas. Entre los primeros no hai nada de notable: entre los segun- dos, nos ha quedado una estatua que re presenta a San Fran cisco Ja vier acabado de morir; trabajo de mucho mérito que existe al presente en ta Catedral, donde yaze algo deteriorado i casi en olvide (L). De 2) Ls postura de esta estatua es mui natural; la espresioa, mui bella i ade ARTES EN CHILE. 279 TAS BELLA pintura tampoco encontramos nada que merezca llamar la atencion, Taungue el seffor Amundtegui hace, en su articulo precitado, grandes ios del cuadro de Ia Cena que se halla en Ia sacristia de la Can le al 1a obra no lo merece, como que el inico mérito que Lene es el de la composicion, que tampoco es sobresaliente; siendo por lo de mas despreciable el colorido, mui mediocre ef dibujo, ninguna la perspectiva i falsas muchas sombras (1). Desde la guerra de la independencia hasta el affo 45, no hemos tenido maestros ni artistas, sino solo algunos pintores de aficion, euyos trabajos, si bien manifiestan una buena disposicion natural, estén mui Jéjos de ser buenos ta atencion ha sido A. Gana, que mandé a Europa el Gobi Entre estos aficionados, el que mas ha tlamado- mo de enténces por influencia de los seffores Viales i que mvarié a su regreso- en mayo de 45, a In edad de 23 afios. Macho elojia tambien sus tra- ro los hemos examinado i sentimos decir que no valen nada: sus dibujos del natur bajos el sefior Amundtegui; pe 1, hombres i mujeres desnudos, son diformes; sus bosquejos, maios, i su copia de la Virjen del Jardin es una cosa mui comun (2). fl. El afio 45 es para Chile una fecha mui importante en [a historia cuada: las estremidades i el ropaje bastante bien’ estudiados. De madera, como casi todas las imajenes de nuestros templos, esté encerrada en wna urna i cu- dierta de polvo sobre el altsr tle! Santo. No creemos, como dice el setior Amund‘egui, que sea obra de algun chileno, por- que en tal caso era natural que nos bubieran’quedado algunas otras obras de la misma mano, i todas las demas imajenes que conocemos son mui inferiores a ésta. Por lo que nos parece que talvez_habra sido trabajada por alguno de esos mismos actistas que introdujo el padre Carlos. (1) Consta que este euadro ha sido hecho en Santiago el aio de 1700, aunque no se sabe si por chileno 0 estranjero. Nos inclinamos a creer que su autor era estranjero, por ser anterior a la venida de los artistas que introdujeron los je- suitas. Uno de los defectos que nota el sefior Amundtegui es Ia seracjanza que hai entre dos de las caras de los apsstoles, pero en reatidad son tres las caras pa- recidas, cuales son Jas de los apéstoles que estan enfente del Cristo, todas de perfil. Hoi ademas otras tres eabezas que tambien se pavecen i deben ser tomadas de un mismo modelo: son las dei apdstol que esté ala izquierda del Cristo i lax de los dos que estan a su derecha -'espues de san Juan, que es acaso la peor figura, coisa es la mejor la de Jesus, que es tambien la menos orijinal. Todavia se parece tambien bastante uno al otro dos de Jos nifios servidores, Ademas de las lémparas que dice el seiior Amundtegui que nada alumbran, hai sobre la mesa dos velas que tumpoco producen efecto en las sombras. En la parte inferior del cuadro se ve un perro i un gato que participan de Ia cena: idea que, sobre ser tomada de un cuadro de Rafael, esté mui mal ejecutada, (2) Efectivamente el colorida de esta copia es mui desgraciado; tampoco hai en ela perspectiva; i entre las fsitas de dibujo que tiene, resaltan la mano dere- cha dv Jesus i el pié izquierdo de San Juan. En ef articulo ya ‘rss veces citado del seiior Amundtegui se encuentran mas detalles acerca del asunto de este segundo parrafo del nuestro. Vedse la Re- vista de Santiago, tom. [UI paj. 57. 230 ANALES.