Ya haba transcurrido un trimestre, por el mes de mayo aproximadamente, cuando llego a
la direccin de la escuela Francisca, la maestra de un aula, llevando de la mano (casi jalando) a Pablo, un pequeo de siete aos, de carita redondeada, pero con expresin triste y angustiada. La maestra se vea molesta. Al observarlos a los dos, trate de comprender lo que pasaba. La maestra explic: Pablo no hacia la tarea, jugaba durante toda la clase y para el colmo, no saba casi nada de lo que la maestra enseaba en clase. Despus de conversar con la maestra decid visitar el aula de Francisca. Mi principal propsito fue de tratar de ayudar a la maestra con algunas ideas para apoyar a Pablo en el aprendizaje de la lectura y escritura. En la clase de Francisca, pude ver que, algunos nios trabajaban mientras otros jugaban y conversaban y conversaban. Pude observar que una nia de aproximadamente 10 aos, escriba, sin instrucciones de la maestra, un cuento sobre animales, mientras la mayora de sus compaeros copiaba de la pizarra, si mucha precisin, la letra de una cancin para la madre. Uno de los nios no poda copiar y estaba distrado masticando chicle. Algunos de los nios realizaban la misma actividad pero casi dibujaban las letras; dos de los nios ya haban terminado de copiar y dibujan, decorando la cancin. Se poda advertir que dos nios no podan escribir. Durante la maana, la maestra estuvo revisando de manera muy rpida el trabajo de los diferentes grupos. No poda disimular su malestar con los nios que no trabajan y trataba de explicar que estos nios no reciban apoyo de la familia y que faltaba permanentemente a clases.