Está en la página 1de 3
166. SEMEJANZA A DIOS Y DIVINIZACION EN EL CORPUS DIONYSIACUM que su maestro, Porfirio explica la estructura de la realidad segin cuatro rincipios: el Uno o Dios, el Intelecto, el Alma y la Materia. Las leyes que regulan la procesién de las hipstasis y la conversién de lo generado hacia Jo que le es superior, son las mismas que en Plotino. La principal diferencia consiste, pues, en el modo de entender las relaciones entre el Uno y el Ser. Mientras para Plotino el Uno no piensa, debido a su absoluta trascendencia y simplicidad, Porfirio -siguiendo la ensefianza aristotélica que ve en Dios un Pensamiento que se piensa a sf mismo-, sostiene que se puede hablar de un Pensamiento absoluto del Uno que permanece en estado de quietud: Dios que se piensa a S{ mismo en absoluta simplicidad. La consecuencia de esta sfntesis entre la doctrina plat6nica y aristotélica, seré la multiplicacién de las tres hipéstasis plotinianas en tres «momentos» cada una. Mientras Plotino distingufa simplemente tres hipdstasis en el mundo inteligible (Uno, Intelecto y Alma), Porfirio va a distinguir los actos de permanencia, procesién y conversién en el Uno que se piensa a Sf mismo, y va a identificar esos tres actos con ser, vida y ensamiento, respectivamente. Asi, Porfirio entiende el Ser como permanencia del Uno en Si mismo, la Vida como la procesién del Uno fuera de Sf y el Pensamiento como la conversién 0 retorno del Uno en Si’. Porfirio, ademés, manifiesta abiertamente su admiracién por, los Ordculos caldaicos, mientras que Plotino no les atribuia importancia’. En Wen Ondeules so Mable do wa Tend maprema. ericalada on avré ovvaprav 168 SEMEJANZA A DIOS Y DIVINIZACION EN EL CORPUS DIONYSIACUM ‘Al igual que en Plotino, 1a concepcién de Dios como Uno Ileva a la negacin en El de cualquier cualidad o atributo que pueda denotar alteridad. La relacién de semejanza nunca es reciproca: son los seres inferiores a Dios los que se esfuerzan por ser semejantes a El. Para explicarlo, Porfirio propone dos ejemplos: el sol en su salida y ocaso, y el barco que se aleja de la costa. En ambos casos, el observador puede llegar a pensar que sea el sol el que pierde luz, 0 que sea la costa la que se mueve'”, Asi también, las almas que desean asemejarse a Dios se imaginan que su relacién con | El es recfproca, mientras que Dios permanece siempre idéntico a S{ mismo”. Son las almas las que buscan asemejarse a El; Dios, por ser el Uno en quien no hay alteridad, ni se asemeja ni puede asemejarse a lo que lees inferior. La negacién de toda alteridad en Dios y la afirmacién absoluta de su trascendencia” nos obligan a corregir nuestro conocimiento de Dios. En relacién con El, nosotros y los demés seres, somos nada, «por 50, no Megamos a conocerle, pues, lo semejante conoce lo semejanten (5% nev totw névea ca dda npdc airdv, ai 88 yvsoers 1 Spot aipovor +t dpotov)”. Para alcanzar Su conocimiento debemos apartarnos de todo lo que es ajeno a Dios, abandonarnos incluso a nosotros mismos, y sin pensar nada, acercamnos a El. «Este es el conocimiento de Dios, no el de tun sujeto que conoce los objetos comunes, sino. un conocimiento que coincide consigo mismo» (yv@org éotiv ob Gg YLyvGoKoVtog Té yvword, &4' aitd tod[to yv@arc o}doa)”. Si es asi, los que en el conocimiento de Dios, dicen més bien lo que El no es, son mejores que los que dicen lo que El es. La teologia apofitica es superior a la cataftica. Para Porfirio, como para todo el pensamiento griego, el principo 0 Suorov 7% dof determina el modo de conocimiento, también respecto al Uno. onetbovra tac nepi aire oxéoers avtiorpébery Kah xpis éxcivov oferat: in Prm, 332-44; eft. también Sent. 1245. "lr in Pram. 313-32. '° fr. P, HADOT, Comentario al «Parmeniden, 122, .25, 2 In questa prospettva la trascendenca divina consisteinfati nelt essere libera da ‘ogni forma, da ogni ordine, da ogni finalita particolare: P. HADOT, Commento al «Parmenide di Patone, 34. in Pam. 4,23-26. 2 Ci. in Pr. 6,26-31; 10,611; 10,14-16.20-32. in Pre. $,32-34 * Cit. in Pr. 9,26-30,

También podría gustarte