—ABRIL p= 1866. Ue las bellas artes, 0 mejor dicho, de a pintura. Llegd ese aifo a nuestro pais un pintor frances de reconocide mérito i el mas noble que haya estado entre nosotros, cuya venida ha tenido en nuestra sociedad algunos ventajosos resultados. Hablamos de M. Raimundo Monvoisin. Bra este artista director de Ja escuela francesa de pintura en Roma i entonces él, que con- cuando yacé el misino empleo en la de Paris taba con algun apoyo en la corte de Luis F oposicion a M. Vernet ia M. Angie, preten pe, se presenté en ndo la direccion de ella. Adjudizada la catedra a! primero de estos dos, i mui sentido M. Moivoisin de su derrota, que consideraba injusta, como afectado tambien en gran manera i en ese mismo tiempo por algunos sucesos de familia, se decidid a ir de Francia, El seffor don Francisco Jay' Rosales, nuestro actual mrinistro cerca de Napoleon, que ya en esa Gpoca Monvoisin que en Cl: podria ser el director teniendo wna buena renta, i que le seria facil hallaba en Paris, indicéd a le se trataba de formar un Museo, de que él aqui mismo encontrar compradores que le pagaran sus cuadros a ba: tante preci sin a Tales fueron los motives que indufieron a Monyo Chile, abandonando la Europa. nigrar a Mas, luego que ilegd aqui, vié que era mui poco lo que se le offe- cia como director dei Museo, ni encontyé entre nosotros el eniusiasmo que esperaba, Su venida, sin embargo, hizo mucho eco en nuestra sociedad, i despertando el gusto sus trabajos, tuvo numerosos admira- dores; los aficionados tratarun de culliva sus obras: i al su amistad ide adquitir unos jévenes empeifosos hbo que se pusieron a wa- bajar bajo su direccion. Pero Mony. sin embargo ser un bu in, sienlo una sta de inspiracion i talento, no podia profesor, porque carecia de los elementos hecesatios para formar buenos discipulo : no tenia modelos; le fulla- ban Jas antiguas estatuas griegas i romanas para iniciar a sus alum- nos en los secretos de Ja belleza. Monvoisin tenia solo algunas lite- grafias i gravados i talvez uno que otro busto, de donde pasaban’ sus diseipulos ala pintura i al natural sin haber siquieia conocido el Apolo de Belveder, ei Hércules Farnesio, la Venus, et Giadiador. Asi es qué Ia falta de dibujo es acaso el principal defecto en Los tra- bajos We tos javenes que estudiaron en su taller. Hasta el aiio 55 permanecid en Chile, guiiando de este tempo doz LAS BELLAS ARTES EN CHILE. 281 affos que estuvo en el Brasil i uno en el Peri. Ese affo volvid a Eia- ropa, donde vive todavia, de edad algo avanzada. . Monvoisin era sobre toil pintor de composicion; pero como cua- dros de esta clase apénas pueden i ménos poilian venderse enténces en Chile, se dediod a reiratista, que por cierto no era su fuerte. A mas de un grad mamero de retratos, sus cuadros mas notables que han quedado entre nosotros son: “La altima noche de los Jiroa- dinos,”? ©Aristomeno,” «Eloisa i Abelardo’? que dicen haber sido premiado en Buropa, “Alt-Paché,’* Bl rio Eseamandor,” «Ua pescador chileno”’ i nu gran cuadro de familia de la ‘fiora doiia Do- lores Larrain, Ejecuté tambien dos euadros nacionales, episodios de la historia de Elisa Bravo, aquella joven que cays en poder de los araucahos; pero creemos que no fueron hechos aqui ni esti en Chile. No concluiggmos este articulo sin decir algunas palabras acerca de sus diseipules, entre los que han sobres don Francisco Mandiola, Fl primero de estos, dnico que con propiedad puede eer llamado ido don Gregorio Torres i sudiscipulo, porqueel segunilo solo estuvo con él algunos meses para- aprender el uso dle los colores, no manifesté nunca sobresalir en nada, ni hizo jamas ainguna obra que pudiera llamar Ja atencion. Hemos visto una Magdalena suya detestable; i su cuadro de “La beneficen ein’ que compuso bajo la direvcion del seffor don Pedro Palazuelos ique es el ma s grande que trabajé, carece igualmente de mérito (1). Mui superior a Torres i de mucha mas aceptacion sus trabajos, como que mas de una vez han sido premiados ea varias de Ins espo- siciones que hemos tenido, es don Francisco Mandiola: i sin dada que habria sido un buen pintor, a haber tenide «a artestro competen- te q detencion su carrera. e io hubiera ditijido i fos modelos necesarios para concluir con El colorido es el principal mérito de sus cuadros. Conocemos algu- nas copias suyas bastante regulares, entre las que descualla una Venus: hahecho con felicidad varios retratos, i si sus Virjenes no nos agra- dan, no nos sucede otro tanto con sus mendigzos (2). El Chuchi-Bor- clan et este etadry soa los varios retra- la composicioa vs infernal; iel colorido, el dibujo, de tx composicion. gos del setior Mandiola, vamos referiv una enée- zcis no ha muchos alto modelo vivo de que servirse para un cuadro en » dia a wa viejo Hmosaer» euya nevada Les: eijidae ini vate a hablarlo i, despues 36 0) La tinico que puede tos que contiens. Por lo demas ila perspectiva, ao desmiente (2) A proposilo we tos mend dota sobre Uri heebo que le a: Buscando este eaballere alu que estaba empefado, enconirs besa barba le tam ta atencion 282 ANALES.—ABRIL DE 1866. gues gusté mucho el afio que to exhibié en la esposicion, como tan. Dien su «Mendigo esperando limosna,”” que juzga mos su mejor obra- El cuadro, de dos metros de alto sobre uno i medio de ancho, repre- senta de tamaiio natural a un p bre que estd de pié en un pasadizo, afirmado en su baston icon ef sombrero roto en Ta mane aguardando el contar a perro lanudo i ordinario se ha sentado a su derecha a esperarto: por iin, a fa izquierda de él, en ol fondo, se ve a una mu- jee tambien sentada en el suelo i que, apoyando Ja cabeza en una mano, par Ii ares inslican que en mejores nosna. La espresion noble 2 igualmente « del meadigo i sas fa ido avai dis su barba larga id as las cireun: cia tiempos ha: por fo demas, aidada, sa manta nes, sus alforjas j nes remeedados i sus Zapatos destruidos, es- desprovistas, sis panta! tan dando claros indicios de ual miseria. Mas, aunque el coajunto es agradable, facilmente se reconoce en ay + Mandiola un fondo Ilano ria pobreza. Por qué nos da el sel ide un color? Nu habria sido mejor un piso de marmol en lugar de lo i unas hermosas columnas en vez det fondo que tiene el cuadro? De este modo habria conseguido mas variedad en el todo i habria obtenide un buen efecto fa pods a del mendigo en oposi- cion con ia suntuosidad uel editicio. {Por qué no se ha aprovechado tampoco de algun efecto de luz? Habria sido esto una dificultad i una belieza mas. Nozamos tambien mucha falta de perspectivas de suerte quela pobre del cuadto en vez de verse un poco retirada hacia el fondo, no aparece si nocomo una mujer chica, Ahora en cuanto a los detalles nos hemos Ajado principalmente en que la mano iz- quierda dal mendigo uo esa bien dibujada i en que dentro de los zapatos parece no haber piés, En sua, el colorido del caadro nos agrada, no nos disgusta la composicion a pose :d2 hallarla un tanto pobre; mas no hai perspec- tiva ise notan algunos lunares en el dibujo, Se las posas esposiciones que hemos tenido dtimamente, pero nos atre- ¢ Mandiola no haya exhibido sus cuadros en imos que el vemos a esperar qus no hard io mismo en Ja que se dice que tendra earargerle qu2 al dia siguiente fuera,a verlo a su casa, se despidié de él nuigie iigunas monedas para que so arreglase. ‘En efecto, al nverida se abrij la puerta del taller del seiior la Hegada de su viejo, dando paso a_un ui Himpia i perfectamente afeitado. Doo 2 que pasaba; mas a las primeras palabras fo-barba del dia'anterior que ibe a verlo des- LAS BELLAS ARTES EN CHILE, 283 jas del dieziocho de setiembre. Sabido es lo lugar este aifo eit fos mucho que influyen las esposiciones en ef desarrollo de In aficion i del gusto, al mismo tiempo que son ua poderoso estimulo para los artistas: i pocas veces talvez se ha presentado una mejor oportunidad alguna entre nosotros, aliora que tenemos ett la para que tenga lu capital varies pintores estranjeros i que no nos encontramos en una época de musha ajitacion. Ojala que el Gobierno secunde tas miras de los aficionados! Iv. Ya hemos hablado de Ias bellas artes hasta el afio de 1849. Los adelantos que ha habido en Chile de entonces hasta el {presente, som Ja materia de que vamos a‘ocuparnos. ‘Antes de la época a que acabamos de referirnos, no se habian res- tablecido en nuestro pais cursos académicos de ninguna de las bellas artes, aunque si, clases de dibujo, donde se estudiaba éste mas bien por adorno que para hacerlo una profesion. La fandacion de la Aca- demia de pintura es, pues, un gran paso hacia adelante. M. Alejando Cicarelli, director de ella, nacid en Népoles, donde a. hizo sus primerosestudios, pasando mas tarde a coneluirlos en R: encalidad de pensionista de aquel reino. Kl afio de 1843, recien ob- tenidosu titulo de maestro honorario, se vino a América como artis- ta de la Emperairiz del Brasil i con el objeto de entablar algunas re- formas en la Academia de bellas artes de Rio Janeiro, que estuvo pre- sidiendo hasta el afio 48. Pensando emténces Vicarelli abandonar la Corte, acepté las indicaciones del cdnsul chileno don Carlos de Hochkofler, que le proponia venirse a Chile a fundar una Academia; jen setiembre de ese mismo afio, liegd a Valparaiso, La animacion que observaba en los dias del aniversario de nuestra independencia, le hizo concebir grandes esperanzas del pais para el desarrollo de su arte, ialgunos meses despues, oftecid al Gobierno proyecto de reglamento para Ja Academia de pintura que debia abrir se. Aceptado el proyecto, se decreté su observancia al mismo tiempo que la creacion de la Academia, el 4 de enero de 1849, bajo el Mi- nisterio del sefior Sanfuentes. Mucho fué el entusiasmo que caus6 en Santiago la inauguracion dela Academia, i es mui digna de recordarse la conducta verdadera- mente jenerosa de algunos cabalieros, como don J don Francisco Mandiolt, que estuvieron asi sé Gandarillas i vendo a ella durante al- r ‘2B ANALES.—ABRIL DE 1866, gun tiempo, a fin de animar con su ejemplo alos jéveties aficionados. Una vez establec Ja la Academia de pintura, se pensd mas tarde en crear tambien una claze de Arquitectura, que fué establecida el mismo aiio de 49 bajo la direccion del artista frances M. Claudio Brunet de Baines. A esta creacion sucedié en L854 la de Ja clase de Oramentacion, que ha sido wssformada por un decreto posterior en clase de Escultu- 32, permaneciendo siempre a su cabeza M. Ernesto Frangois. ndependientes i separadas uma de ota, sin un local fijo permane- cieron estasties clases hasia ef aio 58, en ef cual fueron reunidas bajo cititulo de Seccion de bellas artes i agregadas ala Delegacion uni- versitaria; sieado colocadas bajo fa depenceucia del Delegato i en- cargada Ia promocien de su adelantamiento al Decano de Humanida- ies. Este medida, que algunos consideran mui proveclosa, es, & Tuestro jul ip, subre manera absurda. No se puede dudar quela reunion de las tres clases es mui conye- niente, i sobre esio no tennemos nada que decir; mas no sucede otro tanto respecto aJa atoridad bajo euya proteccion se colocan, porqne niento jeémo podidn un Delegado i un Deeano que no tienen conoci Gel arte, velar debidamente cobs su ensefianza i promover sus ade- Tantes? Lo que resulta le aqut, es que el Gobierno tiene que descan- sur plenamente en la buena fé i suficiencia de los maestros, i que éstos pueden cen suina facilidad engafartos, Ahora bien: en un pais como Chile, no es facil conseguir bucnes ar res; i supo- lo el caso nada raro de que dos de estos maestros fueran medio- ion exes i solo uno competente, en el interes individual de los primeros esturia, orpecer fa marcha Cel segundo, para que su propia super- dad ne Hegase a quedsr en descubierto, ;1 qué harian el Dele- solicilad: gado i el Becano al 0 de diverso modo por ellos? Lo nas natutal seria que cedicran a la influencia de los dos que estuvie- ran unides, ton ado por rivalidad la conducta del otro; ihe aqui al Gebieno entsiamente Lunlado. Ni los tes ses C eshajola Girecelon Ce oo Huimanidades, sno ajo fi ireccion de un artista que entienda un los ues ramesi gue pueda juzgar por eLimiano del réjimen de clins, a fin de yoverservir al Gobierno de ojo esperimen'ado, no solo sino tancbien en el exémen de planes j or logue eles r i Be cite modo. nes parece mui prefe- TAS BELLAS AR rible la°separacion e independencia en que estuvieron al principio las clases de que nos ocupamos. vy. dacion i det plan jeneral de tas wes Ya que hemos trataco de ia fu clases de nuestia Seccion de bellas artes; pasamos ahora a examiner con alguna mas detencion el réjimen particular de cada uaa de elas, Principiarémos por la de pintura, por ser fa mas antigaa, Mui bueno es su ceglamento; mui bien consultadas se hallan en el as necesidades de una verdadera Academia, pero, desgracialanente, no todas sus (isposiciones se cumplen; algunas de éstas, por haber sidu derogadas por un decreto posterior; otras, por desestido del Gi- biernosi otras en fin, por descuido del profesor. Desde luego observamos que la Academia no Hena ea gran parte sn objeto. Dispone el primer capitulo del reglamento que se sumir stre en ella Ia ensefianza elemental del dibujo, para servir de intcoducion a todos los demas ramos de artes que suponen su conovimiento circuns: tancin que no ¢e Ileva a efecto, ignoramos por qué motivo, auaque seta, segun creemos, porque los profesores de esos otros ramos ile ar- to, no fo exijen asi de sus alamnos. Mas el principal objeto de la Academia es, como continaa el capi- tulo, un curso completo de pincura histdriea; i en cuaito a esto, nota- remes que, si por lo que respects al dibujo se cumplen fas disposicio- nes del reglamento, no sucede lo mismo con el curso de pintura, porque no hai los medios necesarios para hacerlo. Si une: 30 cons- tante de madelo ¥ na gale : a de ropa de diversas épocas me- dinnamente organizada i sin algsnos maniquies, wanca se podra ha- cer ni siquiera un regular curso de ropaje i composivion. (L) Del modo como estamos, solo podrdn formarse en la clase algu— nos retratistas; ide ninguna manera un solo pintor historico, que es el fin primordial de fa Academ d Mal entendida economia, pero, por racia, no raras veces practicada en Chile. Eleapitulo IL, De dos altunnos, esta derogado por el decreto de 30 de agosta de 1858. Disponia este capitulo que hubiera eu la clase alumnos de némero i supernumerarios; siendo los primeros aquell! que manifestaran_ mejores aptitudes para el arte i que, pensanio ha- 1) Elsolo maniqui que posce actuals ‘las ropas no soa sua f con mucho, a Ilenar las exij ente Ia Aeadern neias. NALES.—ADRIL DE ISE6. obtavieren nombramiento del Gobierno; i los cer deella sw profesion segundos, los demas qu2 no Henaran estas condiciones, quienes, a diferencia de Ios de niimero, no tendrian derecho a entra en los con- cursos nia I: ‘onan al establecimiento s prerogaiivas gue se proporci para sus Ahora bien director de la Academia en el caso de desatenderto, si quiere confor- uprimiendo el decreto de 5S, esta distincion pone al marse al doble objeto con que fuécreada Ia clase; o de desatender es- te doble objetc, si se ha de atenera lo que él dispone; porque es indu- able que no es el mismo el camino que deben seguirlos que estudian Ja pintura como profesion, que el que siguen aquellos que solo de- sean adquisit algunos conocimientos de dibujo para dedicarse a otro aite o por mero adoro. E| primer articulo del capitulo iL esta, como todo ef capitulo ante- rior, derogado por el mismo decreto, que ha suprimido las trabas que el reglaimento imponia para incorporarse a la Academia, como son la dela edad, la preseniacion de un certificado de buena conducta i la aprobacion det Ministerio. Elart.7.°, segundo del capitulo TIL, relative a ta asistencia, esté en desuso, del mismo modo que los demas atticulos del mismo capi- tulo referentes a los conovimientos de los alumaos. Erxijen estos arti- culosel estudio de ta Gramatica castellana, Jeometria, Historia, Mi- tolojia, Literatura, Filosofia i Anatomia practi ca; todos elfos, no diré de grande imporiancia, sino de absoluta necesidacl para un artista. Para entrar aia composicion, se requieren algunos conocimientos de arquitectura ide pai Estrafinnos que no se exija el frances, en cuyo idioma estén eseri- tas casi todas las obras de bellas artes que se pueden encontrar entre nosotros, i cuyo conocimiento es casi indispensable a cualquiera que pretenda viajar por Buropa, a donde deben los alusanos mas sobresa- Tientes de Ia Academia ir a Ginalizar sus estudios. Es mui de desear que el maestro tome mas cuidado por que se cumplan estas disposiciones referentes a los estudios, mediante los cuales se prepara el alumnoa la composicion de orijinales por ef des- arrollo de su intelijencia. Tocante a tas horas de estudio i ala inspeccion de un Bedel, nada se hareformado, i no ha faltado quiet critique el no cumplirse en la clase estas disposiciones en lo relative a las asistencias: pero Ja pintura es un arte de ancor,en Ia que no se pucde obligar a los alumnos a una LLAS ARTES EN CHILE. 287 Las Bi asistencia. constante, sino que, por el contrario, conviene a este respec. to dejartes Ia mayor libertad. tativo a los premioz, que es de lo que trata el dltimo capi- En lorelativoa pi q : P tulo del regiamento, invvoduo una deszraciada innovacion el decret nilns a fos alum nos premiados, en lugarde los de 58, acordando med Esto, sin em- auxilios pecuniarios que antes de tal afio se tes dal con la disposicion del art. 7.2 del citn- contrabalancears: bargo, qu do decreto, que confiere el derecho a una pension mensual de diez ns pesos, para mientras permrnezcan en ia ciase con la misma eontraceion japrovechamiento, a tos alumnos que hubieren obtenido el primer premio por tres veces consecutives. Lo que tiene de desfavorable esta ner entendide medida, a primera vista mui » 88 que, habiéndos en la clase de dibujo por primer premio el dle estéiua entera, los con- i oi estampas no tienen ningun aasili -cursantes en busios del los mismos que copian esidtuas, Hegan a consegair los tres premios consecutivos, que es dificil, no gozan del beneficio mas que por un breve espacio de tiempo, puesto que estén mui prdximos a concluir su carrera. Por lo demas, se habla tambien en el rogiqmento ds un concurso para mandar a Roma, a concluir sus estntivs i perfeccionarse, a los alumnos mas aprovechados del establecimiento, euyo concurso se es- tableceré a su tiempo. Estableciése efectivamente un concurso con este objeto el afio 62, pero la comision encargaila de examina los trabajos, parece qite no los encontré tales, que mereciera ser enviadoa Roma ningwno de los consursantes (1). En vano fueron los hizo presenteque los cuadros d ierzos de Vieareili, ien vano J concurso eran los primeros orijiag les de sus autores i las mil cireuastancias mas que habia para que pudieran disculparse sus imperfecvionas, Todo fué indtil;i aun no ha Hegado, ajuicio del Gobierno, el dia feliz de mandar un pensionisia a Talia: i el mas aventajado de los dos conzursantes de 62, a muerto hace poco, lentamente consumido por el pesar de ver frustradas sus esperanzas, mientras el otro apéuas tiene trabajos en que ejercitar wel para protejerlo, se (2); i el Gobierno, que nunca se acordé de tampoco se acuerda de éste: i llega entre tanto el caso de mombrar un Q) En Ja Academia estén todavia tos dos cuadros de consurso; Le muerte us Abel ejecutado por Luciano Laines, i La muerte de Goliat por Manuel Mena (2) El primero de estos dos, sobresalia por el dibujo; el segundo, ha sido siem: pre mefor Csonamista i bastante superior ea el eoloride. Algnos de sus retratos han llamado la atencion, como tambien (los Virjenes orijinalvs, en cuyos cusdres ha descollado notablemente en el ropaje. 283, ANALES.—ABRIL DE 1866. profesor de dibujo para algun esiablecimiento del Hstado, ison prefe- ridos los estranjeros, i estranjeros niucho menos competentes que ellos. te atio, Esperamos tener el gusto de ver, en Ia esposion que habra algunos irabajos de un nuevo disciputo de la Academia, Miguel Cam- pos; el mas aventajado en cl dibujo que haya salido de ella hasta ahorai elque ha hecho tambien un curso mas completo, Hemns oi- do. hablara algunos estranjeros que no se 06} an mejor en las Escue- Jas europeas dle pintura fas estdiuas antiguas de Grecia i Roma que como lo halecho Campos en nuestra clase. Nosotros mismos habia+ mos tenido ya el placer de reconocerto, comparando sus dibitjos con otros de ignal naturatez trabajades en Italia i Prancia; i no duda- mos de que ef Gobierno, apreciando debidamente sus talentos, abrir dentro de poco un nuevo concurso para Roma. VIL Siguiendo el rden cronoldjico de su fundacion, pasamosa ocuper- nos aliora de Ja clase de arquitectura. Esta, como dijimos en el art 4.2, fué fundada el aiio 49 (1) i pues- sta enidnces bajo la direceion de M. de Baines: pero, aunque este era un arquitecio recomendable, no manifesté ser igualmente un buen profesor. Para dar una idea de las faltas de réjimen que habia en su clase, nos bastard consignar aqui un hecho eutioso, por cierto, i digno de recordarse, cual es que en los primeros afios de su fundacion no se enseffaban en ella los cinco érdenes de arquitectura, i que fué preciso obligar a M. de Baines a que lo hiiciera, porque él no tenia semejante intencion. La clase, sin embargo, fué adelantando algo hasta que, muerto M. de Baines a principios del aifo 56, fué contratade en Francia M. Lu- ciano Henault para venir a ocupar su puesto, en el que permanece desde el afio 57. Defectuoso nos parece el plan de estudios de esta clase, como tam- nel todo que en ella se sigue. En primer {ugar, la duracion de dos afios i medio que se designa al curso es por si solo un defecto gravisino. En las Academias euro- peas de bellas artes jamas se designa la duracion de! curso, porque cada alumno tiene el sayo aparte que puede ser mas _o menos largo segun una multitud de circunstancias, tales como las aptitudes del {1) Por deereto del 17 de noviembre; mas no principié a funcionar hasta el afio 59. LAS BELLAS ARTES EN CHILE. Uiscipulo, su diferente contraccion, las tendencias de su talento, ete. No sucede con las clases de dellas artes fo que con las de abogacia, na_esplicacion ion i una mi por ejemplo, en que hai uns misma lee para todos los alumnos i en que todos tienen «ue seguir por igual ca- mino. Precisamente en lo que consiste In exelencia de wn profesor de pellasartés es en retardar o abreviar el curso de cada disviputo segun sus respectivas aptiqades, i en dirijirto segun Ia inclinacion particular de sus talentos i sus ideas de belleza. Ouro de los defectos del mismo reglamento consiste en la designa- cion de los ramos prepacatorios que exije para hacer el curso. A. este respecto citaremos una impottante variacion que, en ua proyecto de reglamento, presentado al sefior Domeyko, indicaba un antiguo d pulo de la clase (1), la de suprimir fos ramos de Fisica i Quimica, poniendo en su lugar la Mecdnica ila Topografia, Es evidente la conveniencia de este cefocma, sobre todo en stt segunda parte, tanto porque las esplicaciones de fa Quimicao la Arquitectura se estudian en la construccion, cuanto porque un Arquitecto necesita saber levan- tar un plano tan bien como un Agrimensor, a fin de hacer conforms a este plano su distribucion arquitectural. Un affo de practica a la conclusion de Ja carrera, seria tambiett una medida mui oportana para el perfeccionamiento de los esudi As convendria mucho que el dltimo afio de su aprendizaje, asistieran fosaluinnos una o dos veces por semana, al menos, a las obras tanto dereparacion como de construccion que tuviere el maestro w otros at- quitectos recibidos; que se les mandara tasar edificios, levantar presu- puestos, ete Ahora, en cuanto al mét e en Ia clase, es sin dada do que se sigy de fa composivion una falta inexcusable In de principiar ta enseiianz el primer aio de los estudios, Sabido es, i esto no se estiende solo a lasbellas artes, que no se puede componersin haber estustiado dates lo suficiente para prepararsei sin tener algunos conocimizatos sélidas delramo de que se trate. Mal podria un estuiiante de leyes defender a hacer una bella compusicion; i un pleito, ni un alumno de reté pulo de arquitectura tampoco puede hacer del mismo modo un dis un (abajo orijinal sin encontrarse ya algo adelantado en su carrera, Fuera de (odo esto, poco se avanzard coa que el plan de estudios se halle mas 0 menos bien distribuido, si la profesion carece de atrac- je reglamento para un Liceo de Arquitectura, (1), Ricardo{Browm,—Proyeet en Valparaiso. 7 37 290 ANALES.~-ABRIL DE 1966, tivo. Es necesario, con este objeto, fijar sus atribuciones especiales a fa profesion de arquitecto i protejerta em to posible. Un medio mut adecuado seria el de encargar a los arquitectos la tasacion de edificios mandada ejecutar por sentencia jud cial, pore ellos, mejor que los injenieros jedgrafos o cualesyniesa otr weciar el valor del ado, la calidad de los materiales, el consteacefan i el trabajo artisticn, : podran a, edificio segua su stema de No concluiremos este parrafo sin mencionar al jovenes que mas se han distinguido en Ia clase. Di Fermin Vivaceta casa del seflor don Francisco Videla, la del seifor don José Joaquin Perez, i la iglesia do. De M. Henault es discipulo Ricardo Browm que, con Eledziro Navarrete, mugrio no ipulo de M. de Baines es don cuyos principales trabajos son del Carmen alto, que esid todavia conclay ha mucho tiempo, ban sido fos primeros i hasta ahora los Gnicos ar- quitectos chilenos que han lfegado a recibiree en fa clase. Bonwm desempefia actualmente la clase de arqutitectura i construccion en la Academia militar. Vil. ‘Vamos por tiltimo a tratar de Ia clase de scultura, la mas reviente porsu fundacion, de tas tres que componen la Szecion de bettas artes, Esta clase no fué en su principio sino de Ornamentacion i, destina- da a servir alos artesanos en varios olicios, no figura en Ja categoria de clase de Bsculturn propiamente dicha, hasta el aii 58, épaca en i 1 8p que pasé a ccupar un local en of edificio de {a Universidad, siendo iniciadas ese mismo afio las academias del natural. No tiene In clase de Fascultura ua reglamento especial; pero, segun el decreto det 35, deben ensefiarse en ella la ornamentacion, et di- bujo natural ila estatuaria, Un mal nos parece que el Dibujo natural sea uno de los ramos que comprenda, j estyasiamos tanto mas esta medida que encasga la ense- Hanza del dibujo a quien no es profesor de él, cuanto que, segun el reglamentode {a Academia de pintura, en ela es donde deben hacerse tales estudios de Dibujo, como preparatorios para el aprendizaje de otro arte que los supone. De aqui resulta une mal gravisimo, que es el de acostumbrasse los alumnos a la inexactiud en sus trabajos; perjuicio tanto mas sensible sise atiendea la superficialidad i poca detencion con que se hacen LAS B estos estadios ot el actual réjimen de ta clase. Siempre nos ha pare- cido mui estrafia semejante disposicion, sobre torlo cuando atendemos aque el dibujo es la base de las tes bellas artes de que nos ocupa- imp mos} i, siende débil In ba ible es que pueda ser sdlido el edi- ficio que en elia de Cuio tle los defectos de In clase de Fscultura, es el de hacerse el cu so mui precipitadainente; de tal suerte, que un alumno de este aiio, por ejempio, ya al igniente pasa a trabajar estatwas ia copiar el mo- delo vivo. El resultado indispensable de semejante marcha es que, no estando biew aprendido lo que se deja atras, las obras posteriores tam- oco pueden tener un gran mériio, desde que noha habido la prepa- § I : racion necesaria, No puede corer wa niifo que a pénas prineipia a andar, isi lo intenta precisamente ha de caer. Por fin, el poco putimento de los trabajos, es cambiem ano de tos raves malesque existen en el actual réjimen de Ja clase. Sabico es jueen los deialles es none mas se deja conocet el buen artista: no 9 ai cuesta gran ci alaverdail, hacer un bostejo; et mérito i Ia dificul- tad esidn en coneluir Ia bea, enivando de ue ta beliez ste modo en ef santuario Eneste panto, como en les que anteriormente hemos anotado, se deja ver cier'a precipitacion en los estudios de escultura, que es sin duda harto sen: je: porque loque nos importa no es tener Inego muchos escultores, sino tener alzunos buenos. Los discipafos que mas fian sabresatide basta ahora en ta clase sort: Nicanor Piaza, Agustia Depasier i Mizuel Blanco. Todos ellos han ejecutado alunas estatuas i bajos relieves que han tenido una regu lar aceplacion. Plaza se enenentra ahora en Europa, a donde lo ha mandado el Gobierno con una pension de cit uienta pesos mensuales; cantidad corta en atenzi en el curso de s 1a tos gastos que tiene que cubrie cn artista S abajos, pero que send un poderoso anxilio para nuestro joven compatriota, durante su permanencia en el es- tranjero. Uitimamente ha mandado de Paris fa fotografia de un bajo relieve, que ha ejecutade al representando el rapto de las Sabinas. Aunque amos wn hemos oido a M. Frangois encarever esta obra, no le encont mérito parti cular, pues, amas de varios defectos de dibujo, tienen el mui grave de ser la compos jon demasiado fria para el elevado asun- to que representa. De nada sirve el arte sin ta Haima de la inspiracion que le da vida, pero tampeco prende esta llama siel ausilio det arte, E's necesario, 192 ANAL! pues, que nuestros jovenes artistas no descuiden los adelantos de la —apain dé 1866. intelijencia al proseguic su hermosa carrera. ee BIBLIOTECA NACIONAL.—Su movimiento en el mes de abril de 3366. RAZON, ror SRvEN atravéricy, 1.9 pe Los pIARios 1 PERISDICOS, 1 2.9 DE LAS OBRAS, OPGSCULOS, FOLLETOS 1 HOJAS SUBLTAS, QUE, EN CUM- PLIMIENTO DE LA LEL DE IMPRENTA 1OTRAS DISPOSICIONES SUPREMAS, HAN S(00 ENTREGADAS AL ESTAMLECIMIENTO DURANTE ESTE TIES po; 3.2 DELO QUE soLO sé HA ENTREGADO UN EJEMPLAR, O ENTRE- ckbose Incomptero; 1” De Lo Qua NO SEMA ENTREGADO EIEDIPLAR ALGUNO, NO OUSTANTE LA PUBLICACION HECHA; 52 pe LO QUE SE HA ENTREGADO TRES ESEMPLARES PARS OBTENER PAIVILESIO DE PROPIE- DAD LITERARIA; 62 DE LO QUE SE HA ADQLILIOU POR OBsEQLIO; 7.2 DE 40 QUE SERA ADQUIRIOO POR COMPRA, S! DE LAS OBRAS QUE HAN St DO LEIDAS POR LOS CONCURRENTES A LOS DOS DEPARTAMENTOS DE LA AIDLIOTECA, LA NACIONAL PROPIAWENTE MICHA t LA EGANA; 19.8 DEL ERO DE VOLOMENES QUE SE HA ENCUADERNADO.. 1 Diarios i periddicos. Braucano, Santiago, imprenta Nacional; desde el nim, 2,933 hasta et 2,937. Boletin de noticias, Talca, imprenta de la Opinion; ta el 99. Boletin de noticias de la guerra de Espata en el Pacifico, Santiago, im- prenta Nacional; los nams.4 id. desde el num. 96 hi Correo de la Serena, Serena, impronts del Comercio desde el nim, 733 hasta el 759. Gondor, Andes, imprenta del Coniory d ade el nam. L hasta el 4. Ferrocarril, Santiago, imprenta del Ferrocarril; desde el nam. 3,197 hasta el 3,222. Gaceta de los Tribunales, Saatiago, imprenta Chilena; desde el nim. 1,238 hasta el 1,241. Independiente, Santiago, imprenta del Independiente; desde el nti hasta el 678. |. 652 Tris, Parral, imprenta del Iris; desde el nti. 29. Mercurio, Valparaiso, imprenta del Mercurio; desde el nam. 11,620 hasta 111,533. Patria, Valparaiso, imprenta de la Patria; desde el nim. 821 hasta el $45, Porvenir, San Fernando, imprenta de San Fernando; desde el nim. 323 hasta el 127.

